3 - Dispositivo "Aishite"
Notas del cap:
Este, juro que no sé porque, se me hace pesado... bueno, siempre hay un capitulo en algún fic que se me hace pesado el poder hacerlo...
¡A leer!
3 - Dispositivo "Aishite"
La mañana había comenzado tranquila, México cocinaba alegremente repitiendo el platillo de ayer, Japón se encuentra jugueteando con sus dedos con un aire nervioso, notando al latino que con teléfono en su pantalón, tararea una melodía que se reproduce como si nada en una lista, Japón toma aire, viendo avergonzado al latino que le entrega su plato y deja el propio a un lado, sentándose por fin luego de terminar el desayuno
-Etto... México-s-san?- pregunta bajito, logrando velozmente la atención del tricolor que come como si nada del desayuno
-¿Si Japón? ¿Qué necesitas?- pregunta amable, notando el leve sonrojo del nipón que, deteniéndose de alimentarse, baja la cabeza incrementando el sonrojo y colocando sus manos sobre sus piernas, apretando las telas del short
-Etto... yo... yo solo... q-quería saber... ha-hay alguien que... que me hace tener... s-sueños... extraños- cada vez, su voz va disminuyendo, México, quien mira aquello curioso, solo inclina un poco la cabeza, sonriendo amable y dando una cálida palmada a la cabeza del adolescente
-¿Qué clase de sueños? Tal vez podría ayudarte- tan pronto como avanza la plática... Japón le explica solo los que alguna vez, fueron sus primeros sueños, con "aquella persona" como lo veía sin ropa, cubierto por una sábana blanca, haciéndole señas para que se acostara a su lado... otros, mas subidos de tono, acercándose ambos para poder besarse y otros mas, donde era abrazado por aquella persona (a la cual nunca describió ni dijo si era hombre, mujer o si era un country) México sonríe enternecido y ríe estridentemente cortando todo tipo de monologo nervioso y susurrante que tenia Japón en esos momentos
-Estas enamorado Japón... es bastante normal tomando en cuenta que estas en esa época donde tus hormonas se vuelven locas, es normal que haya gente que te atraiga de un modo sexual y que quieras tener intimidad con ella... solo estas enamorado- le sonríe divertido pero gentil tratando de explicarle las complicaciones clásicas del cambio hormonal por la pubertad, Japón, quien observa en silencio al latino, enarca una ceja
-Eso ya lo sabía México-san... mi problema es ¿Cómo me acerco a esta persona si apenas lo tengo enfrente pienso en... ¡en mis sueños!- se queja avergonzado y sonrojado, el latino, ahora es el que se siente tonto... era claro que Japón no era un chico normal y que era muy inteligente... ahora, además de rascar su nuca con cierta pena... el latino se mantiene curioso
-...Siempre míralo a los ojos cuando hablen, concéntrate lo mas que puedas en sus palabras y en tu entorno y busca mantener la mente en blanco, lejos de esos "pensamientos impuros y pecadores"- se burla el latino, Japón suspira... poco a poco, la tensión que sentía el nipón al lado de México disminuye al ir escuchando sus consejos y chistes... tal vez algunos albures para coquetear pero que no faltaran al respeto a la persona (en caso de que fuera una chica)
Al final, Japón suspira al tiempo que da las gracias por las sugerencias...
*Nada de lo que me dijo me va a funcionar* dedujo derrotado el menor...
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La tarde paso mucho más tranquila que el primer día... tal y como había dicho su padre Imperio, México no solo había llegado para hacerla de su niñero por aquellas dos semanas, sino que también había ido para atender en persona unos planes para una plaza en un centro turístico de Japón y era más que obvio que, quien mejor podría darle una forma adecuada a los puestos y lo que se presentaría ahí sobre la cultura mexicana, seria ni más ni menos que el countryhumans representante de ese país tan vasto y lleno de colores
Por su parte, Japón se encuentra entretenido, completamente encerrado en su habitación, escuchando atentamente una canción llamada "Bim Bam Toi" que parecía ir acorde con sus sentimientos locos y descontrolados de ese momento... mordió su labio inferior de nuevo, ya deseaba poder acaba con su largo proyecto y poder comenzar con su deseo... pero aun no estaba del todo acabado, se dijo... tal vez, si se esforzaba ese día, conseguiría acabarlo por fin
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-Uff... aquí de verdad trabajan un chingo- suspiro agotado el latino, quitándose el saco del traje y buscando entre sus bolsillos poder abrir la puerta; una vez dentro y dando su clásico gritillo de bienvenida, se encuentra con la casa vacía
-¡Bienvenido México-san!- escucha a lo lejos la voz de Japón apenas sobresaliendo de todo, el latino mira curioso, suspirando cansado, deja el saco, acomoda las llaves y se dirige hacia la habitación de Japón, toca tres veces, escuchando el permiso para pasar, entra y se acerca al adolescente que sigue trabajando en su pequeño proyecto
-Estoy en casa Japón- saluda con un beso en su cabeza y una caricia igual a todas las que siempre le había entregado, Japón sonríe, con un tenue sonrojo y una alegría casi palpable, asintiendo a sus palabras y volviendo a su trabajo; el latino suspira cansado pero sonriente
-Iré a preparar algo rápido para la cena... te veo más al rato, suerte con tu trabajo- se despide, igual que siempre, revolviendo sus cabellos y saliendo poco después de la habitación, cerrando tras de si
En cuanto Japón se encuentra libre de la presencia de México, vuelve su vista a su escritorio, apretando las ropas de su pecho, sintiendo el calor en sus mejillas nuevamente y ese golpetear rítmico que casi lo ensordece... traga en seco y muerde su labio interior... de verdad, no aguantaría mucho teniendo al latino cercas y no poder tocarlo como tanto deseaba... negó con violencia y, luego de sacudir su rostro, vuelve a centrarse en su trabajo... ya no le faltaba demasiado para acabar, se dijo determinado... ya no faltaba demasiado y podría tener al latino a su lado... solo un poco mas
El tricolor por su lado, aun cansado y apartando lentamente la corbata de su cuello, abriéndola pero sin acabar de zafarla, desabotona dos botones de su camisa, subiendo las mangas y acercándose a la cocina para comenzar a preparar algo rápido de comer para ambos... esta vez opta por algo un poco más rápido... un par de homelets a la mexicana, obviamente que sin picante para Japón
Media hora más tarde, termina la comida de ambos y sube la vista a la habitación de Japón... si fuera México (país), gritaría desde la cocina que la cena estaba servida... pero como estaba en casa ajena, sube con cansancio a la habitación de Japón, toca de nuevo tres veces, abre encontrando lo mismo que la ultima vez... a Japón trabajando en serio incansablemente para poder finalizar su proyecto, ambos colindan miradas y el tricolor le sonríe amable
-Listo, la comida esta servida... si no vienes me como tu parte- le sonríe divertido, Japón se aleja por fin de su escritorio, estirando su cuerpo perezosamente y avanzando hacia el latino. Ambos salen juntos, charlan un poco sobre su día a día, se sientan a la mesa y comen ávidamente mientras el latino mantiene un pequeño monologo sobre lo que tuvo que hacer ese día y todo lo que tuvo que soportar... además de que, de buena gente, termino ayudando a algunos obreros y en otras secciones donde no era tan requerido... Japón sonríe divertido de la amabilidad del latino y como se queja después de lo cansado que estaba
La cena termina, ambos agradecen la comida, Japón en especial le agradece al latino por ayudarlo con la comida y por fin, cada uno marcha a su correspondiente habitación... México ha decidido esta vez ni siquiera bañarse... estaba demasiado cansado como para moverse... así que simplemente se quita la ropa, cambia su camisa de botones por una del PRI y cae como plomo a la cama, casi comenzando a roncar al instante
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Era la 1:55 am... Japón sentía sus ojos ardiendo pero mas, el cosquilleo en su entrepierna... después de la cena, no había podido ni siquiera intentar dormir en todo lo que llevaba de la noche... ¿La razón? México le estaba poniendo difícil su idea de no obsesionarse demasiado con el latino...
Primero, el estaba tan concentrado que ni siquiera se dio cuenta de cuando había llegado la noche, solo hasta que escucho el grito del tricolor saludando desde la puerta de entrada, cuando lo noto en la puerta de su habitación, abriendo como si nada, entrando y dándole un beso gentil y su clásica caricia dulce... Japón juraría que su cuerpo había reaccionado a las caricias de aquella mano y en especial, deseo más que un simple beso en la frente...
Pero se negó a moverse, agradeció que el latino venia tan cansado como para no notar sus sonrojos y lo agradeció todavía más cuando, ya justamente cuando el se había calmado, vuelve a aparecer en la puerta de su habitación, con la corbata mal puesta y dejando ver parte de su trabajado pecho haciendo a Japón sonrojar con fuerza y desear saltarle encima para llenarlo de besos... tiene que hacer un esfuerzo sobre humano para estirar su cuerpo y no mirar al latino
La cena se vuelve un martirio para el... ver al country agotado, sonriendo cansado, tratando de contar su día a día mientras la camisa parece hondearse para dejar ver un poquito más de carne y luego, recelosa, ocultar mas piel de la que Japón está dispuesto a dejar de ver... le vuelve la cena difícil a él también. Al final, agradece que el latino sea despistado y crea que es porque el también está cansado que no estaba prestado atención a la conversación... Japón se disculpa y luego de tan agradable cena (porque vaya que hasta Japón se dio un buen taco de ojo) cada uno parte a su correspondiente habitación
Era más que obvio que Japón no iba a poder dormir luego del espectáculo que México le había entregado toda la noche y por fin, a punto de que dieran las 2 de la madrugada; Japón puede cantar victoria al observar su trabajo terminado por fin... observando dentro de un pequeño contenedor transparente de vidrio un aparato de la mitad del tamaño de un arroz entero... Japón sonríe emocionado
Observa su reloj... era tarde... pero no quería perder más tiempo, aun cuando se estaba debatiendo seriamente sobre si permitirse hacer esto al día siguiente o de una vez... opto por hacerlo de una vez... dudaba mucho que pudiera aguantar hasta que llegara la siguiente noche. Toma un hondo suspiro y, tomando una pequeña jeringa de medicina que había tomado de la enfermería de su escuela, junto con uno de esos diminutos frasquitos con un liquido verdoso casi turquesa que había hecho en clase de ciencias y que había guardado para la ocasión; el liquido, se dijo, era una diminuta dosis de sedante combinado con somnífero... si, indiscutiblemente iba demasiado adelantado para su edad... y eso, justamente en estos momentos, lo agradece. Tomo entonces un hondo respiro y, tomando también de esas agujas de acupuntura que había estado aprendiendo a utilizar, sale por fin de su habitación, determinado a su camino...
... ... ...
Entra de nuevo, con sigilo a la habitación del mexicano, encontrándolo ahora boca abajo, abrazando una almohada al tiempo que la muerde de una esquina, farfullando cosas intangibles para el nipón. Japón toma un hondo suspiro, sacando de entre todo lo que trae, el aguja para acupuntura, toca con uno de sus dedos por la zona del cuello, colocando poco después la aguja larga en una zona que se había memorizado a la perfección, el latino solo suelta un quejido de dolor... sus ronquidos se detienen pero su respiración continua tranquila
-Listo... se supone que con eso no despertara- se dice nervioso, subiendo ahora a la cama; con ayuda de sus piernas, sentándose al lado del latino mientras prepara todo... el pequeño dispositivo lo deja caer en el liquido turquesa y después, con la aguja recién sacada de su empaque, atornillada y lista para utilizar, introduce el liquido que iba a utilizar... apenas menos de 200 ml... se dijo que no era demasiado
Se giro a ver al "dormido" (en realidad inconsciente) country tricolor y, picando con cuidado la zona cercana al hueso de su columna, acerca la aguja que, con sumo cuidado entierra en la piel tricolor. Escucha un quejido de dolor pero el latino nunca se mueve ni se despierta... una vez que Japón se ha asegurado de dejar todo el liquido dentro del mexicano, saca la aguja y se aleja algunos pasos de la cama... puede ver al tricolor gruñendo y tratando de removerse pero solo creando pequeños espasmos... Japón siente que su alma lo abandona cuando lo ve por fin apoyarse de sus brazos para enderezar su pecho pero cayendo con cuidado de vuelta a la cama cambiado su pose (aunque aun manteniéndose boca abajo)
Suspira aliviado cuando observa la tranquilidad del latino y, esperando apenas un minuto, se acerca de nuevo, solo para quitar con velocidad la aguja de acupuntura y observar un instante mas al latino... muerde su labio viajando su mirada hacia el trasero tricolor... quiere tocarlo indiscutiblemente pero no puede... opta por salir con velocidad de la habitación dejando en paz al tricolor... solo por ahora, se juro...
Mañana seria un día que, sin lugar a dudas seria eterno en su luz... pero la noche, algo que esperaba con ansias y que no acabara pronto...
Notas finales:
Les dije, este me costó trabajo y ni sé porque... pero eso si ¬u¬ ya el siguiente capítulo es el bueno acá... el lemon esperado y deseado muajajajajajajjajaja
Datos extras:
*En teoría... este viene a ser el tercer día (dentro del fanfic)
*Japón acá dando indirectas a México y el pendejo sin entenderlo... aunque, de buen modo, México trato de darle consejos... consejos que al final, a Japón no le van a servir de nada XD
*La canción "Bim Bam Toi" de verdad existe, la estoy escuchando y es mi inspiración para este fic... si quiere buscarlo ¬u¬ esta zukulenta... aunque no sea nada comparada con la de S&M de rihhana ¬u¬
*México acá de pinche papasito rico ¬u¬... un hombre, me parece atractivo así, con la corbata medio puesta y de dos a tres botones sin abotonar... ahora, imaginémoslo con México... Japón realmente fue fuerte para no lanzársele encima XD
*Como dije, lo bueno viene el siguiente capítulo... pero si, hasta Japón tiene ya la necesidad de tomar al mexicano
*Todo lo que hizo y lo que está haciendo será explicado en el siguiente cap, no desesperen
Por ahora, para no llegar a spoilers, le dejo hasta aquí XD
¿Les ha gustado?
Que tengan lindo día
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