La pareja se encontraba camino hacia la cafetería de un viejo amigo de Jungkook en busca de un delicioso desayuno.

Al ser una bonita mañana con un clima perfecto, la pareja decidió caminar hasta llegar al local, pues este no estaba muy lejos de la casa del mayor.

Iban caminando por un parque con sus manos entrelazadas, mientras Taehyung miraba a todos los pajaritos pasar.

—Kookie, siempre me he preguntado que se sentirá ser un pajarito, es decir sería muy bonito poder volar libremente y cantar en las mañanas —dijo el peliazul de la nada, señalando los pájaros que pasaban.

—Si bebé, seguro que es muy lindo —respondió el mayor con una sonrisa enternecida por su bebé.

Ambos siguieron su trayecto hasta llegar a una linda y hogareña cafetería que tenía como nombre "Hobi Space".

Jungkook abrió la puerta para su pequeño y luego de que este se adentrará al lugar lo hizo el también.

—¡Jungkook! —gritó un chico castaño, corriendo hacia ellos y abrazando al pelinegro.

Él mayor devolvió el abrazo a su amigo mientras Taehyung los miraba con sus ojitos curiosos.

—Te extrañé hombre, aveces siento que te olvidas de mi —dijo el castaño, dando un golpe en el hombro de Jungkook.

Se dio cuenta de que no estaban solos, pues había un pequeño chico de cabellera azulada mirandolos con ojitos brillosos.

—Hobi, el es mi novio Taehyung —habló Jungkook.

—¡Oh por dios! Tú eres el pequeñín del que tanto habla este grandulon, ¡ven aquí! —y atrajo al pequeño a un abrazo como si se conocieran de toda la vida—. Soy Jung Hoseok pero me puedes decir Hobi —se presentó una vez dejo de abrazar al joven.

—Mucho gusto Hobi, puedes decirme TaeTae —dijo el menor sonriendo.

Minutos más tarde Hoseok se despidió de la pareja, dejandolos en una de sus mejores mesas con dos cartas de menú en ella. Ambos sentándose uno frente al otro.

—¿Qué quieres pedir, mi vida? —preguntó el mayor.

—Una malteada de fresa y un pastel de chocolate, por favor Jungkookie —pidió el peliazul.

Otro mesero del lugar tomo su orden, en la cual Jungkook pidió lo dicho por su pareja mientras para el había pedido solo un café.

—Más tarde quisiera hablar algo importante contigo amor —dijo Jungkook de repente, haciendo que el corazoncito de Taehyung latiera preocupado, más controlandose al ver la sonrisa tranquilizadora que le dirigía el mayor.

Hoseok llegó con su orden, les deseó lindo desayuno y se fue a seguir atendiendo a los clientes que llegaban.

La pareja comió su desayuno tranquilamente mientras hablaban de cosas triviales, al terminar Jungkook rió un poco al ver las mejillas de su pequeño manchadas de chocolate.

Tomó una servilleta y se levanto de su asiento dirigiéndose al lado del peliazul, y con mucha calma empezó a limpiar sus mejillas para luego dejar un beso en una de ellas.

—Te amo —confesó de la nada el pelinegro, haciendo sonrojar a su novio.

—Yo también lo amo mucho, Kookie hyung.

Habían llegado nuevamente a la casa del mayor, pues Taehyung tenía permiso de Sun Hee de quedarse con su novio hasta el atardecer.

—Bebé, de verdad quisiera hablar algo contigo —Jeon tomo la manita de su novio y fue hasta el sofá de su sala, sentándose en este y haciendo que el peliazul se sentará en sus piernas, atento a lo que su novio le diría—. Mmm... verás, hace mucho mencionaste; ya sabes... que te gustaba usar falditas y vestidos bonitos, más no te los ponías seguido por Hyun Bin... yo... me preguntaba si en estos días quisieras mostrarme como te vez con ellos puestos, claro, solo si tu quieres amor, si no, no te preocupes chiquito.

Para este punto Taehyung estaba sonrojado en todo su cuerpo, volteando para todos lados menos para el rostro del mayor, y jugando con sus manos.

—P-pero hyung, n-no le va a g-gustar —dijo muy apenado el peliazul.

—Tú luces perfecto con cualquier cosa amor. Pero no te preocupes bebé, si no estás cómodo no volveremos hablar del tema —dejo un beso en la mejilla de su niño para que se tranquilizara.

Taehyung lo pensó un momento. El confiaba plenamente en su hyung, con él no tenía que tener miedo a las burlas por usar ropa considerada socialmente femenina. Sabía que su novio siempre lo vería como el tesoro más valioso del mundo.

Así que sin pensarlo mucho tomo entre sus manitas el rostro del mayor y le dio un beso de piquito en sus labios.
—Esta bien hyung, se lo mostraré pronto —le dijo aún sosteniendo el rostro de su mayor entre su manos, mostrandole su bella sonrisa rectagular.

Jungkook muy emocionado se lanzó hacia el menor, dejandolo recostado boca arriba en el sofá para empezar a besar toda su carita y dejar cortos besos en su boquita. Sin duda lo hacia muy feliz el que su bebé tenga confianza en él.

Ya habían pasado dos días desde que Jungkook le pidió lo dicho y hoy era el día en el que Taehyung cumpliría su petición.

Llevaba puesto en ese momento un pantalón blanco con una sudadera café claro y un estampado de osito. Y en su hombro izquierdo llevaba un bolso con la ropa necesaria para mostrale a su hyung lo que quería.

Jungkook lo esperaba en la sala de su casa, pues se encontraba hablando con Sun Hee ya que Hyun Bin regresaba en 3 días, y tenían que ponerse alertas para que no vuelva a lastimar a Taehyung.

—¡Jungkookie! Estoy listo hyung —habló el peliazul llegando junto a su madre y su novio.

—Bueno, señora Kim, nosotros nos vamos retirando, un gusto hablar con usted —dijo Jungkook, haciendo una reverencia hacia la mayor.

—Cuidalo mucho Jungkook, lo quiero aquí a primera hora mañana —habló Sun Hee dándole una mirada amenzadora al pelinegro y haciendo reír al peliazul.

Taehyung se acercó y abrazó a su madre, despidiéndose de ella para luego salir de la casa junto a su novio.

Taehyung se encontraba dento del baño que había en la habitación de Jungkook.

Se miraba al espejo mientras tenía su carita sonrojada a más no poder. Pues Jungkook lo esperaba sentado en la cama de la habitación listo para verlo con aquella ropa puesta.

En estos momentos llevaba una polera blanca con una falda azul de tablones, dejando a la vista sus bonitas piernas color canela libre de algún vello corporal. Así mismo se veía escasamente sus rochonchitos muslos, pues la falda no era ni muy larga ni muy corta.

Se puso un poquito de bálsamo en sus labios y se cepillo un poco sus cabellos azulados. Una vez listo se miro al espejo y suspiró. Y sin más y armandose mucho de valor, salió del baño.

Jungkook al oír el sonido de la puerta giró su cabeza y juro que pudo haberse desmayado ahí mismo al ver a su bebé con esa falda puesta y sus mejillas sonrojadas.

Taehyung camino hasta llegar a donde estaba su novio. Una vez estuvo frente a él, el pelinegro lo miro de pies a cabeza, completamente embobado con la obra de arte que tenía en frente.

Sin decir palabra alguna lo jalo para tirarlo a la cama para comenzar a besarlo, posicionándose sobre él sin llegar aplastarlo.

Se besaron por unos momentos hasta que Jungkook decidió terminar con el beso para poder decirle a Taehyung lo que tanto deseaba oír.
—Te ves perfecto amor, eres una verdadera obra de arte, tesoro —dijo y dejo un beso en la frente contraria.

Taehyung muy feliz empujo el cuerpo del mayor para quitarlo de encima y salio corriendo al baño, dispuesto a seguir mostrandole a su hyung toda la ropita que trajo con él.

-Nana.️☁️

Mmm no se si lo esperaban,
pero ya me decidí y creó que
no le metere smut al fic ya que si
yo me avergüenzo cuando narro
un beso imagínense si llegara
a escribir smut.

Tal vez y al caso narrarre un
poco cuando llegué el momento
pero no lo escribiré a lujo
y detalle:(

Lamento si de verdad había
alguien que quería
smut en el ficㅠㅠ