Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

27

Miro la puerta en cuanto él entra por ella, la profesora le da una mala mirada por llegar diez minutos tarde, él se disculpa con una reverencia y se dirige a su asiento a mi lado.

Cruzamos miradas pero casi enseguida vuelvo a poner atención a la explicación de la profesora de química.

-Ara... -Murmura Jungkook y yo frunzo el ceño- Lo siento mucho, no debí...

-Podemos hablar de esto después Jungkook -El suspira y yo me permito mirarlo- No te culpo por ir con la chica que te gusta -Me encojo de hombros- No estoy molesta.

Él me frunce el ceño y antes de que pueda responder vuelvo a girarme hacia el tablero, centrando toda mi atención en la explicación.

Me paso el resto de la clase escribiendo en mi cuaderno, a pesar de que percibo la mirada de Jungkook sobre mi, cuando el timbre suena, suspiro y guardo mis cosas, no tengo intención de huir así que espero a que él guarde las suyas antes de salir del salón con él a mi lado.

A la distancia veo a Taehyung y a Jimin, quienes salieron primero, me pregunto si Jungkook ya habrá sido excluido del poderoso trío o si podría volver a integrarse cuando él lo desee.

-No me gusta Subin -Con el ceño fruncido me detengo y me giro a ver a Jungkook-

-¿Es lo primero que vas a decirme?

Ciertamente no está cerca de lo que esperaba, suspiro y le digo con sinceridad:

-Lo siento, pero no te creo -Digo antes de volver a caminar, él me sigue el paso-

-Bien, se lo que parece y se lo que he dicho antes y si, antes me gustaba, me parecía atractiva, no podría negar que es linda, me agrada y todo, pero ya no me gusta.

Me detengo de nuevo y lo miro de frente.

-¿Por qué? -Pregunto sinceramente curiosa, me cruzo de brazos-

Él desvía la mirada y luego se encoge de hombros.

-¿Tiene que haber una razón? -Entrecierro los ojos y él suspira- Me hace sentir patético -Dice avergonzado- No puedo creer que esté discutiendo con mi mejor amigo por una chica, y no trato de decir que no valga la pena, es solo que conozco a Taehyung desde los cinco años y no puedo creer que nos hayamos agarrado a golpes en su fiesta por ella, se supone que sería un juego limpio, pero con el tiempo todo ha ido perdiendo sentido.

-¿Te estás retirando entonces? -El asiente varias veces-

-No tengo razones para seguir con esto, Taehyung y Subin pueden estar juntos, no voy a intervenir.

Esto es muy extraño y tengo que admitir que parte de mí aún no le cree, es decir, comprendo por completo sus razones, son totalmente válidas, pero creo que más bien se está haciendo a un lado por el bien de su amistad con Taehyung, que sería algo que yo haría si me encontrara en tal situación, aún así asiento.

-¿Y por que me estás diciendo todo esto? ¿De repente tienes la necesidad de desahogarte con alguien? -El resopla-

-Porque ahora entiendo lo que quisiste decir el domingo, tú perdón se siente un poco vacío si me lo das tan fácil, sobre todo si crees que la razón por la que te deje es porque me gusta Subin.

-No se si lo olvidas, pero ella vive frente a mi, vi tu auto estacionado.

-No digo que no haya ido con ella, solo digo que no fue porque estuviera enamorado, solo fue un tema delicado.

Sé que el tema delicado no es el mismo tema delicado que yo conozco o Subin no habría preguntado si se lo iba a contar a Jungkook, tengo curiosidad y realmente no me gusta no saber, pero no quiero usar mi posición para obtener información.

-Está bien, para que te perdone tendrás que comprar mi almuerzo hoy -Me encojo de hombros- Un pequeño precio a pagar por nuestra amistad.

Jungkook sonríe y yo ruedo los ojos, es muy fácil mantenerlo contento. Pasa sus brazos por encima de mis hombros y me acompaña a la siguiente clase.

Cuando salgo de clase de filosofía, sin tener idea porque me resulta entretenido tanto leer y escuchar los ensayos que el profesor nos manda a hacer me encuentro de frente con Subin.

-Oh, estaba a punto de ir buscarte -Digo y ella me toma de la muñeca y me arrastra con ella-

Noto como la gente nos mira, no sé si porque es inusual vernos juntas ahora o porque es inusual que Subin luzca tan desesperada.

No noto a donde nos lleva hasta que estamos dentro de un espacio reducido con olor a trapeador, arrugo la nariz con disgusto.

-Que innovador -Comento viendo al rededor a todos los utensilios de limpieza-

-No encontré un mejor escondite, a penas y conozco la escuela.

La miro a ella y a su cabello brillante.

-Me pregunto porque buscabas un escondite en primer lugar. -Ladeo la cabeza-

-No quiero que nadie se entere de eso -Dice con obviedad y yo sonrío-

No estoy segura de si "esto" incluye el plan que tengamos o incluye cualquier interacción que tuviera conmigo, de cualquier manera no me molesto en preguntarle.

-¿Entonces, por qué querías hablar conmigo? -Le pregunto para que sea directa-

-Creo que encontré la ubicación de mi padre, fue lo que me pediste por mensaje ¿No es así? -Asiento lentamente-

-¿Y? ¿Por que luces tan alterada? -Ella suspira-

-Eres menor de edad, y el ha pasado los últimos dos días en un casino clandestino, no creo que pueda hacer esto por mi propia cuenta.

Esperen un momento...

-¿Por que hablas como si yo fuera la única menor de edad? No me gusta como lo haces sonar -Rueda los ojos-

-Creo que es bastante obvio que no soy menor de edad -Suspira y desvía la mirada- Tuve que repetir un año por toda esta situación familiar.

Asiento y decido no comentar nada más al respecto.

-Bueno... -Murmuro y aunque no debería traer esto a colación lo digo- Tengo una identificación falsa, así que no debes preocuparte por hacer esto sola.

Ella se sorprende, su expresión me lo dice.

-¿Como es que...? -Niego con la cabeza mientras me acerco a la puerta-

-Si yo tuve el cuidado de no hacer preguntas esperaría que tú hicieras lo mismo, nos vemos a la salida y por favor ya que no fingimos agradarnos la una a la otra no me hagas esperar.


Miro al rededor, le dije a mi madre que me quedaría en casa de una amiga, no tiene que saber que no es cierto y menos que no cuento con una amistad del sexo femenino, al menos no aún, ni que de hecho estaré en compañía de lo más alejado a una amistad.

Espero a Subin un par de cuadras lejos de nuestras casas, el barrio es en general muy tranquilo y como hasta ahora está anocheciendo no hay mucho flujo de personas, por eso es fácil verla cuando camina en mi dirección con una maleta a sus espaldas, una como la mía.

-¿Todo listo? -Digo a modo de saludo y ella asiente, empezamos a alejarnos más de nuestras casas-

-Le dije a mi madre que me quedaría  dormir en casa de una amiga para ir a la estación de autobuses mañana juntas -Asiento-

-Hice lo mismo, supongo que no es extraño por ser una noche antes del campamento.

El estúpido campamento al que no tenía muchas ganas de ir, pero de cualquier forma, no tenía muchas opciones.

-Iremos en metro, podemos dejar el equipaje en los casilleros y volver luego de que hagamos todo lo que necesitamos.

-Me parece bien... Oye, gracias por ayudarme -Dice en un murmullo- A pesar de que ni siquiera es tu problema -Me encojo de hombros-

-Ya sabes que no lo hago por ti -Digo a pesar de que saboreo la mentira en mi boca- Es para evitar un mal más grande, si las cosas no salen como yo quiero siempre puedo decirles la verdad a Taehyung y a Jungkook

Ella suspira, algo me dice que no me cree, pero termina asintiendo.

-¿Crees que todo esto va a funcionar? -Pregunta tras unos minutos de silencio, lo pienso y me encojo de hombros-

-Si no lo hace hoy, lo hará mañana o al día siguiente, lo intentaremos hasta que funcione, no me rindo fácilmente -Digo con sinceridad-

Al menos ya no quería ser el tipo de persona que se rendía fácilmente.

Dejamos nuestro equipaje en los casilleros de la estación del metro y luego nos dirigimos a un barrio de clase baja que nunca antes había visitado.

-¿Como descubriste la ubicación de tu padre?

-Tiene un tarjeta de crédito a mi nombre -Dice avergonzada- Me llegaron mensajes con el nombre del lugar en donde ha estado realizando las transacciones, internet hizo todo el trabajo.

-Bien, confiemos en que todo va a salir bien.

-¿Y si no lo hace? -Suspiro-

-Confiemos en que si lo haga.

🌟

Al menos no me siento mal porque algunas otras personas puedan salir afectadas, este lugar huele a azufre, nos dejaron entrar tan fácilmente que no tuve que mostrar mi identificación falsa y estoy más que segura que el lugar rompe al menos cinco reglas de sanidad.

No le digo eso a Subin, no quiero que se sienta más avergonzada de lo que ya ha demostrado estar.

Primero nos paseamos juntas por el lugar, como es un lugar de apuestas a menudo intentan arrastrarnos a las mesas para que apostemos contra ellos, pero ya estamos probando demasiado nuestra suerte al venir a este lugar y las dos estamos tan nerviosas que solo podemos negar con la cabeza.

-Ahí está -Dice Subin señalando con su cabeza a una mesa del fondo, veo a su padre en el medio, riéndose a carcajadas mientras cuenta dinero-

-Al parecer le va bastante bien -Ladeo la cabeza- Lastima que no sepa administrar el dinero.

-¿Qué sigue ahora? -Me pregunta, aunque sé que lo hace por los nervios, porque ya le explique el plan dos veces-

-Solo mantén tu cámara lista y sígueme en cuanto salga de aquí ¿Está bien? -Ella asiente y se pasa las manos por el pantalón- Mantente alejada solo por si acaso, tu padre no me reconocería, pero sin duda lo haría contigo, asegúrate de que nadie te siga a ti.

Tomo aire profundamente y me dirijo hacia la mesa en la que está el padre de Subin con una sonrisa, por suerte no tardan en invitarme a jugar, esta vez acepto, incluso aunque no sé jugar cartas, no importa, apuesto veinte mil wons esperando no parecer tacaña y esperando que mi cuenta bancaria no se desequilibre con ese gasto no planeado.

Un hombre con la barba sucia me sonríe, no sé si quiere ser encantador o causarme miedo, en cualquier caso no le presto mucha atención, a pesar de que logró la segunda opción.

-Las niñas bonitas no suelen venir por este lugar -Dice una mujer de piel arrugada, tiene un labial rosa chillón que de alguna manera terminó en sus dientes frontales-

Me aclaro la garganta mientras recibo las cartas, las miro con expresión de interés, aunque no tengo ni idea de si es una buena mano, trato de sonreírle a la señora.

-¿No lo hacen? Bueno, tal vez no para venir a jugar juegos de azar, pero tal vez si para conseguir otras cosas -Digo como si nada, tiro una carta cualquiera cuando es mi turno- Vine aquí porque me recomendaron este lugar.

-¿Recomendado? -Gruñe el padre de Subin y yo apenas lo miro cuando asiento- ¿Alguien de tu edad?

-Así es, dijeron que podría encontrar otras formas de divertirme, pero la verdad es que no tengo idea de cual es el procedimiento a llevar a cabo, esperaba que alguien pudiera brindarme algo de ayuda, pero la gente no se ve muy amigable.

Dejo que en mi rostro aparezca una pequeña sonrisa, cuando es mi turno tomo una carta.

-Creo que te equivocaste de lugar -Dice un hombre que está usando gafas oscuras, a plena noche, en un lugar interior- No hay ese tipo de diversión...

El hombre se calla cuando hay un ruido debajo de la mesa, el padre de Subin le da una mala mirada, supongo que acaban de patearlo para dejarle claro que no es como quiere que procedan.

-La diversión que buscas no es tan barata -Sonrío-

-Nunca pensé que lo fuera, no es divertido si cualquiera la puede conseguir ¿No es así?

El hombre no sonríe y yo trago saliva ¿Desde cuando soy tan buena actriz? ¿Alguien puede recordarme de nuevo, porque estoy haciendo esto? Cuando el rostro de un chico sonriendo aparece en mi mente me abstengo de rodar los ojos, sé que no soy capaz de admitirlo, pero eso no quiera decir que pueda ignorarlo del todo.

Se supone que desenmascararía a Subin para que Jungkook se alejara de ella, pero al estar haciendo esto dudo que lo que quería pase, no estoy segura de como sentirme al respecto, se supone que no debería importarme, pero no puedo evitar que una parte de mi hubiera querido solucionar esto de otra manera, sin embargo Subin seguiría haciéndolo y su familia seguiría sufriendo y mi consciencia nunca estaría tranquila.

-Me retiro -Dice el padre de Subin sacándome de mis pensamientos-

Nuestras miradas se cruzan y hace un asentimiento a penas perceptible mientras se retira de la mesa, trago saliva.

-También me retiro -Digo mientras tiro las cartas y ahora soy veinte mil wons menos rica-

Me levanto y lo sigo por un pasillo, está apenas diez pasos adelante de mi, no miro hacia atrás, pero sé que Subin nos está siguiendo, puedo sentir su presencia, al menos espero que sea ella.

Sigo con mi actuación de niña rica en busca de drogas, en realidad no es tan difícil, solo imito lo que he visto, espero que me salga con naturalidad.

El hombre abre una puerta que lleva al exterior, cuando salgo tras el lo veo en las esquina del callejón, apoyado en la pared mientras enciende un cigarrillo, me acerco a el.

-¿Quieres algo en específico? -Pregunta mirándome de arriba a abajo- ¿O lo más popular?

Dice sacando varios sobre, algunos con polvos de colores, otros con pequeños stickers que reconozco.

-Dame lo mejor que tengas -Digo con confianza- Y no te preocupes por el precio.

-Que fácil decirlo -El sonríe y esta vez no puedo lucir tan segura como antes cuando llega otro hombre por detrás y me toma de los brazos-

-Lastima que hayas venido sola, no tengo razón para venderte la mercancía si puedo obtener el dinero fácilmente ¿O si?

Frunzo el ceño como si estuviera ofendida, aunque en realidad estoy asustada. Espero que Subin haya grabado todo, espero que al menos esto valga la pena. La parte buena de todo esto fue que no traje tanto dinero, porque en realidad no creía que fuera a utilizarlo, aún así me remuevo en los brazos del hombre que huele a sudor.

Me estremezco aún más cuando escucho una voz femenina en el callejón, una voz que no pertenece a Subin.

-¿Quién te dio el derecho a tocarla? -Dice mientras comienza a caminar, sus tacones haciendo eco por todo el callejón-

El padre de Subin la mira y suspira, yo por otro lado no soy capaz de levantar la mirada.

-Suéltenla -Dice cuando llega hasta nosotros, solo veo sus pies enfundados por unos zapatos de tacón blanco-

El hombre me suelta de inmediato sin titubear, levanto la vista y la miro a los ojos, su rostro hermoso y su cabello sedoso y una sonrisa amable, estira su mano y acaricia mi cabello.

-Deberías salir de aquí, no es bueno venir sin compañía.

Ni siquiera espero una segunda oportunidad, salgo corriendo por el callejón a pesar de que no tengo ni idea de a donde va a llevarme o donde diablos está Subin, el corazón me late en los oídos y no soy capaz de escuchar mi teléfono que vibra en mi bolsillo trasero.

Escucho un claxon y por un segundo pienso que han venido por mi, que dejarme ir fue solo una manera de divertirse para luego cazarme. Pero cuando veo el deportivo rojo quiero gritar de alegría.

Se detiene frente a mi solo un segundo, abren la puerta y al siguiente ya estoy dentro, el auto arranca enseguida.

Miro al rededor, Subin está en el asiento del copiloto, Taehyung maneja y junto a mi Jungkook me habla mientras revisa todo mi cuerpo en busca de alguna herida.

Miro a Subin que no ha dejado de mirarme desde que me subí al auto.

-¿Lo tienes? -Lentamente un sonrisa adorna su rostro mientras asiente-

-Lo tengo -Dejo salir una exhalación mientras me dejo caer en el asiento por fin, Jungkook niega con la cabeza-

-Ustedes dos están locas.

No sé si sabe lo del plan, probablemente si, pero no digo nada.

-¿Los llamaste? -No lo digo en forma de queja cuando le pregunto a Subin, después de todo si no fuera por eso no tengo ni idea de que sería de nosotras o más específicamente de mi-

-Pensé que sería mejor que volver hasta el metro caminando -Dice encogiéndose de hombros-

-¿Te divertiste jugando a la heroína? -Me pregunta Taehyung mientras me echa un vistazo por el espejo retrovisor-

-Púdrete -Le digo y cierro los ojos mientras ignoro que desde que entre en el auto Jungkook está sosteniendo mi mano- ¿Y tu como te enteraste? -Digo, abro los ojos y lo miro, por alguna razón parece contento con mi atención-

-Estaba con Taehyung cuando Subin lo llamó -Ladeo la cabeza- Queríamos arreglar las cosas -Asiento, como si no necesitara los detalles, lo cierto es que me gustaría escucharlos.

-Iremos a la estación por sus maletas y luego las llevaremos a sus casas.

Subin y yo nos miramos cuando Taehyung dice eso.

-No gracias -Dice ella- Buscaremos donde quedarnos.

-No voy a preguntar porque no pueden ir a sus casas -Dice Jungkook sacudiendo la cabeza- Pero tampoco dejaré que se queden en cualquier lugar, lo solucionare.

No digo nada y tomo aire profundamente, disfrutando de esta pequeña alianza, aunque en el fondo de mi mente solo está ese rostro perfecto y eso sonrisa amable que probablemente me había salvado la vida.

N.A.

Well, no sé qué tan necesaria sea esta aclaración, pero solo por si acaso; en Corea todo el tema de drogas es aún más grave que en otros países, por lo que las sanciones son más duras, además del factor penal hay consecuencias económicas, por lo que aquí este caso sería serio y el padre de Subin no saldría tan fácil de esta.

En fin, a parte de eso no tengo mucho más que decir que recalcar el hecho de que Subin no se merece la ayuda de Ara, aunque eso no significa que ella no haya hecho lo correcto, en conclusión: Ara es mejor persona que yo.

Ya entre a clases de nuevo, así que no estoy segura de que pasará a continuación, esperaría tener el tiempo suficiente para actualizar, pero el futuro es incierto, sin embargo haré todo lo que esté en mis manos, sin decir más les deseo una linda semana y les mando muchos besos desde Venus <3.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro