¿Acaso existe un amor inmortal?

— Dime, Sakura, ¿Crees que existe un amor inmortal? 

Fue una pregunta repentina dirigida a su Master, mientras paseaban por las solitarias calles de Fuyuki. Su Servant la acompañó, una vez que se alejó de la finca Emiya, caminando junto aunque su Master se negó diciendo que puede regresar sola, pero como todo un caballero Seiya insistió en acompañarla a regresar a ese agujero de gusanos, literal cómo figurativamente 

No tenía respuesta a la pregunta del caballero pegaso, y sin embargo, en sus palabras podía encontrar una gran melancolía de un guerrero de la esperanza que ha volado siempre en alto en el cielo y ha luchado siempre con valor por la verdad y la justicia en nombre de la Diosa de la Guerra, Athena

El Pegaso es un símbolo de gloria como de desgracia

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— Por el mundo estará y lo voy a encontrar...

Taradeando una suave melodía, Seiya paseaba por los pasillos de la Academia Homurahara bajo los cálidos rayos del atardecer traspasando las ventanas. La academia donde estudia su maestra vistiendo una cálida ropa para el invierno. Como Servant no debería sentir frío o calor, pero se sentía bien andar con esta ropa fingiendo tener una vida de adolescente normal

Era una experiencia completamente nueva para el joven guerrero. Nunca estuvo en una academia, nunca tuvo una vida escolar ni mucho menos tuvo la oportunidad de estar en una y entrar en una es algo muy nuevo y fascinante para el caballero de pegasus 

— Se siente extraño pasar por una escuela. Ninguno de los huérfanos de la fundación tuvo la oportunidad de estudiar en una. — fue lo que pensaba Seiya pasando caminando por las aulas, viendo absolutamente todo 

Después de todo, ha vivido en un orfanato pobre, fue secuestrado por la fundacion Graad y enviado el Santuario en Grecia, y él lugar no era muy destacable por su educación. Al ser una zona bastante rural, prefiriendo entrenar inhumanamente a los jóvenes para convertirlos en verdadero soldados lealtad que entregaría sus vidas a su diosa. 

Muy pocos lograba tener el honor y la habilidad de conseguir una armadura sagrada, algunos morirán por las sangrientamente pruebas u otros renunciaban como cobardes y traicionaban al santuario para conseguir una Black Cloth en la Isla de la Reina Muerte al fracasar como Saint

— Ugh! Aun duele esos meteoros negros — si uno viera a Seiya tambalear y estremecerse mientras se sujeta el estómago, uno pensaría que tendría diarera 

Volviendo al tema. Lo mas parecido que ha tenido a una educación estudiantes fue su maestra Marin que le ha enseñado el estudio de la astronomía, las leyes del movimientos de Newton, que tan rápido viaja el Mach 1 (velocidad del sonido) hasta la velocidad de la luz, sobre como todas las materias están formadas de átomos y como todo los seres vimos al nacer del big bang tiene un pequeño universo en su interior llamado "Cosmos" y al enfocar ese cosmos en un punto puede destruir los átomos de un objeto...

Pensándolo bien, Marín le enseño bastante bien. Le enseño física básica a un niño de siete año que durante sus entrenamiento luchaba por sobrevivir por seis años. Logró hacer que sus conocimiento penetraran su necia cabeza imprudente

— Y a pesar de lo imprudente y testarudo puedo ser, y no tenía fácil las cosas, siempre en el fondo me estuviste cuidando, Marín-san — lo decía Seiya encontrándose con el club de tiro con arco, también llamado Kyūdō, un deporte que ha escuchado que se practica en la Academia Homurahara. No le vendría mal practicar un poco el "camino del arco largo". 

Tal vez sea un Saint y su diosa aborrece las armas, existiendo pocos caballeros con el permiso de portar armas de sus propias armaduras, y sin embargo, ha usado el arco y flecha de oro de Sagittarius por la justicia y paz de la tierra; heredando las habilidades con el arco de sus antecesores que lo apoyaban a través de su armadura para proteger a Athena, principalmente era apoyado por el cosmos dorado de Aiolos de Sagittarius, el Saint con el mayor sentido de la justicia y lealtad por Athena de la anterior generación 

Inhalo profundamente cuando sostuvo el arco con su mano izquierda y sostuvo la flecha de práctica con la mano derecha. Esta era la primera vez que usaba un arco y flecha sin el apoyo del conocimiento de la armadura dorada de Sagittarius, y sin embargo, era su sucesor. Por eso, mantuvo serenamente la postura volviéndose difícil ver una apertura si estuviera en medio de la guerra, obra de su Ojo de la Mente (Verdadero) de Rango C

Con los ojos de un tirador, Seiya retrajo la flecha en el arco, tensando al borde del límite de la cuerda obligándolo a contener su fuerza para no romper el arco. No quería causarle problema a su maestra si uno de sus equipos aparece roto. Y sin embargo, quien lo viera, estaría fascinado por la exquisitez de la figura que simulaba a los antiguos héroes griegos, viniendo inmediatamente a la mente la figura de los centauros

La flecha fue lanzada tan rápido que por un segundo juraría que fue como una estrella fugaz cuando dio en el blanco. Fue un tiro absolutamente perfecto 

"Rechinido"

— ¿Quien anda ahí? ¡No te escondas, cobarde!

Seiya se puso inmediatamente a la defensiva en el primer momento de escuchar un pequeño rechinodo sobre el piso. Tuvo la flecha entre las cejas quien trató de escabullirse de su vista, pero tantos años en batallas han fortalecido su mente lo suficiente para prepararse para casi lo que sea

No sé espero encontrándose con el mismo joven que vio ayer por la noche con su Master, Emiya Shirou. Parado ahí un poco sorprendido cuando por un segundo sintió su claro instinto de matar sobre su frágil cuerpo

— ¡Maldición! Casi lo mato, y Sakura me querrá muerto si descubre que estuve por un segundo a punto de asesinarlo — Seiya se lo pensó para sí mismo. No queriendo que es lo que haría Sakura si descubre que casi le inserta una flecha sobre su frente 

Si hubiera sido un enemigo de verdad, claramente estaría muerto. Su mente desde muy joven ha sido adiestrada en no dudar en arrebatar una vida, sino quería morir. Sabia perfectamente que sus enemigos no dudarían en asesinarlo de las maneras más brutales y sangrientas posibles no existiendo la piedad en el campo de batalla y en la guerra

Por consecuencia, lanzaría la misma moneda directa a sus enemigos. No contendría ninguno de sus golpes. Si ellos quieren partirlo en pedazos, entonces él los partirá en pedazos primero; si ellos quieren asesinarlo, entonces él los asesinara primero; si ellos quieren tanto la victoria, entonces él ganará sobre los cadáveres de sus enemigos por la luz y la libertad

Perdonarles las vidas solo causará más desgracia que bien. Solo aquellos que realmente se arrepientan de sus acciones merecen el perdón

— Lo siento. No esperaba que hubiera alguien aquí — lo decía sinceramente Seiya tras escapar un respiro bastante aliviado al saber que no era un enemigo 

— N-no. Esta bien. Solo que me sorprendí que mientras limpiaba alguien viniera a usar el arco y yo... me detuvo al ver la forma que sostiene el arco — Seiya arqueó una ceja, mientras Shirou se rascaba la cabeza — Es que tu forma que adoptaste al apuntar con el arco, fue... como decirlo, perfecto, casi absolutamente perfecto, tan exquisito como las estrellas en el cielo. 

Fue una anagrama bastante curioso, pero no tan lejos de la realidad si basamos que su poder proviene de las estrellas en el cielo pertenecientes a su constelación protectora

— Yo también me disculpo. No debí tomar su equipo sin permiso, pero no pude contener mi emoción. Esta es mi primera vez...

— ¡¿Usando un arco?!

— No. En una escuela

— Oh...

El ambiente se sintió algo tenso por las palabras pronunciadas por el caballero. Tan sinceras que Shirou tuvo que tardar unos segundos en procesar lo que escuchó 

— Nunca he ido a una escuela, ni nunca tuve una educación escolar. Soy huérfano y vivía en un orfanato pobre con mi nee-san, pero por circunstancias... extremas y que estaban fuera de mi control, fui obligado a ser enviado a Grecia separándome de mi hermana. — Seiya le explicó resumidamente como si no fuera la gran cosa, mientras se encogía de hombro — Ten!

— ¿Que? — Shirou se sorprendió cuando recibió la flecha usada por anterioridad ¿Pero como se lo de volvió si en ningún momento quitó sus ojos sobre él y estaba seguro que donde terminó la flecha fue en el blanco más lejano? No había forma que se mueva tan rápido sin que se diera cuenta

Y sin embargo, al levantar su cabeza vio la espalda de un adolescente despreocupado con las manos detrás de su cabeza 

— ¿Piensa unirte a Homurahara? — había preguntado de repente Shirou, buscando respuestas del misterioso joven que apareció de la nada en el Club de Kyudo

— No. No me interesa unirme a una academia, no tengo el lujo para hacerlo. Ahora estoy ocupado en busca de mi deseo — lo decía Seiya con bastante desinterés desde un inicio, pero después de nombrar su deseo, la actitud despreocupada desaparece por completo mientras para observar a lo lejos en los cielos como poco a poco anochece

— ¿Deseo?

— Quiero reencontrarme con mi hermana mayor, que como te dije, me separan de ella desde mi infancia. Esta es la razón del porque estoy aquí. Un deseo egoísta ¿No crees? — Seiya se volteo a dirección de Shirou, mientras le sonreía con el sol escondiéndose y las pocas estrellas en el cielo

Ese siempre fue motor principal, la motivación personal para convertirse en Saint: era reencontrarse con su hermana mayor, Seika y recuperar aquellos días perdidos que tuvo que sufrir en el santuario para obtener la sagrada armadura, y sobrevivió porque amaba a su hermana, y desea volver con ella

Fueron días hermosos. Desde que tenía memoria, Seika siempre estuvo ahí cuidándolo y criándolo lo mejor posible a pesar de ser huérfanos y pobres. Cada momento es un recuerdo preciado y hermoso que guardaba profundamente en su corazón y lo atesora incluso cuando caiga al infierno

Puede que sea un deseo egoísta pedir algo tan simple a una copa toda omnipotente, pero es lo que desea su corazón, aunque sea por unos cortos minutos, solo quería una vez más ver el rostro de su hermana

— No. No creo qué hay nada de malo ser un poco egoísta — Shirou le sonrió cortésmente , pero Seiya por unos segundos frunció el ceño al sentir algo en esa sonrisa, algo particular con esa sonrisa, como si fuera falsa y no podía sonreír de verdad

Shirou era un caso particular para Seiya, sintió algo bastante confuso al verlo que más que una persona, fuera una cosa en forma humana. No sentía malas intenciones, pero tampoco debía bajar la guardia. Algo en Shirou le ponía los pelos de punta y temía por la vida de su master que la persona que más amaba, puede que sea la que más la lastime o incluso peor

Solo el destino dirá lo que pasará entre ellos. Mientras tanto, seguía actuando como su leal caballero que seguía la voluntad de su ama, mientras sus objetos no vayan en contra de sus ideales

— ¿Hay algo que pueda hacer para ayudarte? — supo que se ofrecería, lo cual rechazó inmediatamente

— Muchos me han ofrecido ayuda, pero ningún a podido ayudarme. Solo he encontrado nada más que promesas rotas. Prefieren hacerlo por mi solo— aún es su mente recordaba aún la promesa rota del anciano que se atrevió a morir, pero ahora tenía oportunidad de reencontrarse con ella

 — Lo siento. Espero que puedas reencontrarte con tu hermana. No me imagino como me sentiría si tuviera una hermana y fuera separado desde mi infancia — por unos segundos, notó como la mano de Shirou temblaba por unos segundos como si estuviera recordando algo que lo perturbará

Puede no sea la mejor persona de percatarse los sentimientos de los demás, hasta sus hermanos le han dicho que era alguien bastante denso y descuidado, pero podía ver que algo le preocupa a Shirou

— Perdón por no presentarme antes. Soy Emiya Shirou — se presentó dando su nombre, mientras le extendía un saludo con su mano

— Mi nombre es Pegasus Seiya — el Saint aceptó gustoso el saludo de manos. Puede que en la Guerra del santo grial la discreción es fundamente ¿Pero tan malo sería decirle su nombre? Dudaba que él se metiera de la nada en algún problema y involucrara en esta guerra secreta

— ¿Pegasus? ¿Como el legendario caballo alado de la mitología Griega? — Shirou había escuchado sobre el mítico caballo alado, después de todo, era una bestia fantástica muy conocida por el mundo

— Así es como me conocen en Grecia, pero puedes llamar solamente Seiya — el caballero le sonrió mientras dejaba poner sus manos en sus bolsillos, mientras se daba media vuelta para despedirse — Te aconsejo que regreses a tu hogar pronto. Ultimamente ha ocurrido accidente con "fugaz de gases" y esas cosas. Te deseo suerte, Shirou

— También te deseo suerte buscando a tu hermana — Shirou observo como Seiya desaparecía al girar por una esquina, dejándolo solo al joven de cabellos cobrizos a su suerte

No tan lejos del campo a pocos minutos después. Seiya tras unas rejas la figura de un hombre posado sobre el techo de la escuela en la noche y debajo de ahí encontró a una joven observando lo mismo que él. A su lado, se materializó un hombre de vestimentas rojas y tez morena cuando el Servant se azul bajo del techo

— Es increíble que siga con vida... — decía al ver a Lancer de vuelta. No hace mucho le dio una paliza, pero parece que se recuperó rápido y está listo para pelear una vez más

Una batalla frenética entre Servants ocurría en un campo deportivo. Si un humano común y corriente observaba el enfrentamiento, quedaría aterrado e incrédulo no comprendiendo como dos personas podían enfrentarse a tal velocidad

Y todo terminaría interrumpido por el sonido de una rama rota, y quien sea tuvo una terrible suerte de ver donde no debía

— Shirou!

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Shirou Emiya terminó de limpiar el club Kyōdō. No tenia motivos para hacerlo, ya no pertenecía al club, pero jamás ha rechazado la ayuda de los demás sin pedir nada a cambio, porque "No había nada de malo en ayudar a otros". 

Una filosofía muy marcada desde sus primeros inicios, desde que era un niño, siempre ha deseado ayudar a otros en lo que sea, sin importar que fuera. Algo que las personas que considera dentro de su círculo social sus amigos lo han remarcado que los demás podrían aprovecharse de esa amabilidad suya, pero también lo considera extraño porque nadie hace algo por nada

Lo que la llevado a ser llamado como el conserje falso de la escuela, pero no le molestaba, mientras pueda ayudar y ver sus sonrisas era suficiente recompensa para él...

Hoy parecía otro día normal, salvo que se encontró con Shinji, un amigo que se ha distanciado bastante de él, pero aun así considera su amigo. Apareció en la escuela con un venda que cubría gran parte de su mejilla, pero cuando le preguntó, simplemente le dijo que no era su problema 

Algo tuvo que pasarle para que esté de tan mal humor

Otra cosa es el extraño sujeto que se encontró en el club. Había algo en el que le llamaba bastante la atención. No lo había visto nunca, pero envés de llamarlo o preguntarle qué así aquí, solo quedó observando mientras tomaba uno de los arcos y una de las flecha y apunta al blanco más alejado con una habilidad que simplemente solo describirse como un arquero apuntando a las estrellas en el cielo

Y cuando lo vio sintió como su cuerpo era aplastado por una lluvia de meteoros que lo quemaba al verle el rostro

Creyó ver una figura detrás de la espada del chico misterioso, un caballo alado, un pegaso hecho de la plata más pura que cualquiera de los materiales preciosos que haya visto, fue lo que pensó al verlo, pero realmente era de bronce. Tan grande que supera el tamaño de cualquier raza equina que existe y con sus enormes alas que fácilmente podría envolver a diez adultos. Y en lugar de carne, el pegaso parecía echo de una especie de fuego plateado, desde los casco hasta la melena que cubría un poco su rostro que denotaba unos resultantes ojos rojos de una bestia divina con las estrellas flotando sobre su cuerpo

Y acompañando a ese legendario caballo alado, el espíritu de un guerrero se encontraba vistiendo la más estilizadas y preciosa de las armaduras, aunque no haya visto muchas, que haya visto en su vida. No había otra que definir sus palabras, nada más que un guerrero divino de los cielos protegido por la fantástica bestia divina tras su espalda

No, no era un guerrero divino de los cielos, sino un pecador para la vista de los mismos dioses, el Gran Pecador de los Cielos: Pegasus...

Por un segundo, se sintió estar varado en un pequeño universo, pero esa sensación desapareció en seguida cuando se disculpo

— Lo siento. No esperaba que hubiera alguien aquí

— N-no. Esta bien. Solo que me sorprendí que mientras limpiaba alguien viniera a usar el arco y yo... me detuvo al ver la forma que sostiene el arco — era muy malo mintiendo, su cuidadora se lo había dicho, pero parece que se creyó y tuvo que improvisar una verdad a medias, porque si estuvo fascinado con la arquería del chic misterioso

Así comenzó una conversación con el chico misterioso, contándole de imprevisto su deseo de reencontrarse con su hermana. Algo que le hubiera gustado poder ayudarle, pero él lo rechazó con desconfianza. Lo único que podía hacer era desearle suerte. 

Intento usar análisis estructural en la flecha, tratando de pensar que sea de lo que vio, pero no encontró ningún rastro de energía mágica. Quien sea que fuera Seiya, le traía los pelos de punta

Al terminaba de limpiar, no se esperaba que fuera tan tarde, por lo que decidió regresar a su hogar, pero tampoco se vio esperar ver en el patio de la escuela algo inaudito que lo dejaría congelado, costándole creer lo que veía

— Ellos... no pueden ser humano

Fue lo que pronunció al ver pelear a dos guerreros, uno empuñando una lanza carmesí que le causaba escalofríos y el otro empuñando dos espadas chinas con el diseño del yin y el yang. Estaban peleando, en un combate increíble de creer. A penas podía seguirle la pista con los ojos, se movían tan rápido y la fuerza que aplicada en cada una de sus balanzas era devastador con la fuerza de partir a un humano a la mitad

Un pequeño error cavaría su tumba

"Crack"

— ¿Quien anda ahí? — el de azul lo escuchó pisar una rama. Volteando a ver donde vino el ruido para observar nada más que él entre la oscuridad

Seiya tal vez haya tenido piedad al verlo, pero este sin duda lo va a matar sin dudarlo dos veces. No importa cuando huya o intente encontrar algo para defenderse, era imposible huir de un espíritu heroico

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Y tal como era de esperarse, su corazón se detuvo por un segundo cuando la lanza maldita atravesó su pecho. Todo se oscureció, su visión se nublo y su cuerpo tambaleó perdiendo el equilibrio 

— Hey, chico. No me tomes a mal, pero tuviste una mala suerte en la hora y lugar equivocado. Tsk! Y nos hacemos llamar espíritus heroicos — Shirou a penas podía escuchar, solo ver el techo de la escuela oscureciendo 

¿Iba a morir? ¿En serio iba a morir sin poder cumplir su deseo? Recordaba las palabras del joven misterioso, de contar su deseo, uno egoísta pero él también tiene un deseo egoísta, ser un aliado de la justicia, pero parecía que iba a morir

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Cuando todo parece perdido, siempre hay una esperanza

— Hoy no morirás, Emiya Shirou!

Entre toda la oscuridad, un grito estalló con la fuerza de un big bang estalló para dar origen al universo. Todos los seres vivos nacieron del big bang que comenzó en el origen de toda las cosas, nacieron en las innumerables cantidades de estrellas y galaxias que cada día morirán y resurgían

REVERSE BLOW!!

Un rayo de luz iluminó la oscuridad que nuble su mirada. Como si un universo se expandiera en su interior y girará como una galaxia entera, la luz lo envuelve con sus cálidas y acogedoras alas plateadas antes de estallar en un pecho como el big bang que dio origen a toda las cosas mientras la fuerza de una corriente universal reiniciaba los latidos de su corazón

En el lugar preciso, a la distancia correcta, en el ángulo correcto, con la misma fuerza y velocidad de corazón en menos de 4 minutos o 240 segundos.

— Lamentó haber llegado tarde, Shirou. Perdóneme por no haber llegado a tiempo — escuchó una voz susurrarle suavemente cerca de su oído. 

Solo para sentiría su cuerpo ser levantando alrededor de la flexión de su rodilla y de su espalda. No podía moverse, se sentía tan pesado que su cabeza caía para atrás y sus brazos se desplomaban al suelo, pero no parecía importarle quien lo salvo. 

Escucho el sonido de los vidrios rotos ser pisados por unas botas de metal y a poco a poco se acercaban por la ventana rota

— Le prometí que te protegería, y pienso cumplir mi juramento como caballero — trato de abrir los ojos, pero sus pardos estaban pesados, pero logró ver algo... unas alas desplegarse de la espalda de quien lo salvo, y lo que juraría ser una sonrisa repleta de esperanza y justicia

Tan gigantesca y majestuosas alas metálicas que brillaban bajo la luz de la luna del brillo más puro y brillante como el oro . Con esas alas, pensaría que realmente no se salvo, sino que un ángel vino a llevarse su alma al paraíso, pero surgió la fuerza como un torrente universal que se presenta a su alrededor formando una explosión 

— ¡Elévate, cosmos! — Jamas escuchó un grito tan vigoroso y tan plagado de esperanza en tan simples palabras

Lo ultimo que pudo ver, fue el cielo repleto de estrellas mientras se dejaba caer a los brazos de su salvador. Envés de caer a un infierno, entro a un cielo lleno de estrellas marcando una constelación 

Otra vez, alguien más lo ha salvado

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— Hah! 

Se despertó en su casa con un fuerte grito ahogado en sudor. Parecía que sufrió una pesadilla, pero le era imposible creer que fuera una pesadilla. Lo único que sueña siempre es con el incendio, cada maldita noche revive la misma experiencia, y no creía que esto fue diferente. 

Solo que verse la sangre de su uniforme académico para comprobar que lo que vio fue real y no fue una pesadilla

— ¿Pero fue lo qué pasó? — Shirou se hizo la primera pregunta, pero se detuvo cuando vio delante de su habitación una caja, una extraña y particular caja de metal — Eso no estaba ahí

Lo que vio ya lo estaba asustado. Parecía que veía el mismo ser mitológico en todo lados, ahora en la forma de una caja del símbolo del pegaso con sus alas a los costado de su cabeza. Ya le estaba trayendo mal rollo 

Se acercó cuidadosamente a rastra sobre el extraño cofre en su habitación. Lo más extraño al verla de cerca el símbolo de la cabeza de un pegaso rodeado por sus alas. Parecía que estaba viendo al legendario caballo alado por todas partes. Lo curioso era la cadena de mano ubicada en la boca del caballo alado 

Una parte de Shirou pensaba que era una mala idea abrirla, pero otra parte le picaba la curiosidad de saber que pasaría al jalar la cadena. Si fuera su tutora sin duda jalaría la cadena sin pensársela dos veces, pero él no sería tan tonto como jalar, sino que primero lo analizaría con su análisis estructural

— Trace on...

La energía mágica escurrió como un banco de circuitos sobre el cofre intento analizarla por medio del único hechizo que su padre estuvo dispuesto a enseñarle. Análisis estructural, le permite entender la estructura, el diseño y los componente y materiales de los objetos como si estuviera viendo un plano. 

Sin embargo, tratar analizar algo tan complejo que solo los maestros alquimistas del continente perdido de Mu han logrado fabricar tras siglos de fracasos e intentos, generando la creación de las Black Cloth consideras como fracasos, trae consigo una terrible jaquea al tratar de entender lo que era y lo que había dentro. 

— ¡¿Q-que demonios es esta cosa?! — luchaba por no gritar al sentir como su sufría de tremenda jaquea al intentar comprender su composición básica. 

Estaba acostumbrado al dolor, siempre sentía al activar su magia como si un tuvo caliente penetrando su columna, pero su cabeza daba vuelta no logrando comprender los materiales que estaba compuesto, ni la estructura básica, ni los métodos de fabricación que estaba formados

Lo único que sabía eran que si estaban hechos por manos humanas, pero han elevados su artesanía a pisar el terreno de los dioses, creando pseudo-construcciones divinas 

Los maestros alquímicos del continente perdido de Mu han alcanzando a los dioses, formando las Cloth, las armaduras sagradas que Athena y su ejército visten con la función de protegerse y potenciarse en el combate de batalla. Estas armaduras que portan los Santos de Athena son conocidas como "Mantos Sagrados", cada una representa a una de las 88 constelaciones del firmamento visible y son consideradas "sacras", porque están hechas de materiales vivos y tres hypermetales desconocidos actualmente por la humanidad y que se han perdido en la historia

Shirou nuevamente estaba ahogado en sudor, pero ahí estuvo, de rodillas frente la caja de Pandora que lo estaban tentando con abrir la caja

— ¿Que hay dentro? — Shirou se preguntó, sintiendo como una voz lo estaba tentando en abrirla

— Shirou, dime ¿Si abres la caja de Pandora que es lo que saldrá? ¿Todos los males en el mundo o la esperanza que te salvará? — una voz le hablo a sus espalda, sufriendo un sudor frío ante la advertencia en su voz

— ¿Que? — el chico volví en sí cuando escuchó una voz detrás de su espalda. Tan distraído estuvo con su análisis estructural que no percató que alguien abrió las puertas de su habitación sin saberlo

Ahí estaba, el mismo sujeto, con la misma expresión de tranquilidad y melancolía, pero con una cálida sonrisa en su rostro mientras el poco viento que entraba meneaba su desordenado cabello puntiagudo de color chocolate, pero bajo la luz del sol y del fuego, su color cambia a ser tan intenso como la sangre como el color de sus ojos. 

Sin embargo, siendo la única luz de la luna, ese efecto no se demuestra tanto en su persona aparentando tener el mismo color de siempre

— Fue lo que me enseño mi maestra sobre nunca abrir la Pandora Box a menos que realmente fuera necesario — ahí lo vio, él mismo chico misterioso que se encontró en el club de Kyūdō parado detrás de él, sosteniendo dos tazas calientes en sus manos. Poco después se encogió de hombres— Aunque solo es una exageración para que los jóvenes Saint no abusen de su poder al recibir la Cloth y lo usen por sus propios deseos personales. Tuvo que aprenderlo por la malas, y el Santuario lo puso peor

Al nombrar el santuario le entregaba escalofríos ese lugar, no siendo el mismo lugar para hacer una visitar. Primero estás muerto antes de poder tomarse una foto como recuerdo. Tuvo bastante suerte de ser aceptado por Patriarca Shion al ver un gran potencial como Saint y ponerlo bajo cuidado de Marin, que como él, era japonesa 

— ¿Q-que haces aquí? — Shirou trató de ponerse en la defensiva, buscando algo para defenderse, aunque fuera un periódico o un palo, pelearía por su vida. Bastante irónico, al tener una baja preservación de su propia vida cuando ve a alguien en peligro 

— respuesta correcta, amigo — le dijo Seiya entregando una lujosa sonrisa mientras se sienta delante suyo, y dejaba las tazas de café a un lado — Te traje aquí por vi que estabas en peligro. No podía dejarme de brazos cruzados viendo como huías de Lancer, pero llegué tarde. Es increíble que ese bastardo sigue con vida de recibir uno de mis cometas. ¡Le dije específicamente que se preparara para morir, pero parece que el bastardo no quiere cuando uno lo quiere!

Ahí estaba, Seiya rascándola la cabeza de lo más despreocupado al descubrir que el caballero de la lanza seguía vivo. Le daba méritos, no todos lograba sobrevivir o regresar al campo de batalla tan pronto al recibir la fuerza de su puño. Lo que le molestaba no era que estaba vivo, sino el acto cobarde de atacar a un niño que no tenía nada que ver con la guerra, pero ahora que lo salvo, era su deber como aliado de la justicia de protegerlo hasta que termine la guerra

Que fastidiado tener que proteger a este mocoso, aunque le recordaba un poco a él en su temprana edad. Solo le falta mas madera de guerrero. Por otro lado, Shirou seguía mirando a Seiya en silencio, no comprendiendo exactamente las palabras que decía, pero se quedaba en silencio para tratar de pensar

— Hah! Por suerte, mi Master no quiere ser parte de la guerra, y por tener una forma de Acción Independiente puedo pelear sin ella

— Aún no contestas qué haces aquí?

— Mi Master usualmente te visita a menudo para prepararte el desayuno. Debe sentirte afortunado, tienes a una linda chica preparando el desayuno y la cena, mientras yo tuve a una mujer que parece que me esta tratando de matar cada día!

... Apostaría que no tenia que decir eso.

Sakura segura lo mataría al revelarle que ella seguía siendo una Master en esta guerra. Tiene los métodos para hacerlo, aun conserva los hechizos de comando, teniendo casi completo control sobre él e inmediatamente podría ordenar que se suicide y con gusto aceptaría los órdenes de su Master

— ¿Master? ¿De quien estas hablando? Nadie mas viene aquí, salvo... 

— Cuidado...

Su oración fue cortada cuando presencio la mirada de Seiya, ayudando a quitar de lado a Shirou del camino antes que su cabeza fuera empalada por una lanza maldita. Jamás imagino encontrar ahora una tercera vez a la misma persona. Ya parecía molesto tener que enfrentarlo otra vez

— Oye, oye! Nunca imagine que estarías de niñera, Pegasus — entre el polvo y la grama, otra vez se encontró con el caballero de la lanza, como prefería referirse a su título 

— Estaba teniendo un tranquilo día, hasta que lo arruinaste entrando tan grosero a esta lujosa mansión  — por el otro extremo, se levantaba Seiya del suelo sosteniendo una de las tazas que había traído — Al menos déjame terminar mi café, amigo, si aun tienes algo de honor y caballerosidad como tanto presumen los espíritus "heroicos"

Claramente era burla ante el ataque furtivo y sin misericordia a un inocente que solo tuvo la mala suerte de estar en el lugar y momento equivocado. Se hacían llamar espíritus heroicos, pero mira como no dudaba en arribar una vida inocente

— Es gracioso que tenga que asesinar al mismo chico dos veces, y aun mas encontrarme una tercera contigo. ¿Cuantas veces tendremos encuentro? — había preguntó Lancer, viendo con una sonrisa al santo con la apoyada en su hombro. Sin embargo, su brazo no dejaba de temblar

— Hasta que tú mueras, Lancer — declaró Seiya bebiendo hasta el fondo su café amargo sin nada de azúcar, para luego añicos tan solo apretando ligeramente su puño, quedando polvo representado lo que le va hacer — Ya saben lo que dicen, la tercera es la vencida. Y esta vez, me aseguraré de acabar contigo! Yo seré quien reclame tu corazón, caballero de la lanza!

— En tus sueños, Pegasus — Lancer lo reto divertido y emocionado a sus amenazas, pero más que amenazas, era una afirmación puesta en sus ideales — No caeré en el mismo truco que antes

Shirou, por otro, lado solo podía ver aturdió la presencia de ambos hombres verse la cara a cara en un encuentro a muerte. No comprender con exactitud porque estaban peleando, pero escuchó atentamente las palabras de Seiya de una "guerra", lo cual ordenando las piezas supo comprender que todo los accidente con fugas de gas eran en realidad provocadas por esa guerra que nadie se daba cuenta

— Shirou... — el joven vio con atención como Seiya emanaba una luz en su interior, como si un universo se expandiera — Escucha atención, estas a punto el poder de un santo de Athena, la diosa que protege el amor y la justicia de mi mundo

— ¿Amor y justicia? Me parece mucha cursilería — Lancer declaró con bastante burla, apoyando sobre sus hombros la lanza maldita con completa despreocupación 

— Nosotros, los caballeros podemos hacer explotar una energía en nuestro interior que se originó del big bang, un pequeño universo del cuerpo, la raíz del espíritu — con esas palabras dichas, Seiya se golpeó a sí mismo el pecho con una resolución y convicción nunca antes vista en una persona con un fe y voluntad inquebrantable e incorruptible — Los Saints reciben una energía sobrehumana gracias a la explosión cósmica que se produce en su interior, con esa energía abren la tierra y aplastan las estrellas 

En todo este discurso, Shirou abría ampliamente sus ojos, mientras el cofre que trató de analizar para dejar un objeto dentro, revelando así la sagrada armadura de Pegasus, tomando la forma de un corcel alado parado sobre sus patas traseras formado por piezas plegables de los metales desconocidos actualmente por la humanidad

Reforzada y reconstruida por la sangre y los materiales que Mu y Shion han usado para repararlas para que su brillo y forma imite a las armaduras doradas

— ¿Alguna vez has sentido el poder del cosmos?

https://youtu.be/a3EbPPDu45c

El cielo se iluminó repleto de estrella cuando un haz de luz se disparo a los cielos directo a la constelación de protectora del caballero de bronce. Como si las estrellas cayeran del cielo, estrellas fugaces volaron a la velocidad de la luz para vestir una vez más al guerrero de la esperanza que corría directo a su constelación

Fue fantástico, salido de una fantasía de los antiguos mitos como las piezas de la armadura se ponía una por una sobre su atlético cuerpo en un destello azul hasta que finalmente vio atónito, como en los cielos caía como una estrella fugaz el Santo Legendario con el más vigoroso grito de guerra que haya escuchado

— PEGASUS RYŪSEI KEN!

Shirou no daba mérito a lo que veía, una lluvia de estrellas caía sobre quien se hacia llamar Lancer. No podía articular ninguna sola palabras cuando los meteoros cayeron...

— Ese truco no funcionará dos veces! — declaró Lancer girando tan rápido su lanza que los meteoros o que caía del cielo eran desviado por unas habilidad y destreza sobrehumana, sin saber que solo estaba jugando con él

— Aaahh! 

Cayendo del cielo como uno de sus meteoros, cayó a la velocidad del sonido estrellando su patada contra Lancer causando que una feroz ráfaga sacudí toda la residencia Emiya. Ni Shirou fue capaz de resistir, siendo empujado para tras por la potente ráfaga que lo dejaría tirado en el suelo como si un muñeco de trapo se tratase

Entre los escombros y la cortina de polvo, un joven vigoroso de firme voluntad y fe inquebrantable se levanta bajo el nítido luz de la iluminaba que iluminaba su resplandeciente armadura de bronce que brilla cual oro se tratase

Un guerrero de la esperanza. 

"Para mantener la justicia y proteger a Athena, lo sacrificó todo y fue llamado el inmortal Seiya, el líder espiritual de los Cinco Santos de Bronces Principales, y no se rendirá fácilmente. Él es Legendario Santo de Pegasus"

Incluso si caía en el infierno, Shirou jamás olvidará al guerrero de la esperanza que en su puño carga con toda las esperanza del mundo, aquel que se ha convertido en un pilar para la humanidad y su luz que golpea las tinieblas

— Elévate, cosmos! 

Ardiendo su pequeño universo en su interior, su grito motivó las llamas plateadas que inundaba su brazo mientras las estrellaban en los cielos nocturnos del firmamento

https://youtu.be/iiJ3Ldxj76Y

— ¡No tés jugando conmigo, mocoso! — Lancer sobrevivió a la emboscada de su patada, abalanzando a una velocidad absurda que ni Shirou podía ver lo que pasaba, solo lograba leves destello de esa lanza suya

— Lo veo... veo cada uno de tus movimientos, Caballero de la lanza! — y sin embargo, Seiya superaba con crece esa velocidad comprendiendo, analizando y viendo cada uno de sus apuñaladas

Shirou solo podía ver destellos rojos y plateados entre los dos Servant que a primera vista parecía encontrarse en las mismas condiciones, pero un ojo agudo vería la creciente superioridad que estaba comenzando a tomar Seiya poco a poco

No importa que ventaja con la distancia, nada impedía bloquear cada uno de sus frenéticas apuñaladas con una precisión y habilidad aterradora que abrumaba a Lancer obligando a retroceder al sentir como un meteoro casi le arranca la cabeza

— Ya sé quién eres, Lancer... 

Con esa afirmación y esa sonrisa petulante, Lancer salto para tener distancia comprendiendo que era inevitable que lo sepa. Ya le enseño su Noble Phantasm, era obvio que tarde o temprano sabría cual era su nombre verdadero

— Jamás imagine que me encontraría con un semidiós como tú, Cu Chulainn, el hijo de la Luz, un famoso guerrero celta, pero vaya decepción que me llevó al hacerte llamarte a ti mismo un espíritu heroico — lo decía Seiya con bastante disgusto, después de lo que presencio esta tarde al casi asesinar al amor de su Master

— No lo tome personal. Sabes perfectamente que esta guerra debe mantenerse oculta. Además, son ordenes del bastardo de mi Master — lo declaro con animosidad al mencionar quien era su Master, pareciendo no gustarle seguirle sus órdenes

— Hmph! Entonces tu título como sabueso no está tan fuera de lugar. Lo que no me explica es ese ridículo traje que llevas, sería mejor una rata — Seiya no perdió la oportunidad de burlarse de Lancer, ocasionando que ahora lo apunte con la apunta de su lanza dirigida a su córazon

— ¿Acaso quieres sentir otra vez mi lanza dirigida a tu corazón? Esta vez la suerte no te salvarás — las amanezcas de Lancer no servía nada más que hacer reír más fuerte a Seiya

— ¿Suerte? Créeme, tengo que darle las malas noticias porque lamentablemente nací con una estrella de mala suerte. Sin embargo, lo único que puedo decir es que siempre daré lo mejor de mí sin importar cual sea mi estrella!

SUISEI KEN!

Un puñetazo de puro poder destructivo es lanzo con la fuerza de un misil blanco con la potencia de un misil nuclear. Lancer comprendiendo inmediatamente que si ese golpe lo toca golpeado, la mitad de su cuerpo hubiera destruido y sería convertido en polvo. Si no fuera por la protección de su lanza maldita, sin duda estaría muerto

Sin embargo, no significa que no haya sufrido herida graves como abría de pensar al sentir más de la mitad de su piel quemada y sentir varias fracturas en sus hueso y gravesdaños en sus órganos internos

Y aun así, sonreía ante la adrenalina de luchar con un tipo sujeto que comprendía el dolor y el placer en el campo de batalla

— ¡Jajajaja! Realmente me asombras, Pegasus. Me asombras lo que pueda hacer con tus puños, desgarras los cielos y partir la tierra —  declaró Cu riéndose, no habiendo encontrado un oponente tan formidable como era Rider — Quien sea que te entreno, te entreno muy bien

— Tuve una gran maestra... una maestra que daba miedo y me podía al borde de la muerte con sus entrenamiento. A veces no sabía si me quería matar o entrenar — un escalofrío recorrió por toda su columna vertebral al recordar a Marin y como todo lo discriminaba en el santuario, pero fue Aioria de Leo a seguir entrenador y por ferviente deseo de reencontrarse con su hermana, aunque claro, no siempre lo salva

— ¡¿Tu también tuviste una maestra aterradora?! Bueno, tal parece que podemos que tenemos algo en común — Cu por la descripción podría comparar con su maestra, Scáthach, la Reina de la tierra de las sombras. A veces preferirla como una bruja que hasta él le daba miedo enfrentar

Si no fuera porque estaban en una guerra, desearía salir a beber con él hablando sobre anécdotas sobre los sobrehumanos entrenamientos que han sufrido por esas despiadadas maestras que le tienen

Lastima que estaban en una guerra, y cada uno estaba de su parte

— ¡Aquí viene, la lanza que Scáthach me transmitió directamente...!

— ¡Aquí voy, la técnica que Marin de Eagle me enseñó directamente...!

Ambos hombres poniendo las voluntades enseñados por sus maestras, entregaban el regalo de estas le entregaron en sus exhaustivos entrenamiento que sufrieron para convertirse en los orgullosos guerreros a día de hoy se conocen por la historia...

Gae Bolg y los Ryusei Ken estaban preparados para sus dueños, poniendo su voluntad y poder en sus técnicas

— ¡Resígnate y recibe mi golpe ¡Tu corazón está atravesado, el objetivo golpeado como declaro. Gae Bolg!

 — Prepárate para morir y regresa al trono, Lancer! Es hora que recibas el puño meteórico, Pegasus Ryusei Ken!

Si tuviera palabras describir lo que estaba viendo, sería un cataclismo carmesí enfrentando una lluvia de estrellas fugaces en el cielo nocturno. Sin embargo, el "ocaso" se movía ángulos imposibles, pareciendo que se invocó la imagen de un relámpago de luz roja, pareciendo que no importa cuantos meteoros viajen, la lanza siempre encontrará la forma de perforar el corazón de su objeto

— Aaahhh! 

La lanza se encontró detenida por un breve momento por una barrera de cosmos, pero de nada serviría ante la maldición potenciada de Gae Bolg tras ser pronunciado su nombre. Una vez que se ha dicho su nombre, la lanza maldita invierte la naturaleza de la causalidad, el significado de causa y efecto en el orden de las cosas, para que la causa del lanzamiento de la lanza provenga del efecto de la perforación del corazón del oponente

— ¡No importa cuantos resistas! No importa que tan ágil o bien protegido estés, Pegasus. Incluso tener una agilidad de rango EX sería inútil. Tu corazón ya era mío incluso antes que lanzara mi lanza! — declaró Cu viendo inútil seguir resistiendo ante la maldición, lo mejor es dejarse apuñalar por su arma maldita

La sangre salpicó los terrenos de la residencia Emiya al ser su mano atravesada, corriendo la sangre por su brazo izquierdo, mientras miles espinas de hierro destrozaban por dentro su propio brazo

— Seiya! — escuchó los gritos de Shirou al verlo como estaba a pocos centímetros de su pecho en tan solo nanosegundos de ser atravesado 

— No puedes proteger a ese mocoso. Ahora él se convirtió en tu ruina, Pegasus

Todo parecía perdido para el santo de bronce, pero su convicción y fe nunca flaquearon en sus ojos, encontrando una llama ardiendo del tamaño de un mini universo en su interior que estallaba como el inicio de toda las cosas

— Despierta, séptimo sentido! Elévate cosmos al nivel de los caballeros dorados, no, arde hasta el infinito! Muestra el color del verdadero cosmos! 

— ¡¿Que es este poder?!

Lancer se vio asustado cuando no creyó lo que veía, tan fuerte era ese poder que rechazaba la maldición de su lanza ¡¿Acaso era una bendición divina?! Se vio abrumado al presenciar como se arrancaba la lanza de su pecho usando su brazo herido ¡Ni siquiera estuvo cerca del corazón! Solo logro entregar una pequeña grieta, pero su armadura por un segundo adoptó un brillo dorado

— Voy a protegerlo... usando... mi vida... como su pilar central... Por la justicia... y la paz... Nosotros los Santos nos reunimos... ¡En nombre de la Diosa de la Guerra, Athena!

— ¿Athena? — Cu no lo podía creer lo que veía frente sus ojos, unas resplandecientes alas doradas surgían detrás del caballero de bronce

Despertando el verdadero cosmos, el Pegasus de bronce se convirtió en uno de oro ante los incrédulos ojos de Lancer que a penas podía creer lo que presenciaba con gigantesca alas dorada que lo hacía como el más poderoso de los ángeles que descendía de los cielos para proteger a los desvalidos y proteger la historia en nombre de su dios 

Pegasus de oro, aquel que cuando la humanidad está en peligro montas la esperanza que lo acompaña en cada batalla que te involucra... con la luz de la esperanzas siempre relucirá

PEGASUS SUISEI KEN!!

— ¡Este es la fuerza del cosmos que da vida al futuro por intermedio de la esperanza! Te lo dije, Cu Chulainn... ¡¡YO SERÉ QUIEN RECLAME TU CORAZÓN!!

Sangre por doquier ha caído, salpicando el suelo y el aire con el fuerte olor del hierro...

Un cometa dorado le atrevo el pecho, descubriendo en últimas instancias que el puño del santo de bronce había atravesado el corazón con su puño dañando severamente su núcleo espiritual

Cualquier Servant estaría inmediatamente al ser dañado su núcleo espiritual al ser su verdadera forma, pero quienes poseía un alto rango de Continuación de Batalla, un corazón no lo detendría hasta darle un golpe fatal a su enemigo ¡El no moriría tan rápido!

Lastima que no espero que se diera inmediatamente media vuelta, alejándose como si fuera basura

— ¿A... donde... crees... que vas...?

— Omae wa mou shindeiru 

— ¡¿Nani?!

LIGHT SPEED PEGASUS RYUSEI KEN!!

Y tal y como dijo, Lancer había muerto en un segundo. 

Fue absurdamente brutal presencia como se estremecía y gritaba en profundo dolor y agonía mientras los huesos se rompían y su carne era triturada como si fuera golpeado por un mazo para carne. De la nada, todo se acabó en un espantoso silencio cuando Lancer implosiono como si cientos de millones de rayos de luz parecieron salir de a dentro hacia fuera en un espectáculo que no dejaba sin palabras a Shirou, cuando realmente fueron fue su puño a la velocidad de la luz que dejaba esos rayos de luz

Shirou no era capaz de ver lo qué pasó, de hecho, ni siquiera pudo seguir ninguno de los movimientos ni menos lo de Seiya que movía más rápido que el sonido a velocidad hipersonicas, pero el último golpe igualó la velocidad de la luz 

— ¿Te encuentras bien? — ahí estaba, parado victorioso con sus puños bañados en sangre, de su propio enemigo y de él mismo. Su firme convicción no le permitía mostrar dolor o de debilidad. Era un guerrero repleto de cicatrices que se enorgullece  de cada una de ellas

— ¿Quien eres realmente? — Shirou preguntó con asombroso, no por miedo o desconfianza, sino  de asombro, porque sentía, que él era todo lo que podría aspirar y soñar

— Soy el Santo de Bronce de la Constelación del Legendario Caballo Alado Pegasus que vive y protege por la Diosa de la Guerra que protege el amor y la justicia. Soy Pegasus Seiya, el Servant de la Clase Rider — revelando su nombre verdadero, Seiya no tenía nada que ocultarle a Shirou ahora que estaba metido en esta guerra — Hay mucho de que hablar ¿No lo crees, Sakura?

Ahí estuvo, la misma mujer que siempre lo despierta en cada mañana y lo ayudaba a preparar la cena parada en su patio llevando profunda lágrimas de tristeza y de frustración. No quería llegar a esto, ni siquiera quería involucrarse, pero parece que Seiya fue la fuente de porque ha venido

Solo tuvo que hacer una llamada y decir "tu amado está muriendo" y listo, fue suficiente para hacer que venga voluntariamente

Había mucho de que explicar

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Omake: ¿El Joven Vigoroso de Chaldea?

— ¿Porque debo participar vestido así? — era la pregunta de Seiya incómoda mientras se acomodaba el cuello. No hace mucho su Master había conseguido algo que llamo Skin para él, apodándolo ahora como el "joven vigoroso" con ese atuendo

— Debes ir a la fiesta de celebración te guste o no, Pegasus. Todos nos hemos esforzado para resolver toda las singularidades o acaso tienes otros planes divertidos~ — con quien discutía no era otra quien se hacía proclamar su tía, Euryale queriendo jugar un poco con él, pero solo para recibir un golpe de karate sobre su cabeza — Ay!

— No caeré en tus encantos, niña malcriada! — Seiya le dijo no gustándole sus juegos sucios y provocativos, algo que así bastante seguido al llamado junto su hermana Stheno como "dúo de lolitas góticas tan blanca como la nieve"

A pesar de ser tan amada y adorada por los hombres como la "chica perfecta", realmente es un demonio que amada y adora todo lo bonito actuando una niña mimada que despreciaba a la humanidad y solo lo ama como juguetes estupidos

Tan solo recordar ese comportamiento, junto el hecho que desea que se convierta en su corcel junto su hermana siempre lo sacaba de mal humor y le recordaba a la malcriada Saori Kido

— Vamos. Déjame verte, querido sobrino, sigue siendo el lindo y bastante guapo hijo de nuestra querida hermana, un Joven Vigoroso... teehee, de ser gran pegaso a ser a un humano ¿Porque no me levantas? — a su lado la acompañaba siempre Stheno, tratando de seducir a su sobrino, lo cual al ser "diosas perfectas" de incalculable belleza, cualquiera caería en sus encantos

Pero Seiya no, su voluntad más dura que el oricalco y su fe incorruptible impedía caer bajo sus malvados encantos, viéndola a dos mocosas como un verdadero fastidio 

— Mejor dejen de seguir insistiendo, nada hará que cambie de opini- — de la nada, Seiya colisionó extrañamente dos grandes cosas blandas que hicieron detenerse en seco, al alzarla su vista, se encontró cara a cara con la Gorgona descubriendo que su cara acabó en medio de sus tetas

— El santuario no me preparo para esto — algo extraño, siendo que venía de Grecia se mantenía las antiguas tradiciones, pero el Santuario estaba hecho para formar jóvenes guerreros que estaban dispuesto a pelear por la paz y la justicia

— Que sensación tan extraña. Mientras mas te miro, mas sentimientos siento más por ti... — esto se puso incómodo para Seiya cuando tuvo las manos escamosas de esa gigantesca mujer en sus mejillas, quedando aterrado al verla sonreír — ...como el de una madre, hijo

¿¡Porque toda esas mujeres de cabello violeta lo querían tanto para ser parte de su familia sin su consentimiento?! Primero esa Rider que no lo dejaba perseguir a todo lados como una especie de acosadora, luego vinieron sus hermanas que no dejaban de coquetearlo mientras lo llama su "querida pegasus" deseando montarse sobre él, y ahora está gigantesca mujer que lo asusta

Era más fácil tan solo pensar que solo son criaturas monstruosas que es necesario eliminarlos para proteger a la humanidad, pero aquí todo luchar irónicamente para evitar la incineración de la misma

Eso le traía un gran deja vú al mencionarse que la humanidad sería incinerada 

— Gorgon, podría dejar tranquilo a nuestro hijo. Lo asustas — detrás de ellos escuchó una infantil voz encontrándose tras de ellos a una niña de ropajes negros y como toda las mujeres en la habitación su cabello es largo y violeta, equipada con una peligrosa guadaña — Pero entiendo como te sientes. Estoy tan feliz que nuestro hijo esté con nosotras ¿No lo crees, Pegasus?

— Si. Tu hijo está vuelto ¡Pero es muy malo con tus tías! Debería comportar como se debe con nosotras — Euryale entregó lo apunto con un dedo acusador, pareciendo que lloraba, pero podía ver tras esa máscara que estaba divirtiéndose con su sufrimiento

— Tu hijo es un rebelde. Debería dejarnos con nosotras para educarlo — Stheno entregó su sugerencia, riéndose a escondidas mientras las dudas hermanas abrazaban a la menor con bastante diversión, mientras Medousina parecía bastante inocente no percatándose de las insinuaciones de sus hermanas mayores

— Malditas mocosas! — maldecía Seiya en su cabeza conteniendo el impulso de ir tras de ella y golpearle las cabezas para que aprendan a respectarlo. Lamentablemente, estaba enredados entre las serpientes de Gorgon impidiendo escapar

Como deseaba no haber aceptado el llamado de su Master, pero sabía que aunque no le gustaba, vino a este lugar al escuchar el llamado inconsciente de la humanidad para ser la esperanza que lo salve

— Nee-san...! 

— hablando del Rey de roma...

Ahí estaba en la puerta, espiando nerviosamente la Servant que lo comenzó todo y lo hizo enrollarse en todo este problema familiar, Medusa de la clase Rider. Imaginar que había más de una versión de aquel monstruo mitológico lo asustaba, pero más fue su sorpresa que aunque se ve segura y bastante feroz en el campo de batalla o hablando con otros Servant, cuando se trata de sus hermanas y ahora él se comporta de una manera bastante cobarde y sumisa 

— Por favor, no sean groseros con Seiya-san. Por favor dale algo de espacio, que no quiero incomodarlo — Medusa trato de acercarse a él, pero aprovechando una pequeña ventana, el santo de bronce corrió por la puerta para huir de las monstruosas mujeres, mientras mientras gritaba

— ¡Que yo no soy su hijo! 

— Sé escapa! Tras él — grito Euryale provocando una gran campaña para perseguir el santo de Athena

— ¿Donde está Shiryū cuando se le necesita? — la pregunta del millón, mientras pasaba al lado de Arthur Pendragon, la versión masculina de Artoria y que extrañamente suena igual al caballero de dragón quien recién mencionó 

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Como habrán notado, ahora un nuevo cambio de rumbo con la muerte de Lancer, el hecho que Seiya salvo a Shirou envés de Rin y que Sakura sea quien haya ido a la casa provocando una ruta haya surgido

¿Algunas sugerencias para ayudarme para construir esta nueva ruta para hacerla más diferente?

Además ¿Que próximo Omake quieren ver? 

¿Golden Arrow Seiya siendo invocado por Rin?

¿Shiryū siendo invocado por Shirou?

¿Seiya peleando contra Heracles en una competencia de box?

¿O que los otros santos de bronce principales sean invocado en Claldea?

¿Que le pareció el capítulo?