Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 20: la verdad (y confrontación).

— Lou, ¿de qué está hablando? —Liam pregunta lentamente.

Los ojos de Zayn están expectantes en Harry, pero este sólo puede mirar a Louis. Louis no cumplirá con la mirada de ninguno de ellos mientras se desenreda lentamente de los brazos de Zayn. Liam se adelanta y se dirige hacia él, pero Louis se inmuta apartándose. Liam siente como si hubiese sido golpeado. Louis se aleja, y Liam y Zayn se congelan con la confusión en sus rostros. Harry quiere decirles que no lo acorralen, pero ellos han conocido más tiempo a Louis así que no tiene lugar a hacerlo. Harry se asoma por la puerta, incapaz de apartar los ojos del rostro de Louis mientras este lucha contra las lágrimas en sus ojos azules.

— Lou... — Zayn inicia, y su voz suena temblorosa— ¿Harry?

Los orbes de Louis parpadean hacia los de Harry y este siente los ojos de Liam y Zayn en él también.

— Necesito a los tres fuera. Ahora —Louis dice, su voz pequeña y dolorosa—. Por favor, déjenme en paz.

— Bebé... —Harry ahoga.

— ¡Sal! —Louis llora, y esta vez no está enojado, sólo roto y ha entrado en pánico. Harry piensa que eso duele aún más.

— Louis, ¿de qué está hablando Harry? —Liam le pregunta, procurando hablar calmado, sólo para que no se aleje más.

— Por favor, ¡déjalo! —Louis solloza, sus brazos envueltos apretadamente alrededor de sí mismo—. Todos ustedes, ¡por favor!"

Harry no cree que pueda manejar esto. Ha visto a Louis llorar un par de veces en las películas, o una vez cuando un comercial muy triste sobre niños enfermos salió en la tele. Fue un par de lágrimas que bajaban por sus mejillas tan sólo por un momento, antes de que Harry era capaz de darle un beso. Incluso eso literal mató a Harry, ver esos ojos magníficos húmedos y tristes. Nunca en su vida querría ver a Louis llorar porque estaba herido o molesto. Ahora, Louis está llorando a causa de Harry, y este se odia por ello.

— Lou... —Zayn trata.

— ¡Váyanse! —Louis le grita— ¡Fuera! ¡Fuera! ¡Fuera!

— ¡No nos iremos hasta que sepamos qué diablos está pasando, Louis! —Liam grita, gesticulando furiosamente entre Harry y la forma acobardada de Louis.

— Para —Zayn dice rápidamente, mientras la boca de Harry se abre para decir lo mismo—. No va a ayudar, Liam.

Liam baja al instante la cabeza.

— Lo sé. Lou, lo siento, por favor sólo..., por favor, sólo dinos lo que está pasando.

Louis finalmente levanta la vista del suelo y sus ojos están húmedos y suplicando.

— Por favor —dice, casi en un susurro—. Por favor, sólo salgan de mi habitación, lo siento.

El silencio es tangible cuando Louis deja escapar un suspiro tembloroso y se dirige hacia un rincón de la habitación. El pecho de Harry duele, porque todo lo que quiere hacer es correr hacia a Louis, pero sabe que no puede. Él ve a Zayn extendiendo la mano y presionándola suavemente sobre el brazo de Liam. Liam vacila por un momento antes de que deje escapar un suspiro. Ellos se alejan de Louis, mirando al igual que Harry, sintiéndose oprimidos. Zayn extiende su mano hacia Harry; pidiéndole, su mano en el brazo de este mucho más suave que en Liam, pero el mensaje es el mismo.

Pasan en fila lentamente fuera de la habitación y Harry da una mirada hacia atrás, antes de que Louis se apresure hacia adelante desde su rincón, y cierre la puerta en su rostro. Harry deja escapar un suspiro tembloroso cuando Zayn lo guía suavemente hacia la sala de estar. Al instante se vuelven hacia él, de pie a su lado con un millón de preguntas en sus ojos; un frente unido, como siempre.

— Explícame —Liam dice más o menos, la mano de Zayn sube al hombro de este, una presión suave que le dice que se calme.

— Louis... —Harry tiene que parar y borrar las lágrimas no derramadas de su garganta—. Vi a Louis desnudo anoche, y sabía que algo andaba mal. Él no tiene un gramo de grasa en su cuerpo, se puede ver todos los huesos. Le oí vomitar el desayuno que le hice, y pensé que tal vez era bulímico, pero hablé con mi hermana e investigué y él... es anoréxico.

Liam está sacudiendo la cabeza antes de que Harry aún termine de hablar.

— No —dice—. No, él come la cena casi todas las noches antes de que volvamos a casa.

Harry deja escapar un sollozo ahogado, porque lo sabía, sabía que debió haber sido la forma en la que Louis estaba evitando comer.

— Liam, él me dice que tiene que estar en casa para cenar con ustedes todas las noches. La única vez que ceno con él es cuando todos tenemos una comida juntos.

— No entiendo —Zayn dice—. Si no está comiendo y está vomitando todo...

— Come un poco. Pequeñas porciones para mantenerse en pie a través del día. Pero no es suficiente, está literalmente consumiéndose —murmura Harry, tratando de contener las lágrimas.

— No —Liam dice otra vez—. No hay manera en el infierno que no me haya dado cuenta.

— Li, se esconde tan bien —Harry suspira—. Él tiene todos estos trucos para esconder su comida que nunca antes me di cuenta, pero he visto lo que hace cuando lo vi comer esta mañana. Él se esconde bajo capas de ropa y suéteres holgados, ya que piensa que está gordo, pero es tan jodidamente delgado. ¿Por qué crees que está mareado todo el tiempo? ¿Por qué crees que está tan frío?

Harry siente como si va a gritar. Liam parece que ha sido golpeado por un tren de carga. Zayn parece que va a llorar. Liam se pasea con las manos en puños en su cabello y Harry sabe que todavía está tratando de juntar las piezas. Harry no se sorprende cuando Zayn lo descubre, pero odia la manera en que este se hunde en el sofá y oculta su rostro entre sus manos.

— ¿Qué vamos a hacer? —Zayn pregunta, la voz amortiguada contra sus palmas.

— Gemma sabe mucho de estas cosas, y ella ayudó, pero yo también... he estado tomando notas de Internet —Harry hurga en su bolsillo y saca las cuatro páginas de notas, escritas desordenadamente a mano por el pánico—. Sobre cómo hacer que vuelva a un peso saludable, si se niega a ir al centro de rehabilitación que encontré. Acabo de escribir todo lo que pude sobre la anorexia en general... no lo sé.

Zayn mira hacia el papel del rizado y llega a tomar las notas de las manos de este. Sus ojos marrones están húmedos y se limpia con la parte trasera de su mano, debajo de su nariz. Sus cejas se anudan cuando empieza a leer. Harry observa mientras Zayn se levanta del sofá y se va por el pasillo. Este se inclina contra la pared junto a la puerta del dormitorio de Louis y se hunde hasta el suelo, alisando el papel lleno de notas para leerlo.

Liam se vuelve hacia Harry y sus ojos están húmedos, pero se ve enojado.

— ¿Cuánto tiempo ha estado sucediendo esto? —pregunta más o menos.

— Desde antes de conocerlo —Harry dice en voz baja.

— No —Liam contradice—. No hay manera, mierda. Lo hubiera sabido.

— El primer día que fui a verlo en el estudio no comió un bocado del bollo que le traje, y ni siquiera tomó un sorbo de café, porque era demasiado azucarado. Así que dime cuando empezó—Harry dice con voz temblorosa—. Recuerdas el tiempo en el que casi tuvo un ataque de ansiedad en el restaurante de Jamaica, y volvimos aquí y, ¿tomó una ducha? Purgó, Liam. Estaba entrando en pánico porque necesitaba vomitar toda la comida que comía, y estábamos tomando demasiado tiempo para abandonar el restaurante.

— No —Liam respira—. Él siempre, por el amor de... mierda, él siempre se ducha después de comer.

— Lo sé. Se duchó después de que le hice el desayuno esta mañana y le oí vomitar —Harry gime, frotándose los ojos.

— Sea cual sea.., ¿qué aspecto tiene, Harry? —La voz de Liam es áspera, baja, y asustada.

Harry se basa en un suspiro tembloroso, y ni siquiera puede mirar a los ojos de Liam.

— Como un maldito esqueleto.

Harry se estremece cuando hay un gran golpe, sus ojos van volando hacia el televisor. Está sobre el piso destrozado en múltiples piezas, debajo de la pared que Liam golpeó. Él suelta una maldición y Harry se estremece. Liam empieza a dar vueltas nuevamente, con las manos arrastrándose por su cabello y los hombros encorvados.

— ¿Cómo diablos iba..? ¡No sabía! —grita casi al tope en el que le permite sus pulmones—. No hay manera, ¡mierda!

Las lágrimas se escapan de los párpados de Harry y envuelve sus brazos alrededor de sí mismo, pensando en la presencia de Louis en su dormitorio. Ve a Zayn, las hojas con las notas se encuentran dispersas a su alrededor donde los tiró. Sus hombros se sacuden cuando inclina su cabeza hacia atrás y mira hacia el techo, las lágrimas deslizándose en su rostro.

Harry se sienta en la esquina del sofá, lejos de Liam, y lejos de Zayn que está llorando. No puede soportar que Louis esté escondido en su habitación, probablemente odiándolo, y no hay nada que pueda hacer al respecto. Liam se deja hundir en el suelo contra la pared en la sala de estar, y golpea la cabeza contra la pared varias veces. No lo suficiente para lastimarse, pero con tanta fuerza para que el sonido abarque completamente el departamento.

— Louis, vamos a conseguirte ayuda, amor. Vamos a llevarte a rehabilitación, y todo va a estar bien —Zayn dice en voz baja, pero lo suficientemente alto para que Louis escuche.

— ¡Yo no tengo que ir a rehabilitación! —Louis llora desde el interior de la habitación— ¡Nada está jodidamente mal!

— ¿Cómo puedes decir eso, Lou? Nos dijiste que estabas cenando con Harry cada noche, y él dijo que estabas comiendo con nosotros. ¿Desde cuándo nos mientes? ¿Cuántas veces te he dicho lo mucho que me preocupa cuán inestable estás sobre tus pies? Y me dijiste que fuiste al médico, y que él dijo que era sólo una cuestión de equilibrio y nada de qué preocuparse. Ni siquiera fuiste al médico, ¿verdad? Es porque te estás muriendo de hambre —la voz de Zayn es suave, pero Harry siente cada onza de dolor en ella—. ¿Por qué te haces esto, Louis? ¿Por qué dejaste de comer?

— Yo como Zayn. Joder, yo como. Sólo... sólo tengo que perder un poco de peso —viene la respuesta suave de Louis a través de la puerta.

Zayn deja escapar un aliento estremecedor.

— Louis, no, no lo hagas. Nunca has necesitado bajar de peso. La última vez que te vi desnudo fue justo antes de que terminaste con Mitchell, ¿recuerdas que, Li, y yo fuimos a darnos un chapuzón? —la voz de Zayn es baja y melancólica cuando pasa las manos por su cabello—.  Estabas sano, Louis. Siempre has tenido un cuerpo perfecto.

— Vete a la mierda Zayn, sabes que no es cierto. Siempre he tenido esta maldita barriga no importa lo que haga y estos muslos gruesos repugnantes —Louis responde, y Harry siente su corazón adolorido.

Liam se levanta del suelo y se dirige por el pasillo hasta la puerta.

— No digas esa mierda, ¡Louis! Nunca has tenido una barriga o muslos gruesos, ¡eras perfecto! Y estoy seguro que no tienes ninguna de esas cosas ahora, porque has estado muriendo de hambre y no eres más que piel y huesos —le grita, con la frente apoyada en la puerta—. ¡Dime por qué estás haciéndote esto, Louis! 

Hay silencio durante mucho tiempo, antes de que Harry oye un sollozo ahogado.

— ¡Porque yo estoy jodido! ¡Porque soy tan jodidamente un asco, patético, repugnante, y todo el mundo se va, y me odio como la mierda! ¿Es eso lo que mierda quieres escuchar, Liam? ¿Es eso lo que quieres oír, Zayn? ¡Por el amor de mierda! —su voz es aguda, temblorosa y dolida, pero enojada.

Zayn y Liam están aturdidos en silencio y Harry cepilla sus rizos con sus manos, tratando de no sollozar. Liam deja escapar algo parecido a un gruñido y Zayn libera un sollozo tembloroso. Harry tira de sus rodillas hacia su pecho y lucha contra las lágrimas que queman en el dorso de sus ojos. Él tiene que decirle a Louis lo mucho que lo siente, que no quería que todo fuese así. Harry debió haberlo esperado en su camioneta.

— ¡No estás jodido, o patético, o repugnante Louis! ¡Y nos importa un carajo! —Liam le grita, su voz de alguna manera suave a pesar del volumen.

— Louis —Zayn dice en voz baja—. ¿Estás haciendo esto a causa de ellos? ¿por ella?

Las cejas de Harry se surcan porque no tiene idea de lo que están hablando. Sin embargo la ingesta aguda de aliento de Liam indica que es algo importante. Están completamente en silencio por un momento, esperando con ansiedad una respuesta. Todo lo que Harry puede oír es el suave llanto de Louis, amortiguado por las paredes. La piel de Harry pica, ansioso por saber lo que significa.

— Joder Louis, no puedes estar torturándote de esta manera. Pensé que habíamos terminado con esto después de la fiesta, ¡y después de que los chicos te trataran como una mierda! ¿No te has lastimado lo suficiente por algo que no puedes controlar? —Liam llora—. Ella es la mayor escoria de la maldita tierra Louis, ¡ella no tiene el derecho de hacer que te sientas así! Tú eres mucho mejor que eso —Liam comienza a llorar por primera vez después de eso, y Harry está completamente perdido.

— Lou, por favor —Zayn gime, su voz llena de lágrimas—. Tienes que dejar de castigarte. Vamos a conseguirte ayuda. Por favor, sólo tienes que abrir la puerta.

Harry aguanta la respiración porque los sollozos se han detenido desde el interior de la habitación de Louis. Liam y Zayn están completamente en silencio también, excepto por la esnifada ocasional. Harry oye el click de la abertura de la puerta y su corazón salta en su garganta, porque piensa que tal vez Louis los está dejando. Sin embargo, antes de que pueda ponerse de pie desde el sofá, Louis avanza débilmente pasando por Liam y Zayn hacia la entrada a través de la cocina.

Harry no puede ver a Louis desde su lugar en el sofá hasta que llega a la puerta principal, y se da cuenta de que tiene una bolsa de lona al hombro, y la chaqueta y los zapatos. Está fuera de la puerta antes de que Harry pueda incluso llamar su nombre. Harry salta, mientras Liam y Zayn vienen corriendo por el pasillo. Liam se lanza hacia la puerta, pero Zayn lo detiene.

— Li, estás demasiado alterado para ir tras él. Harry, por favor, ¿puedes ir a buscarlo? —Zayn dice frenéticamente.

— Él está furioso por mi culpa —dice Harry, pero ya está en la puerta calzando en sus zapatos.

— No deberíamos haber preguntado por ellos, él no va a querer hablar con nosotros ahora, por favor, sólo tienes que ir —dice Zayn.

— Por favor, Harry —Liam asiente—. Mierda. Él se fue porque lo confrontamos, ¡tienes que ir a buscarlo!

Harry no tiene idea de quiénes son o quién es, pero asiente con la cabeza rápidamente y tira de la puerta abierta. Se dirige por el pasillo hasta la escalera y va corriendo a través de estas. Entra en pánico brevemente, pensando en Louis cayendo por las escaleras porque está tratando de huir. Mientras dobla en el primer tramo de escaleras alcanza ver el talón de Louis, justo cuando está volteando la esquina al segundo tramo.

— Louis —Harry llama, su voz llena de desesperación— Louis, por favor, ¡espera!

Él tiene que detenerse en sus talones y agarrar la barandilla para contenerse de no golpear directamente a Louis, donde está congelado en el segundo tramo. Harry da gracias a cada estrella que el ojiazul no corrió, porque lo único que puede pensar es en un diminuto Louis cayendo por las escaleras y rompiéndose cada uno de sus huesos de pájaro. Louis está mirando hacia Harry con sus ojos completamente húmedos, y sus cejas anudada juntas.

— ¿Harry? —pregunta, a través de sus lágrimas—. Yo, yo pensaba que me dejarías.

— Yo no voy a ninguna parte, Lou, ¿cuándo vas a meterte eso en la cabeza? —Harry dice en voz baja, su voz pidiéndole a Louis que le crea.

Louis deja escapar un pequeño sollozo ahogado.

— Estoy tan enojado contigo —dice, pero sale más como un gemido.

Harry lucha contra las lágrimas y asiente con la cabeza.

— Está bien. Puedes estar enojado, puedo manejar eso. Estoy tan apesadumbrado de que esto fuese así.

— Has completamente sobre-reaccionado, Harry —Louis suspira, frotando sus manos por su rostro—. No voy a morir de hambre.

— Louis —Harry suplica—. Tienes que saber que lo que estás comiendo no es suficiente, tu cuerpo se va desgastando. Incluso si no puedes ver lo delgado que estás, tienes que sentir los dolores debido al hambre, tienes que saber el por qué estás tan frío y tan adolorido, y cuán inestable eres sobre tus pies.

— Ellos me odian ahora —Louis dice con voz temblorosa, señalando las escaleras e ignorando por completo la declaración de Harry.

— Nunca te odiarán Louis, ellos te aman. Yo te amo —Harry dice con seriedad—. Sólo estamos furiosos con nosotros mismos por no darnos cuenta antes.

— ¿Sin darse cuenta de lo jodido que estoy? —Louis responde.

— No estás jodido bebé, estás sólo... simplemente no estás bien. Queremos ayudarte a sentirte mejor. Queremos ayudarte a que dejes de hacerte esto. Porque te amamos tanto. Te amo, y te necesito, y necesito que estés sano —Harry dice en voz baja.

Louis deja escapar un gemido y baja la cabeza. Harry no puede contenerse por más tiempo. Él cierra la distancia entre ellos y envuelve sus brazos alrededor de los hombros de Louis, acercándolo. Louis se congela en los brazos de Harry y no abraza la espalda de este a cambio, pero aún así, entierra su rostro en el pecho del rizado. Le rompe el corazón a Harry cuando Louis se deja llorar; sollozos completos que sacuden sus hombros y se orillan en la parte delantera de su sudadera. Sólo lo sostiene más cerca y pasa la mano por el cabello del ojiazul, tratando desesperadamente de no empezar a llorar.

— No debiste haberles dicho —Louis llora, sus palabras amortiguadas contra el pecho de Harry.

— Lo siento Louis, no quería decirles de esa manera, pero tenía que hacerlo —Harry suspira—. Tenemos que conseguir que te mejores, no puedo sólo hacerlo por mi cuenta.

— Harry, van a querer que me vaya, ahora que saben cuán jodido estoy —Louis solloza.

— Oh mi dios Louis, no. Ellos te aman y quieren ayudarte. Nunca querrían que te vayas —Harry dice con firmeza.

— ¿Por qué demonios sigues aquí? ¿Por qué no te has ido corriendo y borrado mi número de tu teléfono? —Louis le pregunta, su voz adolorida y húmeda contra la camiseta de Harry.

— Por el amor de Dios Louis, porque te amo. Te amo con todo mi corazón. ¡Eso no va a cambiar porque estés enfermo! —Harry dice.

Louis se burla de repente, tratando de salir de los brazos de Harry.

— Deja de decir eso, ¡lo haces sonar como si estuviera muriendo o algo! Estoy en una dieta de mierda.

Harry sólo lo sostiene más cerca y niega con la cabeza. 

— La gente no vomita en las dietas, las personas no sienten la necesidad de mentir acerca de comer en las dietas. Anorexia no es una dieta Louis; es un trastorno alimenticio.

— Por favor, para —Louis se queja en voz baja contra el pecho de Harry.

— Tienes que dejar que te ayudemos.

— Yo no necesito ayuda.

— Yo no estoy preguntando si necesitas ayuda, Lou, te estoy diciendo que la vas a conseguir. Puedes odiarme, pero no voy a ninguna parte y no estarás más en esa dieta —Harry dice con firmeza, el sarcasmo en la última palabra.

Louis está en silencio por un largo tiempo antes de hablar.

— Nunca podría odiarte —murmura—. Pero esto es una mierda.

Harry suspira.

— Mierda o no, lograremos a que vuelvas a estar saludable —dice—. ¿Podemos ir al departamento?

Louis niega con la cabeza rápidamente.

— No, yo no puedo... necesito mantenerme alejado por esta noche, al menos... yo les he decepcionado —tartamudea, las lágrimas obstruyendo su voz nuevamente.

— ¿A dónde pensabas ir? —Harry le pregunta en voz baja.

— Motel —Louis se encoge de hombros.

— Te vienes conmigo.

— Sigo enojado contigo.

— Eso está bien. Todavía te amo —Harry responde.

Deja a Louis liberarse del abrazo, y este mira hacia abajo en el suelo y se muerde el labio. Harry toma suavemente la bolsa de lona del hombro de Louis y lo cuelga en la suya. Se agacha y toma la mano del ojiazul y da un silencioso agradecimiento cuando este no se aleja. Lo lleva con cuidado por las escaleras, consciente del caminar de Louis agarrándose de la barandilla de apoyo y moviéndose lentamente. Cuando llegan a la playa de estacionamiento Harry mantiene abierta la puerta de su camioneta, y Louis sube en sin protestar.

— Tengo que llamar a Liam y Zayn, están muy preocupado por ti —dice Harry.

— Diles que los amo y que lo siento.

— ¿Por qué no hablas con ellos, amor?

— No puedo, me confrontaron. Simplemente no puedo en este momento —Louis murmura bajando la cabeza.

Harry quiere tan desesperadamente preguntar lo que es este horrible tema de 'ellos' y 'ella', pero no lo hace, porque sabe que la única razón por la que tiene a Louis en su camioneta es porque él no va a tocar el tema. En su lugar, extiende la mano hacia la barbilla de Louis, acariciándola logrando que este lo mire a los ojos. Le da a Louis montón de tiempo para alejarse, pero no lo hace, y besa sus labios suavemente. Louis no besa mucho a cambio, sus ojos aletean cerrados y deja que Harry le de un suave beso. Louis mantiene sus ojos cerrados y descansa su cabeza contra el asiento cuando Harry se aleja y cierra la puerta.

Harry le marca a Zayn mientras todavía está fuera de la camioneta y se apoya en el parachoques delantero.

— ¿Él está bien? —Zayn pregunta frenéticamente cuando responde.

— Temblando y enojado conmigo. Aún no admite que tiene un problema. Él no va a volver al departamento, así que voy a llevarlo a mi dormitorio —dice Harry.

— En este momento está probablemente más enojado con nosotros de lo que está contigo, para ser honesto, pero no me importa, tan solo trata de cuidar de él —dice con tristeza Zayn.

— ¿Por qué está tan enojado? ¿por qué enloqueció cuando le preguntaste acerca de ella? ¿Quién es ella? —Harry le pregunta vacilante, sintiéndose inmensamente culpable por inmiscuirse.

Zayn da una respiración fuerte.

— ¿Él no te ha dicho nada acerca de eso?

El alma de Harry cae.

— No lo creo —dice con voz temblorosa.

Zayn suspira.

— Hombre, lo siento, es sólo... no tengo lugar a decírtelo. Sólo... he leído en las notas que esto no es realmente acerca de su peso, que está superándose por algo o que está tratando de auto-controlarse mediante el control hacia su comida y sólo... tienes razón, Harry. Y lo siento mucho, no puedo decírtelo pero sólo... es porque hizo nada más que estar de fiesta todo su primer año y por qué dejó que los chicos lo trataran como una mierda todo el segundo año. Es por eso que se puso inestable y solitario este año, pero Liam y yo pensamos que tal vez se había detenido cuando ustedes empezaron a estar juntos. Nosotros pensábamos que lo estaba haciendo tan bien debido a ti —Zayn toma una respiración temblorosa—. Lo siento, no te puedo decir Harry, pero estamos muy agradecidos de que Louis te tenga. Sólo, por favor, cuida de él.

— Lo haré —dice Harry, aturdido por las palabras de Zayn—. Por supuesto que lo haré. Creo que mañana nos quedaremos en casa después de clases. Voy a tratar de conseguir que coma algo y hablar con él, pero los mantendré informados chicos, ¿de acuerdo? 

— Gracias Harry, y gracias por decirnos —Zayn se detiene—. Y por darte cuenta de que algo andaba mal cuando Li y yo no pudimos —dice en voz baja.

— No tienes que agradecerme nada, lo amo demasiado —dice Harry en voz baja.

— Lo sé. Sabemos que lo haces. Y estamos muy agradecidos por eso —Zayn suspira—. Aquí compañero, Liam quiere hablar contigo.

— Hey, hombre —dice Liam, antes de que Harry tenga la oportunidad de responderle a Zayn.

— Hola —dice Harry, todavía un poco sacudido por la ira de Liam dirigida hacia él.

— Lo siento mucho. No debería haberte estrellado contra la pared de esa manera. Lo siento, fui tan rápido en asumir que algo estaba mal cuando los escuché discutiendo. Lo siento por perder los estribos. Lo siento por ser un gilipollas en general. Es sólo... sólo... se supone que debía ser yo el que cuidara de él. Yo tenía que cuidar de él y fallé y-y lo siento, no te mereces eso, Harry. Tú eres lo mejor que nos ha pasado a los tres de nosotros, porque eres lo mejor que le ha sucedido a Louis. Zayn y yo te queremos hombre, realmente lo hacemos, y sólo, sólo tratamos de proteger a Louis, pero me equivoqué y lo siento mucho. Estoy muy contento de que él te tenga. Muy contento —dice Liam, la voz ahogada por la emoción y las lágrimas.

Harry traga el nudo en la garganta y asiente con la cabeza, aunque Liam no le pueda ver.

— No, yo entiendo completamente Li, pero gracias. Te quiero también, y amo a Louis con todo lo que tengo, y vamos a ayudarle a que mejore, ¿de acuerdo? 

— Está bien —dice Liam con voz temblorosa—. Por favor, haznos saber lo que está pasando.

— Por supuesto compañero, por supuesto. Voy a traerlo a casa tan pronto como me sea posible.

— Dile cuánto lo amamos. Por favor.

— Lo haré, y él me pidió que les dijera que los ama tanto y que lo siente —Harry frunce el ceño.

— Él no tiene nada que lamentar —Liam protesta.

— Lo sé —Harry suspira—. Voy a hablar con ustedes más tarde.

— Está bien —dice Liam antes de colgar.

Harry guarda su teléfono y abre la puerta de su camioneta para subir.

— ¿Ellos me odian? —Louis le pregunta en tono aterrorizado.

— Ellos te aman y dicen que no tienes nada que lamentar, y quieren que vuelvas a casa —Harry responde.

— Es sólo una dieta —Louis murmura, más para sí mismo que para Harry.

— No lo es —dice Harry.

— Cállate —Louis protesta.

— Está bien —Harry suspira, prendiendo la camioneta y saliendo del puesto de estacionamiento.

— Lo siento —Louis susurra, y cuando Harry lo mira sus ojos están húmedos y relucientes.

El corazón de Harry se estruja.

— Yo no voy a dejarte ir —dice, extendiendo la mano con la esperanza de que Louis la reciba.

Louis mira su mano vacilante, pero la desliza entre los dedos de Harry.

— Sí lo harás, eventualmente —dice en voz baja, mientras la mano de Harry envuelve la suya.

— Nunca —Harry dice simplemente.

El resto del viaje es en silencio, hasta que Harry se detiene frente a un Starbucks. Louis mira por la ventana con cautela, cuando Harry estaciona la camioneta. Louis recoge nerviosamente un hilo suelto de su jumper, mientras Harry toma su billetera del portavasos entre ellos.

— Vamos, bebé —dice Harry.

— ¿Qué estamos haciendo aquí? —Louis frunce el ceño.

— Estamos viniendo por algo de comer —Harry responde cuidadosamente.

— Ya comí hoy —Louis protesta.

— Espero sinceramente que no estés contando los panqueques que hice y vomitaste —Harry dice lentamente.

Las mejillas de Louis se tornan de color pero niega con la cabeza.

— No, yo comí después de que te fuiste; antes que Liam y Zayn llegaran a casa. Yo como, Harry —murmura Louis—. Yo no puedo comer tres mil calorías por valor en panqueques y todavía parecer perfecto, no se puede.

— Louis, eres ya perfecto para mí, siempre serás perfecto no importa cómo se mire. Sólo necesito que estés sano —Harry dice en voz baja.

Louis evita cuidadosamente su mirada—.

— Yo ya comí hoy —dice nuevamente.

— ¿Qué es lo que comiste bebé? —Harry le pregunta suavemente—. Y por favor, no me mientas.

— ¡No quiero volver a mentirte Harry! ¿Crees que gano mintiendo o algo así? No me gusta mentirte, pero no lo entenderías. No haces ni mierda para entender —Louis suena enojado, pero luego su voz se quiebra—. Lo siento Harry, yo sólo... he sido honesto contigo acerca de todo lo demás. Sólo necesito que sepas eso. Odiaba que tuviera que mentirte acerca de mi dieta, así que estaba siempre siendo honesto contigo acerca de todo lo demás.

Louis está cada vez más molesto. Él tiene su cabeza inclinada mientras se está mordiendo el labio y Harry lo odia. Sale de la camioneta sin decir una palabra, y Louis lloriquea cuando oye la puerta cerrarse. Sin embargo, Harry abre la puerta del pasajero, y Louis mira hacia arriba con los ojos húmedos. Sin decir palabra, Harry envuelve sus brazos alrededor de Louis y lo sostiene cerca, con una mano deslizándose hasta dentro del abrigo de este para frotar suavemente su espalda.

Louis deja escapar un pequeño sollozo y entierra su rostro en el hombro de Harry, a pesar de que no alcanza, lo abraza a cambio. Harry no puede soportar esto. Odia cómo las cosas eran perfectas ayer, antes de darse cuenta. Estaban tan felices, y estaban tan bien juntos, y todo fue increíble. Ahora sólo le queda recoger los pedazos, y todavía no sabe si va a tener que luchar con Louis en cada paso del camino o no.

— Silencio, cariño. Sé que odias mentir, ¿de acuerdo? Y creo que has sido honesto acerca de todo lo demás —Harry le dice la verdad—. Pero de aquí en adelante, honestidad completa, ¿de acuerdo? Incluso si sabes que no es lo que voy a querer escuchar.

— ¡Vas a dejarme cuando escuches la verdad! —Louis solloza en el cuello de Harry.

— Hey —dice Harry, separándose levemente e inclinando la barbilla de Louis hasta que sus ojos se encuentran—.CYo no voy a ninguna parte. Voy a decírtelo un millón de veces al día, si tengo que hacerlo. Te amo y vamos a superar esto; pero la única manera en la que podemos hacerlo es si me prometes que dirás la verdad, incluso si no sea algo bueno, ¿de acuerdo? 

Louis estornuda cuando Harry pasa sus pulgares suavemente limpiando las lágrimas en sus mejillas.

— Haces que suene tan simple —murmura.

Harry niega con la cabeza. 

— Nada de esto va a ser sencillo Louis, pero estoy en esto contigo y lo único que pido es honestidad. ¿Me lo prometes?

Louis se inclina contra la palma de la mano de Harry y cierra los ojos, pero asiente con la cabeza lentamente.

—Lo intentaré.

Harry sabe que tiene que ser lo suficientemente bueno por ahora, por lo que sólo asiente con la cabeza. Acaricia con los pulgares a través de los delgados y suaves labios de Louis y los ojos de este lentamente se abren para conocer los suyos. Una vez más, Harry le da tiempo de apartarse, pero Louis no lo hace. Harry se inclina hacia adelante y le da un beso suave. Louis deja escapar un pequeño suspiro cuando Harry se aleja y descansan sus frentes juntos. La mano de Louis se extiende y la sitúa ligeramente sobre la cadera de Harry. Harry da un pequeño suspiro de alivio porque es la primera vez que Louis le ha tocado voluntariamente desde la pelea.

— Puedes decirme lo que comiste, ¿por favor? —Harry le pide, sin querer moverse y desplazar la mano de Louis.

Louis suspira y asiente en un sufrimiento largo.

— Queso en pan tostado y un puñado de almendras y apio —dice en voz baja.

— El apio tiene más calorías para masticar de lo que contiene —Harry dice lentamente— ¿Cuántas almendras?

— Trece —dice Luis.

— ¿Estabas pensando en comer cualquier otra cosa hoy? ¿Cualquier proteína?—Harry le pregunta.

— Hay una gran cantidad de proteínas en las almendras —dice Louis.

— En comparación con otros frutos secos, Lou. No como un sustituto de tu ingesta diaria de carne —Harry suspira—. ¿Cómo has estado viviendo sin eso? 

— Yo he comido una pequeña porción de carne cuando Li, Zayn yo, cenamos. Yo sólo les dije que había tenido un gran almuerzo, y estaba bien si sólo comía un poco de carne —admite en voz baja.

— Amor, no es suficiente —Harry frunce el ceño.

— Hay días en los que como más —Louis protesta de forma rápida—. La otra noche hice una cena para Zayn y Liam y comí casi la mitad de una pechuga de pollo y espárragos. Y hoy he tenido el queso y pan, que es lácteos y carbohidratos. Qué no debería haber estado comiendo de todos modos, pero pensé que tal vez tendríamos sexo nuevamente esta noche y no quería estar demasiado cansado —murmura lo último con un rubor en sus mejillas—. Claramente soy un idiota porque estás poco atraído sexualmente hacia mi".

Harry deja escapar un ruido ahogado.

— Oh mi dios Louis, ¿cómo puedes decir eso? Por favor, dime que no crees en serio que...

— Bueno, dices que no soy gordo, pero también dices que soy piel y huesos, ¿y desde cuándo es tan atractivo? Está bien Harry, no te culpo por estar disgustado, estoy indignado por mi persona también —dice en voz baja—. Sólo..., mierda. Yo sabía que esto iba a pasar.

Harry tiene un familiar cosquilleo en la parte posterior de sus ojos mientras niega con la cabeza.

— Louis —se queja, alejándose ligeramente, haciendo que este lo mire—. ¡Louis, no estoy poco atraído sexualmente hacia ti! Yo... carajo, hacer el amor contigo fue... Dios fue tan bueno, eras tan bueno, se sentía tan bien. Y tú..., estoy locamente enamorado de ti, y he querido esto durante tanto tiempo, fantaseaba con esto desde la universidad. ¿Nunca pensaste que significas el mundo para mí? ¿O que no eras sorprendente? Y así fue. Eres increíble.

》Yo, literalmente, te encuentro tan hermoso, estoy jodidamente atraído hacia ti. Estás demasiado delgado, pero no me importa porque yo te amo tanto; al igual que si estuvieras gordo importaría poco. Pero independientemente de cuán atraído me siento hacia ti, mi cerebro sabe que cuando puedo contar todas y cada una de las costillas de mi novio, ¡algo está mal! ¿Crees que quiero estar luchando de esto contigo en este momento? ¡No! El novio que amo con todo mi corazón, después de cinco largos meses, ha finalmente confiado en mí lo suficiente como para mostrarme su cuerpo, me ha dejado tocarle. ¿Crees que quiero tener que hablarte acerca de tu transtorno alimenticio? ¿Crees que quiero romper tu confianza de esa manera? ¡No! Así que sí, sería tan fácil para mí ignorar esto y simplemente, te amo como eres, porque lo hago, incondicional e irrevocablemente lo hago, ¡pero no puedo! No puedo porque si sigues muriendo de hambre, ¡no vas a estar para que yo te ame, Louis!

Harry está llorando en el momento en que ha terminado, y mientras las lágrimas se deslizan por su rostro, Louis tiembla. Él mismo se acerca para que su rostro esté enterrado contra el jumper de Louis y este envuelve sus brazos alrededor de sus hombros. Harry puede sentir a Louis llorando, porque su pecho se sacude bajo su mejilla. El pensamiento de Louis no estando cerca ya es demasiado para Harry, mientras su mente parpadea nuevamente en todas las cosas terribles que leyó en Internet, sobre el daño hepático a largo plazo y la disminución de la esperanza de vida.

— Yo no voy a ninguna parte, te lo prometo —Louis espeta—. Lo prometo, estoy bien.

Harry se separa de los brazos de Louis.

— ¡No estás bien, Louis! ¡Eres anoréxico! —exclama, y se pondría de rodillas y le rogaría a Louis entender si eso ayudaría.

— ¿Y tú me vas a dejar si no dejo mi dieta?—Louis pregunta, secándose las lágrimas más o menos fuera de su rostro—. ¿Es eso lo que estás diciendo?

Harry se burla y niega con la cabeza.

—Yo no voy a ninguna parte, pero no detener esta dieta no es ni siquiera una opción. No tiene otra opción más. Liam y Zayn y yo vamos hacer todo lo posible para ayudarte a salir bien de esto. Puedes discutir con nosotros, puedes pelear conmigo en cada paso del camino, pero no nos vamos a dar por vencido y yo no te voy a dejar 

— No sé lo que esperas de mí, Harry —Louis espeta.

Harry suspira y sacude la cabeza, apoyando las manos en la parte superior de los muslos demasiado delgados de Louis.

— Quiero que vengas conmigo a Starbucks y escojas algo de comer. Yo tomaré un sándwich y un café. Por favor, un sándwich o un pastel, o un bagel, o algo así. Incluso no tienes que comer todo. Solo inténtalo.

Louis mira a Harry con los ojos lagañosos, enrojecidos y suspira.

— Yo ni siquiera entiendo por qué mierda estás todavía aquí —susurra, alejándose de Harry.

Harry observa en silencio como Louis baja la visera del auto y trata de arreglarse en el espejo pequeño. Harry sabe que eso significa que entrará a Starbucks y respira un suspiro de alivio. Friega los puños bajo sus ojos para tratar de deshacerse de sus lágrimas. Louis mira hacia Harry y pone los ojos en blanco pero este sabe que sólo está fingiendo. Harry extiende y reorganiza sus rizos cuidadosamente.

— Estoy aquí porque te amo —Harry le dice—. Y yo haría cualquier cosa por ti. Y si eso significa hacer que comas a pesar de que me odies por ello, entonces lo voy a hacer, porque necesito que estés sano.

— Lo que sea, Harry —Louis suspira—. Estoy harto de estar sentado en este estacionamiento llorando como un idiota. ¿Podemos por favor, simplemente acabar con esto?

— Está bien —Harry asiente con la cabeza, ofreciéndole su mano a Louis.

Louis lo toma con el ceño fruncido, y sale de la camioneta. Harry quiere acercar a Louis junto a él, como usualmente lo haría, pero piensa que está teniendo suerte con un correspondimiento de mano en este momento, y no quiere echarlo a perder. Harry sabe que esto no va a ser fácil.

Él nunca había visto este lado enojado de Louis antes. Ha visto su lado tranquilo, tímido y melancólico. Ha visto su lado feliz, risueño y juguetón. Ha visto su lado inteligente, dulce y tierno. Odia verlo molesto, a la defensiva y enojado. Sin embargo, Harry sabe que esto no es la culpa de Louis, él solo está a la defensiva y Harry no lo puede culpar por ello.

Ellos hacen su camino hacia Starbucks y está prácticamente vacío porque es domingo por la noche. Hay dos baristas detrás de la barra y uno de ellos dice hola y pregunta en qué puede ayudarlos. Louis se muestra totalmente reacio y su mano se estrecha alrededor de la de Harry.

— Sólo denos un minuto —dice Harry, con una sonrisa amable.

La chica asiente con la cabeza y se inclina hacia el mostrador. Harry Louis se dirigen hacia el caso de pastelería y se inclinan hacia abajo para seleccionar un sándwich de jamón suizo. Observa como los ojos de Louis revolotean a través de todos los pasteles por un breve segundo, antes de que deje caer su mirada en la sección más fría del bistro debajo, donde todos los sándwiches y bocadillos son cajas. Hay unos cuantos plátanos que están sobre una bandeja y Louis alcanza a sacar uno.

— No es suficiente, amor —Harry dice en voz baja, por lo que sólo puede escucharle el ojiazul.

Louis mira a Harry suplicante y este quiere sólo decirle que sí, porque no puede decir que no a esos ojos azules, pero tiene que. Da un pequeño movimiento de cabeza y mira a Louis frunciendo levemente sus cejas cuando se da la vuelta hacia la comida. Él se agacha por uno de los cuadros de bistro que tiene trozos de manzana, queso y galletas, almendras y arándanos. Voltea la caja y mira fijamente la información nutricional durante mucho tiempo, mientras hace los cálculos en su cabeza.

Harry se da cuenta de que no va a conseguir que Louis coma un sándwich esta noche, pero también sabe que queso y galletas no es suficiente. Se inclina hacia abajo y selecciona un cuadro de bistro diferente con un huevo duro, un mini pita, un par de triángulos de queso y un poco de mantequilla de maní, junto con las uvas y las manzanas. Harry retira suavemente la primera caja de las manos de Louis, y le da la segunda caja en su lugar.

— Se necesita un poco de proteína, por favor, amor—dice suavemente, manteniendo su voz tranquila, aunque puede sentir a las chicas detrás del mostrador observándolos.

Louis gira la caja a la información nutricional y suspira. Sin embargo, sólo se encoge de hombros y le permite a Harry llevarlo de vuelta al mostrador. Harry ordena su café y Louis ordena su té. Louis no suelta la mano de Harry mientras esperan por el sándwich calentar y el café. El viaje de vuelta al dormitorio es completamente silencioso, y Harry está agradecido de que Niall no esté allí cuando entran.

Louis saca sus zapatos y se sienta en la cama de Harry con su espalda contra la pared, metiendo sus piernas debajo de las mantas. Harry deja la bolsa de lona de Louis al lado de la cama, al igual que la bandeja con sus bebidas, y la bolsa con su comida. Le entrega a Louis el té y la caja de bistro, y luego se sienta en la cama frente a él con su bocadillo.

— ¿Así que esto es entonces? ¿Eres tú tratando de arreglarme? Me dices qué comer, ¿asegurándote de que lo hago? —Louis le pregunta en voz baja, mirando a Harry sobre la tapa de su té.

— Si eso es lo que tengo que hacer, lo haré, bebé —Harry dice en voz baja, asomándose y abriendo la caja bistro para Louis—. Ninguno de nosotros va a pedir que comas una hamburguesa y patatas fritas. Yo no pido que comas un sándwich o un brownie. Escogiste una caja y lo único que pedía era que tenga más proteínas.

— El hecho de que no me obligaste a comer una hamburguesa esta noche no significa que no tratarás de hacerlo mañana, o al día siguiente —dice Louis fríamente, mientras se agacha y coge una uva.

Harry lo mira rodar entre sus dedos un par de veces la fruta antes de que finalmente lo pone en su boca.

— No, yo no soy así Louis. Puedes comer cosas sanas si quieres, eso está bien, sólo necesito que comas más para que te mantengas.

Louis ve los ojos de Harry por un breve segundo antes de mirar hacia abajo en su comida. Harry se obliga a tomar su bocadillo fuera de la bolsa y empieza a comer. Él mira mientras Louis come, laboriosamente y lentamente. Harry ha terminado su sándwich por el tiempo en que Louis lo hace con sus uvas. Harry no comenta, sólo pone de pie y prende el televisor para dar un poco de ruido al ambiente.

— Amor... —le pide suavemente, cuando se da cuenta de que Louis ha cogido el mini pita y ningún pedazo ha llegado a su boca.

— Estoy comiendo, deja de mirarme —Louis protesta, bajando la cabeza con el color teñido en sus mejillas.

Harry suspira y asiente con la cabeza, pero se extiende y pela la parte de arriba de la mantequilla de maní, con la esperanza de que Louis sumerja la pita en ella. Él no lo hace; la pita yace destrozada dentro de la caja. Louis toma las rebanadas de manzana y las sumerge en la mantequilla de maní en su lugar. Es apenas una gota, pero Harry simplemente lo toma como mejor que nada.

— ¿Puedes dejar de mirarme? Por favor, Harry —Louis gime—. Yo realmente odio cuando me miras comer.

— Está bien, lo siento —Harry murmura en voz baja, tratando de concentrarse en el televisor.

Trata de ser más discreto después de eso, pero mira Louis dar una pequeña mordida a una de las rebanadas de queso. Louis deja de comer por un tiempo, sólo bebiendo lentamente su té. Sin embargo, Harry no le dirá nada esta vez. Finalmente Louis recoge una de las mitades del huevo duro. Harry observa mientras él pela cuidadosamente la clara de huevo lejos de la yema y lentamente mordisquea la parte blanca. Harry realmente espera que Louis vaya a comer la yema, pero en cambio separa la clara de la otra mitad del huevo, y sólo come eso.

Cuando ha comido la parte blanca deja escapar un suspiro.

— Ya he terminado, Haz —dice en voz baja.

Harry toma una respiración para tranquilizarse y tratar de mantener la calma.

— Lou, todo lo que has comido fue el fruto —dice lentamente—. Eso no es suficiente.

Los ojos de Louis parpadean hasta encontrarse con los del rizado.

— La única razón por la que comí esto era por esos malditos ojos tuyos que me hacen sentir culpable, Harry. No voy a comer más.

— Bebé, no hay ni siquiera cuatrocientas calorías en toda esa caja —Harry protesta.

— ¿Sabes que cuando te conocí había estado comiendo cuatrocientas calorías al día, durante una semana recta? —Louis dice fríamente—. Y entonces sólo entraste en mi vida. Siempre estabas ahí y no podía ir a casa y dormir hasta que los chicos llegaran, porque estaba siempre a tu lado. Tuve que empezar a comer más, e incluso empecé a comer carbohidratos porque necesitaba energía para mantenerme al día de mierda contigo, Harry. Así que realmente no aprecio que hagas parecer que cuatrocientas calorías es simplemente nada, porque sí, para ti no es nada, porque tienes el metabolismo de un caballo de carreras, ¡pero para mí cuatrocientas calorías es la grasa que se va a mostrar en aumento en la balanza más tarde!

Harry está en silencio mientras las palabras de Louis retumban nuevamente su cabeza. No es de extrañar que casi se desmayara de ese día, si él estaba comiendo menos de cuatrocientas calorías. Harry no trata de sentirse herido cuando Louis protesta acerca de aparecer en su vida, pensando que él es una carga que el ojiazul tiene que aguantar. Harry trata de convencerse que Louis sólo está enojado por las calorías. Él trata de no tomar la frialdad en la voz del mayor personalmente. Todavía duele sin embargo.

— ¿Cuándo empezó esto, Louis? —Harry le pregunta con voz temblorosa—. ¿Cuándo empezaste tu dieta?

Quiere preguntar el por qué, pero sabe que no conseguirá una respuesta directa. Louis mira a Harry por un momento antes de bajar la cabeza. Louis tiene un brazo alrededor de su cintura y sus hombros están encorvados, abatido. Él ya ha empezado a aclararse la garganta, y Harry se pregunta si está tratando de despejar las ganas de vomitar. Harry no sabe cómo no se dio cuenta del carraspeo antes.

— Sólo dime qué más tengo que comer, para conseguir que dejes de molestarme —Louis dice en voz baja.

Harry suspira.

— Ya sea la pita con la mantequilla de maní, o la yema del huevo y el queso —dice finalmente.

Cuando Louis se reúne con los ojos de Harry son amplios y suplicantes.

— Harry, ya comí el queso hoy, por favor, ¿puedo comer sólo las yemas?

Louis sólo se ve tan frustrado, cansado, y triste, y Harry odia esto. Odia hacerle esto a Louis, no importa lo bien que sepa que es por el bien de este. Harry sabe que si dice que no va a discutir con Louis de todos modos, pero tampoco no puede forzar su alimentación. La investigación de Harry decían que debía darle opciones. Louis, a pesar de que está diciendo lo mucho que tiene que comer o lo que está comiendo, él todavía se siente en control. Harry sabe que nunca va a llegar a ninguna parte si le dice a Louis que hacer, lo mejor que puedes hacer es pedir y comprometerse. Esta noche es sólo la primera de muchas, así que Harry se dice mentalmente que es mejor que nada.

— Está bien —dice finalmente.

Después de que Louis ha comido las yemas, Harry las tira a la basura. Louis se levanta de la cama y hurga en su bolso hasta que saca una sudadera, perteneciente a Harry, y unos pantalones de pijama. Baja rápidamente de la cama y lejos de Harry, y se pone su pijama. Los ojos de Harry recorren la masa ósea que es Louis mientras se encorva, y trata de alejar la tristeza de su rostro. Louis tira de la sudadera sobre su cabeza y deja sus otras ropas en el suelo.

— Sólo quiero ir a dormir —Louis dice en voz baja.

— Está bien —Harry suspira, aunque son apenas las ocho.

Louis se mete en la cama y se establece sin decir nada más. Se hace una pequeña bolita mirando hacia la pared. Harry apaga el televisor y calza en un par de pantalones de pijama y una camiseta. Normalmente dormiría en sólo bóxers, pero ahora mismo no cree que debería. Harry se desliza en la cama detrás de Louis. No está seguro si se le está permitido, pero se acomoda al costado del mayor de todos modos.

Louis tiene sus brazos sujetos con fuerza alrededor de su estómago y sus rodillas dobladas contra su pecho. Harry sitúa su brazo alrededor de la cintura del ojiazul, por lo que sus rodillas encajan detrás de este. Su otro brazo se desliza debajo de la almohada por debajo de la mejilla de Louis. Louis deja escapar un largo suspiro, pero no se aparta. Harry respira un suspiro de alivio y lo mantiene más cerca, haciendo su mejor esfuerzo par envolverle en sus brazos.

— Vamos a venir aquí a partir de mañana después de clase —Harry dice en voz baja.

— ¡Qué alegría, algo bueno ha salido de esto! —dice Louis sarcásticamente.

— Lou...

— No, Harry. No te molestes —Louis dice—. Y no voy a ir a rehabilitación. 

— Vamos a hablar de esto, mañana —Harry responde.

— No iré —Louis protesta.

Harry no dice nada más, pero las palabras de Louis juegan en su cabeza. Cómo Harry apareció en la vida de Louis. Piensa en cuán resentido debe estar Louis. Finalmente se abrió hacia él y este reaccionó así. Harry sabe que Louis no entiende que esto es por su propio bien. Ahora mismo Louis acaba de sentirse atacado.

— ¿Louis? —Harry le pregunta en voz baja.

— ¿Qué Harry? —Dice Louis, dejando escapar su aliento en una rabieta.

— ¿Deseaste que nunca haya aparecido en tu vida? —murmura.

Louis suspira, y después de un rato entrelaza lentamente sus pequeños dedos entre los de Harry.

— Por supuesto que no, Harry —dice—. Yo realmente deseo que nunca me hayas visto desnudo.

Eso duele, pero Harry entiende.

— Te amo Louis, lo siento mucho —dice en voz baja.

— Sólo deja de tratar de cambiarme —murmura Louis.

— ¡Louis, no quiero cambiarte! —Harry exclama— ¡Yo sólo necesito que estés sano!

— No sabes lo que es mejor para mí.

— ¡Está claro que tú eres el que no sabe lo que es mejor para ti, porque te niegas a reconocer el concepto de consumo de calorías en comparación con la función corporal, Louis!

— Yo no necesito tu condescendencia. Sólo porque estudies una ciencia importante y yo, moda no significa que seas más inteligente que yo —Louis escupe.

Harry suspira.

— Louis no es justo, que estés poniendo la mierda de Hunter en mí. Sabes que yo no creo que sea más inteligente que tú. Mierda. Lo siento, incluso te lo dije, no estaba tratando de ser condescendiente —dice con cuidado—. Yo sólo me niego a ver que te desvaneces. Lou. Tu cuerpo va a renunciar.

— Si no quieres verme así eres libre de irte —Louis dice en voz baja.

— ¿De verdad crees eso, Louis? ¿Que estoy tratando de cambiarte? —la voz de Harry se sacude un poco, mientras su aliento choca con el cabello de Louis.

— Tú no me quieres como soy, dices que estoy demasiado delgado. Entonces voy a estar aún más gordo, y no me vas a querer tampoco. Así que, básicamente, estoy jodido.

Harry se traga el nudo en la garganta y niega con la cabeza.

— Bebé, te amo incondicionalmente, ¿sabes lo que eso significa? No estoy tratando de cambiarte, yo estoy tratando de que te sanes, así no tengo que preocuparme por que mi novio se desmaye o entre en una insuficiencia renal. Yo no me iré.

— Sólo duerme Harry, he tenido suficiente por hoy —Louis dice en voz baja, cerrando efectivamente la conversación.

— Te amo, Lou —dice Harry, pero sale más como un gemido.

— Mhm —es todo lo que Louis responde.                   

Harry tiene que enfocar toda su energía en no llorar. Ha jodido todo. Louis era tan jodidamente cerrado acerca de creer que Harry lo amaba. Estaba tan cerca de decirlo. Ahora están de vuelta en el punto de partida y Louis está seguro de que Harry se irá, dudando de todo lo que este dice. Harry se muerde el interior de su labio hasta que puede probar la sangre, para mantener el sollozo alojado en su garganta. Él tiene que lograr que Louis esté saludable, pero eso significa también que tiene que aceptar que este se vaya a resentir por completo. Eso jodidamente lo mata.

Louis no ha separado sus dedos entrelazados o sacado los brazos de Harry, así que este sólo lo sostiene más cerca y trata de mantener su respiración constante. El dormitorio está en silencio excepto por el claro y suave carraspeo ocasional de la garganta de Louis. Es un sonido pequeño, sólo el pequeño rasguño de las cuerdas vocales del mayor, pero es incesante, como si ni siquiera tuviese el control sobre él. Harry se pregunta cuantas veces Louis ha vomitado y aprieta sus brazos alrededor del mayor un poco más ante el pensamiento.

Ninguno de los dos se quedan dormidos. La mente de Harry va a mil por hora y su pecho está doliendo. La respiración de Louis no ha disminuido, ni ha dejado de aclararse la garganta cada par de minutos. Harry se pregunta si se trata de la comida en su estómago que lo está manteniendo despierto. Tal vez sea su enojo hacia él. Este último sólo hace doler el pecho del ojiverde aún más. La picazón en la parte posterior de los ojos de Harry persiste, incluso después de que cierra sus párpados y esconde su rostro contra el cabello de Louis.

Cuando Louis aún no está dormido después de media hora, Harry deja caer su brazo en la almohada, por lo que sus dedos cepillan la franja del cabello del mayor. Rasca suavemente su cuero cabelludo, la manera que sabe como Louis ama. Sus dedos se retuercen en el cabello suavemente mientras cepilla hacia atrás. Finalmente Louis deja escapar un pequeño suspiro y se relaja en los brazos de Harry un poco. Harry sabe que cuando juega con su cabello, Louis siempre se pone a dormir, y no pasa mucho tiempo antes de que la respiración de este sea uniforme y constante. Harry no se detiene, incluso después de que Louis está dormido, porque si se detiene pensará, y si piensa, va a conseguir que sus lágrimas se derramen en el cabello del mayor.

Harry está todavía despierto cuando Niall entra en la habitación un par de horas más tarde. Niall está tranquilo, así que Harry sabe que eso significa una noche de sesión de estudio con uno de sus amigos, no una noche en el pub. Él no se mueve para ver al rubio, porque no quiere despertar a Louis. Sólo lo oye deslizándose silenciosamente en su cama.

Harry se congela cuando Louis estornuda un poco, y comienza a moverse. Sus ojos aún están cerrados cuando se da la vuelta en sus brazos, sin embargo, resopla un suspiro, pero no despierta. Louis se acerca más Harry en su sueño, su nariz acariciando el lugar familiarizado justo debajo de la barbilla del rizado. Louis se hunde en los brazos de Harry y este sólo lo sostiene más cerca, enganchando sus tobillos juntos y presionando un suave beso en el cabello del ojiazul.

No hay una pulgada de espacio entre el pequeño cuerpo de Louis y el suyo propio, pero Harry se siente como si estuvieran a kilómetros de distancia, y ni siquiera sabe en qué dirección empezar a correr, para conseguir a Louis devuelta.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro