Uther Pendragon estaba agonizando, un asesino sajón lo había atravesado. Estaba moribundo en la sala del trono, cuando un hombre entró.

Hombre:– ¡Rey Uther! – el se acercó e intentó ayudar al rey – ¿¡Que sucedió!?

Una luz verdosa salió de la mano del hombre, quien la apoyó sobre la herida del rey, pero este quitó la mano.

Uther:– Ya es tarde para mí, viejo amigo… Merlín ¿Recuerdas la profecía? –

Merlín:– "El segundo hijo, quien levanté la espada creada por las flores se convertirá en rey de Bretaña"

Uther:– Es el momento… Sabes lo que debes hacer –

Merlín:– ¿Está seguro? –

Uther:– Mi hijo está destinado a ser rey –

En ese mismo momento, en otra sala, una mujer acababa de dar a luz a un bebé con un rastro de pelo rubio, desgraciadamente la madre falleció en el acto.

Mujer que sostenía el bebé: – ¡Es una niña! –

De vuelta en la sala del trono, Merlín notó como la mano de Uther ya estaba fría… El rey había muerto. En ese momento una sirvienta entró a la sala

Sirvienta:– ¿¡ACASO USTED…!? –

Los guardias llegaron rápidamente al lugar y miraron al mago con el cadáver del rey.

Merlín:– Es un malentendido –

Soldado:– ¡Mago, queda arrestado por el asesinato del Rey Uther – el se acercó al mago

Merlín se levantó y un lancero se lanzó imprudentemente contra el, impactando contra el mago, pero la herida simplemente se desvaneció en flores rosas.

Merlín chasqueó la lengua y se desvaneció en una andanada de las mismas flores.
Toda la situación había sido vista por una chica de no más de 4 años, la hija mayor del Rey Uther. Ella corrió hacia las afueras del castillo, encontrando al mago de las flores yéndose.

Hija de Uther:– ¡MERLÍN! –

El mago se dió vuelta notando a Morgan, quien había sido su aprendiz últimamente.

Hija de Uther :– ¿A dónde va? –

Merlín:– Voy a un lugar lejano, debo cumplir el último deseo del Rey –

Hija de Uther :– Padre murió… ¡No hay nada que me ate aquí! Quiero ir con usted – Merlín suspiró

Merlín:– Será muy… –

Hija de Uther:– Lo se, déjeme acompañarlo – Merlín suspiró nuevamente

Merlín:– Bien, vámonos – Morgan sonrió cínicamente

Las dos personas abandonaron el castillo y el reino… Dejando a quien cumpliría la profecía a manos de los sirvientes.

6 AÑOS DESPUÉS

La hija menor de Uther había caído en una familia en un pueblito, su padre adoptivo sería "Sir Héctor" y tendría un hermano de la misma forma "Kay". Se le había dado el nombre de Arturia, pero decidieron llamarle Arthur para que ella pudiera ejercer de caballero en el futuro.

Arturia y Kay habían salido, presumiblemente a jugar, ya que Sir Héctor apoyaba la idea de tener una infancia normal para ambos, pese a eso Kay debería comenzar su entrenamiento con la espada al año siguiente, mientras Arturia al que veía después. 

Merlín había creado una espada, Caliburn, quien pudiera levantarla sería rey. Todos ya sabían por una profecía del mago de las flores que el segundo hijo de Uther sería quien levantaría la espada.

Arturia y Kay corrían por el pequeño pueblo, cuando vieron a un grupo de niños de unos 10 tirarle rocas a una niña más pequeña.

Insertar imagen de niña de pelo negro con parche(Morgan niña)

Kay: Se puso delante de la mujer por lo que las piedras le cayeron a el –Hey, metanse con alguien de su tamaño –

Chico 1:– ¿Y quién eres tú? –

Chico 2:– Eso niñito –

Kay:– Mi nombre es Kay, hijo de Sir Héctor – miró desafiantemente a los niños

Niño 3:– ¿Sir Héctor? ¿Quien es ese? – lanzó una piedra hacia la cara de Kay

Kay: Agarró la piedra antes de que llegara a el –Priemra advertencia, vayanse –

El chico 3 se asustó y se alejó seguido por los que no hablaron, quedando solo los primeros 2.

Chico 2:– ¿Crees que nos asustarás? – preparó otra piedra

Arturia agarró la piedra que Kay sostenía y se la lanzó en la cara al chico 2 haciendo que este caiga al suelo llorando, al igual que haciendo que el chico 1 corra despavorido.

Kay:– Eso no era necesario –

Arturia:– Lo merecían –

Kay:– Discúlpate –

Arturia:– No –

Kay:– ¿Y si compro comida deliciosa? –

Arturia: ayudó al chico restante a levantarse – Discúlpame, no creí que lo lanzaría con tanta fuerza – luego miró a Kay – Comida –

Kay:– Se giró a ver a la niña, rondaba su misma edad – ¿Estás bien? –

Niña:– Si, muchas gracias… Aunque yo sola hubiera podido –

Kay:– ¿Y tus padres? –

Niña:– Murieron… –

Kay bajó la cabeza, había dicho algo que no debía.

Niña:– Pero no hay problema – dijo con una gran sonrisa – Porque eres mi salvador – Ella se lanzó contra Kay y lo abrazó.

Kay:– Eh… Eh… – Se sonroja levemente – Y… ¿Cómo te llamas? –

Niña:– Morgan… Morgan Le Fay –

Arturia:– ¿Morgan? Bonito nombre –

Kay:– Este… Morgan ¿Quieres venir a comer conmigo y Arthur? –

Morgan: Señaló a Arturia – ¿Ese es Arthur? – Arturia asintió

Kay:– Así es, el es mi hermanito Arthur – infló su pecho con orgullo

Arturia:– Vayamos a comer – estaba impaciente

Kay:– Si, vayamos –

El grupo de ahora 3 pusieron marcha al mercado, dónde compraron unas frutas de la mejor calidad, solo costando 20 monedas de plata.

Luego de comer Arturia y Kay estaban por irse.

Morgan:– Gracias por la comida… Y por ser mi héroe – Kay se sonrojó levemente

Kay:– ¿Quisieras… vernos mañana? –

Morgan:– Eh… Claro –

Kay había tomado la respuesta como una victoria, para el.

Arturia:– Kay… – pasó una mano por delante de su cara y este reaccionó

Kay:– ¿Que sucedió? –

Arturia:– Quedaste en seco y Morgan se fue –

Kay:– Oh… Volvamos a casa –

Arturia asintió y se fue a su casa, junto a Kay.

Héctor:– Tardaron bastante ¿Sucedió algo? ¿Trajeron la comida? –

Kay: Abrió los ojos al recordar que gastó las monedas en la comida de antes – Joder –

Arturia:– Parece que alguien va a trabajar hoy –

Héctor:– ¿En que lo gastaste Kay? –

Kay:– En una… –

Héctor:– Aún estás joven para las niñas – puso una mano en el hombro de Kay

Kay: Se sonrojó – ¡No me gusta! –

Héctor:– Arthur espéranos aquí, Kay y yo iremos a comprar algo de comer –

Así los días fueron pasando, Arturia y Kay se juntaban con Morgan, por lo que la relación de los dos últimos comenzó a aflorar. Los días se convirtieron en meses y los meses en 1 año.

2 AÑO MÁS TARDE

El sol estaba saliendo y Arturia se despertó, viendo a Kay haciendo algo en el suelo.

Arturia:– ¿Kay? – ella se levantó.

Kay: seguía concentrado en su asunto.

Arturia:– Oye Kay – toca el hombro de su hermano adoptivo.

Kay:– ¿Eh! – el notó que Arturia se había despertado.

Arturia vió que Kay estaba mirando un bello anillo dorado.

Arturia:– ¿Eso es para Morgan? – luego se rió levemente

Kay: se sonrojó ya que lo habían descubierto – No… Es para… papá –

Arturia:– ¿Héctor usando anillos? No lo creo –

Kay: Suspiró – Bien, me atrapaste… –

Arturia:– Ve y habla, estoy seguro de que Morgan no te rechazará –

Con el sol más alto Kay salió de la casa y corrió hacia el mercado central, dónde Morgan solía rondar.

Kay encontró a Morgan ayudando a recoger la mercancía de un vendedor.

Kay: Esperó a que el comerciante se vaya – Morgan – Se agachó y puso una rodilla en el suelo

Morgan:– ¿Kay? –

Kay:– ¿Te casarías conmigo? – Morgan se sonrojó

Las personas alrededor estaban en shock, era cierto que la expectativa de vida era baja, pero pedir casarse teniendo 8 años era demasiado pronto.

Morgan se tensó, ese fue el momento más extremo en sus 11 años de vida.

Morgan: Su cara tomó el mismo o más color de un tomate… – Esto… – Ella notó como los transeúntes la miraban con intriga – ¡No! –

Kay: Bajó su brazo y miró al suelo

Morgan:– Quiero decir… Aún no – Kay recuperó la mirada en ella – Espera unos años más – Ella salió corriendo

Kay no sabía que pensar, había sido rechazado y al mismo tiempo no… Luego la cosa quedaron en "veremos".

Ese mismo día Héctor comenzó sus enseñanzas sobre la espada a Kay y Arturia.

2 AÑOS DESPUÉS

Al pasar el tiempo Morgan se había convertido en una persona de confianza para la familia de Arturia, por lo que esta le reveló su género, pese a las negativas de Sir Héctor.

Una noche fue especial… Kay y Arturia se estaban tardando en volver a la casa, se habían ido a la residencia de Morgan que estaba fuera de la aldea.

Héctor estaba inquieto, sabía que los niños podían cuidarse solo, pero aún así le preocupaban.

Un ligero toque se escuchó de la puerta, a lo que Héctor la abrió rápidamente…

Héctor:– ¿¡Que sucedí…!? – notó que el que estaba en la puerta no era ni Kay ni Arturia

Merlín:– ¿Puedo pasar? Necesito hablar con usted –

Héctor: Sabía, por el anuncio oficial, que el mago era quien había asesinado al rey Uther – ¿Que necesita señor Merlín? –

Merlín:– Es sobre el hijo de Uther, se que usted lo está cuidando –

"Viene a matarla" fue el pensamiento de Sir Héctor

Héctor:– Yo no cuido a ningún hijo de Uther ¿Por qué yo de todos? –

Merlín:– No juegue conmigo, soy un mago y nosotros lo sabemos todo – Evidentemente era pura palabrería – Quiero hacer un viaje con el… Debe conocer otros reyes antes de convertirse en uno –

Héctor: Puso una mueca de desconfianza

Merlín:– Has escuchado que maté al Rey eh – El mago suspiró – Veo que no conseguiré nada aquí… Cuide bien del niño – Merlín comenzó a alejarse del hogar de Héctor – Oh sí, por si cambia de opinión estaré en el mercado –

En cuanto el mago se fue de la vista del caballero, Héctor cerró la puerta y respiró de forma agitada, la presencia de Merlín era imponente a sus ojos.

RESIDENCIA LE FAY

La residencia era una gran mansión en medio de un bosque, Kay y Morgan estaban dentro haciendo la comida, mientras que Arturia estaba fuera entrenando con la espada.

Arturia sostuvo el mango de la espada de madera con las dos manos, el agarre era torpe. Ella estaba prestando atención a su arma y no a su alrededor, otro error. Arturia lanzó un corte vertical, relativamente lento…

Lo que la niña no vió fue que un lobo se estaba acercando desde los árboles… El lobo gruñó cuando estaba lo suficientemente cerca para que la rubia lo note. Ella se dió vuelta y vió como el lobo saltó encima de ella, haciendo que caiga al suelo, pero uso su espada para evitar un mordisco del lobo.

Arturia:– ¡KAY! – Ella estaba forcejeando, pero la espada se rompió y recibió un mordisco en el cuello.

Kay escuchó el grito de Arturia y salió junto a Morgan.

Kay: Al ver al lobo, intentando dar otro mordisco – ¡Alejate de ella! – El corrió hacia el lobo y lo pateó, haciendo que vuele unos metros, luego Kay notó que no tenía un arma para defenderse.

Morgan: Ella buscó rápidamente algo entre sus ropas – ¿¡Dónde está, donde está!? – Ella encontró una gema roja y la puso en su mano – ¡Muevete Kay! –

Kay se movió dejando al lobo en contacto de Morgan, quien lanzó la gema, que chocó con el animal generando una pequeña explosión.

Kay: – ¿¡Que fue eso!? – El corrió hacia Arturia y usó su brazo para tapar pa herida, evitando la pedida de sangre – ¡No importa, ve a buscar ayuda! – Se oía el nerviosismo en las palabras de Kay.

Morgan:– ¡Si! – ella iba a hechar a correr pero se frenó al ver cómo el pasto se convirtió en un campo de flores rosas.

De la misma nada Merlín apareció y miró a Morgan.

Morgan:– Maestro… – ella habló en un tono bajo para que solo el mago la escuchara.

El mago de las flores se acercó a Arturia y alejó a Kay, para seguidamente pasar su mano por la herida, que fue curada rápidamente.

Merlín: "Que bien que no fue una herida muy profunda" fue su proceso de pensamiento.

Las flores que cubrían el campo se volvieron, nuevamente, pasto.

Merlin:– ¿Tu eres el hijo de Uther? – la pregunta estaba dirigida a Kay

Kay:– ¿¡Que!? ¿¡Yo!? – Aún estaba agitado – ¡No! –

Merlín:– ¿Entonces ese es el hijo de Uther? – Merlín miraba a Arturia que había quedado inconsciente.

Morgan:" ¿¡El hijo de Uther!? ¿Acaso Arturia es mi…" fue el pensamiento de la chica tuerta

Merlín:– Pero parece más una niña… "La hija de Uther" –

Morgan:– Se dió cuenta con una mirada… Aún me falta para alcanzarte florista –ella susurró para que el mago no la escuchara, en vano ya que si la escuchó

Merlín:– ¿Florista? No voy por ahí vendiendo flores, como hacen otras – Merlín desvió la mirada a la niña

Kay:– ¿Acaso ustedes se conocen? –

Morgan y Merlín:– No –

Merlín: Suspiró – Vayan a casa niños –

Kay:– Bien… gracias – el cargó a Arturia en su espalda, para después irse a casa de Héctor.

Merlín:– ¿No te has dado cuenta de quién es esa chica? – el mago miraba a Morgan

Morgan:– Ella es… la hija de Uther, mi objetivo. ¡Por ella es que mi vida es así! –

Merlín: Suspiró – Aún no aprendes niña. Incluso si hicimos una investigación juntos sigues sin entender –

Morgan: Enojada – ¡¿Que es lo que no entiendo!? ¡Entiendo que esa niña mató a mi madre y eso es lo único importante! –

Merlín: negó con la cabeza, para después irse

Morgan:– Florista estúpido –

AL DÍA SIGUIENTE

Arturia y Kay estaban en el bosque, practicando con unas espadas de madera, cuando el mago de las flores apareció.

Merlín:– Hija de Uther, hay que hablar – el mago se acercó a los niños

Arturia:– ¿¡Hija!? – ella se escondió detrás de Kay, para susurrarle – ¿Cómo sabe eso? –

Kay:– Tranquilo, nos ayudó ayer con la herida que te dejó el lobo –

Merlín: Me conocen como Merlín, fui el consejero de Uther – El mago miraba a Arturia – ¿Podrías decirme tu nombre? –

Arturia:– Arthur –

Merlín:– ¿Arthur?… Pero eres mujer… –

Arturia: Agarró con fuerza el mango de la espada de madera, estaba por saltar contra el mago.

Kay:– Arturia, Arturia es su nombre – Kay miró severamente a Arturia después de hablar

Merlin:– Quería hacerme una propuesta, señora Arturia – Merlín se inclinó levemente – ¿Quisiera venir conmigo en un viaje de aprendizaje? –

Arturia no sabía que decir, un desconocido la había encontrado en medio del bosque y ahora quería que se fueran de viaje… Sonaba a violín.

Merlín:– Últimamente están pasando cosas raras en el mundo, es una oportunidad única –

Kay:– ¿Cosas raras? –

Merlín:– Nuevas ciudades, nuevos gobiernos han aparecido de un día al otro y sucesos paranormales están sucediendo por todo el país –

Arturia: Se interesó por lo que dijo el mago – ¿Nuevos gobiernos? –

Merlín:– Ciudades-estado con sus propias leyes, incluso se ha alterado la geografía de Inglaterra –

Kay:– ¿Y como es que nadie está extrañado por estás ciudades-estado? –

Merlín:– La mayoría de la gente no conoce todo el país tan bien como para saber que una ciudad ha aparecido de la nada – dirigió una mirada despreocupada a Kay – La mayoría de gente de todo el país cree que todo está como siempre, incluso los que habitan en las nuevas ciudades. Pero hay un grupo de gente que conocemos de la extrañeza de la situación actual –

Arturia:– Con que un viaje… – Ella sonrió levemente – ¡Hagámoslo! –

Merlín:– Me alegra oír eso. Te espero mañana cuando el sol caiga – Mientras hablaba el mago se estaba convirtiendo en flores, que volaron por el aire cuando Merlín se convirtió completamente.

Arturia: Levantó su espada y la apuntó a Kay – Sigamos –

EN LA NOCHE

Ya era tarde, la mayoría del pueblo estaba durmiendo, aunque nuestros protagonistas no lo hacían.

Kay:– ¿Estás seguro de ir con Merlín? – Kay miró a Arturia.

Arturia: Miraba al techo intentando conciliar el sueño, hasta que Kay habló – Si –

Kay:– Y conociéndote no habrá forma de que cambies de opinión… – Kay Suspiró – Eres problemático –

Arturia: Rió levemente – Si –

Kay:– Voy contigo –

Arturia: lo miró con sorpresa – ¿Y Morgan? –

Kay:– Me esperará –

AL AMANECER

Kay fue al mercado, como todos los días, saludo a la señora que vendía frutas, para después encontar a Morgan ayudando a todos los del lugar.

Kay:– Buenos días Morgan – Kay puso una mano en el hombro de la chica

Morgan: miró hacia atrás y vió a Kay, mientras se sonrojaba un poco – K…Kay, buenos días a ti también – el sonrojo se fue

Kay:– Yo y Arthur nos iremos un tiempo –

Morgan: Se dió vuelta, intrigada – ¿A dónde? –

Kay:– No lo sabemos, pero Arturia quiere ir con ese tipo que nos ayudó con el lobo –

Morgan:– ¿El florista? – parecía que había dicho el nombre con desprecio

Kay:– Si – se comenzó a rascar la cabeza

Morgan: Suspiró – Tengan cuidado –

Kay: asintió

Morgan:– Quiero volver a verte, Kay – Morgan se acercó a el – Si algo sucede no dudes en escapar ¿Bien? –

Kay: Miró al suelo – No puedo prometer eso… No voy a dejar abandonado a mi hermano –

Morgan: Agarró la cabeza de Kay y la acomodó para que se vean a los ojos – Si sucede algo dejaras a Arturia, el importante eres tú – ella susurró para que los demás pueblerinos no escucharán

Kay:– Lo siento… – Empujó a Morgan – No puedo prometer eso… Adiós Morgan, te pido que me esperes – Kay comenzó a alejarse. 

Morgan:– Kay… – el chico frenó y la miró – Es "Arthur y yo" – No era lo que quería decir, pero fue lo que le salió.  

Kay negó con la cabeza y procedió a irse.

Mientras tanto, en la casa de Sir Héctor, Arturia había preparado un pequeño equipaje que constaba de 2 espadas de metal… y no mucho más. Cuando Kay llegó Arturia le entregó una espada en su correspondiente vaina de acero.

Kay:– Aún es temprano, cálmate –

RESIDENCIA LE FAY

Morgan estaba en la puerta de su mansión, sin saber que hacer… Arturia quien era su objetivo, se iba junto a Kay quien era "su experimento".

Merlín:– ¿Cuánto te costó construir está casa? – El apareció de la nada, pero estaba al lado de Morgan

Morgan:– Simplemente mandé a los antiguos dueños de la casa a vivir al bosque –

Merlín:– Manipuladora como siempre… Escucha iré a un viaje con Arturia –

Morgan:– ¿Y quieres que vaya con ustedes? –

Merlín:– Así podrás dejar tu odio por ella –

Morgan: suspiró – No – Miró a Merlín, ya que no le había dirigido la mirada – Espero que la prepares, espero algo de pelea cuando la mate –

Merlín:– Si esa batalla sucediera, la que morirás serías tú  –

Morgan:– Ah, ¿sí? –

Merlín:– Ella tiene algo que tú no – el mago simplemente empezó a caminar para irse

Morgan:– ¿Y que es eso? –

Merlín:– Eso debes averiguarlo tú – el florista se fue…

AL ATARDECER

El sol estaba cayendo y Merlín esperaba en la salida principal del pueblo, cuando llegaron Kai y Arturia.

Merlín:– Así que el niño también eh – Se encogió de hombros – ¿Cómo es tu nombre? –

Kay:– Soy Kai –

Merlín:– Kai, Arturia, tenemos un largo viaje por delante –

El grupo comenzó a moverse, aunque al ya estar a una distancia considerable escucharon unos pasos y unos gritos.

Morgan:– ¡ESPÉRENME! – Ella estaba corriendo detrás del grupo

El triplete se frenó, siendo alcanzados por Morgan.

Kay:– ¿Morgan? –

Morgan:– ¿Acaso creían que se iban a ir sin mi? –

Merlín: Sonrió y movió su cabeza hacia el sol – La historia del Rey Arturo empieza aquí –

Pobre Merlín… está taaaan equivocado…

FIN

El próximo capítulo será:

"Bedivere"

No sé lo pierdan