Estaba en casa. En mi propia cama. En mi habitación. Me había sentido atrapada por mucho tiempo. Pero no había dejado de pelear y no iba a hacerlo. Extrañaba a mi familia y sobre todo mi vida. No podía ver nada en el exterior. Todo era oscuridad y miedo. Sentí que solo había desaparecido. Fue aterrador. Fue como volver a morir. Nunca quiero regresar a eso.

- Hija - escucho a mi mamá y abre la puerta - Hola- me acomodo en la cama

- Hola - saludo cálida y entra con una carpeta

- Conseguí lo que pediste. No creo que te guste tanto- la pone en el escritorio y me apoyo en la cabecera

- No se que pasa con el, mamá. Despierto después de días y lo primero que veo es a Damon secuestrando a Jeremy. Siento que todo cambio en un segundo - expreso abrumada

- Ya no pienses en eso, Cami. Ya estás en tu casa y en tu vida. Lo debas se resuelve después - bajo la mirada y sobo mis manos.

Quería la cabeza de alguien. La de Nadia. Juro por dios que voy a matarla con mis propias manos. Ya acabé con su madre y ahora sigue ella.

- Mille...- rompo mi burbuja - ¿Estás bien, cielo?- asiento

- Si. Si, gracias por eso - me bajo de la cama - Tengo que llevárselo a Stefan - me saco el short de pijama para ponerme un pantalón.

Que si le había contado a mi mamá que encontré a mi familia biológica? Pues no. Claro que no. Apenas lo digiero yo misma. Ella enloquecerá

- No hemos tenido oportunidad de hablar. Has dormido durante dos días.- suspiro y me pongo una blusa- No evadas lo que sientes, hija.- asiento

- Lo sé, mamá. Estoy bien - aclaro y saco unos zapatos del clóset

- Quiero que vayas a terapia.- volteo a verla - Faltaste mucho y después de...- la interrumpo

- Lo haré. No te preocupes.- asiente - Se que es lo que necesito. No lo dejaré.- sonríe ligeramente y se levanta de la cama

- Tú hermana no ha dejado de preguntar por ti. Habla con ella.- asiento y se acerca a darme un beso en la frente - Te amo, nunca lo olvides.- sonrío y sale de mi habitación. Termino de abrocharme los tennis y me siento en la cama. Inhalo hondo y bajo la mirada a mis muñecas

Flashback

- Cami, hey, hey..- Stefan me sostenía del rostro mientras todo se miraba distorsionado - No me hagas esto. Te necesito.- jadeo y miro alrededor. Siento como sus brazos rodean mi cuerpo desnudo. Noto la sangre en el suelo. Los gritos de mi mamá me ensordecen

- Lo siento, lo siento...- expreso aterrada - Lo siento, lo siento...- me tiembla la voz mientras siento que me congelo. Stefan se acomoda contra la pared y veo a mi mamá tiras de rodillas y venir hacia mi

- ¿Por que? ¿Por que?- me aborda con una abrazo mientras me quedo estática.- ¿Por que?- inhalo hondo

- Por que me cansé.

Fin del flashback
Escucho la puerta y regreso a mi realidad. Veo a Caroline entrar y siento como mi pulso se acelera. Su rostro era opaco. Como si no supiera que decir o como actuar. Todo cambió desde aquella noche. Estaba decepcionada de mi y lo sabía. Solo que ella no quería que yo lo notara.

- ¿Como te sientes?- se sienta en el sofá y suspiro

- Solo dilo, Caroline. Se que has querido hacerlo desde hace días pero no has podido. Necesito escucharlo.- bajo la mirada y ella suspira

- No recuerdo un día en mi vida en el que no te haya amado. En el que no te haya necesitado. En el que no hayamos estado juntas.- elevo mi cabeza- Toda la mañana me lo he preguntado y lo he sobrepensado. Hemos estado juntas durante 17 años. Nos hemos cuidado. Protegido. Salvado de nosotras mismas. Me amaste aun sabiendo que era vampiro. No pestañeaste al momento de ayudarme. Como si fuera un instinto ver por mi. Y te agradezco tanto. Te agradezco que seas la persona que moriría protegiéndome y yo haría lo mismo por ti. Sin pensarlo...- mis ojos se cristalizan - Se que sufres, Cami. Te conozco mejor que a mi misma. Toda la vida has suprimido lo que sientes por que no te gustan que te vean como una víctima. Como alguien débil. No te gusta que te vean vulnerable.- bajo la mirada apunto de llorar.- Lo que te pasó fue algo horrible. Es algo que será difícil superar pero que con el tiempo lo lograrás. Eres la persona más fuerte que conozco. Tú me ayudaste cuando viví lo mismo. Necesito que hablases conmigo. Que sientas que a todo el mundo le puedes ocultar lo que sientes pero no a mi. No a tu hermana. No me gusta saber que sufres en silencio. Es como tortura.- volteo a verla y noto su dolor en esos lindos ojos azules- Somos hermanas. Nos ayudamos la una a la otra. No nos dejamos caer jamás. No nosotras.- asiento e inhalo hondo

- Lamento ser tan cerrada, Care. Yo también te amo tanto. No hay un limite para la fuerza con la que lo hago. Moriría antes de que algo te pase y se que he fallado. No se por que hago esta cosa de guardar todo para mi. No puedo detenerme. No puedo un día decirte que hablemos y que te cuente todo el dolor que cargo. Todo está avalancha de emociones que me cubren por completo. Intento solucionarlo. Por eso voy a terapia. Para lograr expresarme y soltar un poco de lo que llevo aquí...- apunto a mi corazón - Solo quiero tener paz por un tiempo. Quiero recuperar a la chica que era. Esa divertida y ocurrente. La Camille que podía hacerte llorar de la risa o hacer el mejor cereal del mundo...- sonríe y se le resbala una lagrima- Intentaré recuperar a esa persona. La necesito. Siento que ya no se quien soy. Camille Forbes, Camille Mikaelson o Camille Parker. Solo se que el primero no me causaba tanto sufrimiento.- expreso sincera y noto que eso le sorprende

- Solo se quien tú quieras y necesites ser. Ser la bruja o la humana. Es tu decisión.- sugiere serena y asiento con el nudo en el pecho

- Esa noche todo era frío. Recuerdo como estaba recostada ahí y solo pensaba en mi cuerpo congelarse. Había una parte de mi cerebro que solo se apagó. Que ya no quería sentir. Me gusto esa parte..- sus ojos se cristalizan- Y quise volver a sentirlo. Sabía que si me hacía vampiro tendría la opción de apagar mi humanidad y no sentiría nada. Que podía estar sentada en mi cama y no pensaría en sus sucias manos sobre mi cuerpo. Es su asquerosa voz cerca de mis odios. En sus repugnantes fluidos alrededor de mi cara. En la cantidad de veces que...- me pauso y noto que se le derrama una lágrima- El me arrebató la ropa como si yo fuera nada. Como si mi cuerpo fuera un pedazo de carne. Yo solo quería gritar y que alguien me salvara. Que el no tuviera ese poder sobre mi. Me he protegido te peores seres humanos que el. Y al final del día. El tomó algo de mi. Me arrebató algo esa noche. Ya no soy la misma persona desde entonces. Por eso siento que no se quien soy, Care. Por que Camille Mikaelson no hubiera dejado que el se saliera con la suya. Que la bruja más temida y poderosa no pudo salvarse de un simple mortal. Eso en que me deja...- se me quiebra la voz y ella rompe en llanto - En ese lugar solo era Camille. Una humana incapaz de defenderse. Y es quien siento que soy ahora.- me ve con la mirada quebrada. Se miraba muy herida por mis palabras y yo no quería que nadie más sufriera por mi

- Gracias por decirme eso, Cami. Lo aprecio.- se acerca a darme un abrazo y me aferro a ella - Todo va a estar bien. Lo prometo.- suspiro y asiento

- Eso espero. Eso deseo.- nos separamos y limpio sus lágrimas - Por más que ame este gran momento. Tengo que ir con Stefan a ayudar con este drama de Damon.- me levanto de la cama - Quiero ayudarlo. - asiente

- Y yo debo ir con Tyler.- frunzo el ceño - Nadia parece que estaba hipnotizado a Matt.- alzo mi mentón - Tyler dice que no ha sabido de él desde entonces. Quiero ver que no le cause más daño. Noah vendrá.- asiento

- Me avisas cualquier cosa.- asiente y sale de la habitación. Yo tomo mis llaves del escritorio y veo una foto. Una linda. Elijah, Klaus y yo.

Recuerdo cuando la tomaron. Fue después de la graduación. Ellos querían una donde nos viéramos feliz y bueno. Es la única foto que tenemos juntos. Ellos son como mis padres y los extraño mucho. Ojalá estuvieran aquí. Pero ellos tienen su vida y yo la mía.

Dejo de admirarla y me encamino a la salida. No sabía que había hecho Katherine con mi cuerpo. Temía preguntar. Pero eventualmente lo haría. Todo del otro lado era oscuro y solitario. Aun se me eriza la piel cuando lo pienso. Después de conducir por unos minutos llegué a la casa de Stefan. Estaba frente a la puerta a punto de tocar cuando el me abre antes

- Hey.- sonrío ligeramente y el me ve con un brillo en sus ojos - Te estaba esperando...- lo pauso abrazándolo. El se aferra a mi con una gran fuerza. No quería soltarlo jamás. Siempre me he sentido a salvo entre sus brazos - Cami...- nos separamos y nos vemos con intensidad. Siento mi garganta gotear y mi corazón queriendo salir del pecho. Desliza su mirada a mis labios y siento que el lugar se hace chico

- Tenías razón, está alocado. - el da un paso atrás y yo siento que me tiembla toco el cuerpo - Esto es de mi mamá.- le entrego la carpeta y entro a la casa

- Adivino, personas desaparecidas y ataques de animales.- menciona frustrado

- Es correcto. Hay otra cosa - frunce el ceño mientras ve el reporte - Todas las víctimas se encontraron en sus hogares sin la cabeza. Y su piel estaba desecada.- aparta la vista para verme desconcertado. Sentía el mismo nudo que el en el estómago

- Damon se alimenta de vampiros. - expresa consternado y asiento preocupada. El va hacia el sofá y se sienta abrumado. Ambos estábamos igual.

- Desearía saber por qué hace todo esto. Se que Wes fue malvado con su amigo Enzo y...- me pauso y cruzo mirada con Stefan - Se venga de todos los de Augustine...- camino de un lado a otro estresada

- El sabe la verdad, Cami.- me freno y volteo a verlo - El quiere encontrar a Wes y matarlo por lo que hizo. Créeme puedo entenderlo. Si lo tengo enfrente lo destripo yo mismo.- me quedo estática - Quiere hacerlo pagar.- siento que el pecho se me hunde y que todo se hace pequeño

- No puede ser...- me dejo caer en el sillón - ¿Quien le dijo?- sobo mis manos tensa. Debe sentir que lo traicioné por no contarle

- Klaus..- alzo mis cejas - Sabías que el no se iba a quedar con las manos cruzadas.- meneo la cabeza

- ¿Quien más sabe? - pregunto con interés y relame sus labios - ¿Stefan? - suspira

-Solo Klaus. obligó a Noah a decirle - suspiro tensa y paso mis manos por la cabeza - Cami, hey - intenta acercarse y me levanto

- El causa todas esas muertes por mi. Toma mi venganza en sus manos.- expreso molesta - No pedí nada de esto, Stefan. Se supone que era a mi manera. Hice pagar a Wes y lo convertí en lo que más odia. Supongo que está vivo si Damon lo está buscando. Por que siempre hacen esto.- me vuelvo a sentar

- El te quiere mucho, Cami. El te ve como una luz en medio de su oscuridad.- volteo a verlo - Está en este abismo por que...- lo interrumpo

- Se culpa...- cierra sus labios - Se culpa por no salvarme.- suspira y baja la mirada- El estaba ahí y no pudo hacer nada para detenerlo. Pero jamás lo culpé, Stefan. Si alguien tiene la culpa es Wes. Desearía que Damon no tuviera que cargar con eso.- expreso sincera

- No debí dejarlo ir.- menciona con culpa y meneo la cabeza

- Nadie podía evitar que fuera a atacar a Wes esa noche.- aclaro y suspira - Sabemos que cuando Damon quiere algo. Nadie puede detenerlo de conseguirlo.- relame sus labios

- Wes debió inyectarlo con lo que le dió a Jesse que hace que se alimente de vampiros.- comenta preocupado

- Buenas noticias y malas - escucho a Elena y volteo a ver - Las malas es que cuando le pasó a Jesse hubo que matarlo, pero las buenas son....- hace una pausa y ambos la vemos con atención - Lo siento, normalmente hay alguna buena noticia.- suspiro y se sienta junto a mi

- Bueno. Cada patente tiene una cura...- voltea a verme - Si Wes creó eso, tal vez también la cura. Primero debemos encontrarlo.- hablo confiada

- No sería la peor persona del mundo si no quiero ir a buscar a mi ex. ¿Cierto?- menciona Elena y meneo la cabeza

- Tienes derecho a estar enojada con el. Secuestró a tu hermano y Enzo casi lo mata. Vamos a ayudarlo.- comento sincera y me levanto del sofá

- Bien. Estaré comiendo comida chatarra y bebiendo alcohol caro aprovechando que eso no puede matarme..- Stefan y yo sonreímos - Estaré bien. Hablé con Atlas y...- la interrumpo

- Quiero a ese chico lejos de ti y de todos..- frunce el ceño - El fue quien me entregó a Wes...- me ven perplejos - Si lo veo. Lo mato. - levanto mi bolso de la mesa - Lo mismo con Nadia Petrova.- camino a la puerta para salir

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Narrador omnisciente
-¿Como está? Parece que tú apenas pueden con todo- le dice Elena y el da un suspiro largo

- Estaré con mi ex novia las siguientes doce horas en un auto. Lo digiero.- ella sonríe - Solo no quiero arruinarlo. Se que le importa Damon y se que quiere salvarlo de si mismo. Pero casi no hemos tenido el tiempo de hablar sobre lo otro. - Elena frunce el ceño- Problemas entre nosotros- ella asiente

- Lo arreglarán. Ustedes son la pareja perfecta. Han estado juntos durante dos años. Han tenido demasiadas complicaciones en su relación pero aún así continúan solucionándolo. Por que su amor es muy fuerte.- Stefan sonríe ligeramente - No dudo que algún día terminen casados y viviendo una gran vida. Me encantaría tener esa clase de amor.- comenta bajoneada y el toma sus manos

- Lo harás, Elena. Una chica como tú no será difícil de encontrar al chico indicado.- ella le sonríe con calidez y se ven fijamente - Tengo que irme. Te veo luego.- se levanta del sofá

- Si. Con cuidado.- toma sus cosas y sale de la casa.

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Camille
- Pensé que llegarías mañana.- me quejo mientras estoy apoyada en el auto. Sonríe y se acerca

- ¿No vas a empacar nada?. Estaremos un largo tiempo en la carretera.- suspiro y me levanto

- Lo puse en el maletero antes de venir a aquí. - alza sus cejos - Vamos, niño bonito. Hay una carretera que tomar.- sonríe y me subo del lado del copiloto

- ¿Niño bonito? ¿Desde cuando me llamas así?.- se sube y me pongo el cinturón

- Desde hoy. Intento hacer algunos cambios.- saco un libro de mi mochila - También me imagino la muerte lenta de Nadia Petrova. O lo que haré cuando regrese. - pone en marcha

- Cami, hemos hablado de...- lo interrumpo

- Se lo que dirás. Te conozco, Stef.- volteo a verlo - La venganza no calmará mi enojo. No ayudará en nada. Solo es hacer pagar y sabes que. Me importa muy poco si no me ayuda. Solo quiero hacer que se vaya al infierno con la perra de su madre. - pongo la vista en mi libro y noto que sonríe

- Suena genial. Que actitud.- siento como estómago se revuelve - ¿Estás bien?- cubro mi boca y siento que el vomito vendrá en cualquier momento

- Para..- suelto un quejido - Detén el auto...- se frena y abro la puerta. Salgo para vomitar

- Cami, ¿estás bien?- me tiro de rodillas y toco mi vientre. Me dolía un poco

- Si, si. Se me revolvió el estómago. Debió ser por que solo he tomado café - se me acerca y me ayuda a levantarme

- Vamos a una gasolinera. Hay que comprarte agua y pastillas.- me toma del rostro para checarme

- Estoy bien, Stefan. Solo conduce...- quito sus manos y voy al coche. Al subir me quedo algo asustada por lo que pasó. No quiero hacerme ideas en mi cabeza. Sobrepensar la situación. Escucho la puerta y volteo a ver

- Cami...- lo pauso poniendo mi mano

- Solo es un dolor de estómago, Stefan. ¿Por que te alarmas tanto?.- me ve fijamente y asiente

- Si, tienes razón. Lo lamento.- saco mi libro y comienzo a leer. Sentía que las palabras se me corrían y que la cabeza me iba a estallar. No es un buen día para estar encerrada en un auto y con paisajes lizos. Después de un rato me voy quedando dormida. Leer "Bajo la Misma Estrella" por quietísima vez no ayuda.

- Stefan, quítame esto de las manos..- le grito exaltada mientras estoy en el hospital.

- Es por tu bien..- lo fulmino con la mirada e intento zafarme pero mis manos estaban atadas a la cama

- ¿Por que haces esto? ¡Quiero que me dejes en paz...!- grito y todas las ventanas se rompen. El se cubre y me sobresalto

- ¡Camille!- escucho a mi madre y volteo a verla a la puerta. Caroline la acompañaba - Basta, por favor.- me ve con esa expresión de dolor. Esa que demuestra que me desconoce por completo.

- Solo quiero que me dejen en paz. Quiero irme a casa. No lo intentaré de nuevo...- volteo a ver a Stefan que tenía los ojos cristalizados - Lo prometo..- expreso sincera y entra una enfermera

- La hipnotice para que no diga nada. Ella va a darte calmantes...- me dice Caroline y niego. La enfermera se acerca con una jeringa

- ¡No! ¡No! Eso hace que me sienta débil y enferma...- pongo resistencia en las cuerdas pero mi cuerpo estaba dopado. Apenas podía

- Tranquila, cielo. Es por tu bien...- me dice la enfermera y me sacudo en la cama

- ¡Stefan! ¡Mamá, por favor!- suplico y ambos se alejan. Ella inyecta la intravenosa - No lo volveré a hacer. Lo prometo - siento como mi cuerpo se relaja y mis ojos se van cerrando

-¿Como está?- escucho a Elijah y veo borroso. Solo notaba la silueta de un hombre

- Mal, Elijah. No puedo con esto...- mamá habla entre llanto y el la abraza. Stefan se acerca

- Todo va a estar bien, Cam.- me toma de la mano - Aquí estaré.- cierro mis ojos

Me levanto el golpe al sentir que el auto se freno. Veo alrededor y noto que estábamos en una gasolinera. Stefan voltea a verme

- Lo siento. No quería despertarte- checo mi reloj y noto la hora. Ya era tarde

- Dormí la mayor parte del viaje. Necesito estirarme..- me bajo del auto y procedo a mover el cuerpo

- Parecías un ángel mientras dormías...- volteo a verlo y cierra la puerta - Creo que no te había visto dormir así en un tiempo.- sonrío ligeramente y se acerca para poner gasolina

- No he tenido los motivos...- abro la puerta para sacar mi bolsa - Necesito azúcar. ¿Quieres algo de la tienda? - la cierro

- Cami, aprecio que estes aquí, pero no tenías que venir. Se que esto es difícil para ti.- suspiro y me cuelgo la bolsa

- Damon nunca se rendiría conmigo. El es mi mejor amigo y si se metió en este lío es por mi...- intenta decir algo que es contradecirme y lo pauso - Se lo que dirás y es mentira. Lo hace por mi..- sonríe ligeramente

- Camille Forbes. ¿Ahora sabes todo lo que diré?- ladeo una sonrisa y nos vemos fijamente

- Cuando pasas tanto tiempo con una persona. Sueles conocerla bien.- asiente

- Solo....no pongas esto en ti. Enzo fue una gran parte de lo que hace. No te culpes por las acciones de Damon...- asiento - Se que lo haces. Por que te conozco..- sonrío y se pone frente a mi - Te conozco muy bien y se que crees que Damon es tu responsabilidad. No lo es..- suspiro

- Iré por golosinas que probablemente me maten antes de los treinta. ¿Quieres algo?- suspira asintiendo

- Solo un poco de agua y papas fritas..- alzo mis cejas- ¿Qué? Un vampiro de 100 años no puede comer frituras..- sonrío y me encamino

- No tengo una imagen mental de Stefan Salvatore comiendo de una bolsa de papas - sonríe y yo igual. Entro a la tienda - Buenas tardes..- saludo y tomo un canasto de la entrada. Comienzo a pasearme por el lugar y meto cada clase de cosas. Desde chocolates hasta pretzel's. La mejor combinación del mundo. Me encanta lo dulce con lo salado. Recojo las cosas que Stefan me pidió y voy a la caja a pagar

- ¿Vienes de paso? - me pregunta el cajero mientras comienza a cobrar las cosas. No le calculaba más de dieciocho

- Si.- respondo a secas y noto unas pastillas para las náuseas y mareos - Me agregas esas.- le señalo en la repisa y voltea a ver

- Claro.- las toma y las coloca con las demás cosas. Golpeó mis dedos contra el mostrador mientras siento que el sonido de la máquina retumba en mi cabeza. - ¿De donde vienes?- salgo de mi burbuja

- Mystic Falls.- respondo al instante y sonríe poniendo todo en las bolsas

-Me da pena decir esto pero...- lo interrumpo

- No sucederá. Solo dime cuánto es para que pueda pagar.- me ve con sorpresa y me dice el monto. Saco mi cartera y le entrego el dinero - Gracias. - tomo las cosas y salgo de ahí. Veo a Stefan esperándome

- Lista, señorita Forbes..- levanto la bolsa

- Sigamos.

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Narrador omnisciente
A Enzo y Damon los viajeros los habían encerrado en la última casa de su víctima por pedido de Wes. Ahora estaban atrapados y eso ponía ansioso al vampiro. Ya que su única fuente de alimento sería Enzo. Cosa que no querría hacer.

-Ríndete, compañero.- le dice Enzo después de que lanzó una silla contra la ventana - Los viajeros sellaron el lugar por completo.

- No puede durar para siempre.- añade molesto

- No es necesario. Wes solo necesita que dure ocho horas, ¿recuerdas?- le aclara - Luego va a poder entrar y hacerle autopsia a mi cadáver.

- Demonios.- Damon golpea la pared con frustración- Estás muy tranquilo con esto.- se sienta en el suelo

- ¿Olvidaste todo lo que te enseñé en esa celda? La mente calmada siempre prevalece.- menciona Enzo sereno

- Siempre el soldado. - suelta Damon y Enzo suspira levantándose de una silla

- Tienes amigos que podemos llamar. ¿Tu hermano? Sobre todo la brujita que puede tirar el hechizo. Todo lo que sea para que no se involucre tus colmillos en mi cuello.- Damon niega

- Mi hermano me dijo que no volviera, no lo llamaré y respecto a Camille. No quiero verla ahora. - comenta abrumado y Enzo suspira

-¿Y mi vida no vale tu orgullo?- le pregunta ofendido

- No vendrán.- insiste Damon sin ánimo

- Tal vez si. Y les harías daño- menciona entendiendo la situación - No quieres arriesgarlos, ¿o si?- Damon lo ve fijamente- Yo, por el otro lado..- lo interrumpe

- No me alimentaré de ti.- le aclara y Enzo voltea a verlo - Buscaré otra forma.

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Camille
Había comido demasiadas barras de chocolate y había cantado diferentes canciones de Taylor Swift. Stefan solo se reía de mi por que decía que podría tener grandes habilidades pero cantar no era una de ellas. Estaba cansada y estar en un auto por horas no ayuda. Solo quería parar un segundo

- Okey, SeñoritaSwift, ¿no cree que ha comido demasiado azúcar por un día? - frunzo el ceño y termino de comer mi chocolate

- ¿A que te refieres?- pregunto confundida y voltea a verme sonriendo

- A que tienes la cara cubierta de chocolate. Es adorable - bajo la envoltura y me veo en el espejo. Parecía niña de cinco años con todo ese chocolate en mi barbilla

- Que vergüenza...- intento quitarlo con mis manos pero me sentía pegostioza - Es un desastre.- ríe y lo fulmino con la mirada

- Hay un hotel más enfrente. Podemos parar unos segundos. Vas al baño y no se, te limpias- asiento

- No he podido dejar de pensar en Damon. El debe sentirse asustado. La compañía de Enzo tal vez no ayude mucho..- comento abatida

- Lo recuperaremos. Está herido pero no es causa perdida.- menciona sereno y asiento

- Con los años, quise odiarlo por lo que le hizo a Caroline. Traté demasiado. Pero no se, había algo en el que me hacía dudar de todo. Que era alguien tan roto como para causar tanto mal. Veía a través de su alma. El se sentía tan solo, Stefan..- volteo a verlo - Nunca lo admitió por que es como yo, no nos gusta demostrar nuestras vulnerabilidades, pero en el fondo sabía que tenía un gran vacío. Que lo que menos necesitaba en su vida era que alguien se rindiera. Por eso nunca lo hice con el. A pesar de que ha hecho lo imposible por alejarme. No puedo hacerlo. No puedo dejarlo. No se que signifique eso...- me interrumpe

- Lo amas, Camille..- lo veo con sorpresa- Tú ves a través de él. Como nadie lo ha hecho. Ves al Damon humano que hace cien años no había visto. Que creí perdido...- siento el nudo en la garganta y noto que es difícil para el decirlo - Y se que el no ha dejado de amarte ni un segundo..- frunzo el ceño

- ¿A que te refieres?- pregunto con confusión

- No sabes que es estar enamorado de ti..- alzo una ceja - Cuando tú yo estábamos juntos, cada átomo de mi cuerpo me decía que era lo correcto. Que todo era  perfecto. Y un amor así te cambia la vida..- sonrío ligeramente. No sabía que me viera de esa forma

- Si amo a Damon, Stefan..- suspira y se estaciona - Pero como mi mejor amigo. Nos hemos salvado el uno al otro y el sabe cosas de mi que no le diría a nadie. No todo se trata de romance en esa vida. También puede haber el amor de mejores amigos...- me interrumpe

- Tú sientes eso, Cami. El no...- abre la puerta y sale del auto. Notaba que la conversación le molestó un poco

- Stefan, ¿es en serio?- me bajo y cierro la puerta - No hagamos esto un drama..- suspira y se me acerca

- Camille, el hace todo esto por que te ama. Y yo tengo que soportarlo. Tengo que vivir con el hecho de que mi hermano ama a mi novia...- se expresa molesto

- No somos pareja, Stefan.- suelto y me ve fijamente - Te sientes así por eso. Piensas que voy a ir a los brazos de Damon, ¿no?- aparta la mirada - Por eso te sientes inseguro. Crees que por qué no estamos juntos voy a dejar que Damon me conquiste, genial..- le reprocho y me doy la vuelta

- No quiero decir eso, quiero decir que dejes de pretender que no sientes otra cosa por el..- volteo a verlo ofendida - Nunca lo has admitido por mi. Pero yo también siento y quiero que lo admitas. Se que te amo con todo lo que tengo y se que me amas..- se me acerca - Pero quiero estar seguro que un día no te vas a arrepentir de estar conmigo. Tener la duda de que hubiera pasado si estuvieras con Damon. - mis ojos se cristalizan- Solo dilo...- suplica y escucho el nudo en su garganta

- No puedo, Stefan. No puedo decir lo que quieres...- retrocedo

- ¿Por qué?..- me dice exaltado y resoplo

- Por que....- me pauso y me ve con la mirada rota - Voy a romperles el corazón. Y ya he perdido a muchas personas en mi vida. Los dos son alguien importante para mi. Pero no te dire lo que quieres escuchar..- se me resbala una lágrima y asiente

- Ya lo hiciste, Cami.- bajo la mirada- Lo acabas de hacer..- siento un dolor en el pecho - Iré a pedir una habitación.- lo veo alejarse

- Se que eres el hombre con el que me querría casar..- se frena y levanto la cabeza- No creo en el matrimonio pero si lo hiciera. Me casaría contigo. Pasaría el resto de mi vida, contigo.- me ve fijamente y sonrío ligeramente - Espero que eso ayude..- voy al auto y me subo. Al hacerlo apoyo mi cabeza contra el asiento

He reprimido lo que siento por Damon por una razón. Por que amo a Stefan y lo amaría hasta si estuviera muerta. Ese hombre me ha salvado de mi misma más veces de las que puedo contar. Damon y yo somos personas muy parecidas. El me hace sentir que puedo ser la peor persona en el mundo y el aun así me seguiría queriendo. Que jamás me juzgaría. El ve mi oscuridad como nadie más y eso me gusta. Me agrada que el vea partes de mi que no sabía que tenía. Ve a través de mi. No se que sentir, cosa que no es novedad. Suena un celular y lo busco con la vista. Noto que le llaman a Stefan y el nombre en la pantalla es lo que me sorprende

- Gracias a Dios, ¿Damon?- pregunto preocupada

- Hola, Stefan.- frunzo el ceño - Que gusto escuchar tu afeminada voz.- ruedo los ojos

- Enzo, ¿que rayos quieres?- le pregunto molesta

- Estoy en problemas, de hecho.- suspiro

- ¿Donde está Damon?- pregunto preocupada

- Aquí está salivando. Quiere alimentarse de mi hasta que mi explote en una forma que resulta cómica..- expresa a la ligera

- Eso no sería un problema. Entonces Wes lo infectó..- hablo alarmada

- ¿Conoces el virus? Bien. Los necesitamos. Wes trajo a las brujas cantoras y nos atraparon en una casa. Y contando con que tú eres una. Pan comido...- inhalo hondo

- No vengan..- escucho a Damon y frunzo el ceño

- No quiere arriesgarse a beber de Stefan. Que lindo, ¿no? Pero estará bien. Además, si se alimenta de el, tengo ordenes de matarlo- relamo mis labios tensa

- Bien, mándame la dirección a mi teléfono y llegáramos cuanto antes.

- Claro, pero hay prisa, lo tengo encadenado, pero ya sabes lo persistentes que es cuando quiere algo.- asiento

- Llegaremos pronto.- Aclaro y cuelgo. Stefan abre la puerta y volteo a verlo

- Hay una habitación disponible, no se si quieras..- lo interrumpo

- Hay que ir por Damon. Estoy esperando a que Enzo me envíe la dirección..- se sube al auto y me llega el texto

- ¿Segura que no quieres parar? Yo puedo ir , Camille...-lo interrumpo

- Solo yo puedo quitar el hechizo que le impide salir. Me necesitas...- me pongo el cinturón y asiente. El transcurso fue largo pero silencioso. Algo incómodo si me lo pregunta. Nuestra pelea de hace rato fue algo intensa. Jamás pensé que Stefan me diría esas cosas

- Es una casa.- comenta Stefan mientras bajamos del auto. Inhalo hondo observando el panorama. Era algo grande - Es una hermosa propiedad.- parecía sacada de una película de terror

- Y una muy silenciosa. Espero no entrar y ver la cabeza de Enzo..- ambos caminamos a la entrada. Stefan me frena en los escalones

- Cami, Damon ahora es destripador. El...- lo interrumpo

- Lo entiendo. Pero hasta ahora sabemos que ataca vampiros. Soy humana, recuerdas..- asiente y sobo su brazo para darle tranquilidad - Estaré bien. No te preocupes..- suspira - Me preocupas más tú que si eres vampiro. Hay que sacarlo de ahí - ambos vamos a la puerta. Lo vemos sentado en el suelo con sangre en sus labios 

- Cami.- escucho a Damon mencionarme y voltea al instante - No.- se queja y Stefan se me acerca. Damon se levanta el instante  - Dije que no.- insiste exaltado - Si cruzan la puerta no van a salir.- relamo mis labios y observo el lugar. Era un verdadero desastre. Todo estaba destruido

- ¿Que fue lo qué pasó aquí?- pregunta Stefan preocupado y yo siento el nudo en el estómago al verlo tan perdido.

-Quería venganza. Me infectó un virus vampírico. Casi maté a mi último amigo. Típico Damon.- me dolía ver su sufrimiento. El demostraba mucho en su rostro

- Enzo me mandó la dirección. Damon vinimos a ayudarte.- expreso sincera y nos vemos fijamente

-No pueden. Me alimento de vampiros y todos los que conozco lo son. Háganse el favor de irse - insiste molesto y suspiro viendo alrededor de la casa

- Yo no lo soy - doy un paso al frente y Stefan me jala hacía atrás

-¿Qué haces?- Damon viene sobre nosotros a velocidad vampírica y me sobresalto.

- Atrás..- nos ordena y nos muestra su rostro de vampiro. Las venas se marcaban mucho más que antes. Podía ver su deseo por la sangre de Stefan. Me daba un poco de escalofríos

- No me asustas, Damon.- le aclara y el voltea a verme. Retrocede bajando la guardia

- Vamos a ayudarte, no te dejaremos solo. No eres una causa perdida.- apoyo mi mano en la puerta absorbiendo la magia del hechizo. Suelto un quejido al sentir lo fuerte que es. La casa era enorme y todo se sentía por las paredes

-Cami, ¿que haces?- me pregunta Damon exaltado

- Rompo el hechizo. Te sacaré de aquí.- el niega asustado y quito mi mano

- No. Tienen que irse...- expresa asustado - No puedo irme con ustedes en un auto. Todo en lo que pienso es en..- entro a la casa - Camille. Puede que seas humana pero puedo sentir ese suero en tu venas. Tienes sangre de vampiro...- frunzo el ceño y volteo a ver a Stefan

-¿Qué?- pregunto confundida y sus venas se marcan en su rostro. Tenía apetito de una bruja rubia

- No, Damon. - escucho a Stefan preocupado y Damon intenta venir sobre mi, pero antes le rompo el cuello con magia. Cae al suelo - ¿Estás bien?- asiento

- No fue nada. Hay que sacarlo de aquí.- Stefan va sobre Damon para levantarlo

- Abre las puertas traseras. Yo lo llevo.- asiento y voy al auto. Hago lo que pide y lo sube. Suspiro con alivio

- Ahora sólo debemos conseguir el antídoto para curarlo..- Stefan cierra la puerta y voltea a verme - Respecto a hace rato..- me interrumpe

- No tienes que decir nada, Cami. Te presioné demasiado y no debi hacerlo..- habla relajado - Solo no quiero perderte. Dejarías un vacío en mi. Te necesito.- tomo su rostro

- El que no esté contigo no significa que deje de amarte. Cuando me encuentre mejor yo se con quien voy a volver. Y ese eres tú, ¿si?- asiente y acaricio su cara - Nunca lo dudes.- le deposito un beso en su mejilla

- Cuando nos conocimos por primera vez, no tenía idea de que tú serías el mundo para mi.- lo veo conmovida - Gracias por amarme cuando todavía sabía a dolor y oscuridad.- sonrío

- Cuando te encontré, mi corazón encontró un hogar. Algo en ti me hizo sentir un poco más viva y mucho menos perdida. Eso es lo que veo en ti cuando miro tus ojos. Jamás me cansaré de eso.- sonríe - Hay que irnos antes de que Damon caníbal despierte.- abro mi puerta y Stefan va del otro lado.

Después de un exhaustivo y largo viaje, finalmente llegamos a casa. Stefan dejó a Damon encadenado en el sótano mientras esperábamos a que despertara. Ya no iba a tardar mucho por las horas de camino

- No volveré a subirme en un auto en al menos una década- me apoyo en la pared y bebo de mi taza

- Y yo no conduciré uno.- sonrío y escuchamos un quejido y volteamos a ver. Damon iba despertando y no se buen humor.

- Hola, Damon.- lo saludo y cruzamos miradas. El estaba sentido conmigo.

- Yo se que no puedes evitarlo, pero si rescatas a un animal rabioso te va a morder.- responde hostil y elevo mi mentón

- No debí decirte que te fueras.- le dice Stefan y Damon jala sus cadenas hacia al frente sobresaltándome. 

- Voy a matarte, Stefan. También a risitos de oro.- voltea a verme - Atala ve no hoy, tal vez no mañana, pero voy a abrirles la garganta y van a morir..- paso saliva tensa. Fue algo tétrico

- Por favor, Damon.- Stefan se le acerca - ¿Crees que me da miedo un destripador? ¿Quien crees que inventó la palabra?- alardea y cruzo mirada con Damon - ¿Esa sensación que tienes frente a sangre de vampiro? ¿Como te quema la sangre? Yo siento eso todo los días.- alzo mis cejas - Y hay una forma de controlarlo.- los observo desde mi posición

- Y adivino, te haría muchísimo placer enseñarme.- le dice incrédulo

- Podrías pensar eso pero ahora te voy a traer más verbena y luego voy a beber algo. Y tu vas a pensar en el dolor de cabeza que has sido.- ladeo una sonrisa

- Te comió la lengua el ratón, rubia.- me habla Damon y me acerco

- Solo te escucho. Siempre intentas alejarnos de ti. Nada nuevo.- me pongo junto a Stefan - No nos daremos por vencido. Jamás lo haremos.- hablo sincera - Esto es mi culpa y voy a solucionarlo.- suspira

- Yo hice esto, Camille. No tiene que ver contigo.- me dice hostil

- Te conozco, Damon. Mejor de lo que crees..- nos vemos fijamente- Eso no es bueno para ti.- doy un paso hacia atrás para salir

- ¿Por que no me dijiste?- me freno - Nos decimos todo. Confiábamos en el otro. - aun le doy la espalda- ¿Por que?- inhalo hondo

- Por que esto es exactamente lo que harías.- volteo a verlo - Vengar algo de lo que no quiero volver a saber en mi vida. Quiero dejarlo atrás, Damon. Lucho día con día para olvidarlo. Lo que hacen no me hace sentir mejor a mi. Los hace sentir mejor a ustedes. Estoy harta de escuchar su nombre. Por eso no he querido ir a la universidad. No te lo dije, no por que no confié en ti. No lo hice por qué alguien no me vería como una víctima. Y quería que ese fueras tu.- me ve sorprendido. Decirlo me daba un poco más de libertad. Había un silencio incómodo del que quería huir- Necesito un poco de aire.- salgo del sótano y me voy casi corriendo.

Salgo de la casa y suena mi celular. Lo saco de mi bolsillo y leo el nombre. Decía Rebekah

- ¿Hola? Cuanto tiempo...- me interrumpe

- Camille, necesito tu ayuda..- frunzo el ceño al escucharla agitada.- Es Klaus. El me descubrió, Sabe lo que hice y me está cazando.- me quedo perpleja

-¿Qué?- pregunto desconcertada

- Necesito que vengas a Nueva Orleans. Ahora.- inhalo hondo

- Iré en camino. Cuídate. - cuelgo y bajo el celular. Al caminar a mi auto algo me azota contra la ventana. Caigo al suelo aturdida. Mis oídos zumbaban y todo se ponía borroso.

- ¡Mataste a mi madre!- veo alrededor consternada y me levantan bruscamente del suelo - Voy a matarte también.- enfoco y veo a Nadia. Me tomaba de la blusa y comienzo a reír mientras la sangre escurre por mi boca - ¿Qué es tan gracioso?- suspiro

- Voy a disfrutar matarte.- le escupo la sangre y aprieto mi mano en su brazo. Da un quejido y me da suelta dejándome libre. Le apunto con ambas manos y comienza a gritar de dolor - Es cosa del destino. Simetría.- se retuerce en el suelo - Acabe con las Petrova. Y eso me encanta.- la elevo del suelo con magia. Comienza a escupir montones de sangre por su boca

-¿Qué me haces?- expresa con la voz entrecortada y mantengo ambas manos frente a ella

- Licuó tus órganos.- alardeo y la veo fijamente. Sonrío al ver su agonía

- Basta, basta.- ladeo mi cabeza y noto que esta totalmente cubierta de sangre. Era asqueroso - Por favor.- suspiro y lágrimas fluyen por su rostro

- Bien. Para que veas que no soy tan mala..- ladeo mi mano y suelta un suspiro de agonía. Su pecho se va pintando de rojo carmesí - Te quitaré algo que tú madre nunca tuvo.- abre su boca ampliamente al sentir como voy arrancando el órgano del pecho - Un corazón.- explota y sonrío dejando caer el cuerpo. - Dulces sueños, Nadia.- rodeo el cuerpo y voy a mi auto. Sobo mi cabeza y abro la puerta.

Ya vamos Nueva Orleans.