Su amor brillaba para siempre y perdurará para siempre...y claro,también robaba toda la atención. Era como el fuego y la inundación y Kitty podía sentirlo a él en su sangre, todo estaba estaba bien cuando su mano descansaba junto a su patita.

La Muerte por el otro lado se había sumergido en la afinidad de la futura llegada de pequeños gatitos que de su misma oscuridad brotan, cada vez en su hogar ese cuarto estaba lleno de ternura,suavidad y colores cálidos. Desde el ratoncito de peluche hasta la cuna que él mismo construyó.

Kitty se encontraba en una situación muy especial, porque a pesar de que aún no daba a luz a sus gatitos,su vientre crecía con la promesa de nuevas vidas, su pancita era más grande de lo normal. Cómo Perrito le decía: era una “pancita de jamón" y las noches eran más alborotadas ahora que ella era constantemente despertada por patadas en su interior.

Ese dia, despues de 5 semanas de constante sobreprotección y paranoia por parte de su esposo, Kitty salió a explorar en lo más profundo del bosque, saltando por los troncos caídos,  cuidando sus patitas del agua de arroyos y jugando con las oruguitas que subían por las verdes hojas. No había realmente tenido la oportunidad de investigar su nuevo ambiente hasta ahora, se sentía tal cual un cuento de hadas.

—para ser un bosque oscuro y silencioso, tiene su encanto.-admitio Kitty con una suave sonrisa, acariciando el amarillo con la punta de sus dedos.-es perfecto para ellos…

—Entonces ¿he elegido un lugar seguro para nuestros cachorros, mi amor?.

Él era esa sombra sobre su espalda cuando ella permanecía sentada entre los botones de oro. La gata bicolor no volteo para encontrarse con el carmesí de sus ojos, solo sonrió con afinidad y  flor en palma.

—¿sabes lobito? Me he puesto a pensar en lo irónica que es tu faena aquí con los mortales…-ella agregó.

—¿por qué?.-se asomo el lobo a la gata, prestando también su atención hacia esa flor.

—te has encargado de robarle la vida a los demás…Pero ahora me prometes que estas tres vidas las vas a cuidar.-El dedo de Kitty jugueteaba inocentemente con los pétalos de ese botón de oro.-y no solamente es con mis bebés. Esa noche en Santa Coloma cuando quise dormir para siempre, en vez de llevarme contigo, moviste las montañas y las estrellas con tal de que yo siguiera aquí y decidiste quedarte conmigo.-la gata embarazada dejó esa flor entre su oreja.-¿acaso solo finges ser la Muerte sin máscara y en realidad eres un lobo sensible y gentil?

La Muerte suspiro, años desde tenia usando ese anillo y aun seguía enamorado de ella.

—Algunas vidas son malagradecidas y desagradables y no merecen seguir en pie…pero algunas, verdaderamente bellas e inocentes como para arrebatarlas…es esperanzador ver como aquí todavía hay quienes acaban siendo bellas hasta su último respiro.

—¿crees que así serán las de tu familia?...

—lo seran…

(...)

Bajo aquel viejo cedro, la gata de ojos zafiro recostaba su espalda contra la madera. Sus manos descansando sobre su pancita hinchada. En su rostro se transmite melancolía y nostalgia.

—¿crees que me veo muy gorda? .-le preguntó Kitty suavemente a su amado lobo.-creo que ya no soy tan bonita como antes.

Ante esta pregunta, La Muerte dejó su enorme mano sobre el vientre de su mujer,cubriéndolo por completo y analizó la situación.

—pues si, tienes a tres gatos gestando entre tus entrañas y te la pasas comiendo casi todo el día, es obvio que ibas a engordar.-respondió él sin cuidado.

Kitty reaccionó abrumada y su seño se frunció con ofensa y enojo.

—¿cómo puedes decirme algo tan grosero?.-recrimino la gata con cierto enojo e histeria.

—¿que? .-respondió la Muerte, completamente indignado.-¿Acaso tengo que simular  que no tienes un vientre prominente? ¿Qué clase de marido sería yo si te miento? Y yo te creía más inteligente-

—¡SI PERO NO SEAS TAN DIRECTO, MALDITO CRETINO!

—a ver, tú fuiste quien me preguntó en primer lugar si…

De pronto…una pequeña fuerza golpeó la palma gris de la Muerte. Sus ojos se abrieron en total asombro  mientras que de su pecho brotó un pequeño susto que le hizo dar un salto hacia atrás, suspiro agitado y miró su mano con intriga para luego regresar a su amada ¿que había sido eso?.

—ay, ustedes no piensan dejar a su mami descansar tranquila ¿verdad? .-Kitty pasó sus patitas sobre su panza,dándole suaves caricias. Al darse vuelta quedó confundida por la reacción de su esposo.

Claramente no era algo suyo…había provenido de esa pancita blanca la cual estaba tocando. El lobo se acercó cauteloso y uno de sus dedos se posó nuevamente sobre el vientre de Kitty y en cuestión de segundo volvió a pasar, recibió un pequeño golpe. Cosa que otra vez lo volvió a reprender

—¿qué te ocurre? .-Kitty soltó una pequeña risa.

—...¿qué diablos fue eso? .-cuestionó la Muerte, arisco con este movimiento misterioso que para él era una amenaza.

—¿que cosa?

—lo que se está moviendo entre tus entrañas.-acusó él sus ojos permanecen bruscos sobre su panza.

La gata bicolor permanece estática , pero cuando entendió a que se refiere, no pudo evitar negar con su cabeza, soltando entretenidas risitas.

—Lobito, son mis gatitos.

Los párpados de la Muerte batieron en barahúnda, el carmesí en sus ojos bajó hacia su pancita hinchada otra vez y entonces se arrodilló frente a ella.

—¿como asi? ¿se mueven por sí solos?.-preguntó el lobo encapuchado.

—claro que si ¿recuerdas que te había dicho que me estaban despertando mucho últimamente? Es por eso, aunque si llegan a ponerse muy agresivos esos pequeños diablitos.-dijo Kitty,acariciando su vientre.

Ella no dejo de pensar y ver el estado de su esposo, quien ahora permanencia sentado sobre sus rodillas, creativo y curioso pero también huraño con su vientre crecido, lo examinaba con su vista y olía con su fuerte olfato canino…se espantó al no oler muerte, algo que su piel de lobo tenía la habilidad de hacer…pero su piel de shinigami en su lugar lo hizo olfatear vida dentro de la pancita de su amada.

¿era verdad entonces? ¿La Muerte sin máscara había concebido vida?

Miro su enorme mano y la trato de acercar a ese pequeño bulto, pero cada que se asomaba, se acobardaba. Parecía un cachorro asustado conociendo el mundo y eso le generaba tanta ternura a Kitty.

—¿quieres sentirlos?.-preguntó ella entonces.

—¿No explota si la toco?.-pregunto él.

—no,no va a explotar.-negó Kitty entre risas.-no pasara nada…

La Muerte trago.

—s-solo un poco…

Y así fue, una vez su mano hizo contacto con la pancita de Kitty, sus orejas cayeron al igual que las conmovidas lágrimas en sus ojos carmesí al sentir pequeños empujones contra su palma, podía sentir las siluetas de esas huellas de gatito. Una y otra vez, a donde él movía su mano, ahí regresó a sentir el tacto de sus gatitos…de las vidas que él mismo:La Muerte. Procreó junto a la gata que más amaban…tenían su sangre, tienen su huella y su oscuridad…eran sus pequeños bebés, los que pronto iba a conocer, la razón por la que pronto iba a ser papá.

Kitty empezó a ronronear, disfrutando de las caricias sobre su vientre,que mientras que el shinigami ahora en su regazo le daba mientras su cola se sacudía por la incontable felicidad.

Perdónenme por tardar en actualizar gente linda ♡
Es que estos dos capítulos que se vienen serán los más largos de la historia y quiero hacerlos con amor y dedicación 🥲💗

Pronto se vienen nuevos capítulos y con ello en fin de la historia.