Maratón 1/2

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"Ésto es inaceptable , chicos. No es justo" Namjoon murmura, caminando de aquí para allá por la cocina, con las manos manasejando sus sienes. "¿Por qué tiene que ser así? ¡Joder!" masculla, con un fuerte gruñido luchando por escapar de su garganta.

Taehyung se cruza de brazos.

"¿Por qué hyung siquiera consideraría convertir a Jungkook en su guía? ¿En su omega?" se queja, arrugando las cejas de tan sólo pensar en esa posibilidad.

Jungkook es su omega (aunque no lo sabe aún), no de Seokjin. No lo será.

Taehyung se niega rotundamente a ello.

"Porque es la única forma en que podrá cuidarlo en el caso de que Busan venga a Gyeonggi; porque él está dispuesto a asumir la responsabilidad por nuestros actos; porque él sabe que no podemos cuidarlo" Jimin les explica, sentado en la mesada de la cocina, mientras bebe su té con una tranquilidad que irrita a sus hermanos.

Y es que Jimin parece ser el único de los tres al que no le afecta (o, al menos, no tanto) la charla que tuvieron con Jin, y ni Namjoon ni Taehyung son capaces de entender cómo es que él logra mantener tanta calma.

Seokjin les quitará a su omega, ¡por la Luna!, ¿por qué no reacciona como un alfa normal? ¿Uh? ¿Por qué no defiende al omega que tanto desea?

Taehyung gruñe, arrugando las cejas.

"Pero Seokjin hyung-"

"Él sólo está siendo un buen hyung para nosotros, incluso si en el proceso tiene que ir en contra de sus ideales como el líder de la manada. ¿Por qué se enojan con él?" Jimin le interrumpe. "Ustedes deberían enojarse con Busan, no con Jin hyung. ¡Él nos está haciendo un favor!"

"¡Pero-! ¡Pero se llevará a mi omega!" Namjoon le explica, haciendo pucheros. "Y mi lobo no puede soportarlo" admite, rendido ante el dolor en su pecho, en su corazón, ante lo expuesto que se siente a sus hermanos.

Porque, luego de mucho negarlo, por fin ha reconocido en voz alta que este lindo omega le gusta, que su lobo le considera suyo, y que no quiere verle rodeado por otros brazos que no sean los suyos.

Por favor, no.

Namjoon no va a soportarlo.

Oh, Luna...

Jimin suspira, dejando la taza a un lado, y ladea la cabeza, haciendo una mueca mientras observa a sus hermanos. Y aún si para Jimin no es ningún secreto que los tres estén enamorados de Jungkook, definitivamente le sorprende lo mucho que sus hermanos están sufriendo por la situación en la que se encuentran.

"Pero Jungkook no es nuestro omega, chicos, y no es su culpa si nos hemos enamorado de él" replica, entendiendo el sufrimiento, mas no dejando que éste le nuble la razón. "No podemos ponerle en peligro sólo porque nuestros lobos le consideran suyo, porque le quieren."

Oh.

Namjoon baja la mirada, sintiendo sus ojitos aguarse, y le hace un puchero a la nada misma, sintiendo a su corazoncito resquebrajarse ante el golpe de realidad que le han dado: Jeon Jungkook no es su omega, aunque el alfa así lo considera, y tampoco lo será en un futuro. Porque le han traído a una manada que ama a los omegas, que los adora, y ahora cualquier lobo puede amar a Jungkook, cualquiera lo puede enamorar, y al alfa no le quedará más remedio que guardar para sí mismo todo el amor que siente, siendo incapaz de interferir entre Kook y el lobo que le enamore. Porque le han traído aquí para que sea feliz, para que tenga una vida hermosa y normal, mas ni él ni Taehyung habían considerado que otro lobo podría darle a Jungkook esa vida. Ninguno consideró la pequeña posibilidad de que él podría enamorarse de otro lobo que no fuese ellos y, por la Luna, ¿por qué fueron tan ilusos?

Si es que hasta Seokjin incluido podría enamorar al lindo omega, ¡joder!

"Lo que Seokjin hyung nos ofrece es lo mejor que le podría pasar a Jungkook" Jimin murmura, intentando mantener su tranquilidad, su aceptación, pero es claro que todo ello se va por la borda al momento en que siente el bonito aroma de Jungkook adueñarse del lugar.

Porque, oh, incluso si es peligroso, Jimin en serio quiere a ese bonito omega sólo para él.

Joder.

Ajeno a toda la situación, al lío que los alfas tienen en mente, Jungkook asoma su cabecita por el marco de la puerta, abriendo mucho sus ojitos, y les sonríe bonito, provocando en los alfas suspiros embobados.

Oh, este omega-

"Hola, alfas" les saluda con voz dulce, suave. "¿De qué hablan? ¿Mh? ¿Puedo formar parte de la conversación?" les pregunta, batiendo hermosamente sus pestañas.

Hace a Jimin llevar una mano hacia su pecho, intentando controlar los latidos desesperados de su corazón.

"Sólo hablábamos de la cena" Namjoon se excusa, haciéndole señas para que se acerque, mas el bonito omega sabe que le mienten, lo ve en el evidente accionar de Taehyung, el cual se muerde el labio inferior en un completo acto nervioso, ansioso.

Jungkook arruga la nariz ante ésto.

"Alfa mentiroso" farfulla, adentrándose en la cocina, yendo directo a los brazos de Taehyung, intentando tranquilizarlo, y parece que logra su cometido, pues el alfa relaja los hombros y le rodea por la cintura de forma instintiva, olisqueando su cuello suavemente.

Namjoon, mientras, le saca la lengua al menor, haciéndolo reír bajito, contento.

"Omega bobo."

Jungkook se ríe, descansando la cabeza en el fuerte pecho de Taehyung, y ve a Jimin a buscar ingredientes para hacer la cena, siendo seguido por Namjoon, ninguno queriendo darle explicaciones de lo que los mantiene así, y a Jungkook ciertamente no les molesta.

En algún momento le contarán, él sabe.

Por éso, Jungkook eleva la vista, sus mejillas enrojeciendo al notar que Kim Taehyung ya le estaba observando, y se encoge en su lugar, escondiendo la cara en el cuello del mayor, mordiéndose el labio inferior al sentir los dedos del alfa haciéndole cosquillas en la cintura.

"¡Alfa!" Jungkook se queja, riéndose.

Taehyung arruga la nariz, sonriendo, y le besa la mejilla, restregándose allí por un instante, queriendo impregnarse del adictivo aroma de Jungkook.

"¿Se siente mejor? ¿Uh?" el omega se anima a preguntar. "Le noté nervioso."

El alfa asiente.

"Mientras estés a mi lado, siempre me sentiré bien" le confiesa, picándole las mejillas.

Oh.

Jungkook se ríe, encantado, y asiente, satisfecho con la respuesta, recostando nuevamente la cabeza en el pecho ajeno.

"Yo también me siento así" murmura el omega, rozando su naricita por sobre la ropa del alfa.

Taehyung sonríe, apretando a Jungkook contra su pecho, hundiendo la nariz en el hombro del omega, y siente su boca salivar en exceso ante el aroma ajeno, ante la calidez que el omega le brinda.

'Mío. Mi omega', reclama su alfa interno, y Taehyung asiente para sí mismo. Este omega es todo suyo. Sólo suyo.

Para siempre, suyo.

"Cachorro" Namjoon llama, mirando al omega, ajeno a lo que Taehyung piensa y siente por el lindo omega "¿te gustaría ayudarnos a preparar la cena?"

¿Ayudarlos? ¿Ayudarlos con la cena?

¡Oh!

¡Oh!

Jungkook asiente, eufórico.

"¡Sí, por favor!" chilla, acercándose de manera rápida hasta donde los alfas se encuentran preparando todo, estando tan concentrado en los ingredientes que ni siquiera nota cuando Taehyung sale de la cocina.

Jungkook jamás ha cocinado, y que estos alfas le animen no sólo a hacerlo, sino a aprender cosas nuevas también, hace al omega querer saltar de alegría.

¡Le encanta aprender cosas nuevas!

"¡Quiero hacer una cena deliciosa para todos!" Jungkook chilla.

"Ah, ¿sí?"

"Mh" Jungkook asiente. "Para agradecer todo lo que hacen por mí" les explica en un susurro, y se sonroja hasta las orejas cuando siente el fuerte olor de Hoseok tan cerca, indicando que ha ingresado en la cocina.

"Vaya. Éso es muy considerado y lindo de tu parte, omega" el alfa murmura detrás de él, olisqueando apenitas el lugar.

¡Oh!

Jungkook se encoge, haciéndose para atrás, y baja la vista, abochornado, al tener la atención del alfa en él.

"¡Alfa!" jadea, abrumado, mientras se apresura a hacer una torpe reverencia.

Hoseok se ríe.

"Hola, omega" le saluda, devolviéndole el gesto, y Jungkook se muerde el labio inferior. "Estoy seguro de que la cena estará deliciosa, ¿cierto, Yoongi?" el alfa le dice, sin dejar de mirarle, sonriéndole de una manera en que hace a Jungkook jadear.

Este alfa es-

"Cierto, Hoseok-ah" Yoongi le responde desde la puerta, manteniendo distancia con el omega pues puede notar lo muy avergonzado que se siente.

¡Oh!

Jungkook enrojece en el inicio de sus pómulos.

"¡Jidoja Kim!" le saluda, sorprendido, mas Yoongi menea la cabeza cuando le ve atinando a hacerle una reverencia.

"Hola, cachorro" Yoongi le saluda con una sonrisa dulce, inclinando la cabeza suavemente. "Somos nosotros quienes debemos reverenciarte, no al revés" le recuerda.

Hace a Jungkook sonrojarse aún más. ¿De dónde salieron estos alfas tan raros?

"Intentaré- intentaré hacer u-una cena deliciosa, alfas" les promete.

Hoseok le guiña un ojo, satisfecho con la respuesta, y Jungkook gimotea en queja, avergonzado con el accionar ajeno.

Este alfa es tan raro, tan desvergonzado.

"Sé que lo harás bien" el alfa murmura, dándose la vuelta para volver sobre sus pasos, donde el otro alfa le espera con una bonita sonrisa en los labios. "Yoongi y yo dormiremos un rato antes de cenar. ¿Podrían llamarnos cuando esté lista?"

Namjoon asiente, sin emitir palabra, no prestando real atención; mientras que, por otro lado, Jungkook observa con los ojitos brillando en curiosidad la forma en que Hoseok coge en silencio la mano de Yoongi cuando cree que nadie los ve, entrelazando sus dedos con un cariño y una suavidad realmente sorprendentes, casi como si el imponente líder pudiese llegar a romperse si no se lo trata bien, con el cuidado que se merece; y para el omega es increíble ver que ambos alfas se sienten tan cómodos, tan alegres, al estar así de juntos, al comportarse de esta manera tan íntima.

Es tan-

Por una fracción de segundo, el omega se halla sin palabras, casi hipnotizado, y ladea suavemente la cabeza cuando ve a Hoseok observar a Yoongi como si fuese una criatura preciosa, una que se debe admirar con devoción. Hoseok mira al líder como Jimin, Taehyung y Namjoon le miran a él, de esa manera que te hace sonrojar, sentir cosquillas en la pancita.

Hoseok mira a Yoongi con cariño.

Y, para Jungkook, aquello es-

"Kook" Jimin le llama, interrumpiendo sus pensamientos, "¿hacemos la cena?"

El omega parpadea, confundido, mas asiente de todas formas, dejando a un lado su análisis.

"Sí, alfa. Dígame qué debo hacer."

-

"... y una vez que cortamos las cebollas en cuadraditos pequeños, las vertemos en la-"

Namjoon se calla, su explicación siendo brutalmente interrumpida, y Jungkook se encoge en su lugar al oír que alguien llama a la puerta principal, azotándola de manera desesperada.

Por instinto, Jungkook se esconde detrás del alfa.

"Alfa" gimotea, confundido, y se aferra a la camiseta del mayor.

Namjoon le toma la mano.

"Shh. No te asustes. Probablemente, sólo es un lobo joven que no controla aún su fuerza. Tae abrirá y le dirá que debe ser más suave al llamar en las casas donde hay omegas" le explica con suavidad, no dándole real importancia.

Hasta que a la puerta vuelven a llamar.

Namjoon arruga las cejas y observa a Jimin, el cual se encuentra en el rincón de la cocina, pelando papas.

"Alfa no atendió la puerta" Jungkook dice, como si los alfas no lo hubiesen notado ya, y esconde rápidamente el gran tazón con fresas que hay en la cocina, no queriendo que se lo lleven.

Ow.

Jimin ríe enternecido al ver al menor; y, ahora sí, apaga el fuego bajo la gran olla para ir a abrir la puerta, pasando por la sala de estar sólo para encontrarse con Taehyung durmiendo como un tronco en el sofá, incapaz de escuchar todo el alboroto que están haciendo al llamar a la puerta.

"¡Estoy yendo!" Hoseok exclama para que el lobo tras la puerta le oiga, y baja a toda velocidad por las escaleras de la casa, colocándose una camiseta blanca en el proceso. "Yo abro, cachorros" dice, sonriéndoles dulcemente. "Sigan con lo que estaban haciendo."

Jimin asiente, obedeciendo, y junto a Namjoon le hacen una reverencia antes de tomar las pequeñas manos del omega para llevarle nuevamente a la cocina.

"Alfas" Jungkook les llama en voz baja, mirando por un segundo hacia atrás, a Hoseok, antes de seguir diciendo, "jidoja no tenía una camiseta puesta al bajar las escaleras" comenta, y sus lindas mejillas se ponen rojitas al recordar ese detalle.

"Mh. Lo noté" Jimin asiente, mientras se prepara para seguir pelando papas. "Él acostumbraba a estar sin camiseta todo el día, pero ahora vive con un omega y, por respeto a ti, debe cambiar-"

Jungkook niega rápidamente.

"No me refiero a éso, alfa" le interrumpe con suavidad.

"¿Entonces?" Jimin pregunta.

El omega se sonroja.

¿Realmente quieren que lo diga?

"Pues... que él- él sí la tenía puesta antes de ir a dormir con- con jidoja Yoongi."

Namjoon le mira con las cejas elevadas, sin comprender aún a lo que se refiere.

"Mh. Y ¿qué tiene?"

Jungkook observa a los alfas en busca de una sonrisa o de una mirada que le demuestre que ellos entienden a lo que quiere llegar, pues a él le da vergüenza mencionar sus sospechas, mas todo lo que encuentra son ojitos confundidos, cejas elevadas y muecas ligeras.

Oh.

¿En serio estos alfas-? ¿Estos alfas no tienen idea de lo que sucede allí?

"Nada" murmura, bajando la vista a sus manitos cuando las miradas de los alfas provocan que su estómago cosquillee a tal punto en que es asfixiante "Sólo- sólo estaba haciendo un comentario" sigue, y se lleva una fresa a la boca. "¿Seguimos con la- con la receta?" dice, cambiando el tema con rapidez.

Y Jungkook se alegra cuando los alfas asienten, sin darle mayor importancia, pues no cree ser capaz de hilar frase o idea alguna luego de comprender que sólo a él le resulta muy extraño el trato, las miradas o los toques que mantienen Yoongi y Hoseok. Hace al pobre omega dudar el si Jimin, Namjoon o Taehyung son conscientes de lo que él siente por ellos, lo que su omeguita desea, anhela.

Ow.

"Chicos" Hoseok llama desde la sala, con voz seria, "¿podrían venir un segundo?"

Los alfas le obedecen de inmediato, con ojos curiosos, mientras que Jungkook se asoma apenas por el marco de la puerta, no queriendo que noten su presencia.

"¿Sí, hyung?" Jimin duda.

Hoseok se relame los labios, nervioso, y les enseña el sobre en sus manos, lo cual confunde aún más a los cachorros.

"Acaba de llegar. Es una carta de Busan."

¿Qué?

Jungkook jadea, cofundido, haciéndose para atrás, mas choca contra una silla y se cae de forma abrupta, provocando un enorme estruendo que alerta a los alfas.

"¡Omega!"

Jungkook se cubre instintivamente la cabeza, cerrando los ojitos, y la razón parece abandonarle el cuerpo cuando comprende por qué ha llegado esa carta: su padre le busca para castigarlo.

Su padre va a llevárselo.

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Taehyung camina de aquí para allá en la sala de estar, mordiéndose las uñas, con los nervios carcomiéndole la cabeza, su mente siendo un completo caos entre lo que le ha dicho Seokjin, lo que él desea y la carta que ha llegado que Busan ha enviado, la cual provocó una reunión de emergencia a la que sólo asistieron Jin, Yoongi, Yugyeom y Hoseok, las cabezas más importantes de la manada.

No saber de qué se trata la carta le está sacando de quicio, le da rienda suelta a su mente para que imagine los peores escenarios, e inevitablemente le hace aguar los ojitos, no entendiendo por qué tiene que sucederle ésto a ellos. Por qué Busan no sólo los olvida, los deja en paz, y ya.

Por la Luna, déjenlos en paz.

"No quiero irme" Jungkook lloriquea, hecho un ovillo en el regazo de Jimin. "Por favor, alfa. No deje que mi padre-"

Jungkook deja de decir cuando el alfa le rodea, atrayéndolo mucho más cerca de su pecho, dejando que sienta su esencia fuerte, atrapadora, su aura tranquila, y los latidos acelerados de su corazón por tenerlo tan cerca.

Este alfa-

Jungkook relaja los hombros, posando la nariz en la fuente de aroma del alfa, sollozando ahí, respirando por la boca en un pobre intento por tranquilizar a su asustado lobito.

"Aún no sabemos de qué trata la carta, cachorro. No desesperes" le pide, aún si todos tienen una idea de qué contiene la carta.

El omega hace pucheros.

"Pero, alfa" insiste, sintiendo que está a punto de caer en la locura, en ese pozo horroroso en el que se encontraba antes de conocer a estos bonitos alfas, "si es lo que temo, entonces..."

"Nada va a sucederte" Jimin le asegura, acariciándole la espalda. "Tranquilo."

Jungkook gimotea, haciendo un puño en la camiseta del alfa, sosteniéndose con todas sus fuerzas, no queriendo que le alejen de este alfa.

Por favor.

"Alfa" le llama bajito, incorporándose para mirarlo a los ojos, "por favor, no permita que me vaya. Yo sólo quiero- yo quiero estar con ustedes para siempre."

Jimin le acuna las mejillas, sonriéndole, intentando asegurarle que todo estará bien, y le besa la punta de la nariz, cosa que hace al omega estornudar y arrugar la nariz, sonriéndole apenitas, con sus lindos cachetitos sonrojados.

"No permitiré que te alejen, cachorro. Tú perteneces a mi lado" le promete.

El omega asiente, puchereando.

"Siempre, alfa. Yo quiero estar a su lado."

Jimin le sonríe, sintiendo su corazoncito latir desesperado ante las palabras de el omega, y le aleja con suavidad el cabello que cae por su frente, incapaz de hacer otra cosa que no sea observar lo bonito que se ve Jungkook entre sus brazos.

"«Jimin»" el alfa dice. "Puedes llamarme «Jimin hyung»" concede, sorprendiendo al omega. "No hace falta que- No quiero que me recuerdes mi casta. Sólo dime- dime «hyung»."

Oh.

Jungkook abre mucho más sus grandes ojitos, estupefacto ante lo que el alfa le pide, ante lo que concede, ante la gran intimidad que supone llamar al alfa por su nombre, con un honorífico que sólo les hace más cercanos, y Kook miente si dice que no ha pasado noches rogando poder llamarlos por su nombre, por ése honorífico.

Porque llamarlos «alfas» sólo hace que su corazón duela. Porque le recuerda a su triste vida en Busan.

"Hyung" Jungkook dice, saboreando el honorífico en su lengua, haciéndose la idea de llamarlo así por el resto de su vida, e inevitablemente sonríe de forma boba, mordiéndose el labio inferior con timidez. "Jimin hyung" sigue, la cercanía con el alfa tras sus palabras haciéndole cosquillas en la pancita.

Y Jungkook definitivamente quiere más de ello.

"Minnie hyung" prueba, bajando la voz a una octava, mirando al alfa a través de sus largas pestañas, no queriendo sonar demasiado confianzudo, atrevido.

Pero, oh, la sonrisa bonita del alfa sólo le hace sonreír más y más, incitándolo a llamarlo por ese apodo. Y Jungkook no es quien para decirle «No» a este alfa.

"Minnie hyung" murmura, acariciando las mejillas del alfa, sonriéndole, con los ojitos ligeramente aguados, "gracias."

"No tienes nada que agradecer" Jimin le asegura, y Jungkook se derrite cuando el bonito alfa se relame los labios, bajando la vista por un segundo a su boca, para luego fijar la mirada en sus ojitos, sonriéndole.

"Bien" murmura. "Está bien, hyung."

Jimin se siente enloquecer.

"Muy bien, cachorro bonito" le felicita.

¡Oh, este alfa causa tantas cosquillas en su pancita!

Jungkook se ríe, encantado, y se abraza al fuerte cuerpo del alfa, descansando la cabecita en el pecho ajeno, sintiéndose más seguro que nunca cuando Jimin le sostiene por la cintura, sólo posando sus manos allí, apretando apenitas la carne tierna bajo sus palmas, sin hacer nada más que disfrutar su compañía.

El omega se muere por permanecer así toda su vida.

"¡¿Y bien?!" a lo lejos, Taehyung chilla, su mirada fija escaleras arriba, en los alfas que salen de la sala de reuniones con expresiones serias. "¡¿Qué decía la carta, hyungie?!" suplica.

Jungkook no hace más que encogerse en el regazo de Jimin, observando de reojo a los alfas, no queriendo saber nada de lo que dice la carta, mas no diciéndolo en voz alta.

"Tranquilo, cachorro" Yoongi pide.

Taehyung amaga a hablar, mas Hoseok le lanza una mirada sutil para que no lo haga, y el omega mira asombrado cómo Taehyung obedece sin más, bajando la cabeza en una suave reverencia.

"Namjoon" Seokjin llama, y el nombrado rápidamente acerca hasta él, sin emitir sonido alguno, a la espera de lo que sea que le pida, "¿podrías acompañar hasta la puerta a Yugyeom?" le pide, dándole una sonrisa pequeña, delicada.

Y Jungkook no sabe por qué ver aquello, al líder sonriendo de esa manera, hace que sus mejillas se tiñan de rosado.

"Sí, líder" Namjoon murmura, y luego se voltea para observar a Yugyeom. "Jidoja de la frontera, le acompaño."

Yugyeom asiente, reverenciando a todos los presentes, deteniendo un instante la mirada en Jungkook, analizándole desde los pies hasta la cabeza, como si quisiese retener toda la información posible de Jungkook en su cabeza; y el omega se encoge bajo la mirada ajena, intentando – sin éxito – esconder su rostro detrás de su largo cabello, sintiéndose demasiado nervioso, cohibido, como para notar la mirada inexpresiva – pero, no por éso, menos intimidante – que Jin le dedica a Yugyeom.

"Yugyeom" el líder llama, elevando una ceja cuando tiene la atención del alfa en él, "Namjoon está esperándote."

"¡Oh!" el alfa murmura, haciéndose un paso para atrás, avergonzado. "Cierto" murmura, bajando la mirada. "Buenas noches, jidojas" dice. "Omega" saluda, y le hace una nueva reverencia.

Jungkook inclina la cabeza hacia el alfa, escondiéndose nuevamente en el pecho de Jimin, y se mantiene así, inhalando el aroma ajeno hasta que Yugyeom sale de la mansión y todo lo que su nariz puede captar son los fuertes aromas de los seis alfas que viven junto a él. Y ni siquiera le sorprende notar que, luego de días al lado de estos alfas, el estómago ya no se le revuelve por sus olores.

Incluso, más de una vez, Jungkook se haya buscando el fuerte aroma de Jin.

"Y ¿bien?" Taehyung insiste, mirando a Yoongi. "Por favor, hyung, ya no puedo con la ansiedad."

El alfa asiente, comprendiendo cómo se sienten sus menores, y luego carraspea, nervioso, tomándose su tiempo antes de hablar, pues, si tiene que ser honesto al cien porciento, no sabe cómo decirlo.

Porque ya imagina las reacciones de los menores ante sus próximas palabras.

Por éso, tanto Yoongi como Jin les piden a todos que tomen asiento, quedándose sólo ellos parados frente a los demás, frente a un omega que no les dirige la vista por miedo a lo que puedan decir.

Y Jungkook ciertamente no se equivoca al temer.

Porque si viene de Busan, no son buenas noticias; jamás lo fueron. Jamás lo serán.

Yoongi suspira, sonriendo sin gracia.

"Cuando vinieron hacia aquí, un lobo de Busan les ha seguido" les dice, sintiendo completa frustración, y hace una mueca con los labios para demostrarlo, "así que ellos ya saben que estás aquí" murmura, haciendo un gran esfuerzo por observar al lindo omega a los ojos, y Yoongi siente el cuerpo temblándole de impotencia, de rabia, ante la mirada tan angustiada que éste le dedica. "Busan vendrá a buscarte, cachorro. Puede ser en una semana o en unos meses, no estamos seguros aún" les confiesa, bajando su voz a una octava.

"No..." Taehyung suplica, llevándose las manos a la frente, sintiendo que todo a su alrededor da vueltas.

Habían sido realmente precavidos. ¿Cómo es que pudieron seguirlos?

¡Joder!

"Lo siento, omega" Seokjin murmura, atrayendo la atención de todos hacia él, sintiéndose pequeño ante las miradas de los menores, ante la rabia que emanan sus cuerpos. "Yugyeom y Hoseok harán todo lo que está en sus manos para que Gyeonggi sea aún más segura cuando tu padre y Busan lleguen."

"¿Qué?" Namjoon gruñe. "¿Éso es todo lo que van a hacer?"

Seokjin intenta hablar, pero Jimin no se lo permite.

"¿Por qué te enojas con ellos? ¿Uh? No hay nada más que hacer, hyung, todos lo sabemos. ¿Qué es lo que esperabas?" pregunta, tensando los hombros.

Y, de nuevo, Seokjin intenta hablar, recordar que puede hacer algo más, pero no se le es permitido.

"¿Uh?" Jungkook jadea, incorporándose para observar mejor a los alfas, saliendo del trance en el que se encontraba.

¿Realmente le están diciendo que no hay nada para hacer, que cuando su padre venga, sólo le entregarán?

Oh, no.

Jungkook gimotea, abriendo mucho más sus grandes ojitos, sintiéndolos aguarse rápidamente, y su corazón se detiene un segundo mientras su cabeza le repite en bucle lo que acaba de escuchar.

Su padre vendrá a buscarlo, toda Busan va a castigarlo, nadie sabe cuándo, no se puede hacer nada para cambiarlo.

¡Por la Luna!

El pobre omega siente que se le corta la respiración.

"¿Cómo?" pregunta con un hilo de voz. "¿No van a-? ¿Ustedes van a-?" el omega jadea, agitado, asustado. "Después de- de todo lo que me han prometido, ¿en serio me dicen que no- que no se puede hacer nada?" lloriquea, incapaz de mirar a los alfas. "¿Me van a dejar ir con ellos?" les reclama, llevándose una mano al pecho, haciendo un puño en su camiseta para evitar que el corazón se le destroce en miles de pedazos.

Aunque bien sabe él que nada podrá evitarlo.

"No" Seokjin responde.

Jungkook le hace pucheros.

"Pero ellos dijeron-" dice, señalando a los alfas menores.

Seokjin niega lentamente.

"Hay algo más para hacer" le promete, y al alfa no le sorprende para nada oír los gruñidos furiosos que tanto Taehyung como Namjoon le dedican.

"¡No!" los alfas ordenan, incorporándose en sus lugares, tensando los hombros en posición de amenaza, queriendo que Jin se retracte de lo que acaba de insinuar.

Jungkook se encoge en su lugar, con el labio inferior temblándole cuando ve a Seokjin cubrirlo con su amplio cuerpo, creando una barrera entre él y los alfas.

"Basta" Seokjin les pide, enderezando el cuerpo, arrugando las cejas en completa desaprobación ante el comportamiento de sus menores. "Le están asustando."

Oh.

Los alfas bajan la mirada, haciéndole una reverencia sincronizada al omega.

"Lo sentimos, omega" murmuran.

Jungkook asiente, haciendo un puchero.

"Está bien" les asegura. "Pero no griten" agrega, tomándose unos segundos para recuperarse a sí mismo, y luego tira de la camisa de Seokjin, provocando que se dé la vuelta para observarlo. "¿Qué es?" le pregunta, susurrando. "¿Qué más hay por hacer, jidoja?"

"Por favor, hyung" Namjoon le pide. "Por favor, no lo hagas" le suplica.

Jungkook ladea la cabeza, confundido, no entendiendo qué sucede allí, el por qué Taehyung y Namjoon se hallan tan negados, tan a la defensiva, rogando por algo que él no sabe, y Seokjin arruga las cejas al comprender lo que sucede allí.

"Oh..." murmura, sintiendo sus piernas temblar suavemente. "Tú no- no sabes" susurra, sonando sorprendido aunque gran parte de sí mismo sabía que ellos no le contarían.

Porque son la clase de alfas que prefieren morir antes que aceptar algo que va en contra de lo que quieren, y el omega, en este momento, es todo lo que ellos desean.

Jungkook arruga las cejas.

"¿Saber qué?" le pregunta, confundido.

Seokjin se sonroja apenas, sintiendo la garganta seca, y todo a su alrededor se detiene por unos largos segundos que se sienten asfixiantes, intolerables para los nervios que carcomen lentamente a sus lobos, y Seokjin se ve obligado a desviar la mirada del omega, sintiendo el pecho cerrado, oprimido, ante la confusión y el miedo que Jungkook siente.

"Alfa" Jungkook llama luego de varios segundos en silencio, sintiéndose algo mareado, abombado, con la situación, "dígame" insiste, mirando a Jin a través de sus pestañas, con los labios abultados ligeramente en un puchero.

Por la Luna.

El líder se muerde el interior de las mejillas, observando, analizando, todo a su alrededor antes de fijar nuevamente la vista en el omega, que le observa con los ojitos aún aguados, aún suplicando, y tiene que poner todo de sí mismo para mantener la compostura ante el aroma tan agrio que Jungkook desprende.

"Por favor" el omega le ruega.

Y Seokjin simplemente cede.

"Hay una forma de hacer que te quedes y que tu padre y Busan jamás vuelvan a molestarte" le dice, analizando todas las reacciones de Jungkook, "pero, para éso, debo hacerte mi omega" le explica, y las piernas le tiemblan suavemente cuando el omega jadea. "Debo hacerte mi luna."

Oh.

Jungkook arruga las cejas, haciéndose para atrás, y tiene que sostenerse del respaldo del sofá más cercano para no caerse.

"¿Qué?" murmura.

"Será todo una farsa" el alfa se apresura en aclarar. "La sostendremos hasta que se olviden de ti, y una vez que lo hagan, te libraré de mí." le promete, llevándose una mano al corazón.

El omega jadea, llevándose las manos a la frente, y cierra los ojitos un segundo, deseando que, al abrirlos, se encuentre en la cocina, siguiendo la receta que los alfas le dan, sin la existencia de aquella maldita carta que le condena, sólo con la certeza de que se siente feliz, seguro, y, por primera vez, deseoso de que los tres alfas que le rescataron sepan todo lo que sus presencias causan en él.

Desea, por un efímero instante, sentirse el omega de Jimin, Namjoon y Taehyung, y que éstos lo mimen y le miren como si fuese una bonita criatura que debe ser admirada, cuidada y amada.

Desea estar entre los brazos de los alfas.

Desea ser suyo por completo.

Pero, claro, aquello no es más que un deseo que se ve roto cuando Jungkook abre los ojos y es Seokjin a quien tiene en frente, a la espera de una respuesta que no llega porque Jungkook tiene un nudo en la garganta que no le permite hacer otra cosa más que callar y pensar en lo maldito que está, en el odio que la Diosa Luna le tiene, pues no le permite ser feliz por mucho tiempo.

Porque no merece ser feliz por mucho tiempo. No merece desear todo lo que desea. E, incluso si se encuentra en esa hermosa manada, no merece tener todo éso de lo que los alfas le han hablado.

Porque es una falla, y todo lo que Kook puede hacer para escapar del maltrato de su padre es esconderse detrás de un importante e imponente alfa en el que no confía, pero que promete cuidarlo, evitar su inminente muerte. Y él tiene demasiados sentimientos dirigidos a tres bonitos alfas que le prohíben negarse a la posibilidad de ser salvado.

Porque negarse implicaría estar lejos de esos tres alfas, y Jungkook no se siente capaz siquiera de poder respirar si no tiene cerca la presencia de esos alfas.

Porque esos tres bonitos alfas son todo lo que Kook quiere y necesita, y no va a renunciar a éso. Y si él tiene que ser el omega de otro alfa para mantenerse a un lado de los alfas, lo hará. Incluso si éso hace que el corazón le duela y su omega se retuerza de dolor.

"Está bien."

Jungkook llora, angustiado, pero menea su cabeza en una afirmación, mirando a Seokjin con sus ojitos rojos, aguados.

"Está bien" repite. "Seré su omega."

Oh.

Los alfas menores palidecen, ninguno esperando que el omega aceptara algo como éso, y sus lobos internos aullan de dolor, de rencor, cuando Jungkook baja la vista a sus manitos, incapaz de mirar a los tres alfas luego de traicionar de esa manera a su propio corazoncito, a sus sentimientos.

Por otro lado, Seokjin ni siquiera mueve un músculo ante la respuesta que le han dado, demasiado concentrado en cuidar al omega, a su preciada manada y a sus dongsaengs como para notar la lucha interna que éstos llevan adentro.

"Bien" le felicita, intentando aflojar la tensión en sus hombros. "Busan tendrá que pasar por sobre mi cadáver y el de toda la manada para llevarte" promete con voz conciliadora.

Jungkook jadea, haciéndole una suave reverencia en agradecimiento, con los labios temblándole apenitas, y Seokjin siente que el corazón se le oprime ante la imagen, por lo que se acerca hasta él sin siquiera dudarlo, quedando a pocos centímetros del cuerpo ajeno, y Kook se hace chiquito ante el porte del alfa.

"Aunque" el alfa agrega al verlo, "no lo haremos si es demasiado para ti, cielo. Lo que menos quiero es hacerte pasar un mal momento" le jura. "Buscaremos otra solución, si ésta te disgusta."

Mas todos allí saben que no hay otra solución.

El omega menea la cabeza, negando.

"Prométame..." Jungkook murmura, aún con algunas lágrimas cayéndole por las mejillas, y eleva la vista hasta encontrar los dulces ojos del alfa. "Prométame que si me convierto en su omega, incluso si es una farsa, no dejará que me dañen." pide, haciéndole un puchero. "Prometa que ésto saldrá bien y luego me librará, que me dejará ser el omega del alfa que yo quiera."

Oh.

El alfa asiente, extendiendo su mano hasta acunar la mejilla del omega, su cuerpo entero temblando de nervios ante la cercanía, ante el toque tan, tan íntimo que mantienen; y Jin siente a su lobo aullar cuando Jungkook a pesar del notable descontento y dolor, inclina la cabecita, permitiendo que le haga todos los mimos posibles en la piel.

"Te lo prometo, cachorro" Jin susurra, acariciando suavemente la nuca de su menor. "No voy a permitir que salga mal, porque es aquí donde perteneces" jura, atrayéndolo hacia su pecho. "Tú te quedas aquí, incluso si debo morir para hacerlo realidad" le sigue diciendo, con una sonrisa suave, cargada de promesas que el omega se ve desesperado a creer. "Confía en hyungie, omega. Todo saldrá bien."

Oh...

Jungkook asiente, puchereando, con las mejillas húmedas de tanto llorar, y pasa sus brazos por la cintura del alfa, en un abrazo tan íntimo como desesperado, su lobo omega anhelando asegurar a toda costa su estadía definitiva en la manada.

"Okay" Jungkook susurra, descansando su cabecita en el pecho fuerte y amplio de Seokjin.

"Buen omega" el alfa le felicita. "Hyung tiene todo planeado para que te quedes con nosotros" murmura, pasándole un rebelde mechón de cabello tras la oreja.

Jungkook le observa, abriendo aún más sus grandes ojitos, parpadeando apenas, viéndose tierno sin siquiera intentarlo, y Seokjin le sonríe, acariciándole ambos cachetitos con ayuda de sus pulgares, no queriendo ser brusco ante la suavidad en la piel ajena.

"Te lo prometo" Jin le repite, intentando que Jungkook crea en sus palabras, y el menor siente sus hombros relajarse de a poco, el aroma conciliador del alto alfa adormeciendo todos sus temores.

El alfa se relame los labios, inmerso en la oscuridad abrazadora, cálida, que el omega tiene en sus bellos ojitos, y todo a su alrededor parece detenerse mientras eleva ambas cejas, disfrutando el calor que emanan los cachetitos de Jungkook.

"Okay" murmura. "Okay... hyung."

Seokjin sonríe, sintiéndose relajado al lograr la tranquilidad del lindo omega, y le palmea cariñosamente la cabeza.

"Qué buen omega."