Cada vez se me hizo más extraño ver a aquélla chica de cual cuerpo no podía controlar ella misma. Hestia seguía poseída por un muerto. Era extraño todavía pensarlo y que fuera verdad. Aquella persona o cosa, saltaba de un lado a otro con una gran sonrisa, tal como un niño pequeño.

Su sonrisa era inocente, deslumbraba a cualquiera hasta el instante que veían sus ojos y el cristal ensangrentado en su mano. Era tan perturbador como ver a un niño asesinar a su madre ¿Por qué sus ojos eran tan horripilantes? Si alguna vez dije que detestaba sus ojos verdes, ahora los quiero de vuelta.

Por cierto, nunca ha dicho de qué me conoce. Y eso no dejaba de rondar mi cabeza ¿Por qué tanta insistencia en que yo viniera si al final no me presta atención?

Jungkook y yo parecíamos los únicos que nos manteníamos alertas en el grupo. Si pudo poseer a Hestia en un instante quién asegura que no nos podría matar de la misma forma. Los demás no parecían preocupados porque esa cosa nos matara a todos en un abrir y cerrar de ojos. Solo estaban angustiados de lo que pasaba con su nueva amiga de ojos oscuros como el centro del vórtice espacial.

Si intenta algo lo mataré.

- ¡Quietos! - Con lo rápido que se detuvo aquel ser nos provocó a los que veníamos detrás chocáramos con el de delante. Creo que el chillido de dolor fue de Beomgyu porque como último en la fila cayó sobre su propio trasero, haciendo carcajear al de ojos feos - ¡A cavar aquí mismo!

- ¿Cavar?

- Exactamente mi querido cabeza de huevo - Fue la respuesta risueña del único sonriente hacía Lucas.

Lucas se arratonó viendo la sonrisa del  malévolo ser dedicada a él. Creo que se cagó en sus pantalones, sin embargo, no me burlo, cualquiera en su lugar también lo habría hecho porque aquella cosa tan maligna sonriendo como un puto angelito era bien acojonante.

Tan sínico y perturbador a la vez.

- ¿Qué están esperando? ¿Qué me muera? ¡Dije a cavar!

Jungkook fue el primero en pinchar el suelo con la pala. Claramente se aseguró que no hubiera ninguna mina oculta con la vista, inclusive intercambió una mirada conmigo como señal de autorización. Sí, somos muy desconfiados y precavidos.

El lugar de la excavación era nada más y nada menos que en el patio de Leumas ¿En serio?, ¿quería tomarnos el pelo?, ¿qué encontraríamos ahí?, ¿un par de condones usados? Por un momento creí que nos llevaría al bosque, específicamente al lugar dónde tanto tiempo hemos excavado Jungkook y yo.

Luego de Jungkook fui el siguiente en tomar la pala, me siguieron Taeyong, Kai, las chicas y últimamente Beomgyu y Lucas. Los últimos dos resbalando metafóricamente en su propia mierda. ¿No se daban cuenta que demostrando miedo era peor? Ni las chicas estaban tan asustadas. Daban vergüenza ajena.

Entre tantas personas cavar un hoyo de dos metros no era difícil, más si había unos expertos cavando como Jungkook y yo. Hubo un momento que me di cuenta que esta profundidad era la específica para enterrar un cadáver, no obstante,  lo distingue cuando justamente Sunha nos llamaba diciendo que habían encontrado algo.

- ¡Miren esto! - Tras todos ir en dirección de lo que la chica tomaba en sus manos, yo me dediqué a mirar la sonrisa torcida del ser - Esto es-

Sunha dejó caer la parte del cuerpo mutilado casi completamente descompuesta. Era una mano. La rubia se tambaleó blanca como un papel. Hazel agarró a Sunha antes de que se desmayara mientras que Huening ayudó a Beom a liberar todo de su estómago. Esto fue muy inquietante para ellos.

- ¡¿Qué carajos es esto?! - Clamó un atómico Taeyong.

Jungkook y yo nos miramos atentamente. Esto era lo que habíamos buscado hace mucho tiempo ¿Qué retorcido entierra un cadáver en el patio de la escuela? Lo que nunca nos imaginamos hallarlo aquí. Y mucho menos de esta manera.

Al parecer Leumas guarda más secretos que el que Jungkook y yo esperábamos…

- Eso es todo chicos - Todos los consientes miramos al de ojos feos - Acaban de entrar en un juego que no podrán salir hasta que se decida el ganador. Ahora solo depende de quién juegue mejor - Otra vez volvió a sonreír diabólicamente - Nos vemos pronto.

Los ojos de Hestia se cerraron y las venas alrededor de ellos desaparecieron antes que el cuerpo se desequilibraba y cayera al hoyo.

- ¡Hestia! - Gritó su hermana con palpable dolor en su voz.

No sé en qué momento me moví, pero el cuerpo de Hestia ya estaba sobre mis brazos para cuando noté que había sido obra de mis reflejos. Agradecía a los guantes en mis manos por evitar el posible brote de mis poderes.

- ¿Es-está bien?

Tras la pregunta preocupada de Beomgyu, Kai se acercó con cautela y revisó sus signos vitales antes de asentir en dirección de su amigo, Hazel y Jungkook. Fue como un respiro de paz para todos. Si lo decía el médico del grupo no cavía duda de que todo estaba bien.

Respiro que fue otorgado por la misma Hestia al abrir los ojos abruptamente, demostrando como el color verde había vuelto a ellos. Su mano apretó mi brazo que la sostenía con gran fuerza, me miró fijamente en un ataque de delirio mientras agua salía de sus ojos y terminó abrazando mi cuerpo como si su vida dependiera de ello.

- No quiero que me vuelva a tocar... - Sollozó confidencialmente antes de volverse a desmayar en mis brazos - La muerte.

Y por primera vez no tuve que quitarme el guante para saber cuál era su mayor miedo.