"Alfas" el pequeño omega les llama una vez que termina con su almuerzo, y de inmediato tiene tres pares de ojos en él. "¿Puedo limpiar mi cuerpo?" pregunta, observándolos con ojitos suplicantes, su labio inferior abultado en un pucherito.

Ow.

Los alfas fruncen las cejas, confundidos, inclinando ligeramente las cabezas a un lado.

"¿Uh?" Taehyung pregunta.

Jungkook se sonroja en la cima de sus pómulos, mordiéndose ligeramente el labio inferior. Y es que le da vergüenza el hecho de que ha sudado muchísimo durante el viaje, lo que provocó que su cuerpo desprenda ahora un olor terrible (que sólo él nota).

Porque Jungkook sabe que los omegas siempre deben oler bien, rico, y quiere hacerlo para los alfas a los que ha sido entregado.

Quiere ser un buen omega, en todos los sentidos de la palabra, uno que no cause asco en los alfas. Sobretodo, en estos alfas.

"Yo... Uhm..." balbucea, frunciendo las cejas ante ésto. "Quisiera la-lavar mis... mis partes íntimas" murmura, bajando la mirada a sus manos, completamente avergonzado, mientras aprieta los labios en una línea, sus hoyuelos haciéndose un poco más evidentes.

¡Oh!

Namjoon asiente, tragando seco, con un principio de sonrojo en los pómulos, y luego carraspea suavemente, llamando la atención del omega.

"Está bien" le dice, frunciendo las cejas apenitas ante su nerviosismo, y señala a sus hermanos con la cabeza.

No.

No, ¡por favor!

"Mh" Jungkook gimotea, abriendo aún más sus grandes ojitos. "¿Debo elegir a- a uno?" atónito, pregunta, encogiéndose en su lugar.

"Sí, por favor. Tenerte a nuestra vista es la única regla que pondremos" Namjoon le explica, suavizando la voz.

Pero a Jungkook ésto no parece hacerle efecto, pues se aparta un centímetro del alfa, haciéndose cada vez más pequeño.

"No, omega" Namjoon le pide, bajando los hombros, relajándolos, mientras le enseña sus palmas abiertas, indefensas. "Esta condición no es para- para-" el alfa se corta, sacudiendo la cabeza. Suspira y vuelve a empezar. "Hacemos esto por ti, omega. Debemos cuidarte. Sólo es éso."

Y, quizás, la palabra indicada no es «debemos», sino «queremos», pero el alfa no lo menciona ni se detiene a darle atención a los deseos de su lobo interior.

"Oh" Jungkook susurra, arrugando las cejas, sintiéndose- "Pero, alfa" le dice.

Mas no se anima a seguir una vez que posa la vista en el alfa, sintiendo como toda la valentía se le escapa en un sólo instante, y hace un puchero a la nada misma. No quiere desobedecer; lo ha dicho antes: quiere ser bueno, pero se siente avergonzado al pensar en que el alfa que elija podrá mirarle mientras se limpia.

Le hace querer correr a su habitación, con su mantita, bajo el cuidado de su padre.

"Bien" sin embargo, se rinde, sabiendo de sobra que no debe contradecir a un alfa. "Lo elijo a él" murmura, señalando a Jimin, mas no se detiene a mirarlo.

Y Namjoon le comprende, realmente.

"Jungkook-ah" le llama, "tranquilo" le pide, sonriendo apenitas. "Nadie va a hacer algo que no quieras. Sólo vamos a cuidarte" le explica.

Pero el omega no quiere oír más, pues sus ojitos están aguados mientras hace todo lo posible por no llamar a su papi para que le proteja.

"Lo elijo a él" dice, esta vez más alto, y se tiene que relamer los labios porque de repente los siente secos.

Porque sabe que su asustadizo omega le está jugando una mala pasada al desear que su padre le proteja, al no confiar en que estos tres alfas sólo van a cuidarle.

Al creer que son alfas que aparentan ser buenos.

"Quiero que me cuide él" pide, cerrando los ojos, mientras se permite respirar el aroma de los alfas, calmando a su lobito asustadizo en cuestión de segundos.

El omega en su interior suspira, bajando los hombros, abandonando su estado de alerta, de pánico, y no se opone cuando Jungkook ruega:

"Por favor."

Oh.

Jimin se levanta de su lugar, tragándose la sorpresa, y mira al omega, a la espera de una orden para seguirlo, por lo que éste se encoge en su lugar, cambiando el peso del cuerpo de una pierna a la otra.

¡Qué vergüenza!

¡El alfa ha aceptado cuidarlo!

Jungkook se da la vuelta, empezando a caminar hacia el lago sin esperar al alfa que, en teoría, debería de acompañarlo, y Namjoon mira a sus hermanos.

"Bien" dice, carraspeando, mientras se toca las mejillas disimuladamente, con la esperanza de que ya no se encuentren rojas. "Tú ve con él, Tae y yo veremos si podemos cazar algo" indica, mirando a Jimin "Nos limpiaremos antes de partir" luego, observa a Taehyung.

Taehyung bufa, puchereando.

"¿Qué sucede?" Jimin le pregunta, con las cejas fruncidas.

"Espero que me elija la próxima vez" susurra, lloriqueando, y tanto Jimin como Namjoon no pueden evitar reír.

Oh, Luna.

Namjoon niega, sonriendo.

"Déjate de tonterías" le pide, palmeado la espalda de su hermanito. "Andando, alfa pervertido" se burla.

Aunque él, muy en el fondo, también desea que Jungkook le elija la próxima vez para acompañarlo.

Sólo que no va a decirlo en voz alta.

Ajeno a lo que su hermano piensa, Taehyung entrecierra los ojos al notar las acciones inconscientes de Jimin.

"Jiminnie es el pervertido" le acusa, riéndose, mientras le señala.

Y Jimin gruñe, avergonzado, cuando sus hermanos le atrapan viendo de reojo el pequeño trasero de Jungkook.

"Ya" dice, frunciendo las cejas. "¿Ustedes no iban a cazar?" les gruñe, y Taehyung le hace burlas. "Vete" ordena. "Mientras, yo tengo un bonito omega al que cuidar" se mofa, sonriendo de lado.

Y es increíble cómo sus hermanos pueden cambiar su actitud burlona en un santiamén cuando se les recuerda el hecho de que Jungkook escogió a Jimin.

'Es casi como si Tae y hyung sintieran lo mismo que yo', piensa Jimin, mas no le da vueltas cuando recuerda que Kook está solo caminando al lago.

"Bien, debo irme" informa, sacándole la lengua a sus hermanos.

Y, oyendo los gruñidos enojados de ellos, Jimin se da vuelta para seguir los pasos del omega, llegando a su lado en menos de un minuto; mas no se dirigen ni una palabra. Caminan en silencio, con sólo la respiración calmada del omega como sonido de fondo, y Jimin siente que su pecho se hincha de orgullo ante ésto.

Porque, sin necesidad de palabras, el bonito omega le hace saber a Jimin que se siente cómodo con su presencia y, oh, éso no puede gustarle más.

"Alfa" le llama cuando están por llegar, sacándolo de sus pensamientos.

Jimin le observa, atento, y Jungkook se encoge en su lugar, tocándose las orejas con nerviosismo.

"¿Sí, Jungkook-ah?" le anima.

Y el omega quiere hacerle un puchero.

"¿Usted-? ¿Usted también se limpiará?" se anima a preguntar, atento a todas las reacciones del alfa.

Jimin asiente lentamente, sonriendo.

Oh.

Jungkook se humedece los labios, sus cejas fruncidas ligeramente, y asiente para sí mismo.

"Bien" dice, despacio, analizando sus próximas palabras. "Yo primero" pide.

Y Jimin no hace más que asentir antes de sentarse sobre el tronco de un árbol, amagando con mirar a Jungkook, pero éste le cubre los ojos rápidamente con sus pequeñas manos, alterado.

"Pero no me mire" le pide, nervioso, y tiembla ligeramente cuando el alfa le toma las muñecas con suavidad para, luego, alejar sus manos, manteniendo los ojos cerrados.

"No lo haré" le promete, sonriendo sin enseñar los dientes, y es algo raro para el omega darse cuenta de que, aún si Jimin mantiene los ojos cerrados, éstos se curvan en dos lindas medialunas.

Le provoca algo en el estómago, en su corazón, mucho más grande que todas las maripositas que sintió antes, y hace que su omeguita se encoja en su lugar, cohibido ante lo lindo que Park Jimin se ve.

Oh, Luna.

¿Acaso este sentimiento que Jungkook no conoce es malo? Porque no se siente como si lo fuera.

"Tranquilo" Jimin le pide, adivinando dónde se encuentran las manos de su menor para acariciarle el dorso de éstas. "Tienes mi promesa, omega. No miraré hasta que me digas que puedo hacerlo."

Oh.

Jungkook se encoge un poco en su lugar, dudando unos segundos antes de relajar los hombros; y el omega miente mucho si dice que, cuando se aleja unos pasos, no le sorprende ver que Jimin mantiene la misma posición, sin abrir apenitas un ojo.

Jimin sólo- sólo se dedica a obedecer.

Es sorprendente.

Es extraño.

Es abrumador.

Por sobre todo, es aterrador.

Jimin no le está observando, no le va a observar, va a cumplir con su palabra y, oh, Jungkook se encuentra temblando de pies a cabeza.

¿Por qué este alfa no es... un alfa?

"Ve" le pide Jimin, de alguna u otra forma sabiendo que el omega está aún frente a él, y Jungkook da un respingo. "Confía en mí, omega. Yo sólo te cuido" le recuerda.

Oh.

Jungkook asiente, aún sintiéndose un tanto abrumado, y se da la vuelta casi de manera robótica para dirigirse hasta el lago, con el ceño fruncido apenitas y un pequeño trastabilleo que casi hace que caiga; mas, de alguna manera, estar cerca del lago hace que sus manos dejen de temblar.

"Tranquilo, omega" se dice a sí mismo, sintiendo el rápido latir de su corazón, notando por primera vez que ésto se debe al terror de su lobo por estar en el exterior, en aquel mundo prohibido.

Y parece que lo nota ahora porque está lejos de los alfas.

"Respira, omega" se pide. "Mira y huele las bonitas flores conmigo" le anima.

Pero sus palabras no tienen el mismo efecto que tienen las palabras de los alfas en su omega interior.

Nunca lo tuvo.

Porque, Jungkook se ha dado cuenta, a su omega y a él mismo les aterra estar en el mundo exterior, pese que lo han deseado hace años, si los alfas no están ahí para asegurarles que ellos les van a cuidar.

Porque, sin los alfas a su lado, el mundo exterior sigue siendo prohibido para las fallas.

Y quizás es por eso que las manos le vuelven a temblar mientras se quita la ropa, dejando a la vista su colección de hematomas adornando cada rincón de su cuerpo, no dejando ni un espacio para admirar su delicada y pálida piel; mas a Jungkook no parece molestarle ello, pues ha pasado ya un tiempo desde que vio algún espacio de su piel sin un hematoma. Y no es hasta que se quita la ropa interior, que la vergüenza vuelve a invadirle, tiñendo sus mejillas, su cuello y sus orejas de un fuerte color carmín.

¡Por la Luna!

Jungkook se está desvistiendo frente a un alfa, en el mundo exterior, y todo lo que quiere hacer es volver a colocar su ropa para correr hacia su habitación y esconderse bajo su mantita.

No lo hace, sin embargo.

En cambio, y por puro instinto, el omega se gira a mirar al lindo alfa por sobre su hombro, estando más tranquilo cuando nota que aún tiene los ojos cerrados, no teniendo intención de abrirlos. Y es tan extraño para Jungkook el que Jimin no incumpla su petición.

¡Jimin es un alfa, por la Luna! Él puede hacer lo que le salga de los cojones. Mas no lo hace, sin embargo, y a Jungkook le sorprende aún.

"¡Ve!" Jimin le pide por última vez, y se da la vuelta para que el omega se halle tranquilo.

Oh.

Jungkook se encoge, frunciendo las cejas ligeramente, y se muerde el labio para no sonreír ante las ocurrencias del alfa.

"No hace falta-" el omega murmura, mas se detiene cuando nota que su voz sale tan débil que Jimin no podrá oírle. "Alfa, no hace falta" dice, un poquito más alto.

Jimin se ríe, encogiéndose de hombros, mas no se da la vuelta, dejando que el omega ingrese al lago sintiéndose más tranquilo, y todo el cuerpo se le tensa al notar lo fría que está el agua.

"Uh" Jungkook balbucea mientras se abraza a sí mismo, temblando. "Frío. Frío. Frío" murmura, tragando saliva.

¿Cómo es que el agua puede estar así de helada durante el verano?

"Rápido. Rápido" se dice, salpicándose el cuerpo con pequeñas gotas de agua, y se fuerza a sí mismo a no chillar cuando el cuerpo le entumece mientras se hunde en el agua.

Jungkook se moja la cabeza, pasándose los dedos por entre su cabello, y luego sale a la superficie, soltando un débil quejido que inevitablemente hace que Jimin abra los ojos, frunciendo las cejas mientras intenta a oír más, apretando sus muslos con fuerza para evitar que su lobo le obligue a darse la vuelta.

"¿Omega?" Jimin le llama, nervioso.

Jungkook se encoge, mordiéndose el labio inferior.

"Estoy b-bien" asegura, abrazándose a sí mismo, y no se reconoce cuando le dice: "Ya p-puede ver, alfa."

Oh.

Jimin siente a su lobo aullar contento mientras mueve la colita, pidiéndole, no, exigiéndole que se dé la vuelta; pero Jimin no es esa clase de alfa. No quiere que su lobo sea esa clase de alfa.

"¿Seguro?" le pregunta.

Y Jungkook tampoco reconoce a su lobo cuando éste responde por él, sintiéndose emocionado por algo que su razón no es capaz de comprender.

"Sí, alfa" dice, dócil, y luego su voz baja a una octava. "Ya pu-puedes verme."

¡Oh!

Jungkook se cubre la boquita, dándose la vuelta, y cierra los ojitos con fuerza, deseando que Jimin, por favor, no haya escuchado lo que su tonto lobo dijo.

Por favor. Por favor. Por favor.

Pero Jimin lo hace, para su desgracia. Le ha oído fuerte y claro, porque para él, la dulce voz del lindo omega es todo lo que desea oír por el resto de su vida.

Sólo que Jimin no va a admitirlo.

"Okay" el alfa murmura, respirando hondo, y se frota los muslos, nervioso. "Okay. Aquí voy" intenta convencerse.

Mas Jimin no estaba preparado para ver a Jungkook desnudo, se da cuenta luego. Porque cuando se da la vuelta y sus ojos encuentran al omega de espaldas a él, el estómago y el corazón le dan un vuelco, sus pulmones de inmediato olvidando cómo llevar oxígeno hasta ellos y, oh, el alfa tiene que clavarse las uñas en sus muslos para evitar correr hasta donde el omega se encuentra para cubrirlo con una manta, para que nadie, excepto él, vea lo precioso que Jungkook es.

Jimin quiere quedárselo sólo para él.

"Oh" es todo lo que el alfa puede decir, observando desde la lejanía cada único detalle de Jungkook, incluso si sólo ve- "Hermoso" murmura sin darse cuenta. "Jodidamente hermoso."

Y no miente, de hecho. Porque Jungkook realmente se ve hermoso. Más hermoso de lo que normalmente es.

Por eso, para Jimin, respirar queda en segundo plano cuando su lobo está tan centrado en este bonito omega. Y no es de extrañar que el alfa sienta ganas de aullar nuevamente cuando ve la espalda flacucha del omega cubierta de lunares esparcidos por toda su piel; o su bonita y pequeña cintura, donde las manos de Jimin encajarían a la perfección; o su- o el inicio de su espalda baja, de su culo, donde el alfa se decide a no mirar más pues la boca se le seca y sus pulmones inmediatamente recuerdan que deben funcionar para que Jimin siga vivo, para que pueda observar a Jungkook hasta el cansancio.

Y, oh, Jeon Jungkook es una criatura tan preciosa que debe ser observada hasta el cansancio.

Jimin casi quiere gruñir de orgullo por estar tan cerca de tan hermoso omega, por estarle cuidando, por ser portador de la confianza y la calma de Jungkook. Porque, Jimin nota, Jungkook confía en él, se siente a salvo con él, y que el lindo omega se dé la vuelta para mirarlo con las mejillas rojitas como dos tomates y una sonrisa apenada en los labios, sólo hace que Jimin se sienta más orgulloso.

"Hola, alfa" le saluda, sintiendo que sus ojitos poco a poco comienzan a aguarse.

Y es que Jungkook jamás se imaginó que un alfa podía mirarlo como Jimin lo está haciendo: sin una pizca de asco y/u odio en los ojos, sin acusarlo en silencio por lo gordo que es, sin humillarlo.

Sólo admirándolo.

Es abrumador para Jungkook, y le hace querer llorar, esconderse en el pecho de Jimin y dejar que éste le susurre que no hay nada de malo en él. Porque es así como este alfa le hace sentir y Jungkook realmente adora éso.

"Hola, omega" le responde, sonriéndole hasta que sus ojitos se transforman en dos lindas medias lunas que enloquecen el pobre corazón de Jungkook.

Jungkook se ríe, nervioso, y se abraza nuevamente a sí mismo, mas esta vez no porque siente frío, sino porque su pobre corazón está alborotado y en su interior, su omega anhela que-

"¿Ya terminaste?" el alfa le pregunta, ladeando suavemente la cabeza.

Uh.

Jungkook carraspea, intentando calmar a su omega interior, y observa a Jimin con la intención de que su presencia lo tranquilice, no notando que sus ojitos brillan en dorado cada vez que observa a este alfa.

"¿Jungkook-ah?" llama Jimin, sonriendo, y le observa a la espera de algo.

¡Cierto!

Jungkook asiente enérgicamente, con la garganta seca, y Jimin se ríe, haciendo que el omega sienta el rostro arder.

Este alfa es tan- tan-

Jimin es bonito.

"Terminé" afirma, sacuendiendo un poco su cabeza, y se cubre a sí mismo, sus partes íntimas.

Y, esta vez, no hace falta que Jungkook le pida que se cubra los ojos, pues Jimin lo hace de inmediato al notar su deseo por salir del lago.

Y el omega está- está abrumado. ¿Ya lo ha dicho antes?

Jimin es tan-

Jungkook sacude la cabeza, tiritando, y se apresura a salir del lago, corriendo a secarse el cuerpo y luego vestirse con la ropa que los alfas le han prestado, todo su cuerpo olvidando el frío al sentir el suave aroma a lluvia de Namjoon así de impregnado en la tela que, obviamente, le queda enorme. Y el omega sólo puede (y quiere) sonreír ante el sentimiento.

"Alfa" murmura, haciéndose chiquito dentro de la camiseta. "Alfa, ya estoy vestido" informa, balanceándose de adelante para atrás sobre las puntas de sus pies, pasando las manos detrás de su espalda mientras inclina suavemente la cabeza.

Jimin se muere de ternura cuando le ve.

"Qué bien" Jimin susurra, sonriéndole, y le guiña un ojo. "Me toca a mí" le dice.

Jungkook asiente, cerrando los ojos de inmediato, y se da la vuelta, queriendo que el alfa también sienta que él va a cumplir con su silenciosa promesa de no verle desnudo. Y, oh, Jimin siente que el corazón le late aún más rápido al ver las acciones del omega.

¿Cómo puede ser tan- tan tierno?

"Ve, alfa" le insta, arrugando la nariz débilmente ante lo que quiere decir, pero no sabe si puede. "Yo sólo te cuido. No miro" le promete en voz baja.

Oh.

El alfa se ríe, humedeciéndose los labios, y se acerca al omega, posando las manos suavemente sobre la pequeñita y hermosa cintura de éste para susurrarle al oído:

"Gracias, omega" dice, su voz saliendo ronca, y ve al omega estremecerse, con los vellos de punta. "Pero está bien si me miras" continúa, rozando la nariz sobre la oreja del menor "Te lo prometo, Koo."

«Koo»

Jungkook se desarma ante el apodo.

"Está bien si decides mirarme mientras me cuidas."

Oh, Luna.

El omega se encoge en su lugar, con las cejas fruncidas suavemente mientras se obliga a sí mismo a no darle atención a la forma en que las manos del alfa le sostienen por la cintura, acariciando la piel sensible, calentándola con su toque, pero, ¡por favor!, ¿cómo ignorar ello, si a éso se le suma el hipnotizante aroma de Jimin adormeciéndole cada músculo? ¿Cómo ignorarlo, si Jungkook siente que su omega se muere ante el toque? ¿Cómo ignorarlo, si su razón se apaga cuando Jungkook decide hacerse para atrás, con la esperanza de llegar al pecho del alfa?

No se puede ignorar, claro que no.

Mas Jimin decide romper la cercanía al sentir las intenciones de su alfa interior, esas intenciones que ahora hacen que sus iris brillen en un fuerte rojizo y sus colmillos salgan a la luz, buscando una porción de piel para marcar.

'Basta ya, alfa', se ordena, y Jimin ama que su lobo le haga caso.

"Voy a limpiarme" informa.

Oh.

Jungkook abre los ojos, confundido ante lo que ha sucedido, lo que ha sentido, y se da la vuelta instintivamente en busca del alfa, ahogando un chillido cuando le ve a unos metros de él, cerca del lago, mientras se quita la ropa, sus músculos fuertes resaltando en cada movimiento que da y, oh, Jungkook abre mucho sus ojitos cuando la ropa interior de Jimin desaparece, dejando ver-

Oh.

El omega se cubre los ojos nuevamente, con la garganta repentinamente seca y el corazón latiéndole a mil por hora, su mente recordando una y otra y otra vez aquella porción de piel que ha visto y no va a olvidar jamás.

Porque es la primera vez que Jungkook ve a un alfa desnudo, Jimin puede notar, mientras observa al omega por sobre su hombro, con una sonrisa triunfante, al atrapar a su menor observándolo por entre sus dedos, como quien no quiere la cosa. Hace que Jimin sienta a su lobo aullar contento, animándolo a enseñar cada porción de su cuerpo, caminando lentamente hacia el lago.

Y es que, naturalmente, Jimin adora que las personas observen su cuerpo; es un provocador de primera, y pronto Kook se da cuenta de ello.

Porque no pasan siquiera unos minutos antes de que aparte las manitos de sus ojitos para observar al alfa, atrapado por la belleza y sensualidad que libera.

Jimin es bonito. ¿Ya lo ha dicho antes?

"Bonito" Jungkook dice, asintiendo ante su pensamiento.

Este alfa es muy bonito.

Mientras tanto, ajeno (no realmente) a lo que sucede con Jungkook, el alfa se mete debajo del agua, comprobando que está helada, y sale a la superficie con rapidez, tirando su cabello hacia atrás antes de pasar las manos por su cuello, respirando el aire limpio mas no disfrutándolo completamente porque la esencia de ese omega no está cerca.

"Oh" Jungkook murmura ante esto, con la garganta seca y los ojos muy abiertos, no queriendo perderse ningún detalle acerca de las pequeñas gotas que se deslizan por el pecho de Jimin y llegan hasta-

"Me estás mirando" Jimin dice, más sorprendido que acusador, y se ríe al notar que Jungkook cierra los ojos casi de inmediato, negando con la cabeza.

Jimin no esperaba que Jungkook le mirara.

"No, yo no-" Jungkook se ahoga con su saliva, nervioso. "Le cuido, pero no le miro" le recuerda, aunque ni él se lo cree.

Jimin se ríe, negando con la cabeza, y Jungkook se siente morir de vergüenza cuando su lobito le ruega mirar al alfa una última vez.

Por favor, que su omega se detenga.

"No p-puedo mirar a l-los alfas" dice el omega, más para su lobo interior que para Jimin.

"Puedes verme a mí" Jimin le concede, elevando un hombro.

Y, oh, Jungkook sabe que se sonroja de pies a cabeza al oír al alfa.

"Alfa" se queja, abultando los labios en un puchero, aún si su lobo interior está que se muere de alegría ante la (para nada) sutil invitación del alfa.

"Yo te miré antes" Jimin le recuerda.

"Pero e-es distinto" Jungkook replica, y se explica mucho antes de que el alfa le pregunte a qué se refiere. "Ustedes, l-los alfas, pueden hacerlo. Las f-fallas no."

Oh.

Jimin no le responde, sólo sale del lago de forma apresurada; Jungkook lo sabe porque lo oye, mas se sorprende aún así cuando siente al alfa tan cerca de él.

"Levántate" ordena Jimin.

Uh.

El omega obedece, confundido, con la ligera necesidad de alejarse unos pasos, más el alfa le toma por los hombros y le hace quedarse estático en su lugar.

¿Qué rayos-?

"Abre los ojos" sigue, frunciendo las cejas cuando el omega obedece, pero de forma desconfiada, casi con miedo, y es exactamente éso lo que Jimin no quería.

"Alfa-" Jungkook empieza, pero éste no le deja terminar.

"Por favor" le interrumpe, "no vuelvas a dirigirte a ti mismo como una «falla», no te dediques otras palabras que no estén llenas de amor" le pide. "Tus orejitas, tú y el omega en tu interior sólo necesitan oír palabras llenas de amor."

Oh.

"¿Entendiste, Jungkook-ah?"

Jungkook pucherea, frunciendo las cejas suavemente, por lo que Jimin flexiona las rodillas hasta estar a la altura de su menor, sonriéndole.

"¿Entendiste?" insta, esta vez con voz más suave.

Y, oh, Jungkook tiene suerte de que las voces de los otros dos alfas comiencen a oírse, anunciando su inminente llegada, y distraigan a Jimin lo suficiente como para que él pueda alejarse unos pasos para lavar la ropa sucia (suya y del alfa) en las orillas del lago.

Jimin chasquea la lengua, pero permite a huida de Jungkook, no queriendo que se sienta presionado.

"Gracias a Taehyung, sólo conseguimos cazar dos liebres grandes" Namjoon se queja, alzando un poco la voz, por lo que Jungkook salta ligeramente en su lugar, tomándose el pecho.

"¡Alfa!" le regaña instintivamente.

Namjoon se encoge.

"Lo siento, omega" se disculpa, con una débil sonrisa en los labios, y luego mira a Jimin, que se encuentra encendiendo una fogata. "Tendremos que comer en parejas."

Taehyung bufa.

"No fue mi culpa, hyungie" se defiende. "Esas liebres tenían el oído desarrollado y me oyeron, aunque no hice ruido."

Taehyung frunce las cejas, dejando las liebres –las cuales él y su hermano se habían encargado de limpiar después de cazarlas– en manos de Jimin, y se acerca al lago para lavar sus manos, Namjoon siguiéndole al instante para imitarlo.

"Tae, estornudaste porque una ramita tocó tu nariz, y no eres nada cuidadoso cuando lo haces" el alfa mayor le golpea en la cabeza, riendo.

Oh.

Jimin se ríe, soltando una carcajada al imaginarse ello, y Taehyung forma un puchero con sus labios, fijando la vista en el omega a su lado, gimiendo de manera fingida para exagerar su dolor.

'Alfa' bobito, piensa Jungkook, riéndose.

"No huyas de lo que hiciste, Taehyung" Jimin le acusa, riendo hasta que sus ojitos desaparecen en dos medias lunas que, oh, hacen enrojecer a lindo omega.

'Bonito', repite su omega.

Taehyung arruga la nariz, gruñéndole bajito, escondiéndose detrás del omega, y Jimin le saca la lengua mientras coloca las liebres en el fuego.

"No te escondas detrás de Jungkook, Kim Taehyung" el alfa se burla.

Taehyung gruñe, apoyando el mentón sobre el hombro de Jungkook.

"Dile algo, Jungkook-ah" el alfa pide.

El omega sonríe ante la situación, no estando seguro de qué puede decirle a Jimin para defender a Taehyung, por lo que decide darse la vuelta para acunar los cachetitos del alfa, acariciándole la piel como primer y único instinto para calmarlo.

"Tranquilo, alfa" le susurra, nervioso ante la cercanía con Taehyung, ante las mariposas que revolotean en su pancita cuando el alfa le mira, ante su lobo, que no está seguro de lo que sucede. "Yo- uh- alfa, podemos- podemos comer juntos, si quiere" balbucea, acercándose un poco más a Taehyung. "A mí... no me importa compartir" le asegura, sonriéndole.

Taehyung pucherea, siguiendo con su actuación, con sus sollozos fingidos, e inclina levemente la cabeza para recibir más mimos en las mejillas.

"Está bien" el alfa susurra.

Jungkook se ríe, comprendiendo que los sollozos son sólo parte de una actuación para recibir mimos, y no se priva de dar más caricias en las mejillas del alfa. Mas su lobo no lo entiende, su omega piensa que Taehyung realmente está llorando para que le proteja, para que le calme, y lo único que puede hacer es traerlo más cerca de su cuerpo, abrazándolo por los hombros, permitiendo que Taehyung se sitúe cerca de su fuente de aroma.

"Pobre alfa bobito" el omega murmura, provocando suaves risitas en Taehyung, y sonríe bobamente cuando el alfa le rodea por la cintura, restregando su naricita por el suave cuello del omega.

"Pobre de mí" Taehyung se lamenta, contento con que Jungkook le siga la actuación.

Y, oh, el pobre omega no puede hacer más que liberar su aroma, queriendo que el alfa encuentre tranquilidad en él, queriendo marcarlo para cuidarlo de lo que sea que le tenga sollozando de esta forma. Es el instinto de su parte animal el cuidar como puede a este lindo alfa en quien confía tanto, y Jungkook no parece darse cuenta de ello sino hasta que tiene a Taehyung olfateando todo su cuello, haciendo pequeños sonidos por la confusión.

¿Acaso este omega sin aroma... está liberando su aroma?

Taehyung está más que sorprendido.

"¿Qué sucede, alfa?" pregunta, alejando ligeramente al mayor de su cuerpo para observarlo a la cara, pero, oh, el omega abre mucho sus ojitos al ver los iris en color rojizo de Taehyung.

¿Qué-?

"¿Alfa?" pregunta, confundido.

Namjoon y Jimin levantan las miradas al oírlo, ya habiendo perdido el hilo de la actuación de Taehyung para centrarse en la comida, y se aproximan al omega para ver lo que sucede.

"Hey, ¿está todo-?"

La voz de Jimin se corta abruptamente ante el aroma que llega a su nariz, ante el aroma que Jungkook-

¡Oh!

¿Jungkook tiene aroma?

"¿Alfa?" el omega pregunta, confundido ante la reacción de sus mayores. "Alfa, ¿qué sucede?" le pregunta a Namjoon.

Pero parece que los tres alfas están tan confundidos al igual que él, porque no parecen tener una explicación para sus reacciones, para la manera en que sus lobos interiores parecen enloquecer al sentir el ¿aroma? de Jungkook.

¿Qué rayos está sucediendo así?

"¿Alfas?" pregunta el omega, parándose.

Y parece que la suerte no está del lado de los alfas que luchan por responder, pues una ínfima brisa recorre el lugar y, oh, Luna, el aroma del omega los hace trastabillar apenas.

"Mhm, omega" Namjoon suspira, viendo a Taehyung acercarse a Jungkook.

El omega se encoge, cohibido ante las miradas de los alfas.

"¿Qué, alfa?" pregunta, curioso.

Los alfas se acercan a él, dejándolo en el medio de un improvisado círculo.

Oh.

"Jungkook-ah" le llaman los alfas, casi gimiendo, justo en su oído, abrazándolo con suavidad, haciéndolo sentirse muy pequeño entre ellos.

"¿Qué su-sucede?" Jungkook duda, un tanto dudoso ante el accionar de sus mayores, y pega un pequeño salto al sentir la nariz de Namjoon en su nuca, olfateando en su cabello con insistencia. "¿Alfas...?" vuelve a dudar, mas su voz va perdiendo fuerza.

Y es que los alfas le están olisqueando como- como- Jungkook no comprende este comportamiento.

"Hueles muy bien" Jimin le halaga, su voz saliendo rasposa, y Jungkook tiene los vellos de punta casi de inmediato.

Taehyung gruñe, enloquecido, ante el dulce aroma del omega, y Namjoon le frunce las cejas, queriendo regañarlo por su accionar tan primitiva, mas es imposible hacerlo cuando él mismo se encuentra rodeando la cintura del lindo omega, olisqueando su cabello.

Los alfas jamás, ni siquiera en Gyeonggi, habían conocido a un omega tan bonito y con un aroma tan dulce, tan relajador, tan atrapante y provocador, tan... tan...

Gardenias.

Es un aroma único, tanto como el omega que lo porta.

"Y-Yo-" Jungkook traga seco, no pudiedo sacar más de una palabra de su boca sin tartamudear pues los adictivos aromas de los alfas —limón, de Taehyung; coco, de Jimin; y lluvia, de Namjoon — le hacían salivar, ahogarse. "Uh- me bañé."

Ow.

Los alfas se ríen.

"No es eso, omega" dice Namjoon, por lo que el omega le observa, curioso. "Uh, tu aroma- tu aroma es... bonito" le explica, sacando fuerzas de donde no tiene para controlar a su lobo.

Oh.

¿Un aroma? ¿Él?

"Yo no-" Jungkook frunce las cejas ante su inestable voz, alejándose un poco de los alfas, notando que las feromonas y los fuertes aromas de los tres le ahogan; no le dejan pensar con claridad.

Y es que Jungkook teme estar haciendo algo malo al sentir que los aromas de los alfas provocan en él la necesidad de- de enseñarles su cuello, de permitir que le olfateen y le besen en lugares en los que él jamás pensó que desearía ser besado.

Oh, Luna.

Algo no está bien en él.

"Yo no huelo a nada" les informa luego de unos minutos, recordando que jamás tuvo un aroma, siquiera cuando su lobo se presentó como omega.

"¿No?" Taehyung le desafía, tragando el gruñido que su lobo quiere soltar.

"No" Jungkook afirma, frunciendo las cejas, con el cabello cubriéndole parte de los ojitos.

Y Taehyung desea tanto tomarlo por las mejillas para-

"Entonces ¿por qué tu fuente de aroma desprende olor a gardenias?" inquiere.

¿Qué?

Jungkook se hace para atrás, cruzándose de brazos, confundido, y mira a Jimin en busca de respuestas, mas éste asiente a las palabras de Taehyung y, por favor, el omega en serio no entiende nada de lo que sucede.

¿Por qué insisten tanto con eso?

"E-Ese aroma n-no es mío" sentencia, con la voz temblándole, y no sabe si es por impotencia, por enojo ante la gran insistencia o por nervios ante lo altos e imponentes (hermosos) que se ven estos tres alfas frente a él.

"¿No? ¿Estás seguro de eso, Kook-ah?" Jimin le pregunta, elevando una ceja, y el omeguita mentiría si dijese que las piernas no le tiemblan o que su lobito no se altera en demasía cada que uno de los alfas le habla con voz ronca.

"Seguro, al-alfas" murmura. "Las fallas n-no tenemos aroma" dice, haciendo a un lado la petición de Jimin por nunca más dirigirse a sí mismo como «falla».

Jimin frunce las cejas.

"Omega-"

Pero Jungkook no quiere oír más ante su supuesto aroma, pues sabe que no son más que mentiras.

"Ya" dice, cortando el tema, mientras se encamina hacia donde las liebres están ya cocinadas. "¿Po-Podemos comer?"

Namjoon suspira, cediendo.

"Sí, omega. Podemos" concede, mirando a sus hermanos para que dejen el tema a un lado.

"Yo como con Jungkook" dice Taehyung, apurándose para sentarse con el omega, mas éste no le deja acercarse mucho, no como antes.

Y es que Jungkook aún le está dando vueltas al tema del supuesto aroma, a la forma en que los alfas afirmaban que su fuente de aroma huele a gardenias.

¿Cómo es que se atrevieron a intentar engañarlo así, si él, mejor que nadie en el mundo, conoce su casta y sabe que las fallas no poseen un aroma?

'¡Qué alfas más mentirosos!', piensa.