48. Not Fair
Había pasado los mejores cuatro meses de mi vida. El verano terminó y eso significa volver a mi realidad. Una a la que no si quiera regresar. Pasar tiempo lejos de pueblo y de todos ha sido reconfortante. He tenido tiempo para mi, aclarar la mente y sanar heridas que fueron profundas. He cambiado. He amado. He disfrutado. Tener que estar oculta me ha ayudado, aunque hay tengo un vacío en el pecho. Le hice una promesa a Damon de que iba a traerlo de vuelta. Eso incluye a Bonnie. Perdí a dos personas que son muy importantes para mi y necesito recuperarlas. No importa cuanto tiempo tome. No me voy a rendir.
Cuidar a Hope es una de las mejores experiencias en mi vida. Es un verdadero ángel y es mi familia. A mi me arrebataron el derecho a ser madre y estos meses han sido una curita al corazón. La amo y siempre voy a protegerla con mi vida. Es lo más puro que puede haber en los Mikaelson.
— Estás muy pensativa.— me dice Rebekah mientras arrullo a la bebé
— Es mi último día antes de ir a la universidad. Le prometí a mamá que volvería. — me levanto de la mecedora y recuesto a Hope en su cuna
— ¿Segura que quieres volver?— sonrío y salgo de la habitación de la bebé — Estamos muy cómodas aquí. Hemos convivido como hermanas y hasta te hiciste maternal.— suspiro y me siento junto a ella en el sofá
— Es mi segundo año. Es el año en que eliges la especialidad y empiezas a forjar tu camino de vida. Eso hice. Estás viendo a la futura psicóloga, Camille Mikaelson Forbes.— alza sus cejas
— ¿Mikaleson Forbes? ¿Ya vas a usar ese apellido? — asiento — Pensé que no querías.
— Soy una nueva persona hoy. Hasta me hice un cambio de look.— sacudo mi pelo y sonríe
— Debo admitir que el flequillo te queda. Tienes un aura totalmente diferente. Más dura y algo oscura. Adulta.— suspiro
— Chris y yo nos hicimos más unidos. Me dijo cosas del pasado, y mi edad real.— me levanto y tomo algo de vino de la mesa — Se supone que este año cumpliría 22. Extrañamente mi fecha de nacimiento sigue siendo el 31 de Octubre, pero de 1991.— bebo un sorbo
— Wow, tu vida no es aburrida.— asiento y dejo la copa en la mesa — ¿Qué hay de Stefan?— relamo mis labios tensa
— No quiero hablar de eso.— expreso sería y me levanto
— Tengo que terminar de empacar y dejar todo listo.
Entro a mi habitación y veo las cosas sobre la cama. Todo es distinto ahora. Stefan y yo....no estamos en los mejores términos. El se fue un mes después de cuidar a Hope por algo que pasó. Algo que no quiero recordar. Cada quien está por su cuenta ahora. Necesitamos nuestro espacio.
Me he comunicado con mis amigos vía teléfono. Caroline me cuenta su drama con la universidad y como se la pasó genial con Noah de vacaciones. Elena vive una nueva etapa con Jeremy y Alaric. Estoy tan feliz que el pudo haber salido. El no debió morir en primer lugar. La castaña parece estar sintiendo una conexión con Atlas, chico que no me agrada. Todos estamos de luto por Bonnie. Aun no puedo asimilar que ya no está. Pensarlo me da nostalgia. En serio me duele que no esté y a su madre más. No se que hacer.
Solo he bebido de bolsas los últimos meses. No me acerco a nada que tenga temperatura de 36 grados ni a una buena carótida. Mantengo mi distancia por Hope. Aun no controlo mi sed y es complicado.
Después de empacar, salgo de la habitación y dejo las cosas en la sala. Inhalo hondo viendo alrededor. Claro que iba a extrañar este lugar.
— No puedo hacer esto sin ti. Eres la única que ha estado para mi como familia. Te necesito.— me acerco a ella y tomo sus manos
— Está es la vida que siempre soñaste. Prácticamente tú hiciste todo, yo solo ayude.— sonríe — Amo a Hope y amaría pasar todo el tiempo juntas, pero tengo que seguir adelante. Aun hay cosas con las que debo lidiar y....no puedo solo huir de mi vida.— asiente
— Te entiendo. Aun eres joven.— pone un mechón de pelo tras mi oreja — Solo....voy a extrañarte. Seguro Hope igual.
— Y yo a ustedes.— me acerco a darle un abrazo — Vendré a visitarlas cuando pueda. Siempre y cuando sea seguro. Nadie podrá romper el hechizo de ocultamiento que puse en esta casa.— nos separamos — Lo selle con mi sangre y nadie que no sea del linaje Mikaelson podrá verlo.— asiente
— Piensa bien lo que quieres. Eres fuerte y capa de lidiar con todas las cosas. Solo no olvides quien eres.— sonrío asintiendo
— Si, gracias. Me iré a despedir de Hope.— sonríe y me encamino a la habitación, la veo dormida en su cuna — Eres lo mejor que la ha pasado a esta familia. Te amo demasiado y fuiste una paz que realmente necesitaba. Cambiaste mi perspectiva de muchas cosas, y ahora debo lidiar con mi otra familia. No soy de las que huye.— deslizo mi mano por su espalda— Debo enfrentar lo que viene para poder tener mi vida en orden. La tía Cami te ama y no te va a olvidar. No olvides que siempre voy a estar para ti pequeña. Toda tú vida.— me acerco a dejarle un beso en la mejilla — Voy a extrañarte, lobita.
Retrocedo y la admiro dormir. Ella es un ángel que merece todo lo bueno de este mundo. Quiero que ella tenga todo lo que quiere y que nunca se sienta sola o en peligro. Haré todo lo posible por protegerla, no importa que sea lo que tenga que hacer. Mientras yo viva, ese ángel no tendrá de que preocuparse en la vida.
Rebekah y yo nos damos un último abrazo para posteriormente ir a mi auto y subir mis cosas. Me aguarda un largo viaje y ya debía empezarlo.
Mientras iba conduciendo, una llamada me llegó al celular. Una persona a la cuál he ansiado ver, pero no se ha podido. El secreto de Hope tiene que estar muy guardado y seguro. Le prometí a Klaus que no diría palabra. Nadie incluso mi familia ni amigos. Ella corre peligro y no haré algo que la lastime.
— Brujita, ¿dónde has estado?— doy un suspiro
— Voy de camino a la universidad, ya que no puedo volver a mi casa sin morirme.— le respondo a Kol
Una de las cosas que hice en el verano, fue traerlo de vuelta. Puse su conciencia en un brujo del barrio francés y he mantenido el secreto por que así me lo pidió. El quiere lidiar con la situación, y yo estoy feliz de que vuelva. Luego buscaré la forma de revivirlo.
— Cierto, olvidaba que eras universitaria. Solo quería llamar para saber cómo estabas. Te he extrañado.— ladeo una sonrisa
— Y yo a ti, Kol. Que más quisiera que visitarte y eso, pero no puedo ir a Nueva Orleans. Ahí todos me conocen como una Mikaelson, y una de las ventajas era que yo tenía bajo perfil. Hasta dónde se sabe, soy Camille Forbes.
— Lo sé, lo sé. Aun no se por que no puedes venir a la ciudad.— paso saliva tensa — ¿Qué te retiene?
— No lo se, es complicado. Con lo de Klaus y su hija, no puedo enfrentarlo y no quiero meterme en el drama Mikaelson por ahora. Tengo el mío.
— Cierto. Ahora tienes más tíos, un mellizo y una madre vampiro. Mírate, tienes lo que buscabas hace tiempo.— mis manos sudan al volante
— Ella me envió un mensaje. Chris la buscó cuando le confesé quien era, y...ahora nos quiere ver a los dos. No se que pensar.— menciono con angustia
— Yo solo pienso que hagas lo que necesites hacer. Si la quieres en tu vida, escuchar su versión y aceptarla....deberías ir. Si la quieres mejor y estás mejor sin ella, solo déjala ir, y continuar con tu vida.— me quedo pensativa viendo tras el parabrisas
— Había esperado esto desde que supe que era adoptada. Con Freya...era diferente. Podía verla y Dios sabe que quiero conocerla y abrazarla. Pero saber que mi madre biológica y yo compartimos el mismo techo. Es algo con lo que apenas puedo dormir.
— Se que tomarás la decisión correcta. Al final del día, sabrás si quieres que sea parte de tu vida o no.
— Tienes razón. Ya fluirá la respuesta. Gracias por escucharme.
— No tienes de que. Bueno, te hablo luego que me ocuparé.
— Si. Hasta luego, Kol.
— Hasta luego, brujita.— colgamos y dejo el celular en el asiento de copiloto.
Hay muchas cosas con las que debo lidiar ahora. No solo con que tengo más familia de la que puedo imaginar, si no que también debo averiguar cómo recuperar a Damon y Bonnie. No saco eso de mi mente. La vida se siente vacía sin ellos dos. Jamás creí que no tendría a ninguno en mi vida. Es tan extraño volver y no verlos. No me acostumbro a vivir sin ellos. Siento el nudo en el estómago. No se si sea capaz de soportarlo. La vida no se siente completa.
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Después de unas largas horas había llegado a la universidad. Era de madrugada y si que necesitaba descansar. Solo pensar en que veré a mi mamá y a Caroline, me da algo de felicidad. Siento un nudo en el pecho al estar aquí y no verlos. Los extraño.
Entro a la habitación intentando no hacer ruido, jalaba la maleta y cerraba la puerta. Todo estaba apagado y camino a mi cama. Ver la de Bonnie vacía es triste. No había nadie, tal vez estaban de fiesta las chicas. Ojalá pudiera beber algo, pero lo he evitado.
Enciendo la luz y comienzo a sacar cosas de mi maleta. No pensé que todo se iba a sentir tan vacío regresar a casa.
Coloco mis fotos en el estante junto a la ropa. Me pauso unos segundos observando las imágenes. Las personas que estaban ahí eran el mundo para mi. Cada uni tiene un espacio en mi corazón. Son lo que me mantiene cuerda y me mantienen en la realidad. Un nudo se me forma en la garganta al ver una foto con Stefan. Duele como una herida abierta.
No he pensando en el por que decidió que no podía con el dolor de Damon y que necesitaba tiempo. Respeto su decisión y su espacio. Quisiera tenerlo cerca y besarlo. Lo extraño con cada hueso en mi cuerpo y con la fuerza de una estrella. El tiene una parte de mi que le pertenece. Es el amor de mi vida y por el haría lo que fuera. Solo espero que nuestra relación cambie para algo mejor. Odiaría perderlo.
— Lo se, fue asqueroso.— escucho la puerta y alzo la vista — ¡Oh por Dios! ¡Camille!— grita Caroline y sonrío ampliamente, viene sobre mi abrazándome
— Te extrañe tanto.— me aferro a ella — Demasiado.
— Y yo a ti, Mille. Nada es lo mismo si no estás.— sonrío ligeramente y mantengo el abrazo
— Lo mismo digo. Odie alejarme tanto tiempo de ti. Fue una eternidad.— nos separamos y me toma del rostro
— Sabía que era lo que necesitabas. Mírate. Ese nuevo look te queda muy bien. — sonrío — El flequillo y el maquillaje oscuro te hace ver mayor. Algo oscura.— me suelta
— Hola, Cami.— me habla Elena y sonrío acercándome a ella, nos abrazamos — Hacías mucha falta. No es lo mismo sin ti y sin...— se pausa y la abrazo con fuerza
— Lo sé, Lena. Estoy aquí.— nos separamos y me sonríe asintiendo — Voy a arreglarlo. Lo prometo.
— Creo que todas tenemos nuevos estilos este verano. Te ves hermosa, Cami.— me dice Elena y sonrío agradecida — Estamos aquí. Las tres. El primer día no será tan horrible.— Care saca una botella de un estante
— Hay que brindar por eso.— alardea mi hermana y no vemos entre las tres — Por que su primer día del segundo año no sea terrible. — nos da unas copas y frunzo el ceño
— Como que "su." ¿No vienes?— pasa saliva y sirve tequila — ¿Qué me perdí?— entre ambas se miran
— Deje la universidad.— suelta y la veo perpleja
— ¿Hiciste que?— alzo la voz con incredulidad — No puedo creerte. Literalmente fuiste tú la que me obligó a entrar a la universidad el año pasado. ¿Qué pasó?— suspira
— Tengo otras cosas en mente ahora. Esto no es lo que quiero por el momento.— volteo a ver a Elena en negación — Intento encontrar una solución para arreglar el pueblo y traer a Bonnie y Damon. No puedo venir a la universidad.— siento una punzada en el pecho
— Caroline...— me interrumpe
— Es una decisión que ya tome y espero que la respetes.— cierro mis labios — Por favor. Es lo que necesito. Al menos por ahora.— asiento algo inconforme
— Si es lo que necesitas, lo haré. Tú me diste mi espacio y yo te doy el tuyo.— sonríe — Es lo que hacemos las hermanas.
— Gracias, Cami. Sabría que lo entenderías.— sonrío
— Por que el primer día del segundo año no sea terrible. — repito y suelto una risa — Eso tiene muchas palabras.— ríen
— Por que el primer día del segundo año no sea terrible.— añade Elena y chocamos las copas
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A la mañana siguiente teníamos resaca por desvelarnos con tequila. No es buena combinación. Nos pusimos al día con el verano y contamos anécdotas para recordar como éramos las cuatro antes del drama sobrenatural. De nuestra vida a los quince y los sueños y metas que teníamos. Ahora estamos en la universidad como lo habíamos soñado hace siete años. Somos vampiros. Con relaciones complicadas y más perdidas de las que puedo contar. Sin duda, no es nada de lo pensé que sería mi vida.
— Se supone que ambas vamos a tener clase con Alaric. ¿No es algo raro que sea nuestro profesor en la universidad?— le pregunto a Elena mientras vamos por el pasillo
— Creo que la palabra "raro" ya es algo arcaico en nuestro vocabulario.— sonrío asintiendo — Nuestro profesor, y mi guardian, volvió de la muerte después de dos años. ¿Qué es más raro?.
—No tengo respuesta para eso.— ríe
— La buena noticia de regresar a la escuela es que tengo prácticas de medicina e intento emparejar a Jo con Alaric.— alzo mis cejas
— ¿Jo? Ese nombre me suena. Conocía a una persona que se llamaba Josette. No recuerdo el apellido.— divago
— Si, Jo Laughlin. Es la doctora a nuestro cargo. Es alguien genial y puedo robar suministros de sangre por que trabajo en el hospital.— sonrío sorprendida
— La había olvidado. Debería ir a visitarla.— sugiero y asiente
— Cami, hey, ya regresaste.— Chris me aborda con un abrazo y sonrío
El y yo nos hicimos unidos en el verano. Tuvimos más comunicación y el me habló de muchas verdades. Comenzamos a crear un vínculo de hermandad que comienzo a atesorar.
— Tenía que volver a la universidad. Es algo que he deseado desde que era niña y hoy pienso tener una vida diferente.— nos separamos
— Tu cabello.— me paso la mano por el — Te luce bien. Me gusta.— sonrío algo tímida
— Gracias. Quise cambiar un poco. Solo enloquecí en la noche al tomar vino y vi unas tijeras. Este es el resultado.— alardeo y me señalo al rostro, sonríen
— Te miras hermosa.— opina Atlas y se me baja la sonrisa — Hola, Camille.— suspiro
El no me agrada desde lo que paso....no quiero recordarlo. Aun voy a terapia por ello. Evite regresar con mi madre biológica por obvias razones.
— No somos amigos. Aun no te perdono lo que hiciste.— aclaro hostil y me ve fijamente — No quiero llegar tarde al primer día de clases, si me disculpan.— le paso por un lado
Intento ser fuerte. Intento no pensar en todos los agrios recuerdos de hace meses. Revivir el triste recuerdo de mi hija. La pérdida de Damon y Bonnie. Alejarme de Stefan....descubrir a mi aquelarre. Estudiar mantiene mi mente ocupada y hace que los pensamientos no exploten tan fuerte. Algo que dijo mi psicóloga es en tener relaciones más sanas y crear nuevos momentos. Esta Camille de aquí está dispuesta a hacer todo lo posible por sanar.
— Cami.— escucho a Elena mientras continuo caminando — ¿Que fue eso?— me detiene tomándome del brazo
— ¿Qué cosa?— me suelta — A Atlas lo tolero. No seré hipócrita siendo su amiga. Por su culpa Wes me...— hago una pausa — Lo veo y recuerdo lo que paso. No puedes pedirme que lo olvide.— asiente
— Lo siento. Yo no sabía que el....lo siento.— meneo mi cabeza
— Está bien. Intento seguir con mi vida y que ese evento no me defina. Solo quiero olvidarlo.— asiente
— ¿Estás bien?— me pregunta Chris
— Si, solo vayamos a clase.
Nos encaminamos al salón, al entrar, vemos a Ric vaciando una bolsa de sangre en un termo. Lo normal
— ¿Eso es lo que un humano quiere ver por la mañana?— se queja mi hermano y va a la butaca
— ¿Quieren?— nos pregunta y paso saliva tensa
Algunos aún aprendemos a beber de la vena.
— No gracias, ya bebí esta mañana.— respondo y me siento junto a Chris
— ¿Sabes? Creo que nunca será normal.— le dice Elena a Ric
— ¿Qué? ¿Que Camille me haya convertido en un vampiro o que hace cuatro meses reviví?— sonrío tímida
— No fue mi mejor momento.— añado y sonríe bebiendo
— Que seas mi profesor de universidad.— aclara Elena y se sienta junto a mi
En defensa de Alaric, no podrá recuperar su trabajo en la secundaria. La secundaria, el restaurante, el centro. Por el hechizo de antimagia de los viajeros todo en Mystic falls sigue fuera del alcance de quien tenga colmillos o magia como yo. Muchos de nosotros no han regresado a casa en meses. El lado positivo es que la tasa criminal bajó. Aunque no se si Matt se enteró. Diré que nunca había estado mejor.
— ¿Has hablado con Stefan?— me pregunta Elena mientras golpeo mi pluma contra el cuaderno
— Escuché que seguía la pista de una bruja que contacta a los muertos. Caroline me dijo. Stefan y yo no hemos hablado en meses.— aclaro tensa y frunce el ceño
— ¿Por que no se hablan?— me ve confundida y relamo mis labios
— Cosas pasaron. No quiero hablarlo.— evado al instante y asiente
—Nos comunicamos aveces. No ha tenido respuestas sobre lo que pasó.— asiento — Está de duelo. Perdió mucho. Todos perdimos. Pero todos lo estamos superando, a nuestra manera.
— Lo sé. Caroline solo se sumerge en libros y está con mamá. Todos extrañamos a Bon.— hago rayones en mi cuaderno
Los alumnos iban entrando y esto se sentía más real. No recuerdo cuando fue la última vez que me sentí como una estudiante. Veo entrar a Liv y cruzamos miradas. No estamos en los mejores términos desde aquella noche en el cementerio. Por su culpa yo no puede salvar a mis mejores amigos. Intento no poner una riña entre nosotras.
— Tienen que hablarse.— sugiere Chris y volteo a verlo
— No tengo nada que decir.— opino sin más y da un suspiro tenso
— Hola, Jovenes. Hoy empezaremos con el ocultismo. La traducción literal significa "escondido." Por lo tanto, el estudio de lo oculto...— se pausa y un aroma me viene a la nariz, volteo a ver a Elena
—Dios.— me quejo en voz baja al verla beber sangre de un termo — ¿Estás loca?— voltea a verme y bajo la mirada escondiendo como se marcan las venas debajo de mis ojos
El tema de la sangre y yo....es complicado.
— Lo siento.— deja de beber y siento el nudo en el estómago
— ¿Cami? ¿Estás bien?— me pregunta Chris e inhalo hondo tomando el control.
—Por lo tanto, el estudio del ocultismo es el estudio del conocimiento oculto. Hoy discutiremos su relación con la resurrección. — escuchamos una risita — ¿Lo encuentras divertido, Liv?— le pregunta Ric directo y alzo la cabeza para ver
— Más bien, irónico.— responde burlona y ruedo los ojos —...pero, de acuerdo.— escucho a Chris reír
— Oh, señor Lockwood.— entra Tyler a las prisas y muy sudoroso. Hasta acá me llegaba el desagradable olor — Que generoso fue el equipo de prestárnoslo.— sonrío y lo veo sentarse junto a Liv
— Lamento llegar tarde.— se disculpa y Ric sigue con la clase. Típico Tyler
— Por lo general, no todos los grupos ocultistas tienen un consenso en el tema. Los tertulianos y la iglesia occidental creían en la resurrección de la carne. Los agnósticos creían que la resurrección solo existía en un sentido espiritual. — el aroma vuelve y Alaric lo nota, puesto que se voltea — Elena, sabes que puedo oler eso, ¿no?— alzo mis cejas al escuchar el susurro. — En este salón todos me parecen salchichas de sangre. Guarda eso.— baja el termo y se lo quito de la mano
— Pensé que lo dejarías.— la regaño y hace una mueca, se lo doy a Chris
— Oh Dios, que asco.— se queja y sonrío mientras lo guarda
— Otros, como los padres de la iglesia...— continúa la clase y después de unos minutos termina.
Es la clase más interesante con la que he empezado la universidad. Me mantuve ocupada en otras cosas que evite pensar en lo otro. Cosa en la que ya pienso ahora.
— Cami, ¿puedo hablar contigo?— me pregunta Ric mientras voy a la puerta
— Claro, ¿que pasa?— da un suspiro
— No tuve el tiempo de agradecerte por haberme salvado. Se que hiciste un gran sacrificio y esfuerzo para hacerlo. Lo aprecio.— sonrío cálida
— No tienes de que. Tú muerte fue muy injusta y eres una buena persona. Tenias el derecho de volver.— sonríe asintiendo
— Gracias, lindo cambio de look. Te ves totalmente diferente.— sonrío asintiendo — ¿Has hablado con Stefan?— mi expresión cambia
— No. No. No lo he hecho en tres meses.— aclaro y le toma por sorpresa — Stefan y yo no estamos en los mejores términos ahora. No hemos estado como pareja desde hace casi siete meses. Todo cambió, Ric.— asiente consternado
— Si, me he dado cuenta.— tiene la mirada fija y volteo, miraba a su hermano — Como sea, espero lo arreglen. Su amor era hermoso.— regreso mi vista a él y doy un suspiro
— Eso nunca se acaba.— menciono sincera — Hasta luego, Ric.— asiente y salgo del salón
— ¿Todo bien?— me pregunta Elena uniéndose a mi camino, llevaba el teléfono en la oreja
— Si, no fue nada.— aclaro tensa
— Le decía a Caroline que tiene que volver para el juego. Tyler participa en el.— alzo mis cejas
— Me salí de Whitmore. ¿Por que apoyaría a su equipo de fútbol?— se queja Caroline al teléfono
— Es el primer juego de la temporada, Caroline.
—Hora volver a casa.— opino
— Estoy en casa. Ya firmé el contrato de mi apartamento.— frunzo el ceño y le quito el teléfono a Elena
— Mamá llamó para darte mi apoyo. Tu departamento está a las afueras de un pueblo que no te quiere. Eso no es casa, es triste.— aclaro
— Mamá es una chismosa y a ti ni siquiera te gusta el fútbol.— se queja y sonrío
— No, pero me gusta beber en el estacionamiento como lo hacíamos en la preparatoria. — alardeo
— Caroline, tiene que venir.— se nos une Tyler y nos detenemos, lo pongo en alta voz
— Tyler, no finjas que tienes en donde apoyarte. Te saltaste todo el año.— lo regaña
— Y tu me acosaste todo un año. Así que aquí estoy, ven para acá. — la pide y sonrío
—Caroline, te buscaré en tu casa a las seis en punto mañana. ¿Si? Trae el espíritu escolar. Adiós.— cuelgo y le entrego su celular a Elena
— Sabes dar ordenes.— me dice Tyler y me acomodo la mochila
— Soy Camille Mikaelson Forbes, claro que se dar órdenes.— sonríen y noto a Elena nerviosa — ¿Todo bien?— asiente
— Si, yo...te veo luego.— sale casi huyendo y frunzo el ceño
— ¿Sabes que le ha pasado?— le pregunto a Tyler y ambos la vemos alejarse
— Lo de Bonnie y Damon.— voltea a verme — No la ha pasado bien. Nadie.— suspiro
— Lo sé. Me alejé de todos ustedes y lo lamento.— soba mi brazo dando consuelo — Yo solo...— me interrumpe
— Has experimentado más dolor que cualquiera que conozco. Tú necesitabas un descanso de esto. No te disculpes por sanar lo que estaba roto.— lo veo conmovida
— Gracias, Ty. Lo aprecio mucho.— sonríe y nos damos un abrazo — Te extrañe.— soba mi espalda
— Yo también.— nos separamos — Debo ducharme y ponerme decente para el juego de está tarde.— sonrío meneando la cabeza — Te veo luego, Cam.— nos despedimos y comienzo a caminar por el campus
— Cami, ¿podemos hablar?— me abordan Luke y Liv
— ¿Sobre qué?— me cruzo de brazos — Ambos me abandonaron en ese lugar. Eso no hace la familia. No abandonas a los tuyos así.— reprocho
— Lo se y lo lamento.— se disculpa Luke — Se que no debimos hacerlo. No imagino lo que debes estar sintiendo. Me disculpo de todo corazón.— noto que es sincero, Liv solo muestra seriedad
— Bien, te disculpo.— sonríe
— Liv.— Luke le da un empujón y la veo fijamente
— ¿Qué? Sus amigos te mataron. Ella tampoco entiende el valor de la familia. Que no sea hipócrita.— reprocha y alzo mis cejas
— Yo no les pedí que lo hicieran, Liv. Yo nunca lo hubiera hecho.— respondo ofendida — Confíe en ti y me dejaste.
— Lo hice por que dejaste que tus amigos le hicieran a eso a tu familia. Para ti solo son tus amigos, las Forbes y los Mikaelson. Nosotros no somos nada para ti y lo entiendo. No nos conoces. Pero tampoco nos reproches nada.— me cruzo de brazos molesta ante la acusación
— No, Cami, Liv no quiso decir eso.— le da una mirada amenazante — ¿Verdad?— ella se queda callada
— Está bien, Luke. No la obligues a nada que no quiere. Iré a mis otras clases. Nos vemos luego.— retrocedo alejándome
— Tu cabello.— me freno ante la voz de Liv — Te queda. La sombra negra resalta tus ojos.— volteo a verla
— Gracias.— respondo sin más y regreso al plantel
Entro a mi habitación y saco cosas de mi maleta. La maleta "especial." Es la que uso para mis grimorios, algunos ingredientes de bruja. No dejaba de estudiar libros que me ayuden a encontrar a Bonnie y Damon, pero nada. Como si no hubiera suficiente información en la tierra.
Me recuesto en el suelo con los libros extendidos pensando. Soy capaz de crear hechizos. Solo busco las palabras adecuadas.
— Te estaba buscando.— entra Chris a mi habitación y cierra la puerta — ¿Que haces?— suspiro
— Intento resolver esto.— muerdo el lápiz pensando en un hechizo — He visto esa misma hoja desde hace media hora. Nada viene a mi mente.— dejo lo que llevo en las manos — Todo en blanco.— expreso frustrada
— Caroline está obsesionada con romper el hechizo de la barrera y tú con Bonnie y Damon. Sin duda son hermanas.— sonrío y se pone junto a mi
— De niñas solíamos robar expedientes de mamá para resolverlos. Nos quebrábamos la cabeza buscando todo tipo de pistas, hasta el punto de obsesionarnos. Cuando me propongo algo, no lo suelto.— cierro mis libros
— Evitas hablar de Stefan.— me levanto agarrando mis cosas — Lo has hecho todo el verano. Nos hemos contado de todo y tú lo sedes.— hago una mueca y coloco mis grimorios en el estante
— Por que no quiero. No quiero pensar en el. No quiero hablar de él. Hacerlo me rompe el corazón.— menciono sincera — Lo amo. Lo amo con todo lo que tengo. Pero por más que intento acercarme y apoyarlo por lo de Damon el...— me pauso — Aveces pienso que no soy lo que necesita. Me dejo muy en claro que quería estar solo y que no lo buscara. Eso hice.— me ve fijamente — Estoy en mi "reputation era."— frunce el ceño
— ¿Tú que?— pregunta entre risas y lo veo confundida
— ¿En serio? Jamás has escuchado a Taylor...— me pauso al ver su expresión en blanco — ¡Omg! Okey. Tú no tienes buen sentido musical.— me burlo y me lanza una almohada
— Lo tengo. Solo no se de que rayos hablas.— meneo mi cabeza y le regreso el golpe — ¿Hablaste con Liv y Luke?— suspiro
— Algo, si. Con Luke todo bien. El problema es Liv. Tal vez tiene razón. No me he abierto a ustedes.— me siento en la cama
— Todo se da con el tiempo. Hemos convivido mucho estos meses. Se el tipo de persona que eres. Te importan las personas y lo más valioso para ti es la familia. Los Parker también es parte de ti. No te niegues a conocernos.— veo en sus ojos la sinceridad
— Lo haré. Lo prometo.— sonríe — Amm, ¿has sabido algo de Noah? No lo he visto por aquí.— frunce el ceño
— ¿No sabías?— me levanto preocupada
— ¿Saber que?— el corazón se me acelera
— Noah llega en la noche de Boston.— suelto un suspiro de alivio — Estaba con su hermana parte del verano y planea convencer a su novia de regresar a la universidad.— sonrío
— Si alguien puede convencerte de algo, es Noah Fell.— tomo mis llaves del estante — Debo ir por Caroline y visitar a mamá. No deja de mandarme mensajes sobre cómo su hija no se ha dignado a verla y que morirá pronto.— tomo mi bolso
— ¿Has pensado en hablar con nuestra madre?— me tenso — Deberías ir.— suspiro
— Lo sé. Necesito conocer su historia. La mía.— asiente — Es algo de lo que no puedo huir. Necesito respuestas.
— Bien. Yo iré a cambiarme para beber y conseguir alguna buena cita hoy.— alzo mis cejas — No debo juntarme con Tyler, solo piensa en sexo.— suelto una risa y salimos
— Ese es Tyler.
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Cada uno sigue su rumbo y conduzco mi asombroso auto. Es el mejor regalo que me pudo dar Elijah. Golpeo mis dedos al volante mientras escucho "Style" de la diosa Taylor. Ella hace mis viajes de carrera más divertidos, aunque no en las canciones tristes con las que me identifico. Taylor Alison Swift es un sentimiento. Literal, lee las mentes de todas las mujeres en el mundo. La amo.
Mientras cantaba, el teléfono suena, lo conecto al Bluetooth atendiendo.
— You got that long hair, slicked back, white T-shirt...— me interrumpen
— Camille, tenemos problemas.— se me baja la emoción — Estoy con Elena y estamos en el límite de la barrera. Apúrate.— suspiro tensa
— No estoy lejos, ¿que pasó?— pregunto preocupada
— Al parecer, Elena bebió de una turista y salió huyendo al pueblo. No pudo detenerla sin hacerse una brocheta vampiro.— me quedo perpleja
— ¿Qué? ¿Está loca? Estoy a cinco minutos, ya voy.
Cuelgo y le pongo velocidad. Ahora si que estábamos en problemas de vampiros. No puedo creer que una víctima por primera vez en la historia del pueblo, haya visto un vampiro y ande suelta. Que haya visto a una de nosotras. Esto es algo que debe reportarse.
Después de unos minutos llego a la ubicación, me bajo del auto. Veo a Elena angustiada y Caroline molesta
— ¿Qué hiciste?— le preguntó irritada mientras me acerco — ¿Por qué te alimentas de personas?— voltea a verme
— Está bien. Hechicé a todos los demás.— expresa serena y me cruzo de brazos
— Aguarda.— interviene Caroline — ¿Tu eres "el atacante de la frontera"?— frunzo el ceño
— ¿El que?— preguntó confundida, Elena están igual.
— ¿Sabías que mi mamá está buscando a un vampiro acechador?— alzo mis cejas y Elena parece sorprendida
¿Qué rayos pasa con todos aquí?
— Deben ser las hierbas que Luke me dio, me dan mucha sed.— responde abrumada y la veo anonadada — Tal vez no pienso con claridad.— camina de un lado a otro
— ¿Disculpa? ¿Qué tiene que ver Luke?— pregunto tensa
— ¿Que hierbas?— interviene Caroline y Elena nos da la espalda. Parecía ocultar muchas cosas
— Me permiten ver a Damon.— volteo a ver a mi hermana perpleja
— Son alucinógenos. Te dejan ver lo que tu subconsciente desea. Son difíciles de conseguir, como es que...— me pauso y Elena se gira para vernos
— Puedo hablarle y puedo estar con el...— Care la interrumpe
— ¿Eso es lo que has estado haciendo todo este tiempo? ¿Alucinando a tu ex novio muerto?— le reprocha y siento el nudo en el estómago
— Trate de llorarlo, Caroline. Créeme, conozco el dolor. Soy una experta en duelo. Y lo intenté. — la veo con tristeza — Me enfoqué en Atlas pero no saco a Damon de mi mente. Pero cada vez...que me doy cuenta que no lo volveré a ver....siento que voy a morir.— se le quiebra la voz
— Te entiendo, ¿si?— me le acerco y la tomo de los hombros — Te entiendo. El era mi mejor amigo y lo extraño. Pero hay mejores formas de manejarlo.— expreso sincera
— ¿Como qué? ¿Dejar el pueblo y olvidarme de todos los problemas que dejé y vivir una vida falsa del otro lado de la ciudad? — la suelto al escuchar la indirecta — O podría ir con Stefan viajando de país a país siguiendo falsas esperanzas de que podremos recuperar a Damon y a Bonnie. Todos lidiamos con eso. Esta es mi forma de lidiar con eso.— paso saliva tensa y noto el dolor en su mirada
— Si, pero no estás superándolo, Elena. Solo presionaste "pausa."— aclaro directa y me ve incómoda
— Llamaré a mamá y ella lo arreglará. Pero tienes que irte de aquí. Escóndete, ¿si? Solo vete.— le pide Caroline y Elena regresa a su auto
Sentía que estaba en una esfera donde el dolor no entra y está a punto de explotar.
— Ella está peor de lo que pensaba.— me llevo las manos al cabello mientras Caroline marca el celular
— No pensé que se estuviera drogando para ver a Damon. No es propio de ella.— expresa Caroline en negación — Mamá.
He intentado evadir el tema de Damon por que no podía llorar o romperme mientras cuidaba a una bebé. No podía beber hasta olvidarme que se fue o deprimirme para no sentir. Tenía que guardar ese dolor para no lastimar a nadie. Debía ser fuerte. Pero, ver a Elena y regresar es como una cubetada de agua helada a la realidad. Lo extraño más de lo que admiro y se siente todo tan irreal. Quiero llorar hasta quedar seca. Quiero encontrar la solución y salvarlo, pero no puedo. Me siento tan impotente que siento que muero. Las cosas se me van de las manos y me harte de eso.
— Mamá dice que se ocupará de la situación.— se acerca Caroline y nota mi mirada — ¿Qué pasa?
— Le fallé a Damon, Care. Han pasado cuatro meses y no lo he traído de vuelta. Le fallé a Stefan al prometerle que su hermano volvería.— se me quiebra la voz — Elena tiene razón. Estar lejos me hizo evitar la realidad. Me hizo no pensar en que mis mejores amigos no estaban muertos. En qué Damon murió por mi culpa. Volver es sentir todo eso de nuevo. Pensé que irme ayudaría pero...— fluyen las lágrimas — Le fallé, Caroline. No pude salvarlo.— viene a abrázame y lloro desolada
Es algo que necesitaba. Solo romper en llanto
— Tranquila, hermosa. No es tu culpa.— me aferro a ella — No pongas esto en ti, Cami. No es justo.
— Lo extraño tanto que me cuesta respirar. Los dos hombres más importantes en mi vida solo se esfumaron. Stefan hizo su vida sin mi y...— me aparto de ella — Se que en el fondo ya se canso de mi.— niega
— El nunca lo haría. El te ama.— siento el dolor en el pecho y me llevo la mano apoyándola ahí
— Me siento tan vacía que siento que voy a explotar. El amor de mi vida no está y mis dos personas favoritas están muertas. Muertas. No quiero sentir esto. No quiero.— me cubro el rostro
— Lo haremos juntas.— toma mis manos — Buscabas sola pero no conmigo. No tienes que solucionarlo por tu cuenta.— la veo con los ojos hinchados — He leído tantos libros que escupo más palabras de lo normal. Encontraremos algo y nos apoyaremos.— sonrío ligeramente — No nos vamos a rendir.— inhalo hondo
—Jamás me voy a rendir. Lo haremos juntas.— asiente — Tengo que....tengo que buscar a Luke para ver que sucede. Debemos hablar de esto.— asiente
— Veré que hay con mamá, te veo en un rato.— asiento y nos despedimos de abrazo, cada una va a sus auto.
Mientras voy de regreso a la universidad, mi celular suena, contesto.
— ¿Donde están? El partido empezará en quince minutos.— habla Chris y suelto un suspiro
— Parece que solucionando problemas. ¿Sabías que Elena tiene un problema de brujas con nuestros hermanos?
Si, les digo hermanos por que para mi lo son. No considero tíos a personas que tiene mi edad. Es solo más raro.
— Luke le estuvo dando algo que la hace alucinar a Damon...— me interrumpe
— Espera, ¿qué?
— Le provoca mucha sed de sangre y confusión. Casi mata a alguien hoy.— expreso abrumada
— No tiene sentido. Luke no haría algo así.— menciona con negación
— Pues sabemos cómo es Luke. Siempre busca hacer que las personas se sientan mejor y ahora Elena vive en la tierra de la fantasía.
— ¿Ella está bien?— suspiro
— Ella es un desastre. Mientras Luke siga jugando al doctor, ella no se pondrá mejor.
— Hablaré con el. — me cuelga y le piso al acelerador
Después de unos largos minutos llego a la universidad. Específicamente al estadio donde estaban todos. El lugar estaba repleto y apestaba a alcohol y sudor. Intento concentrarme en voces conocidas para dar más rápido con Luke
— ¿Ya vieron? El chico enloqueció.— escucho alboroto y sigo el ruido, había un círculo de personas. Como si hubiera una pelea
— ¿Donde está tu magia ahora? ¿Qué pasa? ¿No puedes hablar? — me sorprendo al ver a Tyler someter a Luke tomándolo del cuello — Aléjate de Elena o tendrás un problema que tu varita no arreglará.— intervengo furiosa
— Oye, suéltalo.— le ordeno a Tyler y se sorprende al verme — Dije lo sueltes.— lo empujo y dejo a Luke libre — ¿Que diablos te pasa?— alzo mi voz y Tyler se queda estático, me acerco a aluje
— ¿Lo tienes bajo controlado?— lo regaña Ric y ayudo revisándolo
— ¿Estás bien?— asiente tomando aire, todos estaban en un silencio incómodo
— ¿Me pueden decir que diablos está pasando?— nos pregunta Alaric y Luke y yo nos vemos
— ¿Que pasa?— llega Chris agitado — No los encontraba por ningún lado. Este lugar es enorme.
— Debemos hablar.— le pido a Luke y asiente, ambos salimos de la multitud
— Mira, lo siento. Yo no quería que Elena tuviera problemas.— nos detenemos del otro lado del campus — Solo quería ayudar.— suspiro
— Pero, Luke. Tú sabes el daño emocional y psicológico que le puedes causar a una persona. Elena vive engañada.— reprocho — No debiste haberle ofrecido esas hierbas en primer lugar.
— Lo se, yo...— lo interrumpen y volteamos a ver
— No es culpa de Luke que tu amiga lo esté chantajeando para alimentar la enfermedad mental que está desarrollando.— expresa Liv sin tacto y me molesto
— Duelo. Se llama duelo. Luke sobrevivió ese día, ¿recuerdas? El resto perdimos perdonas por que me dejaron.— reclamo
— Estoy consciente de eso, Camille. Pienso en eso todo los días, igual que Luke. Lo mínimo que puedes hacer por tu familia, es alejar a Elena y que no molesten a Luke.— me pide y nos vemos desafiantes
— Pueden dejar de pelear por un momento.— interviene Chris — Somos familia. Al menos entre nosotros debe haber paz.— nos vemos entre los cuatro — Somos lo único bueno de ese aquelarre. Tener este resentimiento no ayuda a nadie.— me cruzo de brazos
— No te culpo a ti...— suelto y Liv frunce el ceño — Me culpó a mi. Es más fácil ponerlo en ti que cargar eso en mis hombros. Lo lamento.— me ve sorprendida — Ahora mismo....Soy una persona en negación. No quiero admitir que Damon murió. Que Bonnie se fue y que no he hecho nada para arreglarlo. Es más fácil huir que enfrentar. Ahora todo me vino de golpe y mi burbuja de no dolor de reventó y volvió. Lo lamento.— retrocedo
— Cami, no, espera...— escucho a Luke y solo me voy a velocidad vampírica. Necesitaba unos minutos fuera los recuerdos y la realidad.
Me siento en una pequeño muelle a las afueras del pueblo. Había un silencio que te daba tranquilidad. El agua era fría pero reconfortante. Hay alguien con el que querría hablar. Extraño escuchar su voz y solo quiero que sepa que....no se. Solo quiero hablar.
— Hola, soy Stefan, deja un mensaje.— atiende la contestadora y suelto un suspiro hondo
— Hola, soy yo. La loca ex que probablemente quieras lejos. Todos se alejaron. Como si todos fingieran que pueden con esto solos. Elena se fue. Creo que teme tanto aceptar lo que pasó que se convirtió en alguien diferente. Si me preguntas, Tyler se esconde en Whitmore fingiendo que todo está bien. Como si pudiera desaparecer el gen licántropo. Caroline está en negación y quiere arreglar todo para que sea como antes. Mi familia parece ser disfuncional pero creo que es lo único bueno de volver. Matt y Jeremy nunca dejarán Mystic Falls. Hay una barrera invisible entre nosotros y ellos y nadie hace nada al respecto. A veces me pregunto si ellos no quieren regresar. Perdimos a dos de nuestros amigos cercanos. Nos necesitamos. Tenemos que estar buenos, Stefan, o terminaremos como fotos de un anuario viejo. Por eso empezaré a llamar y no dejaré que me sigas evitando hasta que me contestes y escuche tu voz y me digas que vas a ayudarme a arreglarlo. Por que no voy a darme por vencida con nosotros. Te amo. Nunca olvides eso.— apago el teléfono e inhalo hondo, escucho latidos, me giro al instante
— Soy yo.— me levanto al ver a mi mamá — Sabía que estarías aquí.— voy sobre ella abrazándola.
— Te extrañe mucho.— me aferro — Muchísimo.
— Y yo a ti cielo. Fue una eternidad.— nos separamos — Luces diferentes. Así no tenias en las videollamadas.— sonrío y acaricia mis mejillas — El fleco te queda. Eres hermosa, todo te va.
— Gracias.— se va y se sienta en la orilla del muelle
— Solíamos venir aquí todo el tiempo cuando estabas triste. Siempre te gustó ver las estrellas.— sonrío y me siento junto a ella
— Por eso le puse a mi hija ese nombre. Stella en latín. Significa estrella.— veo al cielo — Siempre he buscando las respuestas en el cielo. Donde los pensamientos se destilan. Solo hay paz y libertad allá arriba. Se que mi estrella más brillante es mi bebé.— le señalo — Me cuida desde donde está.— noto la tensión
— Hace tiempo que no tocabas ese tema.— volteo a verla por la seriedad — Lo habías dejado.— meneo mi cabeza
— Lo había reprimido el trauma y la terapia. Una nunca olvida el dolor de una perdida. Lo superé que es distinto. No puedo hacer nada para regresarla. Mejor no hablemos de eso.— remojo mis pies algo incómoda
— Debí pelear más por ti y Stella. Debí hacer más.— niego y la rodeo con mis brazos
— No fue culpa de nadie, mamá. Stella nació muerta.— aclaro y noto que sus ojos derraman una lágrima — ¿Qué pasa?
— Hay, hija. Hay muchas cosas que no sabes.— frunzo el ceño — Cosas que no debía llevarme a la tumba. No vas a perdonarme.— siento el nudo en el estómago. Un mal presentimiento
— ¿Qué pasa?— expreso con inquietud
— Es sobre Stella.— el corazón se me acelera — Es momento de hablar con la verdad.
Esto no suena como un buen comienzo. Suena como un corazón roto.
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