Seokjin

En un momento todo puede cambiar, los sentimientos de las personas son los más volubles, y en ocasiones el miedo te hace reaccionar a lo que en verdad sientes.

—¡Jin!

—¿Nozo-chi?

—¡Jin ayúdame!

Estaba en medio de la sala de descanso cuando su llamada entró.

—¿Qué sucede?

Su voz se escuchaba llorosa y mucho ruido de fondo.

—Mi carro derrapó y no sé dónde estoy, no puedo moverme Jin —su llanto me lleno de terror

—Tranquila, ¿Estas fuera del auto?

—N..no —su respiración estaba agitada yo tomé las llaves de mi coche —sigo…sigo  dentro el cinturón está trabado.

—Bien preciosa vas a encender tu GPS.

—Jin me duele mucho.

Salí del hospital sin decir a nadie a dónde iba, la lluvia me empapó rápidamente, debía tener cuidado al conducir.

¿Qué la hiso salir con este clima?

—¿Jin?

—Aquí estoy.

—Ya está el GPS, pero no encendió del todo bien, medio tablero está destruido.

—Espero con eso baste, voy a vincular mi teléfono, ya debe de estar en el sistema del auto.

—No me cuelgues.

—No lo haré.

—Soy una tonta Jin, una grandísima tonta.

Su voz se escuchaba irritada por el llanto, yo estaba tratando de que mi teléfono diera con la ubicación de Nozomi, pero está a tardando más de lo debido.

—Deja de decir eso.

—Debo enfrentarlo, pero me da miedo regresar Jin.

Se a que se refiere, pero me duele escucharla así.

—No tienes que enfrentarlo sola lo sabes.

El GPS seguía sin agarrar la señal.

—Nena dime porque carretera te fuiste.

—Por la autopista este —se escucha entrecortado —noo.. Jin se está acabando la batería.

—Te voy a encontrar tranquila —se cayó la llamada —¡Mierda!

Golpee el volante, le marque a Hoseok.

—¿Diga?

—Soy Jin, necesito que me digas por qué carretera se va Nozomi para ir a las cabañas, está herida necesita ayuda.

—Salgo enseguida, te mando ubicación por mensaje.

No tardo nada en llegar la dirección donde estaban, yo iba a mitad de camino, en cuanto entre a la autopista subí las luces para ver todo el camino una señal del auto de Nozomi, mi teléfono se logró enlazar al fin con el auto, pero de nuevo el terror me invadió al ver la  valla de la carretera destruida, se había ido al barranco.

Baje aún con la lluvia, en el maletero siempre tengo un kit de emergencia, es lo bueno de ser médico, saque la lámpara y me acerque a la orilla.

—¡Nozomi!

Empezaba a oscurecer y no vería nada de no encontrarla rápido, mire unas luces del otro lado, Hoseok llegó.

—¿QUÉ PASO?

—No lo sé, ella me marco y me dijo que su auto derrapó.

—Llame una ambulancia y a equipo de emergencia pero con el clima están algo saturados.

—Acerca tu camioneta más y hecha la luces para abajo, bajaré con el kit de ayuda.

—Debo ir yo.

—¿Qué vas hacer? Puedes ser más ágil, pero si está muy herida necesita un médico.

En lo que me preparaba para bajar, llegó otro auto más, bajándose Namjoon de este.

—¡No es buen momento! ¡Esto es tú culpa!

Hoseok se miraba furioso, quisiera ir y golpearlo también pero estaba más preocupado por Nozomi. Fui midiendo terreno, y aunque era algo resbaloso podía sujetarme, cuando sentí terreno estable tome la lámpara de nuevo.

—¡Nozomi!

Camine un poco más y escuché finalmente la voz de Nozomi.

—¡Jin! ¡¿Eres tú?!

El carro estaba destruido de enfrente volteado un poco en diagonal, me moví lo más rápido que pude.

—¡Jin!

—Ya estoy aquí, tranquila nena te voy a ayudar, también Hobi está arriba esperándonos.

Acomode la lámpara para que pudiera ver el rostro de Nozomi, estaba lleno de sangre proveniente de su frente pero no veía desde donde estaba la herida, su pierna estaba atravesada con un cristal, se veía hinchada desde el tobillo, saque una navaja para cortar el cinturón.

—Tengo frío, y quiero cerrar lo ojos Jin, pero se que no debo.

—Trata de mantenerte un poco más consiente mi nena, no se te ocurra cerrar los ojos antes de llegar arriba.

—Tengo mucho miedo.

—Yo también Nozo-chi — logré sacarla con cuidado del auto, me parecía aún más ligera de lo que es —bien ahora debo vendar tu pie, irás con el cristal aún en la pierna, no puedo sacarlo sin dañar alguna vena.

Ella asentía con su mirada dominaba por el miedo. Me quite la chaqueta de debajo de la chamarra y de la puse para calentarla un poco, le puse un impermeable.  

Me puse a evaluar la herida de su frente, el golpe no era grave, pero podía tener una contusión, limpie la herida y su rostro, ella empezaba a cerrar los ojos.

—Nozomi quédate conmigo, no cierres los ojos aún nena, ya vamos para arriba, por favor solo un poco más.

Asintió de nuevo, pero su cuerpo empezaba a sentirse algo lacio.

—Jin, gracias por venir por mi.

—¿Cómo dejarte sola?

Camine hasta donde baje aún con ella en brazos, trate de no lastimar mucho su pierna, cuando llegue al final del camino, respire al ver que bajaron bomberos con arneses, me quitaron a Nozomi de los brazos muy a mi pesar. Nos subieron a los dos y la ambulancia ya nos esperaba.

—Su presión está bajando demasiado, tiene una probable contusión, tobillo roto, el cristal está profundo no lo retire por temor de desgarrar el músculo.

Caminaba con los paramédicos, Hoseok me tomo del brazo.

—¿Estará bien?

—Lo estará no la dejaré, te veo en el hospital.

Namjoon se  acercó a la ambulancia.

—¿Cómo está?

—Aun no lo sé.

Subí a la ambulancia, ayudando a los paramédicos a canalizarla.

—Ya no puedo más Jin.

—Lo hiciste bien —acaricie su cabeza mientras le colocaban la mascarilla —deja que me encargue de todo.

Cerro los ojos, yo no solté su mano hasta llegar al hospital, me cambié de manera rápida, le mandé hacer una tomografía, pudimos sacar el cristal sin problema, su tobillo estaba roto pero tenía los nervios intactos, un costilla rota por el cinturón, y no había contusión, algunas heridas más pero no graves.

Después de dejarla estable en su habitación salí a buscar a Hoseok, que ya estaba en la sala de espera con toda la familia de Nozomi y Namjoon.

—Seokjin.

—Estará bien, en cuanto despierte pueden pasar a verla, afortunadamente no fue nada grave, solo deberá estar descansando unas semanas hasta que su tobillo y costilla sane.

Mire de reojo a Namjoon que estaba siendo consolado por los padres de Nozomi.

—¿Por qué salió de casa? — mire a Hoseok que miraba a Namjoon con el mismo enojo que yo

—Algo paso entre esos dos, y Nozomi se sentía mal desde la mañana, entonces peleó con mis padres por lo mismo de la boda y salió furiosa del lugar —se jala un poco el cabello — debí detenerla.

—No sabías que esto pasaría, además ella es algo terca —le palmee el hombro —iré a revisarla.

Estuve todo el tiempo en la habitación de Nozomi, esperando que reaccionara, verla así me hace sentir mal, aunque se que está bien, y como médico se que su salud no está mal lejos de las heridas, pero me siento triste.

—¿Jin?

Me levanté del asiento y fui directo a ella.

—¿Cómo va el dolor? ¿Cómo te sientes?

—Tengo un poco de sed.

Acerque la jarra para darle un poco de agua.

—Iré a avisarles que estás bien.

—Espera— sujeto mi bata —solo que entre Hobi, no veré a nadie más.

—¿Segura?

—Si, no me siento con la fuerza suficiente.

Acomode su cabello un poco, me encanta ver su rostro, por eso siempre trato de despejarlo.

—Me gusta que hagas eso, se siente bien.

—Lo haré más seguido entonces.

—¿Puedes recostarte un minuto conmigo?

Me acomode en la camilla con ella, pasando mi mano por su cabeza, acomodo su cabeza entre mi cuello.

—Desearía ya no sentir nada, que mi corazón se apagará de manera sentimental, que no me emocioné verlo y me duela al mismo tiempo.

—Es lo malo de que seas humana y no un robot, pero también es bueno que lo sientas, sabes que puedes amar como nadie —la abrace un poco — espero exista el hombre que pueda merecerlo.

Desafortunadamente estaba deseando ser ese hombre, me estaba enamorando de Nozomi.

Nozomi.

Hoseok y Seohyun eran los únicos aparte de Jin en entrar al cuarto del hospital, en la semana que está a ahí. Después de darme de alta me fui al departamento de Jin, aunque Hoseok y Liana me dijeron que me quedara con ellos, no podría.

—Te quedarás en el cuarto de visitas, para si Hoseok y Seohyun quieren venir a verte tengas privacidad.

—Pero no quiero dormir sola.

Estaba en negativa de que Jin me dejara mucho tiempo sola, el día del accidente fue al primero que pensé en llamar, aunque Hobi estuviera más cercas, me sentía más protegida con Jin, sin mencionar que está en mi marcado rápido.

No pensé que se volvería alguien tan importante.

—Dormiré aquí, pero quiero que te sientas más tranquila cuando ellos vengan.

Me ayudó a instalarme y dejo todo para que pudiera moverme sin problemas por la casa, en que dormí un rato el hizo la comida y dejo listo el baño para que me fuera sencillo usarlo.

—Tratare de no tener turnos muy pesados para no dejarte sola tanto tiempo.

El me explicaba como dejo todo de manera cómoda y incluso puso algunos soportes en la ducha para que no batallará, pero en realidad estaba viendo su cabello húmedo y algo desprolijo, sus labios gruesos y sus ojos algo cansados, quería que Jin dejara de hablar y me besara.

—¿Entendiste?

—¿Qué? Si, si todo bien —Carraspee un poco —¿Jin?

—Dime Nozo-chi.

—¿Puedes…

Alzo una ceja.

—¿Podrías darme un beso?

Sentí que mi cara se encendió, pero necesito de alguna manera sentirlo. No me dijo nada solo se acercó a la cama y me dio un pequeño beso en los labios.  

—¿Eso fue un beso?

Soltó un risa que me contagio.

—Me da miedo lastimarte niña —me pellizco la mejilla.

—Tonterías, eres doctor sabrás dónde tocar.

Lo jale de nuevo hacia mi y está vez me besó con más intensidad, pero tan pronto fue acercando su cuerpo a mí se detuvo puso su frente con la mía.

—Perdóname Nozo-chi, no puedo.

—¿Hice algo que te molestará?

—No, al contrario, estás haciendo todo bien. Solo que ya no quiero solo jugar contigo.

No entendía que me quiere decir.

—Nozomi, no es mi intención romper el acuerdo que tenemos, pero quiero intentar salir contigo —me tomo de las manos —¿Podrías darme una oportunidad? Prometo que si no soy lo que buscas me alejaré, pero ya no puedo besarte sin sentir que todo está bien cuando lo hago.

¿Me gusta Jin de esa manera?

¿Qué le respondo?