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Temp.2 ★☆ VII. Lazo

Temporada 2

Capítulo 39
El Baile de Gala

Isamu abrazó a Levy mientras apoyaba su cabeza en el hombro de la chica la cual escribía en el diario que poseía, ya habían pasado algunos días desde que lucharon contra los dragones y ahora era la fiesta del rey, sus heridas estaban completamente curadas gracias a su magia de burbujas y tenía su energía mágica completa por el largo descanso que obtuvo en su deliciosa cama mientras estaba abrazada a Gajeel el cual se le pegó como chicle desde que la vio herida, como si no pudiera olvidar su rostro esa noche.

Gajeel suspiró con pesadez mientras iba a buscar a su novia la cual seguía acarameladita con Levy, no la había visto desde la mañana debido a que habían ido a un día de chicas para arreglarse para la fiesta en el castillo real, por lo que cuando le viera sería una completa sorpresa para él, pero antes tuvo que preguntarles a las chicas del gremio donde estaban esas dos que no se separaban nunca.

El azabache abrió su boca incapaz de decir algo mientras miraba con incredulidad a su novia frente a ella cual le sonreía en grande mientras se levantaba del asiento y Levy se bajaba de sus piernas, Isamu tenía una deslumbrante camisa blanca con un moño en rojo en el cuello con perlas doradas y negras, los botones de la camisa eran dorados y tenía una larga falda roja hasta las rodillas que se ceñía en la cintura con tres botones dorados, en sus piernas habían largas medias blancas y unos zapatos tan negros como su largo cabello.

Gajeel miró a la chica con una expresión en blanco, el largo cabello azabache de la mujer estaba atado medio atado y caía libremente por su espalda mientras que sus ojos se veían deslumbrantemente brillosos, sus orejas tenían dos aros rubí como los ojos de él a su vez que había un pequeño collar de cadena color dorado.

Se veía tierna... inocente y dulce, no se parecía en nada a la maga que había luchado ferozmente contra los mini dragones y había sanado a los Dragon Slayer de sus heridas, mucho menos parecía a la mujer que daba fuertes patadas capaz de derribar a cualquiera con sus duros golpes... se veía tan pura, tan efímera.

Atontado Gajeel salió de sus pensamientos mientras abrazaba a la chica suavemente contra su pecho y descansaba su cabeza en el hombro de ella, realmente había quedado impresionado por el bello traje de la chica.

—En la batalla... realmente me preocupaste mucho —murmuró la chica apoyando su cabeza en el hombro del chico.

—Eso debería decir yo, idiota —murmuró levemente el hombre—. Solo tú estabas así de herida y sin poder mágico, no sabes el susto que me llevé al ver tu sangre en mis manos.

—Pero ahora estoy bien... y tú también —sonrió Isamu abrazando más fuerte a su hombre.

—¿Pueden besarse ya? Siento la tensión sexual —bromeó Levy y ambos se separaron rápidamente con los rostros sonrojados.

—¡Arruinaste el momento! —chilló avergonzada Isamu.

—Tch... vámonos, la fiesta ya comenzó —habló Gajeel cruzándose de brazos mientras miraba a otro lado y se alejaba de ellas.

Las chicas rieron levemente por su comportamiento y lo siguieron.

Gajeel y ellas se separaron en el salón, Isamu y Levy estuvieron juntas casi todo el evento mientras hablaban de bastantes cosas y se relacionaban con mucha gente, entonces entre su conversación surgió la pregunta más interesante, ¿Dónde estaba Natsu? Parecía como si el pelirrosa hubiese desaparecido debido a que no lo habían visto en todo el día le preguntases a quién le preguntases.

El hombre de pircings miró fijamente a la pareja frente a él con curiosidad, al parecer el rubio y la albina habían pasado por algo ya que ella no quería acercarse a ellos y él tenía una expresión de dolor en su rostro junto con arrepentimiento, había muchos sentimientos encontrados en el pobre rubio de Sabertooth el cual miraba a la chica.

Mientras más miraba, más veía como las cosas se ponían calientes hasta el punto que llegó su parte favorita de los desenlaces, ¡Las peleas! Todos los gremios lucharon contra los otros amistosamente mientras peleaban por "tener a Yukino en su gremio" a él realmente no le importaba mucho eso, pero si había una pelea y podría demostrar su superioridad realmente lucharía aún si la razón era absurda.

Los maestros de gremio también se unieron a la pelea campal entre los magos de sus respectivos gremios, cada uno luchando con una gran sonrisa mientras las cosas se ponían animadas cada vez más y más. Isamu rio mientras apoyaba a Gajeel desde una esquina, Levy solo podía sonreír y suspirar a la vez que negaba con su cabeza, Isamu realmente podía ser una tonta enferma de amor por el chico de cara de matón.

La pelea solo cesó en el momento en que Arcadius golpeó su espada contra el suelo y llamó la atención de los magos para detener el caos montado en la primera planta del castillo, él anunciaría que el Rey los saludaría personalmente como recompensa por sus actos junto con reconocerlos, pero lo que nadie se esperaba es que saliera Natsu con la corona del Rey en su cabeza y saliera riendo en grande alegando que ellos serían sus súbditos y detrás de él el Rey el cual reclamaba por su corona.

—Encárguense de él, caballeros Garou —habló sombríamente Arcadius.

—N-no podemos con él —tartamudeó el líder de los caballeros Garou con sinceridad.

—Cielos, Salamander realmente se supera día a día, es un completo imbécil —negó Gajeel e Isamu rio a su lado.

—Tienes razón, nunca imaginé que Natsu robaría la corona del rey y lo haría saltar y perseguirlo —rio la chica enganchándose al azabache.

Cuando Natsu por fin entregó la corona y se cambió de ropa a una más cómoda, empezó la música de vals e Isamu arrastró a Gajeel a la pista de baile al igual que otras parejas y empezaron a danzar suavemente al compás de la música y su bello sonido. Isamu sonrió mientras cerraba sus ojos y apoyaba su cuerpo en el del hombre el cual sonrió suavemente mientras seguía guiando la danza lentamente para que el vals fuera continuo y relajante.

Ambos se fueron a sentar en el momento en que la música terminó, Isamu sin duda eligió deliciosos pasteles los cuales no podría comer nuevamente y Gajeel comió carne como si nada, la chica adoraba los postres y probó un poco de todos, tomando de distinto refrescos, haciendo que el azabache riera por su novia amante de los dulces.

—¡¿Mm?! —exclamó la azabache sintiendo la lengua de su novio lamiendo su mejilla y rápidamente tragó el pedazo de pastel en su boca para intentar hablar— ¡¿Mmm?! —exclamó aún más sorprendida, al sentir como el hombre la había besado y aprovechaba para adentrar su lengua en su cavidad bucal.

—Gehe... eres deliciosa —rio el azabache una vez se alejó de la boca de Isamu la cual estaba sonrojada hasta las orejas, siempre era ella quien iniciaba los besos, ¡¿Por qué de repente Gajeel la atacó de forma tan apasionada?!


El vestido que usaba Isamu-chan ❤

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