Mientras el Hokage descansaba aun en su estado de coma, Sakura atendida en sus heridas y Konohamaru era operado, la nueva generación de ninjas estaba en la sala de espera con reacciones variopintas. Himawari estaba asustada y con una mirada cabizbaja, Sabaku con seriedad, Sarada preocupada y Boruto furioso por dentro mirando a los ninjas de la nube aun haciéndole estudios a su padre.

"Esto no es justo. ¡No es justo!" Boruto se paró golpeando la pared asustando a su hermana mientras Sarada y Sabaku le miraban con preocupación. "¡¿Por qué cada vez que tenemos la ventaja siempre encuentran una forma de superarnos?! ¡Porque! ¡Porque!" El chico golpeaba la pared con todas sus fuerzas.

"Mamá sigue allá, el abuelo Hiashi también y papá está en ese estado. Por más que lo estamos intentando no podemos dar el golpe final." Continuaba Bolt hablando poco a poco en voz baja hasta sentir en su hombro la mano de Sarada.

"No seas duro contigo Boruto, estamos enfrentando a este enemigo desconocido y sabemos cómo hacerles frente pero necesitamos calmarnos y pensar con claridad, por favor, no quiero que Hima este asustada. Lo que menos necesita ella es ponerse tensa o nerviosa." Sarada se convirtió en la voz de la razón del rubio.

"Tú mismo lo dijiste Boruto, somos ninjas y no podemos rendirnos pero recuerda que casi nos matan. No podemos darnos el lujo de arriesgar la vida de los que no pueden pelear Boruto." Habló Sabaku mirando al cuerpo médico tratar al Hokage. "Si debemos pelear, tendremos que estar listos."

"Yo sé que papá estará bien y salvará a mamá junto como la aldea, el despertará y vencerá, como lo decía en sus historias." Dijo Himawari mirando a su hermano mayor, inyectándole más confianza y respaldar sus palabras.

Boruto apretó los puños mientras inhalaba y exhalaba calmando su rabia ante las palabras de su hermana y amigos, el chico rubio solo asintió.

"¿Y ahora qué sigue? Estaremos aquí un buen rato hasta que mi padre despierte"

"Entonces no hay que perder tiempo chicos" Enfrente de ellos veían a Kakashi quién es acercó a ellos con toda la calma del mundo. "Admirable, sencillamente admirable."

"¿Sexto? Pero ¿Cuánto tiempo lleva ahí parado?" Pregunto Sabaku arqueando la ceja.

"El suficiente para escuchar como motivaban a Boruto y verlos así a los tres me trae recuerdos" Decía el albino mirando en los chicos a cómo eran él, Obito y Rin o incluso al equipo siete original. "El ninja más fuerte no es aquel que sepa todos los jutsus, sino aquel que nunca abandona a sus amigos del campo de batalla, así que pensé por un momento que mientras su Sensei se recupera tras la batalla que tuvo, yo les entrenaré a los tres, claro que será de forma temporal." Dijo el albino creando un ambiente extraño entre los muchachos.

"¿Habla enserio? ¿Entrenarnos?" Preguntó Boruto sorprendido. "¿Haría eso? ¿Enserio?"

"Claro, además quiero ver el progreso de ustedes dos desde nuestra última pelea de practica" Decía Kakashi señalando a Sarada y a Sabaku.

"¿Qué? ¿Acaso ustedes entrenaron con el Sexto?" Boruto se giró a sus amigos pero ellos no le llegaron a responder como tal, no después de cómo terminó el entrenamiento.

"Yo no diría eso realmente, más bien nos terminó pateando el trasero." Dijo Sabaku con honestidad pero aun golpeado en su orgullo.

"Ni me lo recuerdes, aún tengo tierra en medio de mis sandalias" Decía Sarada limpiándose los lentes mientras Kakashi sólo sonreía debajo de su máscara.

"Entonces está hecho, los dejaré descansar y cuando se sientan listos, entrenaremos un poco ¿De acuerdo?"

"¿Y yo? ¿No me va a entrenar Kakashi-san?" La pequeña Himawari habló y se puso delante del albino con una actitud inquieta. Kakashi no supo que decir en el momento. "Quiero ayudar como Boruto para que mi papá pueda salvar a mamá."

"¡Hima espera!" Boruto tomó a su hermana del brazo "Esto no es un juego hermana, tú misma viste de lo que son capaces, esto es trabajo un ninja" Dijo el muchacho tratando de hacer entrar en razón a Himawari y los dos hermanos se miraron con una expresión de molestia, Sarada quería intervenir pero Sabaku le detuvo.

"Boruto, no digas esas palabras. Hima ¿Puedes venir por favor mi niña?" Dijo Hanabi llegando justo a tiempo para detener una pelea entre hermanos mientras la niña fue con su tía, las dos caminaron para alejarse de Boruto y los demás. "Sé quieres ayudar al Hokage pero ser ninja no es fácil, no es un proceso de un día."

"Pero tía, sé que puedo ayudar a papá pero Boruto cree que no soy capaz" Decía la niña ojiazul mirando de reojo como el equipo siete hablaba con Kakashi, Hanabi en ese entonces tuvo una idea.

"Te diré algo, si me ayudas con unas cosas, yo te puedo enseñar unas cosas. Después de todo yo fui una ninja antes ¿Te parece?" Hanabi le sonrió a su sobrina acariciando su cabeza.

"¡¿Enserio tía?! ¡¿Lo juras?!"

"Claro, ahora ven que hoy empezamos" Hanabi se llevó de la mano a Himawari para llevarla a donde estaba Moegi, Kakashi se sintió aliviado de que Hanabi le ayudará.

"Eres un grosero Boruto, no me sorprendería que Hima te llegue a superar en algún momento" Decía Sarada reclamándole al rubio.

"Pero es la verdad y además ella aun no va a la academia, siempre está cerca de mamá y en el Dojo Hyuga y ¿Superarme? ¡¿Cómo es eso?!" Boruto discutía con Sarada mientras Sabaku suspiraba poniendo su mano en su rostro mientras Kakashi estaba sacando su lectura mientras escuchaba la discusión.

"De tal palo tal astilla"

-Y mientras tanto-

Los médicos de la nube finalmente terminaron de cocerle la última herida a Sakura mientras la ojiverde hizo una mueca de disgusto mientras tenía unos vendaje en su brazo, pierna y en su frente, los médicos se retiraron dejando a la pelirosa para que descansara pero no podía dejar de pensar en la situación de Naruto, sabía que estaba del otro lado siendo atendido pero tenía miedo de que no pudiera despertar además de analizar su enfrentamiento contra el líder de los jinetes que casi le costó la vida.

"No puedo quedarme aquí" Dijo Sakura sentándose en la cama y poco a poco levantándose con algo de esfuerzo para entrar a la habitación donde tenían al Hokage conectado, la kunoichi se acercó lentamente y ver que sus signos vitales no habían cambiado.

"Naruto, al menos aquí estarás a salvo y haremos lo que podamos para hacerte despertar pero será más complicado al saber cómo fue que terminaste así" Sakura le tocó su frente y darle un beso tierno. "Si puedes oírme Naruto, sólo quiero que sepas que...vamos a mantener tu sueño intacto al igual que tu fe."

En ese momento la puerta se abrió y Sakura tuvo que alejarse un poco del rubio para evitar las sospechas a menos que fuera Hanabi pero en realidad había entrado otra persona.

"¿Sakura-san? ¿Cómo se encuentra?" Entró el rubio ojiverde al escuchar ruido en la enfermería después de haberse escapado de los raps y cuestionamientos de Killer Bee. "¿Y usted se encuentra bien?"

"Oh Shina, me asústate. Afortunadamente el Hokage está bien pero aun necesitó saber cómo hacer que su chakra vuelva y después de saber cómo fue que ese maldito miserable obtuvo el chakra del zorro" La ojiverde apretó el puño furiosa, un enemigo que a pesar de no ser un ninja, conocía muy bien los secretos del mundo shinobis y más la debilidad de Naruto.

"Entiendo ¿Y cree que haya forma de devolverle su chakra?" Shina se acercó al Hokage tratando de no revelar sus verdaderas intenciones con Naruto.

"No lo sé, es algo que debo comentarlo con Kakashi, aunque me digan que tengo que descansar, mi trabajo como kunoichi médico es ayudar a las personas" Sakura mira al Hokage sintiendo una punzada en su corazón.

"¿Necesita un poco de ayuda? Quizás yo podía auxiliarla mientras descansa, a juzgar por sus heridas necesita todo el descanso posible." Dijo Shina con un aura de tranquilidad que la pelirrosa sintió y soltó una risilla.

"Bueno, no me vendría mal un poco de ayuda, aunque estaría abusando de tú propuesta, después de todo tu eres el responsable de salvar nuestras vidas pero, podrías ayudarme a tomar una muestra de su sangre." Dijo Sakura levantándose un poco pero sintió como una de sus piernas le faltó fuerza y casi se cae pero Shina logró sujetarla con cuidado.

"Insisto Sakura-san, aún debe descasar" El joven rubio llevó a Sakura a su habitación con cuidado. "El Hokage estará en buenas manos, se lo prometo." El muchacho le sonrió cálidamente haciendo que Sakura se sintiera mejor y por alguna razón algo familiar. En tanto el ninja ojiverde fue a ver al Hokage dejando a la kunoichi descansar no sin antes ver al muchacho irse.

"Es un buen chico y muy atento. Fue una fortuna que nos haya encontrado y por alguna razón me resulta familiar, como sí...Oh Sakura sí que necesitas descansar, estas imaginando cosas.- Se acostó la pelirrosa mirando el techo y pensando en su batalla contra el líder de los jinetes mientras Shina estaba mirando a Naruto, su mirada mostraba seriedad mientras miraba por todos lados para no ser descubierto.

"Necesito hacerlo lo más rápido que puedo o sino mamá lo podría notar" Dijo el muchacho quitándose el guante y tentado de poner su mano en la frente de su padre. "Ojala funcione Kurama, puede ser lo único que tenemos"

"Concuerdo contigo muchacho, veamos si mi yo de este mundo sabe interpretar las señales"

"Adelante" El rubio puso su mano en la frente de Naruto y esperó el momento justo para que Kurama pudiera mandar la señal a través de la mente del Hokage. "¿Listo amigo?"

"Listo muchacho. Arte ninja: Vinculo astral." A través de Shina, Kurama lanzó una gran carga de su chakra hacía Naruto, pasando por todo el cuerpo del Hokage pero en ese momento algo había salido mal cuando el chakra de Kurama se desvió un poco e hizo que se liberará una pequeña onda de chakra que hizo que los aparatos empezaran a descomponerse y mando a Shina contra uno de los estantes y a fundir varios focos del lugar, llegando la pequeña onda de chakra a la pelirrosa.

"¡Imposible! ¡Este chakra es del zorro! ¡Naruto!" Sakura se pasó nuevamente y sin importar su estado físico corrió a donde estaba Naruto y vio la escena, Shina tenía una expresión de espanto al notar que había hecho algo que no debía en el momento.

"¿¡Hokage?! ¿Puede oírme? ¡¿Shina que pasó?!" La ojiverde trataba de recalibrar los aparatos médicos mientras el ojiverde miraba incrédulo.

"¿Qué paso? ¿Kurama que pasó?"

"El chakra no siguió su curso natural y se desvió de alguna manera pero espero que haya funcionado"

-En la mente de Naruto-

"¿Qué es esto?" Naruto sintió como algo de chakra llegaba a su cuerpo, sintiendo como ardía pero se sentía bien, el Hokage movió sus manos y pies para dejar circular el chakra. "¿Pero cómo es posible? "Kurama ¿Fuiste tú?" Pregunto Naruto mientras el gran zorro de nueve colas estaba de brazos cruzados mirando a la nada.

"Vaya...Digamos Naruto que sí, solo digamos que sí"

Continuara...