Ni Jungwon ni Jay habían hablado sobre lo ocurrido más temprano. Jay había preparado waffles para el desayuno. Jungwon había tomado muchas fotos de sus waffles con fresas mientras que Jay los comía con bastante miel. Ambos publicaron al mismo momento una historia en Instagram con una foto de sus respectivos desayunos mientras etiquetaban al otro. Todo sea para que su relación parezca más real para las demás personas.

Aunque luego de publicar esas fotos llegaron un montón de mensajes de sus amigos para preguntar si estaban juntos, lo cuál era obvio.

Después del desayuno, Jungwon tenía que lavar su ropa en la lavadora. Jay se ofreció a ayudarlo a separar por colores la ropa y luego secarlar. Jungwon no protestó porque le convenía no tener que secar su ropa. Aunque a cambio de eso tuvo que prometer que sí almorzaría con la madre de Jay.

Mientras la lavadora hacía su trabajo, Jay estaba secando la primera parte de la ropa que se había lavado. Jungwon salió de ese espacio hacía la sala para contestar la llamada de Hyewon, quién le había enviado muchos mensajes antes.

- Vaya, por fin contestas.

- Estaba ocupado.

- Ni me quiero imaginar lo que sea que hayas estado haciendo con tu novio falso.

- No hicimos nada atrevido.

- Ni tu misma madre creería eso. Soy tu mejor amiga. Te conozco perfectamente. Además, también he escuchado sobre Jay y no es muy inocente que digamos.

- Está bien. Quizás sí hice algo demasiado atrevido a lo cuál él me siguió la corriente. Pero siempre estuvimos con nuestra ropa puesta.

- No juegues así, Jungwon. Puedes perder.

- De hecho, hace unos días te dije que iba averiguar si Jay está enamorado de mí.

- ¿Y?

- Pienso actuar de manera atrevida con él para saber cuánto puede controlarse. Si sólo quiere acostarse conmigo, entonces se dejará llevar fácilmente. Si está enamorado de mí, entonces me respetará y será incapaz de llegar más allá a menos que yo le dé permiso.

- Tal vez es una buena manera de poner a prueba eso. Aunque si está enamorado de tí es obvio que te tendrá ganas y quizás no pueda controlarse, a pesar de querer algo duradero contigo.

- Lo iré analizando en el proceso. Al mediodía día iré a almorzar con su madre así que deséame suerte.

- No es necesario. Creo que a quién debería desearle suerte es a ella para ver si puede soportarte.

- Traidora. Debes estar de mi lado.

- Descuida. Te deseo suerte. ¿Contento?

- Sí.

- Creo que ni tu madre te consiente tanto como yo. Cuídate.

Hyewon finalizó la llamada. Jungwon guardó su celular y entró nuevamente al espacio de lavandería. Encontró a Jay acomodando la ropa seca sobre una mesa.

— Ya terminé de secar esa ropa. Puedes guardarla.

— Okey - Jungwon agarró la ropa seca y la llevó a su habitación.

Jay se asomó sigilosamente por la puerta para asegurarse de que Jungwon no estuviera cerca. Luego, entró al chat que tenía junto a Sunoo y Sunghoon. (Era otro chat que no incluía a HeeSeung. Jay ordenó eso).

Jay.
Descubrí el plan de Jungwon. Quiere poner a prueba mi control.

Sunoo.
Interesante descubrimiento, Jay.

Sunghoon.
¿Y qué piensas hacer?

Jay.
Pienso seguirlo el juego. Haré que él se sienta atraído por mí. Primero me enfocaré en atraerlo físicamente. Una vez logre eso podré dar el siguiente paso que es hacer que se enamore de mí. Cuando esté enamorado de mí, le haré la propuesta de vivir juntos.

Sunghoon.
Tengo el presentimiento que tienes todo ese plan escrito en alguna hoja.

Sunoo.
Nosotros te ayudaremos, Jay ;)

Jay.
Gracias, chicos :)

Jay escuchó que Jungwon nuevamente se aproximaba a la lavandería así que guardó rápidamente su celular. Afortunadamente, la lavadora hizo sonar esa típica alarma que te indicaba cuando había terminado de lavar la ropa.

— Wow, parece que ya se terminó de lavar el segundo grupo de ropa - Jungwon empezó a sacar la ropa y ponerla en cestas.

— Tenías mucha ropa sucia.

— Lavo cada dos semanas. Y eso que antes tenía mucha más ropa sucia porque salía bastante, pero desde que se anunció que teníamos una "relación", la cantidad de pretendientes bajaron - Jungwon suspiró fingiendo tristeza.

Jay arqueó una ceja, su expresión se volvió de ligera incredulidad.

— ¿Estás insinuando que fingir estar conmigo te ha arruinado las oportunidades?

— No sé si arruinar sea la palabra, pero digamos que los mensajes coquetos disminuyeron. Antes me llegaban flores, invitaciones y regalos. Ahora, nada.

Jay dejó escapar una risa baja, caminando lentamente hacia Jungwon. Su figura alta y su presencia dominante hicieron que el pequeño espacio se sintiera aún más reducido.

— Tal vez porque se dieron cuenta de que no tienen ninguna oportunidad. Al menos, no mientras estés conmigo.

Jungwon dejó otra cesta de ropa sobre el suelo y se giró para enfrentarlo, con una sonrisa divertida y desafiante.

— ¿Y qué tal si quiero que vuelvan las flores? Tal vez extraño un poco la atención.

Jay se inclinó hacia Jungwon, colocando una mano en la pared justo al lado de su rostro, atrapándolo entre su brazo y la secadora. Su mirada estaba fija en los ojos de Jungwon, y la seriedad de su tono contrastaba con la burla de su sonrisa.

— Si quieres atención, no necesitas buscarla en nadie más. Te puedo dar toda la que quieras y más.

— ¿Ah, sí? ¿Y qué clase de ‘atención’ tienes en mente?

Jay se inclinó un poco más cerca, sus labios a pocos centímetros de los de Jungwon.

— La suficiente para que no vuelvas a pensar en ninguno de esos pretendientes. Créeme, no pueden ofrecerte lo que yo sí.

Jungwon mantuvo la mirada, sin ceder ni un paso atrás. Levantó una ceja, claramente disfrutando del desafío que Jay le planteaba.

— Vaya, qué confianza. Pero, ¿sabes? A veces es divertido jugar con varias opciones. ¿Quién dijo que me quedaría solo con una?

Jay dejó escapar una risa baja, pero había algo peligroso en su tono.

— ¿Varias opciones? Jungwon, no necesitas varias cuando tienes la mejor. Lo sabes tan bien como yo.

Jungwon sonrió con picardía, llevando las manos a su cintura en un gesto relajado pero provocador.

— ¿Y si decido probar tu teoría? Tal vez descubra que no eres tan insuperable como crees.

Jay se enderezó ligeramente, pero no retrocedió. En lugar de eso, se inclinó lo justo para que su aliento rozara el cuello de Jungwon antes de susurrar.

— Puedes intentar, pero te advierto que nadie te hará olvidarme.

Jungwon soltó una ligera risa, una mezcla de nervios y desafío. Colocó una mano en el pecho de Jay, empujándolo ligeramente para crear algo de distancia.

— Vaya, qué humilde. Supongo que tendré que pensar en eso mientras termino de sacar mi ropa de la lavadora.

Jay dio un paso atrás, su sonrisa ladeada y segura aún en su rostro.

— Hazlo, pero no tardes demasiado. Ya sabes dónde encontrarme si necesitas una demostración - Jay nuevamente se acercó a Jungwon para susurrarle al oído —. Me tienes todas las mañanas en la facultad de negocios, en las tardes estoy en el décimo piso de PJS y todas las noches me tienes durmiendo a tu lado.

Jay se alejó un poco de Jungwon para que notara su sonrisa y recogió una cesta con ropa recién sacada de la lavadora para empezar a secarla.

Jungwon negó con la cabeza, dejó escapar un suspiro y miró la cesta de ropa, pero su sonrisa no desapareció.

«Definitivamente sabe cómo mantener las cosas interesantes»

⏳

Era la una de la tarde. Jungwon se quitó el cinturón de seguridad y bajó del auto de Jay.

Jungwon llevaba puesto un cárdigan marrón claro de punto grueso, abotonado, con cuello en V y debajo usaba un polo blanco. Sus pantalones eran de color beige claro. Para completar su atuendo, usaba zapatillas deportivas blancas y un collar. Su estilo era informal. Estaba listo para discutir con la madre de Jay por si criticaba su simple outfit.

Jay vestía más elegante porque no se había cambiado de ropa desde ayer que salió del trabajo. Había dejado "accidentalmente" su chaqueta en el departamento de Jungwon. Por lo tanto, llevaba una camisa blanca de manga larga, abotonada, que le queda holgada, pantalones negros y sus zapatos negros.

Dejaron el auto en el estacionamiento de la casa y entraron por un pasillo que conectaba ese espacio con el interior de la casa.

Jungwon miraba curiosamente a su alrededor. Esa casa era mucho más lujosa que la de Jay. Era obvio que su madre tenía gustos mucho más caros.

— Por favor, evita discutir con mi madre.

— No prometo nada.

Jay suspiró y guió a Jungwon hasta el comedor. Abrió la puerta y dejó que Jungwon fuera el primero en ingresar.

— Vaya, ya iba empezar a comer sola - Minhee comentó —. Mi hijo no solía llegar impuntualmente.

— Estuvimos ocupando lavando y haciendo limpieza - Jay contestó.

Jay se sentó al frente de su madre y Jungwon tomó asiento a su lado izquierdo.

— Ni siquiera para un almuerzo puedes vestirte un poco más decente - Minhee miró a Jungwon.

— No es mi culpa que usted piense que vestirse decentemente y usar ropa simple y cómoda sea diferente. Podría quejarse de que soy indecente si hubiera venido con ropa demasiado reveladora.

— Tu sentido de la moda es pésimo.

— Corrección. Yo priorizo mi comodidad por encima de usar ropa costosa. No es mi estilo aparentar ser millonario cuando no lo soy. No me avergüenzo de venir de una familia de bajos recursos.

— ¿No se supone que estás usando a mi hijo para salir de la miseria?

— Descuide. Cuando Jay y yo nos casemos dejaré que toda la fortuna se quede con él. No me apoderare de nada. No soy tan ambicioso como usted.

— Mi hijo no se casará contigo.

— Mamá—

— Su opinión no nos importa - Jungwon entrelazó su brazo con el de Jay —. Mejor vaya haciéndose la idea de que me tendrá como su yerno por el resto de su vida. Me aseguraré que sus nietos no la odien tanto como usted me odia a mí.

Jay sonreía mientras miraba a Jungwon. Su corazón latía aceleradamente mientras pensaba en cómo serían sus hijos con Jungwon. ¿Tendrían los bonitos ojos de Jungwon?

— Creo que el apetito se me fué - Minhee dejó a un lado sus palillos.

— Es una lastima. La comida se vé deliciosa - Jungwon dejó de agarrar el brazo de Jay y empezó a comer —. Sabe muy bien. Definitivamente usted no cocino esto.

— ¿Qué estás insinuando? - Minhee preguntó con molestia.

— Que usted no sabe cocinar. Al menos eso me contó Jay. ¿Verdad, amor? - Jungwon miró a Jay.

— S-sí - Jay por poco se atraganta con la comida luego de escuchar ese apodo.

— ¿Hablas mal de tu madre con desconocidos? - Minhee miró con indignación a su hijo.

— Corrección. No soy un desconocido. Soy el amor de su vida.

— Tú cállate.

— No hay necesidad de que se enoje, suegra. Debería sentirse orgullosa que su hijo haya elegido a un chico tan lindo y talentoso como yo.

Minhee miró con desdén a Jungwon mientras él trataba de aguantar las ganas de reírse en su cara. La situación era bastante divertida.

— Mamá, por favor, deja de provocar una discusión - Jay interrumpió.

Minhee trató de calmarse y nuevamente agarró sus palillos para continuar comiendo.

— Entonces, Jungwon, ¿cómo fue tu primer día en PJS? Espero que no haya sido demasiado abrumador. Es un entorno competitivo, después de todo.

— Fue un día interesante, señora Minhee. Pude conocer al equipo y ya estoy trabajando en ideas para la colección de primavera. No se preocupe, me gustan los retos.

Minhee esbozó una sonrisa fría y tomó un sorbo de su té antes de continuar.

— Me alegra escuchar eso, pero debo advertirte que trabajar en PJS no es como en otras empresas. Aquí no solo basta con ser creativo, sino también con ser consistente. Jay necesita rodearse de personas que lo impulsen hacia adelante, no que lo distraigan.

Jay tensó la mandíbula, pero antes de que pudiera intervenir, Jungwon respondió con calma y una sonrisa segura.

— No se preocupe, señora. Sé muy bien cuál es mi lugar en PJS. Estoy aquí para sumar, no para distraer. Mi trabajo hablará por sí solo.

Minhee arqueó una ceja, claramente poco impresionada por la respuesta.

— Veremos si es así. Después de todo, los otros dos nuevos talentos tienen áreas de especialización muy marcadas. Junseok, por ejemplo, domina el diseño experimental, y Danbi tiene una técnica impecable para el prêt-à-porter. Pero tú, bueno, aún no escuché sobre tu especialización.

Jungwon mantuvo su sonrisa, aunque sus ojos brillaban con un toque de orgullo desafiante.

— Quizás porque no me limito a una sola especialización. Me gusta explorar y adaptarme según lo que el mercado necesite. Para la temporada de primavera, me encargaré de la línea de moda masculina.

— ¿Moda masculina? Eso será complicado, considerando que ya tenemos una diseñadora con experiencia liderando esa área. Park Eunyoung lleva años trabajando con nosotros y tiene un historial impecable. ¿No temes que comparen tus diseños con los de ella? Podría ser incómodo.

Jungwon inclinó ligeramente la cabeza, como si estuviera considerando la pregunta, pero su respuesta fue rápida y cargada de determinación.

— ¿Por qué habría de temer? Creo que tener dos diseñadores en esa área puede ser beneficioso. La competencia siempre saca lo mejor de nosotros, ¿no cree? Además, quién sabe, tal vez sorprenda a Eunyoung y a usted.

Minhee soltó una ligera risa.

— Qué confianza. Espero que no te decepciones si las cosas no salen como esperas.

— Decepcionar no está en mis planes, señora. Estoy seguro de que mis diseños le demostrarán que tomaron la decisión correcta al incluirme en el equipo.

Jay observaba la conversación en silencio, claramente disfrutando cómo Jungwon respondía con astucia a cada intento de Minhee por menospreciarlo. Finalmente, intervino, rompiendo un poco la tensión.

— Bueno, parece que la colección de primavera será interesante con todo este entusiasmo. No puedo esperar a ver lo que todos ustedes tienen preparado.

Minhee desvió la mirada hacia Jay, claramente frustrada de que él no estuviera de su lado en ese momento.

— Espero que tengas razón, Jay. La reputación de PJS está en juego, y no podemos permitirnos ningún desliz.

Jungwon sostuvo la mirada de Minhee, sin perder la sonrisa.

— Confíe en mí, señora Minhee. Estoy aquí para ganar, no para fallar.

El almuerzo continuó, pero el aire seguía cargado de tensión, y Minhee supo que Jungwon no era un chico fácil de intimidar.

Dr13a.

Más arriba mencioné la palabra prêt-à-porter así que quiero dejarles el significado:

Prêt-à-porter es uno de los sistemas de diseño y patronaje de moda que más se utilizan. En la actualidad, este concepto es el que da acceso a la industria de la moda en tendencia, es decir, este término se emplea para referirnos a la ropa que se produce en serie y está “lista para llevar”. Así pues, gracias a sus características, es posible comprar y vestir con diseños en tendencia y sin que sea necesario acudir a una modista. En este método se diseñan las prendas tomando como referencia las tallas estándar (pequeña, mediana y grande). Así es como este sistema es mucho más económico y accesible para un público más amplio.

Gracias por leer y votar 💙
Más tarde publicaré el siguiente capítulo. En el otro capítulo habrá fiesta 😎