Por fin estaba siendo el día. Hoy cumplían su primer año como pareja.

Su mañana había sido una muy romántica, se levantaron entre besos y mimos. Entre los dos hicieron un bonito desayuno romántico, comieron entre risas y tiernos besos.

Por el medio día se encontraban empacando unas cuantas cosas y arreglandose ya que irían al lugar donde sería la sorpresa de Jungkook.

Después de unas horas ya iban en el auto del mayor rumbo a la sorpresa que este tenía. Él pelinegro manejaba con una de sus manos mientras la otra la tenía entrelazada con la de su pequeño.

La carretera por la que pasaban estaba desolada y rodeada de árboles, lo que hacía que Taehyung se sintiera muy intrigado.

—Jungkookie~ ¿el lugar al qué vamos está muy lejos? —preguntó el ahora nuevamente castaño, un tanto desesperado.

—Si chiquito, así que si quieres puedes dormir un poco —respondió el mayor, acariciando con su pulgar el dorso de la mano ajena.

Taehyung bufo en un acto de berrinche y Jungkook solo rió por la desesperación de su pequeño.

Así que para matar el tiempo, el castañito decidió obedecer a su mayor, así que se dispuso a dormir un largo rato.

—Amor, ya llegamos —avisó Jungkook, meneando el menudito cuerpo del menor.

Taehyung abrió sus ojitos de a poco, encontrándose con que el sol estaba a nada de ocultarse y que se encontraban estacionados fuera de una cabaña muy linda y hogareña.

—¿Aquí es Kookie? —preguntó un poco desorientado.

—Si, mi amor.

Él pelinegro tomo entre sus fuertes brazos el cuerpito del menor quien aún estaba un poco ido por la reciente siesta. Lo cargo al estilo nupcial hasta entrar en la cabaña.

Una vez dentro el cuerpo de Taehyung fue depositado en el suelo y ya en sus cinco sentidos pudo ver todo lo que allí había. Por todo el interior de la cabaña habían velas y pétalos de rosas, mientras que en una mesa al fondo de la sala una deliciosa cena los esperaba.

—Feliz aniversario, amor de mi vida.

Taehyung se giró con sus ojitos acuosos hacia su novio y se lanzó a sus brazos.

—Te amo muchísimo Jungkookie hyung, te amo, te amo —dijo ahogadamente ya que se encontraba con su carita hundida en el pecho del mayor.

Jungkook tomo el rostro de su bebé entre sus grandes manos y lo besó, Taehyung correspondió el beso de su amado de inmediato, creando una perfecta danza entre sus labios al instante.

—Eres lo mejor que me a pasado en la vida —confesó el pelinegro  separándose unos momentos de los labios contrarios pero volviéndolos a juntar al instante, reclamando los labios de su chico en un dulce pero demandante beso.

Luego de unos largos momentos del apasionante beso, se separaron con sus respiraciones erráticas.
—Vamos a cenar, bebé —tomó la mano del más pequeño y los dirigió a ambos hacia la mesa, donde abrió la silla para que su niño tomara asiento y luego él hizo lo mismo con la propia.

Luego de unos minutos cenando, Taehyung se encontraba agradeciéndole infinitamente a su novio por la sorpresa, mientras este solo sonreía con amor y ternura al tener al ángel más precioso frente a él, con sus mejillitas gorditas manchadas de salsa mientras comía animadamente.

—Eres tan perfecto, mi amor —dijo de la nada, haciendo que el más pequeño levantará la vista de su comida y se sonrojara.

Luego de unos minutos más ambos acabaron su comida. Jeon había tomado una servilleta y se había encargado de limpiar la salsa que manchaba las comisuras de los labios y las mejillas de su castañito.

Ya se encontraban viendo una película romántica en la pequeña sala de esa cabaña.

Taehyung se encontraba con su cabecita en el pecho de su novio mientras este le brindaba caricias en todo su cuerpito o le hacia mimos en su cabello. Después de tanto pensarlo él menor decidió que era momento de él también darle su sorpresa a su hyung, que aunque no era la gran cosa, lo hacía por que quería agradecerle todo lo que a hecho por él.

—Kookie hyung, ¿puedo darle mi sorpresa ahora? —preguntó, Jungkook lo miro sorprendido pero asintió de inmediato.

Fue ahí donde se separo del cuerpo de su amado y fue hacia su bolso, donde saco un cassete y se dirigió al estéreo que en esa cabaña había. Lo coloco y una vez listo, antes de poner la canción, miro a su hyung quien lo miraba expectante.

—Kookie hyung, esta sorpresa no es la gran cosa pero viene con todo mi corazón por que no he tenido la forma de agradecerle todo lo que hizo y sigue haciendo por mi —suspiró y miro con adoración al pelinegro—. Antes de conocerlo mi vida no tenía sentido. Yo siempre escuchaba esta canción esperando que un día llegara mi ángel a salvarme. Cuando usted llegó, empezo a cumplir una y cada de las cosas que está canción dice —sonrió y Jungkook también lo hizo ante los recuerdos de como se conocieron—. Quiero que sepa que yo a usted lo amo con todas mis fuerzas —y sin más presionó un botón de el estéreo para que la canción comenzará a reproducirse. Rápidamente fue hacia su novio quien aún seguía sentado en el sofá y se sentó en su regazo, Jungkook lo tomo en sus brazos y el castaño escondió su carita en su cuello en tanto la canción comenzó.

Jungkook escuchaba atentamente cada letra de la canción, la cual en cierto punto le hizo saber cuan solo y mal se sentía su bebé antes de él.

Cuando la canción llego a su coro, Taehyung comenzó a cantarla en susurros en el oído de su novio.

—Me haces sentir especial —cantó suavemente, haciendo estremecer al pelinegro—. No importa cuanto el mundo intente deprimirme —Jungkook sonrió, la voz de su bebé cantando era lo más lindo y tranquilizante del mundo—. Incluso cuando las palabras más hirientes me apuñalan, sonrió otra vez por que estas ahí. Eso es lo que haces —los ojos de Jungkook comenzaron a llenarse de lágrimas al saber lo importante que era para su pequeño novio—. Me siento especial otra vez —susurró suavemente Taehyung—. En un momento siento que no soy nada en absoluto. Como si nadie se diera cuenta cuando no estoy ahí. Pero cuando te escucho llamarme, me siento amado, me siento especial —terminó de cantar, volviendo a recostar su carita en el hombro del mayor, este solo sonreía con sus ojos llenos de lágrimas mientras se disponía a seguir escuchando la letra de la canción.

"Solo quería esconderme. No quería mostrarme al mundo. Como si todo hubiera perdido su significado, como si yo hubiera perdido mi significado. Solo me quedé sentado ahí."

Jungkook al escuchar aquella parte de la canción, solo acorruco más el cuerpecito de su novio contra él, abrazandolo con todas sus fuerzas, queriendolo proteger de todo el mal que hay en el mundo.

"Entonces apareciste frente a mí, con una cálida sonrisa extendiste tu mano. Todo está bien. Paso de ser nadie a ser alguien y me convierto en un yo muy especial."

Jungkook sonrío en esa parte, sabiendo se refería a él.
Abrazó más el cuerpo de Taehyung a la vez que el coro se volvía a repetir.

—Kookie hyung, escuche bien esa parte por favor —habló despacito el menor cuando el coro estaba por acabar. Jungkook asintió y presto toda su atención en la parte que seguía.

"Haces que todo esté bien en un día nublado y sin sol, sin dudarlo eres mi luz brillante. Eso es lo que haces. Incluso la noche más oscura se convierte en un día soleado, te lo debo a ti, por que me haces sentir especial."

El coro nuevamente se volvió a repetir, Taehyung saco su carita de su escondite y miro con sus ojitos brillosos los ojos de su hyung, los cuales ya habían derramado unas cuantas lágrimas.

La canción termino y Jungkook no pudo aguantarlo más, así que se lanzó a besar los labios de su novio, quien recibió gustoso el beso.

—Te amo, te amo tanto mi amor —susurró Jungkook sobre los labios contrarios, no permitiéndole responder a su pequeño ya que nuevamente había estampado sus labios contra los de su  pareja.

Lo cargo al estilo nupcial, llevándolo hacia la habitación que la cabaña tenía, abrió la puerta y la cerro con su pie. Taehyung se separo del beso solo para ver como en la gran cama había muchos pétalos de rosas y muchas velas iluminando el lugar.

—Una vez me dijiste que querías que te hiciera el amor encima de muchos pétalos de rosas —recordó Jungkook, dejando el cuerpo de su bebé en la cama y el posicionándose encima de él sin llegar a aplastarle—. Y yo siempre cumpliré cada uno de tus deseos —susurró viéndolo a los ojos, para luego juntar sus labios con los del contrario.

Y tal como lo dijo, esa noche le hizo el amor encima de muchos pétalos de rosas. Y en medio de gemidos y jadeos dulces, ambos se recordaron lo mucho que se amaban.

La mañana había llegado, ambos se encontraban limpios ya que después de su apasionante demostración de amor, se habían duchado. Taehyung tenía puesta una pijama que consistía en una camisa y pantalones de seda blancos, haciéndolo lucir como un verdadero angelito. Mientras que Jungkook solo tenía puesto un pantalón de chándal gris y su parte superior estaba completamente desnuda.

Jungkook se despertó primero, solo para permitirse observar el rostro sereno de su bebé mientras este aún dormía. Lo vio con todo el amor y adoración del mundo, por su mente pasaron todos los recuerdos desde que conoció a su niño. Taehyung había pasado por tantas cosas que de verdad Jungkook lo consideraba la persona más fuerte y valiente del mundo.

Se acercó al rostro de su bebé y deposito un besito en su frente.

—Tú también me haces sentir especial, mi amor —susurró despacito.

Sin más volvió abrazar fuertemente el cuerpo de Taehyung, permitiéndose dormir un rato más con el amor de su vida.

Preparándose por que ese solo era apenas el primer año de su relación y aún faltaba mucho camino por recorrer junto a su pequeño.

Sin querer, Jungkook había sido el Ángel que había rescatado a Taehyung de la nube negra, y sin querer, Taehyung había sido esa persona que trajo el amor y la felicidad que el corazón tan desolado de Jungkook necesitaba.

Fin.

-Nana.☁️

Feel Special tendrá solo
1 o 2 extras, si gustan pueden
dejarme aquí sus peticiones
de que les gustaría ver en la
siguiente parte y dependiendo
de eso veremos cuantos
extras tendrá este fic♡

Muchas gracias por todo,
aún no me despido de este fic
ya que lo haré una vez este
completamente terminado <3