La alarma sonó, justamente a la hora en que me despierto para ver el amanecer y después arreglarme para ir al colegio, pero hoy no tenía ganas de ir, no tenía ganas de mirarle la cara a mi papá, recordar esas simples pero dolorosas palabras, tener que pensar que tengo un padre, al cual yo no le importo, y que todos los días apaga la poca luz que me queda, esa pequeña luz, que todavía tiene esperanza de que todo esto pase y el sea ese padre de antes, que me abrazaba y me decía que me amaba y que era su orgullo, ese padre con el que nos pasabamos tardes jugando cartas y riendo, éramos una familia feliz, pero desgraciadamente, en está jodida vida, no todo es color rosa, solo fue cuestión de tiempo para que todo oscureciera, para que todo se volviera una pesadilla, de la cual ya quiero despertar, sentir que nada de esto es real, que el dolor pasará y que él si me ama, solo quiero salir de esta bruma negra que me consume...

Me levanté, mientras miraba el amanecer, escuchaba con mi auriculares "Drivers license" y recordaba que precisamente hoy saldría a correr con Adrick, me vendría bien, el hace que me sienta mejor, aunque, me pongo nerviosa cuando estoy cerca de él.

Enseguida me dirigí a darme una ducha, el agua estaba fría, justo como me gusta, aunque sabía que me hace daño y puedo resfriarme. Me vestí, cogí la mochila y bajé hasta la cocina, estaba Richard sentado en la mesa.

-Buenos días Richard-dije cogiendo cereales para desayunar.

Está mirando algo en su teléfono un poco aburrido.

-Buenos días, por cierto me llevé tremendo regaño por parte de mi tía-murmuró mientras se levantaba a coger algo en el refrigerador para desayunar.

-Lo siento, pero no me sentía bien y decidí venir a casa.

-Debiste avisarme,¿ que tenías?

No puedo decirle lo que pasó ayer y menos arruinarle su estadía aquí y si se lo cuento se va a sentir mal, por eso mejor no le cuento nada.

-Nada grave no te preocupes.

-Ya hoy Carlos y yo nos vamos a casa, mamá regresó del viaje.

-Ay que lástima, bueno mucha suerte en el viaje y dale un beso de mi parte a Carlos y dile que lo quiero, espero que vuelvan a venir pronto-le dije mientras lo abrazaba y le daba un beso en la mejilla.

Carlos todavía estaba en la casa del amigo por eso no me pude despedir de él.

Mamá ya se había ido para el trabajo y pasé por la habitación de mi papá y estaba durmiendo, a pesar de que nos trate mal, es mi padre y lo quiero, no me gusta verlo así alcohólico ,arruinando su vida. Bueno, me fui hasta la parada, cogí el bus, al llegar a la escuela todo estaba igual que siempre todavía no notaba ni rastros de Adrick por el cole...

........

El día estuvo igual que siempre, pude ver a la hora del almuerzo a Adrick y me recordó que hoy pasaría por mi a las 4:00pm, aquí lo estoy esperando sentada en la sala, mi mamá llegaba del trabajo a las 8:00pm. Tocan la puerta y enseguida me dirijo a abrirla, se veía mucho más lindo, andaba con ropa deportiva, enseguida mis mejillas se enrrojecieron.

No lo mires, no lo mires Azly, no te pongas roja, no lo hagas.

Te gusta.

Tu cállate.

-Hola Azly.

-Hola.

-¿Lista para irnos?

-Si-dije mientras sonreía.

¿Por qué sonríes? Serás estúpida.

Lo que me faltaba haciendo el ridículo, mejor me callo.

El camino estuvo tranquilo, me llevó a un lugar muy bonito, transmitía tranquilidad, seguridad al igual que el chico. Una carretera que a su alrededor la cubrían varios árboles de flores rosadas que al caer adornaban el camino.

-¿Lista para correr?

-No se, ¿sabes que no correré mucho verdad?

-Ya hablamos sobre eso ayer, así que venga vamos-murmuró con una sonrisa en sus labios mientras apuntaba el camino-¿Que canciones te gustan?, para escuchar mientras corremos.

-¿Tienes "the one that got away"?

-Si, es una de mis favoritas-dijo mientras la reproducía en su teléfono-antes de comenzar a correr, solo te pido que difrutes de la música, el ambiente y te olvides de todo lo demás, recuerda siempre sigue adelante nunca te rindas-asentí y comenzamos a correr suave.

Cuando íbamos a mitad de camino ya me sentía cansada, a penas Adrick lo notó, me cogió delante y empezó a correr en retroceso. Cada día se veía más lindo, mientras corría podía ver su cabello mojado pegado a su frente sus labios rosados entre abiertos y su mirada fijamente en mi.

-Para, no corras así que te vas a caer Adrick-le dije con tono preocupada porque se podía caer.

-Alcánsame e intenta detenerme-dijo mientras reía.

Es un cabezota.

Pero te gusta

No me gusta.

Si te gusta.

¿Te puedes callar?

No

Vale lo que me faltaba hablando conmigo misma.

-Esto no da gracia, Adrick detente-dije mientras corría más rápido para alcanzarlo y con la voz entre cortada de lo agitada que estaba.

Al correr tan rápido para alcanzarlo me perdí en sus ojos, no me di cuenta y pues chocamos, caímos al suelo, yo encima de él, enseguida mi corazón comenzó a latir más de prisa solo miraba sus ojos conectados con los míos. Me movió hacia el suelo mientras me hacía cosquillas.

-Para ya para por favor-dije mientras no paraba de reír.

Nos encontrábamos, acostados en el suelo mirando las flores de los árboles.

-Viste Azly llegaste a la meta y nunca te rendiste.

-Eso es trampa llegué a la meta porque una personita por ahí se cree que es Aaron Yoder.

-¿Quien es ese?

-Te lo dejo de tarea.

-Además correr en viceversa es un ejercicio estupendo.

-Pero eso no quita que fue trampa.

-No fue trampa, es que de eso se trata Azly, de tener un propósito por el cual no rendirte jamás y pues lo has logrado, hice esta carrera contigo para demostrarte que por muy cansada que estés nunca debes rendirte, siempre tienes que seguir adelante, aquella noche pude ver la tristeza en tus ojos, pude sentirlo, créeme todo estará bien, todo pasará.

-Mi vida se está oscureciendo, pero ahora siento que la luz al final del túnel se acerca, ya no está tan lejos como antes y eso es gracias a ti Adrick-dije con lágrimas rodando por mis mejillas.

-Ya no llores mírame,.siempre haré lo posible y lo imposible por verte cada día mejor-dijo secando mis lágrimas con sus suaves manos.

Después fuimos a comprar palomitas y por todo el camino íbamos coversando y riéndonos,me sentía tan bien con él,era totalmente otra persona a su lado,ya que en mi casa solo existía ese dolor,él es como ese rayito de sol en una tempestad...