-Eres tan bonito, mi amor-susurro en la punta de su oreja haciendo que el roce de sus labios contra ella ocasionará temblores a su cuerpo-Tus ojos café y brillosos por el placer me hacen recordar tanto al ciervo de Bambi

Ambas manos pequeñas acarician con demasiada suavidad los costados del fornido cuerpo desnudo bajo de él, un cuerpo que a pesar de ser más grande que él tenía unas excelentes curvas que hacían volverlo loco, más que todo esa pequeña cintura a la cual se aferraba cada vez que entraba a ese estructural cuerpo tan hermoso que solo el podía verlo en su máximo esplendor, bajo las luces rojas de su habitación mientras que sus bonitos ojos café lo miraban con tanta necesidad, amor y lujuria desbordante, eso a JiMin le gustaba. Le gustaba ser el único que podía causar tales expresiones en él

-Tus ojos son tan encantadores mi vida-susurro en su oído, sintió como su piel se volvió de gallina y un suspiro de sus rojos e hinchados labios-Pero me gusta más verlos llenos de lágrimas por el placer que te causo mientras tratas de no cerrarlo y te entregas por completo a mis manos

Un gemido fue su respuesta. Sus dedos habían tomado los sensibles pezones de su menor mientras que sus esponjosos labios se encargaba de repartir húmedos besos por la extensión de cuello, lamiendo lo y mordiendo lo a su antojo haciendo que varios gemidos se atascara en la garganta del menor. Las yema de sus manos dejaron tranquilo los bonitos botones en cambio fue su boca la que se ocupaba de ellos mientras que sus manos ahora se mantenía agarrando con fuerza sus muslos, enterraba sus dedos hasta estirar fuertemente de ellos

-Hy-Hyung aahh~ Te ne-necesito mgh-su voz salia tan baja y cortada que hasta a él mismo se le dificultaba entenderse lo que había dicho

Sin embargo JiMin lo había entendido a la perfección. Alzando sus ojos avellanas los cuales estaban dilatados por el placer del momento, viendo a su menor con el cabello pegado a su frente por el sudor que recorría todo el cuerpo causado por el calor de la habitación haciendo que su cuerpo se viera algo brilloso y esos bonitos luceros cafés que brillaban de inocencia, súplica y por placer. Con una sonrisa cínica y aún manteniendo fija en el rostro del menor soltó el pezón del menor no si antes estirarlo levemente entre sus dientes sin lastimarlo

-¿Que es lo que necesitas, hermoso?-pregunto agarrando fuertemente sus piernas, colocando ambas por encima de sus hombros dejando su entrada necesitada rozar con su pene-Dile a tu Hyung que es lo que quieres, vamos mi ciervito bonito

Bajo nuevamente su cabeza, esta vez a la parte de su abdomen, cerca de su pelvis, besando y jalando parte de su carne fuertemente para dejar marcas que durarán días en su blanca piel. Cuando JungKook alzó su cuerpo para darle más espacio a JiMin, sin querer volvió a rozar con el miembro haciendo que un pequeño gemido agudo saliera de sus rojiza boca, sus dedos se enterraron en el cuero cabelludo del mayor y jalo de el bruscamente mientras mordía su labio inferior

-Q-quiero tu pe-pene en mi, p-por favor, Hy-Hyung-dijo con pequeñas lágrimas recorriendo por sus mejillas, lloraba por la desesperación y necesidad de sentir aquel trozo de carne dentro de él, empujando en su culo mientras tocaba aquel punto que le hacía mirar las estrellas y gritar hasta que sus cuerdas vocales le duelan

JiMin no se hizo esperar, pues este estaba igual o peor que su dongsaeng. No espero más y se adentro de una sola embestida, arrancando un grito tanto de dolor como de disfruté de JungKook quien se arqueo por la repentina intromisión y jalo de los cabellos bruscamente de JiMin el cual gruñó al sentir con las estrechas paredes anales ahogaban su miembro

-Sigues igual de estrecho como la primera vez-murmuro soltando una sonrisa juguetona

El mayor empezó embestir fuertemente contra el castaño, sacando alaridos de placer que retumbaba por toda la habitación junto con los fuertes golpes de la cama contra la paredes. Los dedos largos y tatuados de JungKook se posicionaron en la espalda de Hyung, rasgando toda su piel, agarrándose como un salvavidas que lo mantiene en la tierra firme para no irse más allá del cielo del cual JiMin lo estaba llevando

-¡Mas~! ¡Mas~! ¡P-por favor! ¡Aahh!-suplicaba, los dedos de sus pies se encogieron, sus pómulos rosados por las lágrimas que salían de sus ojos cerrados mientras que mantenía su cabeza inclinada hacia atrás. Se sentía maravilloso, y los empujes de su Hyung los cuales aumentaron solo lo hacía llegar a su perdición

No fue después de un par de minutos, donde JungKook enterró más las uñas en la espalda de JiMin que había llegado a su liberación, machando ambos abdomen. JiMin le siguió después, soltando hilos e hilos de semen dentro de JungKook el cual se deslizó un poco fuera de él

Cansado y agotado, JiMin se dejó caer encima del menor claro sin aplastarlo realmente, no sin antes de bajar las piernas de sus hombros. El sudor recorriendo su piel y las respiraciones agitadas trataron de regularla. Kook, giro su cabeza para plantar un pequeño beso en la mejilla del mayor haciendo que este mismo sonriera por tal bonito acto. Se quedaron así, disfrutando del calor corporal del otro, encerrados en su burbujas hasta que unos bruscos golpes en la puerta del cuarto se escucharon

-¡LA PRÓXIMA VEZ TEN MAS CUIDADO! ¡ANIMAL! ¡CASI ME MATAS AL NIÑO! ¡BESTIA!-la inconfundible voz de TaeHyung se escuchó del otro lado

JiMin tan solo río por lo dicho mientras que JungKook se sonrojaba fuertemente y le daba un golpe al susodicho

⊰᯽⊱┈──╌❊ ❊╌──┈⊰᯽⊱