Uzushiogakure No Sato:

Podemos ver a dos rubios caminar dentro de los pasillos del castillo.

Naruto: te preocupas?

Boruto: como no hacerlo, es mí hijo y tu nieto.

Naruto: el que lo diga así no significa que no me importe hijo, es mi nieto cómo dices, un semidiós griego, nacido en esas tierras.

Boruto: qué sucede? qué harás

Naruto: quizá llevarle un regalo.

Boruto: hablas de la

Naruto: la armadura de Patroclo, él dijo que encontráramos a alguien digno de usarla, qué mejor que el primer semidiós nacido allí.

Boruto: de acuerdo, cúbreme mientras se la entrego, no quiero que Zeus se entere que rompo las reglas suyas de no relacionarnos con nuestros hijos semidioses.

Naruto: tranquilo -abrazándolo- cuentas conmigo, y no le dejarás aprender sólo.

Boruto: a qué te refieres

Naruto: Acteón!!!!

El mencionado aparecería frente a ellos, mientras les daba una reverencia y les sonreía con amabilidad a ambos, dos de los Dioses que más respeto le han dado.

Acteón: si mi señor

Naruto: quiero que traigas a Perseo, tengo una misión para ambos

Acteón asentiría y se retiraría a traer al héroe exiliado de Argos

Boruto: pregunto, qué querrás enseñarle?

Naruto: Perseo es un héroe para ser hijo de Zeus de los más desdichados, perdió a su abuelo Acrisio, debido a una profecía, claro que fue por un accidente, pero fue su destino............ rayos sueno cómo Neji.

Boruto: y esto nos lleva a.....

Naruto: querías que Ayato, pudiera defenderse, bueno, Acteón y Perseo irán cómo sus maestros, y al culminar el entrenamiento

Boruto: le darán la armadura de Patroclo

Naruto: así es, además, pasa tiempo con él, a pesar de que contestas sus plegarias, y lo ves en sueños para aprender de él

Boruto: lo sé pero

Naruto tomaría en sus brazos los hombros de su hijo mayor, su primogénito.

Naruto: nunca temas en proteger a la familia, siempre estaremos allí y listos para darte ayuda

Boruto asintió y vio llegar a Acteón y Perseo, hijo de Zeus, el hijo del chispitas más decente que había, era hijo de Dánae y Zeus, su concepción fue de las más raras vistas, y dado el padre del chico, el posiblemente, único semidiós hijo de Zeus que Naruto llegó a respetar y admirar. Acrisio, rey de Argos y padre de Dánae, la había encerrado en una torre de bronce para evitar que ella concibiese un hijo, ya que un oráculo le había asegurado que su nieto lo mataría. Zeus, que deseaba a Dánae, rechazó dejar este castigo así. Visitó a Dánae en forma de lluvia de oro, de la cual nació Perseo. Acrisio, sorprendido, encerró a la madre y al hijo en una caja y los arrojó al mar, pero gracias a la protección de Zeus, la caja llegó a salvo a la isla de Sérifos, donde Dánae y su hijo fueron acogidos por el rey Dictis, hermano del rey Polidectes de Sérifos. 

Boruto, al ver llegar a sus acompañantes, decidió despedirse de su padre, dejando un clon de sombra para las reuniones del Olimpo, mientras con sus acompañantes dejaba Uzu, para dirigirse a las Tierras Ocultas, las Naciones Elementales.

En Suna:

Ayato por enésima vez, estaba escapándo de Sabaku no Kankuro, hermano del KAzekage, y su maestro en la academia Shinobi, dada su estirpe Uzumaki, más el adicional de ser un semidiós griego, sufría de Trastorno de Hiperactividad y Déficit de Atención (TDHA), no podía estar quieto, debía estar siempre haciendo algo, lo cual en la academia, no podía hacer, a ello se sumaba otro problema, Dislexia, al ser hijo de uno de los Dioses Olímpicos, su mente está adaptada y preparada para leer Griego y no otros idiomas, cómo pasaba con el Kanji en el mundo Shinobi.

Ayato: no me atraparás jajajaja -corriendo rumbo al templo.

Kankuro: maldito crío, al menos no es hijo de Naruto.

En el Templo de Suna

El Templo de Suna, era el único edificio con la temática griega existente en todo el continente Elemental, en él, varias estatuas de Naruto, sus hijos y los Dioses relacionados a él, cómo Eros, Hefesto y Deméter, estaban alzándose con él en el centro, era de las novedades más grandes del continente y también el foco de los ataques de iwa shinobi cuando se ingresaba a Suna, ya que desde que Kurotsuchi perdió su Kekkei Genkai, le ganó el odio hacia el Uzumaki, pero eso sólo mermaba sus fuerzas, quienes ingresaban eran víctimas de maldiciones.

Naruto simplemente los convertía en animales, zorros, serpientes, sapos, tortugas, no era tan vengativo. Apolo causaba varias enfermedades, incluso quiso usar la Plaga de Athenas para vengarse, pero decidió no hacerlo, en su lugar, enviaba varias enfermedades que alteraban de forma directa las redes de chakra. Boruto, solía privar de habilidad en el combate a quienes profanaran el templo, Himawari, junto a Artemisa, quitaban la fertilidad, Iasión quitaba la belleza. Deméter, causó varios episodios de hambruna en shinobis de Iwa, cómo lo hizo con Erescictón, lo que hizo que los pobres Shinobis desafortunados, no pudieran calmar su hambre y sed, a pesar de lo que consumieran.

Ayato: hola papá -viendo la estatua de Boruto- sé que dirás que debo de ir a la academia shinobi, pero es aburrido -admitió el joven Uzumaki

??? lo sé

Ayato: papá?!

De la estatua un destello dorado se hacía presente mientras un rubio acompañado de otros dos, aparecían. Ayato al reconocerlo por sus sueños, abrazó a su padre, quién correspondió el abrazo

Ayato: papá al fin te conozco de verdad

Boruto: siento no estar presente, pero créeme, siempre te veo, y créeme que hay cosas que me enorgullecen que hagas

Ayato: jejej gracias.

Boruto: además....

Kankuro: Boruto -llegando al salón

Boruto: Hola Kankuro, bueno cómo decía, decidí traer a tus maestros a partir de ahora.

Ayato: me enseñarán algo aburrido?

Boruto: para nada

Ayato: algo shinobi? -teniendo leve desinterés

Boruto: tampoco.

Ayato: entonces?

Boruto: en varios sueños dijiste que querías ser un griego echo y derecho, asique, Perseo y Acteón -señalando a sus mencionados- serán tus maestros, por órden de tu abuelo.

Ayato: increíble

Boruto: además tu abuelo te dejó un regalo, pero para que ellos te lo den deberás demostrar que completarás tu enseñanza

Ayato: cuenta con ello Dattebar'e

Así con ello comenzaron las enseñanzas, Acteón instruyó a Ayato en la caza y el uso del arco, le enseñó Atletismo y el mantener una alimentación sana, ya que gracias a Deméter, Suna florecía en vida verde.

Perseo le enseñó al joven semidiós el uso de la espada, el escudo y la lanza, a la par de nutrirlo en Filosofía, matemáticas y Literatura, usando de base los relatos de Homero.

Con su padre pasó tiempo, recuperando los días que él por leyes del chispitas de Zeus, no podía estar para él. Incluso pasaba tiempo con Sarada, quién quiso castrar a Zeus por lo de la ley que afectó a Boruto.

Así pasaron 5 años, donde el adolescente semidiós de 12 años, se volvió un apuesto jóven pelirrojo, atlético, muy bello para los estándares de belleza de esa época. El Uzumaki Uchiha de 17 años, había completado todo lo que se le puso enfrente. Aprendió Aritmética, Gramática, Filosofía (principalmente Sócrates, aunque también otros cómo), Retórica, Música, Artes y Geometría, impartidos por Perseo, debido a su estadía en Argos y Athenas un tiempo. De Acteón aprendió a usar el arco, era casi tan bueno cómo su hermano Apolo, quién visitó y trató de persuadir a su sobrino de hacer algo genial, lo que no funcionó. Ayato logró leer y escribir en Griego, así cómo lo hacía en Kanji, había leído a Antifonte, Demóstenes e Isócrates, gracias a sus maestros y padre, quienes a pesar de la falta de discreción griega en la educación a la hora de disciplinar, cosa que no hicieron con el chico. En lo físico, Ayato poseía un físico muy envidiable en varios jóvenes, estaba marcado, ligeramente inflado, y gracias a su fuerte acercamiento a los griegos, a veces solía celar un poco su desnudez, fue ejercitado en el pentatlón: la lucha, la carrera, el salto, el lanzamiento de disco y el lanzamiento de jabalina.

A pesar de que Gaara lo visitara, al igual que su abuelo Sasuke, Ayato mantuvo su formación hasta los 18 donde era buen peleador cuerpo a cuerpo, espadachín increíble, arquero perfecto, cualidades que valieron el dejar de usar el chakra cómo método de combate, lo que permitió que sus maestros entregaran su legado, la armadura Mirmidón que su tío Patroclo había usado al morir, la armadura de quién fue su amante, Aquiles. Gracias a los poderes de Naruto, la armadura quedó impregnada de bastantes conocimientos de Aquiles para la batalla, los cuales fueron aceptados por el joven Uzumaki, el primer griego nacido en tierras shinobis.

En el Mundo Olímpico

Mientras Boruto se encargaba de su hijo, Naruto puso al tanto al resto de la familia de lo que harían, además de avisarle a Artemisa que su compañero estaría con su sobrino entrenándolo y educándolo. A la cazadora le dolió un poco, ya que desde el incidente con el y el tiempo que pasaron se había disculpado con él y habían logrado acercarse.

Durante el tiempo fuera de Boruto, no hubieron reuniones en el Olimpo, por lo que Naruto quiso aprovechar a visitar unas tierras en cercanías de Fenicia, por lo que acompañado por sus esposas se dispuso ir a visitarlas.

Se vistió cómo mercader, y junto a Methis y Leto, recorrieron el mar en sus vacaciones y aventura de matrimonio. Las tierras a las que arribaron eran llamadas por los lugareños, cómo las Tierras de Dios, al escuchar ello, el matrimonio indagó en quién se adoraba en dichas tierras, recorriendo la región de Judea, escuchando los nombres del ser que gobernaba las mismas, Elohim, Yahvé, Eloah, Dios. Habían escuchado que estas tierras pertenecían a un único Dios, el que en un futuro sería conocido cómo el Dios Abrahámico, o Bíblico, monoteístas, por lo que recorrieron el lugar, siendo vistos cómo paganos por sus ropajes y formas de hablar.

Fue en su camino que supieron su historia, los habitantes de ese lugar descendían de los primeros humanos bíblicos, Adán y Eva, ambos creados a imagen y semejanza de Elohim, los cuales fueron desterrados del primer hogar, el Jardín de Edén, por supuestamente pecar al comer el fruto prohibido.

En su camino, los griegos llegaron a un valle verde, hermoso, rebosante de vida y color.

Recorrieron la zona, buscando dónde pasar la noche, siendo recibidos con cierto recelo, debido al aura divina que los griegos emanaban, imperceptible a ojos comunes, por una pareja de jóvenes rubios, sus ropas, no eran más que hojas. El primero era un joven rubio, atlético, relativamente marcado, ojos azules cómo el cielo, que sólo vestía una hoja de higuera en sus partes nobles. La segunda, era una mujer rubia, hermosa, ojos azules que reflejaban miedo y pureza, siendo vestida por hojas cubriendo sus pechos y musgo cubriendo su intimidad.

Joven: quienes son?

Naruto: me llamo Naruto y tu?

Joven: Mi nombre es Adán y ella mi esposa Eva

Naruto: ellas son mis esposas Leto y Methis, es un placer conocerte Adán

Adán: qué hacen aquí,ya que no es raro que Dioses vengan por nosotros -dijo serio, pues no confiaba en los dioses tras lo de Eva.

Leot: no tienes que estar a la defensiva

Adán: no confío en Dioses desde lo de Eva

Adán y Eva, fueron conocidos por ser los primeros pecadores, al ser una creación directa de Dios, ambos habían sido bendecidos con la juventud eterna, y una inmortalidad parcial, ya que podían morir siendo asesinados.

Naruto: no soy de estas tierras, y no tengo malas intenciones, además escuché de tí en ese libro que los humanos leen y créeme me cuesta creer mucho esas palabras, no pareces alguien malo.

Adán: y qué crees que soy

Naruto: un hombre que vela por su familia, que sólo quiere lo mejor para ellos, un buen amante y esposo, que vela por la protección de quién ama.

Adán: gracias -relajándose

Naruto: puedes contarme tu historia?

Adán: claro, solía vivir plácidamente en el idílico Jardín del Edén, junto con otras creaciones de, Dios. me sentía sólo, a pesar de estar acompañado de animales y demás seres creados por Elohim, ello hizo que Eva fuera creada para ser mi alma gemela, mi compañera, la persona a quién amo, y seguiré haciendo incluso aunque muera. Vivíamos tranquilos, gozando la vida en el Edén hasta que ese fatídico día llegó, Eva fue acusada de comer de la fruta prohibida del Árbol del conocimiento del bien y el mal. Debido a mi conexión con los animales, dos aves me notificaron el intento de Abuso de la Serpiente a Eva, lo cual no gustó a ese tipo, acusándola de comer el Fruto Prohibido. Pensé que mi creador nos apoyaría pero, demostró que no puedes confiar en un Dios, sabiendo que ella sería desterrada injustamente me presenté en aquella corte, derroté a los guardias, e interrumpí el juicio mientras sostenía dos canastas llenas de los frutos del Árbol del Conocimiento, comencé a morderlos frente a todos, ofendiendo a Dios y sus ángeles, para irme con quién amo, lo que generó que también fuera expulsado yo. La serpiente al no salirse con la suya, nos atacaría pero yo le corté sus extremidades para abandonar el Jardín del Edén de la mano con mi amada

Naruto: no la has pasado fácil -colocando un brazo en el hombro de Adán- si necesitas, puedo ser un Dios, cometer errores y causar males a veces, pero aún así, aquí me tienes, puedes dejarlo salir todo.

Adán sintió algo en Naruto, algo que pensó no sentir en un Dios, Confianza, por lo que cediendo poco a poco, dejó salir todo ese dolor, toda esa furia en un grito y lágrimas mientras Naruto era su soporte

Ninguno sabía que eso causaría el ingreso de alguien que odiaba mucho a dicha pareja, Uriel, Arcángel del Sol, portador del Fuego de Dios y Custodio del Edén.

El Arcángel llegó empezando a incinerar todo el oasis donde vivian Adán y Eva, por lo que Leto y Methis, decidieron usar su poder cómo Titanides para proteger a Eva, mientras Naruto cubría con su cuerpo a Adán.

Uriel: malditos griegos, sientan la Ira de Dios -lanzando otra ráfaga de fuego

Naruto no dejaría pasar esto por lo que con una espada que materializaría frente de Adán sorprendiendo al mismo atravesaría en el corazón al Arcángel quitándole la vida.

Naruto: no dejaré que éste tipo sea evidencia -trazando sellos de mano y sellar al arcángel.

Adán: Eva!!!

Eva: Adán, estoy bien, Leto y Methis me protegieron

Adán: gracias

Naruto: descuida

Adán: nuestro hogar -viendo todo

El hermoso valle antes verde y exuberante ahora era un páramo desierto, cubierto de negrura y restos de muerte

Naruto: este tipo no merece llamarse servidor de un Dios tan demente -dijo molesto- Adán Eva si gustan Uzu les abre las puertas allí estarán seguros

Adán y Eva se miraron, y a pesar de que este Dios recién los conociera, los salvó sin pensarlo, y tras perder su hogar decidió darles refugio, ante ello, decidieron aceptar su oferta, dirigiéndose con el dios y sus esposas rumbo a su nuevo hogar, comenzando una amistad entre Adán y Naruto, una amistad casi hermandad, relación que Naruto usaría para volver al rubio, director del campamento Mestizo en Uzu.

Fin del Cap.