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𖥻•ׅFʀᴏᴛɪsᴍᴏ• - - ं 🍯

Yang Jeongin
𓍯 Cabello Castaño
𓍯 25 años

Kim Seungmin
𓍯 Rubio
𓍯 29 años

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Frotismo, froteurismo o tocheurismo: La persona obtiene placer sexual frotando sus genitales contra personas desconocidas en una multitud.

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Misma rutina, diferentes días.

Ser un adulto independiente tenía sus ventajas, pero también podía volverse un asco con el paso del tiempo.

Yo lo sé mejor que nadie.

Kim Seungmin, el chico que esta a cargo de las cuentas de uno de los conglomerados más reconocidos en el país, ese soy yo.

Aunque suene como un cargo importante en una empresa importante, no soy una persona importante, solo soy una oveja más del rebaño y eso me hace feliz.

Estoy contento con mi vida.

Me puedo mantener sin tener deudas, no le debo explicaciones a nadie a la hora de hacer lo que quiera y la mayor parte del tiempo la disfruto paseando a mi perro, PuppyM o pintando lo que sea que venga a mi mente.

Pero si hay algo que puede arruinar toda esa satisfacción de llevar una vida así y ese problema es no tener un auto.

Todos los días después del trabajo tengo que tomar un metro para llegar a mi dulce y querido hogar.

¿Por qué no he comprado uno aún?

La deuda universitaria no se paga sola, mucho menos si tiene intereses acumulados, por lo que no he podido ahorrar lo suficiente para un vehículo propio y tampoco tendré ese dinero dentro de unos 4 años más, así que solo me acostumbro a la idea.

Podría ser peor.

Lo más agotador del transporte público es la cantidad de horas diarios que paso en él, además de la cantidad excesiva de gente que hay la mayoría del tiempo, pero ya todo es parte de mi rutina, todos los días me levanto a las 5 am para tomar estar en la estación a las 6 am y llegar a las 7 am de mi trabajo, por suerte mi jefe es piadoso y salgo a una hora prudente, logrando estar algo pasado las 7 pm en mi apartamento.

Ahora estoy en eso.

Después de casi 11 horas de arduo trabajo metido en una oficina porque soy un jodido trabajólico, al fin me encuentro en uno de los vagones esperando que el metro se ponga en movimiento, viéndolo desde un lado positivo no va demasiada gente, sin embargo, decidí ir de pie en el fondo del lugar mirando hacia afuera para distraerme porque me parece más interesante, a pesar de que me sé estas calles de memoria después de 6 años aún hace volar mi mente el ver a diferentes personas recorrer el lugar.

A veces me gusta observar a las personas que pasar e imaginar que pasara en sus vidas, de donde vienen, qué hacen o que pensamientos están teniendo, me parece divertido pensar que va más allá de esos rostros que solo veré una vez en mi vida.

Me gusta ver el mundo desde afuera.

Después de unos minutos por fin sentí que nos movíamos, por lo que me tomé del pasamanos a un lado mío y no quite mi vista del atardecer que me acompañaba hoy.

Al rato nos volvimos a detener en la siguiente estación, sentí como se llenaba de murmullos el vagón y aumentaba la cantidad de gente, al igual que una persona se ponía atrás mío, por curiosidad giré mi cabeza ligeramente, lo suficiente para mirar de perfil a quien fuera que estuviera tan pegado a mi.

¿Será modelo?

Por unos segundos pude apreciar la belleza angelical del chico, su piel era algo clara, su rostro tenía facciones varoniles pero tiernas al mismo tiempo, su mirada tenía un brillo natural que le daba un aire juvenil, su nariz se ajustaba de una manera perfecta en la composición, mientras sus labios rojizos de la medida perfecta parecían de comercial, finalmente su cabello color chocolate, lo suficientemente largo para tapar sus orejas y parte de sus ojos, le daban un toque misterioso.

¿Para qué hablar de su cuerpo?

Era varios centímetros más alto que yo, casi una cabeza a decir verdad, mas tenía un cuerpo fornido que era capaz de cubrirme por completo y tenía puestas prendas que le daban un aire maduro contrastante con la jovialidadde su rostro, ya que eran unos pantalones de tela anchos, una camiseta blanca algo transparente y un chaleco color caramelo también ancho que no le hacia justicia a su silueta.

-¿Tengo algo en la cara?— de pronto escuché una suave voz que se colaba por mi oído y me trajo nuevamente a la realidad.

Es del chico.

-E-eh no-no- negué rápidamente pensando en cuanto tiempo había estado mirándolo.— Lo siento—susurré volviendo mi vista hacia en frente.

Sinceramente, estábamos demasiado cerca, su cuerpo estaba prácticamente pegado al mío, solo unos centímetros nos separaban, por lo que cualquier movimiento brusco podía terminar en un lugar demasiado intimo.

-No te disculpes- estaba hablando demasiado cerca de mi cuello.— No eres lo suficientemente pervertido como para haberlo hecho con segundas intenciones— mi rostro ardió al escuchar semejante frase, al igual que en ese instante noté que el tren volvió a su recorrido.— Me llamo Jeongin- ahora murmuró en mi oído.

Alguien entiérreme por favor.

Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo y algo en mi interior quería que mi cuerpo se pegara por completo con el de este extraño.

-¿No me dirás tu nombre?— su voz volvió a traerme a la realidad.

-Se-Seungmin-hablé como pude.

Sentía el calor salir por cada poro de mi piel, mi pene comenzaba a levantarse poco a poco y por mi cabeza solo pasaban situaciones demasiado bizarras como para ser reales.

¿Qué es esto?

-Un lindo nombre para un lindo chico- puedo jurar que mis rodillas cedieron apenas escuché eso.

-Hm...gracias-murmuré.

Se formó un silencio que más que incomodo era tenso, pero era una tensión netamente sexual, que me estaba ahogando.

¿Es por falta de sexo?

Descarté la idea porque la última pareja sexual que tuve hasta hace un par de meses no estaba mal, pero me gusta mucho más tocarme y satisfacerme a mi mismo, por lo que no era frustración.

—¿Estás incómodo?- volví a mirarlo por mera curiosidad, y fue mi peor decisión que pude hacer, porque la hermosa sonrisa humilde que tenía no hizo más que empeorar mi calentura.

-U-un poco- volví a murmurar tratando de imaginar cosas grotescas para dejar de estar así.

Yo no soy así...?

-Estas muy rojo Seungmin— estaba dirigiendo su mano hacia mi frente cuando el transporte paró abruptamente logrando que mi cuerpo quedara completamente pegado a la placa de plástico transparente frente a mi y que nuestros cuerpos terminaran nuestros cuerpos terminaran de juntarse, la ropa era el único obstáculo.

-Mierda...—susurré para mi mismo cuando sentí su entrepierna rozando mi trasero.

-Lo siento, fui muy descuidado- mi mejilla derecha estaba contra el lugar, por lo que también podía ver la preocupación en sus ojos.

El metro volvió a ponerse en marcha mientras el intentaba acomodarse para alejarnos, pero el vagón estaba completamente lleno provocando que solo siguiéramos haciendo fricción.

-Maldición, no puede ser - volví a decir para mi mismo y me maldije por tener una jodida erección en un momento así.

Gracias a un extraño, solo por estar rozándonos.

—¿Qué pasa?— en todo momento se veía seguro, pero también inocente.

Estaba debatiendo si decirle lo que estaba pasando, de todas formas es su responsabilidad de cierta forma...¿Cómo se atreve a ser tan caliente? Mas puede hacer incomodas las cosas y aún me falta un buen tramo hasta la estación que me deja a una cuadra de mi hogar.

A la mierda todo...

-E-ehm y-yo necesito...ayuda - mi voz era casi inaudible, generando que se acercara más a mi para escuchar.— ¿A-ayúdame con esto? —puse mi mejor cara de perro recién regañado para no ser rechazado.

A pesar de que se veía unos años menor que yo no apareció ninguna expresión extraña cuando escucho mi llamado de auxilio.

-¿Qué necesitas que haga?— respondió seguro.

Un hombre
confiado...fantástico.

-N-no me mires extraño ¿Por favor? - no puedo creer que realmente esté haciendo esto, parece una fantasía sexual.

-Bien, no lo haré— este chico me está desarmando con cada cosa que dice.

-Es-estoy duro— susurré en su oído lo más bajo posible, estábamos rodeado de muchas personas y ya estaba en mi limite de vergüenza.

-¿Quieres que te toque?—habló en mi cuello, su alientorozando la superficie de mi piel hizo que me estremeciera.

-N-no-mordí mis labios para evitar gemir después de que gracias al movimiento del transporte volvimos a rozar. -So-solo muévete— besé su mejilla al terminar.

Sentí la fricción con algo más de fuerza, haciendo notorio que esta ver fue a propósito, además de que fue mucho más excitante ya que su polla estaba dura.

Y muy grande.

—¿Está bien así? — sus movimientos eran sutiles, pero jodidamente sexys.

Estoy teniendo sexo con ropa en medio de un vagón de metro con un desconocido... ¿Quién soy?.

-Muy bien...- jadee para después volver a morder mi labio inferior para evitar que sonidos más fuertes salieran de mi garganta.

De repente sentí unas grandes manos metiéndose bajo mi sweater para tocar mi cintura sin obstáculo alguno, eché mi cabeza haca atrás para apoyarla sobre uno de sus hombres cuando pellizcó suevamente la piel, disfrutando del placentero dolor.

-Resultó que si eres todo un pervertido Seungmin—podía sentir la burla detrás de sus palabras.-Debería sentirme asqueado por esto—no entendí porque, pero la humillante oración solo aumentó el calor en mi interior.— Pero eres demasiado lindo como para rechazarte - me imaginaba la sonrisa socarrona que ocultaba en mi piel.

Sentía como mi ropa se iba humedeciendo cada vez más gracias al liquido pre-seminal, las estocadas en falso se sentían cada vez más potentes y mi cabeza estaba casi en blanco gracias al placer que sentía.

Sus dedos se paseaban por todo mi abdomen y piel lateral, dejando caminos que invisibles que cosquilleaban al punto de provocar tensión en mi vientre.

Se siente demasiado bien.

Su boca estaba en mi cuello, sus dientes succionaban mi piel como si necesitara estar ocupado y volverme aún más loco de lo que ya estaba, llevé mi diestra a mis belfos para no dejar que el grito de satisfacción saliera.

No puedo ser tan débil.

-Adoras esto ¿No es así, Seungmin? - asentí cuando movió lentamente sus caderas. -Responde con palabras— una de sus manos salió de mi ropa y tomó mi mandíbula con la suficiente fuerza como para no dejar marca.

-S-si Jeongin...- jadee dejando que mi cuerpo fluyera con el suyo en busca de más placer.

-Eres un buen chico- besó la comisura de mis labios para después soltar mi rostro y acariciar mi cabello con suavidad, volviendo a un ritmo más acelerado, siendo aún sutil.

Perfecto.

Gracias a que el castaño es de una contextura corpulenta podía escondernos a ambos sin despertar las sospechas de quienes nos rodeaban, estábamos en nuestra burbuja de palabras sucias y placer.

-A-ah joder...— un gemido bajo salió de ms labios antes de que pudiera contenerlo.

-Silencio Seungmin- podía sentir su pene completamente duro entre mis nalgas, claramente con la ropa de por medio.—No quieres que ellos se enteren ¿Cierto? - me dejó el espacio suficiente como para que pudiera ver hacia las otras personas en el vagón.

-Si-si- asentí moviendo mis caderas, ya que él se detuvo. -Por favor sigue- estaba suplicándole a un chico que probablemente sea menor que yo.

¿Cómo llegue aquí?

-Vuelvo a escuchar algo de esa linda boquita y esto se termina- habló en mi oído su mano libre bajo a la superficie de mi pantalón donde se encontraba mi erección.— ¿Entiendes?- mordió el lóbulo de mi oreja.

Mordí con fuerza mi labio hasta sentir el sabor de mi sangre, me estaba tentando para volver a hacerlo, pero estoy tan cerca que solo quiero obtener mi maldito y merecido у orgasmo.

-Entiendo-respondí con toda la confianza antes perdida.

-Así me gusta, chico lindo—su tono era amable.— Ya estamos por acabar, así que aguanta un poco más— sus dedos se aferraron a mi erección por sobre la tela.

Solo un poco más...

La fricción se volvió más agresiva, los mordiscos en mi cuello eran aún más fuertes y la presión sobre mi miembro no hizo más que tensar mi interior y hacer palpitar mi glande.

-Mhg...Jeongin- el sonido rasgado salió desprevenidamente de mi garganta al momento de correrme.

-Joder...— jadeó gravemente en mi oído a los segundos de mi orgasmo.

Nos quedamos juntos por lo que pareció una eternidad, sus brazos pasaron por mi abdomen casi aprisionándome contra su cuerpo, la respiración de ambos fue calmándose a medida que los minutos pasaban y se sentía de maravilla.

A pesar de estar en un lugar tan público, disfrutaba de su cercanía y la sensación que siempre dejaba un buen clímax en mi cuerpo.

Me gusta.

Esta es la última estación del recorrido, le pedimos a todos los pasajeros que bajen del metro, gracias por su atención—se escuchó la voz del conductor.

Para mi suerte esta era mi parada, por lo que no tengo problema, pero...¿Y Jeongin?

Me di la vuelta para quedar frente a él por primera vez en todo el viaje y podía ver su expresión relajada, sin decir nada y por impulso tomé su muñeca para sacarnos del vagón, al igual que de la estación.

-¿Esta era tu parada? —pregunté amablemente.

No sé que es esta sensación de calidez y curiosidad que estoy sintiendo, pero me hace sentir vivo.

—No— negó con esa mirada juvenil.-De hecho, debería haberme bajado a mitad de camino- río al mirar como mi expresión se amargaba.

-Debiste haberme dicho—toda la seguridad que había perdido volvió a mi cuerpo.

-Te veías demasiado lindo así de caliente, no pude evitarlo - la expresión tierna se mantenía en su rostro.

¿Este es el mismo chico que me trató de pervertido?

—Ehm gracias supongo— me acerqué a él, soltando sumuñeca al mismo tiempo.— ¿Puedo saber a donde ibas?— quería saber por si le podía provocar algún problema.

-Solo iba a mi casa— alzó los hombros, mientras que yo me relaje al escucharlo.

Será muy imprudente si...?

—Vivo a una cuadra de aquí - me prestó total atención. ¿Quieres cenar conmigo en mi apartamento?— solo lo dije.

-¿Por qué no?- su sonrisa fue amable.— Además, ya hicimos algo más íntimo, una cena no nos hará daño— rió aún más fuerte cuando el sonrojo cubrió mi rostro.

-Bien- tomé su mano y comencé a caminar, como era lo esperado, él solo me siguió.

Pero por dentro el misterio me consumía a una velocidad casimortal.

¿Por qué se sintió tan bien hacer eso?...Sin eso en mente solo puedo pensar en lo perfecto que encaja Jeongin en mis estándares...¿Me ayudará a descubrir que acaba de pasar?

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Sweeties aquí les dejo el último capítulo de os, espero y les haya gustado, pronto tendremos "G de filas", esperenla, cuidense <3

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