[ 08 ] beach with new friends.
— ¿A dónde vas tan estilo playa?— Pregunta Allison desde el sofá mirándome con atención a cada movimiento que hacía.
—Voy a ir a la playa con Chase y Alexis, y creo que una chica más que no sé quién es. — Contesté guardando comida en mi bolso, más bien robándome a mí misma.
—Así que si te olvidaste. — Murmuró por lo bajo la rubia y fruncí el ceño alertando todos mis sentidos, me giré para poder verla con claridad.
— ¿Qué es lo que me olvidé?
—Hoy iríamos a ver una película con Emma, las tres juntas, iba a ser nuestra primera salida desde que empezaste las grabaciones de esa película tuya, pero supongo que te has olvidado, ¿No lo crees?
Desde el inicio de la película no he tenido tiempo de estar con mi hermana y mi mejor amiga, literalmente mi tiempo es tan limitado que las veces que tengo días libres duermo todo el día, sin excepción. Porque no sólo está las grabaciones, sino también entrevistas, sesiones de fotos, entrevistas con Chase para promocionar nuestra relación falsa a todo el mundo, así que si, apenas tenía tiempo de respirar.
— ¡Oh por dios! Lo siento mucho, lo había olvidado por completo. — Comencé a lamentarme y caminé en su dirección para sentarme a su lado. — Si quieres cancelo para ir con ustedes, no tengo problema.
—No, no voy a dejar que hagas eso, además estas descubriendo un nuevo mundo todavía y entiendo que te guste pasar tiempo con ellos, ve a la playa. — Mi hermana no me miraba, pero aun así ella intentaba dar su mejor sonrisa a la situación.
— ¿Estás segura? No te veo demasiado segura.
Justo en ese momento la bocina afuera de la casa resuena por toda la casa. Allison suspira y asiente con la cabeza.
—Ya están aquí, no los hagas esperar más.
Me acerqué a darle un beso en la mejilla con rapidez para luego escuchar sus gritos de quejas porque le dejé mis gérmenes en su rostro y se limpiaba de una manera exagerada. Le grité un "eres la mejor" mientras salía por la puerta principal y salté en el asiento trasero del convertible de Alexis, mientras que ella y Chase iban al frente con unos lentes de sol que los hacía ver más divos de lo normal.
Lo menos que esperaba de una actriz como ella. Además íbamos a la playa, el estilo perfecto.
En el camino a las playas de Malibú, nos la pasamos cantando las canciones de la radio como si nadie nos estuviera mirando, cosa que si era así porque a la velocidad que conducía Alexis era imposible que alguien nos viera. En definitiva nunca tuve tanto miedo de alguien que condujera como ella, la próxima iba a ser mi turno.
Cuando llegamos, no pude evitar sonreír al mirar aquel lugar con admiración, puede que viviera en Hollywood pero nunca antes había pisado las arenas de esta playa, para ser sincera ni siquiera soy de venir a las playas. Prefiero el aire fresco de la montaña.
Los tres nos bajamos del auto y tomamos nuestras cosas para ir directo a la arena, a lo lejos pude notar a una chica castaña que nos saludaba con mucha alegría, ya tenía preparada una manta allí junto con una sombrilla para el sol.
No tenía idea de quien era pero supongo que la estaba por conocer.
— ¡Chicos! Qué bueno que llegaron, ya me estaba aburriendo. — Dice al mismo tiempo que se levanta y saluda a sus dos conocidos, se me queda viendo con una sonrisa. — Y tú debes ser Megan, ¿Verdad? He oído mucho sobre ti, como literalmente, estás en las revistas y noticias todo el tiempo.
—Sí, esa soy yo. — Le extendí mi mano en forma de saludo y ella la toma con una sonrisa.
—Yo soy Bella, la mejor amiga de estos dos. Es un placer conocerte.
—Lo mismo digo, siempre es bueno conocer más gente.
Me quedé mirando unos segundos más a Bella, sentía que la conocía de algún lugar pero no me quedaba claro de dónde. Tal vez la vi en la fiesta de cumpleaños de Alexis, aun así para ser sincera creo que la recordaría haberla visto allí, tengo una muy buena memoria para las caras.
Tomé asiento en el suelo al lado de Chase y me coloqué mis lentes de sol mirando al mar con cierto miedo, no pensaba meterme ni en un millón de años, no sabía nadar y además no me gustaba. No tenía de donde saqué este pánico pero de tan sólo pensarlo me causaba unos escalofríos por todo mi cuerpo.
—Es una pena que no estén los paparazzis. — La rubia hace un pequeño puchero colocándose un sombrero de playa de color amarillo.
—Eres una adicta a los paparazzis, me pregunto si eso le pasará a otra persona. — Le responde Chase con una pequeña sonrisa sin quitar sus ojos de Alexis.
—Creo que es la única con esa adicción, yo recién empiezo y no los soporto. — Dije entre risas.
—Tú opinión mucho no cuenta, como dijiste, recién empiezas. — La voz de Alexis salieron en un tono amable, pero lo que dijo no lo recibí de la misma manera, era como si esa amabilidad conmigo fuera falsa. No pude evitar elevar una de mis cejas con la mandíbula tensa por su hostilidad, aun así me mantuve callada. — Ahora podremos hablar de lo que sea, sin ellos presentes, somos libres de hablar más de quienes queramos.
—Pero primero, ¿Por qué ustedes no van por unos helados para todos?— Sugiere Bella, Alexis y Chase se levantan del suelo y están de acuerdo con la idea, los dos se van caminando a uno de los carritos que se encontraban a lo lejos.
Le dediqué una sonrisa a Bella y tomé mi celular de mi bolsillo porque no sabía que decir, además no es como que tuviera la confianza para decir de todo en frente de ella.
—No dejes que las palabras de Alexis te afecten, sólo está celosa. — Sentí a Bella acercarse más a mí y guardé mi celular con rapidez. Fruncí el ceño por sus palabras.
— ¿Celosa? ¿De mí? Yo no soy nadie a comparación de ella. — Me justifiqué.
—Aunque no lo creas la estás superando estos días en todos lados, además por ti Chase y ella no pueden estar juntos como desean y se les hace difícil ser amigos.
—Ya me parecía que la tensión entre ellos no sólo era mi imaginación. — Murmuré para mí misma por lo bajo y Bella asiente con la cabeza. — Aun así ni siquiera es mi culpa, fueron los medios y los productores de la películas que quisieron esto, creo que es una exagerada cuando sabe exactamente las razones.
— ¿Eso crees?
—Por supuesto que lo creo, tampoco le da el derecho de rebajarme sólo porque ella es famosa desde mucho antes que yo.— De acuerdo, al parecer el enojo está comenzando a salir a relucir.— Ni siquiera me gusta Chase, tengo otro chico en mi cabeza y no puedo creer que dijera eso en voz alta.
— ¡Oh por dios! ¡Ya hablaste! ¿Quién es?— La voz de Bella se agudizó de una manera increíble por la emoción, reí por lo bajo y negué con la cabeza.
—No sé si deba...
— ¡Oh por favor! No diré nada, soy una tumba.
—El que me gusta es...— Justo en ese momento aparecen los dos chicos con los helados en las manos, me callé enseguida apretando mis labios, Alexis extiende mi helado y lo tomé al mismo tiempo que me levanto del suelo. — Creo que iré a dar una vuelta, mis piernas se están durmiendo. No me esperen.
—Maldita, aun así espero que termines esa oración. — Bella me señala con una de sus cejas levantadas. Me encogí de hombros.
—No lo sé, creo que ya perdiste esa oportunidad.
No me detuve a esperar una respuesta, me alejé caminando por la arena pero no sin antes tomar mi bolso y mis cosas porque para ser sincera, no pensaba volver con ellos. Por alguna razón al verlos a los tres juntos me daba cuenta que no encajaba en su mundo, su amistad ni en su círculo. Tal vez esto ser más difícil de lo que pensaba.
Debí quedarme con mi mejor amiga y mi hermana en Hollywood para ver películas juntas, seré idiota.
Mientras caminaba, no pude evitar detenerme unos segundos al ver a una persona sentada en una de las sillas de maderas que estaban allí, me resultaba conocido y no pude evitar sonreír mientras me dirigía en su dirección para sentarme en el asiento al lado de él.
—Si creíste que nadie te iba a reconocer, déjame decirte que te acabo de decepcionar. — Dije mirándolo, él se mantenía serio e intentaba ocultar su rostro de mí, pero no duró más de unos segundos porque se giró a sonreírme.
—Hasta ahora fuiste la única, al parecer me conoces más que todas estas personas. — Dice Christopher y asentí con la cabeza con orgullo. — ¿Qué haces aquí por cierto? No te veía chica de playa lo que es raro.
—No soy una chica de playa, pero vine aquí con Chase y Alexis, y otra chica llamada Bella, ¿Tú la conoces? Siento que la vi en algún lugar.
— ¿Bella? Si, ella es una actriz en una serie de vampiros pero no es muy conocida.
— ¡Sabía que la conocía de algún lado!— Grité de golpe llamando la atención de unas personas que pasaban allí, ambos ocultamos nuestras caras enseguida. — Lo siento. De todas formas no quiero estar más con ellos, son muy...
— ¿Diferentes? ¿Egocéntricos? ¿Creen que el mundo gira al rededor suyo todo el tiempo y no pueden controlar su mal comportamiento? Si, sé a lo que te refieres, yo formé parte de ese grupo. — Reí por lo bajo porque Christopher los describió tal y como yo lo pensaba sólo que no quería sonar mala. No pude evitar quedar mirándolo por varios segundos a sus profundos ojos azules que podrían hipnotizar a cualquiera, carraspeé para volver al mundo real al igual que él. — ¿Quieres que hagamos algo?
— ¿Algo cómo qué?— Elevé una de mis cejas.
—No lo sé, a pasear por la ciudad, tengo mi auto justo allí estacionado esperando para que tengamos una gran aventura.
—No lo sé, ¿Tu novia no se molestará por eso?— Pregunté en un tono burlón.
Christopher se levanta de su asiento y me extiende una de sus manos con una sonrisa.
—No realmente, ¿Aceptas o te dejo aquí con ellos?
—No juegues con mi mente, rubio. — Sonreí tomando su mano y me levanté del asiento.
Christopher y yo fuimos corriendo hasta su auto estacionado tapando lo más posible nuestros rostros de las personas que iban y veían todo el tiempo por la playa. Nota mental: nunca volver.
Nos acercamos a un auto de color azul muy brillante, parecía ser del estilo que conducía mi abuelo en su época, pero era aún clásico lindo. Abrimos la puerta con rapidez y entramos antes de que alguien nos viera, giré mi cabeza para atrás y unas dos camionetas negras aparecen y comencé a maldecir.
—Tenemos problemas. — Señalé en la dirección trasera y el rubio maldice por lo bajo.
—No te preocupes, sé que hacer.
Antes de que pudiera decir algo, Christopher retrocede de una manera muy rápido casi chocando con una de las camionetas de los paparazzis. Hace una maniobra en el volante y nos saca de allí como si ni siquiera hubiésemos estado allí, solté una carcajada por aquello sumando la adrenalina de casi ser atrapados.
— ¿Estás lista para la aventura?
—Mientras no nos perdamos, estoy lista para todo.
¡Aquí un nuevo capítulo después de un tiempo! Espero que les guste. <3
RECUERDEN:
—VOTAR porque su apoyo significa mucho para mi.
—COMENTAR porque me encanta leer sus comentarios y opiniones de la historia.
—SEGUIRME para no perderse ninguna actualización, dato o información de la historia. (devuelvo follow <3 )
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro