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Capítulo 10: El secuestrado




El hombre abrió los ojos cuando los insistentes rayos del sol traspasaban sus parados impidiéndole continuar dormido. Se estiro lentamente hasta que sintió una punzada de dolor en la cadera y se quedó quieto. Suspiro frustrado y maldijo mentalmente, maldito Erik y su libido, maldito Erik y su estamina, al parecer los años, no habían disminuido en nada su ímpetu sexual y ahora él estaba bien molido, más a juzgar que el acto no había sido consensual. 

Lo odiaba podía sentirlo en cada fibra de su ser, así como antes lo había amado, ahora solo sentía desprecio por él, al principio había sido resentimiento, dolor, decepción, pero poco a poco se había ido convirtiendo en odio. Se dio cuenta que incluso alguien tan centrado como él y que tenía un dominio muy bueno sobre la mente y los pensamientos, alguien que solía ser noble y amable, podía llegar a sentir un odio intenso, hacia una persona.

Se movió un poco sintiendo cada musculo adolorido, no entendía como Erik, podía desearlo aún, él no se consideraba ya atractivo, a él la edad si le había pasado factura, quizá más que nada debido a su invalidez, misma que le impedía arrastrarse hasta el baño para limpiarse y quitar de su cuerpo los rastros de aquel abuso, del que fue objeto a noche pasada, esa y todas las anteriores desde que había llegado allí.

Cuando lo poseía, Erik le decía que lo amaba, que nunca dejo de hacerlo, le pedía perdón una y mil veces, tanto por su engaño y traición en el pasado, como por las violaciones que le daba, pero él solo podía odiarlo y sentir que todo eso era falso, allí no había amor, ni siquiera cariño, sólo obsesión.

Escucho el chirrido de la puerta anunciando que ya no estaba solo.

─Buenos días profesor charles Xavier, oh, oh, por lo visto el capo Lesher, es un salvaje, ¿se encuentra usted bien?

Pregunto el recién llegado mirándolo con atención. Charles, avergonzado se cubrió con la sabana intentando que no le viese, pues sentía vergüenza de su desnudes y las marcas en su cuerpo.

─ ¿Quién eres?

─Me llaman el mago, sólo le diré que mantenga la calma, pronto será rescatado. Mi contacto debe llegar pronto y entonces procederemos a su evacuación.

─ ¿Por qué me ayudarías?

─Me pagan para eso, su hijo quiere recuperarlo y él tiene contactos.

Charles asintió, estaba enterado del pasado de Logan, con la mafia.

─Me retiro, tenga esperanza, saldrá muy pronto de aquí, ahora me voy antes que me descubran, su asistente debe estar por entrar.

Charles asintió, la asistente que el ojiverde menciono, era una sirvienta que se encargaba de llevarle la comida y de ayudarlo a asearse, y él odiaba verla, la mujer era fría y pragmática, no le dirigía la palabra en lo absoluto, pero él se sentía avergonzado de que elle le viese en las condiciones que estaba, porque era evidente que sabía lo que le hacían más a juzgar por las marcas y los residuos en su cuerpo.

Sin embargo, no fue la sirvienta la que entro a la habitación en ese momento, si no Erik, su torturador. Al verlo frunció el ceño y le dio la espalda.

─Amor, sigues enfadado, ya deberías acostumbrarte a esto Xavier.

Se acercó más y se sentó a su lado acariciando su piel, el profesor se apartó dando un respingo.

─Te he hecho mía cada noche y aun rehúyes mi tacto.

El silencio era la única respuesta.

─Insistes en castigarme así, pero tarde o temprano hablaras, por lo menos tus gemidos, no puedes acallarlos.

Acaricio con suavidad las marcas en sus brazos, dónde podían verse las huellas de sus dedos debido a un fuerte agarre, las delineo con cuidado y después acaricio las cicatrices que había dejado en su cuello y hombros. Sus marcas de posesión. sus mordidas.

─Si tan solo fueras más receptivo, si aceptaras tus sentimientos y te dejases, no tendría que ser tan rudo contigo, amor, ¿cuánto más vas a seguir así? De verdad lamento hacerte daño.

Maldito abusador, como odiaba a los de su tipo, pero él no era ninguna sumisa, no señor, tampoco era la clase que permitía que le tratasen como tapete y que se le echase la culpa por los castigos, tuvo muchas mujeres y homosexuales pasivos así, en su consulta y les enseño a todos a sacar su fuerza y su lado rebelde, y ahora él caía víctima de secuestro, miserable mafioso violador, lo odiaba, en un acto de rebeldía, le enseño el dedo corazón y le miro sin disimular su odio hacia él.

Erik sonrió ante el gesto, atrapo su mano en la suya y se acercó a besarle en los labios, un beso suave y tierno nada comparado a los mordiscos que solía darle cuando lo poseía.

─ ¿Quieres que te ayude a asearte?

Un almohadazo fue la respuesta.


Natasha y Clint se miraron el uno al otro y seguidamente a Steve, se mantenían en silencio esperando por la información que el científico les daría.

─Habla, ¿de qué se trata el asunto?

Pregunto la pelirroja, mirándolo fijo, cosa que hizo sonreír a Banner, la chica era valiente sin duda.

─Necesito de sus habilidades como agentes de Shields, he hecho la tarea y he investigado un poco sobre ambos, sé que los dos son buenos infiltrándose y también que tú eres muy buena hackeando y dirigiendo operaciones y eso harán, desde aquí darás indicaciones y serás el apoyo de tu compañero, quien será el encargado de la parte física de la misión. Tendrás el equipo necesario para la tarea, pero estarás obviamente bajo vigilancia, no puedo dejar que te metas a Shields o a nuestros archivos internos. Verán la misión es esta...

Y Bruce se la paso la siguiente hora hablándoles de los por mayores del servicio que necesitaba, les conto sobre el profesor Charles y su secuestro por la Bratva rusa, así como también la petición de ayuda por parte de su hijo adoptivo, el cual había sido uno de los sicarios de Tony en el pasado, razón por la cual le pidió ayuda. Ante este punto Clint, interrumpió y pregunto.

─Creía que no se podía salir de una mafia una vez que se entraba a ella.

─Eso depende del jefe, pero veras que Tony, no es para nada como otros capos.

Eso ya lo está notando Steve, el cual se sonrojo al pensar en Stark y la forma en que lo trataba.

─Bien, Tony está de acuerdo con el plan de Logan y ya hemos contactado a un infiltrado que nos ayudara para esto, el mago, pero el problema es que, a Tony, nunca le ha gustado que paguen los inocentes, y considera al joven Maximof, de esa categoría, conoce lo impulsivo que es Logan y teme que él se desquite con el chico al estilo de Talión. Es casi un hecho que el profesor ha sido violado, Tony, cree que Logan, podría hacer lo mismo con el joven y para eso estarás allí tú, Clint, para vigilar que se haga el secuestro y posterior intercambio, sin que el chico sea mancillado. Serás su guardaespaldas, y ayudaras a su extracción, junto con el mago, el mago y tú, verán por ese joven si todo sale bien y recuperamos al profesor, devolveremos al chico con su padre, y entonces uno de ustedes obtendrá su libertad, cual se queda conmigo y cual se va, ustedes lo eligen, no puedo soltar a los dos, a Tony no le gustaría y a mi menos.

Sonrió con coquetería.

─No parece muy justo, ambos laboraremos y sólo uno se va a casa, no lo creo amigo, además según entiendo, ese Logan es de temerse, como sé que no terminare severamente herido o peor por enfrentarme a él.

─Vaya, no creía que un agente de Shields, fuera cobarde. Además, no he dicho que Logan vaya a atacarte, si lo hiciera no quedaría mucho de ti, más bien estarás para recordarle que Tony no desea que lo haga y que su padre, tampoco lo quería así y para ayudar a escapar al joven, en caso que él se ponga pesado y huir de él también, te repito, Logan, fue un sicario, él es muy peligroso, pero también es hijo de Charles y hasta cierto punto, es un buen hombre, es un ser muy complejo.

─Huy Clint, no sé si sea buena idea, capaz que es tipo termine violando a ambos.

Se burló Natasha.

─y Que tal si eres tú la que va a la misión Nath, según sé te gustan los hombres peligrosos.

─Naa, mejor me quedo con el sexy doc, es más, si tu logras la misión, serás quien recupere la libertad. Vale.

Dijo la chica sonriente. Ciertamente se sentía atraída por su captor, había algo en el hombre que le intrigaba y quería descubrir bien el que, podía percibir a una bestia dentro del controlado científico.

Al oírla Banner, se sonrojo y entrego la carpeta con los archivos de la misión a ambos despidiéndose al acto.

─Ahora luce tímido, no como el pervertido que nos hizo creer que era.

─Ha de tener doble personalidad.

─Bueno chicos, también me retiro, realmente espero que todo salga bien y seas libre Clint, Nath, sé que también te dejaran ir, Banner es bueno.

─ ¿Qué hay de ti Steve?

─Yo...

─Pinche Steve, pudiste decirnos que te gustaba él, así no arriesgábamos el culo para venir por ti.

Se quejó Clint y el rubio se sonrojo.

─Es que yo... No es como si pudiera comunicarme con ustedes, además si pensaba huir y lo saben, pero no podía poner al pequeñito en peligro, lo quiero.

─Y a Stark también lo quieres eh? Hum tu lado de doncel, te la está jugando, no te culpo Strak está buenísimo. Él muy maldito, nos hizo creer que te violaba, pero por lo visto te entregas solito.

Steve boqueo ante él comentario y enrojeció.

─Yo no...Yo nunca he...Nosotros no...

─No aun no, pero está claro que pasara.

─El prometió que no me violaría.

─Niño, aquí nadie ha hablado de una violación.

Se burló la espía y el rubio apenado se dirigió a la puerta escuchando la sonora risa de sus amigos.

Pero reconocía que hasta cierto punto ellos tenían razón, él se estaba entregando solito

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