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⇝ thirteen: the messenger

[past]

"Jidoja" la omega saluda, y le hace una profunda reverencia. "Lamento mucho su perdida. Su padre fue un gran líder."

El alfa se estremece ante el honorífico con el que ahora es llamado, mas, aún así, pasa las manos detrás de su espalda e inclina la cabeza, la corona pesándole.

"Noona" le devuelve el saludo. "Gracias por venir. Intentaré ser tan bueno como él."

Hyuna le sonríe, cansada, las esquinas de sus ojos mostrando ligeras arrugas.

"Eres jidoja ahora, Seokjin. Ya no debes llamarme así" le recuerda, acunándole las mejillas. "Lo harás bien" la omega le tranquiliza. "¿Puedo pasar?"

El alfa asiente, aún algo abrumado, y se hace a un lado para que la omega pueda pasar.

"Adelante, por favor" concede mientras le guía hacia el salón. "¿Cómo sabe que lo haré bien?"

Hyuna toma asiento cuando el alfa se lo permite, y le sonríe al pequeño alfa que, a lo lejos, asoma la cabeza por detrás de la puerta.

"Buenas tardes, jidoja Yoongi" le saluda, riendo enternecida al verlo sonrojarse hasta las orejas.

"Buenas tardes, Hyuna noona" le saluda el cachorro, con voz tímida.

Seokjin cambia el peso de su cuerpo de una pierna a la otra, algo inquieto ante la interacción; se cruza de brazos, aún incomodo, y carraspea, elevando una de sus cejas, captando la atención tanto de su pequeño hermano como la de omega.

"Ve a tu cuarto, por favor. Debo hablar con Hyuna" le indica. "Y, Yoongi, saluda antes de irte."

Yoongi asiente, pasando ambas manos detrás de su espalda antes de inclinar la cabeza hacia Hyuna, como su hyungie le enseñó.

"Buenas tardes, noona" le repite, su voz aún saliendo tímida, sus cachetitos aún rojitos ante la vergüenza, y luego mira a Seokjin. "Con permiso, hyung" susurra, sonriéndole, y se aleja escaleras arriba.

Seokjin suspira, observando a la bonita omega que aún sonríe mientras observa las escaleras por donde Yoongi se ha ido.

"Noona" llama, sin poder evitarlo, y ésta niega con una sonrisa, mas no le corrige "aún no ha respondido mi pregunta."

Hyuna señala el asiento frente a ella, invitándole a sentarse, y el alfa obedece de inmediato, manteniendo una postura firme, aún si las manos le tiemblan y sus ojos están todavía aguados e hinchados por todo lo que ha llorado en el funeral de su padre.

"Yo lo sé todo, cachorro" le recuerda.

Seokjin ladea la cabeza.

"Yo sé" dice, encogiéndose de hombros, aún algo incrédulo ante las palabras de Hyuna. "Pero aún no comprendo. ¿Qué le trae por aquí, noona? ¿Va a contarme algo que soñó respecto a-?"

Hyuna niega, pestañeando despacio, y entrelaza sus propias manos por sobre la mesa, observando a Seokjin con una tranquilidad que no logra transmitirle.

Y es que la presencia de Hyuna siempre es-

"Eres nuestro jidoja ahora" Hyuna le dice con voz calma, "y es mi deber el contarte cómo será tu mandato."

Oh.

Seokjin arruga las cejas, no sabiendo por qué la respiración se le corta y las manos le tiemblan; mas no se acobarda, y deja que la curiosidad en su interior hable por él.

"Bien" Jin dice, sintiendo la necesidad de llamar a su hermano, mas no lo hace, su mente recordando que Yoongi es aún un cachorro. "Cuénteme cómo será" le pide.

-

[present]

Yoongi gruñe desde lo más profundo de su ser al ver al otro alfa arrodillándose frente a él, su lobo inflando el pecho de orgullo al ver a otro lobo de su casta de esta manera.

"Jidoja" el alfa murmura, "por favor."

El líder infla el pecho, extasiado ante la situación, respirando de manera agitada mientras estimula su polla rápidamente, no apartándole la mirada. Y es que verlo así, de rodillas a él, tan expuesto, hace que el líder desee-

"Está bien" concede, como si tomar ésa decisión le hubiese costado demasiado. "Está bien, puedes tenerlo, cachorro."

El alfa le gruñe, arrugando las cejas.

"No soy un cachorro" masculla.

Yoongi se ríe.

"Claro que lo eres" le molesta, cogiendo al menor por el mentón para atraerlo a su polla, usando su pulgar para hacerle abrir la boca. "Así que ahora" le dice con la voz saliéndole ronca, "mantén tu boca abierta" ordena. "Voy a acabar en ti."

Uff.

Hoseok obedece, gimoteando, y observa al otro a través de sus pestañas mientras enseña su lengua, a la espera.

"Está bien" murmura. "Está bien, jidoja."

Por favor.

"Oh, mierda" Yoongi gruñe, adentrando su pulgar en la boca de Hoseok mientras se masturba rápidamente, apretando su glande ligeramente de vez en cuando, el honorífico siendo pronunciado por este cachorro haciendo estragos dentro suyo.

«Jidoja»

¿Cómo esa palabra puede calentarle así?

"Dilo de nuevo" le ordena, acelerando el ritmo sobre su polla. "Llámame así de nuevo, Hoseok-ah."

El menor se relame los labios, ansioso.

"Por favor, jidoja" Hoseok le ruega.

Y, luego de éso, al líder no le toma más de un segundo acabar, sintiendo al alfa contrario chupándole el dedo como si fuese una polla, nunca dejando de verlo a los ojos. Las piernas le tiemblan y todo su cuerpo sufre de espasmos mientras se masturba, acabando sobre el bonito rostro de Hoseok, sobre su cabello, y, al final, deposita su miembro en la boca de Hoseok, permitiendo que le chupe por completo, sacándole hasta la última gota de semen que hay en él.

"Mh" gimotea. "Hoseok- mierda" gruñe, tirándole el cabello.

Hoseok le guiña un ojo mientras se hace para atrás, manteniendo la boca abierta para enseñarle todo el semen en ella, y Yoongi se siente sufrir otro espasmo al ver que Hoseok traga su esencia sin que se lo pida, cerrando los ojos como si de verdad lo estuviese disfrutando.

"Mierda" Yoongi repite, riéndose, y le pasa una mano por la nuca, masajeando la zona. "Por la Luna. Eres de lo que no hay, cachorro" jadea, tomándose unos segundos para recomponerse.

El alfa contrario se ríe, incorporándose, y le acuna las mejillas para plantarle un beso, adentrando su lengua en la boca de un Yoongi que sólo tiene fuerzas para corresponder, relajando los hombros de forma significativa al sentir que Hoseok comienza a ser más y más rudo.

"Mi turno" Hoseok murmura contra su boca, mordiéndole el labio inferior, y eleva ambas cejas, sonriendo, antes de limpiarse los restos de semen del rostro.

"Mh" el mayor asiente, sonriendo. "Está bien" acepta, inclinando la cabeza hacia un lado.

Ufff.

Hoseok hace una línea de besos hasta el cuello de Yoongi, deslizando su nariz de aquí para allá, inundándose con el olor ajeno, sintiéndolo de lleno en las papilas gustativas, y aún si intenta controlarse, no puede evitar el impulso de morder la piel suavemente en la unión del cuello y clavicula, dejándole una pequeña marca que hace a Yoongi chillar, sorprendido.

"¡Hoseok-ah!" Yoongi se desarma en gemidos.

El nombrado se ríe, negando.

"De rodillas" Hoseok le ordena mientras se aparta para observar a Yoongi de pies a cabeza, maravillado con su cuerpo.

Yoongi eleva una ceja, sonrojándose en los inicios de sus pómulos.

"Soy tu jidoja" le recuerda, "yo no me inclino ante nadie."

Hoseok se ríe, su lobo tan salvaje, tan dominante, saliendo a la luz al hacer brillar sus iris en un rojo casi furioso.

"No me importa que seas un jidoja. Te quiero de rodillas frente a mí. Ahora" gruñe, enseñándole los colmillos.

Oh.

Yoongi le gruñe, no dejándose intimidar, pero sólo una mirada por parte del alfa contrario es suficiente para que Yoongi obedezca con un gemido escapándole de la boca, y se pasa las manos detrás de la espalda, dócil, a la espera, permitiendo que Hoseok le tome por el cabello, abra su boca y le folle rápidamente en busca de su liberación, no dejándole respirar o pensar en otra cosa.

"Mh, jidoja" jadea. "Dime, ¿qué se siente que yo, tu guardaespalda, esté follando tu boca?" Hoseok se le burla.

El líder le gruñe.

"Ts" Hoseok niega. "Éso no responde mi pregunta, jidoja" canturrea.

Mas Yoongi no puede responderle, pues la polla de Hoseok roza el principio de su garganta y todo lo que puede hacer es ahogarse, relajando los músculos para tragar la enorme carga de Hoseok, quien le fuerza más y más hasta que la nariz de Yoongi le roza el vello púbico.

"Así" Hoseok le indica, gruñéndole, con una sonrisa tan diabólica como cansada. "No quiero que desperdicies ni una gota, jidoja" le ordena, apartándose luego de unos segundos para que el líder pueda respirar.

Yoongi le gruñe, pero obedece, con la respiración entrecortada y su garganta sintiendo una ligera molestia.

"Cachorro de mierda" masculla.

Hoseok se ríe, ayudándolo a levantarse, y sigue a Yoongi mientras éste se dirige hasta la cama para recostarse. Luego, el alfa menor se ubica entre las piernas de Yoongi, con todo el rostro enterrado en el cuello ajeno, buscando la marca que le ha hecho.

"Cachorro de mierda" le repite al sentir que el alfa le rodea la cintura, dejándole sin escapatoria y a completa merced de él.

"Silencio, alfa" Hoseok ordena, riendo, contra la pálida piel. "Este «cachorro» te ha ayudado en tu celo. Deberías ser más agradecido y respetuoso conmigo."

Yoongi arruga las cejas, sintiendo en él el inminente deseo por gruñir y dejar a Hoseok debajo suyo, como debe ser, mas no lo hace. En cambio, el alfa inclina la cabeza, permitiendo que Hoseok halle la marca pequeña y casi imperceptible en su cuello, la cual se encarga de lamer, intentando borrarla.

"Hoseok-ah" el líder le llama, gimiendo.

"Lo siento por ésto, hyung" se lamenta, apretando suavemente la cintura del mayor.

El alfa se ríe.

"Tranquilo, cachorro. Inventaré alguna excusa para éso" asegura, permitiéndose disfrutar unos minutos más la atención y los mimos de Hoseok en lo que su celo llega a su fin.

La situación es linda, incluso.

Y, luego de una hora de mimos, al líder no le extraña notar que la respiración de Hoseok comienza relentizarse, pues está por quedarse dormido, aún con la cabeza posada sobre su pecho y la nariz hundida en su fuente de aroma, como si ésta fuese un adormecedor para todos sus sentidos; y, oh, Yoongi se detesta a sí mismo cuando le acaricia le espalda con suavidad, moviéndolo ligeramente para despertarlo.

Porque una parte de él quiere-

"Hoseok-ah" le llama en un murmullo. "Seokie" repite contra el suave pelo del alfa.

"¿Mh?" murmura, aferrándose de forma inconsciente a la cintura del otro alfa. "Dime" pide, adormilado.

Yoongi sonríe, enternecido.

"Mi celo- mi celo está por terminar" le dice, balbuceando. "Puedes ir a dormir."

Hoseok asiente, obligándose a despertar, y mira al alfa contrario antes finalmente alejarse para buscar sus pantalones.

"Lo siento" se ríe, encogiendo ambos hombros, y Yoongi le resta importancia con un pequeño movimiento de manos. "Si sabes que hyung no te creerá, ¿no?" dice, retomando la conversación.

"Lo sé, pero haré el intento" el líder se ríe, cubriéndose con las mantas.

Hoseok se ríe, terminando de vestirse, y estira su cuerpo, bostezando apenitas.

"Buena suerte con éso" se burla, por lo que Yoongi le gruñe, riendo. "Bien, voy a ducharme. Tengo mucho que hacer hoy" dice, haciendo pucheros.

"Sí, lo sé. Deberías dejar de perder el tiempo e irte de una vez" Yoongi se le burla. "Yo voy a tomar una siesta."

El alfa menor le saca la lengua.

"Te detesto" se queja, puchereando. "Y deberías ducharte también. Ésto apesta a nosotros, hyung."

Yoongi se ríe.

"Lo haré" le asegura. "Ahora vete. Ya no te aguanto" bromea.

Hoseok entrecierra los ojos.

"Fuiste tú quien me rogó que viniese a ayudarte en tu celo" le reclama, riendo.

"Sólo lo hice porque tú me lo pediste primero" se defiende, gruñéndole para ocultar su vergüenza.

"Ya" Hoseok se cruza de brazos. "Así que esto significa que estamos a mano, ¿no?"

"Exacto" Yoongi dice, sin mirarlo.

"¿Y no lo haremos más, jidoja?" se burla, haciéndole un puchero.

Yoongi le gruñe.

"Ni en tus sueños" masculla.

Hoseok se ríe, negando con la cabeza al ver las mejillas sonrojadas de su hyung. Yoongi puede ser un líder rudo puertas afuera, pero dentro de la habitación, en los lugares donde se siente cómodo, es tan vergonzoso que da risa.

"Claro" se burla.

Y Yoongi está realmente avergonzado.

"¡Deja de perder el tiempo, Seok-ah!" le gruñe nuevamente. "Sal de mi cuarto."

El menor ríe, pero obedece, lanzándole un beso que busca avergonzarlo más.

"¡Ahora!" le ordena.

"¡Bien! Me voy" acepta, sonriendo. "Nos vemos luego, hyung."

Yoongi asiente, riendo, pero detiene a su menor antes de que éste pueda abrir la puerta.

"«Yoongi»" le dice, y Hoseok se gira para mirarlo, sin comprender. "Puedes-"

"¿Puedo?" le anima.

"Sólo dime «Yoongi»" murmura. "Incluso fuera de esta habitación, de esta casa, y ante toda la manada; no- no hace falta el honorífico. Ya no, Seok-ah."

Oh.

El menor asiente, sorprendido. Porque no es común que él no use el honorífico para dirigirse a un líder. E incluso si ya lo ha hecho una vez (sólo frente a Jin), a Hoseok sigue pareciéndole-

El honorífico siempre debe de estar, por muy cercano que ellos sean.

"¿Seguro?" duda, consciente de que ni siquiera los lobos más viejos pueden no utilizar el honorífico para dirigirse a los líderes.

Es una falta de respeto que lo hagan.

"No te lo habría dicho si no lo estuviese, Seok-ah" se burla sin malicia, sabiendo lo que su menor piensa. "Eres el lobo en quien más confío, y mi mejor amigo."

Hoseok se ríe, avergonzado.

"Bien" murmura. "Te veo luego, Yoongi" dice, arrugando las cejas, la falta de un honorífico haciéndole sentir raro, mas no disgustándole.

Yoongi sonríe, gustándole el cambio, y finalmente le deja ir, inevitablemente recordando el celo de Hoseok, donde todo comenzó, y la forma en que, horas antes, él le había rogado a su menor que le ayudara con su celo.

Hasta le había rogado que le llamara por su honorífico.

«Jidoja»

"Por la Luna" el alfa murmura mientras se esconde bajo las mantas, haciéndose una bolita.

¡Qué vergüenza!

Yoongi es el segundo alfa líder de su manada, mientras que Jung Hoseok es sólo su guardaespalda, ¿cómo diablos habían terminado en éso?

¡Oh, Seokjin se reirá tanto cuando le descubra!

"Qué locura" Yoongi se queja, pateando las mantas sobre él como si aún fuese un cachorro, y luego se sienta sobre el colchón, observando indignado el gran desastre que Hoseok y él hicieron en tan sólo dos horas.

¡Vaya que Seokjin va a reírse!

Aún indignado, Yoongi se levanta de la cama y se dispone a limpiar todo con sumo detenimiento, queriendo eliminar cualquier tipo de evidencia, y amontona las mantas sucias en un rincón, yendo al baño para tomar una ducha.

"Qué locura" repite, nuevamente, unos minutos después, ya duchado, con ropa limpia y listo para enfrentar el resto de la tarde, la idea de tomar una siesta ya no siendo apetecible.

Sin pensarlo, Yoongi bebe el té (ya frío) que se ha preparado horas antes y sale de allí en completo silencio, llevándose un gran susto al cruzarse con un Hoseok ya duchado saliendo del cuarto frente a él.

"¡Luna!" Yoongi chilla, llevándose una mano al pecho. "Me has asustado" dice, como si el otro no se hubiese notado ya.

Hoseok se ríe, encogiendo los hombros, y le hace una pequeña reverencia.

"Hola" le saluda.

Yoongi inclina la cabeza, pasándose las manos tras la espalda.

"Hola" devuelve, sonriéndole, mientras se inclina un poco hacia Hoseok. "Uh- ¿aún-? ¿Aún huelo a ti?" le pregunta.

El menor niega, siguiendo a Yoongi a través del pasillo, manteniendo ambas manos tras su espalda, y una pequeña sonrisa se le escapa al notar la marca rojiza en el cuello del líder.

"Tengo noticias" dice para distraerse.

"Soy todo oídos."

"Yugyeom llegó de la frontera" empieza, con cautela, observando a su mayor.

Yoongi eleva una ceja, mas no emite palabra al respecto.

"Dijo que hay un lobo blanco exigiendo ver a los líderes" Hoseok sigue, viendo al alfa tensar los hombros. "Debemos ir cuanto antes hasta la frontera."

El líder suspira, la cabeza doliéndole de sólo saber que un lobo ajeno (y, peor, un lobo de Busan) está en su frontera, cerca de su manada, cerca de sus omegas y sus cachorros, ésos a los que juró proteger.

Y es que Yoongi sabe que Busan nunca trae nada bueno.

"Bien, iremos" le dice, deteniendo sus pasos. "Pero, primero, ve con Jaebeom para distribuir equitativamente a todos los alfas por la manada. Que los omegas, betas y cachorros estén seguros, mas no alterados. Es sólo por precaución."

Hoseok asiente.

"Sí, alfa" dice, haciendo una reverencia. "Me aseguraré de que así sea" promete.

Y Yoongi lo sabe, claro, pero no puede evitar preocuparse. Porque Hoseok es esa clase de alfa que moriría antes de ver a uno de los suyos en peligro.

"Lo sé" le dice, cogiéndole por la nuca para atraerlo cerca de él, hasta que sus frentes están juntas y pueden sentir la respiración del otro contra sus rostros. "Es sólo un lobo de Busan, ¿sí? Yo sé que haces hasta lo imposible por proteger a la manada y lo agradezco, pero nada de locuras, ¿entendido?"

Hoseok arruga las cejas, queriendo decirle que no hará locuras, que sólo se ocupará de mantener a todos a salvo sin arriesgar su propia vida, mas hasta él es consciente de que sus iris brillan en rojo vivo, que su lobo está alerta y que siente un inminente gruñido creciéndole en lo profundo de su pecho.

"Bien" dice, cediendo. "Nada de locuras."

Yoongi se relaja, relamiendo sus labios, y se separa apenitas.

"Nos vemos en la frontera. Tienes sólo quince minutos, ¿oíste? Es una orden."

Hoseok se ríe.

"Tranquilo, Yoon" le dice, acunándole una mejilla. "Estaré ahí mucho antes."

Yoongi asiente, alejándose por completo, y le deja marchar, incluso aunque tiene un nudo en la garganta por la enorme preocupación que siente al dejarlo ir.

Porque, de nuevo, Hoseok es ésa clase de alfa, y Yoongi se preocupa por él.

"¡Yoongi!" Jin le llama desde la escalera, sacándole de sus pensamientos, y el alfa vuelve a sufrir un gran susto.

"¡Seokjin hyung!" le reclama, riéndose, mientras se acerca hasta el alfa. "Estaba por ir a buscarte. ¿Ya te has enterado?"

"Mh" Jin asiente. "Yo recibí a Yugyeom."

Yoongi suspira, siguiendo a su hermano escaleras abajo.

"¿De qué crees que se trate todo ésto?"

"Aún no lo sé" admite, desorientado. "Pero no creo que sea una casualidad el que Busan haya venido.

Yoongi le observa, confundido.

"Sólo es un mensajero, hyung. Si ellos- Si Busan quisiese atacar, habrían más lobos en nuestra frontera."

Seokjin arruga las cejas, entendiendo el punto de su hermano, mas no pudiendo evitar preocuparse.

Ésto-

"Hyuna jamás mencionó algo así" dice, pensando en voz alta, y Yoongi le frena, abriendo mucho los ojos.

"¿Hyuna?" pregunta, alarmado. "¿Ella habló contigo? ¿Cuándo? ¿Qué te dijo?"

Oh, no.

Seokjin niega, apartando sus propios recuerdos, y le sonríe a su hermano.

"No habló conmigo, Yoon" le dice. "No te preocupes."

Pero Yoongi está preocupado.

"Hyung, puedes decirme. Lo que sea que ella haya dicho-"

Yoongi es interrumpido, para buena suerte de Seokjon, cuando la puerta principal se abre abruptamente y el rostro alarmado de Minseok aparece frente a ellos.

"Jidojas" saluda, jadeando, haciéndoles una torpe (pero profunda) reverencia a cada uno. "Lo siento por irrumpir así en su hogar, pero es urgente."

Seokjin asiente.

"¿Qué pasó?"

Minseok pasa saliva, temblando.

"El lobo ha cruzado la frontera."

-

Hoseok gruñe, encerrando a su presa, y amaga con morderlo cuando le ve tratar de moverse para escapar.

"¡Quieto!" le ordena con un ápice de voz de mando y el otro lobo chilla, aterrado, haciéndose completamente para atrás frente a un Hoseok que está enfurecido.

"Sí, al-alfa" murmura, bajando la cabeza lo más posible.

Hoseok le enseña los colmillos llenos de sangre, todo su cuerpo tenso mientras le amenaza en silencio, haciéndole saber que le asesinará sin piedad si se mueve, si habla, si intenta algo que él no ha-

"Por aquí" indican, a lo lejos, y Hoseok reconoce la voz de Miseok al instante. "Hoseok está con él, lo atrapó antes de que pudiera lastimar a uno de nuestros omegas."

Hoseok gruñe al recordar aquello, y se acerca nuevamente hasta el otro lobo, decidido a arrancarle la cabeza de una vez, pero la voz fuerte y clara de Seokjin le detiene.

"¡Hoseok! ¡Basta ya!"

El alfa obedece, haciéndose para atrás, aún sin despegar la vista del lobo ajeno, y se coloca frente a Yoongi y a Seokjin.

"Si dices algo, te asesino aquí mismo" le advierte al otro lobo, gruñéndole.

Yoongi niega, ya imaginando lo que Hoseok está diciendo.

"Cambia, Hoseok. Ahora" le ordena.

Hoseok, de nuevo, obedece, poniéndose el fino pantalón que Minseok le tiende, y se coloca detrás de los líderes, con las manos detrás de la espalda, el cuerpo completamente rígido y una expresión tan seria que podría asesinar a alguien si así lo quisiera.

"Explícate" Seokjin dice, mirando por sobre su hombro a Hoseok.

"Se escapó de los oficiales que vigilan la frontera, ingresó a la manada y se fue directo a intentar entrar en casa de los omegas. Quiso lastimar a uno, y cuando le atrapé, tuve que utilizar otra medida para que no escapara" dice, enseñando los raspones en su cuerpo y la sangre aún fresca en sus colmillos.

Jin asiente, aparentemente tranquilo, mas sorprende a todos al patear con todas sus fuerzas al lobo, arrancándole un chillido agudo, cargado de dolor.

"Si alguien vuelve a decirme que te has acercado a nuestros omegas, yo mismo te haré un delta asqueroso, te golpearé y luego te enviaré a Busan" le gruñe, con los iris brillando en rojo vivo y su lobo interior arañándole las entrañas para que le deje salir. "Y Busan" añade "no tiene compasión con los deltas" se burla.

El lobo se hace para atrás, chillando, no atreviéndose siquiera a levantar la vista, aún aterrado con la golpiza que recibió por parte de Hoseok.

"Ahora, cambia" Yoongi le ordena. "Dinos a qué has venido hasta aquí."

Sintiéndose asustado y abrumado, el lobo alfa niega frenéticamente, mas se arrepiente al recibir un fuerte gruñido por parte de Hoseok.

"¡Haz lo que te dicen!" le ordena, casi que le escupe, mientras le enseña los colmillos. "Estás frente a los líderes de Gyeonggi."

"Por favor" ruega, sollozando del miedo.

Pero, oh, Hoseok no tiene piedad, no con lobos que lastiman a los suyos.

Ahora!" le ordena, consciente de lo fuerte que puede llegar a ser su voz de mando.

Los líderes se lo permiten.

"No me hagas repetirlo otra vez."

El lobo extraño gime, asustado, pero le obedece esta vez, dejando ver a un alfa joven, unos centímetros más alto que el mismo Jin, que apenas roza los veinte años.

Es un cachorro.

"Por favor" ruega, aterrado, pero ni él mismo comprende qué es lo que pide.

Yoongi le ignora.

"¿Cómo te llamas?"

"Choi Soobin" responde de inmediato.

"Bien" Yoongi sigue. "¿Qué haces aquí?"

"Vengo en representación de mi líder, Daehyun, para darles un comunicado muy importante."

Hoseok gruñe, inevitablemente, y es que hay algo en este alfa ajeno a Gyeonggi que no le agrada del todo, algo que le hace desear asesinarlo de una vez por todas.

Por favor.

"Hoseok" Yoongi advierte.

El alfa le ignora, situándose frente a los líderes, y se cruza de brazos, tensando ambos hombros para parecer grande e intimidante.

Aunque, claro, Hoseok por sí sólo es grande e intimidante.

"Habla" le ordena.

Soobin gimotea, pero obedece.

"Un alfa d-de alto li-linaje de mi manada Busan ha pe-perdido a su hijo. Se lo han llevado tres alfas de Gyeonggi, los cuales eran los guardaespaldas de mi líder."

Yoongi eleva una ceja, manteniendo sus facciones serias, aún cuando su mente le trae a colación una y otra vez la carta que sus menores han enviado hace días.

Ellos-

Ellos no podrían haberles mentido.

¿No?

"Mi líder me ha enviado para decirles que, de enterarse que Gyeonggi protege al omega, Busan irá a la guerra."

Oh.

Seokjin le gruñe, reaccionando mucho antes que Hoseok o su hermano.

"Dile a tu líder que tendrá que venir él mismo a decírmelo" le ordena. "Tu líder sabe las condiciones de nuestra tregua."

Soobin asiente, dócil, y Seokjin le hace señas al oficial cuidando del calabozo para que les abra la puerta y les deje salir de allí de una vez, la conversación dejándole un sabor amargo en la boca.

"Vigílalo bien, Minseok" le pide. "Por el momento, se quedará aquí. Decidiré en estos días si lo devolvemos o no."

Yoongi le observa, confundido, mas no le contradice sino hasta que se alejan de los calabozos y se encuentran a solas, con Hoseok siguiéndoles unos pasos más atrás.

"¿No le vas a dejar libre?" le pregunta, incrédulo.

"De momento, no" Seokjin afirma. "Le voy a liberar una vez que el omega esté aquí, hablemos con él y, basados en éso, podamos decidir si se queda o no."

Yoongi arruga las cejas.

"Pero, hyung, si su padre y la manada entera le buscan, es imposible que se quede."

Hoseok se relame los labios, oyendo la conversación, mas no opinando en ella.

Y es ahí cuando Seokjin recuerda-

"No lo es, Yoon" le tranquiliza. "Hay una manera de que se quede."

Yoongi le gruñe instintivamente.

"Estás hablando de una guerra, Seokjin. ¿Te parece que realmente vale perder la manada entera por-?"

Seokjin eleva una ceja, interrumpiendo a su hermano sin siquiera decir algo en voz alta, y Yoongi debe calmar a su lobo por unos segundos antes de hablar otra vez.

"Lo siento, hyung" dice, haciéndole una reverencia. "No es que no confíe en tus decisiones, es sólo que-" Yoongi se corta.

"La posibilidad de una guerra te asusta, lo sé" Jin le acuna la mejilla, sonriendo, "pero no debes estar asustado, cachorro. Busan no cuenta con el poder suficiente para derrotarnos, si es que cometen algo tan estúpido como declararnos la guerra a nosotros: la manada más fuerte."

Yoongi asiente, comprendiendo.

"Y sé que no podemos actuar como nuestro padre, que debemos de ser precavidos, por éso vamos a esperar para oír lo que sea que el omega deba decirnos."

"Lo sé" Yoongi murmura, analizando las palabras de Seokjin. "Está bien, hyungie. Tienes mi apoyo."

Seokjin le sonríe, más tranquilo, y luego se gira para observar a Hoseok.

"Seok-ah" le llama.

El nombrado se endereza de inmediato, poniendo las manos tras su espalda, a la espera de una orden.

"¿Sí, líder?"

"Ve con Yugyeom, dile que aumente la seguridad en la frontera, mas sin que se vea sospechoso. Estamos en verano y lo mejor es no alterar a los omegas que se encuentran encinta."

"Entendido."

"También, necesito que diseñes un plan a seguir para mantener la seguridad en toda la manada. Debes presentárselo a Yoongi esta misma noche."

¿Qué?

Hoseok arruga las cejas, confundido, y observa a ambos alfas, no sabiendo qué se supone que signifique éso.

"Después de nosotros, eres el lobo más fuerte de la manada, y también el más joven en culminar el ejército" Yoongi le explica, sonriendo tan bonito y tan, tan grande que sus encías salen a relucir. "Eres el más capacitado para hacerlo; y dado que el antiguo líder de ejército ha muerto en primavera, creemos que eres el indicado para asumir el puesto."

Oh.

Hoseok asiente, incrédulo, y les hace una torpe reverencia a ambos alfas, no terminando de comprender del todo lo que le han propuesto.

Seokjin se ríe, satisfecho, y se acerca hasta Hoseok para estrechar su mano, dándole un corto abrazo luego.

"Bienvenido al ejército, líder Jung" le dice, revolviéndole los cabellos.

Hoseok jadea, sonriendo, y los ojos se le aguan al entender que, luego de tantos años de sacrificio, por fin ha llegado al puesto que tanto ha deseado.

¡Por la Luna!

"Uh-"

Yoongi niega, sonriendo, y se acerca a Hoseok para abrazarlo por los hombros con fuerza, riéndose cuando Hoseok le pasa las manos por la cintura y le atrae aún más cerca de sí.

"Gracias" Hoseok murmura, haciendo pucheros.

El líder se ríe.

"Te lo ganaste tú solo" le asegura sin dudarlo. "Lo festejaremos esta noche" promete, separándose apenitas para observar a Hoseok a los ojos, sintiendo su corazón encogerse enternecido al notar que el alfa está llorando; y Yoongi sabe que se sonroja hasta en las orejas al susurrar: "Bienvenido seas al ejército, jidoja."

Pero, oh, Yoongi no se arrepiente.

Hoseok se ríe.

"Muchas gracias, jidoja" murmura, con un brillo pícaro en la mirada, y luego se aleja de Yoongi, intentando recuperar la compostura. "Iré con Yugyeom."

"Bien" Seokjin asiente, dejándole ir, y luego se gira para observar a Yoongi. "Debemos traer oficialmente a los chicos de regreso."

Yoongi asiente, pensativo.

"Enviaré una carta a Busan esta noche" informa, suspirando, y se lleva la mano a la frente al sentir una punzada allí.

Seokjin le aprueba con un simple gesto, mas su concentración y preocupación se evaporan en el instante en que sus ojos captan algo en la pálida piel de Yoongi.

"Pero, primero, voy a beber un té. Todo este asunto me ha dejado-"

"¿Qué tienes ahí, en el cuello?" Seokjin le interrumpe.

Y, oh, Yoongi sabe que ya no tiene ni siquiera una escapatoria.

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