Llevo ya dos días en recuperaciones desde que me encontraron tirado en mi habitación convulsionando, mi cuerpo ya se encuentra mejor y diariamente recibo visitas de Daniela o Alizee quienes más que nada vienen a darme información de lo que sucede en el resto del hospital psiquiátrico mientras me encuentro internado en la sala de recuperaciones

Las tardes pasan lentas mientras las paredes blancas de la sala me enferman con cada día que pasa

Un doctor ingresa en la sala y comienza saludándome e intentando entablar una conversación conmigo

—Buenos días Salem, ¿cómo te siente el día de hoy?- el médico me observa como si fuera un crio hospitalizado

—Me encuentro bien, quiero irme lo antes posible de aquí- intento sentarme en la cama pero el médico me pone su mano en el hombro y mueve su cabeza en señal de desaprobación

—No podrás irte hoy, Salem. Hemos hecho exámenes de tu condición física y los resultados son un tanto preocupantes- el doctor toma asiento junto a mi cama y abre una carpeta la cual me facilita en mis manos y al abrirlo me encuentro unos exámenes.

"Exámenes clínico rutinario:

-Ingreso del paciente:

· Paciente ingresa luego de ser encontrado en su habitación convulsionando mientras sangraba por sus fosas nasales

-Resultados del examen médico de sangre:

· La toma de sangre del paciente mostraba normalidad ante los exámenes de glucosa y colesterol.

-diagnostico final del paciente:

· Paciente, según los exámenes realizados se detecta que sufrió una arritmia severa lo cual le ocasiono la pérdida de conocimiento y al caer, el impacto ocasiono un traumatismo encéfalo craneal lo cual derivaría las convulsiones que presentaba al momento de encontrarlo en su habitación"

Miro el diagnóstico del doctor y este solamente me observa y escribe en una libreta de bolsillo mientras su expresión en su rostro se torna seria y sin emociones

—No eres el primer paciente que llega aquí por motivos de arritmia- el médico me quita la carpeta de mis manos y mientras se pone de pie logro divisar detrás de el a una de las sombras mirándome fijamente para luego desaparecer

—¿A qué se debe mi condición Doc., acaso una arritmia no es solamente algo que sufre uno normalmente por agitarse?

—Ninguna arritmia o padecimiento de salud es normal, Salem. Lo tuyo es un caso preocupante, tu cuerpo además de lo ya escrito en el informe, tenía múltiples contusiones leves, las cuales me hacen pensar que tu estrés y arritmias se deben a golpizas o abusos por parte de otros internos de este hospital

La sombra detrás del doctor comenzaron a chillar y el medico al momento de percatarse de que no lo miraba a él, volteó rápidamente y luego regreso su mirada a mí con intriga

—¿Qué es lo que observas detrás de mí Salem?, no me estabas observando a mí- el medico se pone de pie e intenta acercarse a mi

—Te pido que no te me acerques más, lo que yo diga no cambiara nada, pero te pido que me dejes ir. Necesito regresar con los míos lo más pronto posi...- los ojos del doctor se ponen de color negro y una sonrisa dantesca se curva en su rostro mientras grita y se convulsiona.

Las enfermeras ingresan al escuchar al doctor gritar y al aproximársele este saca unas tijeras y las atraviesa en la garganta de la enfermera más joven y esta cae retorciéndose mientras sus gritos gorgorientos por la sangre se combinan con los gritos de desesperación de la otra enfermera la cual escapa mientras el medico ríe y ríe.

El medico se abalanza sobre mí con las tijeras que saco del cuello del cadáver e intenta cortarme mientras sujeto sus manos

—Pequeño bastardo, deja que termine todo, ¿no es eso lo que querías?- Forcejeo con el mientras siento el filo de las tijeras tocar mi rostro

—¿De qué hablas, solo te pedí salir de aquí?- el doctor comienza a reír y durante un segundo logro ver a las sombras detrás de él riendo y moviendo sus grotescas bocas mientras el doctor habla ¾¡déjenme ir malditas, dejen al doctor en paz y solo lárguense!

—¡Salem, crees que es tan fácil, dime Salem!.... Dímelo Salem, Salem, ¡Salem, reacciona!

Golpeo al médico y este cae, su rostro esta norma, sus ojos no están negros y su expresión es de sorpresa ante mí accionar

—¿Estás bien Salem?, tus ojos se tornaron blancos y caíste de la cama, te volvimos a subir a tu cama e intentamos hacerte reaccionar

—¿Intentamos?- volteo y me percato de las enfermeras y asistentes rodeando mi cama mientras me miran con terror

—Mientras estabas en ese estado comenzaste a hablar en una forma incoherente y en un dialecto extraño, ninguno supo que es lo que decías- el doctor se incorpora y comenzó a acomodarse las gafas para indicarles a los demás que se retiraran

—Doc., necesito irme de aquí lo antes posible, de lo contrario algo horrible les pasara a todos ustedes- el doctor se aproxima a la puerta cuando se detiene de golpe y se voltea en mi dirección y abre sus ojos los cuales están negros completamente

—¿Crees que escapando del hospital estarás libre de nosotros bastardo?, no eres más que una hormiga en la mira de nuestra lupa. Y créenos que nos gusta torturar a las hormigas, sobre todo cuando se resisten- el medico convulsiona y cae al piso y las enfermeras se aproximan a su cuerpo para socorrerlo y yo solo puedo observar y reproducir las palabras de las sombras a través del médico en mi mente una y otra vez

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08:00 AM

La noche pasó lenta mientras mi cerebro procesaba la imagen del doctor y las palabras de las sombras a través de él

Las enfermeras ingresan y me preguntan si estoy bien, mis ojos las observan pero no soy capaz de hablarles, cada vez que intentaba hablarles las sombras las rodeaban y me observaban esperando su momento de atacar

—Buenos días Salem, ¿cómo te encuentras hoy?- la enfermera me observa expectante a que le hable, pero detrás de ella las sombras acarician su rostro y una de estas posiciona su mano en el cuello de la enfermera mientras chillan y convulsionan excretando un fluido sanguinolento de su boca

Me cubro con las sabanas y finjo dormir para que la enfermera se marche. La puerta se cierra y antes de destaparme escucho el seguro de la puerta accionarse, me destapo y la enfermera esta frente a mi sin su vestimenta de trabajo con sus pechos solo cubiertos con la delgada tela de su sostén.

La enfermera avanza en mi dirección y yo intento ponerme de pie cuando esta se sube a mi cama y toma mis manos con las suyas y sus labios tocan los míos robándome un beso, sus labios fríos y su cálida saliva inundan mi boca y calienta mi cuerpo mientras siento la necesidad de hacerla mía. Mis manos son liberadas y desprendo su ropa interior revelándome sus pechos pálidos y sus aureolas rosas danzando frente a mí y a medida que acerco mi boca a sus pechos logro distinguir la risa de las sombras y entiendo que esto es obra nuevamente de ellas. Aparto a la enfermera de encima de mí y esta cae contra suelo generando un golpe seco con su cuerpo

Me incorporo de pie junto a mi cama, un ardor en mi costado me hace estremecer y me percato de que mi ropa esta manchada de sangre y una punta aparentemente metálica sobresale de mi costado, a medida que saco el objeto extraño me doy cuenta de que es el gancho del sostén de la enfermera lo que tengo incrustado

—Eres más difícil de dominar que tus amigos, pequeña escoria- la enfermera se pone de pie y sus uñas rasguñan sus pechos mientras esta habla con una voz similar a la de las sombras

—Son unas hijas de puta, no dejare que me afecten otra vez- exclamo mientras con mis manos presiono el área donde tenía clavado el gancho del sostén

Se escuchan los pasos a toda prisa detrás de la puerta y golpes y gritos dirigidos a mí y a la enfermera

—¡Será mejor que dejen ir a la enfermera, ella no tiene nada que ver aquí!

—¿Qué crees que pensarían si observan este cuerpo desnudo en tu habitación?- sonríe y aprieta sus pechos de una manera casi grotesca y salvaje

Me agacho y me acerco en dirección del gancho que me saque de mi costado y lo tomo, con un movimiento suave posiciono la punta en mi oído

—Tienen cinco segundos para dejar el cuerpo de la enfermera tal cual como estaba antes de que lo tomaran o acabo con mi vida ahora mismo y su diversión se acabara aquí

El cuerpo de la enfermera cae con un golpe seco y detrás se ven las sombras y a pesar de no tener ojos puedo notar como sus miradas se me clavan

—Ustedes tiene miedos igual que yo, la diferencia es que yo tengo gente que proteger

"¡Abran la puerta en este instante, es una orden!", se escucha la voz Cristian el guardia en jefe de la sección médica, el cual intimida con su metro noventa de altura

Me aproximo a la enfermera y la cubro con mis sabanas mientras las sombras gimen y gritan a mí alrededor ocasionándome un dolor de cabeza constante. Las sabanas cubren el cuerpo de la chica y yo me apresuro en abrir la puerta y soy derribado en el momento en que quito el seguro y abro la puerta

Mis manos son sujetadas por una guardia mientras Cristian me inmoviliza con su rodilla en mi cuello. Intento moverme pero un pinchazo en mí cuello me hace perder el sentido y vuelvo a las tinieblas de la inconsciencia

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Mi cabeza duele y la luz atraviesa mis parpados cerrados mostrándome que ha amanecido, abro los ojos y me encuentro en mi habitación de interno nuevamente. Todo se ve casi igual de como quedo la última vez desde que me fui al área médico

Miro a mi alrededor y noto que mi puerta fue cambiada por una especial que solo se puede abrir por fuera

—Buenos días, Salem- la voz de Damián viaja desde una esquina de mi habitación hacia mis oídos —Es increíble que no murieras después de eso, en verdad estábamos preocupados por ti- en su rostro se dibuja una sonrisa siniestra la cual hiela mi sangre al momento de mirarlo

—Hola Damián, también me alegro de verte- me pongo de pie y me dirijo lentamente hacia su dirección mientras Damián me observa fijamente

Los ojos de Damián cambian a unos sombríos y sin vida a medida que me aproximo a él y sin vacilar aviento la silla de mi habitación en su dirección, Damián esquiva la silla y esta se destruye con el impacto

—¡Maldito bastardo, querías darme con la silla!- Damián coge una pata de la silla rota y comienza a blandirla como una macana

—¡Eres un hijo de puta Damián, ya estoy harto de ti y de las sombras, te juro que te matare ahora mismo!- me abalanzo sobre Damián y este cae al piso junto a mi

Lanzo un golpe directo al rostro de Damián y este responde golpeando mi costado derecho con la pata de la silla y la herida resiente que tenia se vuelve a abrir. Mi rodilla impacta en su cuerpo y nos separamos e intento hacer parar el sangrado de mi herida nuevamente abierta

—Eres un pequeño bastardo, sabes que puedo matarte incluso cuando duermes- Damián se pone de pie antes que yo y al voltearme veo en la mano de Damián en alto sosteniendo la pata de la silla, lista para descender directamente hacia mí

Pateo la pierna de Damián y este cae de rostro contra el suelo mientras me pongo sobre él y comienzo a presionar su cuello con mis manos asfixiando poco a poco a Damián

—Maldito hijo de puta, dañaste a Alizee, mataste a tu compañero y mataste a Gertrudis cuando los descubrió lo que hacías- el rostro de Damián cambia de color mientras forcejea y mis manos se hunden en su cuello evitando que respire

Puedo sentir la adrenalina correr por mis venas, mientras veo la vida de Damián irse en sus ojos.

Al momento de ver sus ojos mi reflejo se encuentra delante de mí, mi rostro dibuja una sonrisa dantesca y las sombras sujetan mis brazos mientras ellas excretan su saliva negra por las bocas

"mátalo, él se lo merece. Solo así serán libres Alizee y tu" susurran las sombras mientras observo a Damián palidecer y volverse violeta

De golpe suelto a Damián y este comienza a toser desesperadamente. Las sombras se apartan de mí riendo y convulsionando en el aire mientras me doy cuenta de lo que estaba haciendo. De lo que las sombras me orillaban a hacer

—¿Hola Salem, Estas despierto ya?- la voz de Daniela irrumpe en el silencio de la habitación y tan rápido como pude me puse de pie y abrí la puerta de mi habitación para tomar a Daniela y salir corriendo de ahí

Corro por los pasillos del hospital con Daniela a rastras mientras las risas de las sombras suenan sin parar en mi cabeza.

—¡Salem... para... ahora mismo!- Daniela grita mientras su voz se corta por lo agitada que esta

Me detengo frente a la oficina de Daniela, abro la puerta y nos encierro dentro para evitar que Damián se encuentre con Daniela

Mi respiración no logra calmarse y mi corazón late a mí por hora cuando escucho desplomarse a Daniela detrás de mí exhausta por correr obligadamente por mí

—Daniela, lo lamento mucho, no quería hacerte pasar por esto. Damián estaba en mi habitación cuando llamaste a la puerta y estábamos peleando. No quería que él te encon...- una bofetada corta mis palabras y un rostro de Daniela casi al borde del llanto yace frente a mi observándome fijamente.

—¿Porque tuviste que correr?, tenemos que ir a la oficina del director, sucedió algo terrible, Salem- Daniela se pone de pie y me toma de la mano y abre la puerta y frente a nosotros esta Damián y las sombras detrás de él.

—Debo llevarme al mocoso lo antes posible, señorita Daniela- exclama Damián mientras toma el brazo de Daniela y con su otra mano se frota el área del cuello donde lo asfixiaba

Daniela aprieta más mi mano al momento de que Damián la sujeta para detenerla

—No puedes llevarte a Salem, él fue llamado por el director del hospital, además en una emergencia así que quítate- Daniela de un tirón se quita la mano de Damián para continuar nuestro camino mientras oigo las risas tenues de las sombras mientras nos alejamos.

—Salem- exclama Daniela  —prométeme que pase lo que pase estarás calmado, ¿ok?

El rostro de Daniela lucia cada vez más preocupado a medida que nos acercábamos a la oficina del director y su mano temblaba mientras me sujetaba con fuerza

A medida que nos acercamos distingo una figura familiar corriendo a nuestra dirección, poco a poco distingo a Alizee quien corriendo llega a mi encuentro y me proporciona un abrazo y cálido y a su vez inquietante

—Lo lamento, Salem- exclama Alizee mientras me abraza fuertemente

—¿De qué hablas Alizee, porque dices que lo sientes?- aparto el abrazo de Alizee y esta me observa con ojos tristes mientras las risas de las sombras se vuelven más y más fuertes —Quiero que me expliques que está pasando Alizee, no entiendo nada de lo que me dices

Daniela aparta a Alizee de mí y le pide que se marche a su habitación a lo que esta me observa y asiente con la cabeza. Se acerca a mí y me da un beso en la mejilla y se retira observando a mis espaldas, posiblemente a las sombras

Daniela me mira mientras yo la observo y nuestras miradas se cruzan, y en un abrir de ojos limpia el área donde Alizee me dio un beso aludiendo a que tenía suciedad en el rostro, coge mi mano y me guía hasta la oficina del director sin decir una palabra más

Al llegar a la puerta de la oficina del director nos recibe una mujer alta, cabello castaño canoso y un maquillaje excesivo para cualquier mujer.

—Soy la Doctora Daniela Rogers, la psicóloga a cargo de Salem quien me acompaña, el director sito a Salem para el comunicado del día de ayer- Daniela se escuchaba firme y calmada y a la vista se veía mucho más madura y elegante que otras veces

La mujer detrás del escritorio nos observa detenidamente, su mirada era la de una mujer cansada de la vida, y detrás de ella, se encontraba una de las sombras gimiendo y tocando el cuerpo de la mujer de manera indecente

La mujer se puso de pie y la sombra se desvaneció como humo delante de mis ojos, "avancen, el director los espera" exclama la mujer mientras nos abre la puerta que da a la oficina del director quien nunca en visto más que para las visitas de autoridades hacia el hospital psiquiátrico

Ingresamos a la oficina del director y esta es muy diferente de lo que imaginaba, en sus paredes tiene colgados cuadros bastantes estrafalarios de hombres desnudos y ángeles tipo cupido lo que me deja un escalofríos en mi cuerpo

—Siéntate Salem, necesitamos hablar- la voz del director se escucha detrás de una silla de escritorio gigante sin darnos la cara a mi o a Daniela

—Lo siento, pero preferiría no sentarme. Quiero que me diga porque me mando a llamar e irme de aquí lo antes posible- Daniela me interrumpe cogiendo mi hombro y con un movimiento de ojos me indica que tome asiento

Miro las paredes de la oficina y una leve fragancia a flores inunda el ambiente y las risas de las sombras me hielan la sangre

Tomo asiento en la silla de cuero y las sombras se posan a los lados de la silla del director el cual continúa dándome la espalda

—Sr. Salem Ramael, no sé cómo darle el comunicado que es mi deber darle- la silla del rector se voltea a mi dirección mostrando al hombre sentado en ella

Su rostro pálido y cabello rubio hacen contraste con sus ojos azules, sería la viva imagen de un modelo si no fuera por la cicatriz que recorre desde su labio inferior hasta su parpado del ojo izquierdo

—¿De qué se trata todo este asunto?, llevo preguntándole a todos desde que me llamo y nadie es capaz de darme una respuesta apropiada, todos evitan hablarme diciéndome que usted me daría la famosa noticia. Ya estoy aquí, dígamelo de una vez para salir de aquí, tengo cosas que...

—Salem, tus padres están internados de urgencia en el hospital debido a un ataque a tus padres al interior de tu casa, ellos fueron apuñalados en reiteradas ocasiones. Lo lamento hijo.

Mi corazón pareciera detenerse a medida que el director se callaba, Daniela me observa con ojos fríos mientras su mano se posa en mi espalda intentando brindarme un consuelo a algo que no logro procesar

—¿Usted, me está diciendo que mis padres están muertos?- las risas de las sombras bañan mi cuerpo mientras vuelan por la oficina gimiendo y riendo mientras mis manos tiemblan y mi cabeza se llena de las imágenes creadas por mi mente de mis padres siendo masacrados por un infeliz

—Salem, el director acaba de decirte que están en urgencias, ellos continúan con vida- exclama Daniela mientras se agacha a mi altura para acariciar mi rostro y limpiar las lágrimas que brotan de mis ojos

El medico saca una carpeta de uno de sus cajones del escritorio y la desliza en mi dirección. "eso es algo que tu madre dejo para que se te diera cuando algo como esto pasara"

Mi mano tiembla mientras estiro mi brazo para coger el sobre, las sombras chillan cada vez más fuerte mientras mis manos cogen el sobre y lo miro con detenimiento. El sobre es más ligero de lo que se ve, logro conseguir que mis manos dejen de temblar cuando Daniela posa sus manos sobre las mías y me mira fijamente con una sonrisa melancólica en su rostro

—Vamos Salem, tus padres no están muertos, y esto es algo que tu madre te dejo en caso de que lo necesitaras en una situación así- Daniela acaricia mi cabello y me da un abrazo para luego apartarse y dejarme sentado con el sobre entre mis manos

—Gracias por entregarme esto director, lo abriré cuando este solo en mi habitación. Espero que comprenda mi petición

El director me observa y se pone de pie y cruza la habitación para abrirnos la puerta e indicarnos la salida. Daniela y yo estamos saliendo cuando el director me susurra algo al oído para luego cerrar la puerta a mis espaldas, camino a mi habitación Daniela no dijo ni una palabra sobre el asunto, era un silencio incomodo

Daniela me acompaña hasta mi habitación y se despide de mí con un abrazo para luego retirarse y darme paso a mi soledad

Ingreso a mi habitación y enciendo las luces para dar paso a la imagen de Alizee acostada en mi cama

Me aproximo a ella y me siento a su lado mientras quito el cabello de su rostro.

La habitación esta en completo silencio mientras las sombras me observan desde el otro lado de la habitación sin emitir ningún ruido. Observo el sobre en mis manos y comienzo a abrirlo, dentro hay una fotografía mía y de mis padres de cuando tenía 9 años, al voltearla noto una pequeña frase en el costado la cual hace fluir mis lágrimas y llanto contenido durante todos estos años. "Mi bebe, mi querido hijo. Tu padre y yo te amamos con todo el corazón"

Las lágrimas no paran mientras las sombras chillan sin parar, de pronto siento un tacto en mi pierna derecha y al observar es Alizee quien me mira preocupada por mi estado

—Salem, lamento mucho lo que le paso a tus padres- exclama mientras se sienta a mi lado

Observo a Alizee y su cabello rojizo y antes de darme cuenta la estoy besando mientras las risas de las sombras inundan la habitación