Kyungsoo había creído que su petición no era más que una broma, sin embargo, al ver que Jongin permanecía tan serio, se dio cuenta de que en realidad hablaba en serio.

Por supuesto, en Corea eso sería imposible, pero no descartaban la posibilidad de casarse legalmente en algún país en el que eso fuera posible.

Esa noche, mientras se relajaban en la tina, Jongin le expresó que lo amaba y que quería formar una vida junto a él y sus dos hijos. Incluso si antes ya habían hablado de sus sentimientos, nunca antes fueron tan francos acerca se sus planes y deseos.

Así que gradualmente Kyungsoo y Jongin se mudaron.  Comenzaron llevando algunas de sus cosas, hasta que ya no volvieron a su antigua casa y decidió alquilarla a una joven pareja.

Y cuando pasó poco más de un año desde que se conocieron, Jongin le preparó una sorpresa un día después de su cumpleaños.

Le había dicho que harían una pequeña fiesta para festejar sus cumpleaños, ya que él cumplía el 12 de enero y Jongin el 14. Le dijo que él se haría cargo de todo. Cuando llegó el día,  Jongin se marchó con los niños desde temprano y le dejó una caja blanca elegante sobre la mesa. Asumió que se trataba de un regalo y no se contuvo en abrirlo. Cuando lo abrió,  se encontró con un bonito traje en color blanco con detalles de pedrería.

La nota decía que lo usara para la fiesta a la que acudirían sus amigos y familiares más cercanos —que eran muy pocos, contando a sus familares—. Kyungsoo se arregló y más tarde condujo a la dirección que le había dado Jongin.

Cuando llegó,  no vio nada fuera de lo común al principio. Era un pequeño salón de aspecto elegante, tal y como le habían dicho. Saludó y agradeció alegremente a los pocos invitados y buscó a Jongin y a los niños, pero no los vio por ninguna parte.

Su madre lo llamó para que se sentara junto a ella y comenzó a contarle todo lo que había hecho durante esos días.  De pronto, la gente se calló y Kyungsoo sintió que alguien le tocaba la espalda. Al girarse, se encontró conbla sonrisa resplandeciente de Jongin, quien estaba vestido con un traje igual que el suyo.

—Sé que quizá no es lo que esperábamos,  pero esto es realmente importante para mí —comenzó a decirle Jongin. Se metió la mano al bolso del pantalón y extrajo algo—. Sé que siempre soñaste con casarte, y aunque no podemos hacerlo ahora mismo, por lo menos quiero darte una boda.

Tomó su mano y deslizó un anillo en su dedo. Kyungsoo no tuvo tiempo para reaccionar, solo siguió sus movimientos, y entonces vio que, mientras conversaba con su madre, alguien había colocado un arco de hojas verdes con flores blancas a sus espaldas.

Los ojos se le llenaron de lágrimas y miró el anillo con mucho cariño. Luego miró a Jongin, extremadamente  agradecido. Una boda simbólica era igual de importante para él,  porque era con el hombre al que amaba.

Fue su hermano Seungsoo quien llevó a cabo la ceremonia. Se alegró cuando vio a Youngsoo, Jeonghwan y a su sobrina vestidos de forma elegante, lanzando pétalos de flores por todas partes.

Y aunque no tenía sus votos preparados y quiso evitarse la vergüenza de inventar algo al momento, se prometió a sí mismo que para toda la vida, mientras el amor durara, se aseguraría de querer, cuidar y proteger a Jongin y a su pequeña familia.

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Si llegaron hata aquí,  muchas graciaas
Al final sentí que fue un poquito apresurado, pero así había planeado la historia y pues ya xux

Les quierooo♡♡

Luego corrijo errores