Jaemin sintió su cuerpo temblar cuando los obscuros ojos de Jeno le miraron de pies a cabeza y luego se enfocaron en su rostro, tal vez Yangyang tenía razón y este le odiaba ahora solo por hablarle, el solo quería llevarse bien con el, sabia lo feo que era no tener amigos y estar solo, mas cuando eres "el nuevo".

—Ujum...— Escucho en un tono de afirmación por parte de este pudo respirar nuevamente, solo sonrió y tomó asiento junto a este.

El silencio era incómodo, al menos para él ya que Jeno iba callado en su mundo revisando su Instagram. Jaemin jugaba con sus dedos sin saber si hablarle o no.

—¿Q-que te pareció el barrio? —Dijo para después toser un poco preparando su garganta.

—No es la gran cosa.— Apretó los labios ante la respuesta del chico, por lo que se veía el señor Jung era bastante adinerado y se veía un hombre importante, tal vez antes vivía en una mansión y era difícil de impresionar.

—Bueno, tienes razón, pero bienvenido, espero poder llevarnos bien. —Estiró su mano temblorosa a este incómodamente por la posición en la que se encontraban.

El mayor alzó una ceja para llevar su mirada a la mano de este y luego a su rostro, sonrió leve y le dio la mano.

—Supongo que gracias. —Soltó su mano.

Fue las únicas palabras que compartieron hasta que llegaron a casa, caminaron juntos u algo así, Jaemin iba un poco atrás de Jeno y este se había puesto sus audífonos.

Jeno abrió la puerta de su casa y suspiró viendo a su padre algo enojado.

—¿Porque no fuiste por mi? Odie viajar en esa cosa, papá.— Dijo a este quien estaba preparando la comida.

—Yo también tengo cosas que hacer Jen, soy un ceo y tengo cosas importantes que hacer, es solo un bus y tienes que acostumbrarte a eso. —Terminó de picar los vegetales para el ramen.

—Eres millonario, contrata un chofer o algo. —Encogió sus hombros aún algo exaltado.

—Creo que aún no te convences que las cosas serán distintas, no más vida de cosas que no son una necesidad.— Le miró de reojo continuando en lo suyo, amaba cocinar realmente, desde que se había casado no había cocinado por si mismo ya que a su ex no le gustaba que lo hiciera.

—Entonces cómprame un auto y ahorrémonos ambos esto, yo viajar en bus y tu mis reclamos. —En su mente sonaba demasiado bien, tenía sentido.

—No te compraré un auto Jeno. —Mencionó quitándose el delantal. —O mas bien no así tan sencillo.

Vio a su hijo alzar una ceja mientras se acercaba.

—¿A qué te refieres?

—Gánatelo, no te van a caer las cosas del cielo. —Se encogió de hombros mientras llevaba lo necesario a la mesa.

—¿A qué te refieres con "ganármelo"?— Se recargó en la barra de la cocina.

—Ten buenas calificaciones, te recuerdo que en tu otra universidad ibas demasiado mal, también mejora tu conducta conmigo. —No era nada imposible de hacer realmente, y menos si quería uñun auto, y no le costaba nada comprárselo, pero estaba cansado de criar a un niño consentido que no aprecia lo que tiene porque todo se lo daban en bandeja de plata.

—¡No puedes hacer que dependa de eso! —Estaba comenzando a enojarse. ¿Porque su padre hacía eso?

—Por supuesto que puedo, soy tu padre y quiero lo mejor para ti, ahora ven a comer. —Dijo haciendo una seña con su mano, las cosas iban a ser difíciles, pero debía entender a este, era una vida completamente distinta a la que tenía.

—Hola cariño, lávate las manos y siéntate a comer. —Mencionó Taeyong con una sonrisa en el rostro a Jaemin.

—Papá, ¿cómo me acerco a alguien que es nuevo? No me gusta verlo solo. —Se quitó los zapatos y dejó su mochila en su lugar acercándose a su padre para ayudarle a lo que este estaba haciendo.

—Pues solo háblale, incluso dile eso "Te he visto solo, y me acerqué a hablarte" no es tan difícil, cariño. —Apagó la estufa mirando a su hijo.

—Es que... me da vergüenza, además los chicos dicen que se ve que es muy creído u algo así.— Tomó los platos para ponerlos en la mesa.

Taeyong frunció el ceño negando con la cabeza.

—Están todos haciendo mal ahí, ellos por juzgar por cómo él se ve y tú por hacerles caso, no conoces a alguien hasta que no le hablas, acércate quién sabe y se hagan amigos. —Guiño un ojo a su hijo y se sentó para comenzar a comer. —Ahora come y no te preocupes tanto por eso.

Comieron tranquilamente mientras hablaban de cómo habían pasado su día, Jaemin amaba escuchar a su padre hablar de su día en la cafetería. Después de eso era su turno de lavar los trastes así que lo hizo tranquilamente mientras tarareaba alguna canción, ese día había quedado con Felix, irían al centro comercial a comprar unos álbumes ya que Felix quería comprar de Twice.

Al terminar subió las escaleras para buscar que ponerse, se colocó un pantalón beige, junto a una camisa la cual acompañó con un chaleco blanco con líneas de algunos colores, unos calcetines blancos y unas vans del mismo color, se vio al espejo y sonrió, estaba listo.

—Oye papá, iré con los chicos, Felix quiere comprar algún album y quedamos en acompañarlo, tal vez entremos al cine u algo. —Observo a su padre quien estaba sentado en la sala. —¿No volverás a la cafetería?

—No cariño, quedé con el señor Jung de mostrarle a fondo el lugar, necesita saber dónde hay una tienda y donde puede comprar las cosas para su casa, así que hoy decidí no ir. —Respondió con una sonrisa en su rostro. —Mucha suerte cariño, me llamas si sucede algo y no llegues tan tarde.

Tomó sus llaves y salió de la casa, se iba a colocar sus audífonos cuando al voltear hacia la casa de sus vecinos vio a Jeno sentado en el pasto, ¿sería muy confianzudo de su parte acercarse?, igual no perdía nada si lo hacía, así que despacio se acercó a este quién inmediatamente volteó a verle.

—Si no fueras mi vecino pensaría que me estás siguiendo. —Mencionó en un tono serio pero con leve burla en su tono.

—¡No te estoy siguiendo! —Dijo completamente avergonzado. —Solo, eres mi nuevo vecino, no estaría mal conocernos, vamos en la misma escuela.

—¿Tú crees que sería buena idea? —Jaemin no comprendía, ni terminaba de entender su personalidad, su manera de decirle las cosas le parecía sarcástica o como si se estuviese riendo de él.

—S-Si, digo, así tienes con quien ir y con quien regresar. —Se acercó un poco más.

—¿Cómo se supone que se si confiar en ti? —Llevo su vista al chico mirándole desde sus pies hasta su cabeza.

—De eso se trata el conocer a alguien, Jeno.— Una leve risa salió de los labios del pelinegro.

—Está bien, vecino, no es mala idea. —Dio un encogimiento de hombros.

—Me llamó Jaemin, dime Jaemin, vecino no suena bien. —Frunció levemente el ceño haciendo que hiciera una mueca algo adorable para los ojos del otro.

—Okay Jaem-

—¡Mierda, Felix!

Exclamó interrumpiendo a este.

—Lo siento Jeno, pero me tengo que ir, nos vemos. —Se despidió con su mano para correr a la parada de autobús.

[*]

—Llegas tarde, Nana. —Este se llevó la mano al pecho tratando de calmar su respiración ya que había llegado corriendo.

—Lo siento chicos, estaba con Jeno. —Se sintió asustado al tener la mirada de todos los chicos sobre el. —¿Qué? —Preguntó en un leve murmullo.

—¿Jeno? ¿El nuevo?

—Pues si, ¿cuál más? Es mi vecino, hablamos un poco.

Encogió sus hombros.

—Pero no es el tema, venimos a algo, vamos. —Quiso terminar rápidamente el tema, no quería entrar a lo mismo de la mañana, apenas llevaba poco ahí y sus amigos lo tenían en una idea, que tal vez sea verdad pero también puede ser mentira, ninguno lo conocía para asumir su personalidad.

*resurge de entre las cenizas*

no me maten por favooor

hola, aplique la reputation, lo siento mucho jaja, pero les dejo una actualización, los quiero mucho.💗