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⇝ five: following the instinct

El alfa frunce las cejas cuando su escaso tiempo de lectura es interrumpido por los suaves golpes en la puerta principal; aún así, deja todos los papeles a un lado y se aproxima a la entrada, olfateando ligeramente antes de abrir, su expresión suavizándose al reconocer al alfa detrás de la puerta.

"Youngjae" saluda, sonriéndole.

El alfa le hace una reverencia.

"Jidoja Jung" murmura.

Hoseok rueda los ojos, negando, con una pequeña sonrisa traicionándolo.

"Ya" dice, quitándole importancia. "No me llames así."

"Eres un posible jidoja" le recuerda.

Hoseok se ríe.

"No lo soy."

"Sí lo eres" se burla, sonriendo. "Todos en la manada están hablando de eso. Eres el lobo más fuerte luego de jidoja Seokjin y jidoja Yoongi, no hay duda de que serás-"

"No" le corta, frunciendo las cejas, mas no pudiendo dejar de sonreír por lo que el otro alfa sugiere. "¿Qué necesitabas?" le cambia de tema.

Youngjae entrecierra los ojos, pero se lo permite, así que le extiende la carta en sus manos.

"Yugyeom pidió que entregara esto" le informa. "Llegó hace unas horas, es de un mensajero de Busan."

Hoseok frunce el ceño, pero acepta la carta, observando al alfa.

"Lo hemos mantenido en silencio" le confirma, tranquilizándolo. "Si es una mala noticia, es mejor que jidoja Yoongi se lo comunique a sus padres."

Oh.

Hoseok asiente, sin emitir palabras, y le hace una reverencia al alfa como forma de despedida, no dudando en cerrar la puerta tras de sí. Una vez solo, se fuerza a suavizar la expresión, carraspeando, y se lleva la carta al pecho, suspirando.

'Por favor, que no sean malas noticias', le ruega a la Luna.

Y, una vez que consigue juntar valor, Hoseok se encamina hacia la sala de reuniones de la casa, teniendo muchos pensamientos positivos porque él no se cree capaz de llevar malas noticias a los Líderes.

Al menos, no esta clase de noticias.

"¡Hyungs!" el alfa chilla. "¡Hyuuuungs!" llama con voz cantarina, corriendo a la sala donde sabe que se encuentran.

Hoseok sube las escaleras, tropezando con algunos escalones, mientras agita el pequeño sobre en su mano, ansioso, por leer cuanto antes su contenido, y una vez que se halla frente a la gran puerta marrón que le separa de sus hyungs, el alfa coge aire.

"Todo va a estar bien" se dice. "Ellos se encuentran bien. Es sólo una carta más" sigue, cerrando los ojos "¡Hyungs!" grita.

Y, mucho antes de que los Líderes tan siquiera pudiesen reconocer lo que está pasando, Hoseok abre la enorme puerta, saltando sobre el sofá en el que ambos se encuentran, abrazándolos con fuerza, haciéndose chiquito entre ellos, y les da sonoros besos en las mejillas, queriendo (aunque sin admitirlo en voz alta) que el aura relajada de los Líderes le calmen.

"¡Aish!" Yoongi se queja, frunciendo las cejas, arrugando la nariz en disgusto.

Hoseok se ríe, cogiendo las mejillas del Líder para besarle todo el rostro, de vez en cuando dejando pequeñas mordidas en los cachetitos y, oh, Yoongi siente sus cejas fruncirse cuando la cara se le pone roja, caliente.

"¡Déjame!" le ordena, intentando alejar al alfa de su regazo, pero éste se resiste. "¡Déjame, Hoseok-ah!" le gruñe.

El alfa niega, burlándose.

"Deja de quejarte, Yoon" le regaña Jin, golpeándole en el hombro con una de sus manos, mientras que con la otra le acaricia el cabello a Hoseok, como si de un tierno cachorro se tratase. "Hoseok sólo te está saludando."

Hoseok asiente con una débil sonrisa, dejando un último beso en la gordita mejilla del gruñón alfa, y se ríe bajito cuando a Kim Yoongi se le escapa una carcajada, cediendo con su actitud de lobo gruñón, encogiéndose de hombros, sus encías dejándose ver apenitas.

"Hola, Seok" Yoongi le saluda, posando un beso sobre la frente del menor.

El alfa sonríe, satisfecho.

"Hola, Yoongi" murmura, sorprendiendo una vez más a Seokjin por la falta de el honorífico.

Aún así, el alfa mayor no indaga.

"¿Por qué tanto alboroto, Seokie?" en cambio, le pregunta, una vez que ve a Yoongi y a Hoseok dejar de molestarse.

¡Cierto!

Recuperando la compostura casi de inmediato, Hoseok se sienta sobre el regazo de Yoongi, permitiendo que el Líder abrace su cintura, descansando las manos sobre su estómago, bajo la atenta y para nada sorprendida mirada de Jin.

"Tengo algo para ustedes" informa, no haciendo caso a las leves, inconscientes, caricias en su estómago. Eleva la mano que sostiene la carta y la agita.

Jin eleva una ceja, mientras que Yoongi apoya el mentón sobre el hombro de el alfa menor.

"¿Es de los chicos?" pregunta.

Hoseok se alza de hombros.

"No la he abierto. No puedo saberlo" les explica con obviedad. "Sólo sé que es de Busan."

Oh.

Seokjin asiente, sosteniendo una débil sonrisa, queriendo tener esperanzas, y coge el sobre, abriéndolo antes de sacar la carta. Luego, se aclara la voz.

"«Queridos hyungs" comienza, despacio, observando a los alfas a su lado: "Ya ha pasado un tiempo desde la última carta, sabemos, mas nos mantienen vigilados todo el día y no queríamos que alguien se entere de la locura que haremos.»"

Hoseok frunce el ceño, mientras que Yoongi recuesta la mejilla en el hombro del menor, humedeciéndose los labios.

"Esto no pinta nada bien" murmura.

"Deja que hyung siga leyendo" Hoseok le pide, picándole la mejilla como castigo.

Jin les observa de reojo, conteniendo una carcajada al ver la mueca de su hermano, y sigue:

"«Les contamos porque los tres sabemos que podemos confiar en ustedes y en su discreción, también porque son nuestra familia. Apreciamos lo buenos que han sido, lo bien que hemos sido aceptados y la confianza que tienen en nosotros" Jin lee, frunciendo levemente las cejas. "Son buenos hyungs.»"

Yoongi se muerde el labio, imitando el gesto de Hoseok y Seokjin al fruncir las cejas.

"«El motivo esta carta tan arriesgada es que, como dijimos antes, cometeremos una locura. Ayer por la tarde, el Líder nos envió a una casa que le pertenece a un alfa idiota de alto linaje, debíamos encargarnos del hijo de ese idiota. Y, por supuesto, su hijo es un omega hombre, y si la situación no podía ser peor, el Líder nos obligó a llevarle a Seúl" dice, su voz tornándose grave. "¡A Seúl, hyungs! Esa manada donde los omegas son vendidos al primer alfa que ofrece algo de dinero, donde los matan sólo por ser lo que son. Seúl, la manada donde se concentra la peor mierda de nuestra sociedad. Allí.»"

Hoseok desvía la mirada.

"Por la Luna" murmura, sintiendo una opresión en el pecho de tan sólo pensar en aquella manada.

"Esto es terrible" Jin dice, horrorizado, teniendo un mal sabor en la boca, con su alfa interior arañándole las entrañas.

Y es que los alfas de Gyeonggi prefieren morir antes que dejar que un omega o un cachorro sufra.

No permitiendo que el dolor de su lobo le ciegue, Seokjin coge aire, obligándose a no pensar en todas las atrocidades que pueden hacerle al omega si llega a Seúl, y se fuerza a seguir leyendo.

"«Es por esto que los chicos y yo hemos decidido seguir los instintos del lobo de Tae: llevar a Jungkook, el omega, a casa, a Gyeonggi.»"

Oh.

Los tres abren los ojos como platos.

"«Sabemos las consecuencias de nuestro accionar y nos hacemos cargo de todo lo que llegue a suceder, pues no queremos llevar al omega a Seúl" Seokjin dice, con la boca abierta, incrédulo. "Esperamos contar con su aceptación. Los quieren mucho, Namjoon, Jimin y Taehyung.»"

Por la Luna.

Atónito, Seokjin mira a sus menores, no sabiendo qué decir, con la boca seca de repente, y parece que Hoseok y Yoongi se encuentran iguales que él, ya que le observan a la espera de algo.

Sólo que ninguno sabe qué.

Porque esos tres cachorros que les han escrito la carta jamás se interesaron por omegas que no fuesen de Gyeonggi, mas con ese omega en particular, los tres parecen-

¿Por qué se preocupan ahora?

¿Por qué la integridad física de dicho omega les preocupa a ellos también?

"Imagino que Gyeonggi va a recibir al omega que viene de Busan" Hoseok les dice, divagando en sus pensamientos, mas en verdad le preocupa que ninguno de los Lideres le responda. "¿No?" duda.

Yoongi parpadea, abrumado.

"Podemos apoyarlo" susurra, sin mirar a nadie en especial. "Siempre y cuando el omega acepte, públicamente, quedarse. Es la única forma de frenar una guerra."

Hoseok asiente, comprendiendo, y es claro para ambos Líderes que el alfa sabe estas cosas, lo ha estudiado por años en el ejército, pero, oh, ninguno logra darse cuenta que la razón de Hoseok está nublada.

Por eso, les sorprende cuando el alfa pregunta:

"¿Por qué no simplemente pedirlo a Busan?"

Seokjin frunce las cejas, negando.

"No podemos hacer eso, Seokie" le explica en un susurro. "La última vez que un alfa Líder de Gyeonggi hizo eso, terminó asesinado."

"El anterior Líder murió así" murmura Yoongi, frunciendo el ceño ligeramente.

Oh.

Hoseok abre los ojos, incrédulo, y tiene que separarse del pecho se Yoongi para observar a sus hyungs, tartamudeando cuando dice:

"¿Tú te refieres a-?" Hoseok se ahoga con su saliva, su mente trabajando más rápido que su boca. "¿Hablan del Líder Kim?"

Los mayores asienten, sorprendiendo al menor.

"No podemos correr ese riesgo, Ho. Lo sabes. Nosotros no tenemos herederos ni Luna Guía" Seokjin le recuerda.

Yoongi abulta los labios en un puchero, sus cejas arrugadas, y se lleva una mano al pecho en respeto a la memoria de su progenitor.

"Nuestro padre y Líder fue muy valiente al querer rescatar a todos los omegas de las garras de Busan y Seúl, pero le costó la vida, y hyung y yo no queremos eso."

¡Oh!

Decir que Hoseok se halla sorprendido, incrédulo, con lo que oye es atenuar.

Hoseok está...

Porque nadie en la manada sabe con exactitud por qué el alfa Líder había desaparecido de un día para el otro, dejando a sus hijos de tan sólo quince años a cargo de Gyeonggi. Las malas lenguas decían que había huído de sus responsabilidades como un cobarde, que el cargo de Líder le había superado, otros decían que se había enamorado de otra omega, que quería vivir en paz, sin el recuerdo de su difunta esposa.

Hay muchísimas teorías respecto a su desaparición, pero Jung Hoseok jamás se hubiese imaginado que el alfa Líder fue sido asesinado por intentar salvar a omegas hombres.

Jamás.

Por eso, Hoseok se halla abrumado.

"Miren esto" Jin murmura, sacándolo de sus pensamientos, mientras le da vuelta a la carta, dispuesto a guardarla, mas se topa con la bella caligrafía de Namjoon.

Es otra carta.

"Léela" pide Yoongi, atrayendo a Hoseok hacia su pecho.

Seokjin obedece.

"«Hola, hyungs" comienza, frunciendo las cejas. "Agradecería si no contestan esta carta, ya que mañana nos vamos a "Seúl" y no estaremos para recibirla»."

"Mh" Yoongi murmura, confundido.

"«Los cachorros no saben de esto que voy a contarles, y es mejor que sea así: tengo miedo, hyungs. Temo por todos nosotros, por lo que nos depara nuestro futuro. Daehyun podría asesinarnos si se entera de este plan, podría declarar la guerra y algunos de nuestros guerreros morirían por defender a este omega»."

Seokjin hace silencio, sintiendo los ojos aguados con las siguientes líneas:

"«No quiero que mis hermanos mueran, hyung, mas ellos están muy convencidos de llevar a Jungkook a la manada y yo... Yo no soy nadie para impedirlo. Mi lobo también quiere llevarlo, hyungs, mas mi razón está cagada de miedo y realmente no sé qué es lo que debo pensar o cómo seguir; pero supongo que, si los tuviese frente a mí, sus consejos serían algo así como: 'Tú sólo sigue tus instintos, cuida de los cachorros y no bajes la guardia', así que eso es lo que voy a hacer" Jin se detiene, observando a sus menores, con el labio inferior temblándole un poco. "Nos vemos pronto. Kim Namjoon»."

Oh.

Seokjin jadea cuando termina de leer, no sabiendo exactamente cómo debe reaccionar, qué debe pensar o esperar ahora que sus menores tomaron una peligrosa decisión. Porque lo único que desea es proteger a esos tres cachorros, pero no puede y, oh, Seokjin se siente totalmente impotente.

Por la Luna.

Son sólo cachorros.

¿Cómo es que no puede protegerlos?

"Oh" Hoseok dice, totalmente ahogado en sus pensamientos, y se recuesta un poco sobre el pecho de Yoongi.

Es mucho para procesar.

Son sólo cachorros.

"¡Qué horror!" murmura, abrumado.

Pero, oh, Hoseok no duda ni siquiera un segundo en golpear a Yoongi cuando le escucha reírse a carcajadas.

"Auch" Yoongi se queja, riendo.

"Estás siendo desubicado" Hoseok le regaña, gruñéndole.

Yoongi se encoge de hombros, dejando ver una sonrisa, y Jin frunce las cejas.

"¡Esto no es gracioso, idiota!" le regaña, tironeándole de las orejas. "¡Podríamos morir por una guerra!" le recuerda, con un gruñido creciendo en el fondo de su pecho.

Y es que ¿cómo Kim Yoongi se atreve a reírse de un tema tan delicado, tan, tan peligroso?

"Auch. Auch. Auch" se queja entre risas y pucheros. "Lo siento. Lo siento. Auch."

Los alfas le gruñen, molestos.

"Es un tema delicado, Yoongi" Hoseok dice.

"Yo sé" le dice, rodeando su abdomen, soltando un quejido, cansado de reír. "Sé que es un tema muy delicado, pero" sigue, incorporándose para que ambos alfas puedan verle, "¿no les resulta, no sé, gracioso saber que los lobitos de los cachorros se enamoraron del mismo omega?" les pregunta, volviendo a reír.

Oh.

Seokjin frunce el ceño, mientras que Hoseok eleva una de sus cejas, dándose la vuelta para observalo mejor, ambos creyendo que Yoongi se ha vuelto loco.

¿Realmente Yoongi se está riendo de eso cuando podría haber una guerra?

¡Por la Luna!

Yoongi, un jodido alfa Líder, no puede estar riendo por eso.

No puede estar pensando en eso.

"No puedo creer esto, Yoongi" Seokjin le observa con mala cara, incrédulo. "Eres un Líder, ¿cómo puedes-?

"Oh, vamos" el alfa le interrumpe, con una sonrisa, intentando que los otros se olviden de los problemas, de la posible guerra, por un instante. "Ambos lo han pensado: ¿Cuándo ellos han seguido sus instintos?"

Jin abre la boca, indignado, dispuesto a regañarlo, pero Yoongi decide ignorarlo, recibiendo un codazo en el estómago de parte de Hoseok.

"No vale decir que siguen sus instintos cuando están en celo o nos protegen" les dice, provocando que Seokjin frunza las cejas.

"Yoongi" advierte.

"¡Exacto! Nunca lo hacen" le ignora.

Y, oh, Seokjin se rinde, por lo que dirige la mirada hacia Hoseok, rogando que le dé una mano. Pero es Jung Hoseok, ése chico que sigue al alfa Líder hasta en las ideas más idiotas, más descabelladas, que tenga, del que estamos hablando.

Seokjin debería haberlo previsto.

"Yo..." Hoseok murmura, observando al Líder menor. "No creo que sea así" dice, decidiendo seguir la corriente de lo que Yoongi dice.

Jin se golpea la frente.

"¡Ja!" Yoongi se burla, observando a su hermano.

El Líder le gruñe, escondiendo una sonrisa.

"Tres alfas jóvenes queriendo salvar a un lo o omega, traerlo hasta la manada, arriesgando las vidas de todos sólo para verlo seguro y no volver a hablar con él. ¡No me jodas!" exclama, confiado de sus suposiciones, y se cruza de brazos. "Los cachorros se enamoraron del omega, Hoseok-ah, recuerda lo que te digo."

Hoseok se da la vuelta para mirar a Yoongi por sobre su hombro, riendo al ver la expresión de burla en su rostro.

"Pareces un viejo" le dice.

Yoongi entrecierra los ojos, cerrando las manos alrededor de las caderas del alfa menor mientras se inclina para morder su hombro con fuerza, castigándolo por cómo le ha llamado. Y Hoseok le gruñe ante la mordida, pero no se aleja.

"Viejo tu abuelo, Hoseok."

"No, viejo tú" le replica con picardía, bajando del regazo ajeno, y se refugia a un lado de Seokjin, quien ríe bajito por la charla que sus menores tienen.

Yoongi les gruñe a ambos.

"Ríanse, no me importa, pero sé lo que les digo" se cruza de brazos, luciendo ofendido pues ni siquiera su hermano cree en lo que está diciendo.

¡Es completamente lógico!

Hoseok rueda los ojos.

"Sí, lo que digas, abuelo."

¡Oh!

Yoongi le gruñe, esta vez sintiéndose realmente (no tanto) ofendido por el apodo, por lo que Hoseok cambia a su forma animal y huye de la sala lo más rápido que puede, sintiendo las pisadas de un furioso Yoongi justo detrás de él.

"¡Hoseok!"

Oh, pobre Hoseok.

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