“Oí el rumor de que tuvieron un encuentro inoportuno... ¿o no? ”

Chat grupal: ¿Qué equipo? ¡Linces!

Kihyun.

Tengo el presentimiento de que Yang empeorará el entrenamiento en estos próximos días.

Por cierto, Yoongi ¿qué hacías metido en la enfermería? ¿Acaso te lesionaste? ¿Quién fue? ¿Sabes el nombre de su universidad, capitán?Puedo golpearlo si lo pides, soy tu esclavo.

18:26 PM.

Jeongguk.

No estoy preparado físicamente para esto, soy nuevo.

Kihyun, ¿por qué todo quieren resolverlo a los golpes?

¿Estás lesionado, Yoongi?

18:27 PM.

Min Yoongi.

Ya no eres el nuevo. Acostúmbrate, Jeon. Y no, no estoy lesionado.

Fui por unas pastillas para el dolor de cabeza.

18:27 PM.

JeongIn.

Será culpa tuya si en el próximo entrenamiento nos trasladan en camillas hasta nuestras casas.

18:28 PM.

Min Yoongi.

¿Perdón?

18:29 PM.

JeongIn.

¿No has notado que te distraes muy fácilmente estos días? Incluso Yang te lo hizo saber.

18:29 PM.

Hyunjin, mi novio.

Quizás le sucedió algo, JeongIn.

Yoongi no haría algo así a propósito, todos lo saben.

18:30 PM.

JeongIn.

¿Intentas justificar su mal empeño de estos días? Todos podemos tener días malos, pero eso no es una excusa real.

18:30 PM.

Félix.

¿Podrían no pelear?

18:31 PM.

Hyunjin, mi novio.

JeongIn es quien inició y está exagerando la situación del capitán.

No me quedaré en silencio para ver cómo estás tratando a Yoongi.

18:31 PM.

JeongIn.

¿Yo? Por favor, hay testigos sobre el rendimiento del capitán estos últimos días.

Yang fue claro. O arreglamos nuestro mal rendimiento o no asistiremos al partido del mes próximo. Yoongi está fallando y ese anciano nos metió en la misma bolsa.

18:32 PM.

Hyunjin, mi novio.

Demasiado texto, amor.

18:32 PM.

Eunhyuk.

¡Holaaa! Aprobé mi penúltimo exámen <3

JeongIn.

La mayoría puede estar de acuerdo conmigo, Hyunjin. Es una injusticia que Yang nos castigue a todos por igual.

18:33 PM.

Min Yoongi.

Admito sin vergüenza que estuve un poco distraído estos días, pero estoy bien, chicos. Son sólo problemas en casa y en general. Intentaré que eso no vuelva a afectar mi desempeño como capitán.

18:33 PM.

Kihyun.

PELEA, PELEA, PELEA.

18:34 PM.

JeongIn.

Ganas no me faltan.

18:34 PM.

Eunhyuk.

Basta, ambos están estresándome.

18:34 PM.

Un aroma le envolvió el cuerpo, distrayéndolo de su pelea absurda con JeongIn. Eunhyuk lo abrazaba con fuerza, imposibilitando que sus brazos pudieran moverse con libertad, acción que fastidió al alfa puro.

—No pelees.

—No digas esa palabra en público —Yoongi le ordenó en un murmullo suave y entonces Eunhyuk sacó su teléfono e ingresó al chat que mantenía con sus mejores amigos fuera del equipo.

Chat grupal: F4 🃏

Hope-Hoseok.

Yoongi, deja de pelear con tus propios compañeros, por favor.

18:40 PM.

Hyunjin, mi novio.

No le hagas caso. Yo voto por que le rompas los huesos de su nariz.

18:41 PM.

Hope-Hoseok.

Hyunjin, por amor a Dios, no le des esas estúpidas ideas a este hombre o lo hará.

18:41 PM.

Hyunjin, mi novio.

¿Por qué no? JeongIn estuvo insoportable estas semanas. Sospecho que le hace falta una buena golpiza, de las suaves (aclaro)

18:42 PM.

Hope-Hoseok.

Lo aceptes o no, ese "insoportable" es parte del equipo al cual tú y yo formamos.

Convivimos con él hace años, Hyunjin, por Dios.

Si el entrenador se enterase que JeongIn y el capitán ejemplar del equipo de baloncesto se molieron a golpes por tonterías, LOS EXPULSARÁ A AMBOS.

El baloncesto influye mínimamente en los promedios de todos, y si a este zángano le arruinan su perfecto promedio de 9,5... Ten por seguro de que dejará la universidad.

18:44 PM.

Min Yoongi.

JAJAJAJAJAJAJ Ni que fuera un nerd.

18:44 PM

Eunhyuk.

De hecho, lo eres. Eres un come libros.

18:44 PM.

Min Yoongi.

Pero-

18:45 PM.

Eunhyuk.

Hola, buen día, seres de luz.

18:45 PM.

Min Yoongi.

No hablemos de quién es un come libros porque soy capaz de exponerte frente a todos.

18:46 PM.

Una casta risa se oyó cerca y Yoongi se contagió de ella. Ambos levantaron su vista y se dedicaron ciertas miradas de advertencia.

—No tienes nada en mi contra, señor perezoso.

—Eso es lo que tú crees. Pruébame, míster Músculo.

De nueva cuenta regresaron al chat, por otro lado, Hyunjin y Hoseok se mantuvieron expectantes a pesar de estar todos uno al lado del otro en la cafetería.

Eunhyuk.

Exponme, bastardo.

18:47 PM.

Hyunjin, mi novio.

Ay no, otra pelea no.

18:47 PM.

Min Yoongi.

Eunhyuk está leyendo todos los cómics de Marvel que existen en la biblioteca.

Y es team Iron Man.
La decepción, la traición, bro.

18:48 PM.

Toda la mesa exclamó un jadeo de sorpresa, comenzando a reír a cuestas de que Eunhyuk tenía sus brazos cruzados y se dedicaba a mirar mal a su mejor amigo.

—Eso es trampa. Te has pasado —Le reclamó, propinándole un golpe en su brazo.

—No puedo creerlo, Lee Eunhyuk —Hoseok estalló en risas—. ¿Team Iron Man? ¡Por favor!

—Esto es una exclusiva demasiado preciosa, joder —Hyunjin descansó su brazo sobre su abdomen debido al dolor que le producía estar riendo sin lograr detenerse.

— ¡Te odio, capitán! —Exclamó manteniendo su puchero.

—Lo siento, señor Eunhyuk alias “Jamás leeré o veré nada relacionado a esa estupidez de Marvel. No comprendo por qué superhéroes sin personalidad atraen la atención de las personas.” —Yoongi imitó la voz de su mejor amigo, muy mal—. Marvelfóbico.

Yoongi ni siquiera sabía si esa palabra existía en realidad.

—Oh, citas mis palabras tal como las dije aquella vez. Es curioso que recuerdes esa tontería y no sobre la dichosa fiesta de Halloween donde, por cierto, desapareciste por un largo rato y tu frente tenía leves rastros de pintura rosa. Dime, ¿tuviste una buena experiencia en la fiesta?

Pronto las risas cesaron, la sonrisa de Yoongi dejó de ser colorida y brillante a ser oscura y escalofriante para todos. La mandíbula del alfa puro se marcó, tensa y molesta.

—Yo no fui tan lejos como tú.

—A veces necesitas probar de tu propia medicina, hombre —Excusó Eunhyuk, sintiéndose en aprietos debido a la mirada asesina del mayor.

Hyunjin prefirió callar para su propio bienestar. Hoseok blanqueaba los ojos ante la escena.

—Yoongi-.

—No te vuelvas a entrometer en lo que no te incumbe—Advirtió el alfa, señalándole, luego miró al resto—. A ninguno le incumbe.

En respuesta, Hoseok levantó ambos brazos en señal de inocencia.

—Sólo diré que tus labios se veían muy... raros. —Y Hyunjin después de eso, con el miedo atravesándole el pecho porque una gran nube de aromas agrios lo rodearon, y supo de dónde provenían. Realizó un cierre imaginario en su boca.

—Los mordí, es solo eso —respondió evitando la mirada de sus mejores amigos, su actuación seria al parecer estaba funcionando.

—Está bien... Perdóname, mi broma estuvo fuera de lugar —Eunhyuk abrió su boca, no quería acabar mal con Yoongi por una tontería. Jamás.

—No te preocupes, estamos bien —Le sonrió a medias y prefirió retirarse de la cafetería sin dar explicaciones.

En medio de su caminata hacia el estacionamiento de la universidad, la pantalla de su teléfono se encendió y mostró orgullosamente el nombre de su hermana mayor y una fotografía de ella disfrazada de una terrorífica princesa.

— ¿Mmh?

—“¿Cómo que 'Mmh'? Min Yoongi, ¿hiciste lo que te pedí esta mañana?” —Su hermana no perdió el tiempo en cuestionar. Aún recordaba las indicaciones que le había dado por video llamada temprano en la mañana, indicaciones que un adormilado alfa anotó a medias en su teléfono.

—Chaerin, lo olvidé. Tuve algunos asuntos que resolver —Explicó sin dar detalles y realizó una mueca.

—“Lo sospechaba, y es por eso que ya me encuentro camino a casa con una anciana a la que debieron quitarle la licencia de conducir en el 1700 antes de Cristo.” “¡Abuela, no!” “¡Carajo, no lo hagas!” “¡Abuela, no fue en serio lo que dije!” —Un par de alaridos se oyeron a través del altavoz, irritando los oídos del alfa por el escándalo—. “¡Vamos a chocar, déjame en paz, Cristo!” “Mierda, Yoongi, nos veremos luego.”

—No creo llegar a casa esta noche. Papá ha estado tenso estás semanas y está insoportable. En la mañana discutimos porque han pasado meses desde que él me obsequió el auto y-.

—“Es un Hyundai Tucson, creo que si veo razones para que esté molesto si no lo has usado jamás. Fue tu regalo de cumpleaños de niño millonario este año. Joder, una vez que ellos recuerdan que existes” —Bromeó entre risitas, haciendo sonreír al menor.

—El punto es que está obligándome a utilizarlo. Prefiero la motocicleta, todos lo saben. Ese auto está reservado para ocasiones especiales.

—“Las motocicletas son peligrosas, Yoongi, siempre te lo he dicho.”

—Siempre conduzco con protección y sé lo que hago. Quiero que lo entienda. Que tú, mamá y papá, y los chicos lo entiendan.

—“Nadie lo hará, mucho menos nuestro padre, ¿y quieres saber por qué? Porque le importas, precisamente porque eres el heredero de todo. Suena terrible decirlo de esa manera, pero creo que ya lo sabes.”

—Yo no quiero la empresa, él lo sabe.

—“Creo que aún mantiene la esperanza de que recapacites, pero no lo hagas, mantente firme en tu decisión, ¿de acuerdo?”

Esa era precisamente la parte difícil de ser un integrante en la familia Min, puesto que ni siquiera a su edad tenía derecho a decidir por su cuenta en algunos aspectos de su vida. Siempre fue así para todos. Pero su hermana Chaerin era como aquel karma que sus tíos, tías, abuelos y sus padres habían recibido por mantener unas costumbres horrendas y clasistas en la familia a pesar de comenzar a pertenecer a un mundo moderno, cambiante y progresivo.

Ellos se quedaron en el tiempo, ese donde todo era controlado por tu familia y no podías ni siquiera mover un músculo sin ser reprendido.

Yoongi aún recordaba la primera vez que sus padres le dijeron que habían organizado una cita a ciegas con una joven muchacha, pero claro, él no asistió. Aquello enfadó tanto a sus padres, aunque Chaerin estuviera sumamente orgullosa de sus actos. Diablos, ¿cómo no estarlo cuando a ella por poco no la arrastraban hacia un altar para que pudiera casarse con un joven millonario? ¡No! ¡Qué desagradable!

Yoongi había tenido su respectiva pareja en el pasado; Kim Jisoo era sencillamente increíble en sus veinte, pero hubo un problema sin un tipo de solución que los llevó a terminar.

No era fácil encontrarse con tu destinado y el alfa puro lo comprendió. Por eso a pesar del dolor y las lágrimas derramadas, él estaba feliz por Jisoo y quizás la envidió un poco. Mierda, ¿quién no lo haría? Yoongi también deseaba encontrarse con el amor para su vida, con el llamado "destinado o destinada" como se conocía desde siempre.

—“¿Sigues ahí? Ya no importa. Lo siento, debo colgar porque la anciana se ha vuelto loca. Hablamos más tarde.”

Chaerin no le dio tiempo para responder debido a que colgó de inmediato con un pequeño escándalo de la abuela Min escuchándose en el fondo, haciendo reír al alfa.

Luego de revisar algunas de sus notificaciones, guardó su teléfono en el bolsillo de su pantalón.

Posteriormente subió a su motocicleta, sin embargo, con la fría brisa del otoño, Yoongi advirtió que no traía en su mochila su sudadera y quiso maldecir en voz alta por ello, puesto que estaba muriendo de frío. La sudadera que llevaba en ese instante era de media estación y por lo tanto estaba congelándose por completo.

Accionó en rodar los ojos y su cuerpo dio un giro para ingresar a la universidad nuevamente.

Estando frente a la puerta de enfermería, con la poca visión que dejaba el vidrio en medio, captó que había alguien adentro y creyó erróneamente que se trataba de Sunhee, la enfermera que administraba y atendía ese lugar.

Anteriormente había recorrido los pocos sitios donde recordaba haber estado ese día, pero en ninguno de ellos pudo encontrar su sudadera. Su casillero era la única esperanza que le quedaba al pobre alfa y tampoco consiguió nada, no obstante recordó su visita a la enfermería y sus dedos se cruzaron entre sí durante todo el trayecto hacia esa zona en la universidad.

Y vaya sorpresa acabó llevándose al toparse con un joven de cabellos rosas recostado sobre la camilla, tronando sus dedos pequeños y observando el techo hasta que olfateó el nuevo aroma presente.

Ambos hubieran querido no volver a saber del otro, mucho más desde lo ocurrido en días anteriores. No entendían por qué se encontraban tan avergonzados por sus actos estando ebrios.

Café y cítricos, aquel era el aroma que le invadió de pronto al menor. Aunque estaba encantado en un principio por la acertada combinación, no tardó en desencantarse cuando esos orbes negros lo observaron curiosos.

— ¿Tú qué haces aquí? —El alfa puro arrugó el entrecejo.

¿Acaso ocurrió otra vez... eso? ¡No, diablos! ¿Cómo podía atreverse a pensar en algo como eso? ¡Agh! Yoongi era un idiota.

— ¿Y tú qué haces aquí? —Replicó Jimin, haciéndole curvar el labio hasta formar una encantadora sonrisa ladina.

El pelirrosa se quedó estático en su sitio cuando notó cómo Yoongi decidió no responderle e ignorarlo para atravesar la sala y mirar hacia todas partes.

—La enfermera Sunhee volverá en un momento si es que estás buscándola —Informó y se acomodó en medio de la camilla, dejando descansar su espalda sobre la pared—. Si vas a hurguetear este lugar, será mejor que-.

—Vine por mi sudadera, estoy seguro de que está aquí. Por favor, haz silencio.

— ¿Qué? No desordenes nada, F4 —Advirtió una vez más, cruzándose de brazos.

—Si algo en este lugar resulta desordenado, dejaré todo en su sitio otra vez —Su cuerpo giró con el único propósito de ver los ojos de Jimin—. Tú no te preocupes, ¿bien? Limítate en estar en silencio si no vas a ayudar.

El omega jadeó molesto.

— ¿Y con esa actitud estúpida dejé que me besarás? Estoy decepcionado —Jimin resopló, bajándose de la camilla aún con los brazos cruzados.

Yoongi no contestó y buscó desesperado su sudadera, aturdido con lo que había oído de esos gruesos labios.

— ¿Qué, te comieron la lengua las pirañas?

El pelinegro detuvo sus acciones y sostuvo fuerte la sudadera en sus manos.

—Son ratones, no pirañas —Corrigió, devolviéndole la mirada.

—F4, los ratones preferirían agua de las cloacas antes de comer tu lengua —Respondió, regresando a la camilla por el repentino mareo que atacó su cuerpo.

—Quizás los ratones no, pero tú sí —Se animó a tocar el tema por primera vez en días—. Lo recuerdas —Más que una pregunta, aquello fue una afirmación segura.

—No... —Vaciló, y luego se plantó firme y añadió—: No sé de qué estás hablando —Jimin apartó la mirada, consciente de que estaba perdiendo la batalla contra el capitán del equipo de baloncesto.

—Tú sabes perfectamente de lo que hablo.

—Quiero golpearte en este momento, ¿sabes? —El rostro de Jimin lucía jodidamente terrorífico, pero Yoongi no dejó que eso lo apartara de querer darle una lección a aquel lindo y maleducado omega.

—Atrévete a hacerlo y pronto verás lo que te sucederá —Avisó y se acercó unos cuantos centímetros.

Jimin estaba consciente de la presencia que imponía ese alfa en la habitación, y sin quererlo, lo incitó también porque lo desesperaba su actitud.

— ¿Qué harás si arruino tu popular rostro, mmh? ¿Tu papá y sus influencias me echarán de la universidad?

—No lo creo. Papá no es un hombre que le guste precisamente verme en problemas, pero deshacerse de alguien como tú... no lo veo difícil.

Era completamente cierto, a sus papás lo único que les importaba en realidad era que acabara sus estudios en administración de empresas y así iniciar un entrenamiento básico dirigido por sus tíos y su padre, todo esto con el fin de poder dirigir las riquezas de los Min en un futuro.

—Pero a mi... A mi si me gusta dar lecciones a quienes se lo merecen. Como a tí, por ejemplo.

Y allí estaba esa cosa tan familiar que nació la primera vez que ambos se toparon con el otro.

La tensión entre los dos.

La misma tensión que ambos experimentaron en los baños de la fiesta de Halloween, y que sin ningún pudor y arrepentimiento decidieron romper. ¿Qué diablos les ocurría?

—Lamentablemente no te haré nada, estás demasiado pálido —El alfa lo analizó hasta que Jimin lo advirtió y quiso ocultarse.—. ¿Por qué estás aquí?

—No es de tu incumbencia.

—Siendo franco, estoy preocupado. De todas maneras siento lástima por tu alfa... Le espera como omega un infierno hecho persona —Lamió sus labios, enfrentándose al menor.

—Digo lo mismo. Tengo mareos —Se rindió y contestó.

— ¿Estás en cinta? —Jimin abrió sus ojos con suma rapidez.

—Eso jamás sucederá, detesto la idea de ser padre. Tampoco me agradan demasiado los niños —Confesó en voz baja y retumbó por la sala entera.

—Aún recuerdo que los alfas tampoco son de tu agrado, vives para quejarte de ellos —Comenzó a mofarse, manteniendo esa arrogante actitud que no le agradaba a Jimin—. Me tengo que ir, qué lástima. Sé más amable en nuestro próximo encuentro, Wandita.

—Sabes muy bien que mi nombre es Jimin.

—Lo olvidé, lo siento tanto —Su sarcasmo no pasó inadvertido—. No fue un gusto volver a verte, Jimin.

Acabó de colocarse su sudadera junto a la capucha de este y quiso abrir la puerta para largarse de una vez. Las llamadas de su hermana no habían dejado de cesar desde que colocó sus pies sobre la alfombra pequeña de la enfermería, comenzaba a hartarse de sentir vibrar su teléfono.

Seguramente lo estaba esperando con un objeto punzante sobre la puerta.

—Tampoco fue un gusto volver a verte, F4 —Le dijo y utilizó el mismo tono brusco que había implementado Yoongi, balanceando sus pies al estar sentado sobre la camilla.

—Es Yoongi, no F4.

—Lo siento mucho, F4 —Jimin carcajeó, causando que el otro se acercara aún más.

—Es Yoongi.

—No, es F4.

—Yoongi —Repitió de nueva cuenta.

—F4, ese es tu nombre real —Jimin inclinó ligeramente su cabeza, sonriéndole como si fuera un niño realizando una travesura.

—Mira, enano, no juegues con mi paciencia —Lo señaló.

— ¿Disculpa? —Ambos se enfrentaron.

Jimin tragó seco, bajando de la camilla y encarando al mayor. Estaba listo para lo que fuese, ciertamente su lobo estaba tranquilo y eso alteraba su paz mental al pretender obtener respuestas claras del motivo. Luego formuló:

—Eres el insoportable e intolerable F4.

— ¿Puedes decirme por qué te desagrado tanto? —Yoongi ladeó el rostro y lo observó con una socarrona sonrisa—. Porque yo si tengo motivos. Tienes un temperamento jodidamente desagradable para cualquier ser humano. También te gusta juzgar demasiado a las personas y eso habla muy mal de tí. Yo no... Yo no puedo tolerarte. Con solo oír tu voz, simplemente... me sacas de quicio.

— ¿En serio? Porque tú eres la persona más desesperante, arrogante, egocéntrica y detestable que me ha tocado conocer en mi vida —Sentenció descolocado—. ¡Vete de aquí, maldición! 

— ¿Qué está ocurriendo aquí? —Una voz femenina irrumpió en la sala.

Los dos se obsequiaron una sutil mirada.

Era Sunhee.

Mierda, ambos estaban en problemas.

Este es el auto de la discordia entre Yoongi y su papá JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA.
Igual, (spoiler) no lo pierdan de vista 🥲

Creo que la marca sería algo como esto “Hyundai Tucson 2022 N-line US versión”.
Si me equivoqué, háganmelo saber.

ALEX 🧊