Vida de Hiccup
Hiccup PDV:
Me coloqué una camisa a cuadros rojos y negros y me miré al gran espejo que se encontraba en mi habitación, zapatillas DC negras y blancas, jeans negros, remera blanca y la camisa que acababa de colocarme, mi cabello estaba despeinado y con unas pequeñas trenzas en el mismo. Sonreí al ver mi reflejo y cogí mi mochila, colgándola en mi hombro derecho, luego me acerqué a mi cama y cogí mi móvil, vi la hora y noté que en unos minutos Jack pasaría por mí, tenía notificaciones en facebook y messenger, pero ninguna interesante para mí.
Guardé mi móvil en el bolsillo delantero de mis jeans negros y salí de mi habitación, cerrando la puerta detrás de mí. Bajé las escaleras y me dirigí a la cocina, dónde mi padre desayunaba mientras leía el periódico, él elevó su mirada y me sonrió.
- Hola, Hipo - me saludó - ¿Tienes hambre?
- Sí, tengo mucha hambre - respondí y me senté junto a él en la isla de la gran cocina -. Pero si fuiste tú el que preparó el desayuno... Entonces no tengo hambre.
Mi padre rió provocando que una sonrisa se formara en mi rostro, yo no reía mucho.
- Claro que yo no he hecho nada, Modie hizo galletas antes de dirigirse a su nuevo trabajo. - Explicó para luego volver a mirar su periódico.
- ¿Ya no trabajará más aquí? - Pregunté con preocupación, Modie era muy buena.
- Claro que sí, pero consiguió otro trabajo también, lo cual no es nada malo - dijo mi padre -. Ahora está trabajando en la casa de Fergus.
Mis ojos se abrieron con asombro.
- ¿Fergus DunBroch? - Pregunté, mi padre me miró extrañado.
- Claro, ¿Acaso conoces a algún otro Fergus?
Negué con la cabeza, mi padre volvió a leer su periódico. Fergus DunBroch era muy buen amigo de mi padre, y su hija era muy bonita.
Una bocina se oyó fuera de la casa, sonreí para luego dirigirme a la puerta.
- ¡Adiós papá! - Exclamé mientras abría la puerta.
- ¿No desayunaras? - Preguntó Estoico, ese era el nombre de mi padre.
- ¡No tengo hambre! - Exclamaba para que pudiera oírme.
Salí de la casa, cerrando la puerta detrás de mí y luego caminé hacia el Audi convertible color blanco que se encontraba en la calle. Salté y me senté en el asiento del copiloto, sin abrir la puerta.
Un chico de cabello blanco y ojos azules (los cuales no se veían ya que estaba utilizando gafas de sol) estaba sentado en el asiento del piloto, con su típica sonrisa decorando su rostro. Su piel era realmente pálida, y sus zapatillas, sus jeans y su remera eran de color negro, al igual que las gafas de sol que estaba utilizando.
- Hola, Haddock - me saludó mi amigo y ambos chocamos nuestros puños en forma de saludo -. ¿A que lugar te llevo con este bebé? - Preguntó mientras acariciaba la puerta que se encontraba a su lado izquierdo.
- A la escuela, por favor. - Respondí mientras acomodaba mi mochila en los asientos traseros.
Me acomode nuevamente en el asiento del copiloto y miré al peliblanco, quien ya no sonreía.
- No eres nada divertido. - Dijo para luego encender el auto.
Yo reí, Jackson Frost era mi mejor amigo desde hacía más de tres años, y era realmente genial.
...
Jack y Eugene completaban sus tareas de Literatura mientras que yo solo respondía mensajes de mujeres en facebook, ya que yo había terminado con las tareas unos días antes. Los tres estábamos sentados en los pasillos, fuera del laboratorio, ya que todos estaban en el campus y necesitábamos tranquilidad, mas bien mis amigos necesitaban tranquilidad.
Miré a mis amigos, nosotros cumplíamos con los deberes y éramos populares a la vez. Mi móvil sonó, un nuevo mensaje en facebook.
Astrid Hofferson: hola, Hiccup :) (09:32)
Astrid Hofferson: me encanta tu foto de perfil ;) (09:32)
Suspire luego de leer los mensajes de una de las chicas más populares del instituto, siempre que una chica me enviaba un mensaje en facebook era para coquetear conmigo.
A mí no me gustaba coquetear con las mujeres, había tenido dos novias en toda mi vida, pero debía ser amable.
Hiccup Haddock III: Gracias :) (09:34)
Astrid Hofferson: tan bonito y sin novia :c (Visto 09:34)
No respondí, ya que no quería coquetear por mensajes con ninguna chica, me dolía la cabeza para leer estupideces.
El sonido de una nueva notificación de oyó, toqué la pantalla de mi móvil para ver la notificación.
Mérida DunBroch ha aceptado tu solicitud de amistad. Escribe en la biografía de Mérida.
Sonreí al leer eso y apagué mi móvil, ya que tenía poca batería.
- ¿Porqué sonríes como un idiota? - Preguntó Jack, provocando que lo mirara.
- No lo sé, ¿porqué tienes cara de idiota? - Contraataque, provocando que Eugene riera y Jack me fulminara con la mirada.
- No es gracioso. - Se quejó el peliblanco.
Eugene y yo reímos.
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