He tenido que aprender a vivir sin ti, ¿Por qué? Me han forzado a olvidarte pero es imposible. Tu aroma aún sigue impregnado en las sábanas de nuestra cama, aún te siento acá, y así pretenden que debo olvidarte.

No tienes idea de cuánto he estado sufriendo por ti. Me duele pensar que ya no te tendré en mis brazos, duele saber que ya no podré ver tu sonrisa, tocar tu piel tan suave, besar tus hermosos labios, sentir tus caricias en mi piel, duele saber que ya no podré hacerte mío como aquellas noches. No sabes cuan difícil ha sido para mí.

¿Por qué? ¿Por qué te fuiste? Acaso los TE AMO que decías no eran reales, yo sé que me amabas. ¿Por qué te haz ido entonces de mis brazos?

Aún recuerdo el día que te conocí, llevabas tu suéter favorito, ese suéter celeste de felpa que te llegaba casi hasta las rodillas, ibas corriendo por el parque solo porque un perro te estaba persiguiendo, recuerdo que te sentaste a mi lado en aquella banca que luego se convirtió en nuestro lugar preferido, recuerdo que me preguntaste que si aquel perro ya no te estaba siguiendo, cuando te dije que ya no estaba cerca reiste con esa hermosa sonrisa que te caracterizaba, esa en la que tus hermosos ojos desaparecían en una delgada línea.

Tú fuiste mi salvavidas, tú eras mi fuerza, mi todo, mi ángel caído del cielo para salvarme de ese agujero negro. Why did you come if you were going to leave?

Recuerdo que tú llegaste a visitarme un día frío y gris, ese martes de invierno, recuerdo que forsaste la puerta del balcón de mi apartamento porque no respondía tus llamadas ni tus mensajes, vaya que te preocupaste, me dijiste que sentiste un miedo inexplicable al verme tirado en mi habitación, con aquella navaja y aquellas pastillas, llamaste a emergencias. Cuando me dieron de alta en el hospital tú me cuidaste y no me dejabas estar solo, recuerdo que esa noche nos quedamos hasta tarde hablando, fue ahí cuando te dije lo que me pasaba, ese rechazo constante de mi familia y de mi mismo, recuerdo que después de hablar tomaste mis mejillas y me diste ese cálido beso, aquel que me hizo sentir tan bien, recuerdo que te quedaste por varios días conmigo, luego llegabas a visitarme, tú fuiste quien me saco de ese agujero negro, ese día en el que te pedí fuéses mi pareja, recuerdo cómo se iluminaron tus ojos y derramabas una lágrima, dijiste que si, eso fue lo mejor, luego de eso me llevaste a recibir tratamiento para mí ansiedad y mi depresión. JUNTOS PARA SIEMPRE dijiste aquella noche. ¿Por qué rompiste tu promesa?

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Era difícil ver a su amigo así, en ese estado tan deplorable, es cierto Yoongi no era él más alegre y activo de todos, pero cuando Jimin apareció pudieron ver aquella fase tan hermosa de Yoongi, aquellos cinco chicos trataban de reanimarlo.

Aunque era un tanto difícil, no solo por Yoongi sino porque también Jimin era su amigo, ellos también luchaban por su recuerdo por tratar de superarlo pero también por mantenerlo vivo en sus memorias.

Ellos cuidaban de Yoongi, le llevaban su comida, aunque a veces se mantenía renuente a no comer nada sin embargo Jin era él que más le insistía, así que no tenía más opción que aceptar los alimentos.

Esto se está tornando muy difícil para todos.

Ese día Jungkook estaba haciendo limpieza en el departamento de Yoongi, y es que Taehyung le pidió que lo hiciera ya que el mayor no podía seguir en aquella pudredumbre. Y después de lavar la ropa, fue hacía el armario donde suponía guardaban las chamarras y cobijas, como lo imaginaba estaba todo desordenado, así que como dice el dicho "Al mal paso, darle prisa" se dispuso a ordenar todo ese armario, sacó y doblo cada cobija, pero en el fondo de aquel armario se encontraba aquel sobre pequeño con bordes de líneas azules y en el centro el nombre de Yoongi. Jungkook observó atentamente el sobre, lágrimas traicionera amenazaban con escapar al darse cuenta que la letra era del hyung mochi, no sabía que hacer con aquel sobre, Yoongi aún seguí dormido, y despertarlo sería una tarea titanica.

-Yoongi hyung- sacudió levemente el hombre del contrario ya que aún se encontraba en su cama

-Hyung, despierte.

-Que quieres Jungkook

-Hyung lo lamento, pero encontré este sobre con su nombre en el armario.

Con suma pereza el mayor se sentó en la orilla de la cama y tomo el sobre que Jungkook le extendía. Con delicadeza abrió el dichoso sobre, el cual tenía una carta, pero reconocía aquella letra, era de Jimin, ¿Pero cómo? Antes de empezar a leerla le pidió a Jungkook que se retirará, a los minutos el menor salió a regañadientas del departamento después de haberle hablado a Jin para saber si podía dejarlo solo, quien al oír por qué Yoongi le pidió que se retirará

Si será mejor que lo dejes solo, si era de Jimin esa carta, es momento de que lo afronte de una vez.

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Mi amado Yoongi:

Tal vez en estos momentos estés odiandome, pero quiero que sepas que no fue tu culpa, en realidad tú eras mi fuente de alegría y esperanza, quiero que sepas que eres mi mundo, te amo demasiado.

Te preguntarás por que lo hice entonces

Bueno Yoongi hyung, todos tenemos demonios dentro, y a pesar de que, espero no sonar vanidoso, te ayude a qué pudieras superarlos, yo dejé que mis demonios me consumieran, a tal punto de ya no querer seguir adelante.

Verás desde que era niño, me molestaban mucho en la escuela por se gordo, mi padre decía que solo era un estorbo que no servía para nada y mi madre, pues ella no me decía nada malo, solamente me ignoraba, crecí oyendo solamente burlas y golpes de mis compañeros y mi padre, así que cuando cumplí los 15 años empezé a hacer ejercicio, dejaba de comer, incluso llegué a bailar, y sabes que amo eso, la cosa es de que hasta llegaba a vomitar lo poco que comía, y había adelgazado, vaya que lo hice, sin embargo no era suficiente, aún seguía teniendo estos abultados cachetes, me estaba haciendo daño. Odiaba sentirme así, no sabes cuántas noches pase con lágrimas en mis ojos y sangre en mis piernas, tobillos y en mis muñecas, en serio estaba muriendo.

Pero te conocí, y cuando te ví me sentí nervioso, sentía que nunca te llegarías a enamorar de mi, pero me equivoqué al escuchar tu voz hablándome, tan dulcemente.

Cuando te ví en el punto de casi morir sabía que necesitaba sacarte de ese agujero negro, sabía que si te ayudaba podría ganar tu corazón, la verdad que idea tan loca de tratar de ayudar a alguien cuando ni siquiera puede uno controlar su vida, sin embargo lo haría.

Después de todo terminamos juntos, como el más bello sueño. Sin embargo eso no dura para siempre.

Yo había logrado superar todos los tratos de mi padre, o eso creí.

Hace dos semanas él regreso de Busan y con él a dos de los chicos que se había encargado de hacer mi vida una mierda.

Me destrozaron, cuando no podía sentirme más desdichado, él apareció. Su rostro en una mueca burlona, llena de odio y lujuria.

¿Qué podía hacer un chico débil de mente y físico ante esa situación?

No pude dormir aquella noche, no recuerdo cuándo había sido la noche en que lloré tanto como aquella vez. Me sentía tan sucio e impuro, asqueroso.

¿Por qué? ¿Por qué mi vida es tan desdicha?! ¿Por qué cuando ya había logrado tener una vida normal tuvieron que arrebatarrmela?

Cuando aquellos tres me tomaron y me hicieron cosas imperdonables, no entendía, ¿Por qué esos podían ser tan crueles conmigo?

Hyung. ¿Por qué lo hicieron?

¿Por qué me violaron?

Yoongi me siento la peor basura.

Asco

Dolor

Pura mierda

Me siento al borde de la muerte y sin embargo decidí callar.

Me amenazarón con que te harían el peor de los daños si decidía abrir la boca. Pero tú eres mi debilidad. No dejaría que te hicieran daño. Claro que no. Tú eres mi amor, mi vida, mi todo.

Así que tome la decisión de escribir está carta porque sé que no podría decírtelo a la cara, porque me siento tan sucio, tan despreciable de esta pobre alma que sufre en el silencio.

Sé que nunca podré volver tu bello rostro, y duele demasiado, pero estando aquí, escribiendo está carta con lágrimas amargas deslizándose por mis mejillas y aquella pequeña navaja que fue mi compañera por muchos años, en mi antigua casa, lo haré, ya no lo soporto.

Sé que cuando leas esto te sentirás impotente por no haberte dado cuenta de mi sufrimiento, pero no te culpo, yo me encargué de nunca demostrar lo que me pasaba, así que no te martirices más.

Sabes me le adelantaré a mi padre al decirte lo que pasó, así que él ya no te podrá hacer nada y yo dejaré de estar sufriendo.

Yoongi, te amo demasiado que me duele escribir esto, por favor sigue con tu vida. Sigue adelante, por favor aún no me busques, nos reuniremos cuando el destino lo crea conveniente, pero recuerda que te seguiré esperando y amando por toda la eternidad, aunque yo ya no me encuentre con vida te seguiré amando, en esta vida o en la otra siempre estaremos juntos.

Con amor, jimin

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Con lágrimas ya derramándose por sus mejillas, Yoongi dobló aquella carta, se recostó en su cama y se echó a llorar amargamente porque no estuvo ahí para su pequeño, no sé dio cuenta de cuánto estuvo sufriendo el menor, pero también se sentía bien porque sabía que Jimin pensó en él hasta el final.

Después de dos días de haber llorado acurrucado en su cama con todas aquellas cobijas, decidió que era hora de cambiar.

Se levantó temprano ese viernes soleado y se dispuso a limpiar y ordenar todo y después de haber tomado el desayuno, tomo una ducha. Al final llamo a Jin, quien se sorprendió al saber que fue Yoongi él que lo llamó, pero mayor fue su sorpresa al oír qué el contrario le pedía que todos fueran a cenar a su casa ese día, Claro está de que el mayor no pudo dejar de sonreír ante esa petición, antes de cortar la llamada Yoongi le dijo a Jin de que si él podía ser quien cocinara, ya que él en la cocina sería un desastre rotundo.

Jin se encontraba haciendo la cena para aquellos chicos revoltosos, Jungkook y Tae estaban entrenidos en aquel videojuego, ambos reían y gritaban cada vez que uno perdía y el contrario ganaba, Hoseok y Namjoon, tenían una charla amena sobre saber que cosa, y Yoongi, pues, él se encontraba recostado en el marco de la puerta de la sala, viendo a cada uno de sus amigos, sinceramente no podía creer que aquellos chicos lo soportarán por tanto tiempo y aún así lo ayudarán a superar su dolor, definitivamente era el chico más afortunado, sin embargo aún le hacía falta algo, más bien alguien.

Esa noche valla que disfruto la compañía de sus amigos, definitivamente fue lo que lo impulso, definitivamente lo haría.

Aquella cena sería la más memorable de su vida, todos charlaban y reían, uno que otro golpe por parte de Jin hacia los menores, era una buena noche. Después de lavar todos los recipientes y ordenar todo, cada chico se dirigió a su casa, no sin antes darle palabras de aliento al dueño del hogar.

Si tan solo supieran....

Habían pasado al menos 3 días de la maravillosa cena, ninguno pregunto por Yoongi, no porque no quisieran simplemente sabían que la situación del pálido no era la mejor y necesitaba un poco de espacio.

Sin embargo cierto menor, específicamente Jungkook, esa mañana había despertado con un mal presentimiento, no le presto mucha atención pero llegando la tarde se sentía mucho peor.

Llamó a Taehyung y le contó lo sucedido, no sabían que era, así que para poder calmar el menor, el de piel bronceada le sugirió ir a visitar a Yoongi, tal vez estar separado del mayor le tenía mal.

Pasaron a una tienda a comprar algunos snacks para compartir cuando llegarán con el mayor, unas cuantas gaseosas y por supuesto las favoritas de Yoongi, mandarinas.

Ambos tocaban las puerta del apartamento, no había respuesta y así por varios minutos, y el mal presentimiento de Jungkook volvió a hacerse presente, ambos tenían su respiración entrecortada y su pulso al mil. Llamaron varias veces al celular de Yoongi, pero nada, no había respuesta.

Taehyung recordó que en la pestaña de la puerta había una llave de repuesto, logró alcanzarla y con sus manos sudando y temblando abrió la puerta.

Namjoon, Jin y Hoseok salieron prácticamente corriendo de sus casas al recibir la llamada de los menores muy agitadas, ambos estaban destrozados.

Al llegar al edificio de apartamentos habían varias patrullas y unas cuantas ambulancias.

Una camilla en espera de un cuerpo sin vida.

Los mayores llegaron corriendo al apartamento del pálido, y los menores no podían estar en peor estado, ambos en shock, con los ojos hinchados de tanto llorar

-Que pasó? Donde está Yoongi?

-Jin hyung, Yoongi murió

-Pero qué? Cómo?

-Se quitó la vida hyung. Nam, Yoongi se suicidó.

Los 5 amigos veían como el cuerpo de su amigo era llevado.

Nadie entendía.

Todos se culpaban así mismos.

Y si no lo hubieran dejado solo?

Si aunque sea lo hubiesen llamado...

Dolía como el infierno.

-Él dejó una nota, Hobi puedes leerla tú eras su mejor amigo, por favor.

Hola chicos...

Perdón...

Soy un cobarde...

Soy muy egoísta al querer irme con Jimin.

Sé que los estoy haciendo sufrir.

Pero es que no puedo más.

Jimin era un ángel que no merecía toda la mierda que tuvo que vivir. Y yo soy aún más mierda al no darme cuenta que mi pequeño sufría.

Si tan solo hubiese sido más atento con lo que le pasaba.

Sé que ya tienen suficiente con la muerte de Jimin, sé que les hice imposible estos últimos meses.

Pero quiero darles las gracias.

Gracias por ser la familia que siempre quise.

Gracias por seguir a mi lado.

Por favor sean fuertes, sé que les está doliendo y me odio por hacerlos pasar por esto otra vez.

Los quiero mucho chicos, sean las personas sonrientes que han sido siempre.

Y por favor, si algo los atormenta, por favor apoyen se, no terminen como nosotros.

Mi único consuelo ahora es de que pronto veré a Jimin de nuevo.

Así que ya no se preocupen por nosotros...

Yoongi...

Hoseok había leído nuevamente la carta en el funeral de Yoongi, su cuerpo fue enterrado donde debía ser, a la par de Jimin.

Todos sus amigos y familia estaban destrozados, pero sabían que ese par de chicos eran el uno para el otro, se complementaban y bueno al menos esperaban que obtuvieran la paz que se merecían.

Un grupo de 5 chicos estaban en el parque, en el banquillo de la pareja, ese que solían presumirles que era su lugar.

Veían el atardecer, por alguna razón inexplicable aunque estaban muy tristes, sentían calma. Todos sufrieron por la muerte de Jimin, pero más Yoongi, y saber que al menos Yoongi ya no sufría los hacía sentir bien.

Extrañarían a la pareja, por separado eran un desastre, pero juntos, juntos eran el desastre más bonito.

Todos ellos solo les quedaba vivir con él recuerdo de sus amigos.

-Yoonie?

-Jimin!

-Yoonie que haces aquí?

-Hey! No estas feliz de verme?

-Pero hyung tú aún no deberías estar aquí.

-Lo sé, lo sé.
Pero me pediste un imposible.

-Hyung no debiste hacerlo. Debiste esperar.

-Y tú debiste decirme.

-Sabes que no podía hacerlo.

-Lo sé, pero eso ya no importa ahora.
Lo que quiero ahora
es abrazar al amor de mi vida.

-Yo también Yoonie.

Y así sus labios se volvieron a encontrar. Un beso cálido, uno lleno de amor, de sinceridad, un beso que demostraba lo mucho que se amaban y extrañaban.

Fue así como con sus último aliento Yoongi supo, que ni la muerte lograría separarlos.

Chale está historia 3staba en mi otro perfil, pero al editarlo aquí y leerlo....

Joder yo misma me tengo que pagar la terapia.

Joder estoy llorando pura magdalena.

Si les causó un trauma me avisan para pagarles la terapia.

Me largo a chillar.

Por cierto aclaró, esta historia es de mi autoria, salió de mi cabecita, solo puede haber una historia similar y es la que está en el perfil que olvidé la contraseña, pero la pueden encontrar como minmin2716, mi ángel caído.

Sokko