Jungkook se sentía muy mal, quería llorar y sacar todo el dolor que tenía dentro, por lo que tomó a Bam y salió de la casa de Taehyung. Pues no quería quebrarse frente él.

–Espera –Taehyung lo llamó. 

Jungkook caminaba con su cabeza gacha, apretando sus ojos con fuerza para que sus traicioneras lágrimas no salgan.

–Te dije que esperes, –Taehyung lo tomó del brazo y al darse cuenta de lo que hizo lo soltó rápidamente. 

Jungkook se detuvo y lo miró, –¿Qué pasa?, –habló con las palabras entrecortadas.

–Que no te puedes llevar a Bam así como así, y mucho menos sin sus cosas.

–Ya te dije que no te preocupes por eso, te agradezco mucho por lo que hiciste por él, pero ahora debemos irnos.

Taehyung lo miró enojado, no le parecía justo que ni siquiera lo deje despedirse de Bam. –Si me preocupo porque quiero mucho a Bam, en el tiempo que pasamos juntos me encariñé mucho con él, le compré muchas cosas y me gustaría que te las lleves. Espérame un momento y tendré su maleta lista. Y por favor déjame despedirme de él.

–Gracias –le dio una media sonrisa, –pero creo que ahora tienes cosas más importantes que hacer que preocuparte por la maleta de Bam, es más perdón por interrumpirlos. –Miró al chico que estaba en calzoncillos. 

Jin analizaba de muy cerca a ese chico que estaba seguro era el hombre que su Tete le contó, no quiso interceder, quería que Taehyung tenga su espacio y haga lo que su corazón le dicte, se iba a ir pero cuando vio que ese chico lo fulminó con la mirada no dudó en acercarse.

–¿Pasa algo Tete? –habló para Taehyung pero su mirada estaba fija en Jungkook.

El azabache estaba muy enojado pero sobre todo triste, quería salir corriendo de ahí, no se sentía capaz de ver a Taehyung con otra persona.

–No pasa nada –habló Taehyung.

Jin se acercó a Taehyung y lo abrazó por la cintura, dejando un pequeño beso en su cuello. -Esta bien Tete, si quieres me voy y te espero dentro. Ah y si quieres me llevó los regalos que tu...-Miró a Jungkook de pies a cabeza, pues en el piso estaba un regalo y en la mano del azabache estaba otro. -Que tu amigo te trajo, -terminó la frase.

Jungkook suspiró con tristeza, ver esa escena le dolió mucho. Y claro que los dos regalos eran para Taehyung, pues los compró con mucho amor para su bonito, pero luego de lo que vio pensó que no tenía sentido darle el otro regalo.

–No –habló decidido, –el regalo que tengo en mi mano no es para Taehyung, pero la flor si –agachó la cabeza y apretó sus puños con fuerza, pues necesitaba controlarse para no saltar encima de ese chico.–-Lo mejor es que me vaya y si quieres despedirte de Bam hazlo, solo avísame luego o mañana para pasar por él.

–Ok –asintió Taehyung, –pero voy a necesitar un número o algo para ubicarte.

-Ah si, -volteó para buscar a su hermano y al verlo le hizo una señal con la mano para que se acerque.

Namjoon estaba muy pendiente de todo lo que pasaba en esa casa, por lo que no dudó en correr cuando vio el llamado de su hermano.

–¿Qué pasa conejito?

Taehyung al escuchar ese apodo levantó la mirada y vio al chico que pasaba la mano por el cuello de Jungkook atrayéndolo a su cuerpo.

–Nada –le respondió con una sonrisa, pues no quería preocupar a su hermano, aunque realmente en ese momento lo único que necesitaba era un fuerte abrazo. –Dale tú número por favor, él te llamará cuando se haya despedido de Bam.

–Ah claro –habló animadamente, ¿le doy una tarjeta o solo mi número? –le preguntó a su hermano.

–Solo tu número.

–Ok –Namjoon le dio su número al castaño que había sacado su celular y se había alejado un poco de Jin.

–Ok –habló Taehyung cuando ya tenía el número anotado. –¿Y como te agendo?

–Ah que distraído soy –Namjoon sonrió, –me presentó, yo soy..

–Agéndalo como Jungkook –habló el azabache. –Los dos somos uno mismo y siempre estamos juntos, así que cuando Bam este listo llamas a ese número por favor.

Taehyung lo miró algo sorprendido y asintió. Jin estaba muerto de vergüenza, pues todos lo miraban raro por estar en calzoncillos. –Tete voy a la casa. 

-Si cariño- Taehyung le respondió con una sonrisa y vio como Jin salió corriendo. -Disculpen a mi novio, es algo tímido, y ok Jungkook, esta bien. llamaré a ese número para que vengas por Bam.

–Perfecto –lo miró, –tal vez no venga yo, sino Nam, él cuanta con toda mi aprobación para estar con Bam.

–Bueno yo me retiro –se alejó un poco Namjoon, –Conejo te espero en el auto.

Namjoon estaba por irse pero su hermano no se lo permitió, –No Nam, yo voy contigo, juntos por siempre lo recuerdas.

–Ah si claro –respondió algo tímido, recordando que esa frase él se la decía cuando Jungkook era un niño.

–Adiós Taehyung –Jungkook lo miró triste, deseaba tanto por lo menos un abrazo de la persona que más amaba en el mundo. Se imaginó tantas veces como sería su encuentro, pero jamás pensó que lo iba encontrar en esa situación, por lo que fue muy doloroso ver que su bonito ya tenía a alguien más. Luego se agachó a la altura de su fiel amigo y depositó un suave beso en su cabecita. –Nos vemos luego mi pequeñito, te amo. –Se alejó suavemente y caminó fuera de la casa.

–Adiós Jungkook –fue lo único que Taehyung dijo y cerró la puerta con fuerza.

–Conejo si esa es tu manera de recuperar a tu chico, déjame decirte que es pésima. –Namjoon habló cuando vio que su hermano subió al auto, se dejó caer en el asiento y lloró desconsoladamente.

–Se acabó –habló Jungkook –ahora si lo perdí.

Namjoon lo tomó del cuello y lo atrajo a su cuerpo, lo abrazó fuerte mientras dejaba pequeñas caricias en su espalda. –Llora mi conejito, saca todo ese dolor.

Jungkook correspondió al abrazó de su hermano y lloró como un niño pequeño, –lo amo tanto Nam, él es mi vida. 

Namjoon lo veía con lágrimas en sus ojos, le dolía tanto ver a su hermano así, -pero debiste decirle eso conejo, y no hacer lo que hiciste. Ahora debe estar pensando que tu y yo somos novios, amantes o quien sabe que cosa.

–Lo sé –sorbió la nariz, –pero no me pude contener, sentí tantos celos al ver a ese tipo ahí, estaba en calzoncillos Nam, eso quiere decir que ellos...

–Bueno es el novio, Taehyung lo dijo y si son novios pues es normal que tengan intimidad.

–No- gritó, –Tae no es así, él no se acuesta con cualquiera, él hace el amor solo cuando esta enamorado y si se entregó a él es porque..

–Debes ser fuerte conejito y aceptar que el tiempo pasó y que..

-No puedo- lloró, -pensé que iba a poder pero no puedo, no puedo verlo con otro. me parte el corazón saber que me olvidó.

–Jungkook, –lo tomó de  las mejillas, –no crees que lo mejor sea regresar a Corea, estoy seguro que el tiempo y la distancia te ayudaran a olvidarlo.

–Yo nunca lo voy olvidar, nunca.

–Conejo si lo amas, debes aceptar su decisión y pensar que si él es feliz aunque no sea contigo tú también lo vas a ser.

–Talvez tengas razón, pero no me puedo ir sin despedirme de él, –se limpió las lágrimas. –Yo le prometí que volvería por él y le tengo que demostrar que le cumplí, pero si nuestro tiempo ya pasó debo aceptarlo. Viste lo hermoso que es, su cabello ahora es castaño, cuando lo vi por última vez era negro. –Sin poder contener su dolor lloró nuevamente, le dolía en el ama dejar a la única persona que ha amado en su vida. 

–Ok, si eso deseas hazlo, despídete de él, yo me encargo de los pasajes, los compraré para mañana mismo.

Taehyung estaba en su casa, acostado en el sofá de su sala. Tenía tantos pensamientos en su cabeza que sentía que en cualquier momento podía enloquecer.

–Tete –Jin lo llamó porque no sabía que cocinar y quería que el castaño le de un concejo.

–¿Qué? –lo miró.

–Ya que no quieres salir a comer voy a cocinar algo, ¿quieres algo en especial?

–No, –se levantó del sofá, –porque en unos minutos salgo para el casino y no puedo comer contigo. Sorry Jin.

–Oh, ok entonces lo mejor será que me vaya a mi casa.

–No, si quieres quédate, esta es tú casa y lo sabes.

–Ok Tete –le sonrió, –me quedaré un ratito, si quieres me quedo a cuidar a Bam mientras tu regresas del trabajo.

–No, Bam viene conmigo como todos los días, y más hoy que es nuestra despedida.

–Esta bien –le sonrió.

–Jin y hablando de Bam, mil disculpas por lo que te hizo, cuando te pedí que me ayudes a bañarlo no pensé que te iba a mojar todo, me siento muy apenado porque tuviste que estar en calzoncillos hasta que tu ropa se seque.

–No te preocupes –le regaló otra sonrisa, –Bam es lindo, un poco travieso pero me cae muy bien.

–Gracias, eres muy lindo –se acercó a él, lo abrazó y Jin depositó un dulce beso en sus labios.

–Me voy, –se alejó, –porque sino a Yoongi le puede dar un infarto si no me ve.

Jin asintió y le dio otro beso, el cual Taehyung correspondió, pues lo abrazó para profundizar más el beso.

Tiempo después

Taehyung llegó al casino, Bam lo acompañaba feliz como todos los días, pues ya se había acostumbrado a ese lugar, es más ese edificio lo conocía perfectamente. Pues hasta el décimo piso a subido en compañía de Taehyung.

–Kim Taehyung –gritó su jefe, –otra vez ese perro hizo sus gracias en el piso. Tú sabes cuanto dinero tengo que gastar para limpiar la basura de ese perro. Apesta horrible. Si sigo así voy a quedarme pobre.

–No exageres –le respondió. –Tú pagas por el aseo de este lugar, así que no estas gastando dinero extra. y para que lo sepas Bam come mejores cosas que tú, así que su popo no es apestosa.

-Si claro, si huele a flores, -se tapó la nariz, -se nota que ese perro come cosas muy finas.

–Eres un exagerado de lo peor, y si, Bam come mucho mejor que tú que solo te alimentas con las cosas más baratas. Estoy seguro que Bam contigo se moriría de hambre.

–Yo como muy sano –se defendió, –y no necesito comprar la comida más cara del mundo para alimentarme bien.

–Si ok, como digas –Taehyung no estaba con ánimos de pelear.

–Pero regresando al tema, odio a ese perro, le falta educación.

–Bam es muy educado, en la casa ladra cuando quiere hacer sus necesidades, no sé porque aquí se porta así, creo que le caes mal.

–Uy de verdad, y ahora que haré para caerle bien –soltó una carcajada. –Igual el sentimiento es mutuo porque yo lo odio.

–No lo odias –habló serio, –no seas mentiroso, porque la otra vez te vi jugando con él y haciéndole caricias.

–Bueno talvez no lo odio, pero cuando hace sus gracias en mi piso, me cae muy mal.

–Igual será la última vez –le respondió triste. –Es la última vez que traigo a Bam al casino.

–¿Qué? –lo miró sorprendido. –¿Y eso porque?

–Ahorita no quiero hablar –se acercó a Yoongi. –Solo necesito un abrazo.

Yoongi lo miró preocupado, pues las lágrimas de Taehyung empezaron a salir sin control. Por lo que no dudó en acercarlo a su cuerpo y abrazarlo fuerte.

–No me asustes Tae, ¿Qué te pasa?¿Por qué lloras? 

–Jungkook regresó –habló bajito, –mañana se llevará a Bam y no lo volveré a ver nunca más.

–Ah ya entiendo, pero Tae sabíamos que eso pasaría tarde o temprano, Bam no es tu perro. Yo te dije que no te encariñes con él, pero no me hiciste caso.

–Lo sé –sorbió la nariz, –pero lo quiero, me va doler mucho no verlo más.

Yoongi lo abrazó nuevamente, pues su amigo no dejaba de llorar, solo podía sentir que se escondió en su pecho y lloraba desconsolante.

–¿Por qué siento que tu dolor no es solo por Bam? –lo alejó suavemente y lo miró. –¿Te dolió verlo verdad? y no me digas que no porque te conozco como si te hubiese dado a luz.

Taehyung asintió, –no se que mierda me pasa, yo ya no siento nada por él, lo olvidé hace mucho tiempo, pero desde que lo vi sentí algo dentro de mi que me dolió, solo quería llorar, gritar de iras o de dolor, pero no podía hacerlo porque Jin estaba conmigo en la casa.

–Ya veo –Yoongi lo miró pensativo. –Pues dicen que cuando no ves por mucho tiempo a alguien que te lastimó, y de la nada se te aparece, el cerebro recuerda ese último momento de dolor y es como si vivieras otra vez todo lo malo que pasaste con esa persona, pero tranquilo que eso se te pasará rápido.

–Espero que sea así.

–Si, ya lo veras, pero lo que si debes hacer es hablar con él para que puedas dejar tu pasado atrás y cerrar ese capítulo de tu vida.

–¿Hablar con él?

–Si, porque si ya lo olvidaste y no sientes ningún resentimiento por él, pueden quedar hasta como amigos.

Taehyung pensó en esas palabras por unos segundos. –¿Tú crees que me este pasando todo eso que dices y que ese sea el motivo por el que quiero llorar como si no hubiera un mañana?

–Si, puede ser que tu cerebro te este jugando una mala pasada o que necesites hablar con él para dejar todo atrás o...-Yoongi lo miró sonriendo. –Hay otra explicación y es más fácil aún.

–¿Cuál? –lo miró atentó a sus palabras.

-Pues muy fácil mi querido Tae, la otra opción es que sigues enamorado de él y nunca lo olvidaste como tú lo pensabas.

hola gente linda.

He vuelto, espero que les haya gustado el capitulo, nos leemos pronto. los quiero

Ale