No quería admitir que se sentía aliviado, pero si, lo está. Pasó con enorme éxito y las mayores notas sus exámenes finales del semestre en la facultad, y no podía estar más contento por ello.

En este momento, está barriendo el umbral de la puerta de la tienda de su papi SeokJin; han habido bastantes ventas el día de hoy y por supuesto el polvo nunca falta.

ㅡCariño, deberías de descansar, pareces un máquina y jamás paras.

ㅡNo está de más querer ayudarte papi.

El omega mayor rueda los ojos y ríe, definitivamente su hijo era igual de terco que su esposo, cosa de la cual no debía de extrañarse.

TaeHyung se quita el delantal y va a dejar un sonoro beso en la mejilla de SeokJin, quien aceptó gustoso. Avisa que iría a traer un bocadillo para que ambos pudiesen compartirlo, conocía de un lugar que vendía tartas de muchos sabores un par de tiendas más adelante, cosa con la que SeokJin está de acuerdo.

Sin más, se encamina a su destino muy feliz de poder merendar algo dulce, su adicción favorita en el mundo.

Una nueva persona que ingresa a la floristería llama la atención de SeokJin, quien limpiaba un poco el mostrador con un pañuelo. Hay clientes habituales que vienen la mayoría del tiempo, pero a este jamás lo ha visto en su vida.

ㅡ¿Puedo ayudarlo?ㅡsu voz hace que la pregunta suene más amable de lo normal. El hombre frente a él asiente con algo de pena y no sabe por donde empezar.

ㅡSi, pasaba por aquí y noté su bonita tienda.

ㅡOh, eso es muy dulce de tu parte, ¿Qué necesitas llevar, cariño?

El alfa parece meditarlo por unos segundos y juega nervioso con el anillo en su dedo índice.

ㅡVerá, tuve serios problemas con un omega y deseo darle algo muy especial, quiero que sepa lo mucho que me importa y quizá arreglar las cosas con él. Así que me preguntaba, ¿Qué tipo de flor me recomendaría para regalarle?

Un "Owwww" sale disparado de inmediato de la boca de SeokJin y considera este detalle sumamente tierno. Sabe que un simple ramo de cualquier flor ponen fin a muchas disputas de enamorados que se arrepienten y desean regalar algo como compensación.

ㅡEstás en el lugar indicado. Acompáñame, por favor.ㅡpide con amabilidad, haciéndole señas al hombre para que lo siguiese por toda la amplia tienda.

SeokJin siempre se ha sentido orgulloso del gran repertorio de flores que tiene su tienda, posee una enorme cantidad de cualquier tipo que se le ocurriese hasta a los clientes más exigentes. Por ello, se asegura de almacenar debidamente a sus amiguitas para que no terminen por morir marchitas.

ㅡUn detalle clásico son las rosas rojas, los enamorados las daban en la antigüedad por su simpleza y belleza. Puede que a tu omega le gusten.ㅡríe un poco, embelesado con la singular belleza de este tipo de flor.ㅡPero ¡Qué modales tengo! más bien para empezar, ¿Sabes que tipo de flores le gustan?

El más alto parece dudarlo, y es que en verdad ¡No lo sabía! Es decir, podría ser cualquiera, pero quiere que el ramo sea perfecto.

ㅡNo lo sé, pero él es bonito y muy amable.ㅡcomienza a hablar sin pensarlo, las palabras sonaban sinceras y parecían salir de su corazón.ㅡTambién es divertido y le encanta lo dulce, su aroma me hace recordar a un fresco postre de chocolate blanco y tiene los ojitos más hermosos que he visto, parece que brillan al estar muy feliz. Aunque he sido un idiota con él, sabía perdonarme y hacerme sentir mejor con sus abrazos.

ㅡBasta hijo, no sigas porque me harás llorar.

Con rapidez, finge secarse una lágrima y no puede encontrarse más conmovido. Con las características que le acaban de dar del omega, imaginó una combinación perfecta para un ramo más que especial. Seguro lo amará.

ㅡTengo lo ideal para ti.ㅡno tarda mucho, y aunque sus piernas sean cortas, va hasta el otro lado de la tienda, entrando a su pequeño vivero tras una cortina especial. Luego de unos minutos vuelve con dos tipos de hermosas flores.ㅡEstos son claveles, delicados y muy agraciados, van muy bien de la mano con estas flores de chocolate. Su nombre es engañoso porque su aroma es más bien como de vainilla dulce, pero son el complemento que necesitas.

El contrario no sabe qué decir. Está maravillado por el fino gusto de este hombre por las flores, el aroma que desprenden es magnífico. Es la combinación que buscaba.

Le recuerda a tanto al omega, sin dudas.

Sin más, SeokJin le avisa que le preparará el arreglo floral, y estará listo en unos minutos. También pregunta si quiere hacer una dedicatoria especial para su amado, cosa a la que no se negó.

ㅡSi, él se llama Taehyung.

Los marrones orbes de los ojos de SeokJin se hicieron tan pequeñas como un diminuto punto, ¿Acaso escuchó bien?

Pero, ¿De qué debía preocuparse? Hay cientos de miles de TaeHyung's en toda Corea, ese nombre no era exclusivo sólo de su cachorro de 21 años.

Toma la tarjeta más bonita y escribe el nombre correspondiente de manera elegante. Le ofrece al contrario el bolígrafo por si quiere escribirle un mensaje a su gusto. Este termina por acceder y al final, paga con mucha ilusión el bonito y gran ramo de flores, es simplemente precioso.

Iba a cruzar el umbral para salir de la tienda cuando de repente, la puerta se abre primero ante él, resonando y revoloteando la campanilla. JungKook se impresiona tanto de ver a quien buscaba allí, frente a frente.

ㅡ¿J-JungKook? ¿Qué estás haciendo aquí?

TaeHyung tiembla involuntariamente al ver de nuevo a JungKook y casi deja caer las bolsas en las que traía las tartas por la sorpresa, no puede creer que esto esté sucediendo en la tienda de su papi Jin, ¡Es un total desastre!

ㅡTaeHyung, yo sólo quería comprarte algo porque me recomendaron el lugar y...ㅡmentira, JungKook sabía que él aparentemente trabaja allí cuando lo descubrió hace un tiempo, por eso hizo su aparición en la floristería. Desde un principio contaba con que el omega estuviese adentro cuando él llegara, así podrían hablar rápidamente.

Sin embargo, todo le salió al revés.

SeokJin no sabe qué decir y sólo observa todo desde atrás, ¿Este chico estaba cortejando a TaeHyung acaso?

Y peor aún, ¿Por qué él no estaba enterado?

El alfa le extiende el bonito ramo que acaba de comprar hacía unos segundos atrás, y el omega lo toma con nervios, oliendo dichas flores con satisfacción. Son sus favoritas.

A su mente sólo viene el recuerdo de la última vez que se vieron; JungKook lo llevó hasta su casa y terminó llorando entre sus brazos como un pequeño niño.

ㅡPor favor, perdóname. Te dije que no iba a dejar de insistir.

ㅡJungKook... No debiste venir hasta aquí sólo por mi.

ㅡNo, y lamento si estoy armando una escena, te aseguro que hablaré con tu jefe para que no te despidan o te regañen por esto.ㅡle dice casi en susurro.

Contrario a lo que espera, TaeHyung ríe por el último comentario, pero JungKook no sabe qué es tan gracioso, ¿Se está burlando de él?

ㅡÉl no es mi jefe si es lo que estás pensando, tampoco trabajo aquí.ㅡhace una pequeña pausa, dejando más confundido a JeonㅡEs mi papá, y lo ayudo con su tienda cuando tengo tiempo libre.

JungKook se tensa y mira al otro omega por sobre el hombro de TaeHyung, quien permanece de brazos cruzados y con una sonrisa bastante burlona en su rostro a decir verdad. Dios, no pensó que conocería a uno de los padres de TaeHyung tan rápido y en esta incómoda situación.

ㅡOh, yo... No sé qué decir.

ㅡNo te preocupes, y gracias por las flores.ㅡapega el regalo a su pecho y lo huele una vez más.ㅡSon muy bonitas.

Por fin una sincera sonrisa aparece en sus labios y JungKook se siente muy feliz por ello, ya al menos le aceptó las flores. Es buena señal.

ㅡCreo que ya me voy... Te veré luego, y fue un gusto ¿Señor Kim?ㅡse despide rápido de ambos Kim, saliendo disparado de la floristería. Al alejarse un par de metros, suspira y siente como su corazón retumba en su pecho. Está muy nervioso.

Al quedar solos, SeokJin comienza a reír encantado, pudo atar cabos y darse cuenta de que este era el alfa para el que TaeHyung trabajaba antes, también por el que sufrió y lloró mucho. Rescata al menos el hecho de que él trata de enmendar las cosas, o eso parece.

ㅡAsí que... ¿Ese es el tal JungKook? ¿Eh?

Las mejillas del joven permanecen coloradas y aún mantiene una tonta expresión de felicidad en su semblante. El silencio de TaeHyung fue suficiente como para responder a su pregunta.

ㅡSi papi, él es el idiota que me rompió el corazón.ㅡno sabe qué hacer en este punto, si es cierto que aún se encuentra herido por todo lo que ha sucedido entre JungKook y él, pero muy en el fondo, admite que quiere darle al menos una oportunidad.

No quería equivocarse con JungKook, desea que en verdad todo ese repentino interés que está mostrando sea real.

SeokJin deja su lugar y va junto a TaeHyung, para así darle un gran abrazo, rezando para que su hijo piense con claridad las cosas y decida lo mejor para su bien.

Los dos omegas vuelven al trabajo, pero casi de inmediato, algo llama la atención de TaeHyung; en el ramo que JungKook le dio hace un rato, poseía una especie de pequeña tarjeta que no notó antes, así que la toma entre sus manos y procede a leerla.

"Lamento no haber sido el mejor alfa desde el inicio, pero espero que estas flores te gusten, porque apenas las olí, me recordaron a ti."

El amor es complicado, no puedes escapar ni esconderte de él, siempre terminarás sucumbiendo.

Muerde su labio inferior con fuerza y echa su cabeza hacía atrás, relajándose en el cómodo sillón de su casa mientras tiene un cigarrillo encendido en su mano derecha.

Exhala el humo y observa al techo, pensando en todo y a la vez nada. A su mente sólo podía llegar la expresión de ilusión que tenía TaeHyung al recibir aquellas flores.

Se siente un desconocido con su propio cuerpo, es decir, claro que sabe que ha cambiado radicalmente desde que aquel omega que le hizo creer que era un beta, entró en su vida, pero aún así no se acostumbra a ello. Y todo se ha vuelto más complicado con la situación con LuHan.

Si hubiese tenido el conocimiento de que el chico era un problema, jamás se le hubiese acercado en primer lugar.

Pone algo de música desde su teléfono que está conectado al estéreo en la sala, y reproduce su playlist favorita. Suele despejarse y sentirse mejor al ejecutar esta simple acción.

En verdad no puede hacer nada por cambiar el pasado, mucho menos el haber tenido un hermoso cachorro, no se arrepiente de que RenJun haya llegado a su vida, pero también quiere a TaeHyung, él y su alfa lo desean de todo corazón.

Quizá y algún día termine cediendo y quiera a RenJunnie tanto como él está aprendiendo a hacerlo.

Pocos segundos después, suelta un pequeño alarido de dolor y deja la colilla del cigarrillo en el cenicero a su lado, se acaricia las sienes reiteradas veces, cierra los ojos con fuerza y su respiración se siente pesada.

Tan pronto como estos síntomas aparecieron, dejaron sin habla a JungKook.

Esto sólo le pasaba cuando... Oh no.

Debe de calmarse y pensar con claridad, pero las imágenes de TaeHyung en su cabeza no lo dejan en paz, tan sólo hace que se sienta peor. Quiere gritar pero sólo salen alaridos.

La habitación es un desastre de feromonas, su aroma a café inundó cada rincón sin que se diese cuenta.

Por un demonio, lo que le faltaba.

Sus celos no han sido tan fuertes, incluso cuando estaba junto con LuHan era igual, no tenía la necesidad de usar supresores porque sabía controlarse. Incluso su padre le aconsejaba qué hacer en estos casos y solía funcionarle.

¿Esto explicaba el por qué su carácter ha estado de la mierda últimamente?

Indudablemente, ahora se siente tan necesitado que debe hacer algo, y muy rápido.

No lo piensa más de dos veces y tantea con su mano la mesa a su lado, buscando con éxito su teléfono el cual no tardó en tomar y buscó en el directorio el nombre de la persona quien probablemente le está causando esto.

Rápidamente le hace una llamada y espera con mucha ansiedad, tratando de no volverse loco. Rezaba porque atendiese el teléfono.

ㅡ¿Hola?ㅡcontestan al otro lado de la línea, JungKook suspira y gruñe de manera involuntaria y casi inaudible.ㅡ¿Quién es?

ㅡTae, s-soy J-JungKook... Necesito tu ayuda.

ㅡ¿Pasó algo? ¿Cómo conseguiste mi número?

ㅡEso no importa, por favor, ven rápido. Te daré la dirección de mi casa.

Ahora que lo piensa, esto podría ser una mala idea.

Una muy mala idea.