Capítulo 26 (Última parte)
Irene:
Espero no equivocarme al creer cada una de sus palabras.
Notó que ya no estaba con ganas de interrumpirlo como minutos antes.
—Bueno, no dirás algo siquiera.
—Para qué si ya me lo explicaste y también quiero pensar que sabes hablar con la verdad.
No me importa si lo que le acabo de decir le ofendió; haya tomado mis palabras para bien o para mal; sé de boca del propio Leo que este "guapito" no es una monedita de oro.
Y que muchos de los que son compañeros nuestros...
Le tienen en feo concepto
Así sin esperar solté de golpe mi pregunta: —Porque no eres amigo de alguien en el Celestín, ¿qué ocultas?
Porque era notorio, en los recesos siempre se desaparecía.
Ni en la cancha de fútbol, ni en las mesas cerca de los de 2do curso se le encontraba.
—Nadie de nuestro colegio ha querido conocerme o mucho menos hablarme.
—No te hagas la víctima, de seguro si han de querer, pero el que no les deja debes ser tú.
Rodó los ojos ante mi respuesta: —Pido perdón por no ser tan extrovertido como tus amigos.
Y actuando como un malcriado se levantó y se fue hacia la cocina.
—Ya sabía yo que todo lo que me dijo Leo es cierto y que Jacobo es solo un tonto engreído.
Me imagino que sus padres son los típicos engreídos con dinero que se pasan de viaje en viaje sin importar cómo se comporta su maravilloso hijo en el colegio.
—Y así yo reniego de las veces en las que a mi pobre mamá le ha tocado trabajar hasta el siguiente día que mala soy.
El príncipe del reino conitos escuchó todo.
—Wow, y yo que pensaba que eras diferente del resto... —De forma muy peligrosa se acercó, dejando una mínima distancia entre su boca y la mía. — Punto uno, engreído significa ser una persona que se cree mejor que el resto y yo no solo me lo creo. Lo soy.
—Aléjate antes de que mi mano quede impregnada en tu mejilla. Jacobo, no te va a gustar la señal que te voy a dejar.
Antes de que pase algo, el carraspeo de la Sra Estela provocó que Jacobo se sentara correctamente y me evitara la mirada.
¿Qué significa lo que acaba de pasar?
* * * *
Nunca les ha importado a alguien, pero mi plato favorito es el seco de pollo.
Los ingredientes son muy fáciles de conseguir y máximo se demorarían cocinando unos 30 minutos.
Se necesitan:
- 5 piezas variadas del pollo.
- 2 cucharitas de comino molido.
- 2 cucharaditas de achiote en polvo.
- 3 cucharadas de aceite vegetal.
- 2 pimientos rojos picados en cubos grandes.
- 1 cebolla, 2 tomates y 5 dientes de ajo bien picados.
- 1 cucharada de cilantro picado.
- 2 tazas de cerveza rubio.
- 3/4 de Taza de Jugo de Naranjilla.
- 2 Cubos Caldo de Gallina Maggi
- 1/4 Taza Perejil Fresco
- 2 Cucharaditas Orégano seco
Todo ese listado me lo sé de memoria porque cuando mi abuelita está con buen genio nos prepara ese delicioso platillo.
La Sra. Estela lo preparó para la merienda.
—Espero que a mis queridos invitados les guste.
Con mucha pesadez pasaba el alimento; me era feo comer sola, sin estar en mi hogar.
Sin la presencia de ellas.
Una mano se posó encima de la mía; El calor que transmitía me era familiar; Jacobo, por primera vez en toda la tarde y noche, me regalaba una mirada reconfortante.
La parte lógica y cortés de mi cerebro me decía que debía agradecer aquel gesto mientras que la otra parte me decía que estaba actuando como en la mañana.
«Hay, mamá, en este momento cuánto te necesito» Pensé hacia mis adentros.
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