Capítulo 16
Algo no va bien

Tres semanas después

YoonGi se detuvo frente a la puerta de la casa donde GulMi y su madre vivían. El joven repartidor tocó el timbre incluso sabiendo que nadie lo recibiría, lo último que supo de la señora Yoon había sido la carta que dejó en la puerta del local seguido de un mensaje al día siguiente en donde le decía a los que la apoyaban en el restaurante que todos debían tomarse unas merecidas vacaciones al menos por un mes o dos, por supuesto que para YoonGi fue muy raro además de una mala noticia, tenía cuentas que pagar, mientras tanto haría lo mismo de llevar comida a domicilio en otro local, sus ingresos no podían detenerse. Había enviado mensajes a su jefa (la madre de GulMi) sin tener respuesta, intentó contactar a la misma GulMi teniendo el mismo resultado. Estaba muy seguro de que eso de las vacaciones era una farsa por completo.

Algo no estaba bien. ¿Por qué ninguna de las dos le respondían los mensajes o las llamadas?, miró alrededor asegurándose de que nadie lo veía, rodeó la casa deteniéndose en una ventana que daba a la sala, al estar un poco vieja no sería problema alguno volver a abrirla, de hecho, con sólo aplicar un poco de presión hacia arriba terminó cediendo.

—Ahjumma debería cambiar esta ventana—murmuró. Dio un salto apoyándose del borde de la ventana logrando entrar—Espero que mi intuición se haya equivocado.

Todo estaba en perfecto orden, no había nada fuera de lo ordinario, sabía lo organizada que la señora Yoon podía ser y parte de esa organización también la había heredado GulMi, la cocina estaba impecable, no había nada fuera de lugar, el comedor estaba limpio, las habitaciones organizadas, en fin, no tenía pista alguna de lo que pasaba. Una vez volvió a la sala revisó en su bolsillo, en su teléfono presionó la opción de llamar a ambas mujeres, la contestadora terminó respondiendo haciéndole chasquear la lengua.

—Tiene que haber algo—miró alrededor colocando una de sus manos en su cintura. En una mesa pequeña junto al sofá se encontraban algunas revistas, eso no llamó su atención, lo hizo fue una hoja que sobresalía de una de ellas, se acercó sosteniéndola en sus manos identificando la letra de GulMi—Es la carta que le dejó—al final indicaba la dirección a la que iría.

—No puedo creer que haya terminado corriendo allí—reprochó—Aunque...ha pasado mucho tiempo para que ella siga allá—rascó su cabeza. Su intuición estaba en lo cierto, algo no estaba bien—Espero que la policía haga algo—se llevó la hoja para acto seguido salir de la casa por la ventana.

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Escuchó la puerta de madera crujir al ser abierta, la joven se abrazaba así misma debajo de esa manta mientras dormía en el sofá con la cadena atada a su tobillo, GulMi respiraba de forma calmada, su rostro se notaba mucho más cansado que cuando llegó semanas atrás, las ojeras resaltaban más, sus ojos lucían hinchados por llorar cada noche hasta quedarse dormida, al cabo de unos días de haber sido secuestrada, TaeHyung comenzó a llevarle ropa nueva, ropa que él consideraba le quedaría mejor, para GulMi no tenía relevancia alguna, sólo quería salir de allí. Cuando debía asearse la llevaba a un río que quedaba no muy lejos, ni siquiera así le quitaba las cadenas del tobillo, incluso mientras se bañaba debía hacerlo con él presente, TaeHyung solía darle la espalda mientras sostenía la cadena en su mano atento de cualquier jalón, su obsesión parecía incrementarse cada día más.

Otra cosa que no podía dejar de pensar era en su madre, según Tae, ella seguía viva, seguía en el ático y le había prometido mantenerla allí hasta que tuviera un plan, para GulMi era extraño y sospechoso que JungKook estuviera aceptando todo eso.

No podía significar nada bueno.

TaeHyung dejó el bolso sobre la mesa donde tenía sus pinceles y pinturas. Le había dado a GulMi libertad para dibujar allí lo que quisiera, al principio ésta se rehusó a hacerlo, ahora no dejaba de pintar por las noches, cuando estaba sola y la ansiedad la atacaba al mismo tiempo dibujaba con lágrimas cayendo por su rostro. Realmente esperaba salir de allí, con cada minuto era como si todo se pusiera en su contra, si se escapaba corría el riesgo de que JungKook terminara encargándose de su madre.

Debía pensar en algo, pero su mente no pensaba en nada.

—¿GulMi?—tocó su brazo moviéndolo un poco—Oye, despierta—susurró en su oído.

La joven de cabello corto abrió sus ojos lentamente, identificó a TaeHyung frente a ella incorporándose somnolienta, restregó sus ojos con un bostezo.

—Te llevaré al río, cuando volvamos te daré de comer.

GulMi notó el bolso y al lado los envases de comida. Tragó con dificultad asintiendo, ella misma había estado notando cambios en sí, tenía más apetito, tenía más sueño, estaba vomitando más también en el pequeño baño de la cabaña (un baño con sólo un lavabo e inodoro), se sentía más sensible con todo. Había estado recordando la conversación que tuvo una vez con su madre sobre los bebés.

"Mamá dijo que los síntomas pueden variar, si mis cálculos no son malos, mi periodo debió haber bajado hace casi una semana y no lo hizo. Nunca he tenido atrasos"

Debía tener mucha, muchísima mala suerte para haber quedado embarazada en la primera vez. Si llegaba a ser cierto (porque algo le decía que lo era) no sabía que hacer, ¿Ser feliz con Tae y el bebé?, ni hablar. Ella nunca pidió nada de eso, ella nunca quiso nada de eso, no de ese modo. TaeHyung caminaba a su lado por el bosque notándola más distraída de lo normal, GulMi apenas se comunicaba con él por señas, las había dejado de usar haciendo lo que él decía.

Ni siquiera le había preguntado por su madre.

JungKook también había estado muy tranquilo, lo cual era inquietante además de un tanto preocupante. La palabra tranquilidad nunca iba con él, sabía que algo tramaba, en el río, mientras GulMi se bañaba de espaldas a él, éste miró de reojo a su novia, porque sí, para Tae ella era su novia. Mentiría si dijera que no había pensado en repetir la experiencia de nuevo sin necesidad de una droga, sabía que GulMi lo rechazaría y era incapaz de obligarla. Miró su figura delgada (quizás un poco más desde que llegó), su cabello húmedo caía por sus hombros, sus ojos siguieron el camino de una gota por su columna teniendo la tentación de tocarla. Por estar distraído, la cadena cayó de su mano haciendo ruido al tocar el suelo, GulMi miró hacia atrás y él tuvo que darle la espalda de nuevo.

Su corazón latía como loco.

Cuando GulMi estaba vestida y limpia, vaciló un poco con la toalla en sus manos al secar su cabello. TaeHyung que esperaba por ella se encontró con su mirada.

—No me he sentido bien...desde lo que pasó—indicó a través de sus señas.

En esas tres semanas, GulMi descubrió que Tae sabía entenderla por completo, sólo había fingido ser inexperto. Quien no la entendía para nada era JungKook.

—No debemos tocar ese tema si no quieres—habló algo avergonzado. En su interior lo había disfrutado, pero no lo suficiente—Ya le dije a JungKook que no debía...—ella lo interrumpió levantando su mano para que se callara.

—Debo ver un médico.

—¿Qué?

—Necesito ver un médico.

—No puedo llevarte al hospital...

—¿Entonces dejarás que enferme?—intentó usar la manipulación.

—¿Crees estar enferma?

—Quiero ver un médico, Tae.

—Puedo atenderte, seguro no es nada grave...—GulMi negó con la cabeza—No puedo dejar que salgas...

—¡Tengo un atraso!—las señas habían pasado muy rápido frente a él. TaeHyung tardó unos breves minutos en entender, levantó sus cejas sorprendido porque el plan de su hermano haya resultado—No me he sentido bien desde que...pasó lo que sabemos.

—¿Crees que estás embarazada?, sólo fue una vez...

—Necesito un médico, ¿Ahora entiendes?

Claro que entendía. Si resultaba ser cierto...entonces JungKook tuvo éxito, si resultaba ser cierto...tendría un bebé con la chica que le gustaba, de repente haber tenido intimidad de ese modo no le pareció tan malo.

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—¿Está seguro que es una desaparición?—el oficial de policía parecía aburrido y cansado de su trabajo.

—Hace tres semanas que nadie sabe nada sobre estas dos personas, intento llamarlas sin tener respuesta y he dejado mensajes también...

—Escuche, pasaré la información a mis superiores, reportaremos la desaparición de ambas mujeres, es posible que esta información se envíe a Jeju debido a la dirección que está dándome.

—Gracias.

El hombre de uniforme le colocó una hoja junto a un lápiz enfrente.

—Escriba todos los datos de ambas personas, cualquier respuesta que tengamos estaremos avisándole.

Para YoonGi fue una respuesta aceptable, GulMi y su madre sólo se tenían entre sí, pero a él también le importaban ambas, les había tomado cariño, sentía que estaba haciendo lo correcto al reportarlas como desaparecidas.

Porque eso eran.

Creanme cuando les digo que conozco a alguien que luego de su primera vez quedó en estado.

¿Qué creen que ocurra en los siguientes capítulos?