[Hoy, capítulo de acción, y la aparición de un personaje muy querido por ustedes, que lo disfrutenc:].

PoV Ryu.

—¿Que creen que deberíamos hacer con el?

—Ukearlo claramente.

—Yo digo que lo amarremos en varias poses y tomemos fotografías.

me desperté escuchando voces y viendo todo oscuro, aquellas voces correspondían a chicas de no más de 16 años, tenía miedo pues aparte de no ver nada decían terminos nuevos y extraños para mí.

—¿Qué diablos es un uke?—pregunté.

—Oh, se ha despertado al fin.

de pronto mi visión me fue entregada de regreso, no hubiendo deseado pedirla pues lo que ví me asustó bastante.

estaba rodeado de chicas con caras de sicopatas y dispuestas a matar por su objetivo, varias de ellas tenían camaras y unos libritos extraños que decían en letras rojas —Yaoi— y abajo de esa extraña palabra decía —Adentro de éste libro se encuentran los secretos del basto universo, si no éstas preparado mentalmente, no lo habras—

eso me asustó un poquito, pero lo que más me asustó fue ver a la chica que estaba frente mío, parecía ser la lider de todas esas chicas.

—En donde estoy y... ¿Po-porqué estoy a-amarrado?.

—Eso lo sabrás pronto pequeño uke.

—¿Me puedes decir que es un uke?.

todas las chicas se largaron a reir como maníaticas, murmuraban entre sí y despues de unos segundos se quedaron en silencio.

—Sería mucha información de golpe, no lo podrias resistir... Solo algunas pocas personas están preparadas para saber los secretos más reconditos del yaoi, no debemos permitir que caigan en malas manos.

—¿Y si lo busco en google?— pregunté.

—Ah... bueno, no había pensado en eso... hmm... Cambiando de tema, te tenemos una propuesta...

miré a mi alrededor y ví mis posibilidades de salir vivo de ésta si decido no escuchar a la chica y escapar... 0%.

—Puedes decirme.

todas las chicas se miraron con una cara de perversidad infinita, lo cual no hizo mas que aumentar mi miedo.

—Tú... es cierto lo que dicen...

levanté una ceja en forma de pregunta.

surgió una chica de en medio.

—Jefa, no creo que esa leyenda se verdad...

—Shhh... debemos conservar la esperanza.

—¿Pueden decirme que diablos quieren?— pregunté enfadado, las cuerdas ya me comenzaban a doler.

—Es verdad... que... tus padres... ya sabes...

—¿Son gays?— terminé la oración.

varias chicas se desmayaron y la jefa, no se porque comenzó a sangrar de nariz.

—Waa, jefa, está bien— preguntó una chica.

—Tranquila, solo me tomó por sorpresa... esto no puede conmigo.

—Si, son gays... y yo y mis dos hermanos somos adoptados.

ésta vez varias sangraron de nariz, y la jefa casi cae, pero se pudo mantener en pie afirmandose de una de sus amigas.

—Muy bien pequeño... ahora solo tienes una cosa por hacer.

—¿Que cosa?— pregunté asustado.

—¡UNIRTE AL CLUB!— Dijo feliz y radiante como nunca y todas las chicas se levantaron del suelo cada una con una hoja para solicitar el ingreso al club.

—Solo toma una y rellenala.

—¿Y si no que?— pregunté

hubo un gran silencio, uno que congeló toda la sala, la jefa chasqueó los dedos y de un minuto para otro todas las chicas tenían un arma en la mano.

—AH... ¡AHHHHH!— Casi caigo de mi silla —¡¿ES LEGAL TRAER ESO A LA ESCUELA?!

La jefa se acercó a mí, nuestras narices se tocaban, si lo que quería era intimidarme lo había logrado, pero no éstaba listo para escuchar lo siguiente que iba a decir, que hizo que se me helara la sangre.

—Jamás... subestimes, a una fujoshi.

miré para atrás de ella, todas tenían cara de poder matar si era necesario, y, en dos segundos ya había llenado los formularios completos.

—Buena decisión pequeño, de ahora en adelante, las juntas serán en tu casa... ¡ADIÓS!.

Me tiraron afuera del salón del club.

después de reaccionar, fuí a contarle todo a mis amigos...

PoV Jake.

había terminado de tomar mi taza de café de aquella mañana, ya había pasado un día de que mi amigo Finnian fue a buscar a su hija —mi sobrina— Shiori y a mi madre pues se habían metido en un gran problema con la FBI.

me había quedado a cargo de Izumi —mi sobrino— , de Alex —Mi hijo— y mi otro sobrino Ryu-Ryu, siempre ha sido mi sobrino favorito, pero eso no se debe decir delante a los demás, y de mi hijo mayor Jean.

suspiré después de tomar un gran sorbo de café, los bebés estaban durmiendo y los chicos se habían ido a la escuela.

Jean y Ryu se estaban llevando super bien ultimamente, Jean se ha puesto muy sobreprotector con el desde que llegamos, quizás sea porque le ayuda con los videojuegos.

cuando me decidí a ir a servirme más café, tocaron el timbre.

miré por el ojo de la puerta, era el nuevo vecino quien había llegado al mismo tiempo que nosotros, antes de abrir recordé lo que dijimos Finnian, Jace, Kyo y yo apenas llegamos.

—Vamos a mantener una actitud apropiada y parecer la familia más normal del mundo, será una vida nueva, cero peleas, cero abuelas yakuzas, cero problemas legales y cero raptos.

así unos segundos antes de abrir miré al rededor de la casa por si había algo raro.

—Está todo en orden— pensé.

moví la manilla de la puerta y ahí se encontraba el vecino mayor, era de tes blanca, rubio y de unos ojos encantadores, casi como Jace, pero nunca nadie alcanzaría ni en belleza ni en actitud a mi esposo, Jace éra único.

—Buenos días— Dió una cálida sonrisa—He traido ésta tarta, por si quieres compartirla conmigo.

pensé unos segundos, miré hacia atrás por última vez de que no había nada raro y asentí.

—Claro, puedes pasar, ¿Quieres una taza de café?

—¿No será mucha molestia?.

—Espera, ésto no es el chavo del ocho.

—Tienes razón— Rió el vecino.

nos sentamos a la mesa, partí la tarta y le serví una taza de café, despues de un rato comenzamos a hablar sobre su vida, al parecer, sus padres habian muerto en un accidente y el y su hermano tuvieron que cuidarse solos desde que él tenía 16 y su hermano 14, pues ahora el tíene 22  y su hermano 20, su hermano es muy encantador, es como una replica de él pero un poco más pequeña.

—¿Y que hay de tí?— preguntó el chico —¿Como ha sido tu experiencia con tu novio?

—las familias gays ya se han esparcido por todo el mundo, la homofobia se ha reducido al 1% y ya se puede contraer matriomonio homosexual en todo el mundo... no hay grandes problemas, nadie nos ha tratado mal— dije tranquilo.

—Ahh... —asintió.

—¿No tienes ninguna historia de alguna aventura que hayas tenido en secundaria?— preguntó.

Muchos recuerdos vinieron a mi mente, los problemas de mí madre cuando tenía batallas, sus conflictos yakuzas, cuando peleé junto con mi amiga maggi con un chico que se disfrazó de mujer, cuando rescatamos a Finnian y luego todo eso se esfumó por un mini Finnian en mi hombro que decía.

—Seremos una familia normal ahora.

negué con mi cabeza.

—Nada fuera de lo común— dije —Somos una familia extremadamente normal— mentí.

inmediatamente ocurrió algo que nunca debió haber ocurrido y llegó a desmentir lo que había dicho. 

sentimos sirenas de policías así que nos acercamos a la sala principal, pero antes de entrar en ella la puerta de mi casa salió volando. era... ¡Mi madre!

—¡¡Madre que haces aquí!!

en vez de preguntarme como éstaba o algo me lanzó una mochila.

—¡ESCONDELA JAKE!.

La lancé a la chimenea.

de pronto entró Finnian y Shiori.

—¡¿CHICOS QUE PASA AQUÍ?!— Nuestro vecino estaba realmente impactado, ni siquiera se movía.

—¡LA FBI VIENE HACÍA AQUÍ!.—Dijo Shiori. —¡TOMA TÍO!—. Me lanzó una pistola.

olvidando que éstaba el vecino aquí tomé el arma y lo cargué, subí al segundo piso y me escondí llevandome conmigo al vecino que estaba en Shock sin poder moverse, mi madre y Finnian estaban al lado mío, Shiori se había escondido en la última habitación con los bebés.

de pronto cuatro mastodontes entraron por la puerta.

—¿Como diablos podremos con ellos suegra?— preguntó Finnian a mi madre.

—¡Vamos, son fáciles!— dijo.

—¡Se que están aqui!— gritó uno de los hombres.

entonces mi madre saltó de el segundo piso lanzandoce encima de uno de ellos, gritando.

—¡AHORA CHICOS!.

Finnian y yo comenzamos a disparar en los pies de los tipos para que no pudieran caminar, acertamos a uno, el otro comenzó a disparar hacía Finnian.

—¡Cuidado!— lo empujé.

disparé al pie del tipo y acerté.

Finnian apuntó al otro tipo, pero éste alcanzó a esconderse detrás de un sofá.

—mierda— dijo entre dientes Finnian.

mi madre logró noquear al más grande, solo faltaba uno.

ése se lavantó del sofá y disparo hacia Finnian y yo, por suerte no nos cayó a nosotros si no que a nuestras armas las cuales salieron proyectadas lejos de nosotros.

entonces mi madre corrió hacía el tipo el cual disparó, pero un extraño sonido indicaba que se le habían agotado las municiones, mi madré tomo una lámpara y ocupandola como uno de sus fierros de pelea la comenzó a mover como la hélice de un helicoptero y atacó al tipo en la cabeza.

éste tomo el fierro y lo lanzó lejos, mi madre dio uno, dos, tres puñetazos en el estomago del tipo el cual gritó de dolor, a pesar de mi madre ser pequeña, tenía mucha experiencia en pelea.

el tipo tomó un jarrón y lo lanzó hacia la cabeza de mi madre, mi madre tomo la única lámpara de suelo que quedaba, y como si se tratara de un partido de beisbol, bateó el jarrón quebrándolo en miles de pedazos, y sin esperar ni un solo segundo le dió cuatro golpes repetitivos en la cabeza al tipo, el cual cayó al suelo como si nada.

PoV Jean.

ya había terminado el entrenamiento de fútbol y como se hizo costumbre Ryu me éstaba esperando con una toalla en los lavabos.

decidí tomar ventaja de mi cuerpo, para saber si le gustaba aunque sea un poco, así que me saqué la camiseta delante de él, el cual se sonrojó mucho y miró hacia otro lado.

—Quizás piensa que soy desagradable, por eso desvía la mirada— pensé.

pero decidí seguir con mi experimento.

—Me duele el pecho, justo aquí— dije tomando su mano y poniendola sobre mi tibio pecho.

el la quitó rápidamente, definitivamente le desagradaba.

—Lo-lo siento— dijo Ryu.

quería gritar a todo el mundo que lo amaba, pero definitivamente me odiaria.

—Puedes pasarme tu camiseta—. dijo éste.

—Pe-pero está sudada, te debe de dar asco.

—¡ESO NUNCA!— Dijo Ryu mirandome a los ojos con un fuerte rubor en sus mejillas, cuando se dió cuenta de que había gritado y de mi cara de infinita sorpresa miró hacia abajo nuevamente. —Tu-tu nunca serías capaz de darme asco.

tomó mi camiseta entre sus pequeñas manos.

me fuí sonrojado todo el camino, al igual que él, quizás no era tan loca la idea de que tenía una oportunidad, cuando ibamos por el barrio comercial, le compre un gran helado el cual deboró en unos segundos, ama las cosas dulces.

cuando ibamos caminando por nuestra calle, nuestras manos hicieron un leve roce haciendo que casi explotara, y haciendo que Ryu-Ryu aumentara su color rojo a un tono preocupante.

pero de pronto todo ese mágico ambiente fue cortado por la voz de Ryu.

—¿Porque estará la policia fuera de casa?— preguntó él.

unas lágrimas comenzaron a brotar de su rostro de la nada, eso me preocupo un poco.

—Estás bien Ryu-Ryu.

sin responder a mi pregunta corrió rápidamente hacia la casa, cuando llegamos a la puerta éstaban mi tío Finnian, mi padre Jake, mi abuela Cloe y mi prima Shiori.

—¿Que ha pasado aquí?— dije mirando hacia dentro de la casa.

los sofá estaban llenos de agujeros y dados vuelta, la chimenea éstaba rota, algunos bloques estaban quebrados y de algunos aparatos de adentro salía humo.

—¿Porqué la casa está destruida?— preguntó Ryu a mi tío Finnian.

—Es que... haha— se rascó levemente la cabeza —tuvimos un pequeño enfrentamiento con la FBI y quieren llevarnos a la cárcel.

—¡¿QUE?!— Preguntamos Ryu y yo al mismo tiempo.

—Pero tranquilos, mira como lo resuelven los mayores.

—Solo eres tres años mayor que yo y cuatro que tu hijo Tío Finnian.

—Yo quize adoptar joven, eso no me hace menos responsable además tengo 20 años, miren como lo resuelve un adulto.

—Se-ñor— dijo mi tío tomando por el brazo al policía.

de sus ojos salían lágrimas reales y se tocaba el labio con una mano.

—Ahí va mi padre—. dijo Ryu, era primera vez que veía a mi tío en acción, siempre escuchaba historias, pero nunca lo había visto.

—Tengo hi-hijos, y no quiero que me ha-hagan daño en la cárcel— Dijo tío Finnian. —¿Usted quiere que sufra?— preguntó en su oido.

El joven policía se puso muy rojo y comenzó a temblar y tartamudear.

—No no no no no, nunca querría eso.

—¿Entonces me pueden dejar libre junto con mis amigos? — preguntó.

—Este... no creo que.

Finnian comenzó a llorar más.

—No se preocupe, todos los cargos serán anulados.

y así mi tío Finnian hizo que todos quedarán libres de cargos.

de pronto el nuevo vecino salió con cara de trauma de la casa.

—A-dios, vuelvo otro día.

—Lo-siento— dijo mi padre

—No te preocupes.

———————

después de ordenar toda la casa nos fuimos todos a cenar, la abuela Cloe prometió quedarse con nosotros unas semanas para hacernos compañia, esa sería sin dudas, una gran semana.

Bueno chicos, éste ha sido el capítulo de hoy, si les gustó no sean tímidos y dejen estrellitas y comentarios que siempre me alegran y me animan a subir más caps.

el capítulo de hoy fue largo, si quieren aún más largo o más corto haganlo saber aquí en los comentarios

¡Adelanto próximo capítulo!

foto: Jean hablándole a Ryu-kun

—Oh, ha llegado el correo.

Finnian levantó todas las cartas que se encontraban en el tapete.

—hogwarts, hogwarts hogwarts... diablos, aún no llega... pero.

abrió la carta que decía escuela militar.

estimados jóvenes Jake y Finnian:

después de saludarlos muy cordialmente tengo el deber de informarles que tienen el derecho a visitar a sus respectivas parejas por un día la semana que viene, esperando no haberlos molestado se despide.

El mayordomo de el teniente Michael.

El teniente michael debía de ser el instructor de los chicos, lo bueno es que podría ir a ver a su amado Kyo, lo malo, solo éra un simple día.

¡Los quiero mucho,  bai'♥!