Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo Unico

El día había comenzado y como siempre tu estabas ahí.

Siempre estabas en el medio de aquel gran salón, como siempre, estabas sentado en tu escritorio con una gran pila de papeles.

- Ya no más.. -Te quejaste como todos los días, no te gustaba hacer aquel papeleo que siempre estaba presente en todo momento, desde que tomaste el puesto de tu abuelo.

- Ya no quiero hacer más papeleo.. -Volviste a quejarte, apoyándote en tu asiento, se notaba que estabas muy cansado, pero esa es ahora una de tus responsabilidades.

- Mi lord, casi me olvidó de traerle estos papeles.. -Dije entrando a aquella sala con una gran pila de papeles.

Cuando apoye aquella torre de papeles pude darme cuenta que eran más de los que estaban en el escritorio, pues la pila que había puesto te había tapado, impidiendo que te vea.

- Zazel ~ ya no más... Estoy muy cansado, ¿Puedo tomar un descanso? -Me preguntaste apoyando tu frente sobre uno de los papeles que estabas leyendo.

Lamentaba mucho tener que decirte que no podías tomar descanso alguno.

- No, aún faltan varios papeles.. -Te dije al final, apartandome un poco del escritorio.

- Zazel~ por favor... Todos los días hago lo mismo, siempre me levanto y casi lo primero que hago es hacer el papeleo.. -Dijiste con un puchero.

Te veías muy tierno, demasiado, eso sumado a qué casi no habías cambiado nada de cuando te conocí por primera vez, te convertían ante mis ojos en la criatura más tierna que había visto.

- Lo siento mucho Lord Enma, pero no puede escapar de sus obligaciones. -Te dije de forma sería, intentando ocultar mi preocupación por ti.

Quería decirte que podías tomarte un descanso, pero no podía, todos esos papeles y escritos eran tus responsabilidades y debía enseñarte que debías afrontarlas y no huir de ellos.

Cuando escuchaste mi respuesta pude notar que en tu rostro aquella sonrisa, que siempre mostrabas, se había borrado.

No entiendo mucho el por qué te entristeces, si al final del día te escapas del palacio para ir a divertirte al mundo humano y si no haces eso te la pasas jugando cuando supuestamente no te estoy observando.

- Mi señor, si se concentra podrá terminar con todos los papeles.. -Te dije intentando subirte los ánimos.

Por la expresión de tu rostro y esa gran sonrisa que me mostraste pude darme cuenta que creías en mis palabras. Con mucho ánimo empezaste a firmar aquellos papeles.

Y así continuo el día, como siempre. Tu estabas al borde de tirar todos los papeles de la mesa y escapar al mundo humano para deshacerte de tus responsabilidades por un rato.

Ya en la noche te diste cuenta de que no habías terminado todos los papeles, por lo que mañana tendrías aún más trabajo.

- No puedo más!! -Gritaste tirándote al respaldo de tu asiento.

Estabas más que agotado y mirabas aquella fila de papeles que te separaba de tu libertad ese día. Sigo pensando en que eres algo dramático con el trabajo, estoy más que seguro que en la noche te escaparas como siempre e irás a algún lugar para divertirte o sino vas a ir a ver a aquel humano, del cual te hiciste amigo, Nathan Adams.

La cena transcurrió normal y cuando terminaste de comer, fuiste directamente a tu habitación a dormir, por lo visto querías terminar el papeleo mañana mismo para poder descansar y divertirte al máximo, pues se acercaba un día muy especial para ti y querías hacer algo nuevo, aunque fuese la primera vez que lo celebraces.

Al día siguiente, me desperté temprano para llevar todos los papeles a tu escritorio, yo también quería celebrar esa festividad que los humanos llamaban "Navidad", tenía algo de curiosidad aunque no lo admitiera.

Con los papeles en mano, me dirigí a la sala más grande, cuando entre pude verte ahí.

Estabas en tu escritorio durmiendo, por lo que supuse que te habías levantando temprano para terminar el papeleo del día anterior y poder terminar el de hoy, aunque por lo visto te quedaste dormido y no pudiste acabar el del día anterior.

Me acerque a ti con mucho cuidado y puse la pila de papeles a un costado, para que no los tiraces cuando te levantases.

Te moviste un poco en el escritorio así que te traje una manta, no quería que te enfermaras y tuvieras un impedimento más que te impidiese celebrar la navidad.

Poco a poco fui llevando los papeles que debías hacer ese día, uno minutos después de haber llevado la pila número cuatro te levantaste y al ver lo que aún te faltaba te sorprendiste mucho y golpeaste tu frente en el escritorio.

- No más.. -Dijiste algo triste en un susurro casi inaudible.

Te observaba desde la puerta de la gran sala, no quería que me vieras, aunque quería vigilarte.

Me rompe mucho el corazón verte así de triste, ahora que lo pienso tu sonrisa fue desapareciendo poco a poco mientras seguías el camino de tu abuelo.

Últimamente solo querías tu libertad y hacer algo divertido, tal vez por eso querías celebrar alguna festividad aquí. Supongo que sospechabas que no podrías terminar todos tu deberes así que decidiste que era mejor hacer la celebridad aquí, así no te la perderías.

Es algo triste eso, pero ese es el camino que decidiste tomar, o más bien que te obligaron a tomar, cuando murió tu abuelo.

- Zazel.. -Me llamaste tras aquellas pilas que me impedían verte.

- ¿Que pasa lord Enma? -Pregunte saliendo de mi escondite e ingresando a la sala.

- Acabo de terminar estos papeles ¿puedes llevártelos? -Me preguntaste de forma sería, aquella sonrisa de siempre ya no estaba en tu rostro.

Por lo que veía el momento que más quería no llegase había llegado.

Tu sonrisa había desaparecido y no volvió en los demás días.

Estaba harto..

Ya estaba cansado de verte así de triste, aunque no lo admitieses para no preocuparnos, podía ver claramente que estabas triste.

Ni siquiera con las tonterias de Aristokat o Doki Doggy tu sonrisa volvió.

No sé me ocurría nada y no soportaba verte de esa manera..

Tenía que solucionarlo de alguna manera, quería volver aquella sonrisa que me alegrabas los días.

No se me ocurría nada que hacer, hasta que en mi mente paso una locura.

Sabía que estaba mal y que te preocuparía, pero no pude evitarlo...

Con esa idea en mi mente me escape del mundo Yo Kai al humano.

Procure irme en sumo silencio, para que nadie me viera, odiaba al mundo humano pero no tenía ninguna opción.

Me escape del castillo en la noche y me asegure que nadie me siguiera,

Cuando llegue al mundo humano, pude ver qué ahí también era de noche, debo admitirlo la noche allí es muy linda, hay bastante silencio y las luces que alumbran las calles, las hacen ver aun más bellas. Tal vez el mundo humano no sea tan malo como pensé.

Me quedé ahí por un tiempo y como no sabía cómo se celebraba la Navidad tuve que recurrir a un edificio que para mí suerte estaba abierto, entre ahí y use una hoja, la cual me dio una apariencia humana, había acordado contigo que si por algún extraña razón iba al mundo humano que usaría la hoja esa.

Cuando entre a aquel edificio una niña me recibió, me preguntó que quería y le pregunté sobre algo que me ayudase a saber cómo celebrar la navidad, su reacción fue de sorpresa y luego me dio un extraño libro con una rara portada, el título decía "Como celebrar la navidad", justo lo que necesitaba.

Me pase toda la noche leyendo aquel extraño libro y para mí suerte cuando termine de leerlo por quinta vez el sol no había salido, por lo que podría volver al palacio sin despertar sospecha alguna.

Le devolví el libro a la señora y me fui en silencio, en la puerta de aquel edificio al que entre vi a una extraña chica, me si río y me dijo:

"Hola muñeco.. "

Es increíble el como de rápido se puede ir toda una nueva idea de un momento a otro ¿no?

Ese comentario tiro por la borda toda la nueva idea que tenía sobre los humanos.

Decidí ignorar aquel estúpido comentario y me fui al palacio, en el camino una tienda abrió y para mí suerte lo que vendía eran algunas cosas que se usaban para la festividad.

Entre y compre pocas cosas, el plan era que sea una sorpresa y que nadie se enterase que había ido al mundo humano.

Cuando llegue al palacio, me sorprendí al verte en aquel escritorio durmiendo, ya van varios días seguidos y me empiezo a preocupar cada día aún más.

Con sumo silencio llevo lo que había comprado a mi habitación y lo escondí bien, eres bastante curioso y no quiero que descubras tu sorpresa.

Salí de mi habitación y lleve varias pilas de papeles a tu escritorio, tal vez no te des cuenta pero los papeles empezaron a reducirse, eso es bueno ya que podrás celebrar tu libertad por unos días.

Esa noche transcurrió normal y también me escape, fui al mismo edificio y leí varios libros de como se debían poner los adornos que había comprado. En medio de la lectura me di cuenta que habría un gran inconveniente el cual era ¿Cómo llevaría el árbol de navidad al mundo yo kai?

Ese era el gran problema, pero ya se me ocurría alguna idea.

Amaneció y me fui a dónde se encontraba la tienda en cuál había comprado el día de ayer.

Salí de la tienda con una bolsa algo grande y me fui al palacio, en el camino termine comprando algunas cosas para comer.

Lleve todo a mi habitación y guarde la comida en un lugar aparte, no quería que manchara lo que había comprado

Las salidas se volvieron un poco comunes desde ese día, y para mí suerte nadie había sospechado que desaparecía.

Siempre que volvía estabas ahí durmiendo en el escritorio, además de que cuando despertaba no sonreias y estabas adolorido.

En ese tiempo pude transportar el árbol de navidad, me di cuenta que era más fácil de lo que había pensado, pues el árbol se vendía en una caja y luego había que armarlo.

Me asegure varias veces de haber comprado todo lo necesario, pero me di cuenta que me faltaba comprar algo muy importante.

El día había llegado y para mí suerte, habías salido del gran salón, lo que me dio tiempo para adornar todo el lugar.

Me costo un poco pero lo había logrado, solo faltaba ponerme ese estúpido gorrito rojo, también debería ponerme en traje rojo que había venido, pero no me gustaba el traje.

Debajo del árbol puse algunos regalos que había comprado, unos eran para ti y otros para Aristokat y Doky Doggy.

Ahora solo faltaba que llegaces.

Estaba muy nervioso ya que tenía varias dudas de sobre si te gustaría la forma en la que había hecho todo esto, aunque lo hice de la manera que entendí de todos los libros que leí.

Estaba tan metido en mi mente que me asusté cuando escuché que alguien se acercaba, además de estar apunto de abrir la puerta principal.

Me quedé viendo aquella puerta, pon donde tú habías entrado con una expresión de sorpresa

- Feliz Navidad!! -Exclame con una pequeña sonrisa en mi rostro, al mínimo abriste la puerta del gran salón.

No estoy acostumbrado a sonreir, pero por ti, lo haría siempre.

Cuando entraste a la sala, pude ver por tu expresión, que te sorprendiste mucho.

Toda la sala estaba adornadas con guirnaldas de color verde, un cartel que decía feliz Navidad y un árbol navideño bien adornado, con varios adornos y una gran estrella en la punta. Te sorprendiste mucho al verme con un gorro rojo con una pequeña bolita blanca en la punta.

- Zazel.. -Pronunciaste mi nombre sorprendido.

- Feliz Navidad mi rey... -Dije arrodillandome ante ti.

Ante mi repentina acción, te quedaste aún más sorprendido, algo que aproveche, pasa sacar de mi detrás otro gorro de navidad para ponerlo en tu cabeza.

- ¡¡Feliz Navidad Zazel!! -Exclamaste muy emosionado y con esa sonrisa que me gusta, para luego correr a abrazarme.

Ese día tú sonrisa había vuelto y eso era misión cumplida para mí.

Para mi suerte habías terminado de firmar todos los papeles que tenías, por lo que podías divertirte por una semana o hasta que en su defecto vinieran más papeles que tuvieses que firmar.

Cómo habías acabado todo el papeleo te lleve al mundo humano a disfrutar de un festival, del cual me había enterado que se celebraría cuando me escapaba del mundo Yo Kai.

Ese día nos divertimos mucho y no se si fue por tu gran deseo de querer salir y liberarte de tus obligaciones, que no te sorprendiste cuando te ofrecí ir al mundo humano.
























Realmente espero que tú sonrisa no se vuelva a ir, no me gusta verte triste y mucho menos que jamás se lo digas a alguien, por temor a preocupar a tus seres queridos...




























----
Feliz Navidad!!

Espero que les haya gustado este pequeño one-shot.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro