Enfermedad
Padme y Anakin conducían de regreso a casa una noche cuando vieron a Han saliendo de una farmacia de turno visiblemente apurado, lo vieron tomar un taxi y entrar desesperado a él. Ambos cónyugues se miraron y supieron que debían seguirlo. No habían sabido nada de él desde que cortaron contacto, aunque sospechaban que su hija seguía en contacto con él, porque su hija lo amaba, lo cuál ellos no entendían, después de todo Han estaba incluso viviendo con Mara, la que fue su amante, eso era lo último que habían sabido de él.
Siguieron el taxi, hacia un barrio que era conocido por estar aislado de la ciudad, era un barrio abandonado donde casi nadie podría vivir. ¿Han estaba viviendo allí? Comprobaron que si cuando bajó del taxi corriendo y entró a una casa que más bien parecía una casa abandonada. Las paredes un poco destruídas, y ni decir del techo, ese lugar debía tener goteras por donde se le mirara.
- Ani ¿Crees que es buena idea?- preguntó Padme tomando su mano cuando Anakin hizo ademán de bajar del auto
- Quiero saber que es de ellos- dijo Anakin y Padme asintió.
Entrar a hurtadillas al lugar donde vivían dos chicos, eso era muy adolescente de su parte, pero ella también tenía curiosidad.
Han ni siquiera se preocupó de cerrar la puerta, hacia frío y llovia fuertemente esa noche, y Mara, su mejor amiga en la vida estaba terriblemente enferma.
- Mara, estoy aquí, estoy aquí, traje la medicina, pude comprarla- dijo Han tocando la frente de Mara que ardía en fiebre
- Sabes que no nos alcanzaba Han- dijo Mara muy débil- Ni siquiera nos alcanzaba para el taxi ¿Qué demonios hiciste ahora?- preguntó ella
- No importa, estarás bien, estarás bien y taparemos esa horrible gotera- dijo Han mirando como el agua caía a chorros por una esquina de la casa
- Al menos podemos decir que tenemos una cascada natural en la casa- dijo Mara y Han rió.
Han la veía y no sabía que hacer, Mara se había negado a entrar al taxi para ir al hospital, diciendo que no tenían seguro médico para que fuera gratuito porque no trabajaban con contrato, y que no tenían dinero para pagar por la atención. Mara no estaba equivocada, pero Han temía que su resfrío fuera algo más, tal vez una neumonía o algo.
Mara había estado trabajando en los congelados en el supermercado, llegaba con mucho frío a casa, y no había una estufa o algo para poder calentarse. Indudablemente hasta una mujer tan fuerte como ella podía enfermarse.
Aún no tenían camas, y los sillones no eran para una chica enferma, por lo que Han junto todas las mantas y las tendió en el suelo haciendo una medianamente comoda cama para Mara. Pero llevaba dos días así y él recién había conseguido para la medicina. Incluso había intentado cargarla dormida al hospital pero de alguna manera ella se negaba.
Han solía hervir agua y mojar toallas y ropa para hacer compresas calientes que le dieran un poco de calor a su cuerpo, mientras lo alternaba con paños fríos en la frente para bajar la fiebre. Pero ahora ni siquiera eso estaba funcionando.
- Han- dijo la voz ahogada de Padme mirando la escena. Han miró hacia la puerta viendo a sus ex suegros parados ahí mirando con horror la escena. Han se sonrojó, así era como vivía, en un basurero, sin siquiera una cama para su amiga que había enfermado. Se volvió hacia otro lado demasiado avergonzado.
Padme y Anakin se miraron ¿Realmente ellos vivían así? No podían dejarlos así. No importaba que tan molestos estuvieran con ellos, no podían simplemente dejarlos así.
Mara miró a Han asustada, aunque le costaba incluso mover los ojos sin marearse. ¿Ellos habían visto que vivían juntos? Bueno, sabía que lo sabían pero ahora ¿Estarían mas molestos con ellos?
- Ve por las cosas de Mara, documentos, todo- dijo Anakin a Han y él lo miró confundido- No me cuestiones Han, ve ahora- dijo Anakin y Han sin saber por qué ni que hacia, fue y lo hizo tomando las cosas de Mara.
Vio como Anakin cargaba a Mara a pesar de sus protestas y Padme la cubría con una manta en los brazos de su esposo.
- Por favor no, no tenemos dinero para pagar el hospital- decía Mara que estaba a punto de cerrar los ojos.
- Silencio- dijo Padme mirándolos a los dos- Iremos al hospital ahora mismo y no quiero volver a escuchar la palabra dinero- dijo Padme y Han asintió algo avergonzado.
- Con cuidado, vamos, estarás bien- dijo Anakin sacándola de la casa, Mara estaba mareada y le dolía todo el cuerpo, por eso él la llevaba con mucho cuidado.
Anakin la dejó en el asiento trasero, y Padme entró con ella recostando la cabeza de Mara en sus piernas.
- ¿Cuántos días lleva así?- preguntó Anakin a Han
- Empezó a enfermar hace una semana, pero así lleva dos días- dijo Han
- Probablemente sea una neumonía severa- dijo Padme que ya había visto casos así.
- Pensé lo mismo- dijo Han
Llegaron con Mara al hospital y Han la cargó mientras Padme la cubría de la lluvia y Anakin se encargaba de entregar los documentos de Mara.
La ingresaron de urgencias al hospital y la pusieron en cuidados intensivos inmediatamente. Tenía neumonía como temían, y lograron llegar a tiempo al hospital, porque tenía dificultades para respirar y estaba empezando a aparecer líquido en sus pulmones. Aunque finalmente estaba fuera de peligro.
Los Skywalker estaban allí mirando a Han que ahora estaba en la sala con Mara sin saber que ellos estaban mirando desde afuera.
- ¿Cómo fue que los llevaste Han?- preguntó Mara que apenas si había despertado luego de la interverción.
- Ni siquiera sé como llegaron, probablemente me siguieron- dijo Han tomando su mano- Vaya susto nos diste- dijo Han y Mara negó.
- Tenemos que pagar esto- dijo Mara y Han asintió, ya encontrarían la forma de devolver el dinero
- Por ahora solo recupérate- dijo Han sonriendo mientras acariciaba su cabello- ¿Quién mirará la foto de Luke y llorara en medio de la noche si te pasa algo?- bromeó Han y Mara rodó los ojos aunque le dolía hacerlo
- Oh, me recuperaré, solo para escuchar como lloras porque Leia no te creyo, porque se veía hermosa con ese vestido blanco- decía Mara y Han sonreía.
- Somos realmente unos idiotas- dijo Han divertido- Aunque Luke es un buen chico, yo también lloraría por él si no me gustara su hermana- bromeó Han y Mara sonrió, quedándose seria de pronto cuando notó a los Skywalker.
Padme y Anakin habían escuchado todo, no les quedaba todo claro, pero si tenían una cosa en claro. Han y Mara no volverían jamás a ese vertedero que tenían por casa.
- Vamos Han- dijo Anakin mirando a Han
- ¿Ir? ¿A dónde?- preguntó Han nervioso- Mire, suegro, digo Anakin- dijo nervioso- No hice nada malo esta vez, así que si quiere dejarme otro ojo morado que sea el derecho porque el izquierdo Luke ya lo había dejado así- dijo y Han negó, aunque Padme estaba riendo y Mara también.
- Por más que me tienta la idea- respondió Anakin con sarcasmo- No lo haré, ahora vamos- dijo tirando de Han fuera de la sala
- ¿A dónde?
- A por sus cosas, no pondrán un pie allí nuevamente- dijo Anakin y Han lo miró confundido
- Pero no podemos costear otro lugar, por eso estamos allí, no es que nos guste- dijo Han tratando de explicar su miserable situación económica.
- He dicho que no volverán allí
- ¿Dónde quiere que vayamos entonces?- preguntó Han- Si tuviera cualquier lugar para darle a Mara la oportunidad de recuperarse bien lo haría, pero es lo que nuestro salario nos permite- dijo Han realmente avergonzado
- Iremos a mi casa y se quedarán allí el tiempo que sea necesario- dijo Anakin y Han abrió los ojos enormemente
- ¿A su casa? Pero- comenzó a decir
- Es mi última palabra- dijo Anakin y no dejó que Han dijera una sola palabra más.
Lo habían hablado con Padme y ambos habían estado de acuerdo. El tema de sus hijos lo verían después. Después de todo, las cosas al parecer eran diferentes a lo que habían estado creyendo todo ese tiempo.
Padme le explicaba con tranquilidad a Mara lo que harían y Mara se negó, diciendo que no podría abusar así de su confianza, y que no quería incomodar a Leia, tampoco a Luke, pero Padme era tan terca como Anakin, jamás admitiría un no por respuesta. Aunque ni siquiera esperaba una respuesta, la decisión estaba tomada.
Han recogía sus cosas con ayuda de su ex suegro que miraba con una ceja arqueada el lugar. Estaba limpio y ordenado, les daba el crédito en eso, pero no había cama, no había refrigerador, no tenían agua caliente para ducharse, no tenían luz más que en la sala, y al parecer solo cocinaban comida fría, porque ni siquiera tenían cocina.
Terminaron de sacar las pocas cosas que tenían y las cargaron en el automovil. Han miro su casa y suspiró, no podría jamás terminar de agradecerles a los Skywalker por la ayuda.
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