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Capitulo 26

Taylor se encontraba observando como Justin nadaba junto a Jaxon en la piscina temperada.
Resulta que la familia Bieber tenían una piscina temperada, bajo techo, donde les gustaba pasarse las mañanas y las tardes de invierno; pero en esa ocasión Justin se encontraba disfrutando del agua caliente a tempranas horas del día.

—Me gusta mucho tu cabello —susurró Jazmín mientras seguía peinando el cabello de Taylor.

—A mi me gusta el tuyo, Jazzy. Es como el de Justin y el de Jaxon, suave y rubio.

—¡Pero Justin es teñido!

Taylor comenzó a reír mirando el cabello de Justin y negó levemente con la cabeza.

—Pero cuando era pequeño era muy rubio, luego pasó a ser rubio sucio, pero siguió sigue rubio —suspiró—, mi rubio.

Justin salió de la piscina junto a Jaxon y caminaron hasta la tumbona que se encontraba a un lado Jazmín y Taylor.

—¡No me toques! —Taylor chilló cuando Justin se inclinó a abrazarla— ¡Estás mojado, Justin!

—¡Pero estoy caliente!

Los ojos de Taylor se abrieron, reluciendo por completo el verde de ellos.

—Me refiero a que el agua está caliente, no seas mal pensada —añadió, apuntándola con un dedo.

Taylor rodó los ojos y sacó la lengua en un gesto infantil, causando que Jaxon comenzara a reír. Justin frunció el ceño y luego una gran sonrisa se dibujó en su rostro. Tomó a Taylor en brazos, sorprendiéndola por completo, y comenzó a caminar hacia el borde de la piscina.

—Ni se te ocurra soltarme, Justin —se aferró con fuerza a la espalda del chico.

—¿Qué puedo ganar a cambio?

El corazón de Taylor latía con fuerza, no quería caer a la piscina.

—Lo que quieras, pero bájame —miró el agua con temor.

Justin pensó que era una buena situación de la cual podía aprovecharse.

—No te bajaré hasta que me digas con qué me recompensaras.

—Dormiré en tu habitación esta noche, pero bájame.

—¡Hecho! —sonrió.

Taylor sabía que con decir aquello Justin estaría mas que conforme. Él la dejo sobre el piso de madera y besó su mejilla.

—¡Oportunista! —Taylor lo empujó levemente, sin poder evitar reír.

Justin la volvió a tomar en brazos y esta vez la lanzó a la piscina. Las risas de los pequeños retumbaron por el salón al mismo tiempo que Taylor salía de la piscina furiosa y completamente empapada; resulta que la muy inteligente no quiso ponerse bikini en la mañana.

—Jazzy y Jaxon, ¿pueden traer dos toallas?

Los pequeños asintieron.

Taylor lo miró furiosa y comenzó a golpearle el pecho.

—Por imbécil dormirás solo —gritó.

Quizo reír al ver la cara de Justin, pero se aguantó, tenía que mantener su papel.

—Duerme conmigo. Anoche fue muy difícil dormir sabiendo que estabas en la habitación de al lado —se rascó la nuca.

—No quiero dormir contigo.

Justin se acercó peligrosamente a su cuerpo y Taylor miró al piso enseguida, completamente nerviosa. La respiración de Justin chocó contra su frente y dejó un suave beso allí, levantó el mentón de Taylor con su pulgar y admiró sus infinidades verdes, seguido de sus labios.

—Duerme conmigo.

—No.

—Por favor —se acercó aún más.

—¡Justin! —se quejó cuando su estómago comenzó a contraerse de los nervios, lo tenía demasiado cerca.

Justin rozó los labios de Taylor con lentitud, y cuando comprobó de que la chica no tenía intensiones de alejarse, presionó sus labios contra los de ella, embriagándose por completo de su dulce sabor y fundiéndose en los suaves labios de la castaña.

Taylor sintió miles de mariposas en su estómago y sus piernas temblaron ligeramente, por lo que se aferró del cuello de Justin con fuerza. Él sonrió al sentirla nerviosa y le acarició la mejilla suavemente.

—¡Tranquilízate! Soy yo, soy tú Justin —susurró contra sus labios—. No tienes porque ponerte tan nerviosa.

Las mejillas de Taylor no tardaron en colocarse rosadas y terminó escondida en el cuello del chico. Justin comenzó a reír con ternura y le acarició la espalda.

—Duerme conmigo.

—Dormiré contigo.

Sonrió en grande y volvió a besarla.

—¡Justin! ¡Papá dice que el almuerzo está listo! Aquí están las dos toallas — dejó las toallas sobre la tumbona.

Taylor se alejó en seguida de Justin y se escondió en su pecho al escuchar la voz de jazmín.

—Vamos en seguida —avisó él.

El almuerzo transcurrió tranquilo. Taylor agradecía eternamente que la confianza que siempre tuvo con la familia de Justin siguiera intacta. Eso era increíble para ella.

Luego del almuerzo, vieron un par de películas junto a los pequeños y Justin agradeció que sus hermanos se quedaran dormidos. No es que les molestara su presencia, los adoraba, pero necesitaba un par de minutos a solas con Taylor. Él tenía su cabeza recostada en el estómago de Taylor y ella le acariciaba el cabello; se encontraban en el suelo mientras los pequeños dormían cómodamente sobre el sofá. Ambos estaban demasiados atentos a la película como para analizar la situación.

—¿Quieres pasear en moto? ¿en caballo?

Taylor pareció pensarlo.

—Me gustaría la moto.

Justin se levantó en seguida y le tendió la mano. Taylor la acepto e igualmente se puso de pies.

—¿Te dije lo linda que luces hoy?

Taylor rió y negó con la cabeza.

—Discúlpame.

—Tu luces hermoso todos los días.

—Lo sé.



Justin abrochó el casco que descansaba sobre la cabeza de Taylor y seguidamente dejó un corto beso sobre sus labios. Puso su casco sobre su propia cabeza y se montó sobre la cuatrimoto. Taylor se sentó atrás y lo abrazó por la cintura. Él aceleró con fuerza y salieron disparados por las tierras de la familia Bieber. Taylor se encontraba disfrutando de el aire sobre su cara y de lo suave que era la espalda de Justin. Admiró el lindo paisaje por unos largos minutos hasta que llegaron a una especie de laguna.

Justin apagó la moto y se quedó ahí mismo. Estaba disfrutando de los brazos de Taylor alrededor de su torso.

—Que lindo, Justin.

Taylor se encontraba totalmente embobada, Justin sonrió.

—Compramos estas tierras hace tres meses —comentó—. Un día me encontraba muy cabreado y tomé la moto para salir a recorrer.

—Entonces ahí encontraste este lugar —ella completó por él.

—Exacto. 

—Es hermoso.

—Lo es —estuvo de acuerdo.

Taylor bajó de la moto y se quitó el casco, sacó su teléfono y comenzó a fotografiar. Justin hizo lo mismo y aprovechó el momento para tomarle una fotografía; se quedó mirando a la nada y pensando en muchas cosas, miró a Taylor fijamente y una duda se le vino a la mente.

—¿Haz hablado con Gigi?

Taylor frunció el ceño y se giró a verlo.

—No.

Justin suspiró y bloqueó su teléfono.

—Ustedes son amigas, no pueden estar enojadas toda la vida.

Taylor rodó los ojos y lo ignoró.

—De verdad me sentí muy mal todo este tiempo y ella no lo notó.

—Gigi es así.

—No me pidas que la entienda, ella no me entiende a mi —apuntó a Justin con un dedo.

Estaba molesta, aquella simple y corta conversación había logrado ponerla de mal humor. Simplemente sentía que Justin estaba defendiendo a Gigi.

—Taylor, mira como te has puesto —Justin bajó de la moto y caminó hacia ella–. El tema te afecta.

—La estás defendiendo.

—No la estoy defendiendo, solo quiero que ustedes estén bien.

—Creo que ambas nos merecemos una disculpa, pero yo no seré la primera en ceder... ni siquiera me ha llamado.

Justin hizo una mueca y observó el ceño fruncido de Taylor. Sabía que Taylor tenía la razón, pero aún así la encontraba un poco terca. Quería que ambas se arreglaran, sobre todo porque las quería a ambas y no le gustaba verlas peleadas.

—¿Me das un abrazo? —preguntó con una pequeña sonrisa.

—No lo sé —Taylor se hizo la molesta y esquivó su mirada.

Justin la abrazó por la espalda y le dejó un pequeño beso en el cuello. Rió suavemente contra su piel y luego inhaló el olor de Taylor.

—Señorita molesta.

—Solo estoy algo cabreada con el tema.

—Deben arreglarse, las mejores amigas no deben permanecer peleadas.

—Lo sé, lo sé.

—¿Entonces? —elevó una ceja.

—No hablaré yo con ella, Justin. Ya te dije, ella debe hablarme primero.

—Tu de verdad eres terca —Justin rodó los ojos y se alejó de ella.

—¿Ahora tú serás el molesto? —elevó una ceja mirándolo.

—Solo quiero que...

—Se nota que estás de su lado.

—No estoy del lado de nadie, Taylor. Solo me preocupo por las dos —explicó algo cabreado.

Taylor lo miró mal y luego se dio la vuelta nuevamente. De verdad sentía que Justin estaba apoyaba a Gigi, no podía evitar sentir celos, pero celos de amistad.

—Olvídalo —pidió—. No deberías meterte.

—Pero lo quiero hacer porque ustedes dos me importan y creo que...

—¡Olvídalo, Justin! —perdió la cordura elevando la voz.

Se giró a verlo molesta. Justin, bastante sorprendido, se alejó de ella.

—Cálmate.

—¡No quiero hablar de Gigi!

Justin suspiró cerrando los ojos y asintió. Sabía que lo mejor era no entrometerse, además no quería ver a Taylor molesta, se suponía que aquellas mini vacaciones eran para ellos dos, era solo para ellos dos.

—Está bien, lo siento —levantó las manos en señal de rendición y caminó hacia la moto—. Volvamos a la casa.

Taylor gimió con disgusto y caminó hacia Justin. Sabía que él estaba molesto por la forma en que ella le había gritado, por esa misma razón no dejaría que volvieran a la casa sin antes asegurarse de que ambos estaban bien, porque eso le importaba, que ambos estuvieran bien.

Observo como Justin se ponía el casco y encendía la moto. No se subió detrás de él, si no, hizo que él la mirara a los ojos y luego ella misma le quitó el casco.

—Discúlpame por gritarte, simplemente estoy harta de pequeñas peleas que se transforman en grandes problemas. No quiero pensar en Gigi en estos momentos, solo quiero estar contigo, Justin —confesó mirándolo fijamente a los ojos.

Justin se lamió los labios y asintió, también estaba perdido en los ojos de Taylor, y al escuchar como ella le decía que solo quería estar con él, su corazón había logrado derretirse.

—Yo igual quiero estar solo contigo —susurró y apagó la mato.

Taylor sonrió y se puso de puntas para besarle la mejilla. Justin se hizo hacia atrás en el asiento e hizo que Taylor subiera delante de él en la moto. La abrazó por la cintura mientras ella se dejaba caer sobre su pecho. Se quedaron un largo rato así, Justin la abrazaba por la cintura y le besaba el cuello de vez en cuando, mientras ella tenía los ojos cerrados y su espalda estaba afirmada en el pecho del muchacho.

Justin se quedó pensando un largo rato en cuanto había extrañado aquellos momentos, pensó que si hace un mes le hubiese preguntado si se imaginaba con Taylor de esa forma, el simplemente hubiese dicho que no, jamás pensó que las cosas tomarán un giro tan inesperado; pero estaba feliz, sentía que poco a poco ambos se estaban ganado la confianza del otro y para él eso era simplemente asombroso.

Una lagrima cayó por su mejilla, en seguida la secó, pero fue en vano ya que otras pocas comenzaron a caer, eran lágrimas de emoción. Había sufrido tanto lejos de aquella mujer y ahora simplemente la tenía nuevamente entre sus brazos; él tenía que admitir que tenía miedo de que las cosas no funcionaran, pero se estaba arriesgando a ser feliz o a terminar nuevamente con el corazón roto, y se estaba arriesgando porque la amaba y sentía que ella era la mujer de su vida.

Taylor notó que la respiración de Justin se había descontrolado y en seguida abrió los ojos para comprobar que estuviera bien. Su corazón se estrujó al verlo con lágrimas en los ojos y al instante los nervios la envolvieron.

Se levantó y luego se giró para quedar sentada frente a frente con Justin.

—¿Qué sucede? —preguntó secándole algunas lágrimas— Justin, mírame y dime...

—Es solo que estoy algo sensible, sabes que soy nena para mis cosas —rió levemente y la abrazó—. Te amo mucho.

—Yo igual te amo mucho —respondió en seguida—, por la misma razón estoy preocupada y necesito saber qué te sucede.

—Te extrañé demasiado, Taylor. Estar lejos de ti fue lo peor que me sucedió en este último tiempo. Lloré día y noche, te anhelé demasiado, y ahora —suspiró—, ahora al estar aquí, juntos, solos, tranquilos y abrazados, me puse a pensar en el giro inesperado que toman las cosas y no pude evitar sentirme feliz —le acarició la mejilla—. También me di cuenta de que tengo miedo, tengo miedo de que las cosas vuelvan a tomar un giro inesperado y los dos acabemos nuevamente con el corazón roto, creo que no lo podría aguantar, tu te haz vuelto el aire que necesito para respirar y...

—Shh —Taylor puso su dedo índice sobre los labios de Justin. La verdad es que Justin se había comenzado a alterar y ella no quería verlo mal—. No te cuestiones demasiado, solo vive el momento, tú mismo me lo haz enseñado. Yo tampoco sé que pasaría si las cosas no resultan y acaban verdaderamente mal, pero te amo demasiado y solo pienso en aprovechar esta oportunidad, ambos nos estamos arriesgando, pero lo hacemos porque nos amamos y mucho.

—Sí —asintió, sin dejar de mirarla a los ojos, a esas iris verdes que lo volvían loco.

—Por eso estamos tomando las cosas con lentitud, aunque pienses que besarme y hacerme el amor sea rápido, me da lo mismo, porque tienes derecho a tocarme cuando quieras. Cuando digo que tomemos las cosas con lentitud me refiero a que tomemos los sentimientos y las emociones con calma, que arreglemos los problemas del pasado con calma, esa es la única forma de no rompernos.

Justin asintió y la abrazó, la abrazó un buen rato, refugiándose en sus brazos, en la calidad de su cuerpo y el aroma de su piel. Con Taylor se sentía como en casa, era la única persona que lo hacía sentir cómodo y cálido, además de su madre.

—Entonces... nos estamos tomando las cosas con calma, pero me acabas de decir que igual puedo hacerte el amor.

Taylor rió sonrojada y asintió.

—Entonces estoy un poco más feliz porque esta noche dormirás conmigo —añadió.

Taylor siguió riendo y finalmente rompió el abrazo.

—Creo que es hora de volver, Romeo.

—Estoy de acuerdo, Julieta.

Llegaron a la casa treinta minutos después, y luego de tomar un baño (por separado), cenaron junto a toda la familia.

Taylor se quedó dormida sobre la cama de Justin antes de lo esperado, por lo que él mismo la desvistió y la metió bajo las sábanas.

Sonrió al verla dormir serena y se recostó a su lado.

Taylor despertó con el ruido y en seguida se acurrucó contra el pecho de Justin, planeaba seguir durmiendo, y el pecho junto a los brazos de Justin eran la mejor cama para ella.

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Justinbieber: ...🇨🇦

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taylorjones: Canadá 🇨🇦

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jonesmagicne: Preciosa ❤❤

tayjonesvs: Angel ❤

jerryandjones: ¡Es el mismo paisaje donde está Justin!

jerrymania: Es el mismo paisaje donde está Justin y ella también está en una moto. Sospechoso.

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taylorjones: Él me hizo hacerle photoshop a esta foto porque no le gustaba su cara 😂🤣

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martingarrix: YES YES. Mis chicos ❤

gigihadid: Gay @martingarrix

meredithmickelson: Mi pareja favorita de toda la vida ❤❤❤. Necesito verte Taylor. Muchos buenos deseos a ambos.

fuckmejustin: Maldita perra.

jerryandjones: Morí ❤ LA PUT MADRE JSENKSNSDKS

justinbieber: Era un secreto @taylorjones.

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taylorhill: Buenos días en Canadá. 🖤

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sammcconnell: California got me like:...

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justinbieber: COMO ERES REAL MUJER 😍

justinbieber: linda.

biebsthen: Justin le comentó. Perra.

jerryandjones: @taylorjones

fuckmejustin: Me gustaría que ella estuviera con Justin.

jonesvsmodels: Una de las razones por la cual Justin no merece a Taylor. Se supone que están juntos en Canadá y él le está comentando una foto a esta perra nuevamente.

jonestaylorvs: @jonesvsmodels x2! Él no la merece.

justindrewbie: Que imbéciles. Taylor era la única que se la pasaba con Neels mientras estaba y no estaba con Justin. Deberían agradecer que Justin aún la quiere 😂. Ella no lo merece y eso todos lo sabemos.

sammcconnell: lindo @justinbieber.

taylorjones ha dejado de seguir a sammcconnell.

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¿Somos capaces de llegar a 400 votos?

Se viene drama.

Fame
Justbiebssg

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