|O4, El reencuentro.
Hoy, después de dos años, finalmente supe lo que paso al final de mi primer sueño cuando llegue a Nueva York, pues raramente soñé la continuación, y honestamente es muy gracioso, ya casi ni lo recordaba, lo cual es extraño porque, ¿Quién no recuerda un sueño donde esta a punto de besarse con Dylan O'brien?, en mi defensa, muchas cosas pasaron en mi vida, así que era muy probable que con el tiempo lo olvidara.
La ironía de la situación era simplemente maravillosa, soñé ese sueño en mi primer día de escuela en Nueva York, y ahora, lo he vuelto a soñar, pero esta vez sabiendo su final, justo en mi primer día en Nueva York desde que me fui a Inglaterra. Y aún más gracioso, esta vez no había nadie que me interrumpiera como la ultima vez, pues mi madre ya no estaba para hacer eso.
Elimine cualquier pensamiento que rondara por mi cabeza. Hoy iba a inscribirme a la preparatoria Abigail Adams, fue una suerte que aceptaran hacerme el examen de admisión justo en el primer día de clases. Esta preparatoria es donde Farkle y los demás van a asistir, y como ellos aún no saben que volví, no se que esperar.
Me subí al autobús directo a la escuela, hoy solo iría a hacer mi examen de admisión y después de que lo revisen, me dirán si me quedo en la escuela o no, suena bastante fácil, pero el examen tiene como cien preguntas, así que tardare un par de horas.
Llegue temprano a la escuela, para ser más específicos, media hora antes de que iniciaran las clases, aunque como es de esperarse, ya había algunos alumnos ahí. Cuando veía a la gente en mi camino a la dirección, me imagine sus vidas, dicen que los ojos son la ventana del alma, así que me entretuve descifrando a las personas y esperando haber acertado a mis teorías sobre sus vidas.
Cuando llegue a la oficina del director, toque la puerta tres veces, el director me recibió y me sentó en frente de su escritorio, con el examen y un lápiz listos para ser usados por mi.
—Tienes solo 2 horas y media para responder el examen, tres horas como máximo. En base a tus resultados, analizaremos si te aceptamos aquí o no.— Habló autoritariamente, su voz daba una vibra de ser muy regañón y gruñón, pero en sus ojos se veía todo lo contrario.
Asentí levemente y sin decir una palabra tome el lápiz y abrí la primer hoja del examen. Y agradecí al destino por darme un año de educación en Inglaterra, porque estas preguntas solo las podría responder con el ave maría si hubiera terminado la secundaria en Nueva York.
A pesar de que sentí que el tiempo había pasado muy rápido, pude responder todas las preguntas a tiempo, fue bastante estresante ser constantemente observada por el director, quien parecía juzgar cada movida que hacia en el papel. Cuando le entregue el examen, el se lo entrego a su secretaria, y me explico lo siguiente que iba a pasar.
—Ahora evaluaran tu examen, tardaran otras dos o tres horas pues tenemos otros exámenes que evaluar. Te recomiendo que te quedes aquí o en el pasillo a esperar, donde te sientas más cómoda.— Me dijo mientras volvía a sentarse en su escritorio.
En otras circunstancias, habría esperado afuera de su oficina, pero extrañamente me invadió el temor de cruzarme con alguno de los chicos, era como si estuviera en una fase pre-ataque de pánico. Así que decidí quedarme en la oficina del director.
Esta vez, esas tres horas pasaron como una tortuga, demasiado lento. Pero una vez terminaron, en lo único en lo que podía pensar, era en mi resultado final.
—Bien, veamos. Según control escolar, tu puntaje fue un 85 sobre 100. Felicidades, has entrado a la escuela preparatoria Abigail Adams.— Anunció mientras veía su lista de calificaciones. — Bien, aquí tienes tu horario y un folleto de la escuela, tiene un mapa dentro por si te pierdes. Tomate este día libre, mañana inicias tus clases.
Escuchar todo eso me alivio el corazón, salí de la escuela lo más rápido posible y llamé a mi hermano para avisarle que me habían aceptado, el se escucho sorprendido y algo triste, pero como yo estaba llena de emoción, y los asuntos de mi hermano me importaban muy poco, ignoré su tristeza y arreglamos cuando me iría a visitar.
Regrese a mi casa contenta, y a pesar de que mi prima ya no vivía ahí, aún seguía en Nueva York, viviendo con una de sus amigas, y una que otra vez con los Matthews.
Me pasé todo el día limpiando y arreglando la casa, que llevaba abandonada ya un año, pero que afortunadamente, aun era propiedad de mi familia, y no me di cuenta que ya pasaban de las seis de la tarde hasta que revise mi teléfono, el cual estaba dentro de una de las dos maletas que lleve. Y como si fuera cosa del destino, una llamada de Riley me tomo por sorpresa.
Decidí no responder, el miedo sin sentido volvió a invadirme, pero esta vez, decidí no acobardarme. Así que salí en busca de los chicos, traté de quitarme el miedo de poco a poco, así que primero fui a buscar en el metro, no estaban ahí, después fui a Topanga's, creyendo que tampoco estarían ahí, pero cual fue mi sorpresa cuando vi a Riley y Maya solas sentadas haciendo su tarea.
Cuando las vi, me sentí rara, verlas en persona después de tanto tiempo se sentía extraño, ambas tenían vestimentas que las hacían ver más grandes, en un año si que cambiaron aunque sea un poco, además, Riley tenia el cabello corto, como el mío. Maya en realidad solo había cambiado un poco su vestimenta.
Riley le estaba diciendo algo a Maya, pero yo seguía afuera, así que me acerqué un poco para ver si podía escuchar algo.
—El pleito con Lucas fue real...— Pude escuchar a Riley hablar, Maya veía su cuaderno, pero levanto su cabeza y vio en dirección a Riley, pero oh sorpresa, se percato de mi existencia afuera de la cafetería.
—No puede ser... Riley, creo que me he vuelto loca...— May dijo mientras me veía, sus ojos no podían estar más abiertos de lo que ya estaban, su boca expresaba sorpresa pero a la vez felicidad. Riley no entendía lo que decía así que miro hacia donde yo estaba, sorprendiéndose también.
Al darme cuenta de que ya no había escapatoria, decidí entrar a la cafetería, Riley se levanto de inmediato y se acerco a mi, Maya le siguió.
—No puede ser... _____ estas aquí, estas tan cambiada pero a la vez sigues igual.— Riley me examino de pies a cabeza, viendo mi vestimenta, la cual era un poco diferente a como solía vestir antes, pero aun mantenía mi escancia.
—No puede ser, miren quien esta aquí, mi hermosa Alaska— Maya menciono el apodo que me había dado cuando llegue a Nueva York, y seguidamente me abrazo.
—Me alegra verlas de nuevo.— Dije con un tono suave, las chicas me miraron raro.—¿Que?— Pregunté confundida
—Vaya, ____, un año en Inglaterra y ya adoptaste el acento británico.— Maya respondió sorprendida. Sonreí a mis adentros.
—Por cierto, chicas, ¿De que pleito con Lucas están hablando?— Pregunté mientras nos sentábamos en el lugar donde estaban estudiando.
—Nuestro primer día de preparatoria y ya nos hemos separado. Unos chicos de ultimo año nos mandaron a un agujero en la escuela y dijeron que nos teníamos que quedar ahí. Yo confió en Riley, y ella confía en que ellos nos quieren enseñar algo. Pero los demás querían visitar la escuela y unirse a ella. Para ellos Riley confía demasiado en la gente, pero no les hace evitar pensar que solo nos están molestando. Éramos Reyes en la secundaria. — Maya me explico la situación, también detalló algunas cosas más, definitivamente tenían un pleito.
—Pero es ridículo. Me refiero a que, su pelea es bastante ridícula. Son nuevos en la preparatoria y ya quieren dominar al mundo... necesitan tomarse su tiempo. Me parece que hace falta comunicación aquí.— Pensé en voz alta, Riley me sonrió. —No puede ser, apenas llegue y ya están peleados.— Bromeé
—¿Fui tonta al confiar en desconocidos?— Riley se pregunto a si misma.
—Tonta no.— Una voz femenina respondió, no era Maya y definitivamente no era yo. La voz provenía de una chica castaña acompañada de una rubia y un chico, me recordaban a el triangulo amoroso. Los individuos se acercaron a nosotras.
—¿Por que nos hacen esto? Nuestros amigos se fueron.— Riley les preguntó, podía ver como sus ojos estaban cristalizados por aguantar lagrimas
—Si, es lo que pasa. Las personas se van.— Es lo que respondió la rubia, yo tenia experiencia en eso así que le di la razón en voz alta.
—¿Qué pasa?¿Ahora van a seguirnos?— Maya preguntó refiriéndose a como esos individuos estaban en el mismo lugar que ellas.
—No, ustedes nos siguen, de hecho.— El chico finalmente habló respondiendo a su pregunta.
—Si, estamos aquí todo el tiempo. Es nuestro lugar.—La rubia y la castaña respondieron.
—¿Por qué no los habíamos notado?— Maya preguntó inocentemente.
—Porque estaban tan metidas en su pequeño mundo todo el tiempo. Ahora quieren unirse al nuestro, tienen que detenerse y mirar más.— Las chicas se sentaron frente a mi, y el chico se sentó junto a mi, en el asiento vacío.
—Po eso los pusimos abajo, no salten tan pronto, miren todo. Y escuchen a su amiga— La rubia continuo de explicar y se refirió a mi en su ultima frase.
—¿Ustedes son buenas personas o solo bromean con nosotros? Díganlo.— Riley hizo una pregunta estúpida, pues las chicas habían aclarado sus intenciones. Pero me quedé callada.
—Pues definitivamente jugamos con ustedes, pero pensamos que somos buenas personas y ustedes tendrán que descubrir eso ¿ok?— El chico respondió y me miro detenidamente, como si yo le recordara a alguien.
Después de que Maya les pidiera con un chiste que se fueran, los tres se levantaron de sus asientos y se dirigieron a la salida. Miré como se iban, pero mi corazón se detuvo al ver a cierto individuo parado en la entrada.
Farkle Minkus.
Estaba parado, aun sin notar mi existencia, viendo a Riley, podía notar como su cabello estaba más corto, y su vestimenta también lo hacia ver más grande, a pesar de que su estilo no había cambiado. Me di cuenta como yo había dejado de respirar durante los segundos en que lo vi, así que trate de regular mi respiración.
—Hola. Ya hable con todos, se que deberíamos estar aquí, todos están alterados. Arruinaron el primer día de preparatoria. Así que hicimos nuestra tarea en casa.— Farkle le dijo a Riley, el chico aun no notaba mi presencia, y yo no estaba muy segura si quería que lo hiciera. Para ser honesta, había algo en el tono de voz de Farkle muy extraño, como si estuviera... triste.
—Farkle estoy molesta contigo.— Maya le dijo.
—Y yo contigo.— El ojiazul respondió.
—Así es como comienza una pelea.— La rubia alzó la voz
—No, la estamos teniendo. — Lo que dijo Farkle sin duda fue un golpe bajo
—Oye no hicimos la preparatoria más difícil de lo que creíamos.— La rubia siguió defendiéndose.
—Y nosotros no confiamos en extraños— Farkle contraataco, mirando a Riley.
—Diles que no importa si creen que estar en un agujero es muy tonto. Importamos nosotros, Farkle. No nos vamos.— Riley se unió a la discusión, aun sentada en su asiento. —Y volveré a ese tonto agujero mañana y no se que voy a aprender, porque pienso que voy a salir sabiendo más de lo que se ahora. Y espero tomar la decisión correcta. Espero que mis amigos estén junto a mi. Diles eso.— Una pequeña lagrima cayó de los ojos de Riley, a pesar de que seguía sentada, podía ver como ella quería pararse.
Yo quería evitar que esta pelea durará más, así que me sacrifique e hice que Farkle notara mi presencia. Me levante bruscamente de mi asiento, llamando la atención de todos, mi mirada era seria, y Farkle por fin me vio.
Su expresión era como si hubiera visto un fantasma. Era imposible descifrar lo que el pensaba en este preciso momento, pero sin duda sabia que el chico estaba sorprendido. Parecía una estatua, no se movía.
—_-____— El chico tartamudeo mi nombre, parecía que ambos solo pensáramos que en este momento, solo éramos el y yo.
—Hola, Minkus.— Respondí con un tono serio y delicado.
—Tu... volviste.— Farkle pronuncio, y a pesar de que no sabia que esperar de el, su tono de voz parecía no muy contento.
—¿Esta mal?¿Debería volver a Inglaterra?— Me defendí ante la negativa de Farkle, el chico frunció el ceño.
—¿Por qué harías eso? Primero que nada, ¿Por que volviste?— Cuando yo quería evitar una pelea, parecía que estaba iniciando otra.
—Oh, lo siento. Volví para ver si aun seguías vivo porque en todo el tiempo que estuve en Inglaterra apenas y supe de ti un par de veces.— Mencione con ironía. Cada vez me acercaba más a Farkle, ignorando la presencia de la rubia y la castaña. —Dime, Farkle, ¿estas vivo?— Seguí usando el sarcasmo como mi arma.
El castaño se quedo atónito, examinando cada parte de mi. Hasta que simplemente solo podía mirarme a los ojos. Y sin darme cuenta, estábamos a centímetros de distancia, mi mirada era seria, pero la de el... la de el era indescifrable. Me di cuenta de ya no teníamos la misma estatura, Farkle ahora me rebasaba por un significante numero de centímetros, ahora era más alto que yo, mucho más.
Después de unos minutos de tensión, Farkle trago saliva y finalmente habló de nuevo.
—No creo que te des cuenta de lo que me haces.— Respondió seriamente, había algo en Farkle que simplemente no podía ver, no podía entender.
—Entonces dímelo.— Respondí, casi en un susurro.
Era increíble como apenas había llegado y lo ultimo que esperaba era una pelea con Farkle, pero era algo que probablemente no podía evitar. Yo estaba molesta, molesta de que el no se apareciera en las llamadas, molesta de que pareciera que su carta no significaba nada, molesta de que un buen amigo se comportara así. Pero a pesar de todo, veía que algo había cambiado en Farkle, y no tenia idea de que era, y eso me preocupaba.
El no respondía, su mirada viajaba por mis ojos, y parecía que también por mis labios, inconscientemente yo hacia lo mismo. ¿Cómo es posible que en medio de una discusión hagamos esto?
De nuevo, después de unos minutos de tensión, no paso nada. Al final nunca pasa nada.
Farkle se fue del lugar, dejándonos solas a las chicas y a mi. Ellas se me quedaron viendo atónitas.
—Vaya, ____, quien lo diría. Hoy es el día de las discusiones.— Maya comentó, yo le lancé una mirada fulminante y aproveche para buscar empleo en Topanga's esta noche, pues de todas formas planeaba hacerlo el día de mañana.
¿De verdad se podía considerar como una discusión? A pesar de que en mis adentros deseaba que no fuera así, era bastante claro que lo fue. Respondí algo agresiva ante la indescifrable respuesta de Farkle, y como ya dije, estaba molesta.
FARKLE P.O.V.:
Había vuelto. Mi pelinegra había vuelto. Ella había cambiado un poco, su acento era británico, su vestimenta había cambiado, su cabello caía como cascada en su cuello y hombros, más corto de lo que era antes, y ahora era más baja en estatura que yo. Pero sin importar como había cambiado, ella seguía ahí, su esencia seguía ahí. Y no pude evitar sonreír al ver que traía puesta la cadenita que le di en año nuevo.
Su presencia me hizo darme cuenta de que me he comportado como un ser humano idiota. Todo lo que he hecho, y las razones por las cuales lo he hecho, son un misterio para aquel bello enigma humano, y por eso tiene derecho a estar molesta. Pero... Su mirada era una de esas raras miradas que solo encontramos cuatro o cinco veces en la vida, y ahora que lo pienso, ella probablemente pensó lo mismo de la mía cuando me vio.
Seguía sin poder descifrar varias cosas de ella, y esa mirada... era tan propia de ella, pero a la vez tenia algo diferente. Y por más que quisiera pensar en esa mirada, lo que ocupo mi cabeza el resto de la noche fue que discutimos, además del hecho que llegó desprevenidamente. Definitivamente mi comportamiento extraño ha dado sus fruto, frutos amargos y podridos.
Y pronto tendría que explicárselo a _____.
Hello ^^
Por fin llegamos al reencuentro, y a lo bueno. Se vienen muchas cosas interesanteees uwu
Finalmente habrá actualizaciones más seguidas, las quiero y wtf las leídas están aumentando mucho ajsjjaja, graciaaas, les dejare disfrutar este capitulo y nos veremos la próxima semana.
Si, así es, la próxima semana se viene actualización. Y probablemente, tendremos actualizaciones cada fin de semana :0
Por cierto, hice algo, dos portada nuevas ajsjajaja:
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro