50. I'm Kai
— Por que quiero matarlo. Es un idiota, Caroline. Probablemente jamás vuelva a dormir con el en la vida.— reprocho mientras guardo mis libros en la mochila
— Dices eso, pero no te creo.— ruedo los ojos — Lo amas. Pero apoyo el "es un idiota"— resoplo
— Me remplazó. Y con una castaña. No se si me siento ofendida o halagada.— sonríe — Parece que soy muy fácil de cambiar. Al menos lo hubiera hecho con una mejor versión de mi.— cierro mi mochila
— ¿Te das cuenta que somos la viva imagen de una Barbie tradicional?— se burla y hago una mueca
— Vendrías siendo tu. Yo sería más como Tiffany Valentine.— suelta un risa y vemos entrar a Elena
— Haré trabajo voluntario en el hospital hasta las dos, luego podemos compartir el auto para ir a la laguna.— sugiere la castaña mientras ayudo a Caroline a desempacar
— No creo hacer esa cosa. Tengo trabajo que hacer. Aún debo descubrir como salvar a nuestros amigos de la muerte.— aclaro y suspira
— Entiendo que quieres hacer todo lo posible por salvarlos. Pero te has excedido. Te he visto leer hasta quedarte dormida. Necesitar a tus amigos no es debilidad, momentáneo o como sea.— Elena me ofrece un vaso de café
— Díselo a Stefan, quien no necesita a nadie.— respondo entre dientes
— Tenle paciencia. Perdió a su hermano.— alzo mis cejas — Claro, dicho hermano era un despiadado homicida maniaco, pero aún así.— volteo a ver a Caroline sorprendida — ¿Que?— regreso mi vista a ella
— Nada. Debo irme. Voy a comer con Enzo, y...— Caroline me interrumpe
— ¿Enzo?— pregunta incrédula y asiento — Salen juntos en un viaje, ¿y de repente se ven para desayunar? — suspiro
— Si, eso creo. Es irónico, se volvió de las personas más estables en mi vida.— expreso sincera y ambas me ven totalmente sacadas de onda
— Bueno. Invítalo a la fiesta.— sugiere Elena y bufeo
— Elena, por favor...— me quejo
— Vamos. Matt se tomará la tarde libre del entrenamiento. Tyler le dio un descanso al equipo de práctica, Noah se lo agradece. Incluso Jeremy vendrá. Desde milenios no nos juntamos. Será divertido.— hago una mueca en inconformidad — No me hagas invocar la opinión extrema. Por que te enviaré selfies. Cada cinco minutos.— río — A ambas si no van.— suspiro
— Está bien. Iré a la fiesta.— celebra — No hay tanto drama. Las veo allá.— le paso por un lado saliendo de la habitación
— Hola, hace tiempo que no te veo.— me dice Noah uniéndose a mi camino
— ¿Qué le hizo Alaric a Elena?— cuestiono preocupada
— Solo se que olvidó lo que sea que le vio a Damon. Hay que mantenerlo así.— aclara y bebo café
— Pasé la noche con ella y es raro. No parece ser como antes.— opino
— Si, es por que es feliz. ¿No es el punto?— hago una mueca
— Si, eso creo.— nos detenemos y me da un beso en la mejilla
— Debo irme. Te veo luego...— asiento y Tyler me aborda
— Oye, pregunta rápida.— frunzo el ceño
— Respuesta rápida: No.— aclaro hostil y suspira
— ¿Sigues enojada conmigo por lo de Luke?— asiento — Mira, lo siento. Prometo no volverlo a hacer. Quiero que estemos bien.— suspiro
— Bien. ¿Qué quieres?— me cruzo de brazos
— Tendremos una fiesta hoy.— asiento — ¿Crees que tu hermana pueda darnos uno o dos barriles de cerveza? — hago una mueca
— Ella te odia más por lo de Luke. No considero buena combinación tú con alcohol y mal temperamento.— sugiero
— Trabajo en eso, ¿si? Cuido lo que bebo, evito lo que me hace enojar.— menciona sincero
— Intentaré hablar con ella. No prometo nada.— sonríe y se acerca a darme un beso en la mejilla
— Gracias, Cami. Eres la mejor.— se aleja celebrando y sonrío
─── ⋆⋅☆⋅⋆ ───
— Tyler, el alcohol, y mi hermano. ¿Por que esa combinación suena terrible y familiar?— se queja Liv mientras le expongo la situación — ¿Como está tu traquea Luke?
— Siendo justos, se disculpó.— explica el rubio y sonrío
— Dice que está mejor. Está dando lo mejor de sí para que funcione. No te lo pediría si no supiera que no es un peligro.— sugiero y resopla
— Dile que pase al bar después de la una. Veré que puedo hacer.— sonrío asintiendo
— Lo haré.— muestro felicidad
— Lo estás haciendo otra vez.— le dice Luke a Liv y frunzo el ceño
— ¿Qué cosa?— pregunta confundida
— Cuando eres perra por que gusta una persona.— alzo mis cejas — Es muy obvio. No te culpo. Es sexy.— cubro mi boca sorprendida
— Oh por Dios! ¿Te gusta Tyler Lockwood? — expreso incrédula y menea su cabeza negando
— No, es un idiota.— expresa a la defensiva y Luke y yo nos damos una mirada
Era tan obvia.
— Díselo a tu cara, linda.— resopla — A todo esto, ¿donde está Chris? — los veo a ambos
— Digamos que nuestro hermano es un promiscuo. La universidad lo hizo mucho más.— aclara Luke y alzo mis cejas
— Olvida que pregunté. Tengo que irme. Los veo luego.— me despido y suena mi celular
¿La puntualidad no es virtud tuya, preciosa?— Enzo
Bajo el celular y una sonrisa se forma en mi rostro. Me recordaba a una persona. A una que extraño. Comienzo a teclear y choco con alguien
— Oh, lo siento.— alzo la mirada y me quedo inmóvil
— Camille.— expresa sorprendido y siento que el corazón se me detiene — Yo...— le paso por un lado con el nudo en la garganta — Tenemos que hablar.
— Yo no tengo nada que hablar contigo, Stefan. Dejamos las cosas muy claras.— me freno para verlo — Aléjate de mi.
— Quería pasar a saludar. Las cosas no quedaron bien entre nosotros anoche y...— lo interrumpe
— ¿Te refieres a la parte en la que me dijiste que no podrías estar conmigo y que te dejara? Bien, empiezo por ahí.— le paso por un lado
— Cami.— me nombraba mientras sentía el nudo en el estómago, era muy complicado estar alejado de él
Después de unos minutos llego a la cafetería donde un impaciente Enzo ya estaba esperando.
— Pensé que ya no llegabas.— se queja y me siento, ya tenía comida
— No seas exagerado.— agarro una patata — ¿Entiendes las reglas?— la como
— Si, regla uno: No le digas a Elena que estaba enamorada de Damon o me asesinas.— asiento — Regla dos: No hacer referencias a Damon o me asesinas.— asiento — Regla tres: Usar bloqueador solar.— me rio y le doy un empujón
— No te burles de mi. Es importante que dejemos que viva su vida feliz como quiere, ignorante de los problemas. Al menos una de las dos no tiene que ser torturada su recuerdo.— aclaro y como más patatas
— Sonó comprensivo y sentencioso a la vez.— se burla y suspiro
— Este verano que estuve fuera me di cuenta que aveces es más fácil ignorar los problemas que encontrar solución. Si les das atención siempre van a estar ahí, pero si no...— mastico — Solo el dolor estará a la deriva. La apoyo. Hizo lo necesario para dejar de matar personas inocentes. No significa que disfrute estar en mi propia miseria.— me ve fijamente
— Pues te apoyaré.— sonrío
— Lo aprecio. En serio.— expresó sincera y tomo café — Eres amable cuando no te comportas como un verdadero idiota.— se ríe
Hace tanto no disfrutaba una taza de café. Recuerdo ser adicta desde los catorce.
— Pero, no soy Stefan.— especifica y se me baja la sonrisa
— Regla número cuatro: No vuelvas a mencionar a ese patán o te...— me interrumpe
— O me asesinas. Entiendo.— sonrío orgullosa y se levanta, noto una mancha
— ¿Es sangre o pastel? Por favor di pastel.— sugiero y suspira tocando la mancha
— Esto sería...— lo prueba — Shirley.— hago gesto de disgusto — Fue una comida especial. Este restaurante está bien surtido.— resoplo y me levanto impidiendo su camino
— Dime que la tomaste, comiste, borraste.— sugiero y me ve fijamente
— Si haces las dos primeras, la tercera es innecesaria.— alardea y lo veo irritada
— ¿La asesinaste?— murmuro exaltada
— No te hagas la sorprendida.— alzo mis cejas
— lo lamento, la muerte me impresiona y lleva a reportes de personas perdidas...lo cuál lleva a...— me interrumpe
— ¿Investigación del sheriff?— asiento — Que miedo, ya tengo tres avisos, uno más está bien.— me pasa por un lado y suspiro agobiada
Este es peor que Damon.
Suena mi celular y veo el nombre de Elena en la pantalla, inhalo hondo y atiendo
— ¿Qué sucede?— salgo de la cafetería
— Convencí a Stefan de venir a la fiesta.— frunzo el ceño y voy a mi auto
— ¿Hiciste que?
— Deja de ignorarlo, hacerlo no va solucionar nada. — ruedo los ojos
Sentía la ironía en el aire.
— No tengo ganas de lidiar con Stefan.— aclaro y abro mi puerta — El me rompió el corazón y yo fingiré que no lo conozco.
— Dijo que venía a disculparse.— bufeo
— ¡Mentira! Es algo que hace ahora. Stefan hace muchas cosas nuevas.— me quejo
— Demasiado tarde. Prometiste venir y más vale que lo hagas.— suspiro — ¿Irás en tu auto o te llevo?
— Iré en mi auto, te veo allá.— cuelgo y subo a mi auto
Supongo que tengo que divertirme aunque sea un poco. No dejo de pensar en Damon. El es mi mejor amigo y se siente un vacío sin el presente. Un dolor en el pecho que parece no desaparecer.
─── ⋆⋅☆⋅⋆ ───
Narrador omnisciente
— Bueno, ella viene.— se sube Elena al auto con Stefan, Noah y Atlas de pasajeros
— Genial.— expresa Noah entusiasta y Stefan apoya su cabeza en el asiento
— Ella me odia, así que...— murmura Atlas y Elena pone en marcha
— Únete al club.— añade Stefan
— Mejor, digamos cosas positivas de ella. Camille está soltera por primera después de cuatro años. Es demasiado tiempo.— Stefan se tensa — Tal vez deba salir con alguien nuevo.— Noah alza sus cejas
— Incómodo.— susurra y Atlas voltea a verlo
— Es determinada, pero linda. Es muy valiente. Honesta. Jamás olvida un cumpleaños. ¿Qué más?
— Jamás se rinde con sus amigos.— agrega el vampiro
— Si, cierto. Es muy leal.— apoya Elena
— Sigue tirándole flores.— interviene Atlas — Seguro cumplirá esas expectativas ridículas.
— Esa es otra. Buena es superar las expectativas.— alardea Elena
— Así que es perfecta.— opina Atlas
— Claro.— apoya Noah
—Bastante.— aclara Stefan abatido
La extrañaba más de lo que podía decir.
— ¿Cuanto llevaban juntos?— le pregunta Atlas a Stefan — Escuché que eran pareja.
— Tres años.— alzan sus cejas — El tiempo vuela.
─── ⋆⋅☆⋅⋆ ───
Camille
Estaba apunto de ir a mi habitación, cuando una persona inesperada se cruzó en mi camino. Esperaba no verla por un tiempo.
— Cami, ya nos has venido a las sesiones.— suspiro
Verla ahora era más complicado. Ahora que sabía que era mi madre, no sabía cómo tratarla.
— No las necesito.— aclaro e intento esquivarla, pero me gana
— Cami, viviste un trauma. No es algo con lo que tú decidas qué ya no...— la interrumpo
— Creo que es poco ético que tenga que ir a sesiones terapéuticas con mi madre.— solté y su cara se puso pálida — Así es, Samantha. Se que eres mi madre.
— ¿De que hablas?— frunzo el ceño — ¿Como que eres mi hija?
— ¿No sabías?— niega perpleja
— Te juro que no lo sabía. La última vez que supe de ustedes eran unos bebés. Cuando volví, ya no estabas y Joshua no me dejó saber más. No les agradan los vampiros.— aclara y me siento como la peor persona
— Liz Forbes me adoptó después de encontrar la horrible escena. Me mantuvo protegida por que al parecer mi padre trató de matarme.— explico y sus ojos se cristalizaron
— Yo te puse el nombre, por mi hermana. Ella murió cuando yo era una niña. Es de origen francés.— sonrío y su voz se rompe — Pensé que jamás volvería a verte. ¿Puedo darte un abrazo?— asiento y me aborda — Dejarlos fue la cosa más difícil que jamás haya hecho.— me aferro
Sentir este amor, este reencuentro. Es algo que jamás pensé. Sentía una conexión increíble con ella. Una única. Una que solo tenía con mi madre.
— ¿Por que te fuiste?— nos separamos — ¿Por que nos dejaste ahí?— suspira
— Si me quedaba, iba a matarte.— alzo mis cejas —Hice lo mejor que pude para protegerte. Fue lo mas difícil que haya hecho en mi vida.— bajo la cabeza
— ¿Qué pasó esa noche?— cuestiono y se le resbalan lágrimas
— Primero tienes que saber nuestra historia.— asiento — Ven, vamos a la banca.— ambas caminamos y nos sentamos — Estaba muy enamorada de tu padre. El me juró que era la mujer de su vida. Que jamás había conocido a alguien como yo. Me hizo sentir única y especial.— baja la cabeza abatida — Lo peor fue que le creí. Yo crecí en una familia rota. Mis padres murieron, mi hermana, prácticamente estaba sola y el me dio lo que necesitaba. Siendo totalmente vulnerable a él.
— No fue tu culpa.— expreso con empatía y asiente
— Pero debí darme cuenta que era un psicópata. El prácticamente me embarazó para que pudiera tomar el poder de ustedes. De sus propios hijos.— soba sus manos — ¿Que tan cruel tienes que ser para querer algo así?
— Cruel es una palabra corta para lo que el hizo. Parece que mi vida aquí fue algo que estaba destinado.— opino
— Cuando ambos llegaron a mi vida, fue lo mejor que me pudo haber pasado. Eran mi felicidad entera, y casi pude ver que el también lo sentía. El se la pasaba contigo. Solía llamarte "Mille" te contaba historias y se dormía contigo. El parecía alguien normal, pero ahora que soy psicóloga, veo todo diferente.— suspiro
— ¿Cuando te hiciste vampiro?— interrogo y asiente
— Damon me dio su sangre cuando...— la interrumpo
— Espera, espera, ¿Damon Salvatore?— asiente — ¿Que? ¿Como?
— El me provocó un accidente de auto.— me quedo perpleja — El iba a matarme, pero se detuvo. Te escucho llorar en el asiento trasero y los vió. Estaba mal herida y me curó salvándome la vida. Esa misma tarde, Kai me apuñaló y bueno, morí.— me levanto sin aliento
— ¿Por que? ¿Por que Damon hizo eso?— exclamo desconcertada
— El iba por venganza. Cazaba a todos los Whitmore y yo era la última. Después de ustedes.— asiento
Recordaba eso.
— Pero si lo piensas, si el no me hubiera curado, yo no estaría viva. Así que no le guardo resentimiento. Prácticamente fue como si salvara mi vida.— suspiró abrumada
— Es demasiada información que procesar.— camino de un lado a otro — Apenas puedo lidiar con mi vida.— se levanta
— Ahora que se que eres mi hija, quiero estar mas cerca de ustedes. Los he buscado por mucho tiempo. Los he necesitado.— toma mis manos y bajo la mirada
— Y yo necesito tiempo.— me suelto — Chris te ha buscado toda su vida. Yo tengo una madre. Eso jamás va a cambiar.— asiente
— Y lo se. Pero también tengo derecho a conocerte e intentar crear un lazo.— suspiro — Por favor.
— Solo déjame procesar todo. Tienes que hablar con Chris. El quiere conocerte.— sonríe — Tengo que irme. Gracias por...por ser sincera conmigo.
— Mereces la verdad. Es poco de lo que te debo.— sonrío ligeramente — Eres tan hermosa.— acaricia mi rostro — Tienes mis ojos. El color de mi cabello. Ese brillo es solo tuyo.— me quedo enternecida
— Gracias.— sonríe con la mirada radiante
— No tienes de que.
Lo que viví esta tarde es de las pocas cosas extraordinarias que han pasado en mi vida. Tuve las respuestas que había estado buscando por tres años.
Ahora que todo tiene sentido, no se que hacer con ello. Se siente como un sueño que es real. Desde qué conozco que soy adoptada, una parte de mi siempre quiso saber, pero la otra solo ignoraba la situación.
Crecí con una buena madre. Un padre que me amaba hasta que supo que tenía un hijo. Una hermana que es mi alma gemela y la amo más de lo que podría decir. Amigos con lo que crecí y son mi familia. Nunca pude escoger nada mejor.
Haber sido adoptada fue lo mejor que me pudo pasar sin elegirlo. Y nunca lo cambiaría por nada del mundo. Mi madre es todo lo que amo en el mundo y no pude escoger a nadie mejor. Como si estuviera destinada a conocerla y ser parte de su vida.
─── ⋆⋅☆⋅⋆ ───
Después de empacar algunas cosas, me puse de acuerdo con Carolina para ir. Odiaba conducir de carretera y sabía el porqué.
La única personas que lo hacía tolerable, ya no está. Y odio sentir ese vacío. Cada vez que estoy en el auto siento su presencia. Solo espero conseguir la forma de salvarlo. No podría vivir sin ayudarlo.
— No entiendo como terminé accediendo.— me quejo al bajar del auto
— Yo tampoco quería venir. Pero parece que ahora la que tiene mucho entusiasmo y batería social, es Elena Gilbert. Lo cual es demasiado raro.— opina Caroline y cargo con mi mochila
— Ella es feliz después de mucho tiempo. No recuerdo haberla visto así desde que teníamos dieciséis. Es como si la vieja Elena resurgiera.— explico y caminamos
El lugar estaba repleto y el ruido era impresionante. La gente parecía estar en un spring break y en serio lo estaban disfrutando. Creo que no recuerdo la última vez que hice cosas como estas. Cosas de universitarios o personas NORMALES.
— Bien, vamos.— alardeo tomando valor
Al acercarnos a la multitud, lo veo ahí. Estaba junto a Elena y Chris en el centro. El solo se miraba tan perfecto con el sol golpeando su rostro. Sus ojos verdes brillando como joyas esmeraldas. Su sonrisa encantadora y su increíble físico. El es el hombre perfecto y odiaba eso.
— ¿Sabes hace cuanto no me pongo un traje de baño? ¿O short y top? Es como si estuviera renaciendo o algo.— me quejo mientras bajo más mi blusa
— Eres ardiente y la gente lo sabe. No te puedes broncear, lo que es cruel.— suelto una risa — Pero al menos puedes presumir que te verás así de bella y ardiente en ochenta años.— asiento — Iré por algo de beber.— se aleja y decido acercarme a las únicas personas que conozco
— ¿Un lago es diferente a una laguna o...?— interrumpo a Chris
— Laguna.— aclaré y voltearon a verme — Gracias por hacerme sonar como campesina. No todos venimos de la gran ciudad.— cruzo mirada con Stefan
— Hola, Cam.— me saluda Elena con una gran sonrisa — Sabría que vendrías.— suspiro
— No quise arriesgarme al sonido incesante del teléfono. De vida o muerte.— me burlo y me voy desabrochando el short — ¿Dónde eran tus fiestas de secundaria, hermanito?— suspira
— En la casa o segunda casa de alguien. La que tuviera la piscina más grande.— alzo mis cejas ante el sonido privilegiado — Creo que si lo presumo.— asiento y me bajo el short para estar solo en traje de baño
Dicen que el azul resalta a las rubias. Pues llevaba uno de dos piezas que solo mostraba tal color.
— Si. Ahora yo presumiré por que apuesto a que no podrían hacer esto.— me saco la blusa y se la doy a Stefan — ¿Puedes?
Me acerco a un árbol donde está colgada una pequeña tirolesa, me ayudan a tomarla y la sujeto la lanzándome. Al soltarme me tire una voltereta cayendo al agua, todos aplaudieron aludiéndome.
Las habilidades de vampiro me iban genial. Me divertía.
Nado a la orilla y Stefan se agacha, lo veo mientras asomo la cabeza, nuestras miradas eran impactantes
— Que espectáculo el tuyo.— sonrío y me ofrece una toalla — Cami, quería disculparme.— salgo del agua y me enrollo — Esa no era la forma.
— Entiendo tu duelo, Stef. Créeme que te entiendo. Podemos ser amigos. Nos hemos hecho mucho daño y...hoy me di cuenta que necesito madurar. No quiero odiarte o pelear contigo.— sonríe — Fui inmadura y...— me interrumpe
— No lo fuiste.— cierro mis labios — Solo estabas herida. Eres impulsiva como yo.— asiento
— Me conoces. Mejor que nadie.— expreso sincera — Camille Forbes, un placer.— extiendo mi mano y sonríe
— Stefan Salvatore, el placer es mío.— su tacto mi electrizaba la piel
— Bueno, Stefan, ¿que opinas de esto?— me descubro y muestro mi cuerpo en bikini — ¿El azul resalta mis ojos o no podré ligar con esto?— suelta una risa y cubre su boca
— No puedo decirte en voz alta lo que estoy pensando.— me sonrojo y me cubro de nuevo — Totalmente resaltan tus hermosos ojos azules.
— Cuidado, Salvatore, podré pensar que intentas ligarme. Eso no hacen los amigos.— me burlo y sonríe
— Cami, hey, ven...— me lleva de Elena de la mano y frunzo el ceño — Hay un lugar que quiero que veas.— Stefan me da mi blusa
— Por si acaso.— sonrío y me alejo con ella, tomo mi short del suelo
— ¿Ya hay progreso?— suspiro mientras vamos por el bosque
— Estamos en la fase amigos después de una ruptura. Solo espero que no la clase de amigos de los que se acuestan y hay mucha tensión.— aclaro
— ¿Tensión? Si hay de sobra. Ese hombre te ve como si fueras la única cosa que le importa en el mundo.
— Intentamos empezar de cero. Es complicado.— nos detenemos y dejo mi toalla en un tronco
— Dejen de complicarlo.— me pongo el short — Si dos personas se aman, se lo demuestran y están juntas.— suspiro
— Pero no es solo el amor, Elena. Hay más cosas que interviene en la relación. Stefan y yo pasamos por muchas cosas y esas cosas nos alcanzaron. Debemos arreglar todo para tener una mejor relación en la que ambos estemos bien.— aclaro y asiente
Me deje puesto solo short y me quede en el top. La verdad sentía mucho calor.
— Hola, ¿han visto a Stefan?— les pregunta Elena a Tyler, Matt y Caroline, iban llegando — Olvidé avisarle dónde estaríamos.
— No sabía que volvió.— responde Matt
— ¿Nos dirás que estamos haciendo aquí?— pregunta Tyler
— ¿Olvidaron este lugar?— menciona incrédula y deslizo mi mirada— Nos escapábamos y bebíamos mientras nuestros padres estaban afuera.— nos da shots de gelatina— Bueno, ahora hay menos padres, pero podemos divertirnos.— tomo uno
— Yo no. Trabajo con mi problema de ira, esto no me ayuda.— advierte Tyler y como la gelatina
— Mi amigo está ebrio, debo entrenar mañana, así que.— argumenta Matt y Elena se queda con las manos extendidas
— Bueno, yo soy la que no tiene nada que hacer con su vida.— me pasó la gelatina
— Bueno, no quiero sonar como una alcohólica pero quiero un trago. ¿Alguien lo toma conmigo?— Caroline alza la mano y hago lo mismo
— Yo.— pide mi hermana y se lo entregan, yo consumo otro
— Hasta el fondo.— nos lo comemos
— Aquí estamos, divirtiéndonos.— expresa Caroline con sarcasmo — Me divierto, ¿no nos divertimos? Esto es divertido.— suspiro
— Es claro que fue una equivocación.— se queja Elena y me siento junto a Caroline — Solo quería pasar una tarde fingiendo por un segundo que no nos alejamos.— relamo mis labios
— Ese es el problema, Elena. No a todos nos gusta fingir.— menciono abrumada — Algunos preferimos enfrentar los problemas.
— Creo que nos vamos.— sueltan los chicos y dan la vuelta
— ¿Qué sucede?— me pregunta y bajo la mirada
No quería ser dura, pero ella no siente lo que yo. No lo entiende.
— Solo...lo extraño, a Damon.— suspira — No lo saco de mi cabeza, ni a Bonnie. Intento no extrañarlo tanto, pero no puedo. Enzo, es terrible, es un amigo homicida, justo a alguien que viene a mi mente.— sonrío
— Se que lo extrañas.— pone su mano en mi pierna — El era tu mejor amigo. Perdiste a dos personas muy importantes. Esta bien pensarlo o sentirse triste. Solo intenta recordarlo con felicidad y no de forma deprimente.— asiento — Ven, vamos a regalar shots.
— Necesito más de esos.— tomo otro y ríe mientras vamos por el bosque
Le pedí a Enzo que trajera hielo. Lo terminé invitando para que alguien hiciera soportable la fiesta.
─── ⋆⋅☆⋅⋆ ───
Narrador omnisciente
Damon y Bonnie ya habían discutido por qué el vampiro no creía que hubiera alguien más en el mundo prisión. No quería creerlo, por que significaba tener esperanza. Volver a verla. Prefería pensar en que solo eran casualidades o Bonnie enloqueciendo.
Se negaba a tener esperanza en algo que no lo tiene. Hasta que encontró una situación que le dejó helado el cuerpo.
— ¿Un día difícil, Damon?— le pregunta el hombre comiendo frituras— Lo siento, modales. Soy Kai. Gusto en conocerte. ¿Palomitas? ¿No?
— Eso debe parar.— se queja al escucharlo masticar
— ¿Crees que es irritable? Trata de oírte a ti y a Bonnie pelear cada cinco minutos.
— Nos has seguido.— menciona sorprendido
— Claro que si. Son lo más cercano que tengo a una tele. No son "Guardianes de la bahía", pero, ¿recuerdas esa serie?
— No, no la recuerdo.
— Amigo. Tienes que verla. ¿Te gustan las salvavidas? ¿Las sexys?— alardea
— Ha sido un día demasiado malo en una mar de días malos. Tengo que saber quien eres, que haces aquí...cuál es tu relación conmigo o te arrancaré la garganta.— advierte y el sifón suspira
— Ese mal humor te causará problemas. Ya alejó a Bonnie, ¿cuantas veces? Espera, yo sé, trece.— se burla
— ¿Crees que soy malo con ella? Ella me agrada. Tú no mucho— intenta atacarlo y lo tomos de la camisa elevándolo por el aire
— Bueno. Lo siento, en serio. Estoy oxidado con las interacciones humanas cara a cara.— expresa tembloroso y lo suelta
— Respuestas, ahora.— ordena y va caminando por el estante
— Deberías beber algo. Usualmente te calma.— sugiere
— Gracias.— toma la botella
— Luego te enoja, te entristece, te calma. Es un ciclo raro.— asiente — Si quieres saber por que te sigo...es por que quiero asesinarte.— escupe el alcohol que bebió, siendo verbena y cae al suelo debilitado— Verbena en tu bourbon. No te lo imaginaste, ¿verdad?
─── ⋆⋅☆⋅⋆ ───
Camille
Al ir caminando, escuchaba voces. Se hacía notar la Enzo, parecía estar con Stefan, no creo que sea buena combinación
— Elena, ya te alcanzo.— asiente y doy la vuelta intentado dar con ellos
— Tienes que estar bromeando. Acaba de salvarte la vida.— frunzo el ceño y me voy a velocidad vampírica
— Para darme una vida llena de miseria. Pues esta bien. Voy a reducir esa vida.— llego y me pongo en medio, Stefan se sorprende
— Stefan, baja eso.— le advierto al tener una escopeta con balas de madera
— Buenas noticias, asesine a un cazador de vampiros. Malas noticias, Stefan se convirtió en uno.— alardea
— ¿Qué estás haciendo?— le pregunto confundida y solo me da una mirada hostil
— ¿Por que no le preguntas?— se da la vuelta y me giro a ver a Enzo furiosa
— ¿Qué le hiciste? — suspira
— Bueno, en términos simples, maté a su novia.— lo veo perpleja
— ¿Hiciste que? — exclamé desconcertada
— El té había tratado mal y quería darle una lección sobre cómo no ser...— lo interrumpo
— Bueno, debes enseñarte tu una lección. A no ser un idiota.— me voy a velocidad vampírica para buscarlo por el bosque — Stefan...— lo llamo y se frena por unos segundo para seguir — Basta, ¿si? Lo lamento. No sabía lo de Ivy.— me pongo frente a él interrumpiendo el paso — Pero...
— ¿Pero que? ¿Me mentí a mi mismo?— frunzo el ceño — ¿La usaba como un escape? Si, se lo que crees, Camille.— frunzo el ceño
— De hecho iba a decir: "Asesinar a Enzo no la revivirá"— expreso sincera
— No, pero evitará que me recuerde a mi hermano.— explica dolido y alzo mis cejas
Ambos veíamos a Damon en Enzo.
— Lo asesino, dejó este lugar y comienzo de nuevo.— siento el nudo en el pecho
— ¿Y yo, Stefan? ¿Que hay de mi? — baja la mirada — ¿Para eso viniste a la fiesta? ¿Para asesinar a Enzo y empezar de nuevo? — se queda en silencio
— Si.— lo dice cínico y mis ojos se cristalizan
— No es verdad. Se que parte de ti extraña este lugar. A estas personas, tus amigos. Se que volver te recuerda que te necesitamos, lo mucho que te necesito.— explico y me ve con sus ojos húmedos — Pero si tengo razón, si una pequeña parte de ti volvió, para ver a Elena, quien ha sufrido cuatro meses o a Alaric, quien volvió de la muerte...o a mi. Si una pequeña parte de ti volvió para verme.— me ve fijamente
— Tú eres el amor de mi vida. Eres mi mundo.— me toma de las manos — Pero esta vez, no puedo seguir. Estar aquí me recuerda que lo perdí para siempre. Y ya no quiero estar triste por ello.— bajo la mirada y lágrimas resbalan— Sería egoísta pedirte que dejes a tus amigos o familia. Te amo lo suficiente para no pedirlo.— acaricia mi rostro y retrocedo
— Y yo no voy a sufrir por ti.— limpio mis lágrimas — Haz lo que tengas que hacer. Yo tengo que volver y dejarte ir.— siento el nudo en la garganta y su mirada estaba quebrada
— Adiós, Cami.— inhalo hondo reteniendo las lágrimas
— Adiós, Stefan.
Al alejarme con las lágrimas a explotar, me di cuenta que necesitaba a mi mamá. Que la extrañaba tanto que quería estar solo en sus brazos y me consolara. Tengo el corazón tan roto que no se como curarlo.
Me acerco a la fiesta y Elena y Caroline estaban con Jeremy. Parecían preocupados
— ¿Por que no? ¿Toma verbena?— pregunta preocupada
— No, tuvo que ir hasta Mystic Falls. Tuvo que cruzar la frontera.— aclara y alzo las cejas perpleja
— La compulsion es magia.— menciono preocupada
— Significa que cada memoria que hechizaste volvió. Y Sarah, la chica que atacaste, y que hechizaste.— explica y volteamos a ver a Elena
— Sabes.— suelta preocupada y vemos alrededor en su búsqueda
— Esto es genial. Y yo que quería solo irme de este lugar.— peino mi cabello hacia atrás
— Nosotros la buscamos, tú te ves que has llorado.— me dice Caroline — Y se por quien.— suspiro
— ¿Puedo romperle la cara?— pregunta Jeremy sonrío rodeándolo con mis brazos
— Por favor.— soba mi espalda
— Lamento haberlo invitado. No quería que te pusiera triste.— aclara Elena y niego
— Stefan y yo...nos amamos. Pero el está sufriendo por Damon y no me quiere cerca. Tengo que dejarlo vivir su duelo y seguir adelante.— explico y asiente
— Lo siento.— opina Caroline e inhalo hondo
— Sin sonar como niña pequeña, pero necesito a mamá. No se que haría sin ella.— me suelto de Jeremy
— Si, ella también te extraña.
Me despido de todo y camino a mi auto, me encuentro con alguien
— Hablaste con Samantha.— refiere Chris y asiento
— Tuvimos una charla, si.— me apoyo en mi auto
— ¿Qué piensas?— suspiro — Quiero darle una oportunidad. Ella es muy aparte de todos los Parker disfuncionales.— sonrío
— Yo pienso que deberías. Es tu mamá y la has buscado por mucho tiempo. Puedes tener lo que has querido.— menciono sincera
— ¿Y tu? Compartimos útero y también es tu mamá. ¿Qué harás?— relamo mis labios
— Yo ya tengo una mamá. No necesito a otra.— aclaro y me cruzo de brazos
— Pero...ella también quiere ser parte de tu vida.— asiento
— Lo se, y lo entiendo, ella puede. Pero no como mi mamá. No puedo hacerle eso a mi madre.— explico y suspira asintiendo
— Entiendo. Tienes razón.— sonrío ligeramente — Gracias por dar el empujoncito. Lamento lo de Stefan. Lo vi irse.— inhalo hondo
— Ya no quiero hablar de Stefan. Lo único que haré esta noche, estar con mi mamá y escuchar a Taylor Swift, la versión de 10 min de All To Well.— sonríe — Comer helado y esas cosas.
— Tú eres importante para mi y siempre voy a estar para ti. Somos mellizos y eso debe significar algo.— sonrío — No dudes en venir a mi.— asiento
— No lo haré.— nos damos un abrazo — Gracias.
Después de ese confortante momento, decidí marcar por teléfono a la persona que más necesitaba
— ¿Mami?
— Cami, cielo, te he echado de menos.
— Y yo a ti. Te necesito.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro