Cap. 2
Este era un día como cualquier otro, Tsuna se encontraba esperando a que los pequeños salieran de la escuela, como siempre había llegado unos cuantos minutos más temprano... Una vez salieron estos lo abrazaron con mucha ternura, claro que para los que estaban observando al castaño eso daba miedo, los mellizos se habían tomado el trabajo de intentar asesinar a cualquiera que se acercara a su madre o siquiera lo intentara, él era de ellos y solo de ellos... como es que esos estúpidos seres inferiores se atrevían siquiera a mirarlo.
Los dos pequeños se encontraban caminando hacia su casa agarrado la mano del castaño uno a cada lado, iban tranquilos hasta que repentinamente un hombre estúpido se atrevió a chiflare a su madre... grave error, Brayden soltó la mano de Tsuna para a paso lento y elegante acercarse al hombre molesto que había hecho eso, el pequeño ocultaba su mirada bajo el sombrero que llevaba puesto y las patillas que este tenía hacían extrañar a al hombre ya que para su edad no parecía normal.
-quien te crees que eres- dijo el pequeño azabache, mientras que se agachaba para tomar una roca.
-hee... ¿qué quieres niño?, mejor vete a llorarle a tu mami- menciono el hombre de manera despectiva, intentando intimidar al niño.
Tsuna estaba a punto de parar eso cuando Derek lo detuvo, el castaño sabía que el pobre hombre la iba a pasar mal, está preocupado porque Brayden terminara por cometer un asesinato tan pronto.
-yo... soy el futuro mejor asesino del mundo- dijo Brayden para luego dejar inconsciente al hombre con una piedra que le lanzo a un punto justo en la cabeza.
Luego de eso el pequeño se acercó a su madre y continúo caminando, más bien arrastrando a Tsuna el cual estaba preocupado de que el pequeño no hubiese matado al hombre que estaba tirado en el suelo.
El problema en verdad no era si ese hombre estaba muerto o no, ya que lo que era más preocupante en ese momento y que ninguno de estos tres sabia era que un azabache de patillas rizadas y traje había visto todo quedándose anonadado por lo que acababa de presenciar, ese claramente no podía ser hijo de nadie más que de él y de Tsuna... aunque eso significaba que el castaño era doncel, y que él era padre de familia aun sin saberlo.
El Hitman no se quedó por mucho tiempo parado sino que decidió seguirlos, como siempre oculto su presencia a lo largo del camino, pero para su sorpresa de un momento a otro vio como Tsuna y los mellizos dejaban de caminar y se soltaban las manos.
-deja de esconderte... ¿quién eres?- menciono el castaño mientras que se volteaba para observar quien era el que los seguía.
-cuanto tiempo... veo que mejoraste- dijo el azabache con un tono de voz firme y seguro, también un poco de sadismo en la sonrisa que mostró al verlo.
Tsuna a penas noto de quien se trataba se quedó paralizado, sabía que ahora si no podría escapar... sabía que dé él no lo lograría una segunda vez... un temblor recorrió su cuerpo haciendo que sus rodillas fallaran.
En ese momento Derek se dirigió a ver como estaba su madre y Brayden se paró entre Tsuna y el hombre extraño que estaba allí.
-¿qué demonios quieres?- simple y certera una pregunta directo al punto, no quería andar con rodeos con un tipo con un aura así.
-mmmh... ya veo- menciono el sicario mientras que acercaba su mano al sombrero y tomaba a Leon para transformarlo en una pistola y luego dispararle al pequeño. Brayden noto esto y esquivo el disparo para rápidamente meter su mano en la mochila y sacar una pistola, dio cuatro tiros que rozaron ambos brazos y piernas del Hitman, el pequeño sonrió sádicamente luego de haber logrado eso.
-de donde se supone que sacaste la pistola- dijo un Tsunayoshi ya recuperado, este se acercó él y saco el arma al pequeño.
-se la robe a Byakuran- dijo el de ojos color caramelo sin ningún tipo de remordimientos.
-es la séptima vez en lo que llevamos de mes...- dijo el castaño en modo madre enojada.
-en realidad la octava... y esto no sucedería si me dejaras llevar mi propia arma- dijo Brayden en un tono calmado e ignorando gran parte de lo que Tsuna le había dicho.
Reborn estaba planeando aprovechar eso para acercarse al castaño, pero el otro pequeño de cabellos castaños ahora se encontraba frente a él con el arma que Tsuna le había sacado a Brayden, apuntándole a la cabeza.
-intenta acercarte a nuestra madre y la vas a pasar muy mal...- dijo el pequeño para sorpresa del Hitman, ya que el que parecía más tranquilo era el más peligroso.
-Tsuna ¿podemos hablar?, tengo que contarte lo que en verdad paso...- hablo el sicario con el arma del pequeño en la mano -esto no es un juguete- menciono para luego guardarse el arma dentro de su saco.
-lo dices como si me dieras opción, como si no te conociera- dijo Tsuna que a pesar de mostrarse valiente por dentro se está desmoronando, sabía que no podía mostrarse mal frente a sus hijo, así que debía ser fuerte.... Debía serlo.
-tranquilos, no le voy a hacer daño, solo quiero hablar- dijo para luego caminar detrás de Tsuna, el cual tenía a sus pequeños sostenidos uno de cada mano.
~ya en la casa de Tsunayoshi~
-recuerden dejar las cosas de la escuela y cambiarse la ropa- menciono Tsuna mientras pasaba y se dirigía a la cocina, Reborn lo siguió hasta que este le señalo una mesa para que se sentara y esperara un poco.
Los dos pequeños llegaron vestidos de traje, y se sentaron en la mesa frente al hombre que había entrado a su casa.
-¿cómo te llamas?- dijo el pequeño azabache mientras que lo miraba fijamente sin apartar la mirada, ni dejar que este sepa lo que planea.
-Reborn... ¿ustedes?- menciono mientras que recibía un expresso que le había preparado Tsunayoshi, y a los dos pequeños les daba una leche chocolatada.
-él es Brayden es el mayor, y yo soy Derek... ¿quieres saber algo más?- hablo el castañito mientras que le daba una sonrisa totalmente falsa y que demostraba que, planeaba algo... al contrario del otro este era mucho más astuto, y podía dar la impresión que quisiera.
-Derek basta, no va a funcionar... y no me miren así, no les voy a dar café, todavía tienen 4 años- dijo Tsuna mientras que se sentaba en la mesa entre los pequeños y el Hitman... él se había servido una chocolatada caliente. -¿comenzamos?... por las dudas te digo que aun así y los eche van a encontrar la forma de ver y oír de lo que hablamos así que es inútil- dijo con un rostro un tanto resignado.
-claro... bueno vamos al grano, ¿ellos son mis hijos?- dijo el Hitman a pesar de que no le hiciera falta preguntar.
-si... hace 5 años cuando me fui estaba embarazado, claramente no lo sabía ya que no estaba enterado siquiera de que eran los donceles- dijo Tsuna mientras que daba un sorbo a su chocolate con la mirada hacia abajo para evitar ver al azabache.
-ya veo... de todas formas es bastante obvio, pero eso no es de lo que quiero hablar, lo que te quería decir es que lo que escuchaste ese día está mal, en verdad no éramos nosotros... fue una de las coronas fúnebres, estábamos en la misión de atraparlo cuando tu llegaste y viste algo que no era, el edificio tampoco era real, todo eso había sido planeado, al final logramos atraparlo... pero nadie debía saberlo, ni Vongola ya que esa era una misión secreta, para cuando quise buscarte tú ya te habías ido y no tenía forma de encontrarte- dijo el Hitman explicando todo lo sucedido en aquel momento, claramente eso era verdad pero no tenía forma de demostrarlo.
-...¿y a donde llevaron a la corona fúnebre?...- dijo Tsuna dejando la taza lejos, tenía muchas ganas de llorar y no sabía si la fuerza en sus manos le iba a fallar.
-no estamos seguros, alguien nos lo encargo y luego nos dieron el dinero pero aún no se quien fue, de lo que si estoy seguro era que planeaba algo en contra de nosotros- dijo Reborn, mirando a los ojos a Tsuna para notar como este estaba a punto de llorar.
-perdón por interrumpir, pero eso estaría significando de que tú eres nuestro padre- menciono el pequeño azabache bastante asombrado, pero sin demostrarlo demasiado, eso sí que no se lo esperaba de ninguna forma.
-claramente...- menciono Reborn con un tono de obviedad en su voz.
-ya veo... entonces fuiste tú el que hizo que llorara por las noches y sufriera durante tanto tiempo- menciono el pequeño castañito mostrando una mirada enfurecida al Hitman, a pesar de nunca mostrar sus sentimientos la ira nunca fue algo que este pudiese controlar bien.
Este un arma de alguna parte, solo el sabrá de donde y le apunto, cuando estaba a punto de disparar alguien lo detuvo, era Fon... este había ido a visitarlos por sorpresa cuando se topó con esa escena bastante inesperada.
-tranquilo Derek, se lo que estas sintiendo pero no puedes hacer eso, sino Tsunayoshi se pondrá triste- menciono el chino mientras que le sacaba la pistola, y lo levantaba en sus brazos para darle un abrazo al pequeño.
-¿Qué es lo que se supones hace aquí Fon?- dijo Reborn con un claro tono de enfado, como se había atrevió a ocultarle por tanto tiempo todo esto, también le molesto el que parecía que los mellizos lo querían... era obvio que no podía esperar que lo quisieran rápidamente después de tanto tiempo sin estar allí ni una vez, pero de todas formas eran sus hijos, así que un poco de celos sentía.
-eso es lo que se supone yo debería decir, ¿Qué haces aquí luego de lo que le hiciste a Tsunayoshi?... ¿es que acaso esperas que te perdone y empezar nuevamente?, no me hagas reír, durante años que está sufriendo por tu culpa, no puedo permitir que le hagas más daño- dijo Fon mostrando después de mucho tiempo una mirada llena de ira.
-Fon, está bien, no le puedo negar si es que quiere ver a los mellizos ya que son sus hijos... pero espero que comprenda que a pesar de lo que me dijo aun no puedo perdonarlo... necesito tiempo para pensar bien y tranquilo- hablo Tsuna mientras que mostraba una sonrisa la cual era obviamente falsa y se notaba que estaba sufriendo.
Los pequeños al ver así a su madre hablaron con Fon pidiendo ir a algún lugar y dejar solo por un rato a Tsuna, el chino salió con Derek en sus brazos, y Reborn salió arrastrado por Brayden.
-si no lo dejamos solo, no va a poder desahogarse... ya que frente a nosotros intenta ser fuerte...- mencionaron ambos pequeños al mismo tiempo una vez salieron de la casa.
...
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A pos bueno, y eso fue todo por ahora, estoy escribiendo esto ahora antes de irme a la escuela, no sé si me explique bien, pero me costó escribir un poco a las apuradas, por cierto pronto actualizare las demás historias R27.
Muchas Gracias a todos los que leen, comentan y votan.
Nadii1827
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