Hanagata Kei estaba sentado en un descolorido sofá, en el antiguo laboratorio de Irisviel Von Dark en la fábrica farmacéutica abandonada, recibiendo información sumamente importante desde su laptop.

—Saber —llamó e inmediatamente su Servant tomó su forma física—. Hoy iremos por el Archer que nos atacó aquella noche durante tu enfrentamiento con Avenger.

—¿Qué es lo que sabemos? Es imprudente lanzarnos a la batalla sin un plan —comentó cruzado de brazos.

—He localizado el lugar donde fueron disparadas las flechas —respondió, mostrándole los documentos—. Empresas Bell tiene un enorme rascacielos en esta isla, el dueño como su nombre lo indica es Sherrinford Bell, uno de los más grandes empresarios de la industria automotriz de Inglaterra. Tal parece que ha tenido lazos con el crimen organizado, según la policía de Londres, durante cuarenta años los ha ayudado a traficar armas y drogas por Europa y el Caribe, pero nunca pudieron comprobarlo.

—Sin duda habrá seguridad —agregó Musashi, pensativo. Tomó la libreta de Hanagata y dibujó el edifico rápidamente—. El sigilo sería nuestro mejor aliado y la única manera fiable de entrar sería por debajo, ya que Archer debe estar vigilando las veinticuatro horas del día con su Clarividencia. 

—Bien, usaremos las alcantarillas para movernos hasta el estacionamiento subterráneo —dijo Hanagata, tomando todo su equipo para la misión.

En lo más alto del rascacielos, Sherrinford Bell se encontraba sentado en su escritorio, tomando el té mientras jugaba solitario en su computadora.

—¿Me llamó, Máster? —preguntó Archer, llegando a la oficina.

—Ah, Archer, pasa pasa —indicó mientras encendía su pipa—. Sírvete algo de té si quieres, es de tu tierra natal, la India.

—Gracias, pero debo rechazar su oferta, Máster —respondió, acercándose a su escritorio.

—¿Qué puedes decirme de Karna? —preguntó, pensativo—. Tengo entendido que te enfrentaste a él varias veces.

Archer se quedó en silencio, mirando a su Máster con un rostro inexpresivo.

—La mera presencia de Karna en esta Cruzada cambia su rumbo por completo —respondió tras pensar la respuesta varios segundos—. Su poder sobrepasa al de muchos Servants.

—¿Crees poder derrotarlo? —preguntó con seriedad—. Después de todo, tengo entendido que los Servants son débiles a las cosas que los mataron en vida y tú fuiste quien lo mató en primer lugar. Sin lugar a dudas considero que tienes más oportunidad que los Servants que aparecieron aquella noche, pero me gustaría saber tu opinión.

—Mi victoria sobre Karna dependerá de que tan bien juguemos nuestras cartas —respondió con una mano en la cintura—. Los dos tenemos ventajas y desventajas sobre el otro.

—Entiendo, entiendo —Sherrinford le dio un sorbo a su té antes de seguir hablando—. Puedes retirarte, pero antes —sacó varios billete de su bolsillo, entregándoselos a Arjuna—. Cómprate algo de las máquinas expendedoras, considéralo un regalo por ser un buen socio, es lo mínimo que puede ofrecerte, ya que no me has dicho mucho sobre lo que te gusta.

Archer tomó el dinero, más por cortesía que por gusto y se retiró.

En los pasillos usó el dinero para comprarse una lata de refresco y regresó a la azotea del lugar para seguir con su vigilancia de veinticuatro horas, esperando la aparición de más Servants. Sin embargo, una risita siniestra lo pone alerta, armándose con su arco apunta hacia el origen de la risa.

—Arjuna, el Héroe Dotado, hijo del dios Indra y la mortal Kunti. Aquel que mató a traición a Karna sin que él pudiera defenderse —decía la siniestra voz de una mujer.

De entre las sombras, la oscura figura de Jacques de Molay hace acto de presencia.

—Es muy imprudente de tu parte el aparecer aquí sin más, Foreigner —dijo Arjuna, sin dejar de apuntarla—. La imprudencia se paga con la muerte en el campo de batalla.

—Ah, pero no vengo a pelear, Arjuna —dijo con las manos alzadas, pero tomándose todo esto a juego—. Vengo a ofrecerte un trato.

—"¿Un trato?" —interrogó confundido.

—Dentro de poco, el Servant de clase Saber Miyamoto Musashi y su Máster, un japonés llamado Hanagata Kei vendrán para acá —explicó con un brillo maligno en sus ojos—. Quiero que mates a los dos.

—¿Por qué debería creerte? —preguntó indiferente.

—Si los matas, te diré donde se encuentra Karna y la mejor manera de matarlo —respondió con una sonrisa maliciosa.

Arjuna bajó su arco, dudoso.

—¿Cómo puedo confiar en tí? —preguntó algo incrédulo.

—Mi Máster es un maestro en el uso de los familiares, él tiene espías por toda la ciudad —respondió atrayendo a las palomas familiares a sus brazos— ¿Conoces el dicho "un pajarito me lo dijo"? Pues con mi Máster es muy literal en eso.

Arjuna dio media vuelta, haciendo una seña con el dedo índice para pedir un segundo para pensarlo.

—Mi instinto me dice que ella trama algo entre manos —reflexionaba en sus pensamientos—. Es una oferta tentadora, podré deshacerme de una vez y para siempre de Karna y cumplir mi deseo... la soledad eterna...

—Como adelanto, te diré que la mejor manera de matar a Karna y la más satisfactoria es matar a su Máster —dijo sacando a Arjuna de sus pensamientos y haciendo que la mire con indignación—. Solo piénsalo, un Servant no puede vivir sin su Máster y como posiblemente sabrás al haber peleado contra él en vida, Karna es un hombre que valora la amistad y es sumamente leal. Cuando luché contra él la primera vez, era como un perrito faldero con su Máster y ¿cómo crees que se pondrá ese perrito si su dueño muere de la forma más horrible jamás imaginada?... Sin duda, sentirá la mayor de las penas antes de morir.

Arjuna se quedó mudo y dándole la espalda otra vez a Foreigner se puso a pensar.

—Justo como aquella vez, una táctica cobarde indigna de un héroe, pero... —una sonrisa perversa y maquiavélica se forma en su rostro—. Estaría un paso más cerca del Grial, mi victoria sobre Karna sería del 100% y su devastación emocional será lo más satisfactorio de todo. Primero acabaré con Saber, una vez que me diga su ubicación acabaré con Foreigner y por último él.

Arjuna voltea a ver a Foreigner, extendiéndole la mano.

—Es un trato —dijo con su típica indiferencia e inexpresión.

Foreigner y Arjuna estrecharon manos en señal de que un malicioso trato estaba hecho. Cuando ella se retiró en su forma espiritual, Arjuna comenzó a reír con maquiavelismo.

En la parte más baja del rascacielos, Hanagata y Musashi salieron de las alcantarillas y andaban con sigilo por el lugar, hasta llegar al ascensor, llaman al ascensor y al abrir las puertas Hanagata altera las cámaras de seguridad con su hechicería, lo que les permite meterse sin problemas. Inesperadamente el ascensor se detiene y Musashi corta las puertas con sus espadas; Máster y Servant terminaron en el enorme y elegante vestíbulo, todo estaba callado, pero ese silencio solo los puso aún más en guardia. 

El silencio es roto cuando varios magos salieron de sus escondites, lanzándoles sus hechizos ofensivos a quemarropa, por suerte ellos dos son rápidos y se ponen a cubierto detrás de unos pilares.

—¿Cómo diablos se enteraron que vendríamos? —decía Hanagata, molesto por tener que cambiar de planes.

—Ni idea, pero adaptarse a la situación es una virtud en un guerrero —dijo Musashi, empuñando con fuerza sus dos katanas—. Ese es el arte del Niten Ichi Ryu.

Musashi corrió entre los ataques, cortándolos sin ningún problema, ya que leía a la perfección sus patrones de ataque. De esta manera, mató a varios de sus atacantes con un solo tajo.

—Hmp... como se esperaría del legendario Miyamoto Musashi —dijo Hanagata, saliendo de su escondite para contraatacar—. Te presento la hechicería heredada del clan Hanagata... ¡Hechicería elemental eléctrica!

Los electrodomésticos del lugar comienzan a hacer cortocircuito, debido a que la electricidad de su interior había sido robaba por Hanagata quien junta todo en las palmas de su mano para disparar rayos eléctricos que dejan noqueados a los enemigos cercanos. Tras derrotar a todos los enemigos, el jefe final del piso hace acto de presencia en las escaleras, cargando su arco y disparando una flecha hacia Hanagata, la cual es bloqueada justo a tiempo por Musashi.

—Oh, ¿esta es la habilidad del creador del estilo Niten Ichi Ryu? —mencionó Arjuna con un rostro inexpresivo, pero con genuina admiración—. Miyamoto Musashi, el legendario Ronin, me siento honrado de conocerte... ahora tienes que morir.

—Uhm, finalmente puedo apreciar al Archer de aquella noche —dijo Musashi, con una sonrisa—. Adelante, tengamos un duelo.

—Me adelantaré en busca de su Máster —dijo Hanagata, yendo por otro tramo de escaleras.

—No escaparás —dijo Arjuna, disparando nuevamente, pero la flecha es cortada por Musashi.

—¡No olvides que peleas contra mí, Archer! —exclamó Musashi, emocionado.

https://youtu.be/KBVutQMslaA

—Como desees, Musashi —dijo Arjuna, cargando su arco.

—Es la primera vez que me enfrentaré a un arquero cara a cara, espero aprender de tí —dijo, adoptando su postura de combate legendaria con sus dos espadas.

Arjuna se aprovechaba de su distancia para atacar, lanzando incontables flechas, haciendo que Musashi se quede en la defensiva, ayudándose de los pilares para cubrirse mientras corría entre ellos. Para quitarle lo único que lo defendía, Arjuna carga gran energía en su arco y dispara una cuchilla candente, Musashi se desliza en el suelo para esquivarlo, buena elección debido a que esa cuchilla cortó todo lo que se atravesó en su camino. El Ronin corrió hacia Arjuna, este lanzaba sus flechas, pero Musashi ya había memorizado su patrón de ataque y se había adaptado a él, por los laterales, por sus piernas, por su cabeza, Musashi había previsto las partes de su cuerpo que Arjuna atacaría. Una vez que estaba a pocos metros de él, saltó lo más fuerte que pudo para acabarlo con un solo corte.

—Voy a tener tu cabeza, Archer —sentenció con la fría mirada de un samurai.

Arjuna bloquea el ataque con su arco, sacando dos cuchillas de maná ardiente de sus extremos y usando su arco como espada para así contraatacar, Musashi tenía que tener cuidado con esas cosas, ya que eran igual de calientes que la espada de Avenger. Parecían igualados en este combate cuerpo a cuerpo, pero no pasó mucho tiempo para que Musashi se sobrepusiera a su oponente, llegó un punto en que en cada choque de armas, Musashi lograba realizar cortes en el cuerpo de Arjuna al desviar las cuchillas de su arco. 

Arjuna al ver su desventaja lanza otra cuchilla que explota y los separa, una jugada arriesgada ya que ambos salieron heridos de la explosión, pero dicha explosión los alejó lo suficiente como para que Arjuna volviera con su ventaja principal, la cual es la distancia. Usando su Ojo del Arquero, apunta y dispara flechas que van dirigidas a los puntos vitales de Musashi, pero este las desvía y las corta como gusanos.

—Imposible, no podemos estar igualados en fuerza —se decía en sus adentros—. Él es un simple vagabundo y yo soy el hijo del dios Indra, yo... yo soy semi dios.

—Archer, eres alguien bastante fuerte, no me estás poniendo esto nada fácil —declaró Musashi con una sonrisa—. Mi mayor objetivo en esta Cruzada es enfrentarme contra oponentes fuertes y gracias a tí estoy consiguiendo eso, muchas gracias.

—Yo también quiero cumplir un objetivo en esta Cruzada —dijo con indiferencia—. Por eso debo eliminarte a tí, a Foreigner y a Lancer.

—¿Foreigner? ¿Lancer? ¿Qué pasa con ellos? —preguntó Musashi, intrigado.

—Tal vez lo hayas notado alguna vez, pero Foreigner es un lobo con piel de oveja, esas personas son peligrosas —explicó en tono críptico—. Además tengo asuntos que resolver con Lancer.

Arjuna combinaba el lanzamiento de cuchillas ardientes de maná y sus flechas en ataques sumamente rápidos. Musashi vuelve a la defensiva, esquivando todo lo que le lanza al haber cambiando su patrón de ataques.

—¿Por qué no quieres morir, Musashi? —preguntó frustrado.

—Si te lo dejara tan fácil, sería un deshonor contra tí como espíritu heroico —respondió avanzando hacia adelante, cortando todo hacia su camino.

Arjuna calcula su siguiente disparo de forma milimétrica y dispara con gran rapidez, Musashi como siempre corta la flecha, pero lo que no esperaba era que Arjuna había lanzado otra con 0, 1 segundos de diferencia y justamente detrás de la primera que lanzó para que fuera casi imperceptible, a Musashi no le da tiempo de cortarla, por lo que mueve su cuerpo lo más rápido que puede y recibe la flecha en su hombro izquierdo.

—Te tengo —dijo con frialdad, listo para dar el golpe de gracia.

—Quinta fuerza... Ahora —susurró Musashi, adoptando otra postura de combate.

Sin importar las flechas que eran lanzadas y sus patrones, Musashi fluía a través de ellas como si nadara en el océano, estaba en total relajación mientras dejaba que su instinto lo guiara hasta la victoria.

—¡Imposible! —exclamó Arjuna, asombrado.

Con la velocidad de un rayo, Musashi apareció detrás de Arjuna y de la nada, un corte en equis apareció en su pecho, cayendo al suelo. Quinta Fuerza era una habilidad en la que la mente de Musashi se calma por completo y simplemente adoptando una nueva postura, se deja llevar por el combate

—¿Cómo fue que eso fue posible? —musitó Arjuna, frustrado.

—Décadas de entrenamiento, así de simple —dijo Musashi, viéndolo de reojo—. Al final de mi entrenamiento, había entendido el camino del Vacío.

Miyamoto Musashi alguna vez fue un guerrero que combatió en incontables batallas, batallas que parecían imposibles de ganar, con decenas de enemigos con distintos estilos y distintas habilidades.

Pero la final, siempre resultaba vencedor, debido a que lograba adaptarse a la situación con rapidez.

Tantos años de entrenamiento, duelos, dolor, aprendizaje, reflexión, disciplina, tantas experiencias vividas. Todo eso lo llevó a alcanzar el Vacío.

—En el Vacío, todos somos infinitos, al ser infinitos, somos invencibles —explicó con una sonrisa, como si le hablara a un niño—. Si tienes esa mentalidad Archer, nunca perderás una sola batalla. Esa es la clave de todo.

—Aún no puedo perder, aún no he sido derrotado —declaró, levantándose nuevamente, cosa que forma una sonrisa en el rostro de Musashi—. Tengo una pelea pendiente con Lancer, no puedo permitirme perder ante nadie hasta que le haya ganado.

—Tu convicción de guerrero es formidable —comentó Musashi, con admiración— ¡Lánzame tu mejor ataque!

—¡Máster, necesito su ayuda aquí y ahora! —exclamó Arjuna, recibiendo maná—. Expansión del dominio sagrado. Dominio asegurado. Límites de aplicación del castigo divino... Todo aprobado. Por la ira de Shiva, aquí termina tu vida. ¡Pashupata!

Una esfera de energía se forma en la palma de su mano y la lanza, Musashi corre para evitarlo y una gran explosión destruye todo el vestíbulo, dejando solo escombros. Musashi se quita algo de los escombros de encima y mira por sus alrededores, ya no es capaz de sentir la presencia de Arjuna. Por lo que, preocupado, va hacia su Máster.

https://youtu.be/V5M2WZiAy6k

Hanagata Kei se abría paso entre varios guardias armados y algunos magos que se cruzaban en su camino, llegando a un segundo ascensor que lo dirigió hacia lo más alto del rascacielos. Abrió la puerta de una patada y casi de inmediato, Sherrinford Bell abre fuego con una AK-47, obligando a Hanagata a cubrirse a un lado de la puerta.

—¿Ibas a alguna parte, jovencito? —preguntó Sherrinford con euforia—. Estos jóvenes tan apurados y temerarios.

—Vine simplemente a acabar con usted, viejo —declaró Hanagata, absorbiendo la electricidad de los bombillos cercanos.

—Inténtalo si puedes, ¿piensas que me asustas niño? —preguntó, tomando su arma con firmeza—. He estado en el campo de batalla desde hace mucho tiempo, te superó en experiencia.

—Y yo te supero en juventud y habilidad —dijo con una sonrisa, corriendo a gran velocidad.

Este era el poder de la Magia Elemental Eléctrica, potenciar las habilidades físicas de su usuario a formas sobrehumanas, pero ese aumento es temporal ya que constantemente el usuario debe recarga energía como una batería humana.

Con su velocidad, Hanagata esquivaba las balas y logra asestarle un golpe en toda la mandíbula del viejo, pero la poca energía de los bombillos se había acabado.

—Eso me dolió, ¿qué tienes en la mandíbula? —preguntó en pose de combate.

—Tengo placas de metal en la mandíbula, cráneo y fémur izquierdo —dijo mientras reía y tomaba un bastón para caminar hecho de titanio.

—¿No puedes caminar sin tu bastón, abuelo? —preguntó Hanagata a forma de broma.

Hanagata recibe como castigo de esa soberbia un fuerte golpe que le destroza un par de costillas.

—Bartitsu, el arte marcial inglés que combina el jiu-jitsu y la lucha callejera de bastones y paraguas —explicó con una sonrisa—. No subestimes a este abuelo, jovencito.

Para su edad, Sherrinford no solo era un buen artista marcial, sino también un mago con mucha experiencia, que se había especializado en el Finn Shot del hechizo Gandr, su velocidad de disparo era prodigiosa. Las paredes de su oficina estaban siendo destrozadas con cada disparo que Hanagata esquivaba, recibirlos directamente sería mortal.

—¿Qué te parece? Para ser un hechizo bastante simplón de Europa, tras tantos años de uso lo convertí en un arma letal —relató Sherrinford con tono soberbio.

—No subestimes a alguien del Clan Hanagata —replicó con una mirada sombría.

Mientras Hanagata corría por el lugar para evitar los ataques de Sherrinford recargaba su hechicería. Una vez listo, un aura electrizante de color celeste rodeó su cuerpo y atacó a su oponente con una serie de golpes a gran velocidad, concluyendo con un golpe en el plexo solar que dejó al anciano tirado en el suelo sin aire.

—Se acabó —dijo sacando una pistola y apuntándola a su cráneo.

Repentinamente, la pistola queda clavada en la pared por una flecha, obra de Arjuna, quien hace de presencia en el lugar.

—¡Hahahaha! Se acabó Hanagata Kei —dijo Sherrinford, mientras se levantaba con dificultad del suelo— ¿Qué esperas, Archer? ¡Mátalo!

Arjuna miró fijamente hacia su Máster, lo vió en muy mal estado con múltiples huesos rotos y daño en sus órganos vitales debido a la hechicería del japonés. Él se había dado cuenta de que no podía cumplir su objetivo con un Máster tan débil como él, por lo que su decisión ya estaba tomada.

En menos de un segundo, la sangre empezó a salir en chorros cuando Arjuna le cortó la mano con los Sellos de Comando a Sherrinford Bell, quien cayó al suelo retorciéndose de dolor.

—¡H-Hijo de puta!... ¡Yo soy tu maldito Máster, se supone que deberías obedecerme! —gritó Sherrinford con una mezcla de dolor, desconcierto e ira.

—Cortaré mi contrato con usted, Máster —declaró Arjuna, sacando unos billetes para tirarlos al suelo—. Le devuelvo su regalo, ya no me lo merezco. Solo merezco su odio por esta traición.

—¡¿Crees que solo mereces eso, Arjuna?! —gritó, arrastrándose, intentando llegar hasta él—. Mereces el destino más trágico que pueda haber en el mundo, mereces estar alejado eternamente de tu deseo para el Grial... ¡Mereces estar en el más profundo de los infiernos! ¡Te veré en el infierno, Héroe Dotado Arjuna, recuerda las palabras de Sherrinford Amadeus Bell!

Una flecha se clava en su cráneo, matándolo al instante. En su interior, Arjuna tenía una personalidad la cual no dudaba ni un segundo en conspirar y usar cualquier truco sucio y cobarde para obtener la victoria, era una segunda personalidad sumamente oscura la cual le avergonzaba y no quería que nadie más la viera. Fue esta misma personalidad que decidió traicionar a su Máster.

Aún quedaba un testigo, por lo que Arjuna cargó su arco y trató de matar a Hanagata, pero Musashi apareció justo a tiempo para salvar a su Máster. Sin más opciones, Arjuna tomó los Sellos de Comando de la mano de su Máster y se retiró del lugar al destrozar la ventana del edificio.

—Traicionó a su propio Máster —dijo Musashi, asombrado por tal deshonra. 

—Acción Independiente, una de las habilidades de clase de los Archers —explicó Hanagata, frunciendo el ceño—. Dicha habilidad hace que los Archer no dependan tanto de un Máster, consumiendo poco maná, un arma de doble filo. Arjuna seguirá existiendo en este mundo durante quién sabe cuánto tiempo, pero posiblemente el suficiente como para encontrar a un nuevo Máster.

—Ya tendremos otra oportunidad de buscarlo, por ahora, hay otra cosa del que preocuparnos —advirtió Musashi con una mirada seria—. Arjuna posiblemente habló con Foreigner.

—¡Maldición! Duchamp nos traicionó —exclamó golpeando una pared cercana—. La próxima vez que lo encontremos, no hay que dudar en matarlo.

Cinco días después de la lucha, una reunión se llevó a cabo en un sombrío y macabro lugar. Irisviel Von Dark estaba sentada, mirando cara a cara a Arjuna. El Servant traidor había invadido el lugar, Caster se encontraba presente, con sus armas en mano en caso de que haga cualquier movimiento.

—¿No vas a matarme? —preguntó Irisviel, arqueando una ceja.

—Vine para formar un contrato contigo, mi anterior Máster fue asesinado —respondió obviamente mintiendo.

La maga con heterocromía mostró una sonrisa, por lo que respiró hondo antes de proceder a hablar.

—Tengo un talento innato para leer a las personas, simplemente me parecen un libro abierto —contó mirando con interés a Arjuna—. Tal parece que ese don también se extiende hacia los Servants, porque sé que me mientes, querido —admitió para sorpresa de Arjuna—. Eres un Archer con una excelente Acción Independiente, por lo que puedo suponer que terminaste matando a tu anterior Máster.

Arjuna se cubrió el rostro lleno de vergüenza porque descubrieron sus actos viles actos tan fácil.

—Lo ví a los ojos antes de clavarle una flecha en la cabeza —dijo temblando—. Aunque no dudé ni un segundo en matarlo.

—Puedo entender lo que te pasa —confesó Von Dark.

—¿Puedes entender la oscuridad de mi interior? —preguntó, intrigado—. Una oscuridad que me obliga a cometer actos cobardes, malvados y despiadados.

—Todos los seres humanos tienen algo de oscuridad en su interior —respondió con una mirada calculadora—. Pese a ser el hijo de Indra, sigues siendo bastante humano para mí.

—Eso es lo que me vuelve un héroe deshonroso —admitió con vergüenza.

—No, no, eso solo te hace alguien digno de mi interés —corrigió con una sonrisa, la cual impresionó a Arjuna—. Al final, mi deseo es liberar a la humanidad de sus deseos malignos, quiero que la paz reine en sus corazones y creo que comenzaré primero contigo.

—¿De verdad harías eso? —preguntó confundido—. Traicioné y maté a mi Máster anterior.

—¡Ha! Como si eso pudiera detenerme, con dos Servants a mi disposición mi deseo podrá ser realizado —dijo con elocuencia y una sonrisa—. Sin embargo, si quieres lograr tu deseo, tendrás que aceptar la oscuridad en tu corazón, aceptar toda tu naturaleza.

—¿Por qué debería aceptar algo que justo quiero eliminar de mí? —inquirió frunciendo el ceño.

—Porque rechazar esa parte de tu personalidad es lo que te limita y en esa Cruzada llena de Servants poderosos, no puede limitarte si quieres cumplir tu deseo —explicó poniéndole sus manos sobre sus hombros—. Solo imagina lo que puedes lograr si aceptas tu oscuridad hasta que consigas el Grial. Tú obteniendo tu eterna soledad y yo, purificándote a tí y al resto de los humanos de su maldad, ¿no será maravilloso?

Una sonrisa maliciosa comienza a formarse en el rostro de Arjuna.

—Sí, será maravilloso —respondió con tono maquiavélico—. Te reconozco como mi Máster, señorita Von Dark.