Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

◈ 7

❝Decisiones del corazón❞

Tal vez haya sido solo el momento o que Jungkook frente a mí me pareciera completamente alguien de quien tenía que cuidar, no sé, pero cuando me di cuenta, ya había reunido algo de ropa y con rapidez le había tomado de la mano para que nos fuéramos de ahí.

Pensé en Joohyuk y la forma en la que me cuidaba a su manera y me sentí culpable, pero Jungkook era mi prioridad en ese momento. ¿Cómo podría no haber hecho nada si me había mirado con ese tierno rostro que parecía haberme pedido ayuda sin necesidad de palabras? No haberle hecho caso solo me hubiera hecho sentir más miserable.

En cuanto a Joohyuk, le hubiese escrito una carta, pero el tiempo no era algo que estaba a nuestro favor, por eso mismo nos fuimos sin despedirnos de él o de alguien más. Y eso también me hizo sentir mal, porque le podría haber dicho que también fuera con nosotros, pero tenía secretos con padre y eso no me daba buena pinta, por mucho que anteriormente nos hubiera ayudado un poco.

Teníamos que ser cuidadosos y jugar con el tiempo y la oportunidad no habría sido de ayuda, así que dejando el razonamiento de lado, seguí solo mi instinto.

Comenzamos a caminar en lo que supuse era la dirección que iba hacia la pequeña casa a la que me había llevado Joohyuk, sabía que si por alguna razón nos salían a buscar ese lugar podría ser una referencia muy clara, pero esperaba por lo menos familiarizarme un poco con el lugar para ubicarme y que no todo terminara en un gran desastre. Jungkook tenía mucha energía, pero tampoco me quería arriesgar a exigirle más de lo que podía.

Estaba actuando de forma precipitada, sin embargo, le quería hacer caso a las decisiones del corazón. Por eso mismo deseaba que todo fuese bien.

Todo el sector era tan parecido que a ratos me confundía, pero no podía fallar si ya había llegado a eso. Tendríamos que buscar alguna manera para estar lo más lejos posible y, de una buena vez, vivir felices juntos, sin tantas preocupaciones y la constante presión de que de un momento a otro alguno sería alejado.

Intenté ser optimista, lo más optimista que había sido en toda mi vida, pero ni así la seguridad se apoderaba de mí. Cada paso que dábamos cada vez se sentía más incierto y cuando pasó lo que sentí como una hora, me di cuenta de que nos habíamos perdido. Por mi culpa estábamos en medio de la nada y sin la pequeña casa cerca, o por lo menos no se veía sin importar que mirara en todas las direcciones posibles.

—¿Podemos descansar un momento, Sun?

—Claro, ¿estás muy cansado?

Negó, pero estaba claro que solo me ocultaba su cansancio para no ser una molestia. Su carita estaba algo sudada, y tomé un borde de mi falda para secar un poco su rostro mientras él tomaba asiento en un tronco caído.

Cielos, ¿qué hacía? La única comida que tenía eran unas pobres golosinas que había guardado quién sabe cuándo. Y me comencé a desesperar, pues tenía que hallar algo antes que se pusiera el sol. De por sí esa noche en la casita junto a Joohyuk había sido fría, no quería ni imaginar cómo sería a la intemperie sin un techo o unas paredes por muy mal estado que estuvieran. La idea tampoco era preocupar a Kook, pero como mis nervios siguieran aumentando se iba a terminar dando cuenta, así que opté por esconder mis manos tras mi espalda.

Sí, eso era lo correcto.

—Estoy feliz de que estemos juntos —sus mejillas de por sí ya estaban coloradas gracias a la caminata. Se veía tan adorable—. Vamos a ser muy felices, Sun, y creceré mucho solo para protegerte. Te lo prometo.

No pude evitar sonreír ante sus palabras. La inocencia era una característica destacable de él y esperaba que nadie se la arrebatara. Jungkook en serio merecía lo mejor del mundo y me esforzaría por poder cuidarlo.

—Yo también estoy muy feliz, Kook. Ahora que estamos juntos haré lo que esté a mi alcance y más allá para poder seguir juntos, y claro, verte crecer también está dentro de esos planes. Pero yo siempre te voy a proteger, eh.

Sus ojitos parecieron iluminarse. Sin duda aquel niño se había ganado todo mi amor desde el primer día.

—¿Y... Uh... Dónde vamos a ir ahora? —algo de timidez le invadió al momento de hacer la pregunta. Ni yo lo sabía con certeza, pero a algún lado tendríamos que llegar.

—Lo importante ahora es salir del bosque, aunque si ves una casita avísame que también nos sirve.

—Bien, estaré muy atento —se levantó de un brinco logrando hacer que me sorprendiera—. Creo que ya recargué fuerzas para seguir caminando. ¿Seguimos?

—Sí.

Y aprovechando su energía le volví a tomar de la mano y continuamos caminando sobre el suelo que estaba lleno de pequeñas ramas y sobre nosotros las copas de los árboles tapando gran parte del cielo. El tiempo siguió avanzando, pero lamentablemente encontrar la casita parecía algo imposible, tal vez el último desvío que había tomado había sido todavía peor que el primero, y no quería ser pesimista, pero ya teníamos que estar lo suficiente lejos del hogar como para arrepentirme y regresar a tiempo.

Lo había... Arruinado. Había conseguido la oportunidad perfecta, pero por no conocer el lugar nos había paseado por el bosque en recorridos sin sentido. La luz ya cada vez se veía que no duraría mucho y me tenía muy preocupada el hecho de no tener un lugar decente para descansar después de caminar tanto.

Ya estaba por sentarme y darme por vencida, no obstante, la voz de Jungkook no me permitió dejarme hundir en esos malos pensamientos.

—¡Ahí hay una casita!

Elevé mi vista tan rápido que me costó verla con la rápida inspección que di, pero entonces logré hallarla. Estaba lejos, pero si se podía ver era porque la distancia no tenía que ser tanta. Estaba tan distraída pensando que no la hallaríamos que no me había dado ni cuenta, menos mal Jungkook la había visto.

Era un héroe sin darse cuenta.

—¿Te parece si vamos?

—¡Sí!

Ante su reacción positiva nos fuimos acercando a la pequeña casa para por fin poder descansar un poco. Habíamos caminado tanto que solo podía pensar en echarme en algún lugar con la mínima comodidad para poder dormir hasta ganar algo de fuerzas. Jungkook de seguro ya tenía que tener hambre, pero no me comentaba nada para no preocuparme. Él era así, no le gustaba darme preocupaciones, y aunque se lo agradecía, de todas formas me sentía culpable por no cuidar de él del todo bien.

Quería tanto protegerlo y darle todo para que estuviera bien, pero caía en la realidad de que ese no era posible en el momento. Tan solo el consuelo de que en el futuro podría me dejaba algo más tranquila.

Tras largos minutos logramos llegar a la pequeña casita y enseguida me puse a buscar la llave para poder ingresar. El miedo se apoderó de mí cuando no lograba dar con ella por ninguna parte, pero gracias al cielo cuando revisé por segunda vez pude dar con el pequeño objeto que nos permitiría estar más resguardados del frío que ya se comenzaba a sentir con mayor intensidad.

Pero antes de haber entrado para descansar junto a Jungkook, me aseguré de que siguieran los dulces que había dejado tirados para no ir en ese sentido cuando despertaramos luego de haber ganado energías a través del mundo de los sueños. No quería dar más vueltas sin sentido y volver a sentirme tan inútil. Quería hacer las cosas bien aunque eso significara tener que trabajar un poquito más.

Valía la pena por él.

El interior del lugar no estaba precisamente a una temperatura muy agradable, pero era mejor que toda la humedad y frío que había en el exterior. Jungkook se sentó en la cama y yo me quedé parada en medio de la habitación pensando en qué hacer. Dormir y descansar estaba bien, pero todavía tenía presente que tarde o temprano tendríamos que comer algo.

—¿Quieres algo, Jungkook? Si... no es así, podemos dormir un poco. Debes estar cansado de caminar tanto.

—Tengo algo de hambre.

Al escuchar sus palabras mi estómago se apretó un poco en señal de culpa. ¿Qué le decía? ¿Que no tenía nada para darle? Ni siquiera estaba segura de sí ahí podía haber algo para comer. La vez que había estado en el lugar, Joohyuk había llevado algo para comer, pero no tenía la menor idea de si había quedado, y mucho menos si podría estar en un estado óptimo para consumir.

Y me comencé a poner nerviosa. Tal y como había evitado momentos antes.

—Uh... —no sabía cómo comenzar. Parecía que las ideas habían desaparecido de mi cabeza. Realmente me había quedado en blanco.

—Antes de salir, saqué un par de pequeños panes —su confesión hizo que mi cabeza se sumergiera más en pensamientos—. Sé que tú te preocupas mucho de la ropa, así que quise encargarme de la comida para que tuvieras una preocupación menos.

El alivio invadió cada una de mis células de una forma sorprendente. Solo eran unos trozos de masa sin mucha gracia, pero me sentía más tranquila ya sabiendo que mi acompañante tenía algo para comer.

—Bien, puedes comer uno ahora y otro cuando despiertes.

Luego de eso... tendría que conseguir algo para comer sí o sí. No me quedaba más remedio que ese. El pan tampoco sería eterno.

Se acercó hasta la bolsa donde había guardado ropa y de ahí sacó una pequeña tela que envolvía el valioso alimento que había traído consigo. No me había dado cuenta de cuándo los había guardado ahí, pero eso era lo de menos. Jungkook podría comer y se iría a dormir sin tener el estómago vacío.

—¿Tú no vas a comer?

Sus ojitos me observaron expectantes. Con todo lo que estaba pasando en lo que menos pensaba era en comer, tan solo quería llegar a un lugar seguro para ambos. Ya luego podría comer como correspondía cuando todas esas preocupaciones desaparecieran. Negué suavemente, pero sus cejas bajaron y se juntaron un poco demostrando que no aprobaba mi elección.

—Soy pequeño, pero no tonto. Si no comes algo te puedes sentir mal, Sun —partió el pan en dos trozos y me extendió una de las mitades—. Los dos podemos comer un poco, ¿ves? Y si quedas con hambre puedes sacar del otro pan, ya luego veremos de dónde sacamos más comida, puede que cerca haya un árbol con algún fruto...

Y tenía razón, ¿y si me faltaban energías, cómo lo podría cuidar? Si bien no era una enorme porción, algo aportaba. De nada iba a servir si me sentía mal en medio del bosque y solo tenía la compañía de Jungkook. No habría mucho para hacer y hasta buscar ayuda sería todo un desafío. Si se llegaba a perder en el bosque y le pasaba algo malo... No lo quería ni pensar. Él merecía estar bien.

—Comeré un poco, entonces —una suave sonrisa se extendió en mis labios—. Ahora vamos a la cama para no seguir tocando el piso que está algo frío.

Con rapidez trotó hacia la cama, pero se sentó con cuidado. Ya pensaba yo que iba a dar un brinco, pero era un niño muy educado como para tratar con brusquedad cosas que no le pertenecían. Saqué mis zapatos al igual que él, y ambos terminamos subiendo los pies mientras seguíamos comiendo los trozos de pan como si se trataran de algún manjar de dioses.

Puede que no fuera el momento más lindo ni la situación más adecuada o el ambiente más cálido, pero estábamos juntos intentando salir adelante y se sintió más reconfortante que nunca. Juntos en serio parecía que la vida nos sonreía un momento, y a pesar de todo lo que nos podía hacer falta, la compañía del otro era suficiente para sentirse en hogar.

Con razón algunas personas decían que los lujos no lo eran todo, porque estando a su lado en una casita descuidada en el bosque me pude sentir igual o más segura que estando en una mansión con miles de comodidades y paredes tan altas como si pasarlas fuera algo imposible.

—Te quiero mucho, Sun —su dulce voz se coló en mis oídos cuando el sol ya había desaparecido por completo. Mis brazos rodeaban su pequeño cuerpo que emanaba calor.

—Y yo a ti, Kook. Eres mi persona favorita en el mundo. Nunca lo olvides.

Y aunque no lo vi, supe que una tierna sonrisa decoró su rostro cuando escuchó mis palabras. Aunque fuera algo imposible, deseé que el tiempo se pudiera haber congelado en ese precioso momento que consideré como uno de los más valiosos que había tenido a lo largo de mi vida.

●▬▬▬▬20/05/22▬▬▬▬●

Otra vez perdón por la demora, pero con la universidad han sido meses muy locos y antes de sentarme a escribir quise organizar bien la historia y aclararme algunos detallitos que todavía no tenía muy claros.

Espero que hasta ahora le sigan un poco el hilo a la historia, que ya luego vendrá lo más complicado y mejor ir preparándose. Por cierto, ¿qué les parece esta relación entre Jungkook y Sunbin? A mí me duele el corazoncito cuando les pasa algo malo o cuando se alejan :Además me imagino que con tanto misterio más de alguno puede estar confundido.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro