Prólogo
Narrador Pov's
Las puertas del instituto Forks se abrieron de una manera algo llamativa,todos miraron como ingresaban los Cullen's,los populares,guapos y misteriosos de la escuela.
Entre los vampiros,había alguien que destacaba.
Edward Cullen,el cual destacaba por vestir de negro cuando sus hermanos estaban vistiendo de blanco.
Pero todas las miradas fueron hacia atrás de Edward,donde venía un chico.
Un azabache de ojos azules,piel pálida y tenia un aura deprimente a su alrededor.
Daniel "Dani" Salvatore Mikaelson,el chico nuevo que habia ingresado hace apenas un año atrás.
Pero...
Todos se miraron preocupados por Daniel,esté no era él.
Y todos lo sabían.
Daniel había llegado siendo totalmente diferente y ahora estaba roto.
Todo por causa de Edward Cullen,su novio.
Pero aún así,nadie decia nada,solo lo hacian a espaldas del Salvatore.
Daniel miraba el suelo,decaído,al oir las voces de sus compañeros,tomó sus audífonos y se los colocó,agotado de oír lo mismo.
"Dani no era así".
"Todo es culpa de los Cullen's".
"Él esta destrozado".
"Ahora parece un emo por su aura deprimente".
Daniel apretó sus labios,bajando la mirada.
Cuando de pronto sintió su mano ser tomada.
Al sentir ese clásico tacto frío,alzó su mirada y se topó con la mirada sería de Edward,quien caminaba a su lado.
Eso fue suficiente,para que Daniel volviera a tener una mirada esperanzada,llena de amor y alegría.
Pero era una alegría quebrada,no era la alegría verdadera y que antes caracterizaba al Salvatore.
Estaba más roto que nada.
Los demás Cullen's solo miraron de reojo aquella interacción de parte de su hermano cobrizo y el menor del grupo.
Alice sonrió alegre,ella sabía que pronto todo volvería a ser como antes.
Pero los demás no sentían lo mismo.
Jasper suspiró innecesariamente y siguió avanzando,sintiendo las emociones del "novio" no oficial de su hermano Edward.
Emociones apagadas,decaídas,eran tan abrumadoras que causaban en Jasper deprimencia.
Mientras que Rosalie y Emmett se sentían mal por el menor,él no era así,su aire de cachorro alegré y enérgico desapareció,ahora era el aire de un perro deprimido,esperando una miserable y simple acaricia de su dueño para saber que todavía lo quería.
Nadie dijo nada.
Daniel sonrió un poco,viendo el agarré de Edward en su mano y solo recargó su cabeza en el hombro del Cullen,frotando su mejilla,esperando más contacto,pero no paso de ese agarre en su mano,pero aún asi estaba contento solo con ese miserable agarré.
Qué quebrado estaba.
Y todo por culpa del amor que tenía por el vampiro cobrizo.
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