No sabía que era lo que lo había convencido, pero lo estaba derritiendo, giró la cabeza gustoso cuando Hoseok se enterró para besarle ahí, su respiración cerca le hacía cosquillas placenteras que le robaban el aliento y jadeaba, silencioso cuando sentía sus manos apretarse en su cuerpo.

Estaba en el cielo, porque Hoseok lo acariciaba lento pero firme, recorría con sus grandes manos lo que su flexión hacía curvo y parecía que le gustaba, lo besaba como nadie más nunca lo haría y lo consumía por completo. Suspiraba contento y lo tomaba por el cuello, tratando de sacarle la camisa pero sin dejar de besarlo también.

- Espera. - Murmuró Hoseok entre besos cuando supo de sus intenciones. - Tae. -

- ¿Cambiaste de opinión? - Hoseok negó, dándole un beso.

- Vamos a hacer esto. - Confirmó el mayor y Taehyung asintió desesperado. - Y las cosas no volverán a hacer cómo antes, nunca. - Analizó y casi se distrajo sino fuese por que el menor se sobó hacía arriba. - Tae, no se qué va a pasar con nosotros. - Dijo rápido y se detuvo para escuchar al mayor. - Nadie va a estár de acuerdo, nadie va a entenderlo. -

- Nadie tiene que saberlo. - Se apresuró a decir Taehyung y tomó el rostro de Hoseok en sus manos. - No se lo diré a nadie, no lo mencionaré jamás. -

- No quiero hacerte daño. -

- Tú no lo harías, se que nunca lo harías. - Consoló el menor rozándo su mandíbula con la punta de su naríz. - Confio en ti, con los ojos cerrados y sin dudar una sola de tus palabras. Yo haría cualquier cosa por ti, y se que harías lo mismo por mi. - Hoseok lo miró un poco confundido, la fiereza del principio estaba desaparecida y Taehyung no quería tener que convencerlo. - Pero sino quieres hacerlo, no tenemos que-

- Sí quiero. - Admitió Hoseok. - Eres lo mejor que me ha pasado. Vivo para ti. -

Taehyung sonrió conmocionado y volvió a tomarlo por el cuello, se besarón contentos, con desesperación y euforia, Hoseok solo se levantó para sacarse la camisa y Taehyung le paso las manos por el pecho y abdomen, contento de notar cómo hacía que se contrajera. Bajo su mano solo un poco, la fría hebilla de su pantalón fue como un destello en medio de su atmosfera, Hoseok no lo detuvo cuando tocó en medio de sus piernas.

La abulada dureza contenta de encontrarse con las manos traviesas de Taehyung y notó como a Hoseok le gustó, entonces lo siguió haciendo, sobándolo fuerte de arriba a abajo aún sobre la ropa, lo seltía caliente y solo logró poner más duro a Taehyung.

Le dio paso entre sus piernas y Hoseok se acomodó ahí sin dejar de besarlo. Taehyung no traía maquillaje y a Hoseok le encantó más así, el Tae real. Tenía la piel morena pálida y su cuerpo era tan delgado que parecía encojerse aún más cuando lo acariciaba. Sus manos tocaban al menor por todas partes, innevitable, la inquietud de los últmos días era liberada en ese momento.

El cuerpo hermoso de Taehyung hervía debido a Hoseok y nunca había pasado por algo más maravilloso. Taehyung era cómo el cielo en la tierra y Hoseok se iba ir al infierno. La culpa y Jimin pasaban por su mente a pesar de lo que estaba haciendo, pero es que no se sentía como si lastimara a Taehyung.

Si tan solo Jimin pudiera verlo así, tan sumiso y complacido por Hoseok, únicamente por él. Me pertenece. Aseguró Hoseok, no quería a nadie más para Taehyung, no quería perderlo. Verlo casi morir ahogado solo quito la nube gris de sus pensamientos. Ya no podía mentirse y obligarse a creer que no sentía nada más alla de lo fraternal.

Él chico debajo de su cuerpo, el mismo que jadeaba y lo miraba con amor, era lo único claro en su vida entonces. Nada más importaba en ese momento, nadie más importaba, solo Taehyung. Y lo amaba aunque no tuviera nunca el valor de admitirlo.

- Tae... - Le salió en un gemido, cuando el más joven lo tomó de la espalda baja para que se apretara contra él y sus erecciones se encontraron. Repitió el movimiento, ya era Hoseok quien se estaba moviendo sobre él y Taehyung le apretaba los hombros en cada falsa embestida.

El menor estaba gloriosamente desnudo, con las piernas abiertas y flexionadas mientras Hoseok se mantenía enmedio aún con los pantalones puestos. Debían llegar a lo siguiente, pensaba Taehyung impaciente.

No estaba asustado, ni una pizca. Pero Hoseok sí porque no quería herirlo. No dejaron de tocarse aún así, Taehyung hizo girar a Hoseok sobre la cama y se armó de valor para bajar sobre su cuerpo. Sonrío con picardía, su mentón se rebalaba sobre la entrepierna del mayor y lo hizo jadear.

Taehyung uso sus manos delgadas para desabrochar sus pantalones y lo apretó fuerte cuando lo vio duro contra su ropa interior. Hoseok giró la cabeza, deseoso pero sin querer ver lo que quizá iba a hacer. El más joven le sacó los pantalones y solo tuvo que remover un poco sus boxer para encontrar la dureza entre la mata.

Lo tomó y jugó entre sus dedos, gustoso de ver disfrutar a Hoseok. Alguna vez supo que hacer con eso, pero en ese momento estaba indeciso. Hacer terminar a Hoseok o torturarlo un poco para que pudieran proseguir. Se lo metió entero a la boca y dejo que la punta resbalara a su garganta, contuvo la arcda y sus lagrimas se juntaron. Bien, necesitaba practica.

Aún podía chuparlo. De la base al glande, al rededor y con la lengua pasandole sobre las venas, en aquella que le palpitaba y la que desaparecía conforme bajaba, debajo de la cabeza y en el prepucio también. Un apretón en los testiculos, se lo metió de nuevo a la boca, menos brusco y buscó complacerlo con el paladar, las mejillas aguecadas y la lengua debajo, en un leve vaiven que hizo que Hoseok lo tomara por el cabello hasta quitarlo. Taehyung apenas pudo abrir los ojos cuando Hoseok lo regresó al colchón, se apretó encima y lo besó duramente.

Le separó las piernas de nuevo y bajo a su miembro, para nada igual de imponente que el de Hoseok. Se lo acarició de arriba a abajo y Taehyung apretó las piernas, comenzó a masturbarlo siendo experto y el menor se asustó de terminar tan pronto, quiso detenerlo, pero Hoseok le beso el cuello al mismo tiempo y sus ojos se apretarón.

Se vinó más rápido de lo que esperaba, derrotado y avergonzado porque no tuvo el mismo aguante que el mayor. Pero si lo había relajado y estaba respirando pesado cuando Hoseok ocupó su mismo semen para acariciarle la entrada con solo la punta de sus dedos.

Se le paró el corazón por un istante, entediendo lo que estaba apunto de pasar y el añoro que siempre tuvo fue más grande que haberse asustado por el dolor. Sabía que Hoseok iba a ser cuidadoso y lo dejo seguir acariciando mientras Taehyung lo abrazaba.

Solo pensaba en relajarse, guiar la soltura de su cuerpo para hacerselo más facil, pero entonces Hoseok se detuvo y Taehyung se separó para mirarlo. Hoseok besó la punta de su nariz y solo se estiró un poco para tomar una loción de manos.

- Se que no es para esto. Pero no tiene alchol, no debería arder. -

Taehyung terminó asintiéndo, pensando que lo dejaría hacer lo que quiera si tan solo se apuraba. Entonces Hoseok se sentó entre sus piernas y Taehyung se sintió un poco avergonzado de estár completamente expuesto para él. Hoseok dejo la loció calentar en sus manos y la colocó sobre ese lugar. Acariciando al rededor y tomándose un buen tiempo en pensar cómo haría lo que tenía que hacer.

Solo siguió tocando, sorprendo de ver como los mismos músculos sedían y podía comenzar a tocarlo un poco profundo. Fue morboso cómo sus dedos rebalaban, fue atrevido pensar en agregar otro, fue descarado cuando tres estaban adentro y Taehyung suspiraba al sentirlos más profundo.

- Ahora... - Pidió el menor y Hoseok siguió dilatandolo, queriendo que todo fuera lo manos doloroso a pesar de que él también estaba desesperado. Colocó loción en su palma, se masturbó a si mismo, miró el rostro de Taehyung cuando alineó la punta.

Tenía los ojos cerrados y la cabeza inclinada, una de las manos de Hoseok lo tomó del trasero y lo hizo levantar aún más las piernas, su hombría solo permanecía quieta palpitanto sobre la intimidad de Taehyung. Lo haría de a poco, su glande resbaló tan fácil que lo sorprendió. Taehyung no se estaba quejando, así que siguió.

Conteniendo la respiración mientras se fue enterrando, nunca dejo de acariciarlo, le besaba la palma de sus manos y le repetía lo hermoso que era. Fue un alivió cuando estuvo adentro por completo y se quedo quieto esperando que se acostumbrara.

Taehyung aún tenía los ojos cerrados, sintiéndose apenado de ser cómo un inexperto y no saber que hacer. Ya no dolía tanto, porque no se estaba moviendo. Y comenzó a tocar de arriba abajo la espalda de Hoseok para hacerle entender que estaba bien.

La primera estocada fue lenta, abrumadora para ambos, para Taehyung estaba siendo demasiado, y para Hoseok más de lo que nunca se atrevió a imaginar. Era fántastico, su entrega, la unión de sus cuerpos y la intimidad, lo folló despació al principio un buen rato hasta que lo escuchó gemir.

Taehyung descubrió ser demasiado callado y eso no significaba que no lo complaciera, simplemente era así, callado. Y esperaba que esa aura de intimidad y confianza no confundiera a Hoseok, aunque era poco probable dado que parecía concentrado en su faena. Disfurtó de verlo gozar y se concentró en sus gestos cuando se enterraba brofundo y parecía gustarle. Paró de pronto y Taehyung se quejó.

- Date la vuelta. - Pidió el mayor saliendo de él y torpemente obedeció.

Recostó su rostró en la almohada y su espalda quedo erguida mientras exponía su retaguardía, gimió cuando Hoseok lo dejó quieto con sus fuertes manos sobre sus caderas y comenzó a besar los huecos de la remarcada médula espinal, la delgada figura de Taehyung mostraba cada intersección conforme se retorcía y Hoseok quería desbordar esos espacios con besos.

Eso fue demasiado para el menor, se encontró a si mismo restregandose contra Hoseok para que se apurara a entrar. Lo sintó de nuevo igual de duró y caliente, se empujó más contra las almohadas y gimió sonoro cuando sintió algo más.

Hoseok también se dio cuenta, y se llenó de suficiencia al notar el placer en Taehyung. Golpeó en el mismo lugar, Taehyung lo apretaba deliciosamente y se perdía en la vista de verse desaparecer adentro. -No debería estár disfrutándolo tanto-. Lo hizo más fuerte, más rápido, el liviano peso del otro se dejo ser bajo sus manos, lo levantó de la cadera, lo hizo gemir más alto, Taehyung se aferraba al colchón para no perder el equilibrió. Sintió a Hoseok cómo el grande hombre que era sobre él y eso lo excitaba más. Lo masturbaba al mismo tiempo que lo penetraba. Sus ojos girarón en blanco cuando no pudo soportarlo más.

- Hoseok... - Apenas murmuró corriéndose de nuevo mientras sentía que Hoseok no se detenía. De pronto estaba perdido, solo existiendo cuando el placer le cegó los sentidos y el mayor se enterró profundo para terminar ahí.

Fue un momento extraño. Mudó para ambos cuando Hoseok salió y Taehyung se derrumbó en la cama, Hoseok resiraba pesado, admirando su obra en el menor agotado.

- Tae. - Le llamó y este sonrió sin mostrar los dientes, mirándolo dulcemente. Hoseok quitó el cabello de su frente y se acostó junto a él, el más joven somnoliento y el mayor aún analizando la situación.

- Me has roto. - Murmuró Taehyung.

Pero el significado de "roto" era diferente para ambos, y mientras Hoseok comenzaba a sentirse culpable, Taehyung sintió que aquella barrera de inseguridad y desconfianza había desaparecido, todo había sido perfecto, Hoseok era perfecto, y no podía sentirse más pleno.