Notas del fanfic:

Advertencia: si bueno... esta idea está inspirada en realidad a un... doujinshi... Si... un doujinshi que vi alguna vez hace algún tiempo con una temática similar... ADVIERTO que esto es SHOTACON... la idea original es un adulto x niño pero... si somos honestos, esto es un niño x adulto... ya verán... ¡Están advertidos!

Según mi conocimiento; Shotacon es cuando se trata de un adulto por un niño y, el termino shota, cuando ambos son niños... si no, de todos modos, ya les explique y desde el resumen vienen las edades ¬¬

Y por si no quedo claro. Japón, de 14 años, será el seme (dominante) de México...

Notas del cap:

Esto es pecador ¬u¬ de los míos hermosos... vamos a ver lemon (no necesito decir que es explicito y con bdsm o si?) pero un poco después... primer iremos dando la trama y después el lemon pero les va a gustar y va a valer mucho la pena... ahora, con respecto a la personalidad de Japón... me baso al concepto de que, cuando uno comienza con la pubertad descubre cada cosa en internet... principalmente lo que tiene que ver con el sexo... se descubren las paginas porno y uno va dando con ciertas "cositas/fetiches" que les van excitando... es el hecho con Japón...

Y si no les gusta, de todos modos, esto es un fanfic, no se aceptan en la vida real conductas pedófilas, NO busco insultar a nadie... carajo, esto es un pinche fanfic, una idea cochina y lujuriosa para que todos nos vayamos al pinche infierno

¡Salve Satán!... que diga

¡A leer!

1-El niñero. México

-Ya te dije que no quiero una niñera oto-san- se queja Japón delante de Japón Imperial quien termina de arreglar sus maletas para salir a su siguiente reunión; una vez escuchando por enésima vez en lo que lleva del día, los reclamos de su hijo de 14 años, es suficiente para hacer a su mirada girar con cierto nivel de fastidio; si bien, el joven parece agachar un poco la cabeza, de todos modos, vuelve a ver con determinación a su padre

-Ya soy suficientemente capaz de cuidar de mi mismo, no necesito de una niñera- se queja nuevamente, Imperio suspira cansado

-Necesito ir a la conferencia que se dará en Uk y no puedo llevarte en esta ocasión Japón, entiende, no puedes quedarte tu solo, dos semanas enteras, siendo menor de edad- recalca molesto las costumbres de su país, Japón hace un puchero y sus orejas felinas bajan en señal de desagrado, Imperio desvía la mirada con fastidio

-De todos modos, ya le llame y también le conviene venir... tenemos planes para un centro turístico de sus tierras y servirá más que él esté aquí haciendo los preparativos- gruñe, tomando sus maletas y saliendo de su habitación, notando a su hijo que, aunque está molesto, toma una de las maletas y le ayuda a bajarla para que Imperio no cargue con todas

-¿Y además es uno de esos hombres riquillos que solo buscan dinero a costa nuestra? ¡¿Es en serio oto-san?!- sus reclamos se detienen de golpe, cuando, al seguir a su padre, este gira bruscamente haciendo que también calle bruscamente sus reclamos y ahora sí, baje la cabeza al saberse mirado de mal modo por su estricto padre

El silencio tenso, que se ha creado por ambos, es cortado bruscamente cuando el sonido de un timbre retumba entre ambos countrys. Imperio Japonés suspira, dejando de ver a su hijo y dirigiéndose a la puerta; en cuanto abre, Japón, quien no quería ver quien sería su niñera, pega un brinco; sus orejas agachadas en regaño y molestia, se elevan altas además de su pequeña colita felina como si estuviera cazando

-¡¿Qué honda compa?!- anuncia alegre una voz que obliga a todos a verlo, Imperio Japonés sonríe divertido de ver a su amigo tricolor saludando desde la puerta, trayendo consigo una pequeña olla de barro con un montón de dulces y frutas de sus tierras que entrega a Imperio apenas se ven y el nipón le permite pasar

-Increíblemente, has llegado a tiempo por primera vez- saluda divertido el japonés, México sonríe de medio lado divertido y carraspea tratando de ponerse serio y derecho

-Por supuesto que tengo que llegar temprano para variar... después de todo, estoy ante mi amigo y mi colega de finanzas- alude orgulloso, mostrando un traje elegante con todo y corbata, Imperio japonés ríe divertido, acomodando la corbata de su amigo y viéndolo algo burlón

-No son finanzas México; son negocios- sonríe divertido de ver como ahora la pose seria y orgullosa del tricolor cambia a una avergonzada y entre carraspeos termina riendo

-Si bueno... tu me entendiste- Imperio ríe y por fin, los adultos notan a Japón quien, con un mirar emocionado, observa a México

-¡Japón!- grita alegre el mexicano corriendo hacia el adolescente y abrazándolo comienza a girar con el pequeño y a llenarlo de besos por las mejillas; el pequeño niño se sonroja al tiempo que ríe divertido de las atenciones hacia su persona; Imperio sonríe enternecido de ver al menos que su hijo ya no esta tan en desacuerdo con la idea de tener una niñera y eso le alivia... le preocupo por un momento que Japón aun se siguiera negando

-Bueno, si ya terminaron de girar ustedes dos, me tengo que ir ya- anuncia Imperio al par de amigos que siguen riendo y hablando entre ellos en pequeños murmullos traviesos, México pega un brinco y, bajando velozmente a Japón comienza a ayudar a Imperio a llevar todas sus maletas y a acomodarlas dentro del maletero del auto para ayudarle a acortar tiempos

... ... ...

-¡Ten un buen viaje oto-san!- despide el pequeño con mano alzada sintiendo a su lado al mexicano que también le despide con una mano, viendo ambos countrys como Imperio marcha en su auto en dirección del aeropuerto

-¡Te vas por la sombrita!- anuncia alegre; en cuanto el auto de Imperio desaparece en la esquina de la calle, México baja su mano hacia el hombro del adolescente, sonriendo de medio lado divertido como malévolo, siendo, al instante, correspondido por una sonrisa similar de parte del pequeño nipón

-¿Tienes planes niño?- la pregunta da hincapié a un destino que hace brillar la mirada del pequeño que asiente emocionado

-¡Voy por mi chaqueta!- anuncia veloz entrando a la casa y saliendo casi al instante con chaqueta, dinero y llaves, tomando la mano del country tricolor y jalándolo hasta el auto que conduce el mexicano (*)

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La noche se cierne tranquila sobre las calles de Japón, dos countrys ríen alegremente mientras regresan en vehículo al hogar del nipón. México conduce, limpiando un poco del confeti que hay en su cabello y observando al pequeño niño de catorce años que limpia con ayuda de un pañuelo un poco de espuma de su cabeza

-Llegando tendremos que bañarnos para no ensuciar demasiado la casa- se ríe el latino, Japón ríe también, dando un pequeño brinco y desviando la mirada un segundo con una sonrisa maliciosa que el tricolor no nota por seguir conduciendo

-¿Nos bañamos juntos México-san? Hace mucho que no podemos pasar tiempo juntos- pide, con ojos de cachorro, el latino lo observa un segundo y, al observar aquel gesto de cachorro suplicante, no puede evitar sonreír divertido y asentir tranquilo, sin ver malas intenciones por bañarse con un niño que ha visto desde que era un bebe

-Si ¿Por qué no? Después de eso ¿Qué quieres cenar? ¿Comida corrida, comida mexicana o ya tienes comida preparada?- pregunta el latino sin tomarle demasiada importancia a los planes del menor, Japón se lo piensa un poco, sonriendo emocionado

-¡Onegai! ¡Comida Mexicana!- anuncia emocionado, el latino lo observa por unos segundos, sus orejas alzadas y alertas, su colita felina moviéndose felizmente de lado a lado con tranquilidad y la elegancia de un felino, México sonríe, estirando una de sus manos para palmear dulcemente la cabeza del adolescente

-Muy bien, hare unas enchiladas sin picante para ambos- sonríe correspondiendo la emoción del adolescente. Ahora, lo que resta del camino, México escucha con atención los relatos de Japón, lo que había estado haciendo en la escuela, como va con sus calificaciones, sus contadas amistades y lo estricto que es su padre para ayudarle a ser mejor persona... el latino sonríe, asintiendo y dando de cuando en cuando uno que otro comentario para ayudarle al joven a ver las razones de su padre... o para sacar algún chiste inocente que haga reír a ambos nuevamente

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-¡Iré a preparar el agua para el baño!- anuncia rápidamente el pequeño apenas sale del auto, encaminándose al baño de su hogar, el latino ríe por lo bajo, asintiendo; en cuanto llega y deja las llaves en el pequeño perchero, nota que hay una llamada directamente de Imperio Japonés en su telefono

-Compa! ¿Qué tal el viaje? ¿Llego con bien?- saluda alegre el latino, escuchando un suspiro cansado de parte del contrario

-Agotador, tuvimos algunos retrasos pero pude llegar a tiempo... ahora tengo que esperar a que se terminen de firmar los contratos que faltan con Alemania y con Italia- suspira el nipón dejándose caer en la cama de su hotel, el latino sonríe suavemente, avanzando por la casa para ir preparando lo que iba a necesitar para la preparación de la comida

-Ay hombre, piensa en esto... en un par de horas estarás de regreso en tu hogar, tu y Japón serán secuestrados por mi y los llevare a mis tierras sin que puedas evitarlo; te amarrare y te amordazare a ti y a tu hijo, los ocultare en una maleta y me los voy a secuestrar para que se queden unas semanitas en mis territorios y ya cuando me haya cansado de ustedes los dejo libres- lo siguiente que escucha el latino es una estridente risa de parte de Imperio que muy poca gente había tenido la oportunidad de escuchar de su parte y que solo el mexicano sabia sacarle a alguien tan serio

-¿Y que se supone que haremos mientras estemos secuestrados en sus tierras? ¿Señor México?- pregunta divertido el japonés, recargándose en la cama, a punto de caer dormido pero prestando más atención al monologo del tricolor que comienza a idear un plan para nada seguro y lleno de lo que promete ser un día desastroso pero divertido

Esto, siempre calma a Imperio Japonés de su eterno estrés...

... ... ...

-Te amarrare y te amordazare a ti y a tu hijo, los ocultare en una maleta y me los voy a secuestrar...- Japón que iba caminando emocionado de regreso para avisarle a México que ya estaba el agua lista, se frena al escuchar la risa del latino y sus planes, el nipón se frena, oculto tras un muro, escuchado la conversación de México y como, entre risas, hace planes para los tres fuera de sus territorios

Un tenue sonrojo lentamente se acrecienta en las mejillas de Japón... siempre era lo mismo. Por algún motivo, México siempre hablaba de secuestrar a ambos countrys y llevarlos a sus tierras, nunca pudo ser tomado como algún tipo de amenaza, era su forma de ser de todos modos y jamás les hizo daño... pero...

Pero por algún motivo extraño para Japón; últimamente estaba teniendo muchas imágenes mentales donde... el que era amarrado y amordazado era el latino, completamente ciego de sus sentidos, expuesto...

El corazón de Japón golpea con fuerza en su pecho, sus mejillas se sienten demasiado calientes y siente que su cabeza le va a reventar ante la imagen mental que tiene... verlo amarrado, con una soga en la boca para callarlo y una venda negra en sus ojos, imposibilitado a moverse, sudando y el... abrazándolo como si fuera un pequeño osito de felpa...

*Ca-Cálmate Japón... tienes que calmarte* se dice a sí mismo con vergüenza, tomando sus mejillas con fuerza y tratando de tranquilizarse. Al escuchar con fuerza la risa de México y como sigue hablando con su padre Imperio, Japón opta por dar media vuelta y salir de vuelta al baño para mojar su rostro con agua fría y tratar de tranquilizarse

... ... ...

-¿Y cómo esta Japón?- pregunta Imperio acabando de reír con fuerza, México también se ha tranquilizado y comienza con un monologo sobre lo que hicieron ese día; aun cuando Imperio no esté muy de a cuerdo que Japón se divierta tanto y olvide sus estudios... sabe que con México a la cabeza, era imposible ser responsable... igual, sabía que su hijo necesitaba un poco mas de aire luego de estar encerrado por tanto tiempo en su habitación, concentrado en un proyecto que llevaba poco mas de 6 meses desarrollando

-Parece ser que se han divertido sin mi- anuncia mas aliviado, México ríe un poco, haciendo la promesa de que apenas regrese lo llevarían a divertirse también, Imperio sonríe subiendo la mirada hacia el techo del hotel

-Puede que esté pensando en tomar tu palabra sobre unas vacaciones... déjame pensarlo un poco mas- y tuvo que alejar el teléfono de su oído al escuchar estridente grito de victoria del mexicano...

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El suave sonido de gotas de agua era tranquilizante junto al pequeño vapor que desde hacía rato brotaba dentro del baño. México y Japón habían terminado de bañarse y ahora disfrutaban juntos de la enorme tina de baño que tenía el nipón en su hogar, ambos charlaban tranquilos, sonriendo y riendo por chistes ocasionales. Japón utilizaba todas sus fuerzas para no fijarse tan descaradamente en el cuerpo del mexicano y como se veía marcado no solo por sus músculos, sino por las cicatrices de guerra y sus tatuajes

Siente sus mejillas calentarse al ir bajando la mirada hasta llegar a la zona semi oculta por la espuma y el agua, más abajo, estaba el vientre de México y, la simple imagen borrosa por el agua, ya lo hacía sentirse emocionado y nervioso, hasta que nota una mano en su cabeza acariciándolo amablemente

-Japón, es hora de salir del baño, ya se te está subiendo el calor y no quiero que te desmayes- le sonríe México, poniéndose de pie primero, saliendo de la bañera completamente desnudo y empapado; Japón siente sus mejillas calentarse aun mas en cuanto observa no solo el paquete del tricolor, sino su espalda y su trasero que desea tocar

-¡Japón!- grita México nervioso cuando ve un pequeño hilo de sangre brotando desde la nariz del pequeño que no deja de verlo y que ahora, muestra un gesto mareado... ok... el baño caliente le afecto más de lo esperado al pequeño

Notas finales

*Como cuando te estás planteando si hacerlo solo un oneshot largo y zukulento o hacerlo un fanfic largo y zukulento... y acabas volviéndolo un fanfic ¬u¬

Bueno, habiendo acabado el primer capítulo, puedo explicar que, la trama como tal, solo es de 4 capítulos (que ya tengo acabados) junto a una serie de lemons extras sin mucho contexto y lo que aun no tengo acabado es un final alternativo que ¬u¬ bueno... no daré spoilers de mas... muajajajajajajajaja

Datos extras:

*México tiene 26, Imperio Japonés tiene 31, Japón 14

*Es cierto que Japón puede cuidarse él solo, su padre lo ha hecho auto suficiente... pero... no es tan buena idea dejar solo a un adolescente de 14 años, solo, por dos semanas

*Así como quien no quiere las cosas Imperio también gusta de México como algo más que amigos y México... México es México... este wey esta pendejo y ve a Imperio como un amigo de muchos años y obvio, no siente nada por Japón mas allá de amistad, prácticamente lo ve como su hermanito pequeño o casi casi, como si hijo

*México esta pendejo pero no es malo... solo... le da "a forma de juego" por decir que va a secuestrar a la familia y llevarla a su hogar... esto, lo lleva diciendo desde aun antes de que Japón naciera; así que, por tanto, Japón lleva toda su vida escuchando "como algo normal" sobre el secuestro; como esta en la pubertad, está investigando esas cosas y termino dando con una de esas paginas bdsm y bueno... una cosa llevo a la otra y ahora Japón fantasea con un México secuestrado y a su merced... se los dije, este fic era para pecadores ¬u¬

*México es crush de Japón desde que este era pequeño, pero se afianza este "amor" cuando comienza a sentirse atraído por el latino cuando tenía 10 años e incrementando lentamente

**(Casi lo olvidaba) Porque me gusta. Japón tiene las claaaaasicas orejas y cola de gato... pero, aquí aun no es trapito XD solo tiene las orejas de gato y ropa normal de chico de su edad

*Originalmente Japón debía de tener 13 años pero lo siento muy chiquito... y con 15 se me hacia demasiado grande... al final, lo deje de 14... no lo siento ni tan chico ni tan grande

*Reitero... México no es el pedófilo... Japón será el asalta cunas... o sea, el que se la va a terminar metiendo a México

Bueno, creo que he explicado suficiente de esta idea... ¬u¬

¿Les ha gustado?

Que tengan lindo día

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