CAPÍTULO 9
Después de esperar por unas horas a que Tabita se quedara sola, para poder hablar con ella y ver sí podemos ser amigas, por fin tuve una oportunidad y no dudé en seguirla al cuarto, cuando entre se estaba desvistiendo por lo que al verla semidesnuda no pude quitar mi vista de sus senos grandes adornados con pezones color canela, Tabita al verme comenzó a gritar que le hiciera daño y aunque intenté calmarla no tuve suerte, el alboroto llamo la atención se Pablo que ver a Tabita tan alterada la trato como sí estuviera también comenzó a recriminarle por no tomarse los medicamentos.
Al ver eso me enoje mucho y le tiré un zapato después le dije que dejara de tratar como una loca a su esposa, Pablo se asustó por un momento después pregunto muy molestó le respondí que sólo había entrado al cuarto para ver sí podíamos ser amigas, Tabita dijo casi gritando que no me creía y de seguro estaba planeado algo para asustarlos o hacerles algo peor. Al escuchar esas acusaciones le dije a Tabi que no se con que clase de fantasmas se había topado antes pero yo no tenía intenciones de lastimarla, Pablo también había escuchado y después de pedirle escusas por pensar que tenía problemas siquiatricos le dijo que me diera una oportunidad Tabi después de pensar por un momento acepto de mala gana.
Al principio Tabita estaba bastante prevenida por lo que me evitaba estar a solas conmigo, y las pocas veces que estábamos solas se podía muy tensa si me acercaba, pero poco a poco me fue ganando su confianza y nos volvimos muy buenas amigas aunque todavía tensa si la veía desnuda. Después de unos días siendo amigas Tabi me contó varias de las malas experiencias que había tenido con fantasmas y cuando terminó entendí porque me tenía desconfianza, después de hablar otro rato al respecto nos íbamos a meter en la piscina pero en ese momento se comenzaron a escuchar unas detonaciones muy fuertes. Cuando salí a la cera para echar un vistazo lo primero que ví fueron los cuerpos de dos chicas después al señor Orlando disparándole con un rifle a todas las personas que se topa y como era una de las horas en qué más personas transitaban por el lugar tenía muchas víctimas de dónde escoger.
Pasados unos minutos minutos comencé a ver como varías de las víctimas decidían pasar al plano esperitual y otras optaban por quedarse en este como fantasmas. Cuando por fin llegó un equipo especial de la policía el señor Orlando se pego un tiro en la cabeza que tenía escondida antes de que pudieran hacer algo.
Cuando alguna de las víctimas que había decidido quedarse en este plano notaba mi presencia se acercaba para quejarse de la policía por haberse demorado tanto, pero cuando recordaban que el equipo SWAT lo mandaron desde una ciudad vecina porque nuestra policía al liar casi exclusivamate con la prostitución no cuenta con un equipo de ese nivel se relajan un poco, luego de estar otro rato en la acerca voy a entrar para contarle a Tabita lo que había pasado pero en ese momento aparece el espíritu de Pablo.
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