14
Seungmin.
Casi dan las nueve, el salón de fiestas está lleno de personas de diferentes clases, hay personas igual de elegantes que Hyunjin e Irene, se distingue por sus comportamientos, también hay personas más... ¿Normales? sí creo que podría llamarlas normales, visten bien, pero no tan elegante, es como si jefes y empleados se reúnen para convivir, es algo agradable el ambiente.
Hoy pude conocer otro lado de Hyunjin, su lado hipócrita, es un mentiroso de primera, sonríe y es amable, habla con suavidad, con tanto carisma que creí que estaba viendo a otra persona.
He notado que algunos detienen sus ojos sobre mí, como preguntándose quien soy y cuál es mi papel en todo esto, a decir verdad, no tengo idea de porque Hyunjin me pidió estar presente en esta reunión, no conozco a nadie a excepción del señor Lee y Jisung que llegaron hace una hora.
Jisung se ve realmente bien en ese traje negro, la ha pasado cuidando del hijo del señor Lee, este también luce atractivo, con un traje a la medida, pero se quitó el saco así que por ahora solo luce sus pantalones negros, camisa blanca y corbata.
Hay música de ambiente dando ese toque elegante a todo, la comida es espectacular, la señora Hong se lució con eso, hay champaña y vino por todos lados. Hyunjin y el señor Lee la pasan de mesa en mesa, saludando a todos, igual que Irene.
Hay una chica que siempre acompaña a Hyunjin, no sé su nombre llegó minutos después de que Hyunjin bajó de su habitación, no se ha acercado a mí desde entonces, me siento raro de verlo con esa chica, la toma de la cintura y ambos sonríen como si fuera la pareja perfecta, Irene parece satisfecha con eso. Yo me mantengo sentado en una mesa algo lejos, estoy solo, bueno Wonjin se sienta conmigo entre ratos, pero está algo ocupado.
Suspiro algo aburrido, quisiera hablar con alguien, la única opción es Jisung, pero su mesa está algo lejos y no quiero que Hyunjin se moleste porque abandoné mi mesa.
Pero... ah que importa Hyunjin, al final de todo es su culpa por tenerme aquí solo.
Me paré de la silla con toda la actitud, recordé mis lecciones con Irene, mantuve mi postura con naturalidad y caminé como si estuviera en mi casa hasta la mesa de Jisung.
—H-hola, —titubeé un poco, pero una sonrisa lo arregló.
—¿Aburrido? —preguntó Jisung y yo asentí sorprendido de que Jisung supo lo que me pasaba solo con verme. —Yo también estaba aburrido la primera vez que asistí a una de estas, siéntate aquí, hay lugar disponible, no te preocupes.
Me sentí aliviado de no tener que quedarme parado, me senté más tranquilo.
—Jisung, ¿Esta reunión para qué es? —me atreví a preguntar, Jisung me miró unos segundos y después giro a mirar al pequeño Lee.
—Beomie porque no vas con Taehyun y Yuna, —le decía al pequeño, este asintió con entusiasmo y bajó de la silla para correr junto a unos pequeños que jugaban en el jardín. Jisung levantó la mano y un tipo alto se acercó a la mesa, —vigílalo bien Jungmo, cualquier cosa me llamas, —ordenó y el chico asintió dirigiéndose al jardín.
Jisung parece tener mucha experiencia en todo esto.
—Ahora, Seungmin debo advertirte que entre más información tengas sobre todo esto, es probable que Hyunjin no te deje ir.
Al escucharlo mi cuerpo sintió un escalofrió, con esto confirmo que el trabajo de Hyunjin no es nada legal.
Pero qué más da, Hyunjin y yo tenemos un trato, si pierdo me quedó, pero si gano me voy, espero que Hyunjin cumpla a pesar de todo, de verdad quiero creerlo.
—Está bien, habla.
Jisung giró su rostro en dirección al señor Lee para después mirarme a mí.
—Hyunjin y Minho son los líderes de sus familias, el cartel mafioso Lee-Hwang es una unión de familia que trafican armas y drogas, por supuesto cada familia en la alianza tiene sus propios negociosos o empresas, Hyunjin tiene una cadena de clubes nocturnos mientras que Minho de casinos.
—¿Hay otras familias? —me sentí algo interesado en el tema.
—Si, son cuatro familias, los Hwang y Lee son líderes mientras que la familia Yang y Choi son aliados, estas últimas no manejan directamente armas o drogas, pero se benefician de la ayuda que proporcionan, cosas como hombres para los contrabandos o capital para inversión. Mira. —Jisung señaló a mi lado derecho, —por allá esta Yang Jeongin, el líder de la familia Yang y la chica a su lado es Hwang Yeji, prima de Hyunjin, después, unas mesas a la izquierda está Choi Soobin líder de los Choi y la chica a su lado es Lee Chaeryeong, pertenece a la familia de Minho.
—¿Cada uno debe tener un acompañante? —pregunté curioso. Jisung asintió. —Entonces ¿La acompañante de Hyunjin es la chica que no se despega de él?
—Si, Choi Lia, fiel seguidora de la madre de Hyunjin, Irene.
Bien eso explica porque Irene parece tan satisfecha.
—¿Y la acompañante del señor Lee? —vi a Jisung mirar a otro lado con incomodidad, parece sospechoso.
—Ahh soy- yo... —lo miré sin creer lo que decía, —pero solo porque debo cuidar de Beomgyu, no piensas nada mal.
No evité sonreír, —tranquilo, Jisung hyung no pensaba nada más.
—Bien ahora que ya sabes sobre las familias lo siguiente es las reuniones, reuniones como esta se realizan casi cada tres o cuatro meses, dado que es una alianza familiar se respeta mucho la convivencia entre las familias jefes y sus empleados, así sean los sirvientes de sus mansiones o sus sicarios de confianza, la finalidad de estas reuniones es mantener la buena convivencia en la alianza.
—Oh, parece bastante complejo, imaginaba que Hyunjin tenía un trabajo ilegal, pero no que era uno de los jefes de una mafia.
De pronto Jisung y yo escuchamos una voz gruesa y animada decir “Minho hyung, Hyunjinnie”.
—Oh mira, —dijo Jisung indicando que mirara a la puerta del salón — ese chico rubio que acaba de entrar es Lee Felix, de los familiares más cercanos de Minho.
—¿Y el hombre detrás de él?
Jisung miró detenidamente, —no sé, no lo había visto antes, supongo que es el acompañante de Felix.
El chico rubio abrazaba al señor Lee y Hyunjin como si no los hubiera visto en mucho tiempo, es bastante risueño y sonriente para pertenecer a la mafia.
—Es algo divertido, —dije con una media sonrisa.
—Es peligroso, —de inmediato mi expresión cambió a una de confusión, —peligroso para la mafia, Felix es el tipo de chico que le gusta arriesgarse, no le importa mucho quienes salen heridos en el camino, hace tiempo escuché que sedujo a un policía de la división antidrogas, específicamente el agente a cargo de investigar a Hyunjin y Minho.
—Ohh, creo que lo mejor será mantenerme lejos de todas estas personas, no quiero problemas.
Y como si con esa frase invocara al rubio, Lee Felix se acercó a nuestra mesa.
—Hola, Jisung tiempo sin vernos. —saludó sonriente a Jisung.
—Hola, Felix, ¿Qué tal el viaje? —Jisung actuó muy cortés.
—Cansado, pero divertido, tenía a alguien qué hacia el viaje divertido, —decía el rubio mirando al hombre detrás de él, —te presentó a Bang Christopher Chan, ex policía y mi novio.
Ni Jisung y menos yo pudimos evitar nuestro asombro.
—Parece que lograste tu meta, —dijo Jisung volviendo a sonreír.
Lee Felix giró para darle un beso en la mejilla al hombre que ahora sé que se llama Christopher. Este le sonreía con cariño, eso fue lindo.
—Por cierto ¿Quién eres tú? —susurraba Lee Felix acercándose mucho a mi rostro, demasiado.
Estaba por responder cuando Hyunjin me tomó de la mano para jalarme y levantarme de la silla.
—Nadie que te importe, Felix, mantén sus labios lejos de él. —La voz de Hyunjin era firme y demandante.
Lee Felix reía, —tranquilo, no soy de tocar juguetes ajenos, solo trataba de ser amigable.
Hyunjin me tomó de la cintura mirando seriamente a Felix, los invitados comenzaban a mirarnos, eso me preocupó, Hyunjin está llamando la atención.
Así que pensé rápido en una solución.
Empuje un poco a Hyunjin, solo para alejarme de él, —estoy bien, no tienes que ser grosero, —dije a Hyunjin, él me miró molesto, pero eso no me detuvo, —tu acompañante te espera, —dije indicando que la chica está sola.
Hyunjin la miró y soltó un suspiro antes de mirarme una última vez, —bien, solo no te quejes de las consecuencias, —susurró para mí y se alejó.
Sentía mi cuerpo tenso, enfrentar a Hyunjin siempre toma mucha de mi valentía para dejarme temblando.
Sentí la mano de Jisung en mi muñeca y me relajé, volví a sentarme, algunas personas aún me miran, pero trato de ignorarlos.
—Bueno, después de esta escena quiero saber todo de ti —decía Lee Felix sentándose junto a mí, el ex policía lo siguió sentándose a su lado.
Al parecer será una noche larga.
Pasé bastante tiempo contando algo de mi historia, más que nada respondiendo las preguntas de Felix, sobre cómo Hyunjin me encontró, Felix también hablaba de él, ahora sé que tiene veintiún años, igual que Jisung, al perecer ellos se llevan bien, Felix se fue a Paris hace dos años, lo que quiere decir que sedujo a un hombre de veinticinco a sus diecinueve, puesto que esa edad tenía el ex policía Bang Chan cuando dejó la división antidrogas siguiendo a Felix a Paris.
—¿Sabes que podrías hacer para sobrevivir con Hyunjin? —me decía Felix con una expresión que no pude descifrar bien, parecía interesado en mi respuesta y divertido de alguna forma.
—No, Felix hyung, no tengo idea. —Dije algo sarcástico.
—Aprender a defenderte, apuesto a que a menudo Hyunjin te domina solo con su presencia, es clásico de él, —sonreí incomodo, Felix daba justo en el clavo con cada palabra. —Lo sabía, entonces demuéstrale que no eres débil, si aprendes a defenderte Hyunjin podría verte más como igual que como alguien para follar.
Me sentí algo avergonzado e incómodo con esta conversación, pero Felix podría tener razón.
—Creo que lo voy a intentar, —dije pensando seriamente en pedir a Hyunjin que me enseñe más sobre su mundo, que me permita aprender a defenderme.
La velada siguió su curso, ahora más tranquila, poco a poco los invitados se despedían halagando la buena atención y el ambiente agradable. El rubio Lee se fue de nuestra mesa para saludar a otros de los invitados, es un chico de verdad muy animado, el ex policía siempre detrás de él, como si tuviera miedo que Felix se alejará demasiado, de alguna manera es tierno.
Jisung se levantó un par de veces para revisar que Beomgyu estuviera bien, el señor Lee también se sentó en la mesa por algunos momentos, se acercaba a Jisung y le decía cosas al oído, era un poco raro, ver a Jisung avergonzarse, me hacía pensar en que podría ser lo que el señor Lee le susurraba.
Traté de enfocarme en la comida que era una delicia, gracias a Jisung probé un poco de champaña y una copa de vino, no sé qué decir del alcohol, nunca lo había probado, supongo que es bueno.
Sé que Hyunjin me miraba entre ratos, era imposible no darme cuenta de su fría mirada, pero su faceta de buen anfitrión resaltó en todo momento puesto que seguía sonriente, buen mozo y cariñoso con esa chica, Lia.
Me levanté un momento de la mesa, Jisung, el señor Lee y su hijo parecían una linda familia feliz y me sentía incomodo siendo ajeno a ellos, así que salí al jardín. Respiré algo de aire fresco.
—¿Y tú que eres de Hyunjin oppa? —escuché una voz femenina a mi espalda, giré para mirar a la chica que Jisung llamó Hwang Yeji.
—Ah, un conocido, —fue lo único que pude decir.
Ella asintió como si supiera de que hablo, —ya, eres su nuevo juguete, —suspiré rendido, todas las personas que he conocido desde que llegue a este lugar, a excepción de los empleados y Jisung me han llamado el juguete de Hyunjin.
No es que estén equivocados, así es cómo Hyunjin me ve, pero es humillante que me llamen así.
—Me llamo Seungmin, —dije con una sonrisa fingida.
—Hwang Yeji, —ella me dio la mano y yo la tomé por cortesía. —Deberías tener cuidado de andar solo, cualquiera puede pensar que eres un empleado más y si alguien toca las cosas de Hyunjin habrá problemas, —esa fue su despedida, en efecto ella tenía razón, di la vuelta para mirar al salón y noté un par de tipos mirándome, pero sobre todos, Hyunjin bastante serio.
Regresé a la mesa del señor Lee y no volví a levantarme, cerca de las dos de la mañana, la reunión por fin llegaba a su fin con el señor Lee e Irene siendo los últimos en despedirse.
Vi a Hyunjin ir a su despacho con la chica, la tal Lia, por lo que mejor subí a mi habitación.
Me quite la elegante vestimenta, no quería maltratarla de más, después me lave la cara para refrescarme, estoy agotado de estar alerta, miré mi reflejo en el espejo y vi la gargantilla que Hyunjin me regaló, es linda, la quite y la sostuve en mis manos, recordé ese beso.
Suave y fugaz, deseaba más y sé que eso está mal, porque debo seguir firme, sin perder ante Hyunjin. Debo mantenerme consciente de que Hyunjin es mi secuestrador no mi príncipe azul.
Pero ¿Cómo evito que me guste? Porque, aunque quiera negarme sé que estoy hechizado por su belleza, es un idiota, y un tipo cruel, pero me gusta su aspecto, y eso ha sido suficiente para caer en sus trampas.
Escuché la puerta sonar y sentí algo de emoción, Hyunjin vino a verme.
Sequé mi rostro y me puse la camisa del pijama, abrí la puerta y lo que vi me recordó por qué debo seguir firme y ganar.
Hyunjin está devorando la boca de esa chica, seguramente estaban tan ocupados comiéndose que chocaron con mi puerta mientras caminaban por el pasillo. Me sentía tan estúpido que me quede mirando hasta que llegaron a la habitación de Hyunjin.
Él abrió la puerta y ella entró, después él me miró y dijo —¿Quieres unirte? —solté un suspiro de frustración y regresé a mi habitación cerrando de un portazo.
Idiota, Hyunjin es un completo idiota, pero más idiota soy yo por creer que algo bueno pasaría con él.
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