─El auto está listo Señor Kim.

─Gracias.

Le abren la puerta y el rubio entra dándoles la dirección, obviamente no se habían dado cuenta de que los venían persiguiendo, por lo menos estaba custodiado por muchos guardias de alta seguridad, por eso aquella persona no hacía nada, no tenía cómo acercarse al rubio.

Toma su móvil siguiendo por detrás al auto negro, no quiere perderlo de vista y perder su dinero.

─Señora, al fin salió. ─Le comunica.

─Perfecto, actúa bien está vez y no dejes que huya. Bastante me fallaste con lo del incendio.

Dice mientras se limaba las uñas.

─En cuanto esté solo, daré comienzo, lo llevaré a dónde me pidió.

─Perfecto. No quiero fallas está vez o yo misma te corto la cabeza.

Cuelga.

El tipo se molesta, está detrás para no ser visto, pero lo que no sabía era que a él lo vigilaban a él también, era tan despistado que no lo veo venir.

Cuando llegó a su destino miro al rubio bajar y entrar a una cafetería, se quedó estacionado observando al rubio con una pelinegra más joven. Se sentaron en el ventanal comiendo algo, tenía que esperar pues aún estaba vigilado.

Taehyung por otro lado disfrutaba de su pastel, Momo le lleno de regalitos para su bebé y también le envolvió el pastel arcoiris de leche. Ambos estaban contentos de verse después de todo lo que había pasado.

Unos minutos después Tae salió de la tienda rumbo al edificio de su novio, el tipo aquel lo siguió. En cuanto llegó, Taehyung salió siendo resguardado por más hombres, aquel tipejo no tenía ni una sola oportunidad, no tenía nada. Estaba desesperado por raptar al rubio, pero sus planes se frustraron cuando un hombre de color le tocó la ventanilla.

Sin sospechar, el tipo la bajo.

─¿Qué quiere? ─dijo tosco.

El hombre de color con la placa de Jeon en su pecho lo hizo darse cuenta.

─Baje con cuidado y entré a ese auto si no quiere morir y que nadie sepa dónde se calcinó su cuerpo.

Señala el auto de atrás, el tipo estaba por tomar su arma, pero fue más astuto el guardia de Namjoon.

─Está rodeado, no haga las cosas complicadas y salga sin el arma.

Voltea a su alrededor dándose cuenta que efectivamente, estaba rodeado por personas camufladas. Dejó el arma en su asiento y abrió la puerta para bajar, camino al auto sin poder hacer nada y se lo llevaron.

Obviamente esto era parte de la mafia italiana de Kim Namjoon.

Nadie se mete con la familia.

Taehyung entró contento a la empresa, obvio las miradas cayeron en su bastón y en la forma que camina, se sintió un poco apenado y avergonzado, tenían esas miradas llenas incredulidad en sus expresiones; de seguro preguntándose cómo es que el guapo Jeon Jungkook se fijó en el.

Empezaba a temer que era una mala idea hasta que una mujer pelinegra alta les llamó la atención a todos.

─¡Qué es lo que están viendo! ¡Pónganse a trabajar! ¡Por si no lo saben, es el novio del señor Jeon, así que dejen de verlo o le haré saber sobre su falta!

Todos se pusieron a trabajar inmediatamente, claro que le tenían miedo a la mujer ya que se veía estricta.

Ella se acerca a Taehyung con una relajada sonrisa.

─Lo siento joven Kim. Ya sabe cómo es esta gentuza. Irá a ver al Sr. Jeon ¿verdad?

Tae asintió tímido.

─Si, pero jamás he venido ¿sabe dónde está su oficina?

─No se preocupe, yo le llevo, por aquí.

Se dirige al elevador, entra y presiona el piso 20. Esto era un poco incómodo, así lo siente Taehyung. 

─Lamento lo de los trabajadores.

─Descuida estoy acostumbrado.

─Pues no debería, yo también estoy harta de esas personas que nos miran mal solo por algunas cosas que para ellos es fuera de lo normal del ser humano.

Taehyung la observa porque dio a entender que ella también tiene algo, ella le sonríe y alza su pantalón negro holgado mostrando que pierna de metal.

Vaya.

─No tengo pierna, la perdí hace cuatro años en un accidente de moto.

─Lo siento mucho.

─Nunca deje que nadie le mire mal, todos somos hermosos aunque nos falten partes.

El elevador se abre. Salen y se dirigen a la oficina de Jungkook. Ella era muy buena persona, ya no sentía esa incomodidad, ella le entendía.

─Cualquier cosa me llama, me llamo Jeon Somi, para servirle señor Kim. ─Hace una reverencia.

─Muchas gracias, señorita Jeon, y gracias.

─No es nada. Tenga un buen día.

La chica le hace una reverencia y se retira. Taehyung se siente feliz, no sabía que su novio tenía empleados con discapacidades, eso era muy lindo de su parte ya que no en cualquier lado los contratan.

Por eso él quiere abrir una empresa donde ellos puedan trabajar y ganar más dinero que lo que les da el gobierno, era su sueño, además del patinaje.

Observa la gran puerta y la abre con cuidado, entra y ve ahí parado a su novio, pero no estaba solo, estaba dos personas más con él. Al ver de quién se trataba su pecho se apretó, se quedó sin palabras mirando aquellas dos personas.

Jungkook se sorprendió al verlo aquí.

─¡Amor! ¿Qué estás haciendo aquí!

Se acerca a él, Taehyung deja caer el pastel que le venía a traer por lo muy sorprendido que estaba.

─Nene...

Lo toma de la cintura pero Tae lo aparta.

─¡¿Qué rayos hacen ustedes aquí?! ─Les grita. A lo que sus padres se sorprenden.

─Hijo, qué alegría verte, no puedo creer que al fin... ─empieza a decir la mujer.

Tae la interrumpe.

─Por favor déjate de cosas ¿que rayos hacen aquí? ─aprieta fuerte su bastón mirando con rencor y dolor aquellas dos personas que le dieron la espalda.

Son sus padres, después de tanto tiempo al fin los veía, aunque para ser sinceros, no quería verlos más.

─¡No nos hables así, aún somos tus padres y nos debes respeto! ─gritó su padre.

─¡¿Respeto?! ¡Por favor! Ustedes no merecen respeto de nadie, me abandonaron. ─recalca.

─Taehyung, hijo, nosotros no quisimos hacer eso, pero fue tu culpa que perdiéramos todo. ─prosigue su madre tratando de acercarse a Tae sólo que Jungkook se interpuso─ Nos debés mucho después de todo.

Dice sin descaro alguno. ¿Cómo podían venir y decirle eso?

─Jungkook correrlos, no los quiero ver, sólo míralos, de seguro te vinieron a pedir dinero ¿no es así?

Los mira. Ellos se observan mutuamente.

─Cariño cálmate estás muy alterado, te hará daño mi amor.

Jungkook tomó su manita besando su dorso, Taehyung no podía estar calmado con ver a sus padres queriendo sacar dinero de su novio solo porque es rico. Ni siquiera tenían vergüenza.

─El descaro que tienen de venir a pedir dinero, yo no les debo nada, ustedes se endeudaron en casinos por qué quisieron, a mi no me metan.

─¡De ahí comías mocoso! ¡Acaso no gozaste de las ganancias! ─le reclama su padre.

─Era un niño, ustedes jugaban haciendo trampa hasta que ya no les funcionó. Cuando crecí empecé a salir con Hyungsik se alegraron por qué era de dinero, cuando me pasó lo de mi rodilla y mis sueños se fueron a la mierda ¡me dejaron! ¡me abandonaron en el puto hospital!

Su madre puso los ojos en blanco. Tae comenzó a llorar.

─No teníamos dinero para el hospital, Hyungsik te dejo por qué ya no le servías.

─¿Disculpe? ─Interfiere Jungkook─ ¿Qué fue lo que dijo?

Miró con sumo odio aquella mujer que hace llamar madre, no podía creer como vienen a pedirle dinero y luego insultar de esa manera a su novio; justo esto quería evitar, pero ya está aquí su rubio y no pensaba dejarlo solo.

─Digo... Bueno ya no sé lo que digo. ─se retracta─ ¿Nos darás el dinero o no? ─dice la madre de Tae.

El rubio mira a su novio, Jungkook limpia sus lágrimas con sus pulgares. Esto debe ser una maldita mierda.

─No les des nada, por favor ─suplico─ Ellos no merecen nada, no les des nada, Jungkook.

Si eso era lo que su novio quería él no se negaría. Si pensaba darles dinero y que se largaran, pero ahora ya no y menos con lo que escucho.

─De acuerdo nene. ─beso sus labios─ ¡Yoongi!

Gritó llamando a su mejor amigo, el cual entró rápidamente.

─¿Si?

─Llama a seguridad para que los saquen, llama al abogado para que haga una orden de alejamiento contra ellos.

─En seguida señor.

─¡¿Qué?! ¡¿Una orden?! ─cuestiona la mujer.

Jungkook se recompone mirándose totalmente intimidante.

─Ustedes no merecen nada en esta vida, tanto les importó el dinero que no pensaron en su hijo por ningún momento, usted misma me lo dijo hace un momento; apostaba tanto que casi pierde a Taehyung ¿usted cree que merece ese dinero? Para que luego venga a pedir más, pues no. No voy a permitir que hieran de esta forma al amor de mi vida, que lo abandonaran cuando más los necesito solo porque un estúpido hijo de perra con dinero lo dejo. Ustedes no merecen el título de padres.

Ambos padres tragaron grueso al escuchar la voz gruesa y molesta de un hombre como Jeon Jungkook .

Daba miedo. Prosiguió.

─Lo único que obtendrán de mí será una orden de alejamiento, no se acercarán a mí y mucho menos a mi novio ¿me escucharon? Yo no soy solo amenazar si no también de cumplir y si los veo molestar a mi Taehyung, verán de lo que soy capaz. Así que largo o los sacan.

La mujer miró furiosa a Jungkook en especial a Taehyung quien se escondía detrás de él.

─Como quiera. Solo para que sepas Tae, eres un bastardo, jamás quise tenerte, eras más que una molestia que tuve que mantener. Lo único bueno que tenías lo perdiste y mírate, quedaste cojo y por lástima alguien te defiende. Espero que se pudran los dos en el infierno.

Escupe con odió su madre. Taehyung quería vomitar del dolor que esas palabras le provocaron. La mujer salió cuando entraron los de seguridad, ella y su padre se fueron. Cerrando la puerta se derrumbó en el pecho de su amado, llorando por sus crueles palabras.

Jungkook lo llevó al sofá, abrazando a su rubio hermoso.

─Hay padres que no merecen a sus hijos, tú eres demasiado bueno para este mundo Tae, no dejes que sus palabras te hieran.

─Lo sé... es-es solo que me afecta porque pensé que si me querían... Ahora veo que no.

Limpia sus moquitos con las mangas de su suéter, Jungkook le besó repetidas veces.

─Tú serás mejor padre. Jamás lo dudes cariño. Lo que ellos te hicieron no tiene perdón y no te preocupes que seguiré con la orden y estarás más tranquilo.

─Gracias por estar aquí para mí, no sabes cuánto te amo.

─Porque te amo lo hago, eres lo más preciado para mí amor. No dejaré que nadie te lastime, ni a ti y a nuestro Hyunbin.

─Eres lo mejor que me ha pasado ¿sabías?

─Lo sé.

─Perdón por dejarme afectar pero hace tanto que no les veía. ─Dice más tranquilo.

─Estabas en tu derecho amor, te amo, por favor deja de llorar que te ves feo.

Taehyung sonríe.

─Yo siempre me veo bonito llorando.

Beso su nariz rojita confirmando sus palabras.

─Es verdad, te ves hermoso llorando. Pero antes de que continúes enamorándome más me puedes decir ¿qué haces aquí?

Taehyung le miró inocente.

─Esque... Fui a ver a Momo ¡pero los guardias me acompañaron! ─dice rápidamente.

─Te dije que es peligroso amor, sabes que aun no tengo las pruebas contra ella.

─Lo siento, sólo que tenía ganas de salir a ver a mi amiga y de traerte algo. Pero se cayó cuando miré a mis padres.

─No importa, lo importante es que estés bien. ─lo besa─ ¿Quieres esperarme a que termine? No tardó mucho.

Tae asintió.

─Está bien, ¿puedo pedir algo de comer?

─Claro que si amor, lo que tú quieras.

Jeon se pone de pie para ir a su escritorio, mandó llamar a los del comedor para que le trajeran lo que quisiera a su novio. No duró mucho en el trabajo con su rubio ayudándole con algunas cosas. Fueron al apartamento pero en cuanto llegó, le dieron la noticia.

─¿Primo, que paso?

Tae se quitó los zapatos y el abrigo para tumbarse en el sofá, tocando su vientre por lo mucho que comió.

─Tengo las pruebas y no solo eso, uno de mis hombres capturó un asesino tailandés que venía con órdenes de Lee Nayoung por tu novio.

Jungkook apretó sus puños por el enfado.

─Esa hija de perra. ─Masculló molesto.

─Mandaré a mi mejor hombre a dejarte todo, ya le saque mucha información de aquel tipo. Un policía llamado Yang Kyung irá a su apartamento, es de mi suma confianza no te preocupes, llevo hace rato al asesino llamado Pathiam a la cárcel, ya no tardaran en arrestar a Nayoung y su hijo Daniel.

Jungkook sintió alivio, al fin esto se terminaría.

─Gracias por tu ayuda, no sé qué habría hecho sin ti.

─Ya sabes que la familia primero. Yo lidio con mi propia mierda.

─Cuando quieras algo estoy para devolverte el favor.

Namjoon suelta el humo de su boca.

─No te preocupes, con que asistas a mi boda estaré bien. Cuidate mucho.

─Igualmente, gracias otra vez.

Cuelga.

Sonrió feliz y fue directo a besar a su rubio quien lo miró extraño. Lo abrazó besando repetidas veces su pancita.

─¿Que paso amor? ¿por qué estás tan feliz? ─se ríe por las cosquillas de los besos.

─Ya tengo las pruebas, ya fueron a arrestar a mí madrastra.

Tae sonrió feliz.

─¡Qué bueno! Así nos dejará en paz.

Rodea el cuello de su hombre besando sus labios, está feliz de saber que esa mujer tendrá su merecido.

─Al fin termino amor. Ella no podrá hacerte daño.

Taehyung se besó con su novio, comenzando algo pasional debido a la gran noticia, pero el sonido de la puerta ser tumbada los sacó de su momento romántico, ambos se quedaron estáticos al ver a Nayoung con un arma.

¿Cómo llegó aquí?

─¡Hijo de perra!

Le apunta con el arma y dispara, ni siquiera lo vieron venir.

Iba dirigido a Taehyung, pero Jungkook lo alcanzó a apartar atravesandose él. No lo dudo, ni siquiera un poco, prefería la bala antes de que le dispare al amor de su vida.

Lee Nayoung fue derribada por los guardias y la policía, Jungkook cayó al piso de rodillas tocando su brazo.

─¡Jungkook! ─grito Tae aterrado, mirando la sangre ─A-amor…

─¡Una ambulancia rápido! ─grito Yoongi quien venía ayudar a su mejor amigo.

─Taehyung... ─pronunció Jungkook.

El rubio tenía sus mejillas repletas de lágrimas, todo pasó tan rápido.

Yoongi lo aparta.

─Hermano déjame ver ─Jungkook quita su mano mostrando la herida, le dio justo en el centro, cerca del codo─ Dios... Creo que tocó una vena, pero nada grave más allá de ahí.

─Jungkookie...

─Tran-tranquilo amor, estaré bien ─se queja del dolor─ tranquilo. Nada grave, cálmate nene.

Taehyung tomó su mano libre tratando de controlarse, esto era una pesadilla hoy no le fue nada bien. Primero sus padres y luego pasa esto, él sólo quiere estar en paz con su novio, es lo que más pedía.

No lo soltó en el lo que llegó la ambulancia, Taehyung tenía sus ojitos tan rojos que le ardían. Subió con su novio a la ambulancia directo al hospital donde sería atendido rápidamente.

Todo en un solo día, pero al menos al fin las personas malas están donde pertenecen, unos en la cárcel y otros lejos de Seúl por deudas.

Al fin terminó todo.

🍵